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RECIPROCIDAD EN EL ÁMBITO DE LAS REDUCCIONES JESUÍTICAS:

RESISTENCIA Y EXISTENCIA DE UN NUEVO MODO DE SER GUARANÍ

Castiñeira Sebastián Daniel


sdcasti@gmail.com

Universidad Nacional de Misiones, Facultad de Artes y Diseño

RESUMEN

Abordaremos el tema de la reciprocidad en las reducciones de guaraníes en base a fuentes


jesuíticas del siglo XVII y XVIII, buscando evidenciar cómo la reciprocidad estuvo vinculada
a la configuración de un nuevo modo de ser de los guaraníes ligado a sus antiguas
tradiciones, en las que el ejercicio de la reciprocidad estaba presente y se lo podía identificar
de diversas formas. Veremos también cómo la reciprocidad era el medio donde se da el
reconocimiento de los que participan de la misma y la forma de rendir honor. Las
reducciones jesuíticas, como parte de una modelo extraño a la vida y costumbres de los
guaraníes, hizo se generasen resistencias de parte de este pueblo, que deseaba mantener
su identidad y sus costumbres. La resistencia guaraní busca por medio de la reciprocidad
persistir en su existencia, la cual se da como evento creador de una nueva forma de vida.

Palabras Clave: Guaraníes; Reducciones; Reciprocidad; Modo de ser.

INTRODUCCION:

La cuestión sobre la que deseamos reflexionar apunta a analizar cómo el ejercicio


reciprocitario ha intervenido en la reconfiguración del antiguo modo de ser de los guaraníes
en el ámbito de las reducciones jesuíticas, cómo se ha llegado a manifestar, y si esta
dinámica se presenta como alternativa a la idea de la vida en reducción de los guaraníes
como un simple proceso de adaptación lineal. En los antiguos ritos de los guaraníes surgen
diferentes manifestaciones que nos dan a pensar acerca de la reciprocidad y la importancia
que ésta poseía para afirmar su identidad, junto con una de las posibles causas de su
resistencia.
Las obras que nos permitirán el acceso a la problemática en cuestión son fuentes que van
del siglo XVI hasta el siglo XVIII. Dos de ellas denominadas “cartas relación”: La de Alonso
Barzana de 1594 y la José Cardiel de 1747, conteniendo la primera “Una de las
descripciones más ricas en términos antropológicos de la “nación guaraní” y de su religión”,
Meliá (1995, p. 32); la segunda ya no es fruto de los primeros contactos con los guaraníes,
sino la descripción de un misionero que ha vivido mucho tiempo con ellos y cuenta el
proceso llevado adelante en las reducciones. Otro de los escritos por abordar será la crónica
de Antonio Ruiz de Montoya (1639), el cual “puede ser considerado el primer clásico de las
reducciones Jesuíticas de Guaraníes,” Meliá (1995, p.33) y brinda acceso a aspectos muy
significativos que hacen a la vida de los guaraníes. Se verá también la obra de Francisco
Jarque (1647), la cual contiene relatos de su propia experiencia en las reducciones, y
también la de José Manuel Peramás (1791). A demás de estas fuentes recurriremos a las
síntesis históricas de: Nicolás Del Techo (1673); Pedro Lozano (1754); y Pedro Guevara
(1764).Muchas de las mencionadas obras se aproximan en sus afirmaciones acerca de la
vida antigua vida de los guaraníes y otras se complementan agregando matices que dan
relieve a las temáticas.
Sobre la problemática de la reciprocidad y su proceso de de transición entre las tradiciones
de los guaraníes y las organizaciones en el ámbito de las reducciones jesuíticas son
importantes el aporte tanto de Necker (1990), como el de Garavaglia (1987). Ambos dejan
ver, desde diferentes perspectivas, aquellas realidades que forman parte de la vida de los

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guaraníes y como estas deben redefinirse, entre rupturas y continuidades, al encontrarse
con proyectos coloniales que difieren de su antiguo modo de ser.
Los objetivos de nuestra investigación consisten en: aproximarnos por medio de las fuentes
jesuíticas a las antiguas costumbres de los guaraníes para observar aquellos aspectos que
se encuentren vinculados al ejercicio de la reciprocidad; observar si los casos de resistencia
de los guaraníes a la vida en reducción estuvo vinculado al cambio de su antiguo modo de
ser; y por último si la reciprocidad ha intervenido en la reconfiguración del antiguo modo de
ser guaraní.

METODOLOGÍA:

Para la realización de nuestro tema de investigación hemos reunido fuentes jesuíticas del
siglo XVI-XVIII vinculadas a la vida de los guaraníes en el ámbito de las reducciones. En
base a dichas fuentes hemos relevado los aspectos particulares vinculados a sus antiguas
tradiciones y a los casos de resistencia a la vida en reducción, señalando en cada
oportunidad las relaciones con prácticas que impliquen reciprocidad. Principalmente dimos
lugar a aquellos relatos que dejen ver los gestos, acciones y símbolos que comprometían a
los guaraníes en sus rituales y en los casos de resistencia, pues éstos son altamente
propicios para reflexionar acerca de la reciprocidad.
Luego del relevamiento particular de cada fuente hemos realizado una comparación entre
los mismos advirtiendo las coincidencias, divergencias u omisiones existentes, teniendo
siempre presente los objetivos de nuestro trabajo.
Por último hemos interrelacionado las distintas fuentes de estudio, buscando arribar a
ciertas conclusiones capaces de validar el tema principal de nuestro trabajo, que consiste en
el reconocimiento de la reciprocidad como factor fundamental de la reconfiguración del
modo de ser guaraní.

RESULTADOS

De las antiguas costumbres de los guaraníes con respecto al ejercicio de la reciprocidad


pudimos reconocer que, por un lado: 1) Se encontraba ligado al recibimiento de los
huéspedes en lo que se ponía en juego la autoridad y el poder de los caciques mediante el
préstamo de algunas de sus concubinas, como lo expresa el Padre Lozano ([1754] 1878: I).
La donación temporal del cacique da lugar a que se evidencie su poder y quede reconocida
mutuamente la importancia de la persona que es recibida como la de aquel que recibe,
siendo para ambos un verdadero honor y dicha que esto ocurra. En esta forma particular de
recibir (al huésped) está implicado ya el dar y así también se manifiesta la reciprocidad. En
referencia al poder de los caciques hemos encontrado que 1.1) éste es revelado por medio
de otros aspectos ligados a la reciprocidad. Uno de los más importantes es el número de
mujeres que el cacique poseía, lo cual es relatado por Ruiz de Montoya (1639); y el número
justamente se encontraba ligado al poder que éste poseía (Del Techo 1673: IV). Pero esto
no se ajustaba solamente a una cuestión de posesión sino a la posibilidad de donación y
con esto nuevamente del reconocimiento de su poder y autoridad. (Del Techo 1673, II: 336).
1.2.) Tal como argumenta Peramás([1741]1946), la reciprocidad también era practicada
mediante la ofrenda de dones otorgados a los caciques.
2) Por otro lado, advertimos que los denominados hechiceros, líderes religiosos del pueblo
guaraní, poseían gran autoridad y la misma se mostraba en el poder que éstos tenían. Sus
funciones estaban ligadas a la maldición de los enemigos, a la adivinación de cosas futuras
y a la sanación de dolencias. La relación con los enemigos, con los enfermos, o con
aquellos que buscan saber su fortuna era fundamental para que se llevaran a cabo sus
rituales. Esto puede verse claramente en palabras del Padre Guevara, ([1764] 1836). .
2.1) Como ocurría con los caciques, pudimos observar que el reconocimiento del poder de
estos líderes se daba por medio de diferentes ofrendas con las que eran agraciados, junto

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con la posibilidad de poder estar con muchas mujeres según sus deseos. Los dones
recibidos en ambos casos estaban fuertemente ligados al reconocimiento de la autoridad.
Considerando los dos anteriores puntos advertimos que 3) entre todo el complejo de
relaciones que tuvo lugar en las reducciones, los aspectos mencionados intervinieron
activamente como causa de la resistencia de los guaraníes, ya que este nuevo sistema de
vida les obligaba a cambiar aspectos fundamentales de sus tradiciones. Uno de los puntos
que marcó mayor conflicto fue la posesión de muchas mujeres por parte de los caciques de
los guaraníes, lo cual chocaba con la doctrina católica, trayendo en consecuencia la
oposición de los misioneros y el descontento de los guaraníes. Al respecto son más que
contundentes las palabras del cacique que trasmite Ruiz de Montoya (Ruiz de Montoya,
1639: 38)
La resistencia a cambiar el “buen modo de vivir” conlleva un cambio en algo más que un
hábito. Es la resistencia al cambio de identidad y al modo de existir, que está conformado
por una gran trama de relaciones recíprocas, lo cual evidencia que el reducir a los guaraníes
forma parte de un proceso complejo y no de una simple asimilación de la forma de vida que
estaba pensada para las reducciones. Esta complejidad queda expuesta en parte en la
ambivalencia religiosa que empezaba a darse y que el padre Barzana deja ver en su carta
de 1594 (Furlong, 1968: 93). Dicha predisposición religiosa abre los caminos de la
complejidad y de nuevas formas de reciprocidad. En esta misma carta Barzana enuncia
cómo la doctrina dada a los guaraníes es tomada por los mismos pero de una forma nueva
que no se adecua a la idea evangelizadora de los colonizadores. Existe la donación de la
enseñanza cristiana y también el recibimiento de la misma y también la repuesta o
devolución por parte de los donatarios. Este movimiento muestra una especie de relación,
por medio de la cual se logra transfigurar el modo de ser guaraní y que tal vez pueda ser
entendida como una forma de reciprocidad asimétrica, ya que la obediencia se cumple bajo
una nueva medida, que es la pautada por los líderes religiosos guaraníes. Existe por parte
de los guaraníes el reconocimiento de las enseñanzas, pero este reconocimiento se da de
manera diferente a la intención de los misioneros; lo que es dado por ellos es recibido por
los guaraníes pero no es devuelto de la misma forma sino por medio de ritos y símbolos que
revelan una nueva forma de ser. El don no es devuelto en la misma medida, ni en un grado
mayor o menor de la misma, sino que es otro don el que se manifiesta, el que se da y sin
tener como destinatario unívoco al donador. Lo que también podríamos expresar bajo el
concepto de discontinuidad debido a que no se sostiene la intencionalidad del donador en la
respuesta dada por el donatario.
Esta manifestación religiosa, no es simplemente una forma de resistencia sino un modo de
afirmar o mejor aún de reafirmar su identidad cultural. Si se nos permite, podríamos decir
que la re-sistencia en este caso no es algo simplemente contra otro, sino el modo de
persistir, es decir, de permanecer en la ex-sistencia, que debe comprenderse como un
verdadero y auténtico modo de ser o mejor dicho de estar en el mundo.
En el mismo espacio de las reducciones existieron líderes religiosos que poseían gran
autoridad entre los suyos. (Jarque, 1687: 41). El poder de los líderes religiosos guaraníes
entró en conflicto con los padres y muchas veces se alzaron en contra de los misioneros.
Ruiz de Montoya (1639) describe el hallazgo de cuerpos y de huesos que mediante ritos
eran usados por los “brujos” para convencer a los demás guaraníes a desoír la doctrina de
los padres jesuitas. Los rituales dan poder y entran en tensión con los ritos cristianos.
Otro importante acontecimiento es el que transmite Pedro Lozano ([1754] 1878: II) sobre
cómo el capitán español Francisco Ortiz Vergara resiste el alzamiento de los guaraníes, los
cuales son animados por sus líderes religiosos a volver a su antiguo modo de vida y no estar
al servicio de los españoles. Describe también la rebelión del líder religioso Oberá, quien se
presenta diciendo que él era el hijo verdadero de Dios Padre y que por compasión buscaba
liberar al pueblo guaraní y también que había nacido de una virgen de esa nación.(Ibíd.)
Esto coincide en gran medida con contenidos de la doctrina cristiana, lo que muestra otro
caso donde la respuesta a la doctrina no es una simple adaptación de la misma sino que se
convierte en una nueva forma y con esto podríamos volver a hablar de la desproporción
entre lo que se da y recibe y sobre la repuesta que se genera de esto. La reciprocidad se da

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como acontecimiento, en el que se busca expresar el modo de ser guaraní y en el que no se
adopta llanamente la doctrina cristiana, pero que tampoco se descarta de forma absoluta
sino que surge como una forma nueva y así se rompe con lo previsto de forma meramente
individual y se da como producto de una relación.

CONCLUSIONES

En base a las fuentes de nuestro estudio pudimos visualizar cómo las prácticas de la
reciprocidad se encontraban presentes en las antiguas tradiciones de los guaraníes,
constituyendo su modo de ser y cómo las mismas se vieron afectadas en el ámbito de las
reducciones por ser éste un sistema colonial ajeno a su cultura y un modelo que llevaba en
sí mismo lógicas diversas a las de los guaraníes, lo que condujo, por esta misma razón, a
que fueron tantas veces resistidas aunque no rechazadas del todo. La misma resistencia
Guaraní ha recogido dones que vinieron junto a esta otra cultura y que les sirvieron para
volver a proclamar un modo de existencia que no debía perderse. Por tanto, la re-sistencia
guaraní estuvo ligada al modo de mantener la ex-sistencia de su pueblo haciendo un amplio
ejercicio de la reciprocidad. De esta manera, se nos ha mostrado algo distinto de una
simple adaptación lineal al modelo que traían las misiones, como también lo irreal de la
persistencia intacta de las antiguas costumbres de los guaraníes tal como se había dado
antes de la colonización. Sin embargo, así como hablamos de la re-sistencia y de la ex-
sistencia de los guaraníes, también podemos referirnos a su per-sistencia, es decir, a la
afirmación de su ser a lo largo de la historia por medio de una proceso de reconfiguración,
donde el ejercicio de la reciprocidad poseyó un papel muy importante, el cual debe
comprenderse como acontecimiento creador que emerge de la trama de relaciones en la
que se despliega, y no como movimientos aislados de sujetos que entran en acción ya sea
porque dan, porque reciben o porque devuelven. Por lo tanto, el antiguo modo de ser
guaraní se ha reconfigurado históricamente, por lo que se da entre todos los actores que
participan del mismo. Podríamos expresarlo también mediante el concepto de re-edificación
que menciona Garavaglia(1987), de la cual forman parte las antiguas tradiciones de los
guaraníes.

REFERENCIA

DEL TECHO, N. [1673] 1897.Historia de la Provincia del Paraguay y de la Compañía de


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PERAMÁS, José Manuel. [1791]1946. La república de Platón y los guaraníes. Buenos Aires:
Emecé.

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RUIZ de MONTOYA, Antonio (1639) La Conquista espiritual hecha por los religiosos de la
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