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Postítulo en Psicopedagogía
Actualmente, cada vez se hace más frecuente escuchar que los niños que
presentan un bajo rendimiento escolar o un mal comportamiento es por que
presentan un déficit atencional, para comprender lo que se está mencionando
surge una interrogante:
¿Qué es el Déficit Atencional?
Al respecto, Mario Valdivia peralta Especialista en psiquiatría infanto juvenil
menciona que: “Es un cuadro clínico caracterizado por un patrón persistente a
lo largo del tiempo en el que destacan:
La hiperactividad (manifestada por inquietud motora, pararse en la sala de
clase, ser bueno para encaramarse en muebles y cercas, dificultad para estar
quieto, etc…)
La impulsividad (imposibilidad para esperar su turno, responder antes de que
es pregunten, interrumpir a otros niños e iniciar actividades
riesgosas sin medir sus consecuencias)
La desatención (dificultad en mantener la atención por tiempos prolongados,
no copiar la materia de clases, no atender a sus profesores, cambiar
constantemente de actividades o tareas, no completar las labores que
ejecutan)”.
Estas tres características se destacan ya que a simple vista se puede observar
que los estudiantes con estas dificultades manifiestan inquietud, responden
antes de que se les pregunte y no escuchan a sus profesores, por lo tanto no
completan las actividades que se les dan.
Según la Fundación privada Adana, (2011) “El TDAH, es una trastorno de
origen neurobiológico caracterizado por la falta de atención, impulsividad e
hiperactividad. Estos síntomas se ven reflejados en diferentes
comportamientos y/o problemáticas que muestra el niño y que interfieren en
su proceso de aprendizaje, como pueden ser:
• Dificultades para planificar su horario a corto, medio y largo plazo, en casa o
en la escuela
• Dificultades para organizar su trabajo y su material
• Dificultades para mantener la atención sobre todo en tareas de larga duración
• Dificultades para seguir las órdenes o instrucciones que emiten los adultos
• Precipitación a la hora de realizar las tareas
• Mostrar un pensamiento poco reflexivo tanto en su comportamiento como en
sus tareas
• Perder u olvidar material necesario para trabajar”
Si bien la mayoría de los niños/as se comporta de manera equivocada, solo
en ellos esta condición es permanente, provocando en el niño retraso
académico, como se menciona anteriormente.
Al respecto el MINEDUC, (2009) menciona que: “El Trastorno de Déficit
Atencional (TDA), es un trastorno de inicio temprano, que surge en los
primeros 7 años de la niñez y se caracteriza por un comportamiento
generalizado que presenta dificultades de atención (inatención o desatención),
impulsividad y, en algunos casos, hiperactividad. Este comportamiento se da
en más de un contexto o situación (hogar, escuela u otro) y afecta a los niños
y niñas en sus relaciones con su entorno familiar, social y educativo
evidenciándose con mayor claridad cuando inician su experiencia educativa
formal: la incorporación al establecimiento escolar”.
Si el docente sospecha de esta dificultad, debe observar las diferencias claras
que existan de acuerdo a la edad cronológica del niño. Por ejemplo; sus
movimientos repentinos, lo desentendido que se demuestra ante una
situación, como interrumpe a sus compañeros en el desarrollo de las
actividades, etc. Esto le servirá para transmitir sus observaciones a la familia
y a los profesionales idóneos, si es que en el establecimiento existen, para que
se realice un diagnóstico clínico que confirme aquellas sospechas, buscara
estrategia para apoyar el desarrollo del estudiante o buscara la forma de
mejorar la manera en que se comporta y de cómo se desenvuelve con sus
pares en el entorno educativo.
Una de las tareas de quienes realizamos la hermosa labor que es educar, es
mantener constantemente actualizados, con respecto a las dificultades de
aprendizaje, para lograr apoyar a nuestros alumnos y dar un incentivo para
que mejoren y se sientan capaces frente a las exigencias que en el entorno se
le presenten, claro que el punto más importante es el apoyo que la familia le
conceda a estos estudiantes en el proceso educativo.
Actualmente son muchas las investigaciones que han dado a conocer que
no existen causas específicas, sino que son múltiples factores los que
Afectan al niño/a antes de su nacimiento, (exposiciones a tóxicos, alcohol,
humo de cigarro y enfermedades del embarazo) o después de su
nacimiento (el daño al sistema nervioso por convulsiones, enfermedades
infecciosas como la meningoencefalitis y los traumas craneales.), también
se ha planteado que, debido a factores genéticos los niños/as presentan
este déficit y muchos padres envían a realizar el diagnóstico para tratar,
descartar o prever las consecuencias de este déficit.
Al respecto, Ericka Villalobos Montiel, Krissia Morales Chacón (1996)
mencionan que: “Existen múltiples teorías que procuran explicar las causas
del déficit atencional. Las más destacadas son las que se refieren a los
factores genéticos y a un desorden fisiológico de los neurotransmisores,
agentes químicos que se encargan de llevar la información sensorial a
través de las neuronas. Se ha dicho que estos agentes químicos controlan
la conducta, la emoción y el conocimiento. Por lo tanto, una cantidad muy
alta o muy baja de estos neurotransmisores podría causar efectos
importantes en la vida cotidiana de una persona”.
Un estudiante con déficit atencional, no es inquieto y desordenado porque
es malo o porque está loco, es solo que proviene de una familia con alguna
dificultad o por el ambiente en donde se formó no fue el adecuado.