JOHANNA JARAMILLO 3.2. Daños y perjuicios como consecuencia de las actuaciones profesionales. Daños y Perjuicios.
Se entiende por daños cualquier menoscabo que se padece como
consecuencia de la acción de otra persona, mientras que el perjuicio se refiere a la ganancia lícita que uno deja de obtener o los gastos que uno tiene como consecuencia por la acción u omisión de otra persona. Daños y Perjuicios. Para que se lleve a cabo la responsabilidad y quede comprometida, debe darse los siguientes puntos: • Incumplimiento. • Impuntualidad del incumplimiento en razón de culpa o dolo. • Existencia de daño. • Relación de causalidad entre el incumplimiento y el daño. Incumplimiento. Se debe llevar a cabo una disconformidad entre la conducta obrada y la debida. Proyectos que no cumplen con el Código de Edificación, direcciones de obra no llevadas como lo establece la ley; construcciones no declaradas o realizadas en infracción a las reglas del buen arte; desprendimientos o accidentes ocasionados por falta de mantenimiento; falta de prevención en materia de incendios; riesgos generados por violación de reglamentos eléctricos; etc., pueden ser ejemplos de incumplimientos en el ámbito de la construcción. Impuntualidad del incumplimiento en razón de culpa o dolo. La imputabilidad proviene de no haber hecho algo que se esperaba del tipo de persona, del tiempo en que sucedían las circunstancias y del lugar donde ocurrían los acontecimientos.
El dolo implica una deliberada inejecución de la obligación. No se
requiere la intención de dañar, pero si la voluntad específica para no cumplir con lo debido, ya sea el contrato, la obligación de seguridad, la encomienda profesional, etc. Existencia de daño. Si el incumplimiento no se traduce en un perjuicio, no se puede pretender la indemnización de un daño inexistente, por la razón de que se configuraría un enriquecimiento sin causa.
Existen infinidad de tipos de daños, pero solo resultan indemnizables
los daños ciertos que se compensan, otorgando al damnificado una suma de dinero capaz de equilibrar su perdida. Relación de causalidad entre el incumplimiento y el daño. Relación entre el hecho o la omisión de la persona a quien se intenta responsabilizar y el daño sufrido por quien pretende ser acreedor a una indemnización.
La causa debe ser eficiente y adecuada o, en otras
palabras idónea para haber provocado el daño que intenta reparar. 3.2.1. El lucro cesante. El lucro cesante es una forma de daño patrimonial que consiste en la pérdida de una ganancia legítima o de una utilidad económica por parte de la víctima o sus familiares como consecuencia del daño, y que ésta no se habría producido si el evento dañino no se hubiera verificado. 3.2.2. El daño emergente. Pérdida o menoscabo efectivo producido en el patrimonio o bienes de una persona como consecuencia de un acto u omisión ilícita civil. Se caracteriza por ser un daño cierto y actual. Se diferencia del lucro cesante, que, siendo también consecuencia del acto ilícito civil, consiste en un cese en la percepción de ganancias futuras previsibles y no meramente hipotéticas. Estos dos elementos son tenidos en cuenta para el cálculo de la indemnización. 3.3. Responsabilidades básicas asumidas en la Contratación Pública. Art. 22.- Deberes de las o los servidores públicos. a) Respetar, cumplir y hacer cumplir la Constitución de la República, leyes, reglamentos y más disposiciones expedidas de acuerdo con la Ley; b) Cumplir personalmente con las obligaciones de su puesto, con solicitud, eficiencia, calidez, solidaridad y en función del bien colectivo, con la diligencia que emplean generalmente en la administración de sus propias actividades; c) Cumplir de manera obligatoria con su jornada de trabajo legalmente establecida, de conformidad con las disposiciones de esta Ley; d) Cumplir y respetar las órdenes legítimas de los superiores jerárquicos. El servidor público podrá negarse, por escrito, a acatar las órdenes superiores que sean contrarias a la Constitución de la República y la Ley; e) Velar por la economía y recursos del Estado y por la conservación de los documentos, útiles, equipos, muebles y bienes en general confiados a su guarda, administración o utilización de conformidad con la ley y las normas secundarias; f) Cumplir en forma permanente, en el ejercicio de sus funciones, con atención debida al público y asistirlo con la información oportuna y pertinente, garantizando el derecho de la población a servicios públicos de óptima calidad; g) Elevar a conocimiento de su inmediato superior los hechos que puedan causar daño a la administración; h) Ejercer sus funciones con lealtad institucional, rectitud y buena fe. Sus actos deberán ajustarse a los objetivos propios de la institución en la que se desempeñe y administrar los recursos públicos con apego a los principios de legalidad, eficacia, economía y eficiencia, rindiendo cuentas de su gestión; i) Cumplir con los requerimientos en materia de desarrollo institucional, recursos humanos y remuneraciones implementados por el ordenamiento jurídico vigente; j) Someterse a evaluaciones periódicas durante el ejercicio de sus funciones; y, k) Custodiar y cuidar la documentación e información que, por razón de su empleo, cargo o comisión tenga bajo su responsabilidad e impedir o evitar su uso indebido, sustracción, ocultamiento o inutilización. CASO REAL