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TEMA

LA INVERSIÓN EXTRANJERA EN EL PERÚ

CURSO
DERECHO REGIONAL Y MUNICIPAL

CICLO
X

DOCENTE
SANTOS ATANACIO (T) PALACIOS LLOCLLA

ESTUDIANTE
HENRY HOMERO VILLALTA PANTA

2018
Actividad N° 05/ Trabajo Colaborativo Responsabilidad Social - I Unidad
1. Aperturan la clase con la presentación de una imagen referente al tema y con
opiniones sobre el tema de clase: “La tutela posesoria, lesiones a la posesión, y los
interdictos”, se abre espacio para expresión de opiniones, en un ambiente de
dialogo respetando las opiniones de los demás.
En mi opinión, la naturaleza jurídica de la posesión tiene un doble carácter. Por un lado,
su nacimiento o adquisición se produce a partir de una relación de hecho o fáctica con
el bien, en virtud de la cual el ordenamiento le asigna consecuencias jurídicas, lo que
permite la formación de un hecho social relevante para el Derecho o también llamado
hecho jurídico.

Con respecto a los fundamentos de la protección posesoria en primer lugar,


preguntémonos ¿para qué se protege la posesión? El por qué se permite que en
determinadas situaciones, sobre la base a un comportamiento exterior respecto de un
bien, una persona pueda ser considerada como titular de un derecho sobre dicho bien y
que pueda por consiguiente ejercer sobre tal bien las facultades derivadas de dicho
derecho, sin otra base que la apariencia o sin tener que probar la titularidad, es la
pregunta que subyace a la búsqueda del fundamento de la posesión.

El fundamento de la protección posesoria por lo tanto, es la interdicción o prohibición


de la violencia ilegítima e injusta contra la persona. De este modo, la inviolabilidad de
persona genera que indirectamente se proteja a la posesión contra todo acto de
violencia que por consecuencia afecte al mismo tiempo a la persona.

SAVIGNY, por lo tanto, acentúa principalmente el motivo jurídico privado que asiste al
poseedor: los actos contra su posesión son entendidos como delitos contra aquel. La
tutela de la posesión, en consecuencia, termina siendo una tutela de la personalidad.
En mi pensar, esta teoría no resulta del todo satisfactoria, pues se percibe el fenómeno
posesorio únicamente desde una perspectiva individualista y se soslaya la función social
que cumple la posesión en la realidad jurídica propia de cada sociedad. En buena cuenta,
todas las instituciones jurídicas (y no solo la posesión) se encargan de la protección de
los intereses de las personas, pues en virtud de los distintos intereses jurídicamente
tutelados se van creando y otorgando por el derecho objetivo nuevas prerrogativas y
mecanismos de protección correlativos que responden a razones de índole distinta.
Decir, por lo tanto, que la posesión es tutela de la personalidad indirecta, es un modo
simplista de resumir el debate en torno a su fundamento.

Por otro lado, RUDORFF basa la protección de la posesión también en la interdicción de


la violencia, pero toma a esta última desde su carácter público, como perturbación
producida en la paz social y orden público. De este modo, no solo toma en cuenta al
poseedor de manera individual como Savigny, sino que además lo inserta dentro de una
comunidad, la cual es a la vez violentada como producto del ejercicio de la justicia por
propia mano en contra del poseedor. La idea de la defensa de la paz jurídica a través de
la protección posesoria supone la prohibición del uso de la fuerza en contra del
poseedor, a través de actos de perturbación y de despojo que terminarían por alterar el
orden público.
INTERDICTOS

POSESORIOS OBJETIVO COMÚN “Proteger la


PROHIBITIVOS
posesión y propiedad del bien, derecho
u otro, de perturbaciones, daños o
despojo”

PROCEDIMIENTO
(Art. 699 – 782 CPC)

1. Querella o Denuncia

2. Admisión

3. Decreto: Amparo, INTERDICTO DE INTERDICTO DE


INTERDICTO DE OBRA VIEJA
INTERDICTO DE DESPOJO Restitución u otro. OBRA NUEVA
AMPARO
Acción procesal en la cual Acción procesal en la cual
Acción procesal dirigida a el legitimado tiene razón
Acción procesal dirigida a la restitución de posesión el legitimado tiene razón
la protección del poseedor fundamentada para temer de daño temido a razón de
hecha por un despojo, es la 4. Citación: Art. 218 CPC
con respecto a de una obra nueva que objeto que amenace por
recuperación de la daño próximo a su
perturbaciones que pueden posesión del bien pueda ocasionar daño a su
afectar su posesión. propiedad o derechos propiedad o derechos
despojado. reales.
reales.
5. Pruebas: Lapso
Probatorio de 10 días

FUENTE LEGAL FUENTE LEGAL


6. Alegatos: 3 días
ART. 782 CC ART. 783 CC siguientes - conclusiones ART. 785 CC ART. 786 CC
AMPARO DESPOJO OBRA NUEVA OBRA VIE

7. Sentencia: 8vo día.


2. Revisan la información: “La tutela posesoria, lesiones a la posesión, y los interdictos”,
utilizando el Código Civil y Código Procesal Civil, recogiendo además información del acervo
bibliográfico de la biblioteca Gonzales, H. (2005) Derecho Reales. Lima -Jurista Editores de:
http://site.ebrary.com/lib/bibliocauladechsp/detail.action?docID=10758087&p00=intro
ducci%C3%B3n+derecho
LA POSESIÓN Y SU PROTECCIÓN
Actualmente, la posesión que ejerce toda persona (natural o jurídica), puede verse vulnerada
mediante despojo o perturbaciones contra la misma posesión, o tal puede ser el caso, de que
existan dos personas que ostentan ser poseedores de un mismo bien.
Ante las situaciones antes descritas, surge la protección posesoria, la misma que legal y
doctrinariamente lo identificamos mucho más rápido con la denominación de Defensas
Posesorias (hay quienes, se refieren a lo mismo, indicando acciones posesorias).

Además, de marcar conceptos jurídicos y dejar sentado mi posición sobre Defensas Posesorias,
considero necesario aclarar que, no es lo mismo referirnos a Defensas Posesorias y acciones
posesorias como sinónimos, lo que si no puedo negar es la estrecha vinculación que tienen éstas,
puesto que la primera resulta tener mayor amplitud (término general) que el segundo (término
específico).

DEFENSAS POSESORIAS
Al respecto el Código Civil, en el Capítulo Sexto, del Título I -Posesión-, de la Sección Tercera -
Derechos reales principales-, del Libro V –Derechos Reales-, dedica dos artículos para referirse al
tema in examine, Defensas Posesorias, siendo que el Artículo 920º prescribe la Defensa Posesoria
Extrajudicial y el Artículo 921º prescribe la Defensa Posesoria Judicial, por lo que en esta ocasión
el Código Civil no alberga una definición -legal- respecto a Defensas Posesorias, empero, por
nuestra parte manifestamos que la Defensa Posesoria, considerada, también, como defensa
protectora, es una institución jurídica, que otorga al poseedor el mecanismo de protección de su
posesión, sea ésta mediata o inmediata.

Asimismo, las Defensas Posesorias se clasifican en Defensa Posesoria Extrajudicial y Defensas


Posesoria Judicial.

No perdamos de vista que las Defensas Posesorias tienen el fin de proteger la posesión del
poseedor, ante cualquier atentado que se le pretenda.

INTERDICTOS
Los interdictos son defensas posesorias que tienen una finalidad conservativa de la posesión;
puesto que están dirigidas a mantener un estado de hecho (posesión de hecho), el cual ha sido
modificado por actos del perturbador o despojante.

Debemos precisar que a través de los interdictos lo que se protege o tutela, es el status quo
posesorio, por lo que, como señala Gonzales Barrón “la cognición del proceso es sumaria
(limitación de controversia), con restricción de medios probatorios y abreviación del
procedimiento” (2011, p. 61).

Mediante los interdictos, no se discute derechos subjetivos, sino única y exclusivamente la


defensa del estado posesorio, o sea, se genera una cuestión de hecho.
Siendo así, corresponde indicar algunas características de los interdictos: a) Carácter breve
sumario; b) Otorga tutela judicial provisional (interina) de la posesión; c) Sólo se discuten el hecho
de la posesión; d) No se prejuzgan o atienden derechos de terceros; y, e) Evita u mayor perjuicio
o daño al poseedor.

ACCIONES POSESORIAS
El otro tipo de defensas posesorias judiciales son las acciones posesorias, donde resulta que para
accionar con esta defensa posesoria judicial es requisito indispensable contar con un título que
acredite la posesión como derecho, y ya no sólo como hecho.

Las acciones posesorias, atienden cuestiones petitorias sobre la titularidad de un derecho real.
Es aquella defensa posesoria judicial, que tiene lugar único y exclusivamente, cuando existe una
cuestión de derecho a la posesión, siendo esto así, sólo se conceden acciones posesorias a
quienes tienen derecho a la posesión.

Las acciones posesorias, podemos considerarlos como caminos petitorios, ya que en el interdicto
sólo se juzga el hecho de la posesión, en cambio, en las acciones posesorias el derecho de la
posesión.

El código civil ni el código procesal civil, contempla mayor alcance sobre las acciones posesorias,
empero la doctrina se ha encargado de atenderla; es por ello que, debemos referir que las
acciones posesorias tienen una sub clasificación: Acción Posesoria de Mejor Derecho
de Posesión y Acción Posesoria de Desalojo (o desahucio).

Acción Posesoria de Mejor Derecho de Posesión, llamada también, Concurrencia de Poseedores,


esta defensa posesoria tiene carácter judicial, y aparece cuando dos o más personas –naturales
o jurídicas- se atribuyen calidad de poseedores con justo título, de ahí la concurrencia de
poseedores.

Al respecto, sólo queda referir que el Artículo 921º del Código Civil contempla la existencia de las
acciones posesorias, sin embargo no las desarrolla, mucho el menos el Código Procesal Civil, sin
embargo, los incisos 1) y 4) del Artículo 475º de citado código adjetivo, consideran que se
tramitan en proceso de conocimiento, ante los juzgados civiles, asuntos contenciosos (1) que no
tengan vía procedimental, no estén atribuidos por la ley a otros órganos jurisdiccionales; y, (4)
cuando el demandante considere que la cuestión solo es de derecho.

Ante la concurrencia de poseedores sobre un mismo bien, la posesión no puede reconocerse en


dos personalidades distintas, salvo sean coposeedores, es por ello que si la posesión se discute
mediante títulos, se le reconocerá el mejor derecho de posesión a quien logre acreditar el
carácter derivativo de la posesión (tracto sucesivo de la posesión) y la antigüedad del título, y si
los títulos presentados tiene la misma fecha, se considerará la posesión de hecho, quien es el
poseedor actual, y que no podemos perder de vista que la posesión de hecho se presume como
posesión legítima.

Acción Posesoria de Desalojo, llamada también Juicio de Desahucio, esta defensa posesoria
judicial opera cuando el poseedor con justo título, y con animus de dueño, cede –en
arrendamiento- la posesión del bien que posee, a otra persona para que éste posea por él,
haciendo uso, goce y disfrute del bien, por un lapso de tiempo; o cuando un tercero ingresa a
poseer un bien sin título alguno en ausencia de su actual poseedor.
Considero que esta acción puede ser invocada por el poseedor mediato, con el fin de recuperar
la posesión inmediata que le corresponde. Asimismo, debo hacer hincapié, que quien reclama o
acciona con esta defensa posesoria, no tiene calidad de despojado, sino de titular con dominio.

DIFERENCIA ENTRE DEFENSAS POSESORIAS Y ACCIONES POSESORIAS


Durante el desarrollo del presente artículo jurídico, hemos examinado ambos temas que ahora
pretendemos marcar la diferencia, y pues, como mostramos en el gráfico, las Defensas
Posesorias opera como un todo frente a las acciones posesorias, siendo que en el primero
encontramos Defensas Posesorias Extrajudicial y Judiciales, y en esta última, tenemos, por un
lado a los interdictos y por el otro a las Acciones Posesorias.

Nótese, que las acciones posesorias, son una subclase de las Defensas Posesorias Judiciales (pues,
porque de otro lado están los interdictos), siendo así, las defensas posesorias frente a las
acciones posesorias operan como género, y las acciones posesorias frente a las defensas
posesorias operan como especie.

Con ello queremos demostrar que estas dos figuras jurídicas no son sinónimos, como
erradamente se viene entendiendo y/o manifestando durante en el ejercicio profesional o en las
aulas universitarias, sino que muy por el contrario.

Para culminar, debemos indicar que toda acción posesoria -ya sea de mejor derecho de posesión
o de desalojo- es una defensa posesoria -judicial-; empero, no toda defensa posesoria es una
acción posesoria.

Se organizan en equipos de trabajo e identifican las ideas importantes del tema de clases y
comprenden la tutela posesoria, lesiones a la posesión, y los interdictos, utilizando la doctrina y
la legislación civil, a través de un cuadro comparativo, mostrando aprendizaje colaborativo.

La posesión es la dominación o potestad que recae sobre un bien mueble o inmueble con ánimo
(intención) de dueño. Para ello son necesarios los elementos de corpus y animus.

Cualquier atentado (despojo, perturbación, concurrencia de poseedores) que se cometa contra


la posesión del poseedor puede ser atendido por las defensas posesorias, conocidas también
como protección posesoria.

Las Defensas Posesorias, es la institución jurídica, que otorga al poseedor el mecanismo de


protección de su posesión, sea ésta mediata o inmediata, ante cualquier atentado contra su
posesión. Se clasifica en Defensa Posesoria Judicial y Defensa Posesoria Extrajudicial.

La Defensa Posesoria Extrajudicial es el mecanismo privado, protector de la posesión; que tiene


lugar cuando se priva o perturba la posesión del poseedor, siendo que éste de manera inmediata
(15 días) recupera la posesión o la tranquilidad de la misma, por la fuerza de su propia mano con
ayuda de las autoridades, sea policial y/o municipal.

La Defensa Posesoria Judicial es un mecanismo jurídico protector y recuperador de la posesión,


donde generalmente, quien acciona en protección de su posesión somete la controversia en un
proceso judicial, ya sea invocando un Interdicto o una Acción Posesoria.

Los Interdictos son defensas posesorias judiciales que tienen por finalidad la conservación y
recuperación de la posesión; ya que dirigidos a mantener un estado de hecho (posesión de
hecho), el cual ha sido modificado por actos del perturbador o despojante. Contra la desposesión
interdicto de recobrar; y, contra la perturbación de la posesión interdicto de retener.

Las Acciones Posesorias, son defensas posesorias judiciales, que tiene lugar única y
exclusivamente, cuando existe una cuestión de derecho sobre la posesión, siendo así sólo se
conceden acciones posesorias a quienes tienen derecho a la posesión mediante un título. Ante
la concurrencia de poseedores tenemos la acción de mejor derecho de posesión y ante la
negativa de devolver el bien a su poseedor mediato con justo título acción de desalojo.

La Defensa Posesoria frente a la acción posesoria, opera como género, y la última de las
mencionadas frente a la primera, opera como especie. Por consiguiente, toda acción posesoria
es una defensa posesoria; empero, no toda defensa posesoria es una acción posesoria.

3. Opinan sobre las orientaciones dadas por el docente para elaborar sus conclusiones.

Al respecto las orientaciones tienen una actitud positiva, sin embargo pienso que las
orientaciones es más para los estudiantes del grupo presencial ya que nos piden debates,
exposiciones y socializar los tópicos por lo que como soy de distancia y en la sede de la Ciudad
de Huánuco no hay información que estudiantes llevan ese curso por lo mismo que no puedo
reunirme con los colegas que llevan el curso y por lo que no puedo hacer como indica usted
profesor. Es más, el catálogo de tesis que nos da:

http://site.ebrary.com/lib/bibliocauladechsp/detail.action?docID=10758087&p00=intro
ducci%C3%B3n+derecho no puedo bajarlo incluso me acerque a la oficina filial Huánuco y el
encargado de soporte me dijo que tengo que registrarme y que tenía que esperar… profesor por
lo que use el texto base y otros textos que lo encuentro fácil en la biblioteca de mi ex casa de
estudios, UNIVERSIDAD NACIONAL HERMILIO VALDIZAN.
CONCLUSIONES

➢ En la actualidad, el fundamento de la protección posesoria continúa siendo materia de amplia


discusión. Se viene elaborando una serie de teorías de gran significación que pretenden explicar
por qué se protege la posesión en determinado sistema jurídico que sirve a una realidad social
concreta. En mi opinión, el ordenamiento jurídico peruano protege la posesión, tanto por
motivos de interés particular cuanto por motivos de interés social, pues ambos
intereses, lejos de excluirse, se complementan mutuamente. Por lo tanto, es necesario
tener en cuenta que pueden coexistir varios fundamentos de la posesión en un mismo
sistema jurídico.
➢ La doctrina mayoritaria señala que el fundamento de la protección posesoria en nuestro país es
ser el complemento necesario de la protección del derecho de propiedad . Visto que, de
acuerdo con la teoría de Ihering, la posesión se protege como una exteriorización o visibilidad de
la propiedad. En este sentido, la posesión como contenido y ejercicio del derecho de
propiedad facilita la prueba en favor del propietario, a modo de sustituto, aliviándolo de la
carga de probar (diabólica) de manera constante su derecho a poseer a través de un título. Basta,
por tanto, con el mero hecho de ser poseedor para publicitar el derecho subyacente, con lo cual
se protege también la apariencia jurídica del derecho. La posesión asegura, asimismo, la
utilización económica de los bienes, en la medida que permite el despliegue de las
facultades o atributos propios del dominio, lo que constituye el interés jurídicamente
relevante que subyace al derecho de posesión mismo.
➢ En mi opinión, la teoría de Ihering es plenamente aplicable y útil a nuestra realidad
social (con ciertos matices que ya hemos precisado con anterioridad). Debos tener en cuenta
que vivimos en un mundo de informalidad constante, en donde las dificultades probatorias para
los propietarios y otros titulares de derechos reales son recurrentes, pues la mayoría carece de
títulos de propiedad que avalen su legitimidad. Asimismo, la implementación del sistema
registral aún no es completa, en la medida que la descentralización del territorio y la inversión
en infraestructura continúa en proceso. Recordemos que existen lugares en los que el Estado
aún no tiene presencia o simplemente los servicios que presta son precarios, lo que agrava la
situación descrita. En este contexto, la protección de la apariencia jurídica a través de la
institución jurídica posesoria presenta suma relevancia, en la medida que no solo
funciona como un efectivo sustituto de la prueba de propiedad sino que muchas veces
se equipara a esta, en la medida que permite la explotación de los bienes y la
dinamización de la economía y la circulación de la riqueza.

➢ En consonancia con lo ya expresado con respecto al interés económico subyacente a la


institución posesoria, consideramos que la teoría de Stahl respecto al fundamento
posesorio es aplicable también a nuestra realidad social. El aspecto económico que
presenta la protección posesoria es de la mayor relevancia para la dinamización de la
economía del país y la explotación de los bienes a sus usos más eficientes . La posesión,
desde el punto de vista de un poder de hecho, como comportamiento dirigido a la utilización
patrimonial de los bienes, tiene como finalidad ulterior la satisfacción de necesidades humanas;
por tanto, facilita el intercambio económico y genera riqueza.
➢ Concluyendo ya, otro de los fundamentos posesorios que considero plenamente aplicables a
nuestra realidad social es aquel que encuentra la justificación de la protección posesoria en
el mantenimiento de la paz social y el orden público . De acuerdo con los fundamentos
anteriores, he hecho énfasis en el aspecto privado de la protección posesoria, tanto desde un
punto de vista funcional-económico como probatorio y de apariencia jurídica. No obstante, la
posesión es un derecho que no se centra únicamente en la esfera individual del
poseedor, sino que trasciende a esta, en la medida que involucra la apreciación de las
personas ajenas al poseedor y en general de toda la colectividad. Es decir, la apariencia
jurídica que genera la posesión legitima frente a la colectividad y en virtud de ello le otorga al
poseedor una protección especial frente a quienes intentan perturbarlo o despojarlo, aun
cuando se trate del verdadero titular.
➢ De este modo, si al supuesto titular del derecho le estuviese permitido hacer justicia por sí
mismo, resultaría afectada de modo drástico la pacífica convivencia social. La tutela jurídica de
la posesión encuentra su fundamento en la necesidad de impedir que las situaciones
de hecho establecidas sobre los bienes se vean alteradas por vías de hecho, en donde
es característico el uso de la violencia privada como mecanismo de auto tutela. El uso
de la justicia por propia mano está proscrito por el ordenamiento jurídico. Por la necesidad de
preservar el orden público y la paz social, el statu quo posesorio debe ser preservado, hasta que
la administración de justicia determine la existencia de un mejor derecho a poseer y por ende
ordene la desposesión.
➢ En nuestro país, esta función es de suma importancia por las consecuencias nefastas que tendría
legitimar el uso de la fuerza privada para perpetrar despojos a cargo de los supuestos titulares
de los derechos sobre bienes. Legalizar este tipo de comportamientos equivaldría a legalizar el
uso de la violencia indiscriminada y con ello poner en riesgo todo el sistema jurídico en general.

➢ En conclusión, en el Perú, por las dificultades en el acceso a la formalidad e información sobre el


derecho de propiedad y demás derechos reales sobre bienes, la posesión como mecanismo de
exteriorización, facilitador de la prueba de titularidades e instrumento de la utilización
económica de los bienes, es imprescindible.

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