¿Ya no son importante las TI?

En un principio las empresas no destinaban muchos recursos a las TI ya que no las

encontraban importantes y no les veían su uso. Pero vivimos en un mundo en el
cual cambia día con día, el que hoy es el último avance tecnológico ya mañana
puede estar obsoleto, es por eso que la tecnología nunca muere, se está en
constante innovación; esa constante innovación que las empresas debería de tomar
en cuenta, cuestionarse que tan automatizados se encuentran, en que se puede
mejorar, todo con el fin de la reducción de costos, la mejora de la relación con los
clientes y por ende el poder ofrecerles un mejor servicio.

Las tecnologías de información han venido a mejorar, en la amplitud de su palabra,

el desempeño de las empresas, es por eso que ahora las empresas ven a la TI
como una herramienta, razón por la que se asignan jefes de informática (CEO) y
contratan servicios de empresas consultoras en estrategia las cuales les dan su
aporte con ideas nuevas con el solo fin de destacarse entre sus competidores.

La tecnología es casi tan normal como tener una radio en casa y cada vez las
personas se acostumbran más a ellas entonces por ende las empresas ya la tienen
como algo más que no genera una opción de inversión que les regresara grandes
ganancias, pero hay que cuestionarse que sería las empresas sin computadoras,
sin internet, sin CRM, sin bases de datos, sin sistemas que lo que buscan es
automatizar y mejorar las funciones, es más que se podría hacer si no existieran los
teléfonos; simplemente la tecnología aunque se vea algo más que normal en la
cotidianidad ha marcado un antes y un después, los negocios ya no son iguales, se
ha dado una necesidad del uso de las tecnologías, donde casi que si se está fuera
de esta se está destinado a perder en un mundo completamente desigual en
comparación con sus competidores.

En conclusión, las TI desde luego que son importantes, han marcado la diferencia
en un mundo globalizado, donde todo gira a su alrededor, donde las empresas
deben optar por la reingeniería para la automatización de sus diferentes funciones,
para así poder entrar en un ámbito competitivo, donde si no se toman los cambios
el fracaso será inevitable.