Oración de arrepentimiento y liberación sobre Venezuela

Dios Eterno, en el nombre poderoso de Jesús vengo hoy ante ti como lo hizo Nehemías en los
tiempos que los muros de Jerusalén estaban derribados, sus puertas quemadas a fuego y sus habitantes
esparcidos, tristes y desesperanzados (Nehemías 1:3).

Te ruego oh Señor Dios de los Cielos, Fuerte, Grande y Temible, que guardas el pacto y la
misericordia a los que te aman y guardan tus mandamientos, esté atento tu oído para oír la oración de tu
siervo/a que ahora hace por los hijos de Venezuela, pues queremos reconstruir nuestros muros y rehacer
nuestras puertas, queremos volver a tiempos de honra, de vigor, de productividad y seguridad, como está
escrito en Isaías 60:18 : “Nunca más se oirá en tu tierra violencia, destrucción ni quebrantamiento en tu
territorio, sino que a tus muros llamarás Salvación, y a tus puertas Alabanza”.

He aquí reconozco el pecado de mi Nación, pues nos hemos desviado de tus caminos, de tu palabra,
y hemos creído en dioses e ídolos que no ven, no hablan, no sienten, y no oyen antes que creer en Ti, el
único sabio Dios, en quien no existe sombra ni mudanza de variación. Te ruego oh Señor que tu furor se
aparte de nosotros y podamos razonar contigo, pues dice tu palabra que “si nuestros pecados fueren como
la grana como la nieve serán emblanquecidos, aunque fueren rojos como el carmesí vendrán a ser como
blanca lana” (Isaías 1:18), pues los planes que tienes para con nosotros son de bien y no de mal.

Fortalece oh Señor a tu pueblo, haz que nuestros corazones de piedra se conviertan a ti, seamos
transformados, que nuestros oídos se vuelvan a tu instrucción y podamos obedecer en todo tiempo.

Dios Todopoderoso, toda potestad te ha sido dada en los cielos y la tierra (Mateo 28:18), y esa
autoridad la has entregado a tus hijos, a todo aquel que cree que Cristo es el Señor.

En esta hora tomo esa autoridad para arrancar, destruir, y derribar todo espíritu de estupor, espíritu
ciego, sordo y mudo, toda mentira, todo espíritu de traición, de Sanbalat y Tobias que pretenden detener la
obra de Dios en Venezuela, todo espíritu brujo y hechicero, toda maldición de la tierra y maldiciones
generacionales AHORA en el NOMBRE DE JESÚS sean desarraigados para siempre de mi Nación.

Hoy proclamo libertad sobre Venezuela, pues Jesús dijo: Conoceréis la verdad, y la verdad os hará
libres” (Juan 8:32). Declaro que Venezuela conoce la verdad de Dios, que toda mentira de las tinieblas no
puede prevalecer ante la luz del Señor.

Proclamo que Venezuela es nación bendita, pueblo adquirido por Dios para anunciar las virtudes de
Cristo Jesús.

Proclamo que toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Jesús es Rey.

Declaro que los corazones de los venezolanos se vuelven a su Creador

Declaro que hay un nuevo amanecer, una nueva esperanza, una razón más para luchar por la
liberación de esta Nación. (Isaías 61)

Gracias mi Señor porque eres un Dios maravilloso y sé que el deseo que pones en nuestro corazón
de ver una Venezuela libre está muy cerca de hacerse realidad. Mi alma te bendice y te adora, pues Tú
eres digno por siempre y para siempre. Amén

Marianna Álvarez Fecha: 28/02/2.018 C.A.N “Oasis de Bendición”.

Equipo de Intercesión.