You are on page 1of 24

Población de Inglaterra

Inglaterra es una de las cuatro naciones que componen el Reino Unido. El territorio que hoy
comprende Inglaterra ha sido habitado por varias culturas a lo largo del tiempo. Anteriormente
conocido como el Reino de Inglaterra, también abarcaba lo que hoy se conoce como Gales.
Inglaterra es el país más poblado del Reino Unido, en la actualidad tiene un poco más de 51
millones habitantes, dentro de los cuales se encuentran personas de diversas razas, culturas y
religiones. El idioma que predomina es el inglés y la religión con más seguidores es el
anglicanismo. Vale mencionar que en Inglaterra habitan un gran número de extranjeros.

El anglicanismo podría definirse como la fe, práctica y espíritu de las iglesias miembros de
la Comunión anglicana, es decir, iglesias en plena comunión con el arzobispo de Canterbury.1 Con
todo, el anglicanismo tiene profundas raíces en el pasado: Rowan Williams describió el
Anglicanismo como lo que pasó a la Iglesia en Inglaterra, Gales e Irlanda durante la reforma del
siglo dieciséis y posteriormente.2 Además, tiene raíces hondas en los siglos anteriores: lo medular
de la fe de los anglicanos se encuentra en la Biblia, los 39 Artículos de la fe Cristiana, y el Libro de
Oración Común los cuales resumen la enseñanza de la iglesia de los primeros cinco siglos y
rechazan tanto la evolución posterior de la Iglesia católica romana como las simplificaciones del
unitarismo.3 Recientemente con las divisiones sobre temas doctrinales y morales, se ha extendido
a grupos fuera de la Comunión Anglicana.

Inglaterra es una monarquía constitucional con un gobierno parlamentario fundamentado en


el Sistema Westminster,pero no es independiente, ya que desde hace siglos políticamente esta
unida al resto de países que conforman el Reino Unido.

Las responsabilidades del Jefe de Estado están depositadas en el monarca, por ley el rey o la
reina son los encargados de declarar la guerra y firmar la paz, así como también de velar por las
buenas decisiones y el cuidado de las políticas internacionales.
Lo que en el Reino Unido se conoce como Gobierno o Gabinete se refiere al grupo de ministros
que son considerados como consejeros reales, y están dirigidos por un primer ministro, el cual es
nombrado por el monarca pero postula por el partido con mayoría en la Cámara de los Comunes.
El parlamento está compuesto por dos cámaras, una conocida como la Cámara de los
Comunes compuesta por 659 miembros elegidos por sufragio universal y libre, los cuales se
encargan de representar a todos los distritos del reino, la segunda es la conocida Cámara de los
Lores, en donde hay cerca de 733 miembros, dentro de los cuales hay una división entre los lores
Temporales y los Lores Espirituales ya que de esta también forman parte 24 obispos y
arzobispos de York y Canterbury.
La Política de Inglaterra constituye la mayor parte de la política del Reino Unido, ya
que Inglaterra está más poblada que el resto de estados juntos. También es el más grande en
términos geográficos, lo que hace que su relación con el Reino Unido sea diferente de algún modo
a la de Escocia, Gales o Irlanda del Norte. La capital de Inglaterra, Londres es también capital del
Reino Unido y el inglés es la lengua dominante del Reino Unido (no oficialmente pero sí de facto).
Dicey and Morris (p26) nos da un listado de los diferentes estados de las islas
británicas"Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte, la Isla de Man, Jersey, Guernsey, Alderney,
y Sark... son estados diferentes en el sentido del Derecho internacional privado, aunque ninguno
de ellos es un estado para el Derecho público internacional." Pero esto puede variar según el
estatuto que tenga.
Tradicionalmente los autores se referían al Estado de Inglaterra y Gales como "Inglaterra"aunque
este uso se está convirtiendo en políticamente inaceptable en las últimas décadas. El Parlamento
del Reino Unido se encuentra en Londres, igual que su Administración Pública, el HM Treasury y la
mayoría de las residencias oficiales de la monarquía. Además, el banco central del Reino Unido es
conocido como el Banco de Inglaterra.
Aunque asociados con Inglaterra para algunas cuestiones, la Isla de
Man, Jersey y Guernsey tienen sus propios parlamentos y no son parte del Reino Unido, de la
Unión Europea ni de Inglaterra.
Antes del Acta de Unión (1707), Inglaterra estaba gobernada por un rey y el parlamento. Desde la
Unión, Inglaterra no ha tenido su propio gobierno.
El Parlamento del Reino Unido se encuentra en Westminster, Londres.
La Cámara de los Comunes[editar]
La Cámara de los Comunes (en inglés: House of Commons)?, oficialmente Los Honorables
Comunes del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte reunidos en el Parlamento (The
Honourable the Commons of the United Kingdom of Great Britain and Northern Ireland in
Parliament assembled), es la cámara baja del Parlamento del Reino Unido. Tiene su sede en el
Palacio de Westminster.
La Cámara de los Lores[editar]
La Cámara de los Lores también está compuesta por una mayoría inglesa.
Los miembros de la cámara de los lores que están en ella debido a su cargo eclesiástico son
conocidos como los Lores Espirituales. Antiguamente, los Lores Espirituales eran mayoría en esta
cámara e incluían al Arzobispo de la Iglesia de Inglaterra, los obispos, abades y priores. Después
de 1539 solo los arzobispos y los obispos permanecen en ella debido a la llamada disolución de los
monasterios llevada a cabo por Enrique VIII, en la que suprimió los cargos de abad y prior.
En 1642 durante la Revolución Inglesa se excluyó también a los Lores Espirituales pero volvieron
después de la Clergy Act de 1661.
El número de Lores Espirituales se restringió más aún con la Bishopric of Manchester
Act en 1847 y otras posteriores. En la actualidad hay un máximo de 26 Lores Espirituales entre los
que se incluyen los 5 principales prelados de la Iglesia de Inglaterra: el Arzobispo de Canterbury,
el Arzobispo de York, el Obispo de Londres, el Obispo de Durham y el Obispo de Winchester. Entre
los miembros de la Cámara de los Lores se encuentran también otros obispos diocesanos de la
Iglesia de Inglaterra. Los actuales Lores espirituales solo representan a la Iglesia de Inglaterra
aunque la Reina puede designar ex officio a miembros de otras iglesias y religiones.

Inglaterra en el Parlamento de la Unión Europea[editar]


Mientras que Escocia, Gales e Irlanda del norte son consideradas por la Unión Europea como
distritos electorales independientes, Inglaterra tiene nueve distritos electorales de un total de doce
para todo el Reino Unido. Gibraltar, el único territorio de ultramar que también pertenece a la Unión
Europea se incluye en el distrito South West England ( Sudoeste de Inglaterra). Los actuales
distritos electorales ingleses en Europa son los siguientes:

personas por
Distrito electoral Region escaños Población.
escaño

1. Londres Gran Londres 9 7.4m 822k

2. South East England South East 10 8m 800k

3. South West England South West, Gibraltar 7 4.9m 700k

4. West Midlands West Midlands 7 5.2m 740k

5. North West England North West 9 6.7m 745k

6. North East England North East 3 2.5m 833k

7. Yorkshire and the Yorkshire and the


6 4.9m 816k
Humber Humber

8. East Midlands East Midlands 6 4.1m 683k

9. East of England East of England 7 5.4m 770k

Devolución en Inglaterra[editar]
Autoridad del Gran Londres[editar]
El Ayuntamiento de Londres, Londres

Artículo principal: Autoridad del Gran Londres


El Gran Londres goza de cierta autonomía, consta de la Asamblea de Londres y el Alcalde de
Londres que se elige directamente. La Asamblea fue creada el 3 de julio de 2000 tras el
Referendum para la Independencia de Londres de 1998 en el que el 72% de los votantes
aprobaron la creación de la Autoridad del Gran Londres( e incluía la creación de la asamblea y la
alcaldía) El Gran Londres se divide en 32 barrios con sus respectivos consejos que dependen de la
Autoridad del Gran Londres. Esta supervisa algunas funciones como las referidas al transporte,
policía o bomberos. No se debe confundir al Alcalde del Gran Londres con el cargo de alcalde de
Londres, un cargo hoy prácticamente honorífico de la city de Londres. El Alcalde de Londres es
alcalde del Gran Londres, territorio con una población de más de 7.5 millones de habitantes,
mientras que la City de Londres es solo una pequeña parte de la actual ciudad de Londres con una
población de menos de 10.000 habitantes. El primer Alcalde de Londres fue Ken Livingstone,
reelegido en 2004. El segundo y actual es el miembro del partido conservador Boris Johnson,
elegido en 2008.
Existe también un partido político londinense, el One London, con representación en la asamblea
durante los años 2005-08. Es un partido euroescéptico con raíces en el United Kingdom
Independence Party ( UKIP) y en el Veritas.
Antiguas Asambleas Regionales[editar]
Después de aprobarse las devoluciones de Escocia, Irlanda del Norte y Gales y al no suceder lo
mismo en Inglaterra, se planificaron una serie de referendums para establecer asambleas
regionales en Inglaterra. El primero fue en Londres en 1998 y fue aprobado creándose la Asamblea
de Londres y la Autoridad del Gran Londres en el año 2000. En la región noroeste de Inglaterra
hubo otro en 2004 pero se declinó la propuesta de creación de una asamblea. Los planes para
nuevos referendums en otras regiones se cancelaron y las ocho asambleas regionales fueron
abolidas en 2010, transfiriéndose la mayoría de sus funciones a la agencia de desarrollo regional y
a las Local Authority Leaders' Board.
Cornualles[editar]
Artículo principal: Nacionalismo cornuallés
Los nacionalistas de Cornualles consideran que su región es una nación y no un condado de
Inglaterra. Para ellos el Ducado de Cornualles tiene un estatus que le confiere mayor autonomía.
Tanto el partido nacionalista de Cornualles conocido como Mebyon Kernow como los cinco
parlamentarios por el Partido Liberal Demócrata Inglés se oponen a formar parte de la Asamblea
Regional del Sudeste de Inglaterra junto con las regiones
de Devon, Dorset, Gloucestershire, Somerset y Wiltshire y preferirían una asamblea cornuallesa
democráticamente elegida.123

Gobierno local[editar]
Structure of local government in England

distrito metropolitano
burgo lodinense
autoridad unitaria
condado no metropolitano

En cuanto al gobierno local, Inglaterra se divide en cuatro niveles de entidades


subnacionales: regiones, condados, distritos y parroquias.
Los distritos en Inglaterra pueden tener también el estatus de burgo(borough), city, o burgo real(
royal borough).
Los condados metropolitanos estaban divididos en distritos metropolitanos llamados boroughs.
Cuando se abolieron los consejos de los condados los distritos metropolitanos absorbieron muchos
de sus poderes y funcionan de la misma manera que otras autoridades unitarias.
Los condados o Shire (condados no metropolitanos) se dividen en distritos no metropolitanos. En
ellos el poder se comparte con el consejo del condado pero de forma diferente a la de los
condados metropolitanos en épocas anteriores.
Véase también: Organización territorial de Inglaterra

Partidos políticos de Inglaterra[editar]


Son partidos locales ingleses el English Democrats Party, el One England, el English People's
Party, el English Radical Alliance, el England First party y el English Independence Party.
El Partido Verde de Inglaterra y Gales se separó del Partido Verde Escocés. El Partido Verde
Galés va ganando también en independencia. El Partido conservador del Reino Unido adoptó una
política de votos llamada EVoEL para evitar que el electorado de fuera de Inglaterra votara leyes
que afectan solamente a esta. El partido laborista aboga por una mayor autonomía de las regiones.
Algunos partidos reclaman más independencia que otros, mientras unos piden la independencia de
Inglaterra como en el caso escocés otros piden su independencia del Reino Unido.

Iglesia de Inglaterra[editar]

El Arzobispo de Canterbury, Rowan Williams.

Artículo principal: Iglesia de Inglaterra


La Iglesia de Inglaterra es la religión oficial de Estado. 4 La Reina Isabel II es la representante oficial
de la Iglesia con el título de Gobernadora Suprema de la Iglesia de Inglaterra y el Arzobispo de
Canterbury es el principal clérigo( primado). La ley de la Iglesia de Inglaterra establece que "la
Reina es el principal poder de Dios en este Reino y tiene suprema autoridad sobre todas las
personas y todos los procesos tanto eclesiásticos como civiles". En la práctica este poder es
ejercido generalmente a través del parlamento y el primer ministro.
De los cuarenta y cuatro arzobispos y obispos diocesanos de la Iglesia de Inglaterra solo veintiséis
pueden estar en la Cámara de los Lores: Los arzobispos de Canterbury y York, así como los
obispos de Londres, Durham y Winchester tiene escaño automáticamente. Los veintiuno restantes
se ocupan por orden de antigüedad mediante consagración. A un obisspo diocesano puede llevarle
años llegar a la Cámara de los Lores, momento en el que se convierte en Lord espiritual.5

Monmouthshire[editar]
Los nacionalistas del condado histórico de Monmouthshire, asentado en las marcas galesas, área
fronteriza entre Gales e Inglaterra, solicitan la unidad e independencia de esta región histórica. El
condado histórico de Monmouthshire se constituyó tras el Laws in Wales Act de 1535. El 2º Laws in
Wales Act excluyó este condado de la lista de condados de Gales lo que llevó a ambigüedad en
cuanto a su pertenencia a Inglaterra o a Gales. En 1974 se circunscribe definitivamente a Gales
pero parte del territorio del condado histórico queda dividido. En 1996 se crea la Autoridad Unitaria
de Monmouthshire que cubre lo que fue la mitad este del condado histórico.

Berwick-upon-Tweed[editar]
Berwick, al norte del río Tweed, fue un condado hasta 1885, año en el que se incluyó en
Northumberland. Los nacionalistas escoceses, principalmente, quieren que forme parte de Escocia
y no de Inglaterra.
El Reino Unido es una monarquía parlamentaria que, a diferencia de otros regímenes carece
de Constitución escrita, esto es, de un código político único y que requiera un procedimiento
especial de elaboración y reforma para determinar las instituciones básicas del Estado, su régimen
territorial y los derechos y libertades públicas.
Modelo constitucional[editar]
Artículo principal: Constitución del Reino Unido
Su modelo constitucional se basa, en primer lugar, en el llamado "derecho estatutario" (Statute
Law), cuya elaboración es idéntica a las leyes ordinarias y sólo se diferencian, y alcanzan el
carácter de constitucionales, por razón de la materia que tratan. Las más importantes son la Carta
Magna de 1215, la "Petition Rights" de 1628, el "Habeas Corpus Amendment Act" de 1679, el "Bill
of Rights" de 1689, el "Act of Settlement" de 1701, la "Reform Act" de 1832, el "Estatuto de
Westminster" de 1931 y los "Parliament Acts" de 1911 y 1949.
La jurisprudencia conforma la segunda fuente constitucional a través de las decisiones judiciales
que reconocen las costumbres del derecho del Reino, el llamado "Common Law" e interpretan el
derecho estatutario.

Theresa May, Primera Ministra británica.

Las convenciones son otro instrumento de legislación constitucional que se conforman con el paso
del tiempo y en el que una determinada manera de resolver las cuestiones prácticas ha terminado
por fijar la soberanía del Parlamento y el estado de derecho o imperio de la ley.
Las fuentes de Derecho del Reino Unido son las siguientes:

 El statute law (derecho estatutario) que consiste en el conjunto de actos o normas jurídicas
emanadas del poder soberano del Parlamento británico con carácter constitucional para
regular los órganos del Estado, el orden social o los derechos y libertades de los ciudadanos.
(Carta Magna de Juan sin Tierra de 1215, Declaración de Derechos de 1689, Acta de
Establecimiento de 1701, Acta de la Unión de Escocia de 1707, las leyes parlamentarias de
1911 y 1949, el Acta Westminster o las leyes de representación de 1932, 1948,1946 y 1968.
 El common law (reglas consuetudinarias) que consiste en las decisiones e interpretaciones
judiciales de este derecho constitucional escrito por las que se reconocen que determinadas
costumbres, reglas, usos y normas no escritas forman parte del derecho constitucional
británico.
 Las works of authority (obras de autoridad) están compuestos por aquellos escritos que han
sido reconocidos como fuentes-guía en la interpretación de las reglas constitucionales como
el Abridgement de Fitzherbert (1516) o el An Introduction to the Study of the Law of the
Constitution de A.V. Dicey (1885).
 Las constitutional conventions (convenciones constitucionales), es decir, usos políticos o
reglas de comportamiento de las praxis política que principalmente regulan las prerrogativas
regias y determinados aspectos sustantivos del Gabinete y del primer ministro y se considera
obligatorias por aquellos a quienes van referidas. (Cueto N. Carlos en Cueto Carlos y Durán
Marién Eds. Regímenes Políticos Contemporáneos, entre el inmovilismo y el cambio,
Comares. Granada 2008).
Revisionismo Constitucional sobre la Unión Europea
Formalmente, las leyes europeas –los tratados– son simplemente tratados internacionales. Sin
embargo, han tenido, y tienen, un gran efecto en el sistema jurídico británico: puede tener
precedencia sobre el constitucionalismo británico e incluso sobre las decisiones del Parlamento.
Ejemplo: Caso Factorame logró que la Cámara de los Lores "desaplicara" una ley aprobada por el
Parlamento (Merchant and Shipping Act 1988)

Los órganos de poder[editar]


La monarquía[editar]
Artículo principal: Corona británica

10 de Downing Street, residencia oficial del primer ministro.

El monarca es el Jefe de Estado, actualmente la reina Isabel II. Sus funciones son meramente
representativas, si bien las distintas normas le conceden facultades nominales tales como declarar
la guerra y firmar la paz, la política internacional y ser guardián de las normas constitucionales y la
unidad del Reino. Sin embargo la práctica ha convertido en necesario el refrendo
del Gobierno para la adopción de todas las decisiones. El monarca es al mismo tiempo el Jefe y
cabeza de la Iglesia de Inglaterra.
El Gobierno[editar]
Artículo principal: Gabinete del Reino Unido
El Gobierno o Gabinete de Su Majestad ejerce el Poder ejecutivo. Mantiene en su origen la
condición de Consejo Privado del monarca de carácter consultivo, si bien en la práctica cumple
la función ejecutiva y la dirección administrativa. Está encabezado por el primer ministro —
actualmente Theresa May—, que ejerce las funciones de Jefe de Gobierno. El primer ministro es
nombrado por el monarca y debe contar con el apoyo de la mayoría de la Cámara de los Comunes,
por lo que generalmente es el líder del partido con más miembros en la Cámara. El gabinete se
compone de un número variable de ministros nombrados por el monarca a propuesta del primer
ministro.
El Parlamento[editar]
Artículo principal: Parlamento del Reino Unido
El Parlamento británico ostenta el Poder legislativo. Se basa en un sistema bicameral, formado por
la Cámara de los Comunes y la Cámara de los Lores:
 La Cámara de los Comunes (House of Commons) está compuesta por 650 miembros,1
elegidos por sufragio universal libre, igual, directo y secreto de todos los ciudadanos mayores
de edad. El sistema electoral empleado es el de mayoría relativa o first-past-the-post, por el
que se elige un único representante en cada distrito electoral (circunscripciones uninominales).
En 2011 se celebró un referéndum para reformar el sistema electoral en el cual se proponía
adoptar el sistema de segunda vuelta instantánea, pero la propuesta fue rechazada por el
electorado.
La Cámara de los Comunes cumple las funciones propias de la Cámara Baja en cualquier
sistema parlamentario democrático mediante el control del gobierno y la aprobación de las
leyes. La Cámara se disuelve cada cinco años como máximo, debiendo celebrarse nuevas
elecciones generales.

 La Cámara de los Lores (House of Lords) está compuesta por un número variable de
miembros, actualmente 781,2 que a diferencia de lo que sucede en la Cámara de los
Comunes, no son elegidos por los ciudadanos. Pueden ser lores temporales o lores
espirituales. De los primeros, la mayoría son de carácter vitalicio, nombrados por el
monarca con el asesoramiento del primer ministro, mientras que algunos de ellos son de
carácter hereditario. Por último, un máximo de 26 miembros son lores espirituales, en
virtud de su condición de eclesiásticos de la Iglesia de Inglaterra: se trata de
los arzobispos de Canterbury y de York, y de 24 obispos.
Las funciones de la Cámara de los Lores son similares a las de una Cámara Alta y salvo
en cuestiones judiciales su poder está muy mermado. Los proyectos para reformar esta
cámara, especialmente su modo de elección, son un asunto recurrente en la política
británica.34
El Reino Unido es una de las naciones principales en el mundo en cuanto a industria y comercio.
No por gusto Inglaterra fue el centro de la Revolución Industrial. El producto bruto interno
del Reino Unido se encuentra en el quinto lugar del mundo, después de Estados Unidos, Japón,
Alemania, China. Esto equivale a más de dos millones de dólares, lo que significa más de 41 mil
dólares por cabeza.

Después de la Segunda Guerra Mundial, el país retomó un potente rumbo económico,


potenciando a su vez la alianza que mantiene hasta hoy con Estados Unidos.

las principales actividades industriales son la maquinaria, los productos químicos y material de
transporte. Las tradicionales minas de carbón se sitúan en Gales, Escocia, Yorkshire y
Lancashire. También es el segundo productor europeo de petróleo, después de Noruega, pues en
1970 se descubrió el mineral en el Mar del Norte.

Los británicos se mantienen fuera del euro, a pesar de estar integrados a la Unión Europea, y
siguen utilizando la libra esterlina, la moneda más antigua del mundo que circula actualmente. Por
ello se dice que su economía es estable y está dentro de las más destacadas del mundo.

La economía de Inglaterra ha sido tradicionalmente solida, lleva décadas establecida como una
de las principales economías basadas en la industria y en el comercio, lo cual ha generado que por
años su PIB se encuentre entre los 5 primeros del mundo, debajo de Estados Unidos, Japón,
Alemania y China.

La clave del éxito en la economía inglesa es que tras las duras perdidas por la segunda guerra
mundial así como también cuando sus colonias se independizaron supieron mantener una doble
alianza, manteniendo siempre de cerca a los mercados europeos sin perder ni por un minuto su
buen trato con los Estado Unidos, lo que generó que por mucho tiempo la economía inglesa
mantuviera muy buenos índices.
En la industrias caracterizan por la producción de la maquinaria, el material de transporte
(vehículos, ferrocarriles y aeronáutica) y los productos químicos, pero el sector que más aporta
al PIB ingles es el sector de los servicios producto de las transacciones en la Bolsa de Valores,
así como también los servicios financieros de la banca y las compañías de seguros.
Una de las cosas que más ha luchado Inglaterra es para no pertenecer a la eurozona lo que ha
logrado manteniendo su moneda que es la Libra Esterlina una de las monedas que más
transacciones logra diariamente en el mercado de la

REINO UNIDO: FISCALIDAD

En esta página: Impuestos sobre las sociedades | Reglamentos contables | Impuestos al


consumo | Impuesto sobre la renta de las personas | Convenios para evitar la doble
imposición | Fuentes de información fiscal

Impuestos sobre las sociedades


Distinción entre sociedad residente y sociedad extranjera

Una empresa es considerada como contribuyente si es constituida en el Reino Unido o si


su administración y gestión central están en el Reino Unido.
Una compañía residente en el Reino Unido se encuentra sujeta al impuesto sobre
sociedades de sus ganancias a nivel mundial, con créditos para la mayoría de los
impuestos externos. Una compañía que no reside en el Reino Unido sólo será gravada
sobre sus ingresos en este país y sobre las ganancias imponibles de su establecimiento
permanente (PE) en el Reino Unido, así como cualquier actividad de inversión realizada
con ingresos generados localmente. Cualquier ingreso de origen extranjero del
establecimiento permanente no es gravado ni tiene acceso a crédito fiscal.

Las sociedades de inversión inmobiliaria (REITs) son empresas residentes incluidas en


una bolsa de valores reconocida y pueden elegir eximirse del impuesto sobre el ingreso o
sobre las ganancias que derivan del negocio de arriendo de propiedades. Si optan por
esto, deben distribuir ingresos sustanciales. Una REIT además debe deducir 20% de
impuesto de ciertos dividendos.

La desgravación de grupo también se aplica de manera diferente a empresas residentes y


no residentes. Consultar la Guía Deloitte para más detalles.

Tasa estándar

Principal tasa de impuesto sobre sociedades, no aplicable a 20%


beneficios de derechos petroleros y extracción

Tasa de impuestos para sociedades extranjeras

Un impuesto sobre ganancias desviadas (DPT) se aplica a las ganancias de empresas


multinacionales intencionalmente desviadas del Reino Unido, con el objetivo de alinear
mejor la posición de su impuesto de sociedades para reflejar los resultados esperados por
el Proyecto OCDE/G20 de lucha contra la erosión de la base imponible y el traslado de
beneficios (BEPS, por sus siglas en Inglés). Este impuesto se asienta sobre los acuerdos
fiscales bilaterales ya existentes, y es recaudado en 55% para las empresas de petróleo y
gas. Para más información, consulte la guía Deloitte.
Imposición de plusvalías
Las ganancias sobre el capital forman parte de los ingresos gravables de una empresa
pero están exentas si provienen de la venta de un importante volumen de acciones tanto
en el Reino Unido como en empresas extranjeras. Un impuesto sobre las plusvalías de
28% se aplica a la venta de una propiedad residencial con un valor superior a 500.000
GBP, y que ha estado sujeta anteriormente al impuesto anual sobre bienes residenciales
de valor elevado (Annual Tax on Enveloped Dwellings, ATED). Para más informaciones,
ver la guía Deloitte.
Deducciones y créditos de impuestos
En general, todos los gastos (salvo capitales inmóviles) que se usan con un objetivo
comercial son deducibles. La mayoría de los impuestos son deducibles, salvo los
impuestos directos del Reino Unido. Los intereses son deducibles hasta el tope de deudas
normativo que se aplica a empresas que hacen parte de grandes grupos.

Para la I&D, existe un crédito fiscal de hasta 130% de los gastos en I&D en las grandes
empresas, y 230% en las PyMES (de acuerdo a la definición de la UE). Un régimen de
patentes está siendo implementado gradualmente (a lo largo de 5 años) para permitirle a
las empresas aplicar una tasa de 10% a todos los beneficios derivados de las patentes
calificadas a partir del 1 de abril de 2017.

Otros impuestos a las sociedades

Se aplica una norma general contra abusos (GAAR) a una serie de impuestos sobre las
transacciones efectuadas después del 17 de julio de 2013.

Un impuesto sobre los ingresos de petróleo y gas en el Mar del Norte, de 50%, es
recaudado sobre los beneficios generados por los yacimientos petrolíferos individuales
desarrollados antes de 1963. Esta tasa se reduce a 35% para los períodos imponibles que
terminan después del 31 de diciembre de 2015. Un impuesto adicional de 30% sobre el
impuesto de sociedades se aplicará luego.

Se aplica una recaudación sobre los bancos de 0,21% en el caso de pasivos exigibles de
corto plazo, y de 0,105% para los pasivos exigibles y fondos propios de largo plazo. Los
primeros 20 millones GBP de pasivos exigibles están exentos.

El pago de una indemnización por kilómetro (Mileage Allowance Payment, MAP) se aplica
en el caso de que los empleados sean pagados por utilizar sus propios vehículos durante
desplazamientos profesionales. Esto se aplica a automóviles, motocicletas o bicicletas.
Para más información, consulte la guía gov.uk.

Otras fuentes útiles

Consulte el sitio Doing Business, para conocer la valor de los impuestos y contribuciones
obligatorias.
Comparativo internacional de la fiscalidad de las empresas

Reino Unido OCDE Estados Unidos Ale

Número de pagos de 8,0 10,9 10,6


impuestos por año

Tiempo requerido para 110,0 163,4 175,0 2


las formalidades
administrativas en
horas

Monto total de 30,9 40,9 44,0


impuestos en % de
ganancias

Fuente: Doing Business - 2017.

Nota: *Entre más grande sea el índice, mayor es la transparencia de las transacciones. ** Entre
más grande sea el índice, mayor es la responsabilidad personal de los gerentes. *** Entre más
grande sea el índice, mayor es el poder que tienen los accionistas para defender sus derechos. ****
Entre más grande sea el índice, mayor es la protección de los inversores.

Reglamentos contables

Sistema contable
Normas contables

Las leyes financieras, así como la normativa basada en los poderes otorgados por esas
leyes, han establecido una serie de medidas que permiten que las empresas que se hayan
adaptado a los Estándares Internacionales de Contabilidad (IAS) o a ciertos estándares del
Reino Unido equivalentes a las IAS para realizar sus cuentas, pueden recibir un
tratamiento impositivo equivalente al de las compañías que sigan empleando los UK GAAP
(PCGA del Reino Unido).
Entidades de regulación contable
Consejo de Información Financiera (Financial Reporting Council)
Fundación IFRS-IASB (Normas Internacionales de Contabilidad e Información Financiera).
Legislación contable
Las empresas que no cotizan en bolsa tienen la opción de informar según las NIIF o los
PCGA del Reino Unido. Las normas FRS del Reino Unido, recientemente modificadas,
replican las IFRS correspondientes, lo que reduce significativamente las diferencias entre
los dos estándares.
Divergencias entre las normas nacionales y internationales (IAS/IFRS)
Haga clic en este enlace para visualizar una tabla comparativa entre las Normas
Internacionales de Contabilidad (NIC) y los PCGA (Principios de Contabilidad
Generalmente Aceptados) del Reino Unido (UK GAAP).
Noticias contables
Accounting Web
Accountancy Live

Prácticas contables
Año fiscal

Del 6 de abril al 5 de abril del año siguiente.


Estructura de las cuentas
Las empresas inglesas deben disponer de libros contables donde se registren las
operaciones de la compañía y deben presentar una contabilidad anual que incluya
informes anuales, una cuenta de resultados, un balance, una tabla de flujos financieros, un
índice, la opinión de los auditores, una declaración de las pérdidas y ganancias
registradas, una comparación entre los movimientos de intereses de los accionistas y una
nota de los resultados sobre una base de costes históricos.
Obligaciones de publicación
Los estados financieros deben realizarse anualmente.

La profesión de contable
Los contables

Sólo los contadores públicos y los contadores certificados están autorizados y disponen del
permiso de la comisión de auditoría para llevar a cabo un trabajo de contabilidad o de
auditoría.
Entidades profesionales de contabilidad
Instituto de Contadores Públicos de Inglaterra y Gales
Asociación de Expertos Contables Certificados
Instituto Público de Finanzas Públicas y Contabilidad
Miembro de la IFAC (International Federation of Accountants)

Miembro de otras federaciones de contables
Miembro de la Federación de Expertos Contables Europeos;
Miembro de la Confederación de Contables de Asia-Pacífico (CAPA).
Organismos de auditoría
Las empresas deben acudir a un auditor de cuentas certificado para que realice una
auditoría anual de sus estados financieros. Puede contactar a la Comisión de Auditoría y
Tribunal Nacional de Cuentas (National Audit Office - NAO).
Impuestos al consumo
Naturaleza del impuesto

Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) (en inglés, VAT).


Tasa estándar
20%
Tasa reducida
El Reino Unido aplica un tipo reducido de IVA del 5% para determinadas categorías de
bienes y servicios, incluidos los asientos de seguridad para niños o la vivienda social,
combustibles y fuentes de alimentación entregados a usuarios particulares y
organizaciones caritativas, la instalación de materiales para economizar energía, ayuda a
la movilidad de personas mayores, etc. Algunos bienes y servicios tienen una tasa de 0%
deL IVA, entre los cuales libros, periódicos, ropa y calzado para niños pequeños, cascos
para motocicletas y ciertos tipos de comida, que sin embargo deben ser registrados en la
contabilidad del IVA. Para más detalles, consultar el sitio web gov.uk.
Los exentos de impuesto
Están exentos de impuesto los bienes y servicios que se encuentran fuera del alcance del
sistema de IVA del Reino Unido.
Modos de cálculo y declaración
Una empresa solo puede cobrar IVA si está registrada en la HMRC. El IVA se aplica a
"bienes imponibles" como la venta de productos y la prestación de servicios, la venta de
activos comerciales, comisiones, regalos, etc. Se aplican normas diferentes a las
importaciones, exportaciones y organizaciones benéficas. Una declaración de IVA es
habitualmente entregada cada 3 meses al HMRC. Ver el sitio web gov.uk para más
detalles.
Otros impuestos al consumo
Toda la información se encuentr disponible en el sitio web de la Agencia Tributaria.

Impuesto sobre la renta de las personas


Distinción entre residente y no residente

Una prueba de residencia legal es aplicada para determinar si un individuo es un


contribuyente residente o no residente en el Reino Unido. La prueba incluye una
combinación de presencia física y factores de vinculación. Cuando un particular es
residente y reside en el Reino Unido, está sujeto a la declaración de la renta del Reino
Unido y al impuesto sobre las ganancias de capital de sus ingresos y ganancias a nivel
mundial. Cuando un individuo es residente pero no reside en el Reino Unido, también está
sujeto al impuesto a la renta del Reino Unido sobre su ingreso a nivel mundial, pero puede
escoger cancelar el impuesto sobre el ingreso y las ganancias de capital en un marco de
remesas, sujeto a una imposición adicional. Los individuos no residentes son gravados
sobre su ingreso y ganancias de capital originados en el Reino Unido, generados por la no
existencia de una propiedad residencial en el Reino Unido. Para más información, consulte
el sitio web de la HMRC.

Tasa estándar

Tasa de impuesto sobre rentas Tipo progresivo hasta 45%

0 - 11.000 GBP (con acceso a subsidio personal estándar) 0%

11.001 - 43.000 GBP 20%

43.001 - 150.000 GBP 40%

Más de 150.000 GBP 45%

Contribuyentes escoceses Los contribuyentes escoceses pagan 10% del ingre


de Escocia.

Deducciones y créditos de impuestos

La desgravación fiscal puede ser solicitada por subsudios personales (el monto normal es
de 10.600 GBP para el año fiscal 2015-2016), gastos de trabajo o negocios y ciertas
contribuciones de pensiones, donaciones caritativas, pagos de mantenimiento y tiempo
trabajando en una embarcación fuera del Reino Unido. Consultar el sitio web gov.uk para
más información.
Regímenes especiales para los expatriados
Las prestaciones a expatriados están incluidas en el ingreso imponible, pero pueden
acceder a exenciones en el caso de ciertos gastos de subsistencia. Consulte la web de la
Agencia Tributariapara más detalles.
Impuesto sobre el patrimonio
Un impuesto sobre las herencias (IHT) generalmente se aplica tras el fallecimiento, al valor
de la propiedad y las donaciones hechas durante los siete años previos, sujetos a una
reducción de las mismas entre los cuatro y los siete años antes del fallecimiento. Cuando
los activos tienen un valor superior a 325.000 GBP, el IHT es de 40%. Cuando más de
10% de los activos son distribuidos a la caridad, un IHT reducido de 36% puede aplicarse
al patrimonio restante.

El Reino Unido no recauda un impuesto sobre el patrimonio.

Un impuesto a la propiedad inmobiliaria se aplica a la ocupación de la propiedad familiar,


según el valor del patrimonio al 1 de abril de 1991 en Inglaterra y Escocia, y al 1 de abril de
2003 en Gales. Si es ocupada por un adulto soltero, el impuesto es reducido en 25%. El
derecho de timbre, el impuesto a la propiedad, o el impuesto a la transacción de tierra o
inmuebles se aplican a la compra de propiedad. Para más informacion, consulte la
guía Deloitte.
Convenios para evitar la doble imposición
Países con los cuales se ha firmado una convención para evitar la doble imposición

Acuerdos fiscales del Reino Unido


Impuestos retenidos
Dividendos: 0%, Intereses: 20% para los no residentes; Royalties: 20% (los tipos pueden
ser inferiores en caso de un acuerdo fiscal).
Acuerdos bilaterales
El 21 de octubre de 1975 fue firmado en Londres, un convenio entre Reino Unido y España
para evitar la doble imposición y prevenir la evasión fiscal en materia de impuestos sobre la
renta y sobre el patrimonio.
Dividentos: 0%, Intereses: 12%, Cánones: 10%
Consulte el convenio en castellano.

Fuentes de información fiscal


Autoridades fiscales

Agencia Tributaria (Ingresos y Aduanas) (HM Revenue & Customs, HMRC), Agencia
Tributaria (Ingresos y Aduanas) (HM Revenue & Customs, HMRC)
Ministerio de Hacienda, Ministerio de Hacienda
Otras fuentes útiles
Comercio e Inversión en el Reino Unido
Información fiscal sobre el Reino Unido
Las guías
Guía fiscal Deloitte
Guía Fiscal PKF 2015

COMPARACIÓN ENTRE LOS IMPUESTOS DIRECTOS Y LOS INDIRECTOS

1.¿Cuáles son preferibles, los impuestos directos o los indirectos? Esta cuestión, siempre
interesante, se ha discutido mucho en estos últimos tiempos. En Inglaterra, desde hace
mucho tiempo, el sentimiento popular se inclina por los impuestos indirectos, o más bien
deberíamos decir contra los impuestos directos. Este sentimiento no se basa en los
merecimientos del caso, sino que es más bien de una naturaleza pueril. Lo que al inglés le
desagrada no es tanto el pago como el acto de pagar. Le desagrada ver la cara del
recaudador de contribuciones y estar sujeto a sus demandas perentorias. Puede ser,
también, que hasta cierto punto crea que el dinero que tiene que desembolsar directamente
es el único que paga. No puede negarse que un impuesto de un chelín por libra de té o de
dos chelines por botella de vino hace subir el precio de cada libra de té. y de cada botella de
vino que consume en esa cantidad y aun más; es una realidad, se intenta que lo sea y el
inglés se da cuenta de ella; pero esto casi no hace ninguna impresión sobre sus
sentimientos prácticos y sus asociaciones de ideas, lo que ilustra la diferencia que existe
entre lo que sólo se sabe que es cierto y lo que se siente como cierto. La impopularidad de
los impuestos directos, contrastando con la facilidad con que la gente se deja engañar en
los precios de las mercancías al hacer sus compras, ha hecho nacer en muchas personas
de las que aman el progreso una manera de pensar por completo opuesta a la anterior.
Afirman que precisamente por el hecho de ser los impuestos directos más desagradables,
son preferibles. Bajo ese sistema, cada uno sabe lo que en realidad paga de impuestos, y si
vota a favor de una guerra o de cualquier lujo nacional costoso, lo hace con los ojos
abiertos y sabiendo cuánto le va a costar. Si todos los impuestos fueran directos se
echarían de ver en mucho mayor grado que ahora y habría una seguridad que ahora no hay
en los gastos públicos.

Aunque este argumento no carece de fuerza, es probable que ésta vaya disminuyendo a
medida que pasa el tiempo. Cada día se comprende mejor el verdadero significado de los
impuestos indirectos y son más familiares sus efectos; y no puede negarse que uno de los
cambios que se operan en las tendencias de la mente humana es el estimar cada día más las
cosas con arreglo al valor que se les calcula y menos según sus efectos secundarios. La
simple distinción entre pagar el impuesto directamente a un recaudador y el entregar la
misma suma por intermedio del comerciante de té o del almacenista de vinos no hace ya
que el impuesto en sí sea aborrecido o que se acepte pasivamente. Pero, además, mientras
subsista esa flaqueza en la mente opular, el argumento que sobre ella se base reconoce en
parte el otro lado de la cuestión. Si nuestro ingreso público actual de unos setenta millones
de libras (1862) tuviera que recaudarse mediante impuestos directos, es seguro que se
produciría un gran descontento al tener que pagar tanto, pero mientras la inteligencia
humana siga siendo tan poco razonable como se deduce de semejante cambio de
sentimientos por una causa tan poco importante, una aversión tan grande por los impuestos
puede no ser del todo buena. De los setenta millones en cuestión, casi treinta se emplean en
cumplir una obligación ineludible: la de pagar a aquellos que prestaron sus bienes al Estado
y que éste gastó, y mientras tal deuda esté sin pagar, el descontento que se produciría al ver
la enormidad de los impuestos directos llevaría aparejado el peligro de que se faltara al
compromiso contraído con los que dieron su dinero, como ha ocurrido en algunos Estados
de América y continúa ocurriendo aún por la misma causa. Cierto que aquella parte del
gasto público que se dedica al sostenimiento de las instituciones civiles y militares (esto es,
todos excepto los intereses sobre la deuda nacional) ofrece en muchos de sus detalles
amplias posibilidades de reducirlo. Pero mientras una buena parte de las rentas públicas se
malgasta so pretexto de servicios públicos, se dejan sin hacer tantas cosas de verdadera
importancia para un buen gobierno que lo que se pueda economizar suprimiendo gastos
inútiles se precisará con urgencia para otros de gran utilidad. Ya se trate de la educación, de
una administración de justicia más accesible y eficiente, de reformas de cualquiera clase
que, como la emancipación de los esclavos, precisan se compense a los intereses
particulares; ya de algo que es tan importante como cualquiera de esos objetivos: el
sostenimiento de un cuerpo de funcionarios públicos capaces y educados que puedan
conducir los asuntos administrativos y legislativos de la nación mejor que hoy; cualquiera
de esos objetivos entraña un gasto considerable, y muchos de ellos no se han realizado por
la aversión que existía a recurrir al parlamento para que concediera el dinero necesario,
aunque (además de que los medios de que se dispone en la actualidad serían suficientes si
se aplicaran como es debido) el costo se reembolsaría, quizás al céntuplo, en el simple
provecho pecuniario que se derivaría para la comunidad en general. Si la aversión pública
por los impuestos sufriera el aumento que es de esperar se produciría como una
consecuencia de la generalización de los impuestos directos, las clases que se benefician
por la mala aplicación que se da al dinero público tal vez consiguieran salvar aquellos
gastos en los cuales se benefician, a expensas de aquellos que sólo benefician al público.

No obstante, se defiende algunas veces a los impuestos indirectos en una forma que debe
rechazarse de plano por basarse en una falacia. Se dice con frecuencia que los impuestos
sobre mercancias son menos onerosos que los demás, porque el contribuyente puede
escapar a ellos dejando de usar la mercancía gravada por el impuesto en cuestión. Cierto
que puede conseguirlo si el objetivo que persigue es privar al gobierno del dinero, pero lo
hace a costa de su comodidad, que es lo que podría hacer también en caso de un impuesto
directo. Supongamos que se establece un impuesto sobre el vino, que sea tal que haga
subir en cinco libras el precio del vino que consume esa supuesta persona en un año.
Según los que se apoyan en la falacia en cuestión, esta persona no tiene que hacer otra
cosa que reducir en cinco libras su consumo de vino para escapar a esa carga. Cierto, pero
si esas cinco libras en lugar de imponerlas sobre el vino se le hubieran exigido bajo la forma
de un impuesto sobre el ingreso, podía también, gastando cinco libras menos en vino,
ahorrar el importe del impuesto; de modo que la diferencia entre ambos casos es ilusoria. Si
el gobierno le saca al contribuyente cinco libras por año en una u otra forma, esa cantidad
exacta tendrá que sustraerse de su consumo para que su situación continúe igual que
antes, y el sacrificio que se le impone es el mismo cualquiera que sea la forma en que se le
exija.

Por otra parte, una ventaja a favor de los impuestos indirectos es que lo que exigen al
contribuyente lo toman en el momento y en la forma que es probable sean los que más le
convengan. Lo paga precisamente cuando tiene que hacer un pago; por consiguiente, no le
causa ninguna molestia adicional, ni (a menos que el impuesto sea sobre cosas necesarias)
ningún inconveniente aparte del que es inseparable del hecho de tener que pagar su
importe. Puede también, excepto en el caso de artículos que se estropeen, elegir el
momento que mejor le convenga para aprovisionarse de la mercancía, y por consiguiente
para pagar el impuesto. Cierto que el productor o el comerciante que anticipa esos
impuestos sufre a veces incovenientes; pero en el caso de géneros importados esos
inconvenientes se reducen al mínimo con lo que se llama el sistema de almacenamiento,
bajo el cual, en lugar de pagar el impuesto al importar la mercancía, sólo precisa hacerlo al
retirarla para el consumo, lo que rara vez se hace hasta que se ha encontrado o se espera
encontrar en seguida un comprador.

Sin embargo, la principal objeción que puede hacerse a recaudar la totalidad o la mayor
parte de las rentas públicas por medio de impuestos directos es la imposibilidad de hacer
un amillaramiento justo sin una franca cooperación por parte de los contribuyentes, que no
es de esperar en el bajo estado actual de la moral pública. En el caso del impuesto sobre el
ingreso hemos visto ya que, a menos que sea posible eximir del mismo a los ahorros, es
imposible prorratear con alguna justicia el que corresponde a aquellos que derivan sus
ingresos del ejercicio de profesiones liberales o de negocios, y esto lo admiten en realidad
casi todos los que defienden los impuestos directos, y me temo que éstos suelen salvar la
dificultad dejando a esas clases libres del impuesto y limitando su proyectado impuesto
sobre el ingreso a la propiedad acumulada, en cuya forma no hay duda que tiene el gran
mérito de ser una forma muy fácil de saqueo. Pero basta con lo que antes se ha dicho para
condenar este expediente. Hemos visto, no obstante, que un impuesto sobre las casas es
una forma de gravamen directo que no está expuesta a las mismas objeciones que un
impuesto sobre el ingreso, y en realidad a tan pocas objeciones de cualquier clase como
todos nuestros impuestos indirectos. Pero sería imposible recaudar con sólo un impuesto
sobre las casas la mayor parte de las rentas públicas de la Gran Bretaña, sin que se
produjera un hacinamiento de la población que sería inadmisible, ya que todos procurarían
restringir sus alojamientos para pagar el menor impuesto. Además, incluso un impuesto
sobre las casas presenta desigualdades y, por consiguiente, injusticias; ningún impuesto se
halla libre de ellas y no es ni justo ni político hacer que todas las desigualdades recaigan
sobre las mismas personas, tratando de conseguir por medio de un impuesto la totalidad o
la mayor parte de los gastos públicos. Como una buena parte de los impuestos locales del
país están ya bajo la forma de una contribución sobre las casas, es probable que por este
medio no pudieran recaudarse con ganancia más allá de diez millones de libras para fines
generales del Estado.

Según hemos visto, podría obtenerse sin injusticia una cierta cantidad de entradas por
medio de un impuesto especial sobre la renta. Además del impuesto existente sobre la tierra
y de un equivalente para sustituir los ingresos que ahora se obtienen con los derechos de
timbre por el traspaso de la misma, he afirmado que dentro de más o menos tiempo podría
hacerse que el Estado participara, por medio de algún impuesto especial, en el incremento
progresivo de las rentas de los terratenientes por causas naturales. Hemos visto también
que los legados y las herencias deberían sujetarse a fuertes impuestos que podrían producir
ingresos considerables. Con esos impuestos y con uno sobre las casas de importe
adecuado, creo que habríamos llegado a los límites prudentes de los impuestos directos,
salvo en caso de urgencia nacional que justificaría que el gobierno no tuviera en cuenta la
desigualdad y la injusticia que en último término pueden encontrarse como inseparables de
un impuesto sobre el ingreso. El resto de las rentas públicas habría que obtenerlo por medio
de impuestos sobre el consumo y la cuestión es saber cuáles de ellos son menos
censurables.

2. Existen algunos impuestos indirectos que decididamente deben excluirse. Los impuestos
sobre mercancías, con el fin de obtener ingresos para el erario público, no han de actuar
como derechos de protección, sino deben recaudarse con imparcialidad sobre las diferentes
formas en que el artículo puede obtenerse, tanto si se produce en el mismo país como si se
importa. También deben excluirse todos los impuestos sobre las cosas necesarias para la
vida o sobre los instrumentos o los materiales empleados para producir las cosas
necesarias. Siempre se corre el peligro de que esos impuestos graven lo que debería quedar
libre de toda contribución, esto e los ingresos escasamente suficientes para una vida
saludable; y en el caso más favorable, a saber, cuando suben los salarios para compensar a
los trabajadores del impuesto, éste actúa como un impuesto especial sobre la ganancia que
es a la vez injusto y perjudicial para la riqueza nacional (1). Lo que resta son impuestos
sobre lujos. Y éstos tienen algunas propiedades que los hacen muy recomendables. En
primer lugar, no pueden nunca afectar a aquellos cuyos ingresos se gastan en su totalidad
en artículos de primera necesidad; mientras que alcanzan a los que gastan en
superftuidades lo que precisarían para cosas necesarias. En segundo lugar, en algunos
casos actúan como una especie de ley suntuaria de utilidad efectiva y la única efectiva.
Rechazo toda clase de ascetismo y de ninguna manera quisiera ver que se desalentara, por
la ley o por la opinión, la satisfacción de cualquier gusto (compatible con los medios y las
obligaciones de la persona que lo tiene) que se busca por la atracción que la cosa en sí
ejerce y por el goce sincero de la misma; pero una gran parte de los gastos de las clases
alta y media de la mayor parte de los países, y desde luego la parte mayor de los gastos de
las del nuestro, no se hacen por el placer que puedan producir las cosas en las cuales se
gasta el dinero, sino por un falso respeto de la opinión ajena y por la idea de que se espera
de ellas determinados gastos como una secuela de la situación que ocupan en el mundo; y
no puedo por menos de creer que los gastos de esta clase son los más indicados para
gravarse con impuestos. Si éstos hacen que se restrinjan aquéllos, se hace algún bien, y si
no se consigue este efecto no se hace ningún mal; puesto que los impuestos que recaen
sobre cosas que se desean y se adquieren por motivos como los que hemos indicado a
nadie perjudican. Cuando una cosa se compra no por su utilidad, sino por su alto costo, la
baratura no es una recomendación. Como observa Sismondi, la consecuencia del
abaratamiento de los artículos de lujo no es que se gaste menos en ellos, sino que los
compradores sustituyan el artículo abaratado por algún otro que es más costoso o una
calidad más costosa del mismo; y como la calidad inferior respondía igualmente bien a la
finalidad vanidosa que indicaba su compra cuando era más cara, resulta que un impuesto
sobre el artículo en cuestión no lo paga nadie: es una creación de ingresos en el erario
público por la que nadie sale perdiendo (2).

3. Para reducir en lo posible los inconvenientes y aumentar las ventajas anexas a los
impuestos sobre mercancías se sugieren por sí mismas las siguientes reglas de carácter
práctico:

1° Procurarse ingresos tan elevados como sea posible por medio de aquellos artículos de
lujo que se compran por vanidad y no por el goce real que procuran, tales como las
calidades más costosas de todos los artículos de uso personal o de adorno.
2° Siempre que sea posible, debe exigirse el impuesto no del productor, sino directamente
del consumidor, ya que si se le exige al primero hace subir siempre el precio más de lo que
importa el impuesto y con frecuencia mucho más. La mayoría de los impuestos menudos
que se recaudan en este país se recomiendan por las dos consideraciones que acabamos
de exponer. Pero por lo que respecta a los caballos y los carruajes, como hay muchas
personas para las cuales aquéllos no son tanto un lujo como algo necesario, el impuesto
pagado por los que sólo tienen un caballo o un carruaje, sobre todo si son de los más
baratos, debe ser bajo; mientras que el impuesto debe subir con rapidez con el número de
caballos y de carruajes y con el costo de los mismos.

3° Pero como los Únicos impuestos indirectos que producen grandes ingresos son aquellos
que recaen sobre artículos de consumo general y como, por lo tanto, es necesario gravar
con impuestos algunos artículos que son un lujo real y efectivo, esto es, cosas que por sí
mismas producen placer y que se estiman por esta razón y no por su costo, esos impuestos
deben ajustarse, de ser posible, de tal manera que recaigan con intensidad proporcional
sobre las personas que disponen de pequenos, de medianos y de grandes ingresos. Esto no
es nada fácil, ya que las cosas sobre las cuales pesan los impuestos más productivos son
las que consumen los miembros más pobres de la comunidad en mayor proporción que los
ricos. Es casi imposible gravar el té, el café, el azúcar, el tabaco, las bebidas fermentadas,
sin que los pobres soporten más de la parte que les corresponde de la carga. Algo podría
conseguirse haciendo que el impuesto sobre las calidades superiores, que son las que usan
los consumidores ricos, sea mucho más elevado en proporción al valor (en lugar de ser
mucho más bajo. que es lo que ocurre casi siempre en el sistema fiscal empleado en la
actualidad (1848) en Inglaterra); pero, según se dice, no sé si con fundamento o sin él, en
algunos casos la dificultad de ajustar el impuesto al valor de la mercancía de manera que se
impida la evasión al impuesto, es insuperable; de modo que se juzga necesario gravar con
un impuesto fijo a todas las calidades por igual, lo que es una evidente injusticia para las
clases más pobres de contribuyentes, a menos que se les compense con la existencia de
otros impuestos de los cuales se hallen exentos, como sucede con el actual impuesto sobre
el ingreso.

4° En la medida en que sea compatible con las reglas anteriores, los impuestos deberán
concentrarse sobre unos cuantos artículos más bien que difundirlos entre muchos, con
objeto de que los gastos de recaudación sean pequeños y que se moleste al menor número
posible de empleos.

5° Entre los artículos de lujo de consumo general deben gravarse con preferencia las
bebidas alcohólicas, porque éstas, aunque por sí mismas sean un placer tan legítimo como
otro cualquiera, son los que es más probable que se usen con exceso, de manera que es
mejor que la restricción de su consumo, que se derivará, como es natural, de la imposición
del gravamen, recaiga en ellos y no en otras cosas.

6° En tanto que otras consideraciones lo permitan, los impuestos deberán limitarse a los
artículos importados, ya que éstos pueden gravarse sin producir tantas molestias, ni efectos
perniciosos, como cuando el impuesto afecta al campo o al taller. Los derechos de aduanas
son, caeteris paribus, mucho menos censurables que los impuestos al consumo, pero han
de gravar sólo aquellas cosas que no pueden producirse o que no se producirían en el país,
o de lo contrario tiene que prohibirse su producción (como sucede en Inglaterra con el
tabaco), o someterse a un impuesto de consumo equivalente.

7° Ningun impuesto debe ser tan alto que ofrezca un motivo tan fuerte para escapar a él que
sea imposible contrarrestarlo por los medios ordinarios, y sobre todo nunca debe ser el
gravamen que se imponga sobre una mercancía tan alto que dé lugar a una clase de
profesiones ilegales, tales como contrabandistas, productores ilícitos de licores y otras por
el estilo.
Después de las reformas fiscales de Mr. Gladstone, se han suprimido todos los impuestos al
consumo y los derechos de aduana que existían en este país y que no deberían figurar en
un buen sistema fiscal. Entre ellos se encuentran todos los impuestos sobre artículos
alimenticios, tanto para los seres humanos como para el ganado; los que gravaban la
madera para la edificación, que encarecían la construcción de alojamientos, que son una de
las cosas necesarias para la vida; todos los impuestos sobre metales y aparatos hechos con
los mismos; los impuestos sobre el jabón, que es necesario para la limpieza, y sobre el
sebo, materia prima para la fabricación de ese y otros productos necesarios; el impuesto
sobre el papel, instrumento indispensable para casi todos los negocios y para la enseñanza.
Los impuestos que ahora producen casi todos los ingresos de aduanas y de consumo; los
que gravan el azúcar, el café, el té, el vino, la cerveza, los licores, son de por sí, cuando se
necesitan fuertes ingresos, impuestos muy apropiados; pero en la actualidad resultan muy
injustos por el hecho de que gravan en forma despropordonada a las clases más pobres, y
algunos de ellos (los que pesan sobre el tabaco y los licores) son tan altos que hacen que
se practique bastante el contrabando. Es probable que pudieran disminuirse bastante esos
impuestos sin que se redujera en forma apreciable la recaudación. No me ocuparía de
indicar cuál será la manera más ventajosa de gravar los artículos finos manufacturados que
consumen los ricos; esto deben decidirlo aquellos que disponen de los necesarios
conocimientos prácticos. La dificultad estará en hacerlo sin obstruir en forma inadmisible la
producción. En países que, como los Estados Unidos, importan la mayor parte de los
artículos finos que consumen, el asunto no es difícil e, incluso cuando lo que se importa es
la materia prima, puede gravarse ésta, sobre todo las calidades empleadas en los tejidos
usados por la clase más rica de consumidores. Así, en Inglaterra, un derecho de aduanas
elevado sobre la seda bruta sería compatible con el principio, y quizás fuera también posible
gravar el hilo de algodón o lino de calidad superior, ya fuera producido en el país o
importado.

INTRODUCCIÓN

Un impuesto es un tributo o gravamen que exige un Estado para cumplir con diversos fines. Su
antigüedad es tal que incluso ya se los mencionaba en el código de Hamurabi.

Muchos afirman que la finalidad de un impuesto es la redistribución de los recursos, pero haciendo
un análisis histórico vemos que el impuesto ha tenido múltiples facetas; ha sido desde una fuente
de recursos para casos de emergencias (dígase guerras) hasta formar parte esencial de los
“modos de acumulación tributario” en el cual un Estado lograba acumular recursos a través del
cobro de tributos a sus vasallos o a otros Estados conquistados.

Asimismo los impuestos han sido motivo de guerras, revoluciones y demás conmociones sociales
llevando al deterioro de sistemas económicos en imperios como el egipcio o el romano.

Debido a esta naturaleza multifacética de los impuestos, vemos que aquellos dirigidos hacia el
ingreso o la propiedad (directos) son mucho más recientes que los dirigidos hacia el consumo
(indirectos).

Por ejemplo, en el caso del impuesto a la renta los primeros antecedentes aparecen en Francia
(1793), Gran Bretaña (1799), Suiza (1840), Austria (1849) e Italia (1864). En España no aparece
hasta 1975, en los tiempos de la transición política del régimen autocrático franquista a la
democracia constitucional. En los Estados Unidos los impuestos sobre ingresos eran
inconstitucionales hasta la enmienda 16 realizada allá por 1913 .

En el caso de los impuestos sobre el consumo, se aplicaron inicialmente al parecer por Inglaterra
en 1643. Se trataba de una medida provisional tendente a paliar las dificultades financieras
transitorias del gobierno. Sin embargo, el éxito de la medida, debido a los elevados ingresos que
se obtuvieron, hizo que se mantuviera, pasando a ser una medida permanente, que pronto se fue
extendiendo por otros países de Europa y del resto del mundo.

DISTINCIÓN ENTRE IMPUESTOS

Nos enfocaremos en la siguiente división de los impuestos:

• Los impuestos directos que van dirigidos a aquellas personas o empresas que generan ingresos,
con un cierto carácter progresivo en la medida de que quien más ingresos posee más paga.

• Los impuestos indirectos que se dirigen a consumidores, con una tendencia regresiva ya que los
impuestos que pagan los pobres terminan siendo una proporción mayor de sus ingresos que los
que pagan los ricos.

COMPARACIÓN ENTRE IMPUESTOS

Ahora vamos a presentar algunos ideas que nos permitirán ver los pro y contra de cada tipo de
impuesto.

Empecemos con un hecho prácticamente estructural: al parecer cuanto más desarrollada sea la
economía de un país, mayor será la proporción de sus ingresos provenientes de los impuestos
directos (En el caso de EEUU para el 2001, el 55% de sus ingresos fiscales provenían de
impuestos directos).

Mientras tanto los impuestos indirectos son muy importantes como fuente de ingresos de los
países subdesarrollados ya que, normalmente, son más fáciles de recaudar que los impuestos
sobre la renta.

De hecho, a diferencia de la Unión Europea que en 1950 creó un impuesto indirecto común de
carácter amplio (Impuesto al Valor Agregado: 4% bienes de primera necesidad, 7% vivienda y el
normal del 16% ), en los países subdesarrollados, existe un importante sector informal dentro de la
economía al cual no se le logra cobrar este IVA.

Esencialmente, el impuesto en conjunto con otras trabas motiva a muchos a mantenerse dentro del
sector informal, dejando un disminuido sector formal como el único que paga IVA y que en
ocasiones, por su escasa productividad en los países subdesarrollados, se cobra sin una
“producción de base” que se contraponga al impuesto.

“La teoría económica sólo apoya el IVA si no es necesario preocuparse por la distribución y si se
puede imponer a todas las mercancías. No es necesario tener un doctorado en economía para
reconocer que en desarrollo no pueden gravarse todos los productos (carácter amplio). Además, la
equidad debe ser una preocupación” .

Desde un punto de vista de la redistribución del plusvalor generado por los asalariados y las
finalidades que el Estado le da a esos recursos, hay quienes afirman que “prácticamente, sobre la
base de los impuestos indirectos, el militarismo actúa en ambos sentidos: a costa de las
condiciones de vida de la clase trabajadora, asegura tanto el sostenimiento del órgano de
dominación capitalista –el ejército permanente- como la creación de un magnífico campo de
acumulación para el capital” .

Pero la cuestión va más allá de los impuestos indirectos, pues de forma general “una supresión de
tales o cuales impuestos no modifica en nada la cantidad de plusvalor que el capitalista industrial
succiona, en primera instancia, del obrero. Solo modifica la proporción en que el plusvalor va a
parar a su propio bolsillo o en que se lo reparte forzosamente con terceros” .

Pero incluso antes que Marx, personas como Ricardo ya enunciaban que un impuesto sobre
salarios es, en definitiva, una tributación sobre las utilidades; un impuesto sobre los artículos
necesarios es, en parte, un impuesto sobre las utilidades y en parte un impuesto sobre los
consumidores ricos . Esta afirmación la realiza en la medida de que, según él, los impuestos son
pagados en última instancia por los beneficios (plusvalor), ya que si se establece un impuesto
sobre el consumo de los asalariados, se tiende a presionar a la larga a una suba compensatoria de
salarios en dinero, reduciendo la tasa de ganancia del capital, además de que el capitalista se
vería afectado por los impuestos sobre el consumo en lo que a compra de materiales se refiere.

Entonces, la capacidad de cobrar impuestos de un país depende enormemente del desarrollo de


las fuerzas productivas, así, es mucho más fácil obtener ingresos por impuestos de las empresas si
existe un sector productivo sólido, a diferencia de los sectores informales que existen en
economías subdesarrolladas.

Además, sea que hablemos de un impuesto directo o indirecto, la forma como funcionan es a
través de la succión de valor, por lo que la única manera en que se pueda hablar de equidad en el
cobro de impuestos es por medio de una redistribución de la riqueza que implique, si se quiere, un
reconocimiento de las necesidades más urgentes de la población (antes que solo compensar a los
asalariados).

Pero en términos prácticos, no se puede pensar en eliminar los impuestos indirectos, ya que
primero el Estado perdería una importante cantidad de ingresos (en especial si es subdesarrollado)
y es injusto que personas que han obtenido grandes ingresos a través de la apropiación de la
riqueza creada por otros no paguen impuestos sobre consumos suntuarios.

Entonces, respondiendo la pregunta de qué impuesto es más equitativo, en términos ideales no


debería existir impuestos (pues de hecho no debería existir gente que necesite de asistencia
gubernamental), en términos casi reales el más equitativo es el directo pero en términos prácticos,
lo más equitativo es el impuesto directo y la aplicación de impuestos indirectos a sectores
específicos de la sociedad que tienen grandes niveles de consumo y de realización de la
producción.

Respecto a la inquietud de qué impuesto es el que más debería usarse en un país, podemos
concluir primero que la respuesta depende de las condiciones materiales objetivas que vive el país,
pues suena bien la aplicación de impuestos directos y abolición de indirectos, pero en el caso del
subdesarrollo, una medida de este tipo sería “suicidio”, pues el sector informal tiene fuerte presión
sobre el sector empresarial regular, por lo que gran parte de los ingresos estatales provienen de
pagos de aquel sector.

Entonces lo que queda es concluir que a corto plazo se deben aplicar los dos tipos de impuesto, y
mediante programas progresivos de mejoramiento del sector productivo, empezar a ampliar la base
de empresas que paguen impuestos y según vaya avanzando este proceso ir reduciendo los
impuestos indirectos, pero dando prioridad a aquellos productos que son consumidos en especial
por sectores de baja capacidad adquisitiva.

Para terminar, cualquier tipo de análisis a los tributos que cobra un Estado debe estar ligado a las
condiciones materiales que vive la población, así notamos que originariamente el impuesto no
buscaba redistribuir recursos (y en la práctica no redistribuye incluso hasta el día de hoy, llegando
al extremo de que las personas no pagan impuestos porque no ven una retribución), así que el
primer paso para un cambio en la finalidad real de los impuestos solo podrá darse si viene
acompañado de una reestructuración del sistema económico.
La organización territorial de Inglaterra es un sistema complejo de administración que siempre
se desarrolla. Históricamente, la cúspide de la jerarquía administrativa en Inglaterra era
los condados. Estas divisiones habían emergido de un espectro grande de viejas unidades
territoriales inglesas. Antes de la unificación, eran algunos reinos, como Essex y Sussex; Ducados,
como Yorkshire, Cornualles y Lancashireo, simplemente, áreas de tierra donadas a algún noble,
como es el caso de Berkshire.
Estos condados aún existen en su forma original, o casi, formando los condados tradicionales de
Inglaterra. En muchos locales, sin embargo, fueron profundamente cambiados o completamente
abolidos como municipios administrativos, debido a varios factores.
Desde el final del siglo XIX, ocurrió una serie de reorganizaciones del gobierno local. La solución a
la aparición de grandes áreas urbanas era la creación de grandes condados metropolitanos,
centrados en las ciudades (por ejemplo, Greater Manchester). En los años 90, una reforma del
gobierno local comenzó la creación de autoridades unitarias, donde diversos distritos obtuvieron el
nivel administrativo de condado. Hoy en día, existe confusión entre los condados
ceremoniales (que no forman siempre una unidad administrativa) y los condados metropolitanas y
no-metropolitanas.
Actualmente, Inglaterra se divide en cuatro niveles de subdivisiones
administrativas: regiones, condados, distritos y parroquias.
A primera vista, Inglaterra se divide en nueve regiones. Las regiones de Inglaterra son el más alto
nivel de las Subdivisiones de Inglaterra. Las regiones son nueve:

1. Gran Londres, Greater London;


2. Sudeste de Inglaterra, South East England;
3. Sudoeste de Inglaterra, South West England;
4. Midlands del Oeste, West Midlands;
5. Noroeste de Inglaterra, North West England;
6. Nordeste de Inglaterra, North East England;
7. Yorkshire y Humber, Yorkshire and the Humber;
8. Midlands Oriental, East Midlands;
9. Este de Inglaterra, East of England.

10. Nivel de condado[editar]


11. Véase también: Condados de Inglaterra
12. Inglaterra está dividida en 83 condados, además del Gran Londres y las Islas Scilly.
Existen 49 condados de único distrito y 34 conformados por varios distritos. Por estatus,
están divididos en 6 condados metropolitanos que cubren las principales áreas
metropolitanas del país y 77 condados no metropolitanos.
13. Existen a su vez los condados ceremoniales, 48 regiones político-administrativas,
gobernada cada una de ellas por un Lord-Lieutenant, representante de la Reina de
Inglaterra en la región.
14. Nivel de distrito[editar]
15. Véase también: Distritos de Inglaterra
16. Los distritos de Inglaterra son el tercer nivel de las subdivisiones de Inglaterra usado
para los propósitos del gobierno local. Como la estructura del gobierno local
en Inglaterra no es uniforme, actualmente hay cuatro tipos principales de subdivisiones de
distritos. En total existen 326 distritos a partir a 32 municipios de Londres, 36 distritos
metropolitanos, 201 distritos no metropolitanos, 55 autoridades unitarias, además de la City
de Londres y de las Islas Sorlingas, los cuales también son considerados como distritos.
17. Nivel de parroquia[editar]
18. La parroquia civil es la unidad más local del gobierno en Inglaterra.

You might also like