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República de Colombia

Ministerio de Gobierno
1983

FUERO INDIGENA

Disposiciones Legales del Orden Nacional, Departamental


y Comisaria!- Jurisprudencia y Conceptos.

1
J
MINISTERIO DE GOBIERNO

DIRECCION GENERAL DE INTEGRACION Y DESARROLLO


DE LA COMUNIDAD

DIVISION DE ASUNTOS INDIGENAS

FUERO INDIGENA

Disposiciones Legales del Orden Nacional Departamental y


Comisarial-Jurisprudencia y Conceptos

Recopilación y Textos:

ROQUE ROLDAN ORTEGA


Jefe de División Asuntos Indígenas

ALFONSO FLOREZ ESP ARRAGOZA


Asesor

EDITORIAL PRESENCIA
Bogotá-Colombia
1983

j
''El gobierno que se dé la República debe estar fundado sobre
nuestras costumbres, nuestras inclinaciones, y últimamente,
sobre nuestro origen y sobre nuestra historia''. BOLIVAR, 1828.

''... No debemos seguir siendo el país sin historia, la tabula rasa,


el campo de transplantes y aclimatamientos forzados de las
soluciones elaboradas bajo soles extraños al nuestro . .. Con esa
convicción, el Gobierno trabajará con las comunidades indígenas y
para las comunidades indígenas, dentro de un marco de respeto
por sus organizaciones, instituciones, autoridades y valores''.

BELISARIO BETANCUR-1982

L
INDICE DE MATERIAS

Págs.

Presentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15 - 16

Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17 - 32

l. Breve Bosquejo Histórico de la Legislación Indígena:


Definiciones - Legislación Indígena y Fuero Indígena -
Antecedentes - El Derecho Indiano - Los Cabildos -
Etapas Históricas: Etapa Reduccionista - Etapa Inte-
gracionista - Etapa de la Autonomía y del Etnode-
sarrollo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17 - 27

2. Limitaciones que se Presentan para la Aplicación de la


Legislación Indígena: La Tierra - La Salud - La Educa-
ción - La Disfuncionalidad de la Lógica Jurídica Occi-
dental - El Fuero Indígena Descansa en la Comunidad
- El Derech:-) de la Sociedad Mayoritaria tiene c.-:-mo
Sustrato la Propiedad Privada - La Insuficiencia de la
Legislación Indígena. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27- 29

3. Necesidad de un Nuevo Enfoque en el Entendimiento


y Aplicación del Derecho o Fuero Indígena: Un Con-
cepto preciso del Derecho o Fuero Indígena - El Con-
trol Social - El Pronunciamiento de Nuestros Tribuna-
les Jurisdiccionales- Los Usos, Costumbres y Métodos
de Control Social y el Régimen Constitucional - Prin-
cipios Básicos del Derecho Indígena - El Pensamiento
del Presidente Betancur y el Nuevo Derecho Indígena. 29- 32

l. Leyes, Decretos y Resoluciones del Orden Nacional. . . . 33- 143


Ver Indice Cronológico.

11. Decretos y Reglamentos Departamentales y Comisariales 145- 210


Ver Indice Cronológico.

111. Convenios y Convenciones Internacionales. . . . . . . . . . . 211 - 265

IV. Jurisprudencia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 267- 308

IV.l Organización Social y Jurídica: Las Reducciones


Indígenas - Primera Epoca de la Colonización Espa-
ñola - Las Parcialidades o Comunidades - Los Res-
guardos- Los Cabildos son Entidades Públicas . . . . 267- 278
1

~· INDICE CRONOLOGICO DE NORMAS LEGALES, CONVENIOS,


CONCORDATOS Y CONVENCIONES INTERNACIONALES

Págs.

IV.2 Control Social: El Código Penal no tiene Categorías Leyes, Decretos y Resoluciones del orden nacional
Jurídicas para Confrontar la Situación de los Indí- 35
Decreto de 24 de septiembre de 1810 ................... .
genas - Los Salvajes no son Retrasados Mentales -
Sobre reparto en propiedad de tierras.
El Pensamiento del Hombre Primitivo - La Mente 35
Decreto de julio 5 de 1820 .................. : ......... .
Mágica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 279- 288 Sobre devolución a los naturales de todas las tierras que for-
maban los resguardos.
IV.3 Tierras: Los Resguardos Pertenecen a los Indígenas Ley de 11 de octubre de 1821 ......................... .
- La Cesión de los Resguardos - Comprobación del Sobre extinción de tributos a los indígenas, etc.
Dominio - Municipio de Tolú Viejo - Las Leyes Ley de 30 de julio de 1824 . _ ................ : ......... . 40,
Españolas - Qué se Entiende por "Asuntos de Res- Sobre establecimiento de misiones en algunas tnbus.
guardos" - La Propiedad Colectiva de la Tierra - La Ley de 30 de julio de 1824 ............................ . 43
Calidad de Usufructuarios - Las Reservas o Res- Sobre auxilio de los indígenas.
guardos y las Mejoras en Terrenos Baldíos . . . . . . . 289- 308 Decreto de 18 de septiembre de 1824 ................... . 44
Sobre naciones de indígenas.
V. Conceptos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 311 - 355 Decreto de 29 de abril de 1826 ........................ . 46
Sobre protección a los indígenas.
V.l Organización Social y Jurídica: La Organización Decreto de 11 de julio de 1826 ........................ . 47
Campesina - La Asistencia, la Promoción y la Capa- Sobre civilización de indígenas.
citación - Las Autoridades Tradicionales y los Pro- Resolución de 15 de octubre de 1828 ................... . 49
gramas del Estado - Las Juntas de Acción Comunal Sobre pago por parte de los indios de una contribución
y los Cabildos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 311 - 315 personal.
Ley de marzo 6 de 1832 ........................... · · .. · 55
V.2 Tierras: La Venta de Tierras de Resguardos - El Da reglas para el repartimiento de tierras y abole la contri-
Resguardo de San Andrés de Sotavento - Corpora- bución personal.
ción Desarrollo de Araracuara - Derechos Indígenas Decreto de marzo 29 de 1848 ......................... · 56
Guajiros - La Contribución de Valorización y los Exime del servicio militar a los indígenas.
Resguardos - Obligaciones Alcaldes Municipales - Ley 153 de 1887 ........................ · · · · · · · · · · · · 57
Resguardo Alta y Media Guajira: Reserva Territo- Normas específicas sobre indígenas.
rial - Reserva Forestal - Reservas para Servicios Ley 89 de noviembre 25 de 1890 ....................... . 57
Públicos - Reservas para Explotación Sal Marina- Sobre estatuto indígena.
Las Costas Nacionales y las Playas- Los Recursos Ley 72 de 22 de noviembre de 1892 ............... : : . · . · 64
Turísticos Nacionales - Las Tierras de los Indígenas. 315 - 351 Por la cual se autoriza al Ejecutivo para establecer misiOnes.
Ley 55 de 29 de abril de 1905 ................ · ..... · .. · 65
V.3 Recursos Naturales: Resguardo Indígena de los Se ratifica la venta de tierras de resguardos.
Arhuacos y la Protección de los Recursos Naturales Ley 51 de noviembre 18 de 1911 .......... :, ...... · .. · · . · 66
Renovables - Los Permisos de Explotación Forestal Por la cual se dispone fundar una poblacion en Sibundoy.
y los Resguardos o Reservas Indígenas . . . . . . . . . . 351 - 355
- ,
Decreto 2768 de diciembre 17 de 1975 .................. . 125
Ley 52 de noviembre 13 de 1915 ....................... . 68 Celebración contratos Gobierno Nacional e Iglesia Católica.
Sobre catequización de los indios Motilones. Decreto 126 de 1976 ................................ . 130
Ley 60 de diciembre 9 de 1916 ........................ . 69 Revisa la organización administrativa del Ministerio de Go-
Sobre resguardos de indígenas en tierras baldías. · bierno.
Ley 104 de diciembre 16 de 1919 ...................... . 70 Decreto 2385 de noviembre 9 de 1976 ................... . 131
Se dispone la división de algunos resguardos. Modüica estructura Comisión Permanente.
Ley 32 de octubre 14 de 1920 ......................... . 73 Decreto 2484 de noviembre 26 de 1976 .................. . 132
Reforma Ley 104 de 1919 y hace una cesión al munici- Modüica Decreto 2768 de 197 5 sobre educación.
pio de Yumbo. Decreto 585 de marzo 26 de 1976 ...................... . 133
Ley 38 de noviembre 19 de 1921 ....................... . 74 Reorganiza el Consejo Nacional de Política Indigenista.
Hace aplicable la Ley 104 de 1919 a todas las parcialidades Decreto 1176 de junio 9 de 1976 ....................... . 135
indígenas existentes en el país. Adiciona el Decreto 585 de 1976.
Decreto 1704 de diciembre 13 de 1923 .................. . 75 Decreto 1142 de junio 19 de 1978 ...................... . 136
Asigna funciones al Ministerio de Gobierno. Reglamenta el Decreto 088 de 1976 sobre educación comuni-
Ley 19 de septiembre 23 de 1927 ...................... . 75 dades indígenas.
Sobre división de resguardos indígenas Ley 7 de enero 24 de 1979 ............................ . 138
Ley 111 de octubre 28 de 1931 ........................ . 79 Normas sobre protección a la niñez.
Aclara a la Ley 19 de 1927. Decreto 2388 de septiembre 29 de 1979 ................. . 139
Ley 81 de 1958 (diciembre 31) ........................ . Reglamenta la Ley 7 de 1979.
80 Ley 56 de septiembre lo. de 1981 ...................... . 139
Sobre fomento agropecuario de las narcialidades indígenas.
Ley 28 de 1959 .................................... . Sobre obras públicas de generación eléctrica, acueductos, etc.
86 Resolución 003102 de octubre 15 de 1981 (Mingobierno) ..... 141
Aprueba la Convención para la prevención y sanción del de-
lito de genocidio. Crea Comités Regionales para programas de desarrollo.
Decreto 1634 de 1960 ............................... . 90
Reglamentario de la Ley 81 de 1958. Decretos y Reglamentos Departamentales y Comisariales
Decreto .812 de abrill2 de 1961 ....................... . 93
Reorganiza el Instituto Colombiano de Antropología. Decreto 7 4 de enero lo. de 1898 ....................... . 147
Decreto 2413 de 1961 (septiembre 2) ................... . Desarrolla la Ley 89 de 1890 en el Depto. del Cauca.
94 Ordenanza 47 de julio 14 de 1898 ...................... . 171
Reglamenta la Ley 81 de 1958.
Ley 135 de 1961 (dieciembre 13) ...................... . Relativa a los indígenas del territorio de Páez.
95 Decreto 127 de abril20 de 1911 (Dpto. de Nariño) ......... . 172
Normas sobre Resguardos Indígenas y su fomento.
Ley 31 de julio 19 de 1967 ........................... . 97 Adiciona y reforma Decreto 74 de 1898.
Aprueba el Convenio Internacional del Trabajo relativo a la Decreto 614 de abrill3 de 1918 ....................... . 174
protección e integración de las poblaciones indígenas. Gobierno y Protección Indígenas en el Vaupés.
Decreto 2122 de noviembre 2 de 1971 112 Decreto 162 de abril 28 de 1920 (Dpto. del Cauca) ......... . 175
Crea el Consejo Nacional de Política i~dig~~ist~." .. · · · · .. · · Reformatorio del 7 4 de 1898.
Resolución 626 Bis de julio 2 de 197 3 ................... . Decreto 357 de septiembre lo. de 1920 (Dpto. del Cauca) .... 178
114
Reglamenta expediciones científicas extranjeras de ínrlol~ Reforma algunos artículos del Decreto 162 de 1920.
antro9ológica. .. Ordenanza 10 de marzo 20 de 1922 (Dpto. del Cauca) ...... . 178
Decreto 17 41 de agosto 30 de 197 3 ..................... . 117 División de Resguardos en algunas parcialidades.
Corporaciones y Fundaciones relacionadas con comunidades Decreto 17 8 de junio 22 de 1922 (Dpto. del Cau ca) ........ . 180
indígenas. Desarrolla la Ordenanza 10 de 1922.
Decreto 2811 de 197 4 ............................... . Resolución Ejecutiva de 1924 ......................... . 182
119
Código de Recursos Naturales Renovables. Aprueba la Resolución 26 de 1924 de la Gobernación del
Decreto 088 de enero 22 de 1976 120 Dpto. de Caldas que le da carácter de públicos a los Cabil-
Sobre educación de las comunid¡de~ ·i~dfge'u~~." ... · . · · . · · · dos Indígenas.
Decreto 1520 de julio 25 de 197 5 ...................... . 123 Decreto 331 de septiembre 22 de 1926 (Dpto. del Cauca) 185
Comisi9.n Permanente ordenada en el concordato. Adiciona el Decreto 7 4 de 1898.
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Decreto 435 de noviembre 26 de 1926 (Dpto. del Cauca) ..... 186


Sobre áreas de población en terrenos de resguardos. PRESENTACION
Decreto 452 de diciembre 9 de 1926 (Dpto. del Cauca) ...... . 188
Parcialidades de Topa y La Laguna en la Provincia de Silvia. Desde hace aproximadamente dos décadas, el Estado Colombiano dio
Decteto 700 de noviembre 28 de 1936 (Dpto. del Cauca) ..... 189 comienzo a una revisión de su política de relación con las poblaciones
Areas de población en terrenos Resguardos y Síndicos Cabil- indígenas. No fue fácil, y sí compleja, la iniciación del desarrollo de este
dos. proceso. El régimen legal vigente en este campo, y los métodos de trabajo
Decreto 50 de enero 22 de 1937 (Dpto. del Cauca) ......... . 192 que se habían hecho usuales, el desconocimiento de la estructura social y
Segregaciones y querellas perturbaciones de posesión. los valores propios de estas poblaciones, no eran obstáculos fáciles de
Decreto 35 de febrero lo. de 1941 (Dpto. del Cauca) ....... . 196 salvar. Reconocer errores e injusticias y adoptar líneas de pensamiento y
Prorroga por diez años plazo de la Ley 89 de 1890. de acción coherentes y justas, era, sin embargo, forzoso para prestar la
Decreto 918 de abril 19 de 1944 ....................... . 197 debida colaboración al mejoramiento de las condiciones de vida de nues-
Reglamenta disolución Resguardo Tierradentro. tros indígenas, mucho más en una época en que el avance de las ciencias
Decreto 809 de abril de 1945 .......................... . 198 sociales y políticas ha ido aboliendo prejuicios y discriminaciones de orden
Reglamenta disolución Resguardo de Tierradentro. social, racial, cultural y económico. El Estado en estos últimos veinte años
ha dado pasos importantes en este sentido. Se han diseñado y ejecutado
Resolución 24 de 1950 (Comisaría del Vaupés) ............ . 199 planes concretos de salvaguarda de los derechos territoriales para los
Disposiciones sobre protección de indígenas en el Vaupés. indígenas del Altiplano y de las regiones periféricas, se ha dinamizado la
Decreto 38 de febrero 2 de 1951 (Depto. del Cauca) ......... . 206 prestación de servicios básicos en el campo de la salud y la educación y se
Prorroga un término de la Ley 89 de 1890. ha iniciado la formulación y puesta en marcha de pequeños programas de
Decreto 769 de junio 5 de 1976 (Dpto. de Caldas) .......... . 207 apoyo a las actividades productivas de los nativos, ajustados a sus condi-
Adjudicación de terrenos por los Cabildos. ciones particulares de cultura y organización social.
Ordenanza 27 de noviembre 30 de 1978 (Dpto. del Cesar) ..... 210
Crea una Inspección Indigenista Departamental. Este proceso de acercamiento a los pueblos indígenas ha tenido un punto
culminante con la fijación de unos lineamientos claros de política indige-
Convenios y Convenciones Internacionales nista, hecha por el señor Presidente de la República, en noviembre de
1982 en el Departamento del Cauca. Estos lineamientos que recogen
Concordato de diciembre 31 de 1887 213 viejas y sentidas aspiraciones de esta población, se concretan a la defini-
Convenio No. 64 reglamentario de 1~~ ~~~tr~t~~ d~ ·t~~b~j~· d~ ción de un Plan Nacional de Política Indígena en consulta con las autorida-
los trabajadores indígenas- junio 8 de 1939 ............. . 234 des representativas de este sector humano; a la modificación de la Legisla-
Convención crea Instituto Indigenista Interamericano - abril ción existente en materia de adjudicación de tierras con el propósito de
1940 o o. o •• o. o o. o o o •••• o o o o. o o ••• o o o o •• o •••• o. o o. 214 agilizar los trámites de adjudicación respectivos, y de la Legislación en el
Convenio No. 8 6. Duración Máxima de los contratos de trabajo campo del uso y aprovechamiento de los recursos naturales; a impulsar las
de los trabajadores indígenas -junio 19 de 1947 ......... . 247 campañas de educación, capacitación y salud; a institucionalizar la partici-
Convención sobre Misiones del 29 de enero de 1953 pación de las autoridades indígenas en la definición de políticas y decisio-
224
Convenio sobre abolición sanciones penales por incu~pi~i~~t~ nes que puedan afectar a estos grupos; a la difusión de los valores y el
del contrato de trabajo -junio lo. de 1955 ............. . aporte de las culturas indígenas, y a brindar apoyo a la investigación
252 científica de la antropología y etnolingüística; a promover la destinación
Convenio abolición trabajo forzoso -junio 5 de 1957 ....... . 256 de recursos para iniciar y adelantar proyectos de desarrollo en autogestión
Convenio con el Instituto Lingüístico de Verano - febrero 21 indígena; y a procurar la exención del servicio militar obligatorio.
1962. o •• o o o. o o o o. o •• o o •• o o •• o o o o o o. o o o o o o •• o o. o o
230
Concordato de julio 12 de 197 3 ........................ . La Dirección de Integración y Desarrollo de la Comunidad y su División
Contrato Dpto. del Cesar y la Diócesis de Valledupar - enero de Asuntos Indígenas, siguiendo las orientaciones expuestas por el señor
16 de 1979 ...................................... . 262 Presidente, procedieron, en coordinación con Planeación Nacional y con el
INCORA, a la conformación de un Comité, donde se hallan representadas
todas las Agencias del Estado que tienen responsabilidad en la ejecución
de programas con indígenas, y donde han tenido participación activa estos
últimos a través de los voceros de su organización nacional. Este Comité,
que ha realizado varias reuniones ha conseguido la definición de un
Programa provisional de trabajo que constituye a la vez un compendio de
los principios fundamentales que deben regir la política indigenista, un

15
11!;•

enunciado de las tareas que deben ejecutarse a corto, mediano y largo


plazo y unas estrategias de acción. También como fruto de los trabajos de
este Comité, se han elaborado algunos proyectos de Decreto, con los
cuales se procura dar vida legal al PROGRAMA DE DESARROLLO
INDIGENA, se agilizan los trámites de dotación de tierras, y se fijan
procedimientos eficaces para conseguir la protección de los recursos
naturales en las tierras ocupadas por indígenas.

De los estudios y la experiencia de trabajo del Ministerio de Gobierno


y de otras entidades del Estado en materia de atención a los indígenas, se
ha concluido que el desconocimiento de las normas legales que rigen el
asunto en cuestión, constituye un factor amplia~nte negativo en el buen
resultado de las acciones que se proyectan y se e/écutan. Este desconoci- INTRODUCCION
miento es tanto más grave cuanto que no sólo se extiende a los directos
beneficiarios y a sus autoridades, sino a los funcionarios del orden Nacio-
nal, Regional o Local que deben conocer de problemas con indígenas,
y a los mismos funcionarios de la rama jurisdiccional cuyos despachos l. BREVE BOSQUEJO HISTORICO DE LA LEGISLACION INDIGENISTA
deben pronunciarse en controversias del mismo carácter. No está por
demás observar que el Derecho o Fuero Indígena, como rama del Derecho Definiciones
Público, es una disciplina casi ignorada en los programas académicos de
nuestras Facultades de Derecho.
. . . lnd. ista nos referimos al cuerpo de
Al hablar de la L~gisla~~o~ Est~~~~ con las cualPs éste ha procur.ado
La Dirección de Integración y Desarrollo de la Comunidad y su División de normas legales expedidas P . . . tni'cas de origen precolombmo.
. 1 . con las mmonas e . . . lnd'
Asuntos Indígenas han trabajado con dedicación en la preparación de este manejar sus re acwnes . . . ha identificado la LegislaciOn . ~ge-
texto que contiene, debidamente codificadas, según su orden cronológico Erróneamente, a nuestro JUICIO, .se E o'neamente porque este ultimo
h
y jerárquico y según las materias a que hacen referencia, las principales nista con el Derec o o Fuero lnthgena.. rr
, amplios ' abarca no so· 1o 1as
ya que
disposiciones nacionales y departamentales dictadas en el campo de la tiene un significado y un cont~md~ ~as el cuerp~ de costumbres, usos y
temática indigenista desde los albores de la nacionalidad hasta la fecha. normas de origen esta.tal, smo o o. de relaciones, adoptados por l~s
También se incluyen, en una segunda parte, los textos correctamente métodos de control social ~ de man:;.~ re lar su vida de convivenci~
seleccionados, por el interés de los asuntos que resuelven, de las senten- mismas Comunidades lndlge~as pon ot~ sectores de la sociedad. St
cias más importantes de nuestros más altos tribunales de justicia [Corte interna o sus eventuales co~flt~tfs .~ ositiva de origen estatal ha dado
Suprema y Consejo de Estado], desatando controversias, en las cuales han bien es cierto que. la. misma egts acw~ ~xistencia del Derecho Indígena
sido parte las comunidades indigenas. Igualmente, se han incluido una explícito reconocimiento for~~l a dl 1 manejo de las relaciones Estado-
serie de conceptos de organismos administrativos, como el Ministerio de propiamente dicho.' en la prac Ica ~o del Derecho Indígena h~ .sido
Gobierno y el Instituto Colombiano de la Reforma Agraria, que esclarecen Comunidades ~dtgenas, el c~~ce;ecortado de la simple normat~vl~a~
asuntos de frecuente ocurrencia en la vida ordinaria de estas poblaciones. reducido asignandole el contem o . buscando claridad en su stgmfi-
. . d . tatal Es necesano, t en
positiva e ongen es . . tuales detenemos brevemen e
La distribución de los textos se ha orientado a facilitar su consulta para cado histórico y en sus proyeccwn~~:\istóri~amente esta normativid~d
un público amplio, como el que está llamado a utilizar este libro, y el los pasos. o etapas qu~ . ~a ~egu te determinar y evaluar su funcw-
Ministerio de Gobierno espera haber cumplido con él una tarea útil para positiva. Esto nos permitlra, fmalme~e~ conseguir una mayor lucidez de
que los indlgenas tengan una más clara noción de sus derechos y respon- nalidad actu.al, Y, eventualm~nJe,l talbolición parcial o total o por la vía de
sabilidades, para que los servidores del Estado, que conocen de la proble- juicio para ajustarla, por la v~a e a fas exigencias actuales, a lo que se
mática indígena, dispongan ue una mejor orientación y mejores instru- la interpretación. t , fundamenta e os pueblos indígenas:
más acor e conl d l . la consecu-
mentos de trabajo, atendiendo a las claras directrices del Estado en este proyecta como m eresD
ción de un verdadero erec o o h Fuero Indígena en Colombia.
campo. Igualmente, está llamada a cumplir esta compilación de normas
sobre indigenas, un papel de divulgación de materiales poco conocidos Antecedentes
entre los estudiosos, universitarios y otros sectores de nuestra sociedad,
que, como Colombianos, deben sentirse solidarios con la suerte actual y el ., . . l o constituye un cuerpo homo~én~o,
futuro de los pueblos indigenas. La LegislaciOn Indlgemsta a.ctua n . tac¡' ón política y doctnnana.
'd t
ni por su contem o ema I , feo m por su onenv ·s · • n precisa mas
, a d e lan t e,
·
De esta circunstancia po re d mos tener
t , tica Y otras más fueron tam b'len
una 1 10 ·
ALFONSO GOMEZ GOMEZ pero conviene saber que esta carac ens
16 Ministro de Gobierno
17
comunes a la normatividad aplicable a los indígenas durante la vigencia
del dominio español. Esta observación es importante en la medida en que, en la Costa Pacífica y en algunas regiones costeras, muchos pu~blos
no obstante el espacio de tiempo corrido desde nuestra ruptura con Espa- indígenas fueron territorialmente reducidos y culturalmente sometidos.
ña, y no obstante los cambios económicos y políticos acaecidos, es indiscu-
tible la pervivencia, en muchas de las actuales normas indigenistas del Pero quienes esperaron siempre que estas reduccione~ territori~les Y
Estado Republicano, del espíritu que animó la Legislación Indigenista la predicación constante entre ellos de otros val?res, podrl8Il traduci~se _a
Colonial y de los métodos de manejo que el Gobierno español adoptó en una asimilación incondicional a las pautas de vida del sector mayontarw
su trato a los aborígenes americanos. Y en la supervivencia de este espí- de la sociedad Nacional, se equivocaron siempre.
ritu y de estos métodos, si bien se evidencia la casi atávica inclinación
a mantener y cultivar políticas probadamente erróneas, también se descu- ¿Por qué y contra qué lucharon los indígenas e~ ~ste pe:ío<I:o? Básica-
bre, no sin asombro, que gracias a ellos nuestros indígenas actuales mente lucharon por el mantenimiento de sus dommws ternto:Iales Y por
pueden reclamar el cumplimiento y conseguir la satisfacción de algunas un relativo grado de autonomía en el manejo de sus asuntos mter~os de
de sus aspiraciones más acariciadas. La existencia, por ejemplo de una Comunidad. En resumen, lucharon por ~antener el de:echo a ser diferen-
institución tan importante como la de los Cabildos Indígenas que le permi- tes: a vivir en comunidad, a poseer las tierras e~ comun, a mantener sus
ten a los comuneros de las Parcialidades reclamar y mantener la autono- creencias y sus ritos religiosos, a hablar su propia le?gua. Y luchara~, no
mía, con relación a todo el aparato estatal, en el manejo de asuntos por un simple capricho sino porque, d~rante el penodo de q~e vemmos
importantes de la vida social, económica y política, de cada pueblo, no es hablando, la política del Estado colomb1ano fue en buena medida la nega-
otra cosa que el afortunado mantenimiento de una vieja institución del ción de aquellas aspiraciones elementales que hoy por hoy se encuentran
Derecho Indiano. Esta institución, salida del viejo Derecho Castellano consagradas en la Declaración Universal de lo~ Derechos !fumano~, en
para ofrecer posibilidades de vida independiente y democrática a las Convenios Internacionales suscritos por Colomb~a y en ~~ mismo az:,Ic~~a­
Corporaciones Municipales, echó raíces en el seno de las Comunidades do de nuestra Carta Constitucional. En efecto, si se revis~ la Compllaci?n
Indígenas Americanas que la hicieron suya y la han mantenido contra de nuestras Leyes Nacionales en el período a que nos refenmos, se podran
todos los intentos de liquidación. Otra Institución originada en las Leyes encontrar más de cincuenta disposiciones, entre leyes, Decretos Leyec; ~
de Indias y en la jurisprudencia de la época colonial, que ha logrado sal- Decretos Reglamentarios, ordenando la disolución de _los R~guardos lndi-
varse, para fortuna de los indígenas, es la imprescriptibilidad de las genas, asignándole esta tarea a funcionario~ ~dmimstrat~vos del orden
tierras de los Resguardos. No es, pues, inocuo, ni para descubrir las secciona! o a !ajusticia ordinaria, creando comisiOnes esp~ciales p~ra ello,
grandes fallas que afectan la Legislación Indigenista actual, ni para acre- halagando a los indígenas para que la cumplieran ellos mismos, ~ mcl~so,
ditar que algunas de las instituciones actuales son probadamente benéfi- otorgándole facultades a determina~os órgano~ de poder para dic~~mar
cas para los indígenas, reconocer que en buena medida esta Legislación por la vía de una simple providencia desprovista de todo proced~Iento
tiene raíces profundas en el bagaje de normas del Derecho español y del anterior, la declaratoria de inexistencia d~ un Resguardo .. Tamb1en se
Derecho Indiano. encuentra en la compilación de leyes naciOnales, u~ ampho acervo de
disposiciones ordenando y disponiendo lo necesa~w. p~ra la forz?sa
castellanización y cristianización de los indíge~as. NI siqUiera los ternto-
Etapa de 1810 a 1958 rios de aquellas Comunidades con asentamiento en las sabanas del
Oriente o las regiones selváticas, pudi~ron estar ~ salvo del a~cance de
Sin detenernos en el análisis de las innumerables Leyes que se dicta- esta avalancha legislativa, porque, con Igual empeno, se procur? durante
ron por el Gobierno Central y por los Gobiernos Seccionales durante este todo el período promover la _acción_ co~onizadora ~~ vastas regwnes que
larguísimo período, estudio que ya han realizado con muy buen juicio tenían el carácter de asentamientos mdigenas tradiciOnales.
varios autores y compiladores de leyes indigenistas, es atinente observar
que en este casi siglo y medio los indígenas no tuvieron tregua en su Se inspiró en todo momento la acción Legi_slado~a del Es~ad?, entre
lucha por mantener el reducto de sus áreas comunales y, dentro de ellas, 1810 y 1958, en dos principios que, pese a la re~Istenc1a de los ~nd1g~nas Y
sus sistemas de organización social, económica y cultural. Fue una lucha a los reiterados fracasos de la política indigemsta, se mantuvieron mmu-
desigual. La condición de grupos minoritarios, la carencia de un poder tables. Uno, el de que la propiedad colectiva de la tierra en cabeza de u.na
político real y el absoluto desconocimiento de los métodos e instrumentos Comunidad constituía un simple rezago feudal y que, por lo tanto, no. solo
que empleó siempre la sociedad nacional para someterlos o expropiarlos, era opuesta al desarrollo de la economía de mercado y .a~ progreso re~wnal
les obligó a una simple resistencia pasiva. Pero no por este carácter, la en general, sino opuesta al mejoramiento de la condiciOn de los mismos
posición indígena de defensa dejó de ser una lucha. Primero, porque indígenas que ocupaban las tierras comunales. Otro, el d~ que las formas
nunca se interrumpió y, segundo, porque jamás pudo ser doblegada total- de organización social, económica, religiosa, y ~us expreswnes culturales
mente. Es cierto que muchos indígenas de la Región andina perdieron propias de todo orden, constituían manifestB:~wnes poco ~~nos que de
sus tierras y que, con la pérdida de ellas, desaparecieron los Cabildos; y salvajismo. Estos criterios se encuentran dmfan~mente fiJados en las
es cierto también que en las tierras bajas de la Amazonia, en la Orinoquia, exposiciones de motivos de las Leyes, en los cons1derandos de ~os Dere-
chos y Resoluciones y en el texto mismo de las normas. Ello explica el que
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la disol~ción de ~as ,formas comunitarias de tenencia de la tierra y la
conv~rs~on de los,1~d1genas a nuestros patrones de pensamiento religioso, internas insostenibles de las propias Comunidades que por voluntad del
economico Y poh~Ico, fueran consideradas como tareas de alto interés Estado, se suspendió prácticamente la política de liquidación de Res-
naciOnal, necesanas y de perentorio cumplimiento. Por eso no se ahorra- guardos por declaratoria de inexistencia o procedimientos judiciales o por
ron esfuerzos en ellas ni se escatimaron fórmulas que pudieran contribuir la acción de comisiones partidoras. Segundo, porque en dicho año se
al logro de las metas trazadas. Si, pues, estas no se alcanzaron, o se alcan- produjo la Ley 81, un ordenamiento que, aunque no abolía ni cambiaba
zaron apena~ parcial~ente, no fue por falta de voluntad de los legislado- fundamentalmente el propósito de incorporar a los indígenas a las pautas
res o de ~os org~os eJ_ecutores del poder estatal, sino por la oposición de de vida económica, social y cultural del resto de los colombianos, sí fijaba
los ~.rop10s destmatanos de las normas indigenistas de esta etapa que crilerios nuevos, métodos menos coactivos para conseguirlo. En efecto, el
pud1era~os llamar, por llamarla de algún modo, reduccionista, en cuanto simple enunciado de esta Ley da una idea de la nueva concepción de la po-
pretend1a someter de buen o mal grado al indígena para que ajustara toda lítica estatal que vino practicamente a inaugurar: ··Sobre el Fomento Agro-
~u conducta al presunto modelo de colombiano que estarían llamadas a pecuario de las Parcialidades Indígenas''. Ocurre que en los quince o
f~rmar ~u~stras_leyes y costumbres mayoritarias, y que ni se encuentra veinte años anteriores se habían desarrollado con alguna intensidad las
bien defimdo, SI e~ que e~iste, ni podría, sin arbitrariedad, presentarse investigaciones de carácter sociológico y antropológico. Investigadores
nunca como prototipo del cmdadano ideal. nacionales y extranjeros habían publicado algunos estudios sobre la
cuestión indígena. Se habían dado debates sobre la materia. Aunque sin
Una sol~ Ley.', pero muy importante, se sustrae al carácter reduccionis- funciones muy claras, en el año 1947 había sido formalmente creado el
ta de la Leg1slac10n de esta etapa. Es la Ley 89 de 1890. Esta Ley que fue el Instituto Indigenista Colombiano, una especie de filial del llamado Institu-
pr?ducto de condi~ion~s históricas especiales en el Cauca, dÓnde tuvo su to Indigenista Interamericano creado con sede en México, en una conven-
O~Ig~n, Y en el Pais, hizo aportes fundamentales a la protección y mante- ción multinacional, algunos años atrás. Y en el año de 1957 se había fir-
mmien~o de la~ poblaciones indígenas. Algunos: dio estabilidad a la mado en Ginebra el Convenio Internacional del Trabajo, relativo a la
Comumda~ d~ tie~ras de las parcialidades, sustrayendo a éstas de la zozo- protección e integración de las poblaciones indígenas y tribuales en los
bra de las hqmdac10nes repentinas; dio vida legal a los Cabildos indígenas Países independientes, adoptado por la Cuadragésima Reunión de la
como entes_ represeJ?tativos de las Comunidades encargados de resolver Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo.
problemas_mternos Importantes; fijó a los Cabildos, y a través de ellos a
las Comum~a?es, un grado relativo de autonomía, para el mantenimiento Los antecedentes descritos, sumados a la experiencia de fracasos
~e ~us tradiCI?,nes Y c~stumbres; prestó protección a las tierras de los anteriores en el manejo de la cuestión indígena, más los problemas deri-
md1genas hac1endo~as _membarg~bl~s, inenajenables e imprescriptibles. vados de la ocupación irregular, de varios Resguardos en el Norte del
~on e~ta Ley ~ons1gu~eron los md1genas dos logros importantes. Uno Cauca, por campesinos lanzados por la violencia en otras regiones del
1~med1ato: pudieron disfrutar de aproximadamente quince años de rela- País, parecen haber encontrado eco en algunos representantes Caucanos
tiva tra~qmlid~d, es decir hasta 1905 en que, con la Ley 55, se reinicia para proponer el Proyecto que fue aprobado como Ley 81 de 1958. Dijimos
la o~en~1va antlcomunal. Este pequeño lapso fue importante porque en él que ésta inaugura una nueva etapa de la acción indigenista, y es cierto,
los, md1ge?as reestructuraron sus Cabildos legalmente y, con ellos como porque por primera vez se plantean las relaciones del Estado con los
gma, reon~ntaron.a.l~s ~omunidades para mantener una resistencia pasi- indígenas en términos de desarrollo y no de asimilación forzada ni de
va a las acciOnes diVISIOnistas. Otro a largo plazo: los indígenas incorpora- reducción. Se prevé la búsqueda de este desarrollo con el otorgamiento a
ron la Ley 8~ d~ 1890 a su vida, la acomodaron a sus condiciones específi- los indígenas de facilidades crediticias, con el fomento de la organización
ca~~ la convirtieron en algo de su patrimonio ideológico y empezaron a cooperativa, el acceso a los elementos de la técnica, la incorporación a la
utl~Izarla como _bandera de lucha y como escudo. La prueba de la solidez y producción de las áreas inexplotadas de los Resguardos, la racionalización
vahdez d~ _los mtere~es y anhelos tutelados en la Ley 89 de 1890 es su en la distribución interna de la tierra dentro de los Resguardos, etc. Pero
perdurabi~I~ad de ~as de 90 años, pasados los cuales sigue siendo el la Ley iba más lejos, y aceptando una queja reiterada de los indígenas,
estatut? bas1co que ng~ el _funcionamie?to de las ~omunidades, el que ha propugnada por la asesoría a estos para conseguir la devolución de las
dado PIS?.para qu.e los md1genas den vida a orgamzaciones protectoras, y tierras perdidas, y mantener la posesión de las que ocupaban. Y para
ha pe~Itido al mismo Estado, en los últimos años, cumplir variaciones en cumplir tales funciones daba vida legal a las llamadas Secciones de Nego-
su poht!ca que respondan más adecuadamente a las aspiraciones de las cios Indígenas Departamentales, a las que atribuye competencia para
Comumdades. conocer en segunda y última instancia de algunos conflictos en los cuales
estuvieran implicados indígenas, para servir de Oficinas consultoras de
Etapa de 1958 a 1980 los Alcaldes, y para rendir concepto previo a las segregaciones de los
Concejos Municipales y la muy importante de "dictar las Resoluciones
Hemos puesto término a la llamada Etapa Reduccionista en el año de sobre división de los Resguardos cuando haya lugar a ello''.
1958, por dos razones. Primero, porque en la nueva etapa que se inicia
salvo dos o tres casos cuya disolución fue cumplida más por condicione~ Como puede observarse, la Ley 81 de 1958 no descartó en ningún
momento la división de los Resguardos. La variación en relación con la
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po!ítica indigenista. preced~nte se dio más bien en el terreno de los
metodo~ que debenan seguirse para lograr tal división. En este sentido Comunidades Indígenas. La primera, su aislamiento, ya sea regio-
se podr_Ia, ap~ntar que hubo un gran avance porque dejó de concebirse la nal o intercomunal. La segunda, su nivel tecnológico primitivo
tarea divisona co~o u.n~ ~i~ple tarea legal y llegó a entenderse que la de la producción. La tercera radica en la cultura de ese grupo
obcecada pretensw~ diviswm.sta_, en sí misma, no tenía ningún sentido al humano. Contra ello hay que luchar y hacerlo con interés creciente
marge~ de la reahdad economica y social y que era esta realidad la para incorporar estas gentes a participar en el desarrollo económico
determma~lte ~n_el ~r«?c~so. Pero aunque este principio, en sí, era correcto nacional. A ello tiende también la Reforma Agraria''. (1).
para la mas facil d~viSI?n de _los Resguardos, se dejaron de lado otros
fact~res que determmanan su moperancia. En efecto, al entrar en funcio- Hay una preocupación seria en todas estas leyes por la protección de
namiento las ~ecc!ones de Ind~genas, ni contaban con un presupuesto los derechos de los indígenas sobre las tierras, no sólo de las que ocupan
?~a llevar a termmo su cometido, ni tomaron en consideración que los con títulos de propiedad sino de las que ocupan como simples áreas de
ultimos acto~ de división en algunos Resguardos y sus efectos abierta- cacería, recolección y pesca en las regiones de selva y de sabana, por eso
mente negativos para los antiguos comuneros, habían creado una verda- se prohibe la adjudicación a particulares de las áreas baldías ocupadas por
dera _b~rrera de oposición de parte de los Resguardos indivisos. En estas indígenas, se abre la posibilidad de reformar la estructura de la tenencia
condi~IOn~.s era pre:visible, como en efecto parece haber sucedido, que la de la tierra en los Resguardos minifundistas, adquiriendo nuevas exten-
sola difuswn de la~ Ideas de modernización de la agricultura indígena, sin siones, y se atribuyen facultades al organismo encargado de ejecutar la
resolver la apremiante esc':lsez de tierra que afectaba a la mayoría de los Reforma Agraria para constituir nuevos Resguardos. Pero tal preocupa-
r
Resguardo~ otr~s necesidades cuya solución se enunciaba en la Ley ción se funda más, al parecer, en criterios de desarrollo, que en el criterio
c«?mo prop_osito, lejos de cr~a~ condiciones para la presunta división, más o el ánimo de otorgar a la propiedad territorial comunitaria indígena un
b_Ien contn~:myeran ~omo aliciente para la búsqueda de otro tipo de solu- carácter perdurable. En este sentido son claras las disposiciones del art.
CIOnes no Siempre aJustadas a derecho. 94 de la Ley 135 de 1961, pues al tiempo que facultan al Instituto de la
Reforma Agraria para crear resguardos le facultan para disolverlos. En
~tras varias nor~as fueron expedidas después de la Ley 81 a las que esto debieron pensar quienes, al reglamentar las disposiciones agrarias en
con~Iene hacer aluswn. Entre ellas la que dio vida a la División de Asuntos materia de indígenas, proyectaron el Decreto 2117 de 1969, norma que
Indigei_J-as _(Decreto 1634 de 1960) adscribiéndola al Ministerio de Gobier- mexplicablemente cambió el término Resguardo, de que habla la Ley
no Y as~gnandole las funciones atribuidas a las Secciones Departamentales reglamentada, por el de Reserva y dijo que las tierras así asignadas a los
de Indigenas consagradas en la Ley 81 de 1958 y algunas otras nuevas indígenas serían ulteriormente repartidas y adjudicadas en propiedad de
~lgt;nas o reformulación de aquellas, como la de "estudiar las so~iedades las familias de la Comunidad. Las razones del cambio de términos son evi-
mdigen~s estables, ~o~o base para la planeación de los cambios cultura- dentes: dentro de la Institución del Resguardo los indígenas son propieta-
les, sociales, econo~mcos ~?e resultaren aconsejables, con miras al rios de las tierras y el estado no puede caprichosamente determinar su
progreso de tales sociedades y las de ·'proteger la posesión de las tierras disolución ni su adjudicación a parcelas, sin quebrantar la naturaleza jurí-
de los Re~!?ua~~os" Y "Proyectar y reglamentar las campañas de desarro- dica de la Institución. Otorgándole, en cambio a las asignaciones de
llo y tecmficacwn de las industrias indígenas''. tierras a los indígenas el carácter legal de Reserva, se dejaba prácticamen-
te a criterio de la administración la determinación sobre su perdurabilidad
Más adelante, fueron e~~edidos. «:>tros ordenamientos legales impor- o disolución.
tantes, en los _cuales se _deflman pohticas en el campo indigenista. Quizá
las ?e mayo~ Importancia, se encuentren en las varias leyes de Reforma Las Leyes indigenistas de este período, a que nos estamos refiriendo, y
So~ml Ag~ana (Especialmen~e las leyes 135 de 1961 y Ley 4a. de 1973), or.ras de interés menor, tenían en su gran mayoría el mismo espíritu que
artJculos 29, 5~, 94, 95 _Y Bo del Estatuto Agrario, y se orientan a dar animó la Ley 81 de 1958. Se proponían impulsar el proceso de integración
Impulso-~ los mismos objetivos y propósitos de desarrollo, como medio de de los indígenas, pero con nuevos métodos que diferían básicamente de
mtegracwn de los pueblos in~ígenas, y que fueron trazados en la Ley 81 los utilizados en el período anterior. Se trataba de llevar a las Comunida-
d~ 195~._La prueba de que es Igual el foco de inspiración de unas y otras des del País los servicios del Estado, en la creencia de que la prestación
disposicwn_es, se en_c~e~tra en las palat>ras con las cuales el Señor Minis- de estos iría quebrantando lo que se concebía entonces como barreras del
tro de Agncultura 1mcm su exposición ante el Senado de la República desarrollo: la propiedad colectiva de la tierra y las expresiones diferentes
para su.stentar la disposición_ del Proyecto de la Ley Agraria, que luego de su organización social, de su economía, de su lengua, etc. Hay que
~u~dana c_onsagrado como artículo 94 de la Ley 135 de 1961. Decía el consignarlo explícitamente: la aplicación de las leyes de este período,
Senor Mmistro: especialmente las de Reforma Agraria y las que asignaban funciones a la
División de Asuntos Indígenas, no ha logrado ni siquiera parcialmente el
"Nuest~o.problema in~ígena es menos agudo que en otros Países propósito que las animaba en el sentido de conseguir, a corto plazo, la
de Amenca. Pero existe. No debemos eludirlo. El tratadista
1
Edmundo Flórez, hace una síntesis de las características de las Otto Morales Benítez. "Historia de las Leves", Legislatura de 1961, Reforma
Agraria, Tomo 11, Imprenta Nacional, año 1.'66, pág. 558.
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integración de los pueblos indígenas concebida como abolición del sistema Las razones que determinaron al Gobierno Nacional a propiciar el
comunal de tenencia de la tierra y mengua en el apego a la protección de • cumplimiento de una primera investigación oficial amplia y concreta de la
valores propios de la cultuta tribual. Pero la aplicación de tales normas realidad indígena y a destinar recursos para financiar un primer plan
no ha sido estiilril. Los frutos obtenidos pueden medirse en dos sentidos . de desarrollo, fueron de diverso orden. Durante los últimos años de la
bien claros. Uno de ellos se concreta en el alto grado de conciencia que la 'década del 70, en un crecido número de Comunidades Indígenas de la
aplicación de los programas del Estado ha conseguido despertar en las '~egión Andina ocupantes de tierras de Resguardo, los Cabildos respec-
Comunidades Indígenas del País y que las ha llevado, no sólo a elevar su . tlvos, alentados por la esperanza de beneficiarse de los Programas de
nivel de autoestima como ciudadanos colombianos con derechos y con Reforma Agraria, habían realizado asambleas y participado en eventos
posibilidades de mejoramiento en todos los órdenes de su vida, sino a ~e índole gremial siguiendo el ejemplo de las Organizaciones Campesinas
requerir, de las entidades llamadas a prestar los servicios correspondien- rmpulsadas por el Estado. Estas reuniones les condujeron a formalizar un
tes. El otro sentido en que pueden medirse los frutos de la aplicación de la :movimiento específicamente indígena que vino a constituírse, especial-
legislación indigenista de este período, es el de la propia conciencia que ·mente en el Departamento del Cauca, en vocero de las principales necesi-
la experiencia ha dejado en amplios sectores de la administración, hacién- ;dades de este sector, en los campos de dotación de tierra para resolver
doles entender que los sistemas de vida propios de los pueblos indígenas, ·conflictos en los Resguardos minifundistas, la salud, la educación, el
en sus formas de tenencia de la tierra, de organización, de producción y de apoyo a las actividades productivas, el mercadeo y la abolición de las
pensamiento, lejos de ser incompatibles con el progreso, pueden consti- formas atrasadas de trabajo, como la aparcería, la porambería, la medias-
tuir, y de hecho constituyen, una base firme y una condición necesaria ' quería, etc. Las dificultades de orden legal y presupuesta! del Estado
para alcanzarlo. Algo más, parece desprenderse de la experiencia del para atender de manera inmediata a estas demandas en forma
trabajo indigenista de este período, con todas las imprecisiones que puede •satisfactoria, habían conducido a los indígenas a intentar acciones de
tener este juicio, que la poca o mucha atención que puede cumplir el recuperación de territorios perdidos, al margen de la Ley. También hacia
Estado en apoyo de los derechos y del mejoramiento de las comunidades ~finales del año 1980, el INCORA había aprobado la creación de cerca de 80
indígenas, realizada con seriedad y acomodo a las condiciones de cada Reservas Indígenas en beneficio de otros tantos grupos indígenas asen-
una, tienden a fortalecer la vida comunitaria de estos pueblos y a fortale- tados en regiones periféricas del País. Muchas de estas áreas, expuestas
cer sus propios valores y sus propias autoridades. Y parece que, a su a la presión colonizadora o, bien habían sido invadidas por colonos con
turno, este fortalecimiento de la Comunidad en las expresiones sociales y posterioridad a su creación o bien seguían amenazadas de ocupación por
económicas que las identifican, tiende a favorecer las condiciones necesa- el ánimo expansionista de quienes ya tenían mejoras allí, al momento de
rias de un desarrollo progresivo y armónico. su constitución. Los indígenas beneficiarios de estas reservas venían
pidiendo reiteradamente al Estado el saneamiento total de los territorios
asignados y el cambio de titularidad de la asignación, pues manifestaban
que el carácter de Reserva ni les infundía credibilidad a las autoridades
Etapa de 1980-1983 encargadas de darles protección, ni les permitía organizarse legalmente
con un cuerpo representativo interno para el manejo y la protección de sus
Creemos que la etapa que comienza en 1958, podría bien ser señalada territorios. En otros varios asuntos, igualmente importantes, venían
como integracionista y que ella, con sus características más significativas demandando los indígenas la atención del Estado, 'Como la salud, la educa-
(impulso a los programas de desarrollo y a la prestación de servicios, ción, el crédito.
orientados fundamentalmente a la integración del indígena al modelo
económico, social y jurídico del sector mayoritario de la sociedad colom- Las observaciones del diagnóstico del año 80 no sólo demuestran la
biana), tuvo una vigencia más o menos real hasta fines de 1980. Compren- 'validez de las reclamaciones de los indígenas, en cuanto a la realidad
demos que esta afirmación puede no estar exenta de arbitrariedad, en la ldramática de los problemas que estos plantean, sino que llega a demostrar
medida en que las disposiciones que le dieron origen e impulso continúan CÓII}o, lejos de _conseguirse una integración del indígena con las metodo-
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vigentes y en la medida en que muchas acciones que se ejecutan actual- •logias de trabaJO empleadas en el pasado, se había venido incrementando
mente en el campo indigenista llevan aún el sello de su orientación. Pero el marginamiento físico del indígena, al privarlo de sus tierras, y la
la política integracionista, nacida en 1958, como política del Estado, tuvo desintegración social y cultural, al privar a las Comunidades del cuerpo de
a finales del año 1980 una variación o modificación fundamental. En este 'valores y formas de vida que les daban cohesión y unidad para enfrentar
año, en efecto, por iniciativa de varias agencias Gubernamentales, espe- los problemas comunes. Y es importante precisar cómo de tales observa-
cialmente del Departamento Nacional de Planeación, el INCORA, el 1ciones se desprenden conclusiones concretas, relativas a la necesidad de
Mmisterio de Gobierno y el Ministerio de Agricultura, se adelantó la reali- ~adaptar todo tipo de programas a las condiciones específicas de las Coniu-
zación de un diagnóstico sobre los aspectos más importantes de la pro- <nidades, al respeto y fortalecimiento de las autoridades propias de cada
blemática indígena del momento. Con fundamento en él, fue llevado a fpueblo indígena, a la obligación del estado de reconocer· el dominio pleno
consideración del CONPES y fue aprobado por éste, por primera vez en la .E y real de la tierra poseída por cada grupo, dándole un carácter estable al
historia del País, un Programa de Desarrollo Indígena. ~régimen comunitario propio de estos pueblos. Y ya en el documento apro-

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, samiento del Señor Presidente, podríamos afirmar que sus orientaciones
bado por el CONPES, como Programa de Desarrollo Indígena, es impor- · persiguen la abolición de dos viejos vi<.:ios en la atención a las Comunida-
tante observar que estos criterios nuevos tienen una proyección c<_>!lcreta des Indígenas: el paternalismo y la improvisación. Y podríamos decir que
en la destinación de recursos. Por eso, aceptando que la soluc1on del · contra ellos propone el Señor Presidente dos remedios: la participación
problema territorial constituye el fundamento, la base de atención a las . directa y constante de los indígenas en la adopción y ejecución de los actos
demás reclamaciones y necesidades del indígena, se orienta fundamental- ·; que les atañen, y la coordinación interinstitucional que hace posible la
mente la acción del Estado hacia este campo, hacia la reestructuración de planificación del trabajo y la utilización racional de los recursos.
los Resguardos minifundistas, hacia el sanearnient9 de los territorios de
Reserva y su conversión en Resguardos, hacia la legalización de la titula- No se han dado, como se puede ver, durante esta última etapa, modifi-
ridad de las llamadas Comunidades Civiles, etc. . caciones en el campo de la Legislación Indigenista. El intento varias veces
cumplido durante los años 80 y 81, de aprobación de un Proyecto de Ley,
Dos fallas serias se le formularon al plan de Desarrollo Indígena adop- · orientada a otorgar facultades al Ejecutivo para expedir un ordenamiento
tado por el CONPES en diciembre de 1980. Primero q~e, aún recono~ien­ legal indigenista, no tuvo ningún éxito en las Cámaras, y a nivel de las
do la importancia de respetar y prestar el apoyo al Sistema de gobierno · Comunidades Indígenas mismas parece haber despertado un amplio
propio de los pueblos indígenas, no se preveían mecanismos para concr~­ movimiento de resistencia. Todo indica que, más que nuevas leyes, los
tar la participación de tales autoridades ni, naturalmente, de las.~omuD:I­ indígenas quieren actos estatales positivos de reconocimiento de sus dere-
dades mismas en la ejecución de los programas. Otra observac10n sena chos, acciones concretas. Y alegan, con indudable justicia, que muchas
se concretaba ~ la ausencia en el plan de elementos de coordinación entre normas benéficas para ellos y de relativo fácil cumplimiento, se han que-
las agencias estatales llamadas a ejecutar las acciones componentes del dado sencillamente escritas. Esta toma de conciencia del indígena sobre
mismo. Por eso, si se exceptúan las acciones que continuaron ejecutando los problemas que lo afectan, tal vez sea el fenómeno más importante de
aisladamente el Ministerio de Gobierno y el INCORA, y que en cierto esta etapa. Este fenómeno y el paralelo de la toma de conciencia del
modo ya hacían parte de sus programas ordinarios, el PLAN DEL Estado Colombiano, representado por sus estamentos directivos, hace
CONPES no tuvo un alcance mayor como política del Estado. Lo tuvo sí posible, sin duda alguna, la realización de una muy seria, muy justa y muy
más adelante cuando un Primer Congreso Nacional Indígena, reunido un técnica política de relaciones entre el Estado y las Comunidades Indígenas
año después, hizo suyos algunos de los propósitos enunciados en aquel en el futuro inmediato.
Plan de Gobierno y los aprobó como metas a conseguir en el proceso de
sus reivindicaciones. 11. LIMITACIONES QUE SE PRESENTAN PARA LA APLICACION
DE LA LEGISLACION INDIGENISTA
Los Planteamientos y Conclusiones del Primer Congreso Nacional
Indígena celebrado en Bosa en febrero de 1982 y que recogían parcial- Si se estudia con algún detenimiento el proceso de formación de nuestra
mente algunas de las inquietudes y propósitos del Programa ap~ob~do J?,or legislación indigenista, aunque sólo sea a través del pequeño bosquejo
el CONPES en el 80 fueron sin duda, punto de apoyo y de mspuac10n que hemos dejado consignado anteriormente, se observará que esta
importante en las intervenciones del Señor Pre~idente de la. R~pública, Legislación ni ha tenido nunca un cabal cumplimiento, ni, en lo substan-
doctor BELISARIO BETANCUR, el día 11 de noviembre, en Sllv1a-Cauca, cial, ha conseguido resolver los problemas que estaba llamada a resolver.
y que sentaron las bases de la política que en materia tan delicada se La búsqueda de una respuesta a esta inoperancia nos lleva a detectar dos
propuso ejecutar. En estos planteamientos el Gobierno Nacional, por bo~a problemas o dificultades fundamentales. Una de estas dificultades se
del Primer Magistrado, acoge como propósito de trabajo del prop10 encuentra en la naturaleza misma de las leyes y la otra en las limitaciones
Estado la satisfacción de aquellas aspiraciones más acariciadas desde de quienes estamos, como funcionarios o jueces, obligados a ponerlas en
tiempos remotos por nuestras comunidades nativas: la tierr~, la salud, práctica. Veamos brevemente estos dos problemas o dificultades.
la educación y el Desarrollo. Pero estas metas, que no constituyen algo
nuevo, sí tienen un ingrediente n•1evo: el Señor Presidente quiere q~e en Inadecuación de la Legislación Indigenista
este camino de atención a los indígenas los programas sean estudiados
con ellos, diseñados con ellos y ejecutados con ellos y con sus autoridades Los problemas de las Comunidades Indígenas son bien conocidos y a
legítimas. Se plantea, pues, la acción futura en materia indigenista como ellos hemos hecho reiteradas alusiones en nuestra pequeña reseña
una política de cooperación, no de imposición, de diálogo del Estado con histórica: la tierra, la salud, la educación, el apoyo a su actividad produc-
las autoridades indígenas, no de sustitución de esas autoridades. Pero hay tiva, el mercadeo. Pero estos problemas no tienen para los indígenas el
algo más. La presencia del Señor Presidente de la Repúbli~~ en Silvia, · mismo sentido que tienen para el resto de los colombianos. El más grave
acompañado de los señores Ministros bajo cuya responsabilidad se en- de ellos el de la tierra, lo ejemplifica con meridiana claridad. Mientras el
cuentran las Oficinas encargadas de ejecutar trabajos de interés priorita- campesino colombiano corriente hace uso y disposición de ella como un
rio para los indígenas, estaba indicando claramente su ánimo d~ conseguir . simple bien de cambio, como un factor más en su lucha por la supervi-
que, en este campo, las actividades obedecieran a un orde~am~ento y una .• vencía, para la Comunidad Indígena la tierra es el factor básico de su vida
coordinación interinstitucional. Haciendo una apretada smtes1s del pen-
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y a ella se encuentran ligadas las costumbres, los usos, las creencias, su
problemas, actúan guiados por la lógica jurídica que inspira las actuacio-
sistema de parentesco, sus formas de organización social y económica. nes administrativas y judiciales en la solución de problemas ocurridos
Tampoco la salud tiene un igual sentido para el indígena, al que tiene
para, valga el ejemplo, un campesino minifundista o jornalero de una ""entre personas del sector mayoritario de nuestra sociedad no indígena.
Descontando la circunstancia de que la Ley Indigenista sea adecuada o no,
hacienda, pues mientras para este último, como para casi la mayoría de lo que resulta de una claridad meridiana para el intérprete de la Ley
los colombianos no indígenas, la salud tiene el sentido negativo de la positiva, ordinariamente se presenta confuso en la interpretación de los
ausencia de dolencias que le impidan el trabajo productivo, para el derechos de los indígenas. La razón principal es la de que el derecho en la
indígena <le la Comunidad la salud es un complejo estado que representa, sociedad mayoritaria tiene como sustrato la propiedad privada, en tanto
además de la disposición física para cumplir las tareas de subsistencia, la que el fundamento del fuero indígena descansa en la Comunidad. Sin la
armonía con su medio natural y con el conjunto de los integrantes de su existencia de la Comumdad, desaparece el fuero indígena. El derecho a
grupo, y con quienes son guías y orientadores de éste. No es fácilmente . la tierra, el derecho a una organización social y política, el derecho a la
comprensible, ni siquiera para un médico nuestro, entender este concepto autonomía, a tener su propia normatividad, etc., sólo tienen justificación
de la salud, comprender que para un indígena la salud tiene un contenido en la existencia de una Comunidad culturalmente diferente de la sociedad
social y puede tener un contenido ecológico e incluso religioso. Ni el mayoritaria. La de los indígenas es la comunidad de los que tienen vida y
concepto de Educación para el indígena puede ser el mismo que se halla de los muertos y de los que están por nacer. Sin entender esta lógica no es
implícito en la mayoría de las leyes indigenistas. Cuando, por ejemplo, posible respetar estos derechos ni es posible articular la Ley positiva con
se observa, como lo han descubierto ya los mismos indígenas, que la la tutela de los intereses y las posibilidades de desarrollo autónomo de
educación formal impartida en algunas áreas, fuera de la Comunidad y al estas comunidades que, muchas veces, no encuentran otra alternativa
margen de su propia realidad y en otra lengua, ha contribuido a disolver diferente a la de su extinción.
los lazos familiares y a convertir a hombres y mujeres en desadaptados
sociales, se comprende que muchos núcleos indígenas indentifiquen_ tal La Legislación Indigenista es Insuficiente
concepto, el de la educación según nuestros cánones y modelos ordinariOs, Entre las dificultades que afrontan los agentes del Estado al conocer
como un simple trabajo de desadaptación del indígena de su propio medio de problemas en Comunidades Indígenas, son de frecuente ocurrencia los
y de su grupo. Ni puede ser igual para el indígena el significado de activi- casos de inadecuación de la norma al caso controvertido, los de la barrera
dad productiva del que se conoce al tenor de los valores de nuestro que, para el esclarecimiento de los factores determinantes del fenómeno
sistema económico occidental. Y no puede ser igual, porque el indígena no susceptible de juicio y de solución, le presentan al fallador o al funcionario
tiene el propósito de la acumulación, ni el sentido del ahorro, ni el apego sus propios esquemas de pensamiento y su propia lógica jurídica más o
obsesivo a la propiedad privada. menos ajena a los modos indígenas de razonamiento. Pero no son de
menor ocurrencia los casos en que, sencillamente, los agentes del Estado,
Es claro que quienes han elaborado la mayoría de las Leyes Indigenis- o los mismos indígenas que tratan de buscar un fórmula legal para resol-
tas tendientes a resolver problemas de tierras, de salud, educación o ver un asunto de su interés, se encuentran con la ausencia de normas
producción de los indígenas, han trabajado bajo la guía de la concepción escritas que permitan hallar solución a sus pretensiones o a sus requeri-
más generalizada de los problemas que se buscaba resolver. Y de ahí que mientos. Algunos de los intentos de legislar de modo global para las
tales leyes resulten confusas, resulten inarmónicas, cuando no contrarias Comunidades Indígenas, expidiendo un ordenamiento general o estatuto
a los intereses de las Comunidades Indígenas. Esta inadecuación, como es orgánico de estos pueblos, han tenido, en parte, la sana inquietud de
natural, lleva a dos situaciones: una, su inaplicabilidad; otra, su aplicación llenar estos vacíos. Esto no está mal, pero debe entenderse que si los
con consecuencias negativas que ordinariamente tienden a agravar los indígenas frecuentemente se han opuesto a tales intentos, por lo regular
problemas que pretenden resolver. . la oposición se ha dado, presumiendo, con razones más o menos válidas,
que tales ordenamientos irían a ser expedidos de manera inconsulta,
Disfuncionalidad de la lógica jurídica occidental es decir sin un apoyo real en las condiciones concretas de vida y de pensa-
miento de tales Comunidades. En no pocas ocasiones los indígenas han
Sin menoscabo· de los esfuerzos que en muchos casos han hecho nues- manifestado su criterio en el sentido de preferir la ausencia de normas a la
tros tribunales de justicia y los mismos funcionarios encargados de cono- existencia de disposiciones que, lejos de aportar soluciones, podrían
cer problemas indígenas para darles acertada solución, con los instrumen- agudizar los conflictos.
tos que la Ley Indigenista ha puesto a su disposición, es necesario resaltar
el hecho de que cada Comunidad Indígena tiene sus propios métodos III. NECESIDAD DE UN NUEVO ENFOQUE EN EL ENTENDIMIENTO
para resolver losproblemas y los conflictos que necesariamente se susci- Y APLICACION DEL DERECHO O FUERO INDIGENA
tan en el decurso de su vida diaria. Estos métodos se inspiran en el acervo
de sus propias concepciones religiosas, de su propia organización social, El Derecho o Fuero Indígena
de sus costumbres ancestrales y sus métodos de control social. Por lo El derecho o fuero de los pueblos indígenas en Colombia, ya se dijo al
regular cuando los agentes del Estado entran a conocer de estos mismos comienzo de esta introducción, no está, no puede estar, restringido al
28 29
; Por su parte la Ley 31 de 1967, que aprueba el Convenio Internacional
conjunto de las normas dictadas por el Estado para el manejo de las rela- f del Trabajo para la protección de las poblaciones indígenas, adoptado en
ciones entre la Nación Colombiana y las etnias de origen precolombino. ,) Ginebra en 1957, consagra las siguientes disposiciones:
Un concepto preciso del Derecho Indígena, tiene que englobar, además de .:*
la legislación indigenista, todo el acervo de costumbres, usos y sistemas ·'Artículo 7. l. Al definir los derechos y obligaciones de las pobla-
de control social de que tales pueblos disponen para resolver las situacio- ciones en cuestión, se deberá tomar en consideración su derecho
nes de conflicto que deben enfrentar en su vida interna de comunidades y consuetudinario ... ''.
en sus relaciones con otros sectores de población o personas de la sociedad
nacional; y debe englobar pronunciamientos de nuestros tribunales Artículo 8. En la medida compatible con los intereses de la colec~i­
jurisdiccionales, pronunciamientos administrativos, conceptos de tratadis- vidad nacional y con el ordenamiento jurídico del País:
tas, etc. que por su interés puedan contribuir a esclarecer y definir contro-
versias en el mismo campo, cuando quiera que en ellas se ventilen intere- l. Los métodos de control social propios de las poblaciones en
ses de las Comunidades Indígenas o de sus integrantes. cuestión (indígenas) deberán ser utilizados, en todo lo posible,
para la represión de los delitos cometidos por miembros de dichas
Sin vacilación alguna, pueden aceptarse como componentes del Dere- poblaciones;
cho Indígena la Legislación Indigenista, los pronunciamientos jurisdic-
cionales o administrativos en la materia, y la doctrina de los expertos en 2. Cuando la utilización de tales métodos de control no sea posible,
el mismo campo. Pero pueden suscitarse dudas alrededor de la proceden- las autoridades y los Tribunales llamados a pronunciarse deberán
cia de aceptar como componentes importantes del Fuero o Derecho Indí- tener en cuenta las costumbres de dichas poblaciones en materia
gena los usos, costumbres y métodos de control social propios de las agru- penal.
paciones indígenas. Para despejar estas dudas, conviene consignar algu- '·Artículo 13. l. Los modos de transmisión de los derechos de pro-
nas de las razones que explican porqué los usos, costumbres y métodos de piedad y de goce de la tierra, establecidos por las costumbres de las
control social propios de los pueblos indígenas constituyen un contexto o poblaciones en cuestión, deberán respetarse en el marco de la
marco legal válido, en ausencia de una normatividad positiva. Legislación Nacional, en la medida en que satisfagan las necesida-
des d.e dic~~s poblaciones, y no obstruyan su desarrollo económico
El régimen constitucional colombiano garantiza el libre derecho de los y SOCial. . . .
ciudadanos a asociarse. Así lo establece claramente el artículo 44 de la
Carta. Las Comunidades Indígenas son algo más que simples asociaciones Las disposiciones transcritas nos eximen de abundar en razones para
como lo ha reconocido reiteradamente la jurisprudencia. Su existencia no sustentar el planteamiento inicial sobre la necesidad de asignarle al
necesita reconocimiento explícito. La comunidad se da como un hecho Derecho o Fuero de los Indígenas colombianos el sentido amplio que le
social ligado a la forma de vida de estos grupos. Sin embargo la vida de las corresponde.
·Comunidades Indígenas se halla implícitamente protegida por la norma
citada y se halla expresamente reconocida en nuestra Leyes. E igualmente Algunos Principios Básicos del Derecho Indígena
en esas Leyes se consagra la facultad que tienen las Comunidades Indíge-
nas a mantener sus propios usos y costumbres y sus propios métodos de El desarrollo del texto constitucional transcrito y de otros con los
control social y a hacer uso de ellos para resolver problemas propios de la cuales tiene concordancia, lo mismo que la revisión de las disposiciones de
vida comunitaria. Veámoslo: El artículo 3 de la Ley 89 de 1890 dice: la Ley 89 de 1890 y de las disposiciones de la Ley 31 de 1967, permiten
concluir con toda claridad la existencia de un ordenamiento legal, no
sistemáticamente estructurado pero claro, que presta protección y da
'"En todos los lugares en que se encuentre establecida una parcia- cobertura jurídica a la vida de las Comunidades Indígenas. Dicho ordena-
lidad de indígenas habrá un pequeño Cabildo nombrado por éstos miento presenta una serie de principios básicos, entre los cuales enuncia-
conforme a sus costumbres ... ''. mos por vía de ejemplo los siguientes:

Y el artículo 4 de la misma Ley dice: Las comunidades Indígenas tienen derecho a un territorio exclusivo,
que les sirva de asentamiento y en el cual puedan adelantar sus activida-
""En todo lo relativo al Gobierno económico de las Parcialidades, des ¡:>roductivas, desarrollar su vida social y su vida cultural.
tienen los pequeños Cabildos todas las facultades que les hayan ;
transmitido sus usos y estatutos particulares, con tal que no se .:: Las Comunidades Indígenas, dentro de sus territorios tienen derecho a
opongan a lo que previenen las Leyes, ni violen las garantías de 'i darse sus propias formas de organización, a elegir sus autoridades
que disfrutan los miembros de la Parcialidad en su calidad de • internas, a fijarse sus propios reglamentos y los marcos de acción de esas
ciudadanos''. ~autoridades, según los usos y costumbres que les vengan por tradición.

30
..11 31
l
Las Comunidades Indígenas tienen un relativo grado de autonomía en
el manejo de sus asuntos internos. Esta autonomía se refiere específica-
mente a la competencia jurisdiccional de sus autoridades propias para
resolver conflictos o problemas menores, para ejercer algunos actos de
manejo, para representar judicial y extrajudicialmente a las Comunida-
des. Se refiere a la capacidad de estas comunidades, para entrar en con-
versaciones y formalizar acuerdos con los representantes del Estado en
los camvos de la educación y la salud u otros servicios y adoptar, de común
acuerdo con ellas, modelos adecuados de atención en tales campos.
Las Comunidades Indígenas tienen derecho a estudiar sus propias
condiciones de vida y a darse modelos de desarrollo que armonicen
con ellas.
Las Comunidades Indígenas tienen derecho al respeto y reconocimien-
to de la integridad de su territorio, de su organización, de sus autoridades,
de la competencia y las atribuciones de estas autoridades, de las costum-
bres, usos y métodos de control social que les han venido por tradición y
les permiten mantener una vida armónica.
En el contexto de estos principios, que se enmarcan estrictamente en
la legalidad nacional, y de los que, como corolario, se desprenden de ellos,
debe interpretarse y procurarse la aplicación de todo el conjunto de la
Legislación Indigenista vigente/Pero como, dentro de una política cohe-
rente y seria en materia de indígenas, no se trata simplemente de resolver
problemas ocasionales sino de perfeccionar y afianzar instrumentos LEYES DECRETOS Y RESOLUCIONES
institucionales adecuados que permitan el avance y el progreso de los
pueblos indígenas, sin menoscabo de los elementos sociales y culturales DEL ORDEN NACIONAL
que los identifican como pueblos y como personas, también sobre dichos
principios debe irse fortaleciendo y desarrollando el cuerpo del Derecho
o Fuero de los Indígenas Colombianos. Porque ninguna sociedad y tampo-
co las sociedades indígenas son organismos estáticos. La Ley de la super-
vivencia les impone a todas el crecimiento. Y con este último, debe ir
paralela la formación de una legalidad que se armonice con el proceso que
ya han iniciado los mismos pueblos indígenas y en el cual el Estado quiere
ser un factor de apoyo y colaboración. Por eso este Derecho Nuevo deberá
nacer de las mismas Comunidades y el Estado deberá servir de canal para
que llegue a cristalizarse en fórmulas justas que respondan a las necesi-
dades y a las esperanzas de los indígenas.
Estas observaciones y las que hemos dejado consignadas, se enmarcan
dentro del pensamiento claro del Señor Presidente de la República doctor
BELISARIO BETANCUR, quien manifestó a las Comunidades Indígenas
del Cauca, en noviembre 11 de 1982:
''Al considerar a los pueblos indígenas como interlocutores válidos,
capaces y responsables de su propio devenir, la política del Estado
se orienta, entonces, a reforzar la legitimidad legal y la participa-
ción decisoria de las autoridades indígenas, garantizar sus dere-
chos específicos como minorías étnicas y crear un contexto de
apoyo y cooperación fructífera en todos los aspectos que atañen a la
vida de estas Comunidades, a fin de permitir un etnodesarrollo
autogestionado y autosostenido'' .

32
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~"--~

DECRETO DE 24 DE SEPTIEMBRE DE 1810

Artículo 2. ·'Consiguiente a Ia referida igualación y ciudadanato


concedido a los indios con restitución plena de sus derechos en cuyo goce
'van a entrar, se les repartirán en propiedad las tierras de sus resguardos
distribuyéndoseles en cada pueblo según su justo valor y en suertes
separadas con proporción a sus familias para que las disfruten aprove-
chándose de todas sus producciones naturales e industriales, con la sola
.condición de que por ahora no puedan enajenar, donar o desprenderse por
btra vía de la porción de tierra que les tocare en la distribución hasta que
pasados veinte años hayan tomado apego al dominio y versándose en la
•dministración de modo que no sea fácil engañarlos ni reducirlos valién-
·aose de su natural senciHez para despojarlos de su pertenencia territorial,
Sin que por esto se les prohíba que puedan disponer de sus tierras en
beneficio de sus mismos hijos con arreglo a las leyes del reyno, que
puedan dotar a las hijas cuando tomaren estado, guardando la justa y
debida proporción, sin perjudicar a su demás descendencia''.
~~

DECRETO DE 1820
(julio 5)

Que ordena devolver a los naturales los resguardos.

SIMON BOLIVAR, LIBERTADOR y


PRESIDENTE DE COLOMBIA, etc., etc.,

leseando corregir los abusos introducidos en Cundinamarca en la mayor


parte de los pueblos de naturales, así contra sus personas, como contra
sus resguardos y aún contra sus libertades; y considerando que esta parte
e la población de la República, merece las más paternales atenciones del

f obierno, por haber sido la más vejada, oprimida y degradada durante el


espotismo español, con presencia de lo dispuesto por las leyes canónicas
civiles, ha venido en decretar y

35
DECRETA:
,
1
11. Para que estas operaciones se ejecuten con todo el método, orden
. l. Se devolverán a los naturales, como propietarios legítimos, todas las 'exacLILud que exige la utilidad general_ de los pueblos, estarán obligados
tierras que formaban los resguardos, según sus títulos, cualquiera que sea ¡ps JUeces pohticos a llevar cuema cornente de los arrendamientos, y la
el que aleguen para poseerlas los actuales tenedores. presentarán con la de los tributos a los Ministros respectivos del Tesoro
Pubhco.
_'2. Las funda~.iones que carguen sobre los dichos resguardos, no
temendo aprobac10n del~ au~oridad a q~ien corresponde, o ha correspon- , 12. Ni los curas, ni los jueces polüicos, ni ninguna otra persona em-
dido _co.1ce~erla, quedaran sm efecto m valor, aunque hayan subsistido pleada o no, podrán servirse de los naturales de ninguna manera, ni en
por tiempo mmemorial. taso alguno sm pagarles el salario que antes estipulen en contrato formal
éelebrado a presencia y consemimiento del juez político. El que infringiere
éste articulo pagará el doble del valor del servicio hecho, y los jueces
. 3. Int~~rados los _r~sguardos en_ ~o que se les haya usurpado, los
~ohticos exigirán esta multa irremisiblemente a favor del agraviado por
J~ecespohticos repartiran_ a cada familia tanta extensión de terreno cuanto
fa menor queja que tengan. Cuando los jueces mismos sean los delin-
comodamente pueda cultivar cada una, teniendo presente el número de
~uentes, serán los Gobernadores Políticos los que exigirán la multa dicha.
personas de que consta la familia y la extensión total de los resguardos
Modificado Ley 89 de 1890 art. 7 num. 4°. · (Modificada ley 38 de 1821 artículo J").

4. Si r~partidos los resguardos a las familias, como se ha dicho, 13. La misma disposición del artículo 12 comprende a las cofradías
qu~~aren tierras sob:ant~s, las arr~ndarán por remate los mismos jueces cuyos !?;anados no pastarán en los resguardos, si no pagan arrendamiento,
pohticos, a los que mas dieren, y afianzaren: prefiriendo siempre por tanto DI seran guardados por los naturales, sino del modo dicho en el citado
a los actuales poseedores. Modificado ley 89 de 1890 artículo 7° nume- artículo.
ral60. '
14. Cesarán absolutameme desde este momento (como escandalosas
5. Las fa~ilias o los m~e~bros de ellas no podrán arrendar la parte que y contrarias al espíritu de la religión, a la disciplina de la Iglesia y a todas
l.es toque, smo con conocrmiento del juez político, para evitar los daños y las leyes), las costumbres de no administrar los sacramentos a los feli-
fraudes que se les causaren. Modificado ley 89 de 1890 artículo 7° greses, mientras no hayan pagado los derechos de cofradía y congrua;
numeral6°. ' la de obligarlos a que hagan fiestas a los santos; y la de exigirles derechos
parroquiales de que están exentos los naturales por el estipendio que da el
6. Los productos de los terrenos que se arrienden conforme al artículo EsLado a los curas. Los curas que contravinieren a este artículo conti-
4 o se destinarán: parte para el pago de tributos y parte para el pago de los nuando los mismos abusos, sufrirán el rigor de las leyes en un juicio
sueldos de maestros. de las escuelas que se establecerán en cada pueblo. severo, y al efecto los jueces políticos velarán la conducta de los curas
para dar cuenta al Gobierno de la menor falta que noten en esta parte, ~
Cada maestro goza~a anualmente de un sueldo de ciento veinte pesos, si
que se provea lo que corresponda.
alcanzare~ o excedieren de esta cantidad los arrendamientos. Si fueren
menos sera todo para el maestro. (Modificado por ley de 11 de octubre de 15. Los naturales como todos los demás hombres libres de la Repú-
1821, artículo 1 °).
.bhca, pueden ir y venir con sus pasaportes, comerciar sus frutos y efectos,
llevarlos al mercado o ferias que quieran, y ejercer su industria y talentos
7. El juez político de acuerdo con el cura de cada pueblo nombrará hbremente, del modo que ellos elijan sin que se les impida.
estos maestros y participará sus nombramientos a los Goberna'dores de la
provincia para que éstos lo hagan al Gobernador del Departamento. 1ti. El presente decreto, no sólo se publicará del modo acostumbrado,
sino que los jueces políticos instruirán de su contenido a los naturales
8. Los Gobernadores políticos de la provincias formarán el reglamento instándoles a que representen sus derechos, aunque sea contra los
que deba o?servarse en !as escuelas de sus respectivas provincias, deta- mismos jueces, y a que reclamen cualquiera infracción que se cometa.
llando el metodo de ensenanza y de educación.

9: !odos los jóvenes mayores de cuatro años y menores de catorce 1 7. El Vicepresidente de Cundinamarca se encargará del cumplimiento
asisti~a~ a las es~ue_la.s donde se les enseñarán las primeras letras, la
y ejecución de este decreto.
antmetica, los prmcipiOs de la religión, y los derechos y deberes del
hombre y del cmdadano en Colombia, conforme a las leyes.
Publíquese y comuníquese a quienes corresponda.
10. Deducido el sueldo de los maestros, las rentas que sobren de los
arrendami.entos se aplicarán al ramo de tributos rebajando este total, que Dado, firmado de su mano, sellado con el sello provisional del Estado,
se aplicara al total general, con que contribuya el pueblo a quien se y refrendado por el Ministro de Guerra, en el cuartel general libertador en
aliviará la contribución a prorrata. (Derogado ley de octubre Ú de 1821). la Villa del Rosario, a 20 de mayo de 1820- 10° (Aquí el sello).

36 37
,.

j
SIMON BOLIVAR
otra contribución civil con respecto a los resguardos y demás bienes
El Ministro de Guerra, Pedro Briceño Méndez que posean en comunidad; pero no lo estarán por los que sean de su
propiedad particular.
NOTA AL DECRETO ANTERIOR
Artículo 3. Los resguardos y tierras asignados a los indígenas por las
Al Vice-Presidente de Cundinamarca leyes españolas, y que hasta ahora han poseído en común, o en porciones
distribuidas a sus familias sólo para su cultivo, según el reglamento del
S. E. el Libertador ha tenido a bien someter al señor Gobernador Libertador Presidente de 20 de mayo de 1820, se les repartirá en pleno
Comandante General de la Provincia de Tunja la ejecución del decreto de dominio y propiedad, luego que lo permitan las circunstancias, y antes de
20 de mayo del año próximo pasado sobre el reintegro de los Resguardos a cumplirse los cinco (5) años de que habla el artículo 2°. (Suspendido
los naturales y su repartimiento. S. E. se ha visto forzado a adoptar esta Decretos de 29 de diciembre de 1837 y 7 de diciembre de 1838).
medida para acallar las quejas y clamores de todos los pueblos por donde
ha transitado, porque lejos de haber sido mejorados han perdido redu- Artículo 4. A cada familia de indígenas, hasta ahora tributarios, se
ciendolos a la última extremidad. ' asignará de los resguardos la parte que le corresponda, según la extensión
de éstos y número de individuos de que se componga la familia .
. En primera ocasión enviaré a V. E. copia de lo que con este motivo
digo hoy al señor Comandante General de esta Provincia. Artículo 5. El Gobierno mandará formar inmediatamente listas muy
exactas de los indígenas que en cada pueblo tengan derecho al reparti-
Dios guarde a V. E. muchos años. Cerinza, febrero 12 de 1821. 11. miento y tomará informe de la extensión de los resguardos, de las dificul-
Lades que ofrezca la división y de los medios de verificarla, de los gastos
PEDRO BRICEÑO MENDEZ que deban hacerse y de dónde deban abonarse. De todo lo cual dará
cuenta al próximo Congreso.
(Archivo del Libertador. Sección O'Learv, tomo XVIII parte primera
folio 65 vuelto. Copiador). · ' ' Artículo 6. Entretanto los resguardos continuarán poseyéndose por
Jos naturales bajo las mismas reglas que se han observado hasta ahora;
LEY DE 1821 más en donde haya terreno sobrante, o que sea necesario para el cultivo
(11 de octubre) de las familias, deberá arrendarse para satisfacer la dotación de la escuela
de primeras letras estipendios de los curas, conforme a lo prescrito, o que
sobre extinción de tributos de los indígenas, distribución de los en adelante se prescriba.
resguardos y exenciones que se les conceden.
Artículo 7. El estipendio y oblata que se abonaba a los curas de las
EL CONGRESO GENERAL DE COLOMBIA, tesorerías nacionales, se pagará:

~on~e_ncid? de _que l?s principios más sanos de política, de razón y de


JUStiCia exig~!limpeno~amente que los indígenas, esta parte considerable l. De los novenos diezmos de las parroquias en que vivan los indíge-
de la_poblacwn colombiana que fue tan vejada y oprimida por el gobierno nas, los que en ningún caso podrán tener otro destino.
espanol, recupere en todos sus derechos, igualándose a los demás ciuda-
danos, ha venido en decretar, y, 2. Si no alcanzaren los novenos, se completará la cantidad del esti-
pendio con lo que produzcan los arrendamientos del sobrante de los
DECRETA LO SIGUIENTE resguardos, satisfechos que sean los gastos de la escuela de primeras
letras.
A!"tículo l. Los _indígenas d~ Colombia, llamados indios en el Código
espanol, no pagar~ en lo yemd~ro el impu~sto conocido con el degra- 3. Si de este modo no se completare aún el estipendio, se repartirá
dante nombre de tnbuto; m podran ser destmados a servirles el corres- la cantidad que falte entre los indígenas, cabeza de familia y mayores de
pon~ien~e salario, que ante~ ~stipule. Ellos quedan en todo iguales a los vemte años, lo que verificará el juez de la parroquia asociado de dos
demas cmdadanos y se regiran por las mismas leyes. (Derogado artículo vecinos, y deberá aprobarse o reformarse por el primer Juez del cantón,
1 o, ley de 11 de octubre de 1828). quien percibirá el repartimiento para hacer efectivo el pago.

Artículo 8. Los protectores de naturales continuarán ejerciendo su


Artícu~o _2. Atendie~do, sin embargo, al estado de miseria en que se
mmisterio y promoverán las acciones comunales que les correspondan;
hal~an, ongmado del ~Istema de abatimiento y degradación en que los pero todas las demás acciones civiles o criminales las instruirán los indí-
teman las l~yes espa~olas, los indígenas continuarán eximidos por el genas como los demás ciudadanos considerados en la clase de miserables;
espacw de cmco (5) anos de pagar derechos parroquiales y de cualquier en cuya virtud no se les llevarán derechos algunos.
38 39
Artículo 9. Hasta que los resguardos no se repartan a los indígenas Guajiros, Cunas, Caroníes, Andaquíes, Mosquitos, Guaraunos, Mara-
en propiedad, continuarán teniendo el pequeño cabildo que les conceden ñones y otros confinantes de éstos. (Modificado concordato de 1887).
las leyes, cuyas funciones seran puramente económicas y reducidas a la
mejor administración de los bienes de la comunidad, quedando sin
em~argo, sujetos a los jueces de las parroquias. (Modificado ley 89 de
Artículo 2. En la capital de la República se establecerá uha junta
1890 artículo 7°). denominada político-eclesiástica de misiones presidida de la persona
encargada del Poder Ejecutivo, o de 18: qu~ él delegart:; y compuesta del
muy reverendo Arzobispo o ~e su VIc8:no, del Presidente de la Al~a
Artículo 10. Quedan abolidos los nombres de pueblos con que eran Corte de Justicia del Secretano del Intenor, del Decano de la Contaduna
conocidas las parroquias de indígena~; y estos podrán obtener toda clase General y de los 'Provinciales de las órdenes religiosas que residieren en
de destinos, siempre que sean apws para desempeñarlos. e Ha.
Artículo 11. En las parroquias de indígenas podrán establecerse Artículo 3. Se atribuye a esta junta la facultad de dirigir las misiones,
cualesquiera otros ciudadanos, pagando el correspondiente arrendamien- acordando los medios de catequizar y de instruir a los indígenas en los
to por los solares que ocupen sus casas; pero de ningún modo perjudicarán ramos del resorte de ambas autoridades, para lo que formará un regla-
a los indígenas en sus pastos, sementeras u otros productos de sus res- mento que ha de ser presentado a la legislatura por medio del gobierno
guardos. (Modificado ley 89 de 1890 an. 7°). para su aprobación.
Artículo 12. Quedan expresamente derogadas las leyes, ordenanzas y
decretos expedidos sobre los indígenas, en todo lo que no sean conformes Artículo 4. En cada departamento en que hayan tribus de indígenas
a la presente ley; y por ella se autoriza al poder ejecutivo para que decida y se establecerá una junta subalterna y subordinada a la de la_ capital,
allane todas las dudas y dificultades que ocurran en su ejecución, dando compuesta del Intedente que la presidirá, de_l muy reverendo Obispo _o de
cuenta al próximo Congreso en los puntos legislativos. su Vicario, del Presidente de la Corte Supeno~, en su defecto del pnmer
Juez Municipal, del Ministro Decano de f!acienda, ~e~ Procurador. (!,e-
Artículo 13. La presente ley no tendrá efecto hasta el 1 o de enero de nerat y de tos Provinciales o Priores de las ordenes religiosas que resiOie-
1822. Dada en el Palacio del Congreso General de Colombia en el Rosario ren en la capital del departamento.
de Cucuta a 4 de octubre de 1821.
Artículo 5. Las Juntas departamentales darán cuenta a la de la capital
cada cuatro meses del estado y progresos de la misión, indicando los
LEY DE 1824 perJUICios o ventajas que observen en la práctica.
(30 de julio)
Artículo 6. El gobierno, con acuerdo de la autoridad eclesiástica
El Senado y Cámara de la República de Colombia unidos en Congreso, destinará para cada misión los sacerdotes seculares o regulares que
voluntariamente se presentaren a la junta respectiva, manifestando el
CONSIDERANDO: designio de querer encargarse de este sagrado ministerio, y con el informe
favorat>le de eHa serán admitidos.
l. Que es uno de sus deberes proteger la propagación de la fe de
Jesucristo, y promover la civilización de las tribus indígenas que habitan Artículo 7. Para cada tribu se destinarán lo menos tres sacerdotes,
en los países limítrofes de su territorio. prehnendose los más idóneos por sus virtudes, luces y patriotismo y
estipulando su comprometimiento por cuatro años.
2. Que por las consecuencias de la guerra de independencia no les ha
sido posible fomentar las misiones que estaban fundadas, ni promover los Artículo t!. Será obligación de los misioneros instruir a los indígenas no
medios suficientes para fundar otras. solamente en el catecismo eclesüisüco, sino también en los principios
pohLicos conforme con la constitución y leyes <;le _Colombia ';ls_ando de los
3. Que siendo dirigidas las misiones conforme al Evangelio, propor- medws suaves que persuadan la poliLica, y la lemdad evangehca, y exclu-
cionarán a las tribus que aún viven en gentilismo, el conocimiento y yendo los de arbitrariedad y de violencia.
prácoica de la religión y las ventajas que reportan las sociedades bien
establecidas con el comercio y civilización, han venido en decretar y
Artículo 9. Durante el período de cuatro años se ll_l~ntendrán los
DECRETAN pueblos en et sistema de reducción dirigid?s P?r l?s ~Iswneros, pero
pasado este término se erigirán en parroquias, mstltuyendose los cur8:s
Artículo l. Se establecen misiones para que se propague la religión de necesarios conforme a las leyes vigentes; pero las que ~.e hayan ya en-
Jesucristo y los principios de la vida civil en los países limítrofes del terri- gidas continuarán del mismo modo, a no ser que exl)an reforma en
concepto de la junta por las disposiciones de esta ley.
torio de Colombia habitados por las tribus conocidas con los nombres de

40 41

·._~.~
existan en dichas bibliotecas para hacer la misma distribución en copias,
Artículo 10. Serán preferidos en la provisión de lo~ curatos los sacer- reservándose los originales.
dotes seculares o regulares que hayan trabajado en las reducciones por
cuatro años, y este mérito les servirá para optar los de otra misión, si en Artículo 21. Los misioneros y los socios propenderán a la instrucción
ella no hubiere aspirantes. del idioma castellano entre los indígenas, informando las disposiciones
que tenga cada parroquia para el establecimiento de escuelas de él y de
Artículo 11. Los gastos de mantención, de transporte de paramentos las primeras letras .
eclesiásticos, y de los efectos que hayan de conducirse en géneros necesa-
rios y herramientas de labor para congratular a los indígenas, se harán Artículo 22. Se asignan para fondos de todas las misiones por ahora los
por el gobierno de los fondos que designará esta ley. ramos siguientes: l. El de vacantes mayores y menores de las diócesis de
la república. 2. El ciento por ciento del producto de diezmos que corres-
Artículo 12. El Gobierno establecerá en cada parroquia el régimen ponda al estado. 3. El producto que existiere, demandas forzosas que no
civil por medios suaves y persuasivos de la conveniencia de la sociedad, estuviere destinado a otros gastos. 4. La octava parte del producto de la
sin permitir que se usen de medidas violentas y arbitrarias. enajenación de tierras baldías. 5. La~ rentas que hubieren en )~s provin-
cias destinadas por la piedad de los fieles al progreso de las misiOnes que
no estén invertidas en otros gastos por leyes posteriores.
Artículo 13. Los jueces de cada parroquia serán elegidos por los
mismos indígenas y en ningún caso se nombrarán los que no sean vecinos Bogotá, mayo 25 de 1824
de eHa. La confirmación de las elecciones se harán por el jefe municipal
del cantón a que pertenezca la parroquia o por la autoridad que designe la
ley orgánica departamental. ·
Artículo 14. Se respetarán todas las propiedades de los indígenas, LEY DE AUXILIO A LOS INDIGENAS
se le cumplirán religiosamente los ofrecimientos que se le hagan a nombre (30 de julio de 1824)
de la república, y se les defenderá en cuanto sea posible de las agresiones
de sus vecinos, principalmente por mediaciones y arbitramentos. Para que se auxilie a las tribus de indígenas que quieran abandonar
su vida errante.
Artículo 15. El gobierno mandará distribuir a proporción del fondo que
quede libre, vestuarios, víveres, instrumentos de labor y domésticos, El Senado y Cámara de R. de laR de Colombia reunidos en Congreso.
eligiendo las especies según los usos y necesidades de cada tribu y según
los informes que los misioneros hayan dado a las juntas.
CONSIDERANDO:
Artículo 16. Si algunos jóvenes seculares instruidos en física y en
historia natural, bien sean de los alumnos del museo o de los departamen- l. Que es uno de sus primeros deberes proteger la propagación del
tos quisieren ir en calidad de socios de los misioneros para perfeccionar cristianismo, y la civilización de las tribus indígenas gentiles que ~iven
sus conocimientos, serán incorporados por el tiempo de cuatro años, errantes dentro de los limites de su territorio. 2. Que por consecuencia de
costeados de los fondos de la misión y provistos en lo posible de libros, la guerra de independencia, no ha sid? posibl~ fome~tar ampliamente !as
mapas e instrumentos de física. misiones establecidas en favor de dichas tnbus m proveer de medtos
suficientes para establecer otras. 3. En fin; que actualmen~e hay varias
Artículo 17. Será obligación de los socios estar subordinados al director capitanías o tribus, que manifiest~ deseo~ de entrar en ~oci~dad con los
de la misión que nombrare el gobierno, escribir la historia, observar y pueblos restantes que se hallan baJo el Gobierno de la Repubhca;
colectar producciones del resorte de su profesión, y remitirlas cada cuatro
meses al museo de la capital por medio de las juntas respectivas. DECRETA:
Artículo 18. Uno de los socios de cada misión podrá ser empleado en Artículo l. El Poder Ejecutivo, de las tierras baldías que pertenecen a
clase de comisario o administrador de los intereses y efectos que les la República distribuirá las fanegadas proporcionadas a cad~ una de las
pertenezcan, y hará la distribución conforme a las órdenes que el gobierno tribus, de indígenas gentiles, que qmeran abandonar su VIda ~rra~te,
comunique a los directores. y se reduzcan a formales parroquias, regidas y go~ef!ladas en 1?~ termmos
que está dispuesto para las demás de la Republica. (Modificado Ley
Artículo 19. Se exigirán por el gobierno de las bibliotecas públicas y 135/61' art. 94).
claustrales los libros, los manuscritos y las cartas geográficas que hubie-
ren archivadas desde la antigüedad para que se distribuyan copias, si Artículo 2. Hará que se auxilie en cuanto fuere posible cada una de
fuere posible impresas, respectivas a cada misión. dichas tribus, con lo necesario para su establecimiento, a propo.rci?n de
Artículo 20. Igualmente se exigirán los diccionarios, las gramáticas, su número, y de sus necesidades, haciendo los gastos del tesoro pubhco.
los índices o prontuarios de los varios idiomas de los indígenas que
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Artículo 3. Conforme a la ley, hará que se provea de párrocos, sean salvajes existen dentro de su territorio, su número aproximado y el de cada
una de las tribus; cuáles son sus caracteres más generales y sus usos y
seculares o regulares, tanto a las nuevas poblaciones como a las antiguas costumbres conocidas; en fin, cuáles son los medios más eficaces que
que carezcan de ellos.
podrían adopí;arse para reducirles a que, abandonando su vida errante, se
sujetasen a poblado, para irles civilizando poco a poco. Modificado Ley
Artículo 4. Cuando en sus diócesis no hubiese suficiente número de
eclesiásticos, que se puedan destinar a las Misiones, los regulares de 135/61, art. 94.
otras diócesis se emplearán en este ministerio y el Poder Ejecutivo dará
al efecto las órdenes convenientes, exigiendo previamente los informes Artículo 2. Informarán igualmente cuáles son las antiguas misiones
necesarios de los Prelados eclesiásticos de la diócesis, que necesite de que había en su departamento; cuál es su estado actual, a qué orden
misioneros y de la que deba remitirlos. regular corresponden y si tienen o no curas; proponiendo, según los cono-
cimientos locales y las circunstancias particulares del territorio y de los
indígenas que componían las misiones, las reglas que se pudieran adoptar
Artículo 5. Destinará para servicio de aquellas parroquias los para- por el Poder Ejecutivo para el establecimiento, régimen y adelantamier~o
mentos y alhajas que no se necesiten en las iglesias de los conventos de las expresadas misiones.
suprimidos o que no se hayan aplicado a otras iglesias; y en caso de que no
haya en los conventos suprimidos los paramentos necesarios, el Poder Artículo 3. Para cumplir con lo que disponen los artículos 3 y 4 de la
Ejecutivo hará del tesoro los gastos indispensables para el servicio del ley, los intendentes informarán los eclesiásticos seculares o regulares que
culto en las Misiones. puedan destinarse a las misiones y si convendrá darles alguna orden
regular, para que las sirvan; más si no hubiere suficiente número de ecle-
· · Artículo 6. El Poder Ejecutivo formará los reglamentos necesarios para siásticos, lo informarán también al Poder Ejecutivo, pidiendo el número
el establecimiento y régimen de las nuevas poblaciones, y de las antiguas de regulares que conceptúen bastante para el servicio espiritual de las
misiones, proporcionándolos a las circunstancias locales y sometiéndolos misiones.
a la aprobación del Congreso, sin perjuicio de su ejecución.
Artículo 4. Los intendentes ofrecerán a los indígenas que quieran
Dada en Bogotá a 30 de julio de 1824, 14 de la Independencia. El reunirse en poblado, que se les repartirán las tierras bastantes para sus
Presidente del Senado, José María del Real. El Presidente de la Cámara labranzas y ganados cuando los tengan; al efecto podrár. hacer la asigna-
de Representantes, José Rafael Mosquera. El Secretario del Senado, ción a cada familia de una extensión que no pase de 200 fanegadas, pero
Antonio José Caro. El diputado Secretario de la Cámara de Represen- que sí podrá ser menor. También ofrecerán los intendentes a los mismos
tantes, José Joaquín Suárez. indígenas que les darán herramientas para formar sus casas y primeras
sementeras, y que se les dará un vestido y socorros de alimentos, mientras
Palacio del Gobierno en Bogotá a 3 de agosto de 1824, 14 de la Inde- tienen con qué sostenerse de sus labranzas. (Modificado ley 135 de 1961,
pendencia. Ejecútese. Francisco de Paula Santander. Por S. E. el Vice- art. 94).
director de la República encargado del Poder Ejecutivo. Ei secretario de
Estado del despacho del interior, José Manuel Restrepo. Artículo 5. Conforme al artículo 2. de la citada ley de 30 de julio último,
estos gastos se harán de los fondos públicos, según fuere posible y lo
permitan otras necesidades más urgentes. Los intendentes dictarán
DECRETO DE 18 DE SEPTIEMBRE DE 1824 provisionalmente las reglas bajo las cuales se han de hacer tales gastos,
DECRETO SOBRE NACIONES DE INDIGENAS para asegurar su legítima inversión, mientras que, dando cuenta con los
documentos o informes de la cantidad anual que pueda ser necesaria en
FRANCISCO DE PAULA SANTANDER cada departamento, el Poder Ejecutivo fija los gastos anuales y forma los
reglamentos de que habla el artículo 6 de la Ley.
De los Libertadores de Venezuela y Cundinamarca, condecorado con
la Cruz de Boyacá, General de División de los ejércitos de Colombia, Artículo 6. En aquellos departamentos en que las tierras sean propias
Vicepresidente de la República, encargado del Poder Ejecutivo, etc., etc. para ganados, o en que éstos se proporcionan con facilidad, a cada nueva
población de indígenas que se vaya formando se le darán 25 reses para
En ejecución del decreto del Congreso de 3 de agosto último autori- establecer un hato de comunidad que provea en lo venidero a las necesi-
zando al Poder Ejecutivo de la República para promover la civilización y dades generales y más urgentes de la parroquia. Estos ganados vacunos
la propagación de la religión cristiana entre los indios gentiles, ha venido se sacarán con la debida cuenta y razón de los hatos que se administren de
en cuenta del Estado, donde los haya, y donde no, se comprarán de los
fondos públicos. Los intendentes en sus respectivos departamentos harán
Decretar lo que sigue: los reglamentos necesarios para formar los expresados hatos de comu-
nidad, para su manejo, y a qué se han de destinar sus productos, dando
Artículo l. Los intendentes de los departamentos informarán, a la cuenta para su aprobación o reforma.
mayor brevedad posible, qué naciones conocidas de indios gentiles y
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Articulo-6. El Poder Ejecutivo dará cuenta al Congreso en su próxima
Artículo 7. El Secretario de Estado del Despacho del Interior queda reunión, así de los Reglamentos de que habla el artículo 2 como de los
encargado de la ejecución de este decreto. arreglos de que trata el artículo 3 para su conocimiento, y del cumpli-
miento de este decreto.
Dado en el Palacio del Gobierno, en Bogotá, a 18 de septiembre de
1824, 14. Francisco de Paula Santander. El Secretario de Estado del Dado en Bogotá a 29 de abril de 1826. 16 de la Independencia. El
Despacho del Interior, José Manuel Restrepo. Presidente, del Senado, Luis A. Baralt. El Presidente de la Cámara de
Representantes, Cayetano Arvelo. El Secretario del Senado, Luis Vargas
Tejada. El diputado Secretario, Mariano Miño.

Palacio del Gobierno en Bogotá a 1 de mayo de 1826, 16 de la Inde-


pendencia, Ejecútese, Francisco de Paula Santander. Por S. E. el Vicepre-
sidente de la República encargado del Poder Ejecutivo. El Secretario de
Estado del despacho del interior, José Manuel Restrepo.
DECRETO DE 29 DE ABRIL DE 1826
(SOBRE PROTECCION A LOS INDIGENAS)

Declarando que los indígenas de la Guajira, Darién y Mosquitos deben DECRETO DE 11 DE JULIO DE 1826
ser protegidos por el Gobierno como los demás colombianos. SOBRE CIVILIZACION DE INDIGENAS
El Senado y Cámara de R. de la R. de Colombia reunidos en Congreso. FRACISCO DE PAULA SANTANDER,
Considerando: l. Que dentro de los límites del territorio de la República
fijados por el artículo 6 de la Constitución, se hallan las tribus de la Gua- Vicepresidente de la República, encargado del Poder Ejecutivo,
jira, Darién y Mosquitos, y otras de indígenas no civilizados, tanto más etc., etc.
dignas de la protección y cuidados del Gobierno, cuando su falta de cul-
tura las aleja del trato y comunicación de los demás colombianos, a Cumpliendo con lo dispuesto en las leyes de 3 de agosto de 1824 y 1 de
quienes miran como a sus enemigos. 2. Que inspirando confianza a mayo último sobr~ civilización de indígenas gentiles y teniendo presentes
dichas tribus por medio de una particular protección y trato benéfico los diferentes informes que sobre la materia han dirigido los intendentes
abandonarán la vida salvaje y vendrán a formar parte importante de la de los departamentos y algunas juntas provinc.iales, he venido en decretar
población de la República, estableciendo relaciones que l&s unan en lo siguiente:
mtereses con el resto de la Nación;
Artículo l. Para promover eficazmente la civilización de los indígenas
DECRETAN: se irán estableciendo en el territorio en que vagan, nuevas poblaciones a
las que por medios suaves se reduzcan a vivir, cuidando de dedicarles al
Artículo l. Las tribus de indígenas que habitan las costas de la Guajira, cultivo de la tierra, a la cría de ganado, según parezca más ventajoso en
Danen y Mosquitos, y las demás no civilizadas que existen en el territorio los diferentes terrenos.
de la República, serán protegidas y tratadas como colombianos dignos
de la consideración y especiales cuidados del Gobierno. Articulo 2. Uno de estos establecimientos será en el mejor puerto de la
Guajira, estableciéndose también otros semejantes en las costas de Darién
Artículo 2. El Poder Ejecutivo tomará todas las medidas conducentes y Mosquitos, luego que sean ventajosos y posibles según las circunstan-
para la civilización de dichas tribus, y para que entren en una mutua e Cias.
íntima comunicación con las poblaciones vecinas, y formará los reglamen-
tos necesarios para ello. Artículo 3. A cada una de las nuevas parroquias se señalará una
extensión proporcionada de tierras baldías que no bajará de diez mil
Artícl!lo 3. Igualmente hará los arreglos especiales convenientes para fanegadas, las que progresivamente se irán distribuyendo en toda propie-
su comercio, tanto con los nacionales como con los extranjeros. dad a los indígenas que vayan civilizándose o dedicándose a la agricultura
y a la ganadería, dando a cada familia desde diez hasta cien fanegadas
Artículo 4. Al intento se formarán los establecimientos convenientes segun la calidad del terreno. (Modificado ley 135 de 1961, art. 94).
en los lugares a donde sean más ventajosos para la consecución del objeto
que se propone en esta disposición. ' Artículo 4. Cada una de estas nuevas poblaciones tendrá un jefe nom-
brado capitán fundador, y un teniente cuya duración será de tres años,
Artículo 5. Para Jos gastos necesarios se asigna la cantidad de cien mil pudiéndose reelegir; serán nombrados por el intendente a propuesta del
pesos por año, que se sacarán de las rentas aplicadas a las Misiones y en gobernador de la provincia entre las personas que tengan más influjo
su defecto de los fondos nacionales. '
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l
sobre los indígenas y que sean capaces de atraerles a los nuevos estable~ Artículo 10. Los indígenas que se reduzcan a la vida social, estaran
cimientos, de fijarles en ellos y de ir poco a poco reduciéndoles a la vida exentos por diez años de pagar diezmos y primicias lo mismo que cual-
sociaL Luego que sea conveniente o necesario se pondrán alcaldes parro~ quiera otras contribuciones; las demás personas, de que habla el artículo
quiales en las nuevas poblaciones a juicio del gobernador de la provincia a anterior, gozarán por el término de cinco años de la exención de diezmos
que pertenezca la población, oyendo previamente a la junta provincial. yprimicias en los frutos de que no hablen las leyes de 18 de abril de 1824
y de 1826.
Artículo 5. Las funciones de los capitanes fundadores serán: l. cuidar
de atraer a los indígenas y reducirlos a poblado; 2. mantener el orden en Artículo 11. En consideración a la variedad de caracteres, usos y cos-
las nuevas poblaciones y cuidar de la policía de todos sus ramos; 3. repar- tumbres de las diferentes tribus de indígenas salvajes que habitan el
tir a cada familia el número de fanegadas de tierra que necesite; 4. ense- territorio de la República, y a que por lo tanto no pueden ser comprendi-
das bajo de unas mismas reglas para promover su civilización, los inten-
ñar a los indígenas a construir sus casas, y a cultivar los frutos propios del dentes de los departamentos donde hubiere dichas tribus formarán los
país, entre los cuales, se escogerán los que puedan series más ventajosos; reglamentos de policía que han de servir para establecer las nuevas
5. fomentar las nuevas poblaciones por cuantos medios le sugiera su celo y poblaciones, acomodándoles a las circunstancias locales y bajo las bases
el conocimiento del carácter de Jos indígenas de que se componga la po~ que parezcan más propias para obtener la civilización de los indígenas,
blación, usando de un influjo peternal más bien que de la fuerza, hasta teniendo en consideración su carácter, hábitos y costumbres. Estos regla-
que los indígenas contraigan los hábitos propios de la sociedad; por consi- mentos deberán hacerse a Jo más tarde dentro de dos meses de recibido
guiente al principio de ningún modo se les obligará a prácticas religiosas, esLe, y para su aprobación o reforma se remitirá al Poder Ejecutivo de tal
o a otras a que no se hallen acostumbrados y que sólo servirán para suerte que se reciba en la secretaría del interior en los primeros días de
retraerles de la vida social. diciembre próximo. (Modificado art. 1, Ley 89 de 11:!90).

Artículo 6. Las poblaciones de indígenas tendrán curas seculares o Artículo 12. El Secretario de Estado del despacho del interior queda
regulares para que cuiden de instruirles en los principios de la moral y encargado de la ejecución de este decreto.
de la religión, haciéndolo con la mayor prudencia y circunspección, de tal
suerte que antes se ganen los corazones de los indígenas con su dulzura, Dado en el palacio de gobierno en Bogotá a 11 de julio de 1826, 16 de
moderación y virtudes y les hagan amar su nuevo método de vida. Enton~ la independencia. Francisco de Paula Santander. El secretario del inte-
ces y según el carácter de cada tribu de indígenas comenzará la instruc~ rior: José Manuel Restrepo.
ción religiosa sin hacerles violencia alguna, pues de otra suerte ellos
abandonarán la vida social y volverán a los bosques.
RESOLUCION SOBRE QUE LOS INDIOS COLOMBIANOS PAGUEN
Artículo 7. A cada uno de los curas de estas nuevas poblaciones, que UNA CONTRIBUCION LLAMADA CONTRIBUCION PERSONAL
tendrán el título de misioneros, se les abonarán 400 pesos anuales de los DE INDIGENAS
fondos públicos en la tesorería de la Provincia o en la del Departamento, (15 de octubre de 1828)
lo que se verificará por mesadas o por trimestres. También se les suminis-
trará el viático para su primera traslación al curato en la cantidad de 12 SIMON BOLIV AR,
reales por legua. Libertador Presidente, etc., etc.

Artículo 8. Los indígenas de estas nuevas poblaciones serán auxiliados CONSIDERANDO:


para sus primeros establecimientos con herramientas, algunos animales
domésticos, víveres, dos vestidos y lo demás que sea preciso para la l. Que es un deber indispensable de todos los colombianos contribuir
fundación; verificada la cual, cesarán dichos auxilios, que conforme a la al sostenimiento de las cargas del Estado, bien sea de un modo directo
Ley se darán de los fondos públicos. Lo& intendentes respectivos, oídos o t>1en indirecto, de cuya obligación no están exentos los indígenas;
los informes de los gobernadores de las provincias en que se hallan
situadas las nuevas poblaciones, harán cada año el presupuesto de los 2. Que habiéndoles igualado la ley de 14 de septiembre del año 11 en
gastos, que se dirigirán a la Secretaría del Interior y cuidarán de la las contribuciones a los demás colombianos con el objeto de beneficiarles,
legítima inversión de Jos fondos, que se destinarán para ellos, formando al leJOS de haber mejorado su condición se ha empeorado y se han agravado
efecto el reglamento necesario. sus necesidades;

Artículo 9. En las nuevas poblaciones de indígenas podrán también J. Que los mismos indígenas desean generalmente y una gran parte
poblar las personas que no sean indígenas, a las que se darán gratuita~ de ellos ha solicitado hagan sólo una contribución personal quedando
mente los solares en que edifiquen sus casas, y se les venderán o arren- exentos de las cargas y pensiones anexas a los demás ciudadanos, oído
darán tierras para sus labores. el parecer del Consejo de Estado, he venido en decretar lo siguiente:

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TITULO 1
Nombres, tasa y tiempo de la contribución que deben pagar los indígenas Art1culo 7. Del padrón general sacarán los recaudadores listas particu-
. j;; lares de los indígenas contribuyentes, juradas por ellos, el alcalde parro-
Artículo l. Los indígenas colombianos pagarán, desde la edad de 18 ..._'} qu1al y el cura, las que deberim servir para cobrar la contribución, reno-
años cumplidos hasta la de 50, también cumplidos, una contribución que vándose éstas anualmente con puntual expresión de los nuevos contribu-
se llamará contribución personal de indígenas. (Derogado ley de marzo 6 yen tes.
de 1832).
Artículo 8. La tesorería entregará a los recaudadores rubricados los
Artículo 2. Esta contribución será igualmente para todos la de tres libros en que deben llevar la razón detallada de la cobranza con distinción
pesos cuatro reales al año. de parroquias y número de contribuyentes, y las cartas de pago que deben
darse a éstos por los recaudadores impresas y selladas. Estas cartas
Parágrafo Primero. Los indígenas que además de las tierras de comu- contendrán el nombre del indígena que contribuye,la parroquia, domicilio
nidad o resguardo posean un capital en propiedad de valor de mil o más o hacienda a que pertenezca y la cantidad que ha contribuido, llenándose
pesos en fincas raíces o en bienes muebles, dejarán de pagar esta contri- por el recaudador estas calidades en los espacios que al efecto se dejarán
bución y quedarán sujetos a las ordinarias del común de los ciudadanos. en dichas cartas.

Parágrafo Segundo. Serán también exceptuados todos aquellos indí- Parágrafo Unico. Estas se expedirán por las Contadurías de Hacienda
genas que se hallen lisiados o enfermos habitualmente hasta el extremo quienes la pasarán a las tesorerías con el fin insinuado.
de no poder trabajar y ganar un salario, justificándose previamente esta
imposibilidad con las formalidades legales que merezcan de la autoridad Artículo 9. Cuando ocurriese el fallecimiento de algún indígena
competente la declaratoria de exención con previo informe del recau- contribuyente, los recaudadores lo anotarán en las listas y libros de la
dador. cobranza, exigiendo la fe de muerte que se les dará por los curas sin
derecho alguno.
Artículo 3. La contribución personal de indígenas se deberá pagar en
dos plazos, que se cumplirán en 30 de junio y 31 de diciembre de cada año; Parágrafo Unico. En el caso de no hallarse la partida de muerte en los
en el presente sólo se cobrará la cuota o porción de un semestre, que se de ausencia de algún indígena sin que haya razón de su existencia, se
tendrá por cumplido en fin de diciembre. acreditará la muerte o ausencia con certificados juradas de un alcalde y
cura de la parroquia, o con información de testigos en papel de oficio.
TITULO 11
De los recaudadores, sus obligaciones, fianzas y gratificaciones Artículo 10. Si algún indígena hubiese variado de domicilio, el recau-
dador del lugar a que haya pasado le exigirá la contribución que deba, lo
Artículo 4. La recaudación de la contribución de indígenas estará a anotará en sus listas y dará aviso al del domicilio anterior para su des-
cargo de las personas o empleados que asignare el gobierno. cargo.
Articulo 5. Todos los nombrados al efecto asegurarán la cuarta parte Artículo 11. Los recaudadores están obligados a enterar puntualmente
de la cantidad a que debe ascender la cobranza que se les encargue, y a las cantidades que recauden en las respectivas tesorerías informándose
más de la obligación consiguiente de sus bienes propios otorgarán las estas mensualmente del estado de las cobranzas para dar con oportunidad
correspondientes fianzas a satisfacción de los intendentes respectivos que las providencias necesarias contra los renuentes o morosos.
deberán calificarlos, oyendo a la junta de Hacienda.
Artículo 12. Anualmente rendirán los recaudadores a las tesorerías
Parágrafo Unico. Un testimonio de la escritura de fianza se pasará a cuenta jurada de la cobranza, debiendo verificarlo lo más tarde en todo el
la Contaduría de la Hacienda y otro a la tesorería, a costa del recaudador. mes de marzo del año siguiente con la expresa calidad de hacer, no obs-
tante, los enteros a proporción que se verifique la cobranza y de haber
Artículo 6. Los recaudadores pasarán personalmente a las parroquias enterado el total de ella un mes antes del rendimiento de la cuenta.
o lugares comprendidos en el partido de la cobranza de su cargo, y asocia-
dos de uno de los alcaldes parroquiales o del cura, formarán, con presen- Parágrafo Unico. Por comprobante de ella se acompaña~án las listas y
cia de los padrones y libros de la parroquia, valiéndose de los medios libros de la cobranza, las partidas o documentos que acrediten la ~uerte
suaves que dicte la prudencia para evitar todo estrépito, un padrón o ausencia de los indígenas o la exención de pago que hayan obtemdo, la
general de todos los indígenas varones con expresión de la edad de cada razón jurada por el recaudador de los rezagos que queden por cobrarse
uno, el que firmado por los tres se pasará a la Contaduría de Hacienda y con las diligencias que justifiquen legalmente la imposibilidad del cobro y
otro igual a la tesorería respectiva y se renovará cada cinco años. el sobrante de las cartas de pago que hayan recibido.
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w:¡: 1'"

Artículo 13. Las tesorerías examinarán y fenecerán las cuentas de los


recaudadores de la contribución de indígenas, lo más tarde en los tres 3. Concurrir con su influjo y diligencias a la recaudación de la contribu-
meses siguientes al de su presentación. ción personal, cuando la persona encargada al efecto se presente en las
" parroquias, avisándolo anticipadamente a los contribuyentes, a fin de que
Artículo 14. Se señala a los recaudadores el seis por ciento de todas las al pnmer requerimiento ejecuten el pago;
cantidades que recauden, sin otro emolumento ni gratificación por razón
de gastos. 4. Noticiar con oportunidad a los curas cuando algún indígeala se halle
enfermo de gravedad para que pueda ser socorrido con los auxilios
espirituales y corporales que la necesidad demande. (Modificado ley 89
TITULO III de 1890, art. 7).
De las exenciones que deben gozar los indígenas
TITULO V
Artículo 15. Quedarán eximidos los indígenas de todo servicio en el
ejército, a menos que voluntariamente se presenten a alistarse en los De Jos resguardos o tierras de los indígenas
cuerpos veteranos. Estarán libres de pagar derechos parroquiales y de
toda otra contribución nacional de cualquiera clase que sea. Artículo 19. En las parroquias donde hayan tierras de comunidad o
resguardo se asignará a cada familia de indígenas la parte necesaria para
Parágrafo Unico. Para gozar de la exención de pagar alcabala es su habitación y cultivo particular, a más de lo que necesiten en común
necesario que lo que vendie~en, negociaren o contrataren sea propio suyo, para sus ganados y otros usos.
de su cosecha, labran.za, enanza y labor, o perteneciente a otros indíge-
Artículo 20. En donde haya sobrante de tierras podrá arrendarse a
nas, pero lo q~e vendier~n de persona que debe alcabala, estarán obliga-
dos a descubnrlo y manifestarlo, guardándose las instrucciones particu- beneficio de la comunidad de indígenas, practicándose el arrendamiento
lares de la renta. en pública subasta ante el gobernador de la provincia, con presencia del
protector, y serán preferidos los indígenas por el tanto en concurrencia
_Artícul? ~6. En to~o~ los negocios que interesen los indígenas y en las de otros ciudadanos, siempre que los arrendamientos sean para sí y
acciOnes civiles o cnmmales que se promovieren entre ellos o con los presten la seguridad necesaria.
demás ciudadanos, ya sea de comunidad o de particulares, serán conside-
rados como personas miserables, en cuya virtud no se les llevarán dere- Artículo 21. Los curas y protectores estimularán a los indígenas
chos _a~gunos por los tribunales y juzgados seculares y eclesiásticos. por Jos medios más suaves a trabajar en común una porción suficiente de
(Modificado ley 89 de 1890, art. 27). tierra del sobrante de los resguardos para invertir sus productos precisa-
mente en beneficio de los mismos indígenas.
Ar~ículo 17. No podrán ser des~inados los indígenas a servicio alguno
por nmguna clase de personas, sm pagarles el correspondiente salario TITULO VI
según la costumbre del país.
De los protectores generales y particulares de los indígenas
TITULO IV Artículo 22. El fiscal o fiscales de las cortes de justicia serán protecto-
res generales de indígenas y siempre que éstos ocurriesen a cualquiera de
De los Cabildos y demás empleados de los indígenas ellos en particular o en común para que representen al gobierno o tribuna-
les superiores alguna cosa que interese a sus derechos, lo deberán hacer
Artículo 18. Se conservarán los pequeños cabildos y empleados que sin dilaciones que les sean gravosas.
han tenido las parroquias de indígenas para su régimen puramente
económico. Artículo 23. Los fiscales protectores generales representarán al gobier-
no todo cuanto consideren útil y ventajoso a los indígenas, a su civilización
Parágrafo Unico. Las obligaciones de estos empleados serán: y bienestar y a la conservación de sus resguardos, sin permitir que perso-
na alguna se los enajene y usurpe.
l. Celar la conducta en sus subordinados a fin de evitar los excesos en
bebida o en otra especie;
Artículo 24. Los agentes fiscales serán protectores particulares de la
provincia en que reside el Tribunal, y en cada una de las otras provincias
2. Dar aviso a los recaudadores de los indígenas que se hayan ausen- o cabeceras habrá un protector nombrado por el prefecto, a propuesta de
tado de la parroquia o de los que hayan venido a ella de otras parroquias;
Jos gobernadores.
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Artículo 25. Los protectores de provincia defenderán la person,a y


propiedades de los indígenas y las concesiones y privilegios que se les dan Los Ministros Secretarios de Estado del Despacho del interior y de
por este decreto y por las leyes existentes, verificándolo en papel de oficio Hacienda, quedan encargados de su ejecución y cumplimiento en la parte
y sin Hevarles derechos, ni gratificación alguna. que les corresponda.

Artículo 26. Promoverán los protectores, por cuantos medios estén a · ~~. Dado en el Palacio de Gobierno, en Bogotá, capital de la República,
su alcance, el establecimiento de escuelas para la educación de los hijos de 'a 15 de octubre de 1828.
los indígenas, y excitarán a los padres a que los envíen a estos estableci- ~ SIMON BOLIV AR
mientos con toda la frecuencia posible.
LEY ll'!:tl
Artículo 27. Representarán a los tribunales por medio de los fiscales y (marzo 6)
pedirán al gobierno por conducto del gobernador respectivo cuanto
consideren justo y benéfico a los indígenas de su provincia. que da reglas para el repartimiento de los resguardos de indígenas,
y declara abolida la contribución personal.
Artículo 28. Los protectores durante su encargo serán eximidos de
La Convención del Estado de la Nueva Granada
toda carga consejil.
DECRETA:
Artículo 29. En los casos en que resulten impedidos los protectores
para intervenir en la defensa de algún indígena, se nombrarán provisio- Articulo l. El Poder ejecutivo dictará providencias eficaces, para que a
nalmente por el tribunal o juzgado el defensor o defensores que sean lo más dentro del término de un año, después de la publicación de la pre-
necesarios a falta de abogados de pobres, debiendo los defensores así , sen te ley, queden cumplidas las disposiciones de la de 11 de octubre de
nombrados hacerles la defensa gratuitamente como a personas mise- ' 1821, sobre distribución de los resguardos de tierras entre los indígenas.
rables.
Artículo 2. Para la mejor ejecución de esta medida se observarán las
Artículo 30. A juicio del gobierno y previos los informes que tenga a regias contenidas en los artículos siguientes.
bien pedir a los intendentes respectivos, se les señalará a los protectores
particulares una cuota o renta que les indemnice su trabajo. Artículo 3. Antes ·de verificarse toda distribución, se separarán, según
sea mayor o menor la extensión de los resguardos, de ocho a veinte fane-
gadas de tterra en área de la respectiva población y sus contornos, las
TITULO VII cuales serán destinadas para fomentar y aumentar la misma población,
vendiéndose o arrendándose en pública almoneda los repectivos solares
De los estipendios de los curas y observancia de este decreto para edificar en eHos.

Artículo 31. Los curas doctrineros gozarán el estipendio o asignación Artículo 4. La tierra de resguardo de cada comunidad, deberá distri-
de ciento ochenta y tres pesos dos reales cada uno. bUirse en doce porciones de igual valor. Se destinarán dos o por lo menos
una de estas porciones, para mantener con su producto la escuela parro-
Artículo 32. Los curas que gozaren alguna asignación en los novenos o quial, según sea mayor o menor la extensión de los resguardos relativa-
en la masa decimal, no tendrán el estipendio designado; pero si fuese mente al número de los indígenas. Otra de estas porciones se destinará
menor la parte que tengan de novenos, se les completará hasta los ciento para cubrir con et producto de su venta tos gastos muy precisos e indispen-
ochenta y tres pesos dos reales. sables de medición y repartimiento; y el sobrante si lo hubiere, acrecerá
al terreno partible entre los indígenas. Si éstos se convinieren en pagar
Artículo 33. Queda derogada en todas sus partes la ley de 4 de sep- dichos gastos, la porción expresada acrecerá igualmente a dicho terreno
tiembre del año 11 sobre indígenas. partit>le entre eHos.

Articulo 34. El presente decreto se pondrá en ejecución gradualmente Artículo 5. Las porciones restantes se reunirán en un cuerpo para dis-
en todo o en parte, según las órdenes sucesivas que se vayan expidiendo tnt>Uirse proporcionalmente en propiedad entre los indígenas, conforme a
por la secretaría respectiva. las bases que siguen:

Artículo 35. En las provincias donde no se haya mandado ejecutar, el l. Se formarán tantas partes cuantas sea el número de las familias de
gobierno, atendiendo a sus particulares circunstancias, dictará por decre- mdigenas de que conste la misma comunidad, para adjudicar una a cada
tos especiales las reglas que deban observarse. una; y se reputan como familia distinta, aquellos individuos que no estén
comprendidas en otras;
54 55
-~,~-------------

2. Estas partes serán proporcionalmente mayores o menores en lo


posible, cuanto sea mayor o menor el número de los individuos de la fami- El Senado y la Cámara de Representantes de la Nueva Granada,
lia a que se adjudique cada parte; reunidos en Congreso,
DECRETAN:
3. Para la formación y distribución de dichas partes, se atenderá no
sólo a su extensión material, sino también al mayor o menor valor de ellas, t Articulo Unico. Exceptúase del alistamiento y servicio militar en el
según la calidad y posición del terreno y otras ventajas o desventajas que tiército y guardia nacional auxiliar a los indígenas salvajes que se reduz-
aumenten o disminuyan su precio; Om a la vida social, y también a sus hijos.
4. En la adjudicación de una parte, obtendrá la preferencia aquella 1 Dado en Bogotá, a 28 de marzo de 1l'48.
familia que al tiempo de verificarla, tenga allí una casa u otro estableci- ~
miento. ,; LEY 153 DE 1887

Artículo 6. Para la más cumplida ejecución de estas disposiciones, se '/ Articulo 318. El gobierno podrá modificar, por medio de decretos y
practicarán las dimensiones y evaluaciones convenientes por peritos 9Jglamentos, el derecho común para la resolución y régimen de las tribus
imparciales que nombrará la respectiva autoridad pública, con noticia y bárbaras o salvajes existentes en el territorio de la República atendiendo a
aquiescencia del correspondiente cabildo de indígenas. ius especiales costumbres y necesidades.

Artículo 7. Ningún indígena podrá vender la porción de tierra que se le Artículo 319. El gobierno podrá celebrar convenio con el representante
haya adjudicado antes del término de diez años, si no es en el solo caso de ~e la Santa Sede para el fomento de las Misiones Católicas en las mencio-
que hay? de variar de domicilio, y con previa licencia del jefe político del Jtladas tribus. Tales convenios no requieren ulterior aprobación del Con-
cantón, la cual sólo será válida en el caso de que así se verifique. Sin ¡reso.
embargo, el Poder ejecutivo podrá conceder la facultad de enajenar sus
tierras a los indígenas de alguna o algunas provincias, con las precau- Articulo 320. Los bárbaros que hayan sido condenados a pena corporal,
ciones que estime convenientes, siempre que el Gobernador de la provin- 1 que durante la condena hayan sido catequizados y bautizados podrán
cia con previo acuerdo de la cámara respectiva, informe que es necesario pedir rebaja de pena, y el Gobierno está autorizado para concederla tan
o conveniente el que así se practique; en todo caso la enajenación se hará amplia como lo juzgue conveniente en cada caso particular sin otra
en pública almoneda. regla que su prudente arbitrio.

LEY 89 DE 1800
Artículo 8. Desde el día de la promulgación de esta ley cesará la con- (noviembre 25)
tribución personal que había impuesto a los indígenas el dictador Bolívar;
y desde el propio día quedan sometidos al pago de las que afectan a todos Por la cual se determina la manera como deben ser gobernados los
los granadinos. salvajes que vayan reduciéndose a la vida civilizada.
Dada en Bogotá, a 2 de marzo de 1832-22. de la Independencia. EL CONGRESO DE COLOMBIA
El Presidente de la Convención, José María, Obispo de Santa Marta. DECRETA:
El Secretario, Florentino González.
CAPITULO 1
Bogotá, marzo 6 de 1832-22. de la Independencia.
Disposiciones Generales
Ejecútese. A~tícuJo 1. La legislación general de la República no regirá entre los
salvaJes que vayan reduciéndose a la vida civilizada por medio de Misio-
JOSE MARIA OBANDO. El Secretario de Estado en el Despacho del 4es. En consecuencia, el Gobierno, de acuerdo con la autoridad eclesiás-
Interior y Justicia, JOSE FRANCISCO PEREIRA. $ica, determinará la manera como esas incipientes sociedades deban ser
cobernadas.
DECRETO DE I848
(marzo 29) , Artículo 2. Las comunidades de indígenas reducidas ya a la vida civil
~poco se regirán por las leyes generales de la República en asuntos
que exime del alistamiento y servicio militar a los indígenas salvajes fie resguardos. En tal virtud se gobernarán por las disposiciones consig-
que se reduzcan a la vida social. 'adas a continuación.

56 57

L
años, quede excluido del goce de alguna porción del mismo resguar-
CAPITULO 11 . (Decreto del Libertador del15 de octubre de 1828. artículo 10. Decreto
4 de 1898, artículo 25, num. 4.);
Organización de los Cabildos de Indígenas
5. Procurar que cada familia sea respetada en lo posible en la posesión
Artículo 3. En todos los lugares en que se encuentre establecida una tenga, sin perjuicio de que se le segregue en beneficio de las demás,
parcialidad de indígenas habrá un pequeño cabildo nombrado por éstos sea necesario, la parte excedente que posea. (Decreto Dptal.
conforme a sus costumbres. El período de duración de dicho Cabildo será o. 50 de 19:J/, art. 4);
de un año, de 1 de enero a 31 de diciembre. Para tomar posesión de sus
puestos no necesitan los miembros del Cabildo de otra formalidad que la ti. Arrendar por términos que no excedan de tres años los bosques o
de ser reconocidos por la parcialidad ante el Cabildo cesante y a presencia naturales de éstos y los terrenos del resguardo que no estén poseí-
del Alcalde del Distrito. (Decreto del Libertador de 15 de octubre 1828, por algún indígena; y disponer la inversión que deba darse a los pro-
artículo 18). ..,,,,.""' de tales arrendamientos. (Decreto Dptal. No. 50 de 19:J7, art. 5,
to 74 de 1898, art. 31. Decreto del Libertador de 15 de octubre de
Exceptúanse de esta disposición las parcialidades que estén regidas }ti28 art. 20).
_-,
por un soto cabildo, las que podrán continuar como se hallen establecidas.
(Artículos 1 y 2. Decreto 162 de 1920. Decreto 452 de 1926). )~ Para que los contratos puedan llevarse a efecto se necesita la aproba-
fión de la Corporación Municipal del Distrito, la cual procederá con cono-
Artículo 4. En todo lo relativo al gobierno económico de las parcialida- ,fimiento de la necesidad y utilidad del arriendo, y tomando todas las pre-
des tienen los pequeños Cabildos todas las facultades que les hayan cauciones que crea convenientes. (Decreto 74 de 1898, art. 32);
transmitido sus usos y estatutos particulares, con tal que no se opongan a
lo que previenen las leyes, ni violen las garantías de que disfrutan los
miembros de la parcialidad en su calidad de ciudadanos. 7. Impedir que ningún indígena venda, arriende o hipoteque porción
alguna del resguardo, aunque sea a pretexto de vender las mejoras, que
Artículo 5. Las faltas que cometieren los indígenas contra la moral, siempre se considerarán accesorias a dichos terrenos. (Art. 40 Arts. 25,
serán castigadas por el Gobernador del Cabildo respectivo con penas num. 7 y 80 del Decreto 74 de 1898. Arts, 1, 2, 3, 10 y 11 del Decreto 50
correccionales que no excedan de uno o dos días de arresto. de 1937).

Artículo 6. Los Gobernadores de indígenas cumplirán por sí o por Artículo 8. De los acuerdos que tengan los Cabildos de Indígenas con
medio de sus Agentes las ordenes legales de las autoridades que tengan arreglo al artículo 7 en negi'ICios que no sean de carácter puramente
transitorio, se tomará nota en un libro de registro que llevará el Secretario
por objeto hacer comparecer a los indígenas para algún servicio público o
de la Alcaldía.
acto a que estén legalmente obligados.
Los asientos que en él se hagan serán además firmados por el Alcalde
Artículo 7. Corresponde al Cabildo de cada parcialidad: y Personero Fiscal del Distrito; y deberán ser exhibidos a los indígenas
que lo soliciten.
l. Formar y custodiar el censo distribuido por familias, anotando al
margen, al fin de cada año, las altas y bajas que haya sufrido. (Artículos Artículo 9. Cuando dos o más parcialidades tengan derecho a un
35, 36 y 37. Decreto 74 de 1898) mismo resguardo, y sus Cabildos no puedan avenirse en cuanto al modo
de poseerlo, los arreglos en tal caso, a que se refiere el artículo 7, serán
2. Hacer protocolizar en la Notaría de la Provincia respectiva, dentro
de seis meses, contados desde la fecha de publicación de esta ley, todos .hechos por el Alcaide del Distrito, de cuyas providencias se podrá recia-
los títulos y documentos pertenecientes a la comunidad que gobiernan y . mar ante el Prefecto de ta Provincia respectiva.
custodiar las copias que les expidan, previo el correspondiente registro;
Artículo 10. Las controversias de una parcialidad con otra o de una
3. Formar un cuadro, y custodiarlo religiosamente, de las asignaciones /comunidad con individuos o asociaciones que no pertenezcan a la clase
de solares del resguardo que el mismo Cabildo haya hecho o hiciere entre .: indígena, serán decididas por la autoridad judicial, haciendo para ello uso
las familias de la parcialidad; ~:de las acciones o excepciones detalladas en el Código Judicial de la
i:~ República .
. t~i;~
:.{
4. Distribuir equitativa y prudencialmente, con aprobación del Alcalde
del Distrito, para el efecto de elaborar entre los miembros de la comuni-
:·! En los asuntos de que trata este artículo, conocerán en primera instan-
dad las porciones de resguardos que se mantengan en común, procurando
~cia únicamente los jueces de Circuito, sin atender a la cuantía. (Arts. 35 y
'l'
_:¡:;s.s., Decreto 74 de 1898).
sobre todo que ninguno de los partícipes, casados o mayores de diez y
59
58
Artículo 11. Las controversias entre indígenas de una misma comuni-
dad, o de éstos contra los Cabildos, por razón de uso de los resguardos o Artículo 17. Los remates de que habla el artículo anterior se harán
de los límites de las porciones de que gocen, ~erán re~~elta~ I?~r el Alc~l~e condición de edificar en ellos a lo más tarde dentro del término preciso
del Distrito Municipal a que pertenezcan, qmen los mra e~JUIClO de pohcta de un año, bie11. entendido que si eso no sucediere, quedará de hecho
en la forma que lo indiquen las disposiciones de la m_at~na; cuyas re~olu­ insubsistente el remate, y se provocará inmediatamente nueva licitación.
ciones serán apelables ante los Prefectos de las Provmcms, Y las de estos
ante los Gobernadores de Departamento. (Decreto 331 de 1926. Decreto Artículo 18. Es admisible únicamente el traspaso de principales acen-
en los solares adjudicados, a fincas rurales situadas dentro del
50 de 1937, art. 9). : Distrito, del cuádruplo valor libre; y no se admitirá la redención del
,~principal en dinero. (Decreto 74 de 1898, art. 58).
Artículo 12. En caso de haber perdido una parcialidad sus títulos por ,•¡1

caso fortuito o por maquinaciones dolosas y especulativas de algunas Artíc~lo_l9. De toda diligencia de adjudicación de solares y traspasos
personas, comprobará su derecho sobre ,el r~sguardo por el_ hecho de la 'éde los pr~c1pa1es que los gravan, se tomará nota en el libro de registro de
posesión judicial o no disputada por el termmo de tremta ~nos, en caso la comumdad, cuya nota será suscrita por los interesados. (Decreto 74
que no se cuente con esa sole~~idad, y de ac~~rdo e~~ lo d1spuest? en el <le 1898, art. 59).
Código Civil. Este último reqmslto de la poses1?n pac1flca se a~red1ta por
el testimonio jurado de cinco testigos de notono abono, exammados con Artículo_ 20. Cuando un indígena que no sea hijo de familia, casado o
citación del Fiscal del Circuito, los que expresarán lo que les conste o mayor de d1ez y ocho años, carezca de la posesión de alguna porción del
hayan oído decir a sus predecesores, sobre la posesión y linderos del res- Resguardo, se le dará una parte de los terrenos reservados para el servicio
guardo. (Decreto 74 de 1898, art. 39). común de las parcialidades. (Decreto 74 de 1898, arts. 75 a 79. Decreto
Departamental No. 50 de 1937, art. 6).
Artículo 13. Contra el derecho de los indígenas que conserven títulos
de sus resguardos, y que hayan sido desposeídos de éstos de una m~era Artículo 21. Las Corporaciones municipales y los Alcaldes impedirán
violenta o dolosa, no podrán oponerse ni serán admisibles excepciOnes la destrucción de los bosques que sean necesarios para conservar las
perentorias de ninguna clase. En tal virtud, los indígenas perj~dic~dos por fuentes de agua. (Decreto 74 de 1898, art. 83. Ley 200 de 1936, art. 9 a
algunos de los medios aquí dichos podrán demandar la poses10n eJecutan- 14. Decreto Ley 1383 de 1940. Decreto NaL 1300 de 1941. Decreto 284 de
do las acciones judiciales convenientes. 1946. Decreto 2197 de 1946, todos los cuales se hauan incluidos en la
segunda edición del Código de Policía, págs. 133 a 143).
CAPITULO III
Artículo 22. Las fuentes saladas, con dos o más grados de saturación,
De los resguardos que se hallen en terrenos de resguardos, las reserva para sí la Nación y su
uso y goce se reglará conforme a las disposiciones del Código Fiscal y
Artículo 14. Cuando no se pueda averiguar o descubrir cuáles son los sus concordantes. (Ordinal 1 del art. 202 de la Constitución Nacional, y
indígenas o sus descendientes que tienen derecho al Resguardo, el Prefec- arts. 115 a 120 del Código Fiscal. Decreto 74 de 1898, art. 85).
to de la Provincia respectiva, hechas las indagaciones convenientes
declarará que tales resguardos pertenecen como ejidos a la población
que en ellos o a sus inmediaciones esté situada. CAPITULO IV

La resolución del Prefecto será sometida a la aprobación del Gober- Protectores de indígenas
nador del Departamento. (Decreto 74 de 1898, arts. 43 a 47).
Artículo 23. Los Cabildos de indígenas pueden personar por sí o
Artículo 15. Las Corporaciones Municipales de aquellos Distritos en por apoderado, ante las autoridades, a nombre de sus respectivas comu-
que haya resguardos de los cuales no se haya segregado la porción nidades, para promover la nulidad o rescisión de las ventas que se hayan
correspondiente con arreglo a las leyes, para el área de población, llena- hecho contra las disposiciones de leyes preexistentes, o que se hagan en
rán este deber destinando a tal objeto de diez a setenta hectáreas, según contravención a la presente; para pedir nulidad de los contratos a virtud
la extensión del resguardo y las necesidades de la población. (Modificado de los cuales se hayan hipotecado las tierras del Resguardo; y, en general,
Ley 104 de 1919 art. 6). . de cualesquiera negociaciones en que la comunidad haya sufrido perjui-
cios de que pueda reclamar legalmente. (Modificado Ley 81/58 art. ::.!).
Artículo 16. Los solares de que pueda disponerse serán adjudicados
por la Corporación Municipal al mejor postor, en pública licitación; y los Artículo 24. No obstante lo dispuesto en el artículo precedente, las
productos de la adjudicación serán destinados al sostenimiento de las comunidades y los particulares, en los asuntos determinados en el artículo
escuelas públicas del Distrito (Arts. 54 y s.s., Decreto 74 de 1898). . 10 serán patrocinados igualmente por el Fiscal del Circuito y por los de los

60 61
Artículos 31 y 32. Derogados (Ley 14 de 1925, art. 8, transcrito ante-
Tribunales Superiores en su caso, formando parte en los juicios en que nor·me,nte).
tengan que intervenir. (Decreto 74 de 1898, arts. 101 y s. s. Ley 104 de
1919, art. 7). Artículo 33. Luego que el partidor haya jurado su cargo, de forzosa
ac€~PtacJ·.on, y haya recibido los documentos que deben servir al acto partí-
Artículo 25. En las controversias a que se refiere el artículo 11, ningu- , procederá a desempeñar su comisión, disponiendo de un año para
na de las partes tendrá derecho a ser patrocinada por los protectores de ,....,,,.,r,rn· ; siguiendo en su procedimiento las reglas del Código Civil para
que hablan !os artículos anteriores. (Decreto 74 de 1898, art. 107). divisiones comunes, y las judiciales de partición de los terreno~ de
de comunidad, en todo lo que sea compatible con el objeto,
Artículo 26. Las controversias de los indígenas entre sí, por asuntos del :clJII;(leiDJ€m<llO el Juez resolver las dudas que sobre procedimientos aplicables
Resguardo, podrán ser sometidas a juicio de árbitros y transadas confor- se le consultaren por el partidor.
me a las 1eyes comunes, interviniendo los respectivos protectores. Pero los
pleitos entre comunidades de indígenas y otros particulares por razón del Artículo 34. La remuneración que se deba a éste por el desempeño de
Resguardo, no podrán ser sometidos a arbitramentos, ni transados. trabajo será fijada a juicio de peritos; y el juez podrá moderarla, a
(Decreto 74 de 1898, art. 108). pei~JCJion del Cabildo o de la mayoría de los interesados. Para el pago de
. que aquí se trata, como para los demás gastos de la partición, podrá
Artículo 27. Los indígenas, en asuntos de resguardos, que deban .. ~;señalarse un Jote de Jos terrenos del resguardo y venderse en pública
promover ante las autoridades, serán reputados como pobres de solemni- . ::subasta. (Decreto 74 de 1898, arts. 125 a 133).
dad y gestionarán en papel común. (Decreto 74 de 1898, arts. 109 y 110. ,1"''
Decreto del Libertador de 15 de octubre de 1828, art. 16. Ley 19 de 1927, . • Artículo 35. Los Cabildos de las parcialidades formarán el padrón o
art. 30). 'lista de Jos indígenas de la parcialidad respectiva, distribuyendo por
·familias. Concluido que sea presentarán dicho padrón al Cabildo del
Artículo 28. Ningún indígena, de los que viven bajo el mando de los Distrito, para que lo examine y apruebe después de cerciorarse de su
pequeños Cabildos, puede ser obligado a aceptar cargos concejiles. exactitud, para cuyo fin dictará las medidas convenientes. Los interesados
que hubieren sido excluidos, pueden reclamar ante este último Cabildo,
Artículo 29. Es un deber de los Notarios y Secretarios de los Juzgados el cual debe resolver en el término de un año; y Jos perjudicados con tal
y de las Corporaciones, lo mismo que todos los empleados públicos, dar resolución podrán ocurrir ante el Prefecto de la Provincia, y en tercer
a los Cabildos de indígenas copia certificada de los títulos constitutivos recurso ante el Gobernador del Departamento. (Decreto 74 de 1898,
de sus resguardos y de los documentos relacionados con ellos. Estos cer- art. 134 Decreto 178 de 1922. Ley 104 de 1919, arts. 2 y 4).
tificados se extenderán en papel común y no causarán derechos de ningu-
na especie. (Decreto 74 de 1898, artículo 113). Artículo 36. Aprobada que sea Ja lista, dejándose copia autorizada en
el archivo del Cabildo deJ Distrito, se devolverá al de la parcialidad, para
su presentación al Prefecto de la Provincia, quien la elevará, con el debido
CAPITUW V informe, al Gobernador del Departamento para su examen y aprobación
definitiva, con las enmiendas precisas y justificables. (Decreto 74 de 1898,
División de los terrenos de Resguardos , art. 135. Ley 104 de 1919, art. 3).

Artículo 30. Para efectuar la división de los terrenos de que aquí se Artículo 37. Se señala el término de cincuenta años, prorrogables por
trata es necesario: los Gobernadores de Jos Depatamentos respectivos:
l. Para formar el padrón de cada comunidad, según los reglamentos
l. Que el padrón o lista a que se refiere el artículo siguiente se halle que dicten los Gobernadores respectivos de Departamento, a fin de que
terminado, y además aprobado definitivamente por el Gobernador del tales padrones se hagan con claridad, exactitud y justicia;
Departamento respectivo; y
2. Para que los Prefectos informen sobre tales padrones al Gobernador
2. Derogado (Ley 14 de 1925, art. 8) Ley 14 de 1925, art. 8: Derógase el del Departamento;
numeral2 del artículo 30 y los artículos 31 y 32 de la Ley 89 de 1890.
3. Para que éste examine y apruebe tales padrones;
Cuando en la demanda de división de Resguardos de indígenas se
acompañe el censo de la respectiva parcialidad, formado de acuerdo con 4. Para que se dividan o repartan, por cabezas, entre los indígenas
las leyes pertinentes, no será necesario incorporar de nuevo en aquélla o comuneros, Jos terrenos de Resguardos en los términos establecidos
los nombres de los individuos que forman ésta, excepto en el Departamen- por esta ley; y
to de Caldas, en el cual regirán las disposiciones vigentes actualmente.
63
62
5. Para que dicha división sea definitivamente aprobada por quien de,leJ!:ar a los Misioneros facultades extraordinarias para ejercer autoridad
corresponde. (Decreto 74 de 1898, arts. 136 y 137. Decreto Nal. 01421 , penal y judicial sobre los catecúmenos, respecto de los cuales
de 1940, art. 2). suspende la acción de las leyes nacionales hasta que, saliendo del
stado salvaje, a juicio del Poder Ejecutivo, estén en capacidad de ser
Artículo 38. Mientras dure la indivisión, los indígenas continuarán bernados por ellas.
como hasta aquí, en calidad de usufructuarios, con sujeción a las prescrip-
ciones de la presente ley. Artículo 3. Vótase para el cumplimiento de esta ley la suma de cin-
mil pesos ($50.000.00) anuales, que se considerará incluida en el
Artículo 39. Hecha la división de los terrenos del Resguardo, cesarán t:::s¡!Jt:'l'L!VO presupuesto.
las funciones de los Cabildos de las parcialidades.

VENTAS

Artículo 40. Los indígenas asimilados por la presente Ley a la condi- El Presidente del Senado, J. M. Campo Serrano. El Presidente de la
ción de menores de edad para el manejo de sus,porciones en los resguar- de Representantes, Pedro Vélez R. El Secretario del Senado
dos, podrán vender esta con sujeción a las reglas prescritas por el derecho de Narváez. El Secretario de la Cámara de Representantes:
común para la venta de bienes raíces de los menores de veintiún años; iguel A. Peñaredonda.
debiendo en consecuencia solicitarse licencia judicial justificándose la
necesidad o utilidad. Obtenido el permiso la venta se hará en pública . Gobierno Ejecutivo. Bogotá, noviembre 22 de 1892. Publíquese y
subasta conforme a las disposiciones del procedimiento judicial. ·'Ejecútese. (L. S.) M. A. Caro. El Ministro de Justicia, Emilio Ruiz Ba-
:rreto.
Serán nulas y de ningún valor las ventas que se hicieren en contraven-
ción a lo dispuesto en este artículo, así como las hipotecas que afecten LEY NUMERO 55 DE 1905
terrenos de resguardo, aun hecha la partición de este. (29 de abril)
Por la cual se ratifica la venta de varios bienes nacionales
Artículo 41. Los Gobernadores de los Departamentos quedan encarga- y se hace cesión de otro
dos de dictar los reglamentos necesarios en desarrollo de esta Ley y llenar
los vacíos de la misma sin contravenir sus prescripciones. La Asamblea Nacional Constituyente y Legislativa,
Artículo 42. Quedan derogadas todas las Leyes y disposiciones contra- DECRETA:
rias a la presente Ley. 1
.A Artículo l. La Nación ratifica y confirma las declaratorias judicial y
Dada en Bogotá, a diez y seis de noviembre de mil ochocientos noventa 'legalmente hechas, de estar vacantes globos de terrenos conocidos como
(1890). :l{esguardos de indígenas, así como también las ventas de ellas efectuadas
. ·rn subasta pública; y reconoce como título legal de propiedad de esos
LEY 72 DE 1892 .• errenos el adquirido por sus rematado res.
(22 de noviembre)
.·.~ Artículo 2. La Nación cede a los Distritos municipales los terrenos de
Por la cual se dan autorizaciones al Poder Ejecutivo para establecer Jtesguardos de Indígenas ubicados dentro de su jurisdicción; pero los
Misiones Católicas. istritos agraciados respetarán los derechos de los indios que residan en
y que les han sido otorgados por leyes anteriores.
EL CONGRESO DE COLOMBIA
Artículo 3. Quedan comprendidos en los Distritos agraciados los Corre-
DECRETA: .. :'llll:rmr\l·,.,ntos, agregaciones o aldeas que hacen parte de ellos; de modo
en comunidad con la población que sirve de cabecera del Municipio
Artículo l. Autorizase al Poder Ejecutivo para que de acuerdo con la corresponderá el dominio de los Resguardos de que se trata, aunque
autoridad ecles.iástica proceda a establecer Misiones Católicas en el terri- posterioridad sean erigidos en Distritos dichos Corregimientos, agre-
torio de la República, en los lugares que lo estime conveniente. ¡:a,act•DnE~s o aldeas.

Artículo 2. El Gobierno reglamentará de acuerdo con la autoridad Artículo 4. Corresponde a los Personeros municipales de los Distritos
eclesiástica todo lo conducente a la buena marcha de las Misiones y podrá · por esta Ley, crear las pruebas conducentes a constituir el

64 65
a;""

título que por ella adquieren, a efecto de ser consideradas sufi~ientes situado entre Pasto y Mocoa. Dicha población será designada
llUilD(lUJ ,
dichas pruebas por el Gobernador del Dep~amento, fa~ulte e~te. al el nombre de Sucre.
Fiscal del Circuito respectivo para que perfecciOne por escntura publica
la cesión del dominio de los Resguardos abandonados.
Gobierno reglamentará la manera de hacer la fundación y de
Corresponde a los indígenas residentes como habitantes o cultivadores Jos solares entre quienes aHí vayan a establecerse.
en los terrenos que se ceden por los artículos pr~cedentes, crear la~ prue-
bas justifkativas de su derecho, a efecto de que este les sea perfecciOnado
conforme a este artículo. Artículo 2. Si e! Departamento de Nariño acepta la cesión de que trata
artículo 7 de esta Ley, debe obligarse a pagar el abogado que el Gobier-
Decláranse abandonados los Resguardos o terrenos correspondientes nombre para que haga ante el Poder Judicial Ja defensa de los derechos
a poblaciones de indígenas que han desaparecido de entre dichos te- puedan tener los indígenas que hoy viven en el Vaue de Sibundoy
rrenos. ese Valle o a parte de su territorio.
Artículo 5. Cédense asimismo a los respectivos municipios, en los
términos y con las formalidades prescritas en el artículo precedente, los Artículo 3. El Gobierno hará el nombramiento de que trata el artículo
terrenos que sirvieron de resguardo a poblaciones de indígenas que cons- wr•t<>ru•r en un abogado de competencia y honorabilidad notorias, y ajusta-
tituyen dichos municipios por haber adquirido en cualquier tiempo la con dicho abogado el contrato que estime conveniente.
categoría de Distritos.
Artículo 4. El abogado se trasladará al Valle de Sibundoy, se pondrá en
Parágrafo. La disposición de este artículo no comprende a los resguar- unicación con Jos indígenas de las distintas parcialidades, recibirá los
dos que hayan sido repartidos según leyes preexistentes. ,.,.,u,~a:::,y procederá al desempeño de su encargo.

Artículo 6. En todo caso puede pedirse por cualquiera o cualesquiera


de los comuneros, que la cosa común se divida o se venda para repartir
"·~ Artículo 5. Terminado el juicio correspondiente, la parte del Valle
,Se Sibundoy que resulte baldía, se distribuirá así: a cada uno de los
su producto; pero la venta tendrá siempre preferencia sea cual fuere la ctuales pueblos de Santiago, San Andrés, Sibundoy y San Francisco y
clase de bienes de que se trate.
•. 1 de Suc.re, 300 hec~áreas; S: fa b~ne~icencia de cada uno de l~s mismos,
·.• 00 hectareas; a la mstruccwn pubhca de cada uno de los mismos, 100
Artículo 7. Queda derogado el inciso 2 del artículo 2.334 del Código lectáreas; a la iglesia de cada uno de los mismos, lOO hectáreas; en cada
CiviL .no de Jos pueblos de Santiago, Sibundoy y San Andrés, para huertas
'
jlodelos dirigidas por los Hermanos. ~aristas, 50 h~ct~reas; en el pueb~o
Artículo 8. Cuando en una comunidad hubiere terrenos de Resguar- fe Sibundoy, para apoyar la fundacwn y el sostemmiento de un colegio
dos, la ley presume que la extensión de tales terrenos no es menor de .tspecial para formar Misioneros, mil hectáreas; y para los colonos o
quinientas hectáreas, salvo que las partes interesadas prueben que la :fuitivadores, el número de hectáreas a que tengan derecho conforme a
cabida del Resguardo es mayor o menor. Ja Jey .
.~.

,<';:'
Artículo 9. Las disposiciones de esta ley no alteran en ningún sentido . Artículo 6. Sea que los indígenas del Valle de Sibundoy no puedan
las prescripciones establecidas en la Ley 89 de 1890 para defensa de los tomprobar su derecho de propiedad sobre esos terrenos, o sea que sus
derechos de los indígenas, asimilados a menores de edad por el artículo 40 ·.llerechos se refieran a una extensión menor de la que corresponda a dos
de dicha ley. .!Iectáreas por cada cabeza de población, se les adjudicará preferentemen-
4e el terreno necesario para que a cada indígena, cualquiera que sea su
LEY 51 DE 1911 ··· al tiempo de la distribución, le correspondan las expresadas dos
(noviembre 18) :•";'-••'"""'"· Los lotes respectivos deben comprender precisamente el terre-
que ellos cultivan en la actualidad en los alrededores de los pueblos de
Por la cual se ceden unos terrenos baldíos al Departamento de , San Andrés y Sibundoy.
Nariño y se manda fundar una población.
Artículo 7. Hechas las adjudicaciones de que tratan los dos artículos
EL CONGRESO DE COLOMBIA ;pr·ec•ed,enl~es, el resto de los terrenos del Valle de Sibundoy se adjudicará
Departamento de Nariño, con la condición de que éste dedique por lo
DECRETA: quinientas hectáreas a la fundación de una hacienda destinada
Artículo l. Para facilitar la colonización de los territorios del Putumayo sostenimiento de una Escuela de Artes y Oficios en el mismo Depar-
por la vía de Pasto, dispónese que se funde una población en el Valle de

66 67
Artículo 8. El terreno que sobrare puede ser enajenado por el Departa- Artículo 3. La misma suma se considerará incluida en el presupuesto
mento cesionario a los particulares que lo pretendan, debiendo hacerse la gastos de la actual vigencia, y en el de la próxima, si no se alcanzare
enajenación en licitación pública y por lotes de 50 a 100 hectáreas de cubrirla bajo !a primera.
extensión. El dinero que se obtenga como producto de tales ventas se
aplicará también a la fundación y sostenimiento de la Escuela citada en el Artículo 4. El Gobierno hará levantar un plano completo de la región
artículo anterior o al de la Universidad de Nariño, según lo dispusiere los Motilones, por medio de la Comisión de longitudes, aumentada con
la AsamblP.a Departamental. naturalista y un Oficial del Estado Mayor.

Artículo 9. Desde que se verificare la adjudicación de los lotes, los La Comisión presentará un informe detallado respecto a las condicio-
indígenas favorecidos con ellos y en general todos los de la parcialidad, topográficas y militares de la región, a sus riquezas naturales y a las
quedan sometidos en todo lo relativo a la administración de ellos a las de comunicación que convenga abrir en ella. Mientras no se realicen
disposiciones de la Ley 89 de 1890,sobre gobernación de indígenas que trabajos no se admitirán denuncios ni se harán adjudicaciones de
van reduciéndose a la vida civilizada. en la indicada región.

Artículo 10. El Gobierno puede comisionar al G9bernador del Departa- Asignase a cada una de las tribus habitadoras de la región de los
mento de Nariño para que haga la distribución de lotes entre los indígenas •••u•uu'u"''" un globo de terreno, en calidad de resguardo, de una extensión
y designe el punto que deben ocupar la hacienda y la población de que seis mil hectáreas a cada una, además del área de las poblaciones y de
trata esta Ley. ejido constituido por una extensión de tierra determinada por un radio
mil metros, a partir del centro de la población.
Artículo 11. Al Departamento de Nariño le corresponderá también, si
acepta la cesión a que se refiere esta Ley, pagar el ingeniero que haga la La comisión de que trata este artículo determinará en el plano las
mensura de los distintos lotes de terrenos decretados en los artículos · sindicadas de terreno.
anteriores.
¡: Parágrafo. Lo dispuesto en este artículo respecto a levantamiento de

t
Artículo 12. El Gobierno dictará a la mayor brevedad posible el decreto ano de la región de los motilones, se llevará a cabo tan pronto como lo
reglamentario de esta Ley. rmita la situación del tesoro.

Dada en Bogotá, a quince de noviembre de mil novecientos once. ~ Artículo 5. Esta Ley regirá desde su sanción.

Poder Ejecutivo. Bogotá, noviembre 18 de 1911. Publíquese y ejecú- 1



Dada en Bogotá, a once de noviembre de mil novecientos quince.
tese.
l:f Poder Ejecutivo. Bogotá, noviembre 13 de 1915.

LEY 52 DE 1~15
CARLOS E. RESTREPO
j Publiquese y Ejecútese.
JOSE VICENTE CONCHA
(noviembre 13) LEY 60 DE 1916
(diciembre 9)
Sobre catequización de los indios motilones
Sobre resguardos de indígenas en tierras baldías.
EL CONGRESO DE COLOMBIA,
EL CONGRESO DE COLOMBIA,
DECRETA:
DECRETA:
Artículo l. Destínase la suma de tres mil pesos a la reducción de los
indios motilones. Artículo l. El Gobierno queda facultado para hacer demarcar, a peti-
de interesados, en los terrenos baldíos en que haya indígenas,
Artículo 2. El Gobierno se entenderá con el ilustrísimo señor Vicario para éstos, escogiendo al efecto sitios de querencia de las
Apostólico de la Guajira sobre el modo como debe invertirse esta suma y o parcialidades y consultando las condiciones de fertilidad, aguas
de rendir la cuenta de su inversión, que será determinada en el decreto , frutos naturales, en favor de los agraciados. (Subrogado
reglamentario de esta Ley. 135 de 1961 art. 94).

68 69
---""'i.,.ll'P"· ;¡;t/IIIJI/F'

Para estos reguardos se tendrá en cuenta el número de habitantes Artículo 3. En el caso que contempla el articulo 36 de la Ley 89 de 1890,
de la tribu, a veinte hectáreas por cabeza. el Cabildo de indígenas presentará el censo al Prefecto de la provincia
dentro de Jos quince días siguientes a1 de su aprobación, éste lo elevará,
Artículo 2. Queda facultado también el Gobierno para enviar comisa- con eJ debido informe, al Gobernador del Departamento, dentro de los
rios, agrimensores, maestros de escuela a las tribus de lo~ .~unas del quince días siguientes al en que lo haya recibido.
Darién y para tomar las medidas necesarias a amparar y CIVIlizar tales
indios. Para el examen y aprobación definitiva del censo de cada parcialidad,
con Jas enmiendas precisas y justificables, tendrá el Gobernador del
Artículo 3. Se prohíbe la adjudicación de terrenos baldíos ocupados por Departamento el término de quince días.
indios. (Modificado inciso final art. 29 Ley 135/61).
Artículo 4. Los recursos de que trata la parte final del artículo 35 de la
Dada en Bogotá, a 6 de diciembre de 1916. Ley 89 de 1890 y otros cualesquiera que se ejerciten en las diligencias de
formación del censo, se concederán siempre en el efecto devolutivo y
Diario Oficial, Número 15968. dentro del término de dos días y serán resueltos de plano por el superior
de segundo o tercera instancia dentro de los ocho días siguientes al recibo
de las copias de lo pertinente.
LEY 104 DE 1919
(diciembre 16)
Artículo 5. La demanda de división de los terrenos de resguardo
debe ser formalizada dentro de los cuarenta días siguientes al de la apro-
Por el cual se dispone la división de algunos terrenos de resguardo. bación del censo, ante el Juez respectivo.
EL CONGRESO DE COLOMBIA,
Artículo 6. Al verificar la división se dará cumplimiento a lo que
DECRETA: dispone el artículo 15 de la Ley 89 de 1890, cuando fuere el caso.
Artículo l. Para la formación del censo o empadronamiento de las Artículo 7. Los indígenas en incapacidad legal que no tuvieren quien
parcialidades de indígenas cuyos terrenos de resguardos se hallen, siquie- los represente durante la formación del censo, o el juicio de división,
ra sea en parte, dentro de los lúnites del Municipio a que pertenece la serán patrocinados en todo por el Fiscal del Tribunal Superior, aun sin
capital de un Departamento; o de una Provincia, en los Departamentos en necesidad alguna de su parte.
que existe esta división territorial administrativa, o dentro del que lo fue
antes de la extinción de dicha entidad en aquellos Departamentos en Artículo 8. Decretada la división por el Juez se hará precisamente,
que ha sido eliminada o reducido sus Provincias a una sola, se señalará dentro de los cuarenta días siguientes a la ejecución de la providencia en
el término improrrogable de seis meses. que tal cosa se haga, un avalúo de los terrenos de resguardo, por zonas o
lotes de valor diferente, teniendo en cuenta la calidad, la extensión, las
Los Cabildos que funcionan actualmente o que se posesionen antes de aguas que los rieguen, la mayor o menor distancia de la capital del Depar-
la promulgación de esta Ley, continuarán ejerciendo las atribuciones tamento, y cuando pueda influir en la apreciación.
que les asignen los artículos 30 a 40 de la Ley 89 de 1890, hasta que la
división de los terrenos de resguardo quede en firme. (Derogado por el También se apreciarán dentro del mismo término los honorarios del
artículo 6 de la Ley 32 de 1920). partidor, en la forma que indica el artículo 43 de la Ley 40 de 1907.
Artículo 2. Los reclamos de exclusiones o inclusiones indebidas en el Artículo 9. El partidor dispondrá del término de cuatro meses, cuando
censo deben hacerse ante el Concejo Municipal, dentro de los noventa más, si el Juez no señalare prudencialmente un término menor, que llevar
días siguientes a1 en que se le haya entregado aquél a éste, de acuerdo con a cabo la división y presentarla a éste.
lo dispuesto en el artículo 35 de la citada Ley 89 de 1890, sin perjuicio de
que tales reclamos se hagan ante el Cabildo de la parcialidad en el tiempo Artículo 10. Los funcionarios o empleados públicos y los particulares
oportuno. que intervinieren o que deben intervenir en la formación del censo o en las
diligencias de división, que no cumplieren o cumplieren tardíamente
Los Concejos Municipales resolverán todos los reclamos dentro de algunas de las obligaciones que les correspondan por esta Ley y otras
los noventa días de que trata el inciso anterior, y treinta días más, y dentro cualesquiera que con el objeto de ella se relacionen, serán penados con 11
de los treinta días siguientes a la expiración de este término aprobarán o multas de cincuenta a doscientos pesos por el sólo conocimiento que tenga
improbarán el censo. En este último caso indicarán de modo preciso las de su falta, el que deba imponerlas o por queja verbal o escrita de un
informalidades y señalarán un término perentorio, que no podrá ser mayor interesado.
1
a sesenta días, a1 Cabildo de indígenas para que las subsane.
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CONCORDATO ENTRE LA SANTA SEDE


Y LA REPUBLJCA DE COWMBIA 1MM7
(diciembre 311

Articulo l. La religión Católica. Apostólica, Romana es la de Colombia;


los poderes públicos la reconocen como elemento l'sencial del orden
social, y se obligan a protegerla y hacerla respetar. lo mismo que a sus
ministros, conservándola a la vez en el pleno goct> de sus derechos y
prerrogativas.

Artículo 2. La Iglesia Católica conservará su plena libertad e indepen-


dencia de la Potestad Civil y por consiguiente sin ninguna intervención de
esta podrá ejercer libremente toda su autoridad espiritual y su jurisdicción
eclesiástica, conformándose en su gobierno y administración con sus
propias leyes.

Articulo 5. La Iglesia tiene la facultad de adquirir por justos títulos, de


poseer y administrar libremente bienes muebles e inmuebles en la forma
establecida por el derecho común y sus propiedades y fundaciones serán
no menos que las de los ciudadanos de la República.

Articulo 11. La Santa Sede prestará su apoyo y cooperación al Gobierno


para que se establezcan en Colombia institutos religiosos que se dediquen
í
'1
con preferencia al ejercicio de la caridad, a las misiones, a la educación de
la juventud, a la enseñanza en general y otras obras de pública utilidad y
beneficencia.

Articulo 14. En el caso de que la enseñanza de la religión y la moral a


pesar de las órdenes y prevenciones del gobierno, no sea conforme a la
doctrina católica, el respectivo Ordinario diocesano podrá retirar a los
profesores y maestros la facultad de enseñar tales materias.

Articulo 31. Los convenios que se celebran entre la Santa Sede y el


Gobierno de Colombia para el fomento de las misiones católicas en las
tribus bárbaras no requieren posterior aprobación del Congreso.

Roma 31 de diciembre de 1887.

(Modificado por el Concordato de 12 de julio de 19731.

213
CONVENCION QUE ESTATUYE EL INSTITUTO
INDIGENISTA INTERAMERICANO
(abril de 1940) 3. Institutos Indigenistas NacionaJes.

Elaborada por el Primer Congreso Indigenista Interamericano, celebrado


, La representación de cada Estad
Consejo Directivo del Instituto es d od conthratante. en e4 Congreso Y en el
en la ciudad de Pátzcuaro. Estados Unidos Mexicanos, en el • e erec o prop¡o.
mes de abril de 1940.
ARTICULO 11
Los Gobiernos de las Repúblicas Americanas, animados por el deseo
de crear instrumentos eficaces de colaboración para la resolución de sus Congreso Indigenista Interamericano
problemas comunes, y reconociendo que el problema Indígena atañe a
toda América; que conviene dilucidarlo y resolverlo y que presenta en - J. El Congreso se celebrará .
muchos de los países americanos modalidades semejantes y comparables; anos. La sede del Congreso Y la fec~~n mtervalos n~ mayores de cuatro
reconociendo además, que es conveniente aclarar, estimular y coordinar das ~r et Congreso anterior Sin e de su celebractón, serán detennina-
la política indigenista de los diversos países, entendida ésta como conjun- reu.n~~n puede ser adelantada~ stembargo, la fecha señalada para una
pettcton de cinco o más de los a:ob. rgada P?~ el Gobierno Or~anizad
to de desiderata, de normas y de medidas que deben aplicarse para mejo- ternos parttctpantes. ora
rar de manera integral la vida de los grupos indígenas de América, y
considerando que la creación de un Instituto Indigenista Interamericano 2. El Gobierno del país sede d ,
fue recomendada para su estudio por la Octava Conferencia Internacional, des.i~~rá como . 'Gobierno Or anizael ~?ngreso, .al que en adelante St!
reunida en Lima, en 1938, en una resolución que dice: "Que el Congreso ~eftmttv~ de la asamblea Y ha:á las ido~, ~etennmará el lugar Y la fecha
Continental de Indianistas estudie la conveniencia de establecer un Insti- ttco d~btdo, cuando menos con seis nvttactones po~ ~1 conducto diplomá-
temano correspondiente. meses de antiCipación, enviando el
tuto Indianista Interamericano y, en su caso, fije los términos de su orga-
nización y dé los pasos necesarios para su instalación y funcionamiento
inmediatos'', y considerando que el Primer Congreso Indigenista Intera- 3. El Congreso se com nd . d
nos contratantes y de unpo ra e delegados nombrados por los Gob·
mericano celebrado en Pátzcuaro, en abril de 1940, aprobó la creación del . representante d 1 U . . ter-
Instituto, y propuso la celebración de una Convención al respecto. pr<><:urara que en las delegaciones ven e a nton Panamericana. Se
NaciOnales, Y queden incluidos eleme ~ .red_resentantes de los Institutos
Han resuelto celebrar la presente Convención que será firmada como pante tendrá derecho a un solo voto. n s m tgenas. Cada Estado partici-
10dispone el artículo XVI de la misma, para dar forma a tales recomenda-
4 ·. Podrán asistir en calidad d
ciones y propósitos, y para el efecto, han convenido en lo siguiente: mtere~ en asuntos indígenas u! observa?ore.s ~rsonas de reconocido
Orgamzador y autorizadas p ' q hayan .s•do Invitadas por el Gobie
Los Gobiernos contratantes acuerdan elucidar los problemas que no tendrán voz ni voto en la~~:~i~ respecttvos gobiernos. Estas perso~~~
'
~
afectan a los núcleos indígenas en sus respectivas jurisdicciones, y d~ ~lsta en tales sesiones sola~e~~ plenanas Y expresarán sus puntos
cooperar entre sí sobre la base del respeto mutuo de los derechos inheren- oftctal de sus respectivos países pero ~r .el conducto de la delegación
1

tes a su completa independencia para la resolución del problema indígena nes en las sesiones de las comisi~nes t. . ran tomar parte en las discusio
en América, por medio de reuniones periódicas, de un Instituto Indigenis- ecmcas. -
ta Interamericano, y de Institutos Indigenistas Nacionales, cuya organi- 5. Los gastos de organ. .. . ..
zación y funcionamiento serán regidos por la presente Convención, en los a cargo del Gobierno Orga~~~~~/ reahzaclon de los Congresos, correrán
términos que siguen:

ARTICUW 1
ARTICUW 111
Organos
Instituto Indigenista Interamericano
Los Estados contratantes propenden al cumplimiento de los propósitos 1 .. La primera sede del Institut . .
y finalidades expresados en el preámbulo, mediante los órganos siguien- escogido por el Consejo Directivo d ol ~era. cualqUier Estado Americano
tes: acepte el establecimiento del I . e nstltuto. ~~ Gobierno del país u~
adecuados al funcionamiento Y a~~tvlt~dutod, pdropor~IOnará el o los edifi~os
l. Un Congreso Indigenista Interamericano. a es el m1smo.
. :¿. La Oficina del Instituto In di enista .
2. El Instituto Indigenista Interamericano, bajo la dirección de un
Consejo Directivo.
~;~~:rdenMte: ~ajo los auspicios d!l Gobiel~~r~~~~~a. se pone, provi-
e ex1co. ex1co, con sede en la
214
215
ARTICULO IV
9. Promover, estimular y coordinar la preparación de técnicos (hom-
Funciones del Instituto bres y mujeres), dedicados al problema indígena.

El Instituto tendrá las siguientes funciones y atribuciones, bajo la 10. Estimular el intercambio de técnicos, expertos y consultores en
asuntos indígenas.
reserva de que no tenga funciones de carácter político.
11. Desempeñar aquellas funciones que les sean conferidas por los
1. Actuar como Comisión Permanente de los Congresos Ind~genistas Congresos Indigenistds Interamericanos, o por el Consejo Directivo, en
Interamericanos, guardar sus informes y archivos, cooperar a eJecutar Y uso de las facultades que le acuerda esta Convención.
facilitar la realización de las resoluciones aceptadas. por los Congresos
Indigenistas Interamericanos y las de esta Convencwn, dentro de ~~s ARTICULO V
atribuciones y colaborar con el Gobierno Organizador, en la preparacwn
y realización del Congreso Indigenista. Mantenimiento y patrimonio del Instituto
2. Solicitar, colectar,. ordenar y distribuir informaciones sobre lo si- l. El patrimonio y los recursos del Instituto Indigenista Interamericano
guiente: para su mantenimiento, se constituirán con las cuotas anuales que cubran
Jos países contratantes, así como con los fondos y contribuciones de
a) Investigaciones científicas, referentes a los problemas indígenas; cualquier clase que pueda recibir el Instituto, de personas físicas y mora-
les americanas, y con fondos provenientes de sus publicaciones.
b) Legislación, jurisprudencia y administración de los grupos indí-
genas; :l. El presupuesto anual del instituto se fija en 00.600 dólares america-
nos. Este presupuesto queda dividido en ciento dos unidades de trescien-
e) Actividades de las instituciones interesadas en los grupos antes tos dólares cada una. La cuota anual de cada contribuyente se determina
mencionados; asignando a cada uno cierto número de unidades, de acuerdo con la pobla-
ción total, según se indica en el anexo, pero ningún país que tenga una
d) Materiales de toda clase que puedan ser utilizados. por los go?ie_rnos población indígena menor de cincuenta mil se le asignará más de una
como base para el desarrollo de su política de. m~joramtento economtco Y unidad. Por otra parte, a los países de mayor población indígena, a saber:
social de las condiciones de vida de los grupos mdtgenas; Bolivia, Ecuador, Guatemala, México y Perú, se les asignan unidades
adicionales equivalentes al cincuenta por ciento de las que les resultan
e) Recomendaciones hechas por los mismos indígenas en los asuntos sobre la base de la población total, según se ve en el anexo. Cuando la
que les conciernen. sede del Instituto recaiga en uno de estos cinco países, el recargo que
sufra será sólo de un veinticinco por ciento de unidades.
3. Iniciar, dirigir y coordinar investigaciones y encuestas _cie?tificas
que tengan aplicación inmediata a la sol~ci?n de los problema~ m.dtgenas, a) Para aplicar la escala de cuotas, se tomarán como base los datos
0 que sin tenerla, ayuden al mejor conocrmtento de los grupos mdtgenas. oficiales más recientes de que este en posesión el Instituto Indigenista
Interamericano el primero de julio de cada año.
4. Editar publicaciones periódicas y eventuales: ~ realizar una la~or
de difusión por medio de películas, discos fonograftcos Y otros med10s b) El Consejo Directivo del instituto Indigenista Interamericano
apropiados. cambiará el número de unidades, de acuerdo con los cambios en los
datos censales. Para hacer frente a modificaciones en el monto total del
5. Administrar fondos provenientes de las nacio_ne~ americ~as Y presupuesto del Instituto, que el Consejo Directivo estimase necesarias,
aceptar contribuciones de cualquier clase de fuentes pubhcas Y pnvadas, dicho cuerpo podrá alterar el monto de cada una de las ciento dos unida-
incluso servicios personales. des en que el presupuesto se divide. El Consejo queda también investido
con autoridad para modificar la distribución de las unidades entre las
o. Cooperar como oficina de consulta con las Oficinas de Asuntos naciones participantes.
Indígenas de los diversos países. e) La cuota de cada país se comunicará antes del primero de agosto de
cada año a los Gobiernos contratantes, y deberá ser pagada por ellos,
7. Cooperar con la Unión Panamericana y solicitar la colaboración de antes del primero de julio del año siguiente.
ésta para la realizactón de los propósitos que les sean comunes.
La cuota de cada país correspondiente al primer año. deberá ser cu-
8. Crear y autorizar el establecimiento de comisiones técnicas consul- bierta dentro de los seis meses, contados a partir de la fecha de ratifica-
tivas, de acuerdo con los gobiernos respectivos. cwn de esta Convención.

216 217

''i
ARTICULO VI d) Presentará a la consideración de los gobiernos contratantes, por la
vía diplomática, las modificaciones que hubieren de introducirse en las
Gobierno funciones del Instituto.

El gobierno del Instituto estará encomendado a un Consejo Directivo, a e) Determinará las bases generales de las finanzas del Instituto
un Comité Ejecutivo y a un Director, en los términos que se definen en y examinará sus cuentas directamente o por medio de su representante
los artículos que siguen. o representantes.

ARTICULO VII f) Promoverá la reunión de Conferencias Internacionales de expertos,


para el estudio de problemas de carácter técnico de interés común para los
Consejo Directivo países contratantes, y a este efecto, podrá solicitar de los respectivos
l. El Consejo Directivo ejercerá el control supremo del Instituto gobiernos el nombramiento de expertos que los representen en dichas
Indigenista Interamericano. Estará formado por un representante, prefe- Conferencias, que se reunirán en los lugares y en las fechas que determi-
rentemente técnico, y un suplente de cada uno de los Estados Contratan- ne el Consejo.
tes.
ARTICULO VIII
2. Cuando cinco países hayan ratificado esta Convención y nombrado
sus representantes en el Consejo Directivo, el Secretario de Relaciones Comité Ejecutivo
del Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, convocará a la primera
asamblea de dicho cuerpo, el que, reunido elegirá su propio Presidente y l. El Comité Ejecutivo estará integrado por cinco miembros propieta-
al Director del Instituto. rios, que deberán ser ciudadanos de distintos Estados participantes y
que serán, preferentemente personas conocedoras del problema indígena
o entendidas en materia de sociología. Cada uno de dichos cinco Estados,
3. Un año después de constituido, el Consejo Directivo celebrará una nombrará un suplente que cubra las ausencias del propietario que le
Asamblea Extraordinaria para designar el Comité Ejecutivo en propiedad, corresponde.
de acuerdo con los términos señalados en el inciso 2, del artículo vm. Los
miembros del Comité Ejecutivo Provisional, durante el año de su ejercicio, 2. Los miembros propietarios serán electos por un período de cinco
así como los del Comité Ejecutivo en propiedad, serán miembros ex-oficio años, arreglándose la elección a modo de que la renovación sea de dos
del Consejo Directivo. El Director del Instituto fungirá como Secretario de quintas partes en una ocasión y de tres quintas partes en otra, para lo
dicho Consejo. cual, los primeros miembros serán electos tres por cinco años y dos por
tres años. Tanto los propietarios como los suplentes podrán ser reele-
4. El voto del Consejo Directivo y del Comité Ejecutivo será por países. gidos.
Cada país tendrá un solo voto.
3. El Director del Instituto Indigenista Interamericano, será miembro
5. Habrá quórum en asambleas del Consejo Directivo con los delega- ex-oficio del Comité Ejecutivo, fungirá como secretario de éste y tendrá
dos que representen la simple mayoría de los Estados contratantes. voz, pero no voto.
6. El Consejo Directivo celebrará asambleas generales ordinarias cada 4. El Comité Ejecutivo queda investido con el Poder Ejecutivo del
dos años y las extraordinarias que fuesen convocadas por el Comité Instituto, bajo la dirección y control del Consejo Directivo, y, por regla
Ejecutivo, con anuencia de la simple mayoría de los países contratantes. general, por conducto del Director.
7. El Consejo Directivo tendrá a más de las mencionadas, las siguien- 5. El Comité Ejecutivo tendrá las siguientes funciones y atribuciones:
tes funciones y atribuciones:
a) Determinar el programa general de labores del L'lstituto;
a) Nombrar al Director del Instituto, de acuerdo con los requisitos
señalados en la fracción 1 del artículo IX. b) Formular el presupuesto anual del Instituto, señalando los emolu-
mentos del personal y las condiciones de su retiro y jubilación;
b) Estudiará y aprobará el proyecto de organización y funcionamiento
del Instituto que le presentará el Comité Ejecutivo. e) Nombrar comisiones especiales, encargadas de estudiar cualquier
cuestión de su competencia;
e) Aprobará sus propios estatutos y reglamentos, así como los del
Comité Ejecutivo y los del Instituto. d) Autorizar las publicaciones del Instituto;
218 219
e) Rendir informe anual a los Estados contratantes sobre la ~archa
de los trabajos y sobre los ingresos y gastos de toda clase del Instituto, y ARTICULO X
un informe análogo en cada Asamblea Ordinaria del Consejo Directivo;
Institutos Indigenistas Nacionales
f) Convocar a Asambleas Extraordinarias del Consejo Directivo,
contando con la aquiescencia de la simple mayoría de los Estados miem- l. Los países contratantes organizarán en la feci1a que les parezca
bros y organizar y celebrar, de acuerdo con los gobiernos o entidades conveniente, dentro de sus respectivas jurisdicciones, un Instituto Indige-
nista Nacional, cuyas funciones serán, en lo general, estimular el interés
correspondientes, las asambleas, conferencias o congresos internaciona- y proporcionar información sobre materia indígena a personas o institu-
les, promovidos por el Consejo Directivo. ciones públicas o privadas y realizar estudios sobre la misma materia, de
interés particular para el país.
1
6. Al quedar integrado el Consejo Directivo del Instituto, según los
!J términos de esta Convención, el Comité Ejecutivo Provisional, nombrado 2. Los Institutos Nacionales serán filiales del Instituto Indigenista
por el Primer Congreso Indigenista reunido en Pátzcuaro, rendirá un Interamericano, al que rendirán un informe anual.
informe al Consejo Directivo y continuará funcionando por un año como
Comité Ejecutivo, conforme lo establece la fracción 3 del Artículo VII, pero 3. El financiamiento, organización y reglamentos de los Institutos
sujeto a lo estatuido en esta Convención. La Comisión Permanente del Nacionales, serán de la competencia de las naciones respectivas.
mencionado Congreso dejará de existir cuando el Consejo Directivo quede
integrado, recayendo sus funciones en el Comité Ejecutivo. ARTICULO XI

ARTICULO IX Idioma
Director Serán idiomas oficiales el español, el inglés, el portugués, y el francés.
El Comité Ejecutivo acordará traducciones especiales a éstos y a idiomas
l. El Director del Instituto deberá ser persona de reconocida compe- indígenas americanos, cuando lo estime conveniente.
tencia en materia indígena y poseer un conocimiento comparativo del
problema indígena en diversos países americanos. Durará en su empleo ARTICULO XII
seis años. Será Jefe del Instituto, responsable de su marcha y funciona-
miento ante el Comité Ejecutivo. Documentos
Los gobiernos participantes remitirán al Instituto Indigenista Intera-
2. El Director determinará los proyectos, labores y actividades del mericano dos copias de los documentos oficiales y de las publicaciones
Instituto, dentro del programa general que el Comité Ejecutivo y los relacionadas con las finalidades y funciones del Instituto, hasta donde lo
estatutos a que se refiere el Artículo VII, fracción 7, inciso e), señalaren, y permitan la legislación y prácticas internas de cada país.
1
tendrá, además, las siguientes atribuciones:
:J ARTICULO XIII
r a) Nombrar, con la aprobación del Comité Ejecutivo al personal del
Instituto, procurando, en cuanto sea posible, y en igualdad de competen- Franquicia Postal
cia, que se distribuyan los cargos entre nacionales de los diversos países
contratantes; Las Altas Partes Contratantes acuerdan hacer extensivo al Instituto
Indigenista Interamericano, desde luego, en sus correspondientes territo-
b) Administrar los fondos y bienes del Instituto y ejercer el presupues- rios y entre unos y otros, la franquicia postal, celebrada en la ciudad de
to, con la limitación de someter a la aprobación del Presidente del Comité Panamá el 22 de diciembre de 1936, y pedir a los miembros de dicha
Ejecutivo previamente, las erogaciones especiales mayores de ciento Unión que no suscribieron la presente Convención, le hagan igual conce-
cincuenta dólares y al Comité Ejecutivo las que pasen de trescientos. sión.
3. El Director del Instituto podrá dirigirse directamente a los gobiernos ARTICULO XIV
y a las instituciones públicas o privadas, en representación del Instituto,
para dar cumplimiento a los acuerdos del Comité Ejecutivo y del Consejo Estudios especiales
Directivo. Los estudios o investigaciones concertados especialmente por uno o
dos de los países contratantes, serán sufragados por los países afectados.
4. El Director asistirá como consultor, a las sesiones del Consejo
Directivo de las comisiones designadas por el mismo, y de los Congresos ARTICULO XV
Indigenistas Interamericanos, a efecto de dar las informaciones que
fueren del caso. Los gastos serán satisfechos con fondos del Instituto. Cada una de las Altas Partes Contratantes reconoce la personalidad
jurídica del Instituto Indigenista Interamericano.
220
221
ARTICULO XVI En fe de lo cual, los infrascritos Plenipotenciarios, después de haber
depositado sus plenos Poderes, que fueron hallados en buena y debida
Firma y ratificación forma, firman y sellan esta Convención en nombre de sus respectivos
Gobiernos, en México, D. F., en las fechas indicadas junto P o;us firmas.
1. El Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos remitirá a los Gobier-
nos de los países americanos un ejemplar de esta Convención, a fin de El Director del Instituto Indigenista Interamericano,
que, si la aprueban, produzcan su adhesión. A este efecto, los gobiernos
interesados darán los poderes necesarios a sus respectivos representantes MANUEL GAMIO
diplomáticos o especiales, para que procedan a firmar la Convención.
Conforme vayan produciéndo&e las adhesiones de los diversos Estados,
cada uno de ellos someterá la Convención a la correspondiente ratifi- Embajada de los Estados Unidos de Venezuela en México.
cación.
Se legaliza la firma que antecede del Señor Manuel Gamio, para
2. El original de la presente Convención en español, inglés, portugués entonces Director del Instituto Indigenista Interamericano, sin prejuzgar
y francés, será depositado en la Secretaría de Relaciones Exte.riores del acerca de ningún otro extremo, de fondo ni de forma.
Gobierno de México y abierto a la firma de los gobiernos amencanos del
lo. de noviembre al31 de diciembre de 1940. Los Estados Americanos que México, D. F., 26 de abril de 1947.
después del 31 de diciembre de 1940 deseen adherirse a la presente
Convención, lo notificarán al Secretario de Relaciones Exteriores del El Embajador,
Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos.
JUANJONESPARRA
3. Los instrumentos de ratificación serán depositados en la Secretaría
de RelaciOnes Exteriores del Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos,
la que notificará el depósito y la fecha del mismo, así como el texto de RELACION DE LOS ESTADOS SIGNATARIOS Y DE LOS ESTADOS
cualquier declaración o reserva que los acompañe, a todos los gobiernos QUE SE HAN ADHERIDO A LA CONVENCION DEL INSTITUTO
americanos. INDIGENISTA AMERICANO
4. Cualquier ratificación que se reciba después de que la presente BOLIVIA: Suscribió la Convención el 18 de diciembre de 1940; el
Convención entre en vigor, tendrá efecto un mes después de la fecha del Instrumento de ratificación quedó registrado el28 de abril de 1945.
depósito de dicha ratificación.
CANADA: Gestiona su adhesión al Instituto por la firma de un docu-
ARTICULO XVII mento. Se consultó a los países ratificantes, los que opinaron favorable-
mente, estando pendiente de ratificación.
Denuncias
1. Cualquiera de los gobiernos contratantes podrá denunciar la presen- COLOMBIA: Se adhirió al depositar el Instrumento de Ratificación que
te Convención en todo momento, dando aviso, por escrito, al Gobierno de fue registrado el 1Ode abril de 1944.
los Estados Unidos Mexicanos. La denuncia tendrá efecto, inclusive por
lo que a las cuotas se refiere, un año después del recibo de la notificación COSTA RICA: Suscribió la Convención el 29 de noviembre de 1940.
respectiva por el Gobierno de México. Ratificada por el Congreso Constitucional el 17 de agosto de 1943. No
se ha hecho el depósito del Instrumento respectivo.
2. Si como resultado de denuncias simultáneas o sucesivas el número
de Gobiernos Contratantes se reduce a tres, la Convención dejará de tener CUBA: Suscribió la Convención el29 de noviembre de 1940.
efecto desde la fecha en que, de acuerdo con las disposiciones del párrafo
't
precedente, la última de dichas denuncias tenga efecto. ECUADOR: Suscribió la Convención el 29 de noviembre de 1940. El
Instrumento de Ratificación quedó registrado el13 de diciembre de 1941.
3. El Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, notificará a todos los
Gobiernos Americanos las denuncias y las fechas en que comiencen a EL SALVADOR: Suscribió la Convención el29 de noviembre de 1940.
tener efecto. El Instrumento de Ratificación quedó registrado el 30 de julio de 1941.

4. Si la Convención dejare de tener vigencia según lo dispuesto en el ESTADOS UNIDOS: Suscribió la Convención al 29 de noviembre
párrafo segundo del presente artículo, el Gobierno de los Estados Unidos de 1940. El Instrumento de Ratificación quedó registrado ello. de agosto
Mexicanos notificará a todos los Gobiernos Americanos la fecha en que de 1941.
la misma cese en sus efectos.
223
222
GUATEMALA: La adhesión quedó registrada el 3 de noviembre de Giobbe, Arzobispo Titular de Tolemaida, Nuncio Apostólico en Colombia,
1945. Ratificada por el Congreso de la República ellO de agosto de 1946. y el Excelentísimo señor don Carlos Uribe, Ministro de Relaciones Exte-
No se ha hecho el depósito del Instrumento respectivo. riores de Colombia.

HONDURAS: Suscribió la Convención el 29 de noviembre de 1940. Han designado sus Plenipotenciarios, a saber:
El Instrumento de Ratificación quedó registrado el19 de julio de 1941.
Su Santidad el Papa Pío XII, al Excelentísimo y Reverendísimo Mon-
MEXICO: Suscribió la Convención el 29 de noviembre de 1940; el señor Antonio Samoré, Arzobispo Titular de Tirnovo, Nuncio Apostólico
Instrumento de Ratificación quedó registrado el21 de mayo de 1941. en Colombia, y

NICARAGUA: La adhesión se registró el22 de abril de 1941; el Instru- Su excelencia el Presidente de la República de Colombia, Encargado,
mento de Ratificación quedó registrado ellO de marzo de 1942. al Excelentísimo señor doctor Juan Uribe Holguín, Ministro de Relaciones
Exteriores de Colombia,
PANAMA: La adhesión quedó registrada el 26 de mayo de 1941; el
Instrumento de Ratificación fue registrado el27 de julio de 1943. Quienes, después de haber canjeado sus plenos poderes y de haberlos
hallado en buena y debida forma, han convenido en lo siguiente:
PARAGUAY: La adhesión, con carácter definitivo. quedó registrada
el17 de junio de 1941. ARTICUW 1
PERU: Suscribió la Convención el29 de noviembre de 1940. El Instru- La Santa Sede y el Gobierno de Colombia aceptan complacidos la
mento de Ratificación quedó registrado el19 de noviembre de 1943. oferta que, por conducto de los Superiores respectivos, han hecho o
puedan hacer las diferentes Ordenes y Congregaciones religiosas de con-
REPUBLICA DOMINICANA: La adhesión se registró elll de noviem- tinuar con las Misiones que actualmente tienen o de tomar a su cargo
bre de 1943. El Instrumento de Ratificación quedó registrado el 10 de aquellas que les fueren asignadas, suministrando el personal que el sos-
agosto de 1944. tenimiento y desarrollo de dichas Misiones exijan.

VENEZUELA: La adhesión se efectuó el8 de agosto de 1946. El Gobierno de Colombia extenderá un documento especial de identi-
dad a los Misioneros radicados en el país o que vengan en calidad de tales,
Dada, firmada y sellada en el Palacio Legislativo Federal, en Caracas, que los hará acreedores a las mayores facilidades de tránsito y a preferen-
a los nueve días del mes de junio del año de mil novecientos cuarenta y te atención por parte de las autoridades colombianas, civiles y militares.
ocho. Año 189o. de la Independencia y 90o. de la Federación.
ARTICUW 11
El Presidente,
Las Misiones a que se refiere la presente Convención incluyen los
VALMORE RODRIGUEZ siguientes territorios de la República:
El Vicepresidente, a) Once (11) territorios erigidos en Vicariatos Apostólicos, a saber:
LUISLANDER Caquetá (Vicariato de Florencia), Casanare (Vicariato de Casanare),
¡, Guajira (Vicariato de Riohacha), Pacífico (Vicariato de Buenaventura),
'\
Los Secretarios, Putumayo (Vicariato de Sibundoy), Río Atrato (Vicariato de Quibdó),
Río Cesar (Vicariato de Valledupar), Río Magdalena (Vicariato de Barran-
cabermeja), Ríos Meta y Vichada (Vicariato de Villavicencio), Río San
PEDRO JOSE VARGAS Jorge (Vicariato de San Jorge) y Río San Juan (Vicariato de Istmina);
' f•.·
1 HECTOR CARPIO CASTILLO
!'\ CONVENCION SOBRE MISIONES DEL 29 DE ENERO DE 1953
b) Siete (7) territorios erigidos en Prefecturas Apostólicas, a saber:
Arauca (Prefectura de Arauca), Labateca (Prefectura de Labateca), Rio
Su Santidad el Sumo Pontífice Pío XII y el Presidente de la República Amazonas (Prefectura de Leticia), Ríos Minas y Patía (Prefectura de
de Colombia, Encargado, Excelentísimo Señor Doctor Roberto Urdaneta Tumaco), San Andrés y Providencia (Prefectura de San Andrés y Provi-
Arbeláez, dencia), Tierradentro (Prefectura de Tierradentro) y Vaupés (Prefectura
de Mitú).
Deseosos de ajustar una nueva Convención sobre Misiones que
sustituya la firmada en Bogotá el cinco (5) de mayo de mil novecientos La Santa Sede podrá erigir libremente otros Vicariatos y Prefecturas
veintiocho (1928) por el Excelentísimo y Reverendísimo Monseñor Paolo Apost~licos, así como dividir o hacer segregaciones de los que en la actua-

224 225
-
lidad_ exist,en, dand? aviso previo al <!obiemo de Colombia, cuya aquies-
cencu': sera necesa~1a J?ara que las estipulaciones contenidas en los Artícu- nario y en la medida de sus posibilidades la construcción de orfanatos,
los qumto, ~-exto, se~tlmo, noveno,_ un~écimo y décimo-sexto de la presen- escuelas, dispensarios o centros de salud y de más establecimientos de
te Convencwn se ex~1e~dan a l?s VI~anatos y Prefecturas erigidos, en todo beneficencia en los territorios Misionales. Asimismo, el Gobierno de
o el?- parte, con terntonos no mclUidos dentro de los especificados en los Colombia buscará la manera de que se incrementen los auxilios departa-
ordmales a) y b) de este Artículo. mentales y municipales a favor de la educación y beneficencia en los
mismos territorios.
ARTICULO III
Como estímulo para la formación del clero indígena colombiano,
Los límites de_ ,las Misiones actuales se fijan en un apéndice a la según los deseos de la Santa Sede, el Gobierno de Colombia ayudará
prese~te ConvenciOn. Los de las que en lo sucesivo se erijan constarán efectivamente y en la medida de sus posibilidades a la construcción de
en canJe de notas. Seminarios en los territorios Misionales y al sostenimiento de algunas
becas en los Seminarios ya establecidos o que se establezcan en el futuro.
ARTICULO IV
ARTICULO VIII
~as Misiones q~e administre~ territorios colindantes con los países
ve~I~os de Colombi~ s~ esforzaran en establecer residencias y centros Los Jefes de las Misiones 'Ul8llCÍonadas en los ordinales a) y b) del
Misic;>nales en los pn~cipB:les puntos limítrofes. La fundación de pueblos Artículo segundo de esta Convención y los de las Misiones que en el futuro
en d1fhos puntos s~ra obJeto del apoyo más decidido por parte de las se establezcan darán cuenta directamente a la Nunciatura Apostólica en
autondades colombianas. Colombia de la inversión que hagan cada año de los auxilios recibidos del
Gobierno de Colombia.
ARTICULO V
De tales inversiones dará cuenta, a su vez, la Nunciatura Apostólica,
El Gobierno ~e. Colombia, como justa compensación del sacrificio para fines informativos, al Ministerio de Relaciones Exteriores.
qu~ ha~,en los Miswneros para evangelizar a los indígenas, contrae la
obhgac10n. ~e p~oveer a. _las Misione~ de que trata la presente Convención ARTICULO IX
de los auxihos fiscales fiJados en el artículo sexto y en el séptimo.
Con el objeto de que la educación se oriente en los territorios Misiona-
ARTICULO VI les dentro del ~spíritu y de acuerdo con las enseñanzas de la Iglesia
Católica, Apostólica y Romana, el Gobierno de Colombia confía a los
E~ Gobierno de Colombia contribuirá anualmente con la suma de trein- Prelados Jefes de Misiones las siguientes atribuciones de dirección y
ta mil, J?esos ($3~.000) para cada uno de los Vicariatos y Prefecturas vigilancia de la misma educación:
Apostohcos ~~ncwnados en los ordinales a) y b) del artículo segundo de
e~ta Convencwn. ~demás, contribuirá anualmente con la suma de tres- a) Crear y trasladar las escuelas públicas primarias, secundarias,
cientos ~ese?ta mil pesos ($360.000) destinada a suplir las necesidades vocacionales, agrícolas y normales, ciñéndose a las normas de esta
extraordmanas que las Misiones puedan tener. Convención;

Los pagos .a9uí estipulados los hará el Gobierno de Colombia por b) Hacer para dichas escuelas primarias, secundarias, vocacionales-
semes~res anticipados. del calendario, dentro de los primeros sesenta agrícolas y normales, ciñéndose a las normas de esta Convención, los
(60) dias del respectivo semestre. Consiguientemente, el total será nombramientos, promociones y remociones de maestros y el señalamiento
sufragado en dos (2) contad?s semestrales, que se pagarán a la Santa de sus sueldos;
Sede por conducto de la Nunciatura Apostólica en Bogotá.
e) Inspeccionar y velar a efecto de que la enseñanza en los centros
,Parágraf~. Es en.tendido que los auxilios mencionados en el presente educacionales del respectivo territorio Misional, comprendidos los priva-
articulo sustituyen mtegramente los del Artículo VI de la Convención dos, se oriente de conformidad con los Artículos doce, trece y catorce
entre !as Altas. P~rtes Contratantes firmada el cinco (5) de mayo de mil del Concordato vigente. En los casos en que, por razón de normas legales
novecientos vemtwcho (1928). colombianas hoy vigentes o que en un futuro lleguen a regir, se requiera
licencia de alguna autoridad colombiana para la apertura o funcionamien-
ARTICULO VII to de centros educacionales privados, la respectiva autoridad colombiana
oirá antes de decidir al correspondiente Prelado Jefe de Misión. Nada
El Go?íerno de <;olombi~! si~ perjuicio de las contribuciones señaladas de lo establecido en el presente ordinal regirá para centros privados
en el Articulo antenor, auxiliara con los recursos de su presupuesto ordi- destinados exclusivamente a la educación de hijos de extranjeros no cató-
licos;
226
227
d) Distr~buir. los ~~~es y organizar los restaurantes escolares para las ARTICULO XII
escuelas prunanas, cmendose a las normas de la presente Convención.
Con el objeto de evitar cualquier peligro de opresión para los indígenas
Parágrafo l. El Gobierno de Colombia se obliga a incluir en sus y de persecución para los Misioneros, el Gobierno de Colombia se obliga
pr.esupuestos anuales las partidas necesarias para el correcto funciona- a fomentar la buena inteligencia entre sus agentes y los respectivos
miento de las escuelas en los territorios Misionales, en número suficiente, Jefes de Misiones y a impedir por los medios a su alcance que
con sueldos adecuados para los maestros, lo cual deberá acordarse pre- ella se perturbe. El nombramiento de funcionarios civiles para los territo-
viamente cada año. rios Misionales recaerá en personas de todo punto de vista recomendables
y reconocidamente favorables a las Misiones y religiosos Misioneros.
Par~grafo 2. La cr.eación y traslado de escuelas y los nombramientos, Quedará reservada a las autoridades supremas de las Altas Partes Contra-
promociOnes Y re~oc10nes de que trata este Artículo, así como la fijación tantes la solución de las cuestiones que puedan suscitarse entre la autori-
~e sueldo~, deberan se~ aprobados o podrán ser improbados por la respec- dad civil y el Jefe de cada Misión a causa de medidas tomadas por éste en
tiva autondad colombiana de~tro de los tres (3) meses siguientes a la guarda del bien espiritual y de los intereses materiales de los indígenas o
fecha en la cual el correspondiente Despacho reciba la copia de los actos en ejercicio de las funciones especiales asignadas por el Artículo décimo-
en que consten las medidas mencionadas. tercero de esta Convención y será causa suficiente de remoción de los
empleados del Gobierno una queja del Jefe de la Misión, siempre que
Parág~afo 3. La improbación tendrá el efecto de suspender la ejecución se funde en hechos comprobados.
de la med1da del Prelad<;> Jefe de la Misión hasta que se logre un acuerdo
entre la respectiva autondad colombiana y el correspondiente Prelado. ARTICULO XIII

Parágraf~ 4. El traslado ?e escuelas de que trata el ordinal a) del Para estimular a los indígenas a reunirse primeramente en familias
presente Art1culo y las remociOnes de maestros a que se refiere el ordinal y a agruparse luego en las reducciones y con el objeto de facilitar, al
b) del mis~o, no podrán ser improbados por la autoridad colombiana mismo tiempo, a la autoridad civil el desempeño de las funciones que le
correspondiente cuando obedezcan a motivos de orden religioso o moral incumben, el Jefe de la respectiva Misión aunará al fin primordial de su
pero en estos casos la .~opia d~l. acto respectivo se acompañará, por 1~ cargo, que es el de la civilización cristiana, el del fomento de la prosperi-
me~os, de una declarac10n exphc1ta del Prelado de que existen uno u otro dad material del territorio y de los indígenas en él establecidos. Cuidará,
motivo o ambos. por lo tanto, de estudiar diligentemente los productos de la región a su
cargo y enviará informes al Gobierno de Colombia, proponiéndole los
ARTICULO X métodos adecuados para derivar mayores ventajas de esos productos.
Cuidará también de difundir entre los indígenas las industrias más
. ~~da la trasc~n~encia 9~e tiene pa:a l:'l Nación colombiana la evange- aconsejables. El Gobierno de Colombia, por su parte se obliga a ayudar a
hzac~m: en la Re~Igwn Catohca de los mdigenas y teniendo en cuenta las los Jefes de las Misiones en el desarrollo de la agricultura y de la industria
con~ICiones particulares en que éstos se encuentran, las autoridades del y a amparar eficazmente las propiedades de los indígenas.
Gobier~? de Colombia darán a los Misioneros Católicos especial apoyo y
proteccwn para que puedan desarrollar su obra libremente y sin obstácu- ARTICULO XIV
los.
Los Ordinarios de los territorios de Misiones gozarán en Colombia de
ARTICULO XI los mismos privilegios que los otros Ordinarios diocesanos en relación con
el fuero judicial, de acuerdo con la Convención adicional al Concordato
~1 Gobierno d.e Colombia se obliga a conceder en los lugares donde las promulgada por la Ley colombiana treinta y cuatro (34) de mil ochocientos
hubiere "r por el tiempo de la duración de la presente Convención la canti- noventa y dos (1892).
dad?~ tierras bal~í~s requeridas, en ~oncepto de dicho Gobierno, para el
serv1c10 de las MisiOnes, las cuales tierras se destinarán para huertas ARTICULO XV
sembrados, dehesas, ~.te. Las concesiones de estos terrenos primará~
s?.bre tod~ otra. co_nces10n, excluyendo los que se destinen a la construc- El Jefe de cada Misión designará, con la aprobación del Representante
cwn de .vias pubhcas o la explotación del subsuelo, y se otorgarán de Pontificio en Bogotá, un Síndico o Procurador Eclesiástico a efecto de
conformidad con las leyes vigentes al tiempo de otorgarlas. representarlo en todas las gestiones administrativas .
. ~.1 Gobierno de .Col.om~~a solicitará concepto al respectivo Jefe de la El Gobierno de Colombia reconocerá franquicia postal y telegráfica a
~Iswn sobre la adJUdicaciOn de baldíos y parcelación de resguardos a los Síndicos o Procuradores dichos para todo lo relacionado con sus
fm de a~le~ar así mejor información respecto de los derechos ya adquiridos
por los mdigenas. funciones.

228 229
-
ARTICULO XVI
.e} L~ gra~ación d.e .c~tas en cada idioma o dialecto, de las cuales se
La presente Convención, sea cual fuere el número de Vicariatos y fac1htara cop1a a la Div1s1on de Asuntos Indígenas.
Prefecturas Apostólicos, que existan durante el término de su vigencia,
permanecerá en vigor desde la fecha de su firma hasta el primero (lo.) de d) L~. recopilación de toda clase de datos antropológicos culturales, y la
enero de mil novecientos setenta y ocho (1978), pero para meramente los c~n~fecc10n de documentos fotográficos sobre aspectos raciales vestido
efectos fiscales se considerará que rige desde el primero (lo.) del mes en VIVIenda, er~ser~s, ?Iobiliario, instrumentos, industrias y diver;os aspec~
curso. tos de 1~ v~da md¡gena, cuyas finalidades sean fundamentalmente de
orden practiC_? para la m~jor comprensión de cada cultura, y la deducción
En lo que se refiere a la cuantía de los auxilios fiscales, las Altas de las campanas nec~sar1as para el mejoramiento global y la incorporación
Partes Contratantes harán cada cinco (5) años un estudio a efecto de deter- de cada grupo estudiado, a más altos y útiles niveles de vida.
minar si es el caso de modificarlos en consideración a variaciones sustan-
ciales en el costo de la vida en el país, ello sin perjuicio de que el Gobierno Se.gundo. Dent~o ~e las finalidades prácticas, se tendrán en cuenta
de Colombia pueda contribuir con una suma mayor, si en concepto de especialmente las s1gu1entes:
éste, el desarrollo de las Misiones así lo exige.
. a) Prest~ci~n de servicios de los investigadores del Instituto Lingüís-
En fe de lo cual, los expresados Plenipotenciarios firman, en doble tico .con.lO mterpretes, a .los funcionari~s nacionales, intendenciales y
ejemplar, la presente Convención y la sellan con sus respectivos sellos, en com1sa!1ales que lo necesiten, en las regiOnes donde tales servicios sean
Bogotá, a veintinueve (29) de enero de mil novecientos cincuenta y tres requendos;
(1953).
b) Organización de cu~sos ?e cap3:citación lingüística para aquellos
Nuncio Apostólico, grup?s d~ maestros ? ~J?-C1onar1os destmados a poblaciones indígenas en
(Fdo.) ANTONIO SAMORE coodma~10n con la DlVlSion de Asuntos Indígenas y el Instituto Indigenista
Colombiano;
Ministro de Relaciones Exteriores,
(Fdo.) JUAN URIBE-HOLGUIN e) Preparación de. c3:rtillas en idiomas indígenas, para facilitar a los
analfabetos el aprendiZaJe de la lectura y la escritura;
CONVENIO CON EL INSTITUTO LINGUISTICO DE VERANO
d~ ~laborac~ó~ de cartilla~ ~ilingües (castellano-indígenas), con el
Los suscritos Fernando Londoño y Londoño, en su carácter de Ministro propos1to de facilitar el aprendizaJe del idioma oficial.
de Gobierno de la República de Colombia, y Guillermo (William) Town-
sed, en su carácter de Director del Instituto Lingüístico de Verano (Sum- e). La traducción a. lenguas aborígenes de los textos que requiera el
mer Institute of Linguistica, Inc.), relacionado con la Universidad de trabaJo cultural de los mvestigadores del Instituto Lingüístico y de la Divi-
Oklahoma, de los Estados Unidos de Norte América, deseosos de ajustar sión de Asuntos Indígenas;
un Convenio encaminado a investigar en forma técnica, ordenada y
exhaustiva, las lenguas, idiomas y dialectos de las comunidades indígenas . f) Fom~n~ del mejoramiento social, económico, cívico, moral y sanita-
existentes en la República de Colombia, especialmente de aquellas que nos de los md1genas con que el Instituto Lingüístico establezca contacto.
habitan sus Intendencias y Comisarias, han convenido lo siguiente:
Tercero. El Instituto Lingüístico prestará la colaboración gratuita de
Primero. El Instituto Lingüístico en coordinación con la División de algu~10s de s~s prof~sores, cu~do el Gobierno Nacional de Colombia, por
Asuntos Indígenas del Ministerio de Gobierno, de la cual será asesor, med10 del Mm1steno de Gobierno lo solicite para la capacitación de lin-
güistas colombianos.
desarrollará un programa de investigación entre grupos de indígenas
con los siguientes objetivos: Cuarto. El Instituto Lingüístico cooperará con la División de Asuntos
lndíg~n.as y con el !nstituto Indigenista Colombiano en la preparación de
a) El estudio profundo de cada lengua, con el análisis adecuado de
expos~c10nes d~ obJetos, y en conferencias de filosofía o cultura indígena
su sistema fonético y morfológico, y una recopilación comprensiva y útil que dichas entidades por sí o por otras instituciones culturales deseen
de su vocabulario; - realizar.
b) Un estudio comparativo de las lenguas aborígenes entre sí y la
relación con los demás idiomas del mundo, para su correspondiente . ~.~in~o. Los. serv1c1os de campo de los investigadores del Instituto
catalogación; Lmgu.IStico, as1 como los de publicaciones especiales, se realizarán
gratmtamente para el Ministerio de Gobierno, pero los cursos especiales
230 '
231

j
--
g) Gestionar la importación al país, libre de derechos de aduana, de los
de capacitación lingüí~tica de maestros rurales, serán remunerados por la equipos, implementos, aparatos, enseres personales y otros artículos que
entidad interesada. de común acuerdo se juzguen necesarios para el eficiente desarrollo de
las labores del mismo Instituto.
Sexto. El Instituto Lingüístico operará aviones en las regiones de difícil
acceso, y en estos dará transporte hasta su alcance, no solamente a sus h) Cooperar con medicamentos a la acción sanitaria de las enfermeda-
investigadores, sino también a los funcionarios del Gobierno Colombiano, des del Instituto Lingüístico ;
a los Misionems, y en casos urgentes a los habitantes o transeúntes por
las regiones de trabajo de dicho Instituto, a precios cómodos y sin distingo i) Propiciar por medio del Instituto Indigenista Colombiano, la colabo-
alguno. Siendo entendido que los aviones del Instituto Lingüístico no ración entre las Misiones Católicas y el Instituto Lingüístico, para el mejor
competirán comercialmente con aquellos servicios de transporte aéreo desempeño de las funciones que competen a este Instituto, y para que las
regular que operan en el país. Además el Instituto operará radios trans- Misi't>nes cuenten con los servicios técnicos que puede proporcionarles el
misores y receptores para mantener contacto con sus lingüistas en el
campo, con sus aviones y su oficina en la capital de la República. Este mismo Instituto.
servicio estará también a las órdenes de los funcionarios del Gobierno
y de los Misioneros. Noveno. Este convenio podrá ser reformado o ampliado en cualquier
tiempo por acuerdo de ambas partes, y regirá desde la fecha, hasta que
terminen las investigaciones lingüísticas especificadas, o hasta que el
Séptimo. El Instituto respetará las prerrogativas de la Iglesia Católica,
Gobierno Colombiano dé por terminado el convenio, previa notificación
según los términos del Concordato vigente entre Colombia y la Santa expresada en un lapso no menor de un año, debiendo en caso contrario,
Sede.
indemnizarse al Instituto las inversiones que hubiera hecho, y que fuere
posible aprovechar en el futuro beneficio público.
Octavo. El Ministerio de Gobierno se compromete a su tumo, a
proporcionar al Instituto Lingüístico: En fe de lo cual los contratantes, firman en tres ejemplares el presente
convenio, junto con dos testigos, en Bogotá, D. E., a 21 de febrero de
a) Una oficina en Bogotá, equipada y anexa a la División de Asuntos 1962.
Indígenas;
El Ministro de Gobierno,
b) Las gestiones necesarias para la inmigración libre de depósito, y
para la permanencia de los investigadores del Instituto en el país; (Fdo.) FERNANDO LONDOÑO Y LONDOÑO
e) Dotar al Instituto Lingüístico transitoriamente de los terrenos Por el Summer Institute of Linguistica, Inc., el Director General,
necesarios para el establecimiento y sostenimiento de las bases de investi-
gación y trabajo, en los sitios que se acuerden con la División de Asuntos
Indígenas; (Fdo.) GUILLERMO (WILLIAM) TOWSEND
Testigo,
d) Gestionar los permisos necesarios para que el Instituto Lingüístico
importe o adquiera en el país, y use en el desarrollo de sus labores de (Fdo.) GREGORIO HERNANDEZ DE ALBA
investigación, uno o más aviones, anfibios, helicópteros, o de otro tipo,
para el transporte de sus investigaciones por la selva; Testigo,

· e) Proporcionar al Instituto Lingüístico el combustible necesario para (Fdo.) EDUARDO SANTA


sus transportes por tierra o aéreos, a cargo de la División de Asuntos
Indígenas y gestionar el dereého de uso de aeródromos sin costo alguno Hay un sello que dice: República de Colombia. Consej? de Mi~i~tros,
para el Instituto Lingüístico ; Bogotá, 9 de marzo de 1962. En sesión de hoy el ConseJO de Mm1stros
emitió dictamen favorable acerca del contrato que precede.
f) Gestionar los permisos necesarios para que el Instituto Lingüístico
importe libre de derechos de aduana, adquiera y use, dentro de la selva, El Secretario,
aparatos radio-emisores y radio receptores, y otros equipos necesarios
para el mejor cumplimiento de sus labores, y para la seguridad de sus (Fdo.) ANTONIO COPELLO FACCINI
colaboradores; quedando entendido que los aparatos referidos estarán
siempre al servicio del Gobierno Colombiano, para los informes y comuni- Hay un sello que dice: Presidencia de la República. Aprobado. Bogotá,
caciones que juzgue convenientes; D. E., 13demarzode 1962.

232 233
IV.l. ORGANIZACION SOCIAL Y JURIDICA

Resguardos. De Indígenas. Propiedad común y plena de los indios.


Petróleos.

··La encomienda de don Alvaro de Mendoza indudablemente dio


origen a la comunidad o Resguardo de indios de Tubará, cuyas tierras se
declararon vacantes en el año de 1886, por el Juez de Barranquilla. "Estos
pueblos de indios -dice el mismo profesor citado- se designaron prime-
ramente con el nombre de reducciones, porque ante la resistencia de los
aborígenes, que preferían llevar una vida no sedentaria alejados de los
colonizadores, fue necesario reducirlos para que vivieran en población y se
les declaró adscritos al pueblo de que formaban parte. Más tarde se les
llamó Corregimientos, porque quedaron sometidos a la autoridad de un
funcionario especial llamado Corregidor de pueblos de indios. Este funcio-
nario debía ejercer sobre los indios de su corregimiento una misión tutelar
análoga a la que correspondía al encomendero sobre los indios de su enco-
mienda. Pero estas prevenciones de la ley no lograron en la práctica una
mayor eficacia.

·'Así como en la primera época de la colonización española en América


los repartimientos en encomiendas gozaron de supremacía incuestionable
en la organización social y económica del trabajo de los indios, esta
supremacía fue cediendo poco a poco en favor de reducciones y corre-
gimientos, o sea los núcleos de población aborigen incorporados a la
Corona''.

Los Resguardos de indios son así rezagos de las antiguas reducciones o


corregimientos que lograron conservarse no obstante la casi completa
extinción de la raza indígena en la mayoría de las colonias españolas en
América. Esas agrupaciones o comunidades de indios fueron objeto
de especial reglamentación en disposiciones legales desde los primeros
días de la República.
Y así, el Libertador, apenas constituida la República, lo primero que
hizo fue dictar el Decreto de la Villa del Rosario, de 20 de mayo de 1820,
' 'que ordena devolver a los naturales los resguardos'', decreto que se
dictó según reza su encabezamiento, para "corregir los abusos introduci-
dos en Cundinamarca en la mayor parte de los pueblos de naturales, así
contra sus personas, como contra sus resguardos y aún contra sus liberta-
des", y cuyo artículo primero ordenó:
269
---··
-··
CONSIDERACIONES DE LA CORTE
"Se devolverán a los naturales, como propietarios legítimos, todas las
tierras que formaban los resguardos, según títulos, cualquiera que sea el
que aleguen para poseerlas los actuales tenedores''. . ~· La Ley 89 de 1890, que reglamentó las comunidades indígenas,
d1stmgue claramente entre sí tres cosas diferentes:
En armonía con el Decreto del Libertador, el Congreso de Cúcuta dictó a) Las PAR.CIA~IDADES·de indígenas, que son las comunidades de
la Ley de 11 de octubre de 1821, sancionada por el Vicepresidente Santan- personas prop1etanas de determinados territorios sujetos por ellas a
der, ··sobre extinción de los tributos de los indígenas, distribución de sus explota~iói?- (artículos 3, 4, 9, 10, 11 y 12); b) Los RESGUARDOS, que son
resguardos y exenciones que se les conceden'', de la que es parte el l~s temto~10~ que aquéllas explotan (artículo 7, ordinales 3, 4, 6 y 7, - 9,
artículo 4, que se dispuso: 13, 14 y s1gu!entes); y e) Los CABILDOS, que constituyen las corporacio-
nes que gobiernan y representan las parcialidades ante las autoridades
(artículos 3, 4 y 23).
"Los resguardos de tierras asignados a los indígenas porlasleyesespa-
ñolas, y que hasta ahora han poseído en común, o en porciones distribui- Por. modo ~ue ,la parcialidad es la persona jurídica formada por una
das a sus familias sólo para su cultivo, según el reglamento del Libertador comumdad de md1genas, el resguardo es su territorio y el Cabildo es su
Presidente de 20 de mayo de 1820, se les repartirán en pleno dominio y representante legal.
propiedad, luego que lo permitan las circunstancias, y antes de cumplirse
los cinco años de que habla el artículo 2' '. En cuanto al presupuesto procesal de demanda en forma, ha dicho la
Corte .. que si el juez ·en el momento de ir a fallar el negocio se encuentra
En seguida se consagran otras disposiciones encaminadas a dar una dem.and.a con su defecto de forma de tal mdole que haga imposible un
normas para verificar la división de las tierras entre las familias del ~ronunc1am1ento en el fondo del negocio (subraya el texto), el deber del
resguardo. Y el artículo 8 dispuso que "los protectores de naturales conti- JUzgador es declarar la inhibición para decidir la controversia por causa de
nuarán ejerciendo su ministerio y promoverán las acciones comunales que e.se ~~pedimento pro~~sal. Tal sería el caso de una demanda en que
les correspondan; pero todas las demás acciones civiles o criminales las eJ.erc1tando~e una ac;c1~n. real. no se ~a señalado los linderos y demás
instruirán los indígenas como los demás ciudadanos considerados en la crrcunstanc1as que mdiv1duahcen el mmueble en que radica el dere-
clase de miserables, en cuya virtud no se les llevarán derechos algunos". cho ... '(LXXVIII, pág. 349)". (Cas. civ. 18 de junio de 1975 año de publi-
cada).
Los Congresos de la Nueva Granada dictaron también' disposiciones Dicen los artículos 1 y 2 de la Ley 89 de 1890:
especiales complementarias para la inmediata ejecución de las leyes ante-
riores, mediante las leyes de 6 de marzo de 1832 y 2 de junio de 1834 ''Artículo l. La legislación general de la República no regirá entre los
(números 724 y 878, de orden, respectivamente, de la Codificación salvajes que vayan reduciéndose a la vida civilizada por medio de Misio-
Nacional). Son de la última los artículos 7 y 10; por el primero dispuso el nes. En consecuencia, el Gobierno, de acuerdo con la autoridad eclesiásti-
Congreso que en aquellas ·'parroquias en donde se encuentre alguna ca, determinará la manera como esas incipientes sociedades deban ser
porción de terreno perteneciente a los resguardos, destinada al servicio gobernadas.
del cura, o de alguna cofradía, o de cualquiera otra obra pía, este terreno
acrecerá a la comunidad, y será dividido o distribuido'', y por el segundo Artículo 2. Las Comunidades de indígenas reducidos ya a la vida civil
ordenó que a las ''parroquias de indígenas que no tienen resguardos, se tampoco se regirán por las Leyes generales de la República en asuntos de
les repartirán las tierras baldías donde se hallen situadas" . Resguardos. En tal virtud se gobernarán por las disposiciones consigna-
das a continuación''.
Sirven las citas anteriores para demostrar que tanto el Libertador en
su Decreto 1820, como los legisladores del Congreso de Cúcuta, y después Los ordenamientos contenidos en estas disposiciones no han sufrido
los de la Nueva Granada, proveyeron a la división de las comunidades reforma en las leyes que posteriormente han sido promulgadas sobre el
sobre la base de que los indios eran propietarios legítimos de las tierras problema indígena.
comunales que constituían sus respectivos resguardos, porque las leyes
españolas se las habían asignado con ese carácter. Y fue para poner fin a Tales ordenamientos pueden analizarse brevemente así:
la comunidad indígena de los resguardos y repartir las tierras entre los
respectivos indios comuneros, que se dieron aquellas leyes y otras poste- a) Se refiere a ''indios salvajes que vayan reduciéndose a la vida civili-
riores que contuvieron reglamentaciones protectoras en orden a que las zada'' y a ''las comunidades de indígenas reducidos ya a la vida civil''.
reparticiones que se hicieran por la autoridad, al propio tiempo que
guardan equidad contribuyeran a mejorar la condición de los indios y a b) Para los "que vayan reduciéndose a la vida civilizada". dispone el
hacer fructíferas sus tierras. (S. N. G. 10 octubre de 1942 - G. J. No. artículo 1, no regirá la legislación general de la República, sino los acuer-
1993. Pág. 131). dos entre el Gobierno y la autoridad eclesiástica.
271
270
e) Para "las comunidades de indígenas reducidos ya a la vida civil",
y que por ello componen las Parcialidades, prescribe que ''tampoco se B) La ocupación, no les es aplicable por no tratarse cosas nullíus.
regirán por las leyes generales de la República en asuntos de "Resguar-
dos'", sino por las disposiciones de la misma Ley 89 de 1890, "las comu- 9 ~n lo conce~~iente. a _la tradición, no pueden los indios enajenar el
nidades de indígenas reducidos a la vida civil'- dice la casación de abril 30 dommw de la porcwn. recibid~ e_n 11:sufructo, mientras no se haya verifica-
de 1496- se gobiernan por las disposiciones de la Ley 89 de 1890, y el ~o el reparto, en propie~ad, n~ siqUiera a pretexto de enajenar las mejoras
Código Civil actúa solamente como Ley supletoria''. (LX, 2032 y 2033, que siempre se consideraran accesorias de los terrenos" (ordinal 7,
408). Ley 89 de 18~0). De donde se deduce que la tradición de la propiedad de
la parcela a.sign~~a en g?ce, no es precedente, ya que es absolutamente
nul~ la enaJe~acwn, segun la forma del artículo 40 de la Ley 89; y por
d) De donde se infiere que a las comunidades o Parcialidades de motivos semeJantes tampoco la de la cuota proindiviso en las tierras del
indígenas -participantes ya de la vida civilizada- les obliga la genera- Resguardo, con vinculación o sin ella al lote de terreno cuyo goce ha
lidad de las leyes del país, pero no en lo que respecta a "los asuntos de sido adjudicado.
resguardos'', sujetos a los preceptos de la citada ley y de las que luego se
han expedido sobre el mismo particular.
D) En re~ac~ón con la sucesión por causa de muerte y en cuanto a las
La comunidad o Parcialidad de indígenas -según la casación citada- parcelas atnb~udas en usufructo, éste no se transmite ab intestato (art.
es un organismo formado por dos elementos: el indígena, llamado por la 829, C. C.), n~ tampoco por testamento, porque lo prohibe el artículo 95
Ley (89 de 1890) Parcialidad de indígenas, o sea un conjunto de indígenas del Decreto numero 74 de 1898. El art. 27 de este Decreto dispone que
sometido a la organización que contemplan los artículos 3 y siguientes; y muerto~ el padre y la madre usufructuarios, debe adjudicarse el usufructo
el geográfico, o sea el territorio en el cual vive la parcialidad de indíge- de la misma parcela a sus hijos solteros o menores de diez y ocho años que
, se hallaban bajo la protección de aquéllos.
nas .
Con la expresión ''terrenos de resguardo'', se hace referencia a las En cuanto a la prescripción adquisitiva, no obstante que el usufructo
tierras atribuidas a una parcialidad de indígenas, divisibles, para su goce de derecho común puede adquirirse por este modo (art. 825, 4, C. C.),
únicamente, entre los indios del respectivo Resguardo, e inajenables, pero .sólo en la forma ordinaria mediante título otorgado por el titular de la
además, según las leyes de la Corona. Según las de la República, igual- P!Opiedad plena, no se ve cómo podría configurarse este caso extremo,
mente divisibles, en goce o usufructo, en una primera etapa, y en otra siendo nula, como lo es, la enajenación de las parcelas durante el usufruc-
adjudicables en propiedad con carácter de enajenables, pero con los to, Y aún después de l~ ~ivisión, dentro de los quince años siguientes, si
requisitos de las ventas de inmuebles de menores en los primeros quince no se cumplen los reqUisitos que para el caso prescriben los artículos 40 de
años, a partir de la división definitiva. (Arts. 40, Ley 89 de 1890; 34, Ley la Ley 89 de 1890, 34 de la Ley 19 de 1927 y 7 de la Ley 81 de 1958.
19 de 1927, y 7, Ley 81 de 1958).
En lo referente a la prescripción del dominio de las tierras de Resguar-
Son ''asuntos de resguardos'', con arreglo a la Ley 89 de 1890, cuantos dos, cabe considerar:
toquen con estos temas: el dominio de las tierras asignadas a las parciali-
1 dades; la destinación de parte de ellas, a plazas, calles y demás objetivos A) Las Parcialidades o Comunidades de indígenas constituyen una de
o necesidades de la población; la conservación de los títulos de propiedad las más importantes instituciones del Derecho Indiano, ya que con ellas
l de las mismas y la prueba supletoria de la titulación, prevista en los artícu- persiguió la monarquía la defensa del indio. La legislación para las Indias
1 los 12 de la Ley 89 de 1890 y 9 de la Ley 81 de 1958; la defensa de la pro-
piedad y posesión de los terrenos; el reparto material de los mismos entre
respetó siempre la propiedad de las tierras que habitaban los indígenas.
t. ios indios de la Parcialidad, para que éstos y sus familias gocen de sus Lo que predominó en orden al problema del indio en relación con la
respectivas parcelas; la división y la adjudicación de la propiedad de las tierra, de una manera casi exclusiva, fue la propiedad comunal, y por eso
tierras, a los miembros de la Parcialidad, etc. Estas materias se rigen, en los legisladores españoles, recogiendo inteligentemente normas vivas del
consecuencia, no por la Legislación general, sino la especial de la mencio- derecho consuetudinario, estructuraron toda la vida económica de los
1 nada Ley 89 y las posteriormente expedidas sobre este asunto. pueblos o reducciones de indios sobre la base de los resguardos.

Una mirada a los modos de adquirir en general, en lo referente a las "En los resguardos hay que hacer destacar estas notas representati-
tierras de las Parcialidades, contribuirá a despejar el horizonte de la vas: el resguardo lo constituye una unidad económica, estaba integrado
prescripción en cuanto a las mismas: por el término municipal de cada pueblo de indios, de cada reducción; era
un bien, en conjunto, inalienable". (El régimen de la tierra en la América
española durante la Colonia, p. 101. Editora Montalvo, Ciudad Trujillo,
A) Les es aplicable la accesión; en cuanto a frutos, le pertenecen al 1946).
indígena usufructuario de la parcela; respecto al suelo, con el ensanche
de éste, el goce aumenta; en lo referente a la incorporación de muebles Con las Parcialidades España respondía al hecho histórico de un
(materiales, semillas, etc.), se aprovecha igualmente el usufructuario. pueblo que siglos atrás ocupaba, poseía y cultivaba la tierra descubierta,
272 273
hecho que imponía al conquistador el deber primario de abrir a los aborí- les 4, 5 y 8 del artículo 14; igualmente para asignar en favor de las mismas
genes el campo de la civilización. Los agrupó en comunidades o parciali- entidades los fondos o Bonos Agrarios necesarios para el cumplimiento de
dades, atendiendo a las diferentes razas, lenguas y costumbres; les atri- las funciones que les delegue.
buyó áreas territoriales determinadas, en las cuales pudiesen constituir
el pueblo, así como disponer de terrenos cuyos cultivos, en parcelas les 4. Por su parte, el Artículo 79 de la Ley 135 de 1961 faculta al INCORA
proporcionasen el sustento, y les dio leyes de humanitaria largueza parl!l efectu~ ~as cesiones y las asignaciones de fondos que contempla el
tendientes a aliviar su estado. Así se practicó esta institución en la Colonia Articulo 16 1b1d., a favor de los establecimientos públicos en que aquel
y así pasó a la República. delegue sus funciones o de otras entidades de derecho público.

B) No puede, por tanto, resolverse problema alguno de carácter indí- 5. Para la validez de la cesión se requiere la autorización de la Junta
gena relacionado con los terrenos de Resguardos, sin mirar a dicha Directiva del Instituto y contar con el voto favorable del Ministro de Agri-
institución, y sobre todo a su finalidad. Las leyes de España y las de la cultura quien la preside, de conformidad con lo expresado en el literal d)
República componen un mismo proceso, ligado por idéntica causa de del artículo 31 del Decreto No. 3337 del29 de diciembre de 1961, aproba-
humanidad y de justicia para con los pueblos conquistados. torio de los estatutos del mismo organismo.

(Corte Suprema de Justicia - Sala de Casación Civil - Bogotá, 24 de 6. La Ley 89 del25 de noviembre de 1890, reconoce la existencia de los
septiembre de 1972. Magistrado Ponente: José J. Gómez R.). Cabildos Indígenas como formas autónomas de gobierno de las parciali-
dades y le señala las reglas para su constitución, período de duración y
forma de posesión (Artículo 3). Igualmente, les asigna como funciones
CONSEJO DE ESTADO entre otras, las de repartir las tierras comunes (numerales 4 y 5 del Artícu-
SALA DE CONSULTA Y SERVICIO CIVIL lo 7), ejercer el Gobierno económico de la respectiva parcialidad (Artículo
4), la realización y custodia de censos (numeral 1 Artículo 7), intervenir
CONSEJERO PONENTE: DOCTOR HUMBERTO MORA OSEJO en la venta, hipoteca o arrendamiento de las tierras del resguardo (nume-
ral 7, Artículo 7), la potestad de imponer sanciones correccionales a los
Bogotá, D. E., diez y seis (16) de noviembre de mil novecientos miembros de la comunidad (Artículo 5) y llevar la representación judicial y
ochenta y tres (1983). extrajudicial de los asuntos del resguardo (Artículos 23, 24 y 25).
,j

REFERENCIA: CONSULTA 7. Por Resolución No. 126 de 1923 expedida por la Gobernación del
RADICACION No. 1978 departamento de Caldas, dictada como resultado de una consulta elevada 1

por el Personero Municipal de Quinchía referente a la calidad de los


Se absuelve la consulta que el señor Ministro de Agricultura hace a la miembros del Cabildo y de sus actos, dispuso en su artículo 1 que "Los
Sala en los siguientes términos textuales: pequeños Cabildos Indígenas son Entidades de carácter público especial y
los documentos que expidan en ejercicio de sus funciones, son instrumen-
De manera atenta me dirijo a esa Honorable Corporación de conformi- tos públicos o auténticos''.
dad con lo dispuesto en los artículos 141 de la Constitución Nacional y 24 8. Posteriormente el Gobierno Nacional, oído el concepto favorable del
del Código Contencioso Administrativo, con el fin de que se emita concep- Consejo de Estado, mediante Resolución del29 de julio de 1924, aprobó la
t<;> sobre la consulta que se formula, previas las siguientes considera- 126 de 1923 con lo cual dicho precepto de orden local, entró a formar parte
CIOnes:
1· de la legislación nacional, de obligatorio cumplimiento y vigencia por
l. El patrimonio del Instituto Colombiano de la Reforma Agraria regular materias de carácter especial.
INCORA establecimiento público del orden nacional creado por Ley 135 de
1961 y adscrito al Ministerio de Agricultura, está integrado por los bienes 9. El Convenio Internacional del Trabajo No. 107 de 1957 de la Organi-
que ingresan al Fondo Nacional Agrario, de conformidad con lo estableci- zación Internacional del Trabajo, aprobado por la Ley 31 de 1967, relativa
do por el Artículo 15 de la Ley 135 de 1961. a la protección e integración de las poblaciones indígenas y tribales,
dispone en el Artículo 11 que ''se deberá reconocer el derecho de propie-
2. El Artículo 14 del mismo texto legal establece que el Fondo Nacional dad, colectivo e individual, a favor de los miembros de las poblaciones en
Agrario lo conforman, entre otros, las propiedades que el Instituto adquie- cuestión sobre las tierras tradicionalmente ocupadas por ellas''. Dicho
ra a cualquier título. reconocimiento debe estar acompañado por parte de los Estados suscrip-
tores, de la posibilidad de ''adoptar medidas especiales para la protección
de las instituciones, las personas, los bienes y el trabajo de las poblaciones
3. El Artículo 16 de la Ley 135 de 1961 autoriza al Instituto para ceder, en cuestión mientras su situación social, económica y cultural les impide
con el voto favorable del Ministro de Agricultura, a las Corporaciones beneficiarse de la legislación general del país a que pertenezcan" de
Regionales de Desarrollo, los ing~;esos o bienes de que tratan los numera- conformidad con el Artículo 3 del mismo Convenio.
274 275
Con fundamento en las anteriores consideraciones este Despacho se Art. 79 de la Ley 135 de 1961, como se afirma en el contexto de la consulta
permite consultar si atendidas las especiales circunstancias sociales agrega que ·'las cesi?nes y ~as asignaciones de fondos y bonos agrario~
culturales y las condiciones de extrema precariedad económica de la~ que co?teJ.?pla el articulo 16 de la present,e ley, podrán también hacerse
comunidades indígenas y la naturaleza de entidades públicas especiales por el m~ti~uto a f~vo~ de las otras entidades de derecho público o de los
establecimientos pubhcos en que él delegue sus funciones". El Art. 19 del
que les _reco~oce la Ley a los Cabildos Indígenas, es procedente que la D.ecreto 3177 de 1961, que reglamenta el16 de la Ley 135 del mismo año
Junta Duectiva del INCORA, con el voto favorable del Ministro de Agri-
disi;~one que esos bienes y fondos pueden cederse a las corporacione~
cultura, pueda ceder en favor de dichas comunidades indígenas represen-
regwnale~ de desarrollo, establecimientos públicos y, "en general, a
tadas por sus Cabildos, los predios ingresados al Fondo Nacional Agrario.
otr~s e~tldades. de de;echo p~blico . . . , siempre que su destinación y
La Sala considera y responde: aphcacwn efectiva esten relacwnadas con los fines de la Reforma Social
~graria ... ''.pe manera que, según las transcritas disposiciones, el Ins-
tlt~to Colombiano d~ la Reforma Agraria puede ceder los bienes a que se
l. El Art. 1 de la Ley 135 de 1961 prescribe, entre los objetivos de la
reh~re el Art. 14, numeros 4, 5 y 8, de la Ley 135 de 1961 a cualquiera
reforma agraria, "reconstruir adecuadas unidades de explotación en las
zona_s de minif~ndio y dotar de tierras a los que no la& posean, con prefe- ent~dad de derech? ~úblico, con 1~ condición esencial de que se destinen y
~encia para qmenes hayan de conducir directamente su explotación e aphquen al cumplimiento de los fmes de la reforma agraria, definidos por
mcorporar a ésta su trabajo personal" y "elevar el nivel de vida de la el Art. 1 de la Ley 135 de 1961.
pobl~~ión campesina~ co~o consecuencia de las medidas ya indicadas y
tambien por la coordmacwn y fomento de los servicios relacionados con . 4. Los re~gu~rdos de in~iígenas, regulados por la Ley 89 de 1890,
la asistencia técnica, el crédito agrícola, la vivienda, la organización de los tienen por fmahdad esencial proteger y recuperar sus propiedades
mercados, la salud y la seguridad social, el almacenamiento y conserva- vernáculas. Su Administración corresponde a los cabildos de las parciali-
ción de los productos y el fomento de las cooperativas''. La ley de reforma dades de indígenas, los cuales tienen, entre otras facultades la de "dis-
agraria, por lo mismo, se propone favorecer a todos los trabajadores tr~bu~r equitativa y prudencialmente, con aprobación del 'Alcalde del
agrícolas, dotándolos de tierras necesarias para sus explotaciones, de los Distnto, para el efecto de elaborar entre los miembros de la comunidad las
recursos técnicos y de las condiciones de vivienda y de salud necesarias porciones ~e resguardos que se mantengan en común, procurando sobre
para lograr así mejorar su nivel de vida. Estos fines de la Ley 135 de 1961 t<:do que nmguno .de los partícipes, casados o mayores de diez y ocho
q?e, s~gún el Ar~. 1, in fine, deben servir "de guía para la reglamenta- anos, quede exclmdo del goce de alguna porción del mismo resguardo''
(~rt .. 7, _Or~. 4, de la Ley 89 de 1890), como también la de "impedir que
cwn, mterpretación y ejecución" de sus disposiciones, comprenden a
toda la población campesina colombiana, incluida la indígena, sin ninguna mngun mdigena venda, arriende o hipoteque porción alguna del resguar-
excepcwn. do, aunque sea a pretexto de vender las mejoras, que siempre se conside-
rarán accesorias a dicho terreno" (Art. 7, Ord. 7, ibídem), sin perjuicio de
2. El Art. 30 de la Ley 135 de 1961 determina las funciones del Instituto que el resguardo pueda ser dividido entre sus miembros conforme a lo
Colombiano de Reforma Agraria, entre las cuales se cuentan: realizar dispuesto por la misma ley (Arts. 14 a 22 ibídem).
estudios de las diferentes zonas del país · ·a fin de obtener todas las infor-
maciones nece~arias para orientar su desarrollo económico, especialmente S~ trata, por consiguiente, de una ley protectora de los indígenas,
en lo 9ue concie:ne a la tenencia y explotación de las tierras ... '', hacer semeJante a las muchas que se expidieron en la época colonial que, por
dotaciones de tierras en las colonizaciones, promover la formación de ser expedida por motivos de interés público o social, es de orden público.
u~idades de acción r~:~ral y, "en general, desarrollar las actividades que De donde se deduce que los cabildos son también entidades públicas, de
carácter especial, encargadas de proteger a los indígenas conforme a las
t. directamente se relaciOnen con los fines enunciados en el artículo primero
de la presente ley''. De manera que incumbe al Instituto Colombiano de la prescripciones de la Ley 89 de 1890.
Reform~ Agraria, como función esencial, dotar de tierra a la población
campesma y favorecer su adelanto social y económico. Con esta finalidad 5. Además, según el Art. 14 del Convenio Internacional del trabajo,
le ~orresponde adJ.?inistrar, según el Art. 3, letra b), de la Ley 135 de sobre ·'protección e integración de las poblaciones indígenas y tribales en
1961, el Fondo Social Agrario que está constituido de acuerdo con el Art los países independientes'', ratificado por Colombia por la Ley 31 de
14 ibídem, entre otros bienes, ·'por las propiedades que el Institut~ 1967", los programas agrarios nacionales deberán garantizar a las pobla-
adquiera a cualquier título''. ciones en cuestión condiciones equivalentes a las que disfruten otros
sectores de la colectividad nacional'', entre las cuales se cuenta ''la asig-
_3. Según el Art. 16 de la misma ley, el Instituto Colombiano de la nación de tierras adicionales a dichas poblaciones cuando las tierras de
Reforma Agraria puede ceder, con el voto favorable del Ministro de Agri- que dispongan sean insuficientes para garantizarles los elementos de una
cultura, las propiedades que adquiera y el producto de los recargos y tasas existencia normal o para hacer frente a su posible crecimiento numérico''.
que le as_igna la l~y (Art. 3 números 4, 5 y 8, de la ley 135 de 1961), a las Lo que significa que el Estado, por medio del Instituto Colombiano de
corporacwn~s regionales de ~es~rrollo, como también asignarles fondos y
Reforma Agraria, no solo puede sino que debe extender sus programas
bonos agranos para el cumplimiento de las funciones que les delegue. El de reforma agraria a la población indígena del país, en idénticas condicío-

276 277
nes a las que ofrezca a otros sectores campesinos, entre otras medidas,
con Ja asignación de tierras adicionales necesarias para su subsistencia
normal o para satisfacer Jos requerimientos debidos al aumento de su
población.

¡
Transcr1base al señor Ministro de Agricultura en cópia auténtica.

Presidente de la Sala,

JAIME BETANCUR CUARTAS IV.2. CONTROL SOCIAL


OSVALDO ABELLO NOGUERA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
SALA DE CASACION PENAL
HUMBERTO MORA OSEJO

JAIME PAREDESTAMAYO MAGISTRADO PONENTE: DOCTOR JOSE MARIA


VEL ASCO GUERRERO
Secretaria,
Bogotá, 14 de mayo de 1960.
CLARA STELLA RAMOS S.
V - CONSIDERACIONES DE LA CORTE

Reputados tratadistas colombianos comparten igualmente este. criterio


y afirman que los artículos 4 y 432 del Código Penal vigente son suficiente-
mente claros, terminantes, y anulan la anterior doctrina sobre la aplica-
ción especial de las leyes de 1890 y 1892, amén de que existen otras razo-
nes de índole antropológica y social que impiden la prosecución de las
prácticas de los Misioneros, cuyo criterio de paternalismo se opone al
rendimiento de la personalidad en los campos del trabajo material y de la
1
llamada ''cultura espiritual'', puesto que si con el régimen de excepción
se pretende respetar la costumbre de los aborígenes, debe darse autori- 1
dad al jefe de la tribu para castigar.

(. . . ) ·'Tampoco existe la posibilidad de que el indígena ostente el '1


sentido del bien y del mal. Su concepto sobre el particular es grosero y se
confunde con lo agradable o perjudicial. Su conocimiento del ideal y de lo
moral, estimulados por la recompensa o por el temor del castigo, no
forman parte de su conducta" (H. Wermer, Sicología Evolutiva).

Existencialmente, su tiempo no coincide con el mundo civilizado del


cual es cronológicamente contemporáneo. Coexiste con él en tiempos
diferentes, a la manera como, paradójicamente, pudieran coincidir dos
esferas en periferia y volumen, pero con centro diferente ...

(... ) El Código Penal vigente, no tiene categorías jurídicas ni mentales


para confrontar la situación de los salvajes. Las tiene sí para las gentes
civilizadas normales. Y para los anormales y para los menores que delin-
quen, a quienes se consideró originariamente como peligrosos por el
hecho de ser menores delincuentes. No obstante, esta situación fue
corregida posteriormente por la Ley 83 de 1946 y concordantes sobre la
materia.

278 279

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