Bosques, Bases para una Nueva Política

IMPORTANCIA DE LOS BOSQUES EN EL

TRATADO DE CAMBIO CLlMATICO y EL EFECTO INVERNADERO

Dra. Patricia Iturregui

Los bosques cumplen una serie de serviqiQ§ ambientales entre las que podemos destacar la
protección de ecosistemas, la protección de la diyªrsidad biológica (fauna y flora) y, especialmente, la
absorción de dióxido de carbono, el gas de efeotg invernadero más importante. Actualmente, esta
función ambiental de los bosques, ligada al efectg invernadero, ha permitido a Costa Rica negociar con
Noruega y venderle la captura de carbono de parte ('le sus bosques por 10 millones de dólares. Esta
función ambiental también ha dado lugar, dentrg PElI tratado de Cambio Climático, a una fase piloto
denominada Actividades de Implementación Conjl,mtª el1 la que han intervenido diversos parses para.
medir con mayor precisión esta "captura" de carbQf1Q !;le los bosques con miras a que esta absorción
pueda ser posteriormente comercializada en el ámbito internacional. Para poder elaborar una estrategia
de mediano y largo plazo en política de bosques, deberfil considerarse el avance de las negociacione$
de esta Convención. En particular si los llamados sumid€lros (bosques) serán considerados para reducir
las emisiones de gases de efecto invernadero.

El Efecto Invernadero

El clima de la tierra está determinado principalmente por la presencia en la atmósfera de IQ::;

denominados gases de efecto invernadero (GEl). Se trata de gases que absorben y reemiten radiaCiones
infrarrojas o de onda larga. Si esto no fuera así, la tierra sería 20 grados más fría . El efecto invernadero
es , pues, un fenómeno perfectamente natural. Los ga$e:;; de efecto invernadero más importantes son el
vapor de agua (H 20); el dióxido de carbono (CQ2) que es producido por la quema de combustibles fósiles
(centrales de energía eléctrica a carbón o dies~1 y transporte) y deforestación ( agricultura migratQria
principalmente) entre otras; el metano (CHJ Pfeel~cido por rellenos sanitarios, aguas servidas, cultivoq
de arroz y excrementos animales; el óxido nitrQsp (NP) producido por abonos nitrogenados y quema de,
biomasa; el ozono troposférico (03) producido ¡;lor ªI transporte; los clorofluorocarbonos (CFCs) qlN ~e
encuentran en los equipos de refrigeración, extingyielmes de incendios, aerosoles y empaques de alimentos
con polímeros, líquidos limpiadores de equipos el¡:lQtrónicos, entre otros. Los CFCs constituyen el 0nico
tipo de gas de efecto invernadero creado por el hombr§ y que es objeto de otros tratados internacioflale::¡
como son la Convención de Viena (1985) y el PrqtoQ(;lIO de Montreal (1987) sobre las sustancia~ qu§
agotan la capa de ozono. Cabe mencionar que d~ estos gases el más influyente en el calentamiento de
la tierra en las condiciones actuales es el diá,xi¡:tp de carbono .

El problema radica en que el hom~re ha aumentado significativamente la emisión de gases dE;)

efecto invernadero poniendo en peligro el equilibrio del clirna de la tierra. El Panellntergubernamental
sobre el Cambio Climático (IPCC) ha declarado que si no ha~f un control de estas emisiones antropógenas
es posible que la temperatura se pueda elevar de 1 a 3.5 grados en el próximo siglo, lo cual ocasionaría

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