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texto expositivo
El conjunto coherente de enunciados con intención comunicativa se conoce como texto.
El adjetivo expositivo, por su parte, hace referencia a aquel o aquello que expone (es decir,
que pone algo de manifiesto o que lo da a conocer).
Estos dos conceptos nos permiten acercarnos a la definición de texto expositivo. Se trata de
los textos cuyo propósito es transmitir información y difundir conocimientos acerca de un
determinado tema. Se caracterizan, por lo tanto, por la exhibición de datos objetivos junto a
sus correspondientes explicaciones.
La estructura más habitual del texto expositivo incluye un concepto central junto a un
amplio abanico de información complementaria. Asimismo, se suele estructurar a través de
una presentación, un desarrollo y una conclusión. Al finalizar su lectura, se espera que el
lector haya adquirido nuevos conocimientos gracias a la efectiva presentación de los temas
por parte del autor.
Cuando se trata de temas muy extensos, muy amplios, los textos se suelen dividir en dos o
más partes, tal y como sucede con los textos científicos y ciertos artículos periodísticos
presentados en forma episódica.
Como en toda obra escrita de carácter informativo, un texto expositivo exige a su autor un
conocimiento de los temas que desarrolla a través del mismo. Quien acude a su lectura tiene
una necesidad que satisfacer, que bien puede girar en torno al aprendizaje de una materia o
a la investigación acerca de una cuestión muy precisa; no va en busca de una visión artística
ni de más interrogantes de los que acarrea antes de comenzar.
Lee todo en: Definición de texto expositivo - Qué es, Significado y Concepto
http://definicion.de/texto-expositivo/#ixzz3TjMeIKnn
Los textos expositivos son aquellos que establecen un tema o argumento que proporciona
un discurso oral, ya que este contiene argumentos sociales de uno o varios temas; es decir,
puedes escoger un tema o varios para salir a hacer un discurso o exposición.
Por otro lado, los especializados que no informan sino que pretenden hacer comprender
aspectos científicos, por lo que exigen un receptor más especializado, con un mayor grado
de conocimiento del tema. Presentan, por tanto, una mayor complejidad sintáctica y léxica.
Pertenecen a este los textos científicos, jurídicos y humanísticos.
Recursos explicativos
Para lograr una buena explicación, hay una serie de recursos específicos. Estos son:
El instructivo: es un texto expositivo narrativo no literario que informa sobre cómo se debe
realizar un proceso. Si quieres escribir uno, debes tomar en cuenta lo siguiente:
Enumeración de materiales: aquí debes mencionar los materiales, ingredientes o condiciones para
el proceso. (Ej: galletas de vino - coco rallado - manjar -chocolate en polvo o mostasillas de
colores)
Pasos a seguir: aquí debes mencionar las actividades que debe seguir el lector (Ej:Primero muele
bien las galletas en un recipiente...), debe presentar secuencias temporales(primero, después, etc)
La reseña: es un texto expositivo narrativo no literarioque informa resumidamente el argumento
de un libro, de una película, obra teatral o de otro tema similar. Si quieres escribir uno, debes
tomar en cuenta lo siguiente:
Datos básicos del objeto reseñado: debes mencionar algunas características del objeto, obra,
pelicula que estes describiendo (Director, guión, elenco, etc)
Síntesis del argumento de la historia: aquí debes resumir la obra, película, libro,etc.
-Introducción
-Desarrollo
-Conclusión
Consejos
2:
Oración interrogativa
Una oración interrogativa es una oración empleada para pedir información y en ocasiones
para expresar mandatos o sugerencias pragmáticamente suavizados. Las interrogativas
pueden clasificarse de acuerdo a varios criterios binarios: parciales/totales,
directas/indirectas.
Las interrogativas directas parciales son las más complejas de todas y en muchas lenguas
no pueden ser divididas en dos partes disjuntas sujeto - gramática debido a diversos
movimientos sintácticos que hacen que frecuentemente haya inversión de orden entre sujeto
y verbo y otras modificaciones adicionales. La gramática generativa analiza las
interrogativas directas como sintagmas complementantes dentro de los cuales se han
practicado algunos desplazamientos de constituyentes sintácticos.
Clasificación
Parciales y totales
Directas e indirectas
Una interrogativa directa es una oración en que la oración principal es una oración
interrogativa. En muchas lenguas, en una oración directa usualmente en primer lugar
aparecen los constituyentes que se refieren a aquello por lo que se está preguntando,
también en muchas lenguas el verbo suele aparecer adelantado al sujeto explícito cuando lo
hay.
Una interrogativa indirecta es una oración compuesta en la que una de las oraciones
subordinadas es interrogativa, sin serlo la oración principal.
Estructura sintáctica
Lenguas con movimiento Qu-
(1b) ¿De quién te parece a ti que están hablando esos dos tipos?
Para verlo se explicitan los diagramas sintácticos propuestos para las oraciones (2a) y (2b):
En una oración interrogativa parcial se requiere que el constituyente sintáctico por el que se
pregunta ascienda a la posición de especificador del sintagma complementante para cotejar
los rasgos +qu del interrogativo (movimiento Qu-). Esos dos movimientos: verbo principal
al núcleo complementante y elemento interrogativo al especificador del complementante
explican los cambios de órdenes de la estructura superficial sintáctica. Por ejemplo se se
considera (2c):
Algunas lenguas como el chino formas las oraciones interrogativas sin desplazar el
elemento por el que se pregunta a la posición inicial. En ellas las preguntas tienen el mismo
orden sintáctico que las enunciativas con la única diferencia de que en ellas aparece un
interrogativo en la posición del constituyente por el cual se pregunta. En estas lenguas las
preguntas se formulan con la siguiente estructura:
Entonación
En muchas lenguas las oraciones interrogativas se marcan no sólo mediante procedimientos
de movimiento sintáctico sino que tienen una entonación específica. Marginalmente
algunas preguntas sólo usan entonación para marcar el rasgo interrogativo, especialmente si
son breves:
Química:
Equivalente
Este artículo trata sobre química. Para otros usos de este término, véase Equivalencia.
El peso equivalente tiene dimensiones y unidades de masa, a diferencia del peso atómico,
que es una magnitud adimensional. Los pesos equivalentes fueron determinados
originalmente de forma experimental, pero (tal como se utilizan ahora) se obtienen de las
masas molares.
Historia
Las primeras tablas de pesos equivalentes fueron publicadas para los ácidos y las bases por
Carl Friedrich Wenzel en 1777. Un conjunto más amplio de tablas fue preparada,
posiblemente de forma independiente, por Jeremias Benjamin Richter, a partir de 1792. Sin
embargo, ni Wenzel ni Richter tenían un punto de referencia único para sus tablas, por lo
que tuvieron que publicar tablas separadas para cada par ácido-base.2
La primera tabla de pesos atómicos de John Dalton (1808) proponía un punto de referencia,
al menos para los elementos: tomar el peso equivalente del hidrógeno como una unidad de
masa. Sin embargo, la teoría atómica de Dalton estaba lejos de ser universalmente aceptada
en el siglo XIX. Uno de los mayores problemas era la reacción del hidrógeno con el
oxígeno para producir agua. Un gramo de hidrógeno reacciona con ocho gramos de oxígeno
para producir nueve gramos de agua, por lo que el peso equivalente del oxígeno se define
como ocho gramos. Sin embargo, la expresión de la reacción en términos de volúmenes de
gas siguiendo la segunda ley de Gay-Lussac, dos volúmenes de hidrógeno reaccionan con
un volumen de oxígeno para producir dos volúmenes de agua, lo que sugiere que el peso
atómico del oxígeno debe ser de dieciséis.2 El trabajo de Charles Frédéric Gerhardt (1816–
56), Henri Victor Regnault (1810–78) y Stanislao Cannizzaro (1826–1910) contribuyó a
racionalizar esta y muchas paradojas similares,2 pero el problema era aún objeto de debate
en el Congreso de Karlsruhe (1860).3
No obstante, muchos químicos encontraron que los pesos equivalentes eran una
herramienta útil, incluso si no se adherían a la teoría atómica. Los pesos equivalentes
fueron una útil generalización de la ley de las proporciones definidas (1794) de Joseph-
Louis Proust que permitió a la química convertirse en una ciencia cuantitativa. El químico
francés Jean-Baptiste Dumas (1800-84) se convirtió en uno de los más influyentes
oponentes de la teoría atómica, después de haberla abrazado al principio de su carrera, pero
fue un firme defensor de los pesos equivalentes.
En la medida en que las tablas atómicas han sido preparadas en la parte después de las leyes
de Wenzel y Richter, en parte por simples especulaciones, han dejado un montón de dudas
en las mejores mentes. Se ha tratado de evitar este problema tratando de deducir los pesos
atómicos de la densidad de los elementos en estado de vapor, de su calor específico, de su
forma cristalina. Pero no hay que olvidar que el valor de las cifras deducidas de estas
propiedades no son mínimamente absolutas... En resumen, qué se ha quedado detrás de esta
ambiciosa excursión que nos hemos permitido en el reino de los átomos?. Nada, nada
necesario al menos. Lo que hemos dejado es la convicción de que la química se perdió allí,
como siempre ocurre cuando se abandona la experiencia, se intenta avanzar sin una guía
por las sombras. Con la experiencia como guía, encuentras los equivalentes de Wenzel, los
equivalentes de Mitscherlich, que no son más que grupos moleculares. Si yo tuviera el
poder, quisiera borrar la palabra 'átomo' de la ciencia, convencido de que sobrepasa la
evidencia experimental, y, en química, nunca se debe sobrepasar la evidencia experimental
Los pesos equivalentes no estuvieron sin sus propios problemas. Para empezar, la escala
basada en el hidrógeno no es particularmente práctico, ya que la mayoría de los elementos
no reaccionan directamente con el hidrógeno para formar compuestos simples. Sin
embargo, un gramo de hidrógeno reacciona con 8 gramos de oxígeno para dar agua o con
35,5 gramos de cloro para dar cloruro de hidrógeno: por lo tanto, 8 gramos de oxígeno y
35,5 gramos de cloro se pueden tomar como equivalentea un gramo de hidrógeno para la
medición de pesos equivalentes. Este sistema puede ampliarse a través de diferentes ácidos
y bases.2
Mucho más serio fue el problema de los elementos que forman más de un óxido o series de
sales, que tienen (en la terminología de hoy en día) diferentes estados de oxidación. El
cobre va a reaccionar con el oxígeno para formar cualquiera de ambos compuestos: óxido
cuproso (óxido de cobre (I) rojo ladrillo, con 63,5 g de cobre por cada 8 g de oxígeno) o
óxido cúprico (óxido de cobre (II) negro, con 32,7 g de cobre por cada 8 g de oxígeno), y
así tiene dos pesos equivalentes. Los fanáticos de los pesos atómicos podrían volver a la ley
de Dulong-Petit (1819), que relaciona el peso atómico de un elemento sólido con su calor
específico, pero los partidarios de los pesos equivalentes tuvieron que aceptar que algunos
elementos tenían varios "equivalentes".2
El golpe de gracia para el empleo de los pesos equivalentes para los elementos fue la
presentación por Dmitri Mendeléyev de su tabla periódica en 1869, en la cual relacionaba
las propiedades químicas de los elementos con el orden aproximado de sus pesos atómicos.
Sin embargo, los pesos equivalentes se siguieron utilizando para muchos compuestos
durante otros cien años, sobre todo en química analítica. Los pesos equivalentes de los
reactivos comunes podrían ser tabulados, simplificando los cálculos analíticos, en los días
anteriores a la disponibilidad generalizada de las calculadoras electrónicas: estas tablas eran
comunes en los libros de texto de química analítica. o en matemáticas significa que hay 2
fracciones con diferentes cantidades pero valen lo mismo
El ácido sulfúrico tiene una masa molar de 98,078(5) g.mol-1, y por lo general
suministra dos moles de iones de hidrógeno por mol de ácido sulfúrico, H 2SO4 -->
2H 1+ + SO4 2- por lo que su peso equivalente para este caso es 98,078(5) g.mol-1/2
eq.mol-1 = 49,039(3) g.eq-1. Sin embargo, es posible que este mismo ácido reaccione
formando un sulfato ácido H 2SO4 --> H 1+ + HSO4 1-, en cuyo caso el número de
moles de iones hidronio generados por cada mol de ácido sulfúrico es sólo uno, por
lo tanto su peso equivalente será 98,078(5) g.mol-1/1 eq.mol-1 = 98,078(5) g.eq-1.
El permanganato de potasio tiene una masa molar de 158,034(1) g.mol-1, y en medio
ácido reacciona con cinco moles de electrones por mol de permanganato de potasio,
así que su peso equivalente es 158,034(1) g.mol-1 /5 eq.mol-1 = 31,6068(2) g.eq-1.
sin embargo, en medio muy alcalino puede generar el ión MnO41- en cuyo caso sólo
reacciona con un mol de electrones y por tanto su peso equivalente es 158,034(1)
g.mol-1 /1 eq.mol-1 = 158,034(1) g.eq-1 y en medio neutro o levemente alcalino
puede producir MnO2, en cuyo caso reacciona con 3 moles de electrones y su peso
equivalente es 158,034(1) g.mol-1 /3 eq.mol-1 = 56,2780(3) g.eq-1
Históricamente, el peso equivalente de los elementos fue determinado a menudo estudiando
sus reacciones con el oxígeno. Por ejemplo, 50 g de cinc reaccionarán con oxígeno para
producir 62,24 g de óxido de cinc, lo que implica que el cinc ha reaccionado con 12,24 g de
oxígeno (según la Ley de conservación de la masa): el peso equivalente del cinc es la masa
que reacciona con 8 gramos de oxígeno, por tanto 50 g × 8 g/12,24 g = 32,7 g.
Cuando se eligen patrones primarios en química analítica, son más deseables generalmente
los compuestos con mayor peso equivalente porque se reducen los errores de pesada. Un
ejemplo es la estandarización una solución de hidróxido de sodio que se ha preparado a
aproximadamente 0.1 mol.dm-3. Es necesario calcular la masa de un ácido sólido que pueda
reaccionar con cerca de 20 cm3 de esta solución (para una valoración utilizando una bureta
de 25 cm3): los ácidos sólidos adecuados incluyen el ácido oxálico dihidratado, el ftalato
ácido de potasio y el hidrogenoiodato de potasio. Los pesos equivalentes de los tres ácidos
son respectivamente 63.04 g, 204.23 g y 389.92 g, y las masas requeridas para la
estandarización son 126.1 mg, 408.5 mg y 779.8 mg respectivamente. Dado que el error en
la medida de la masa en una balanza analítica estándar es ± 0.1 mg, el error relativo en la
medida de la masa de ácido oxálico dihidratado puede estar alrededor de una parte por mil,
similar al error experimental en la medida del volumen en la valoración.4 Sin embargo, el
error en la medida de la masa del hidrogenoiodato de potasio podría ser cinco veces menor,
porque su peso equivalente es cinco veces más grande: así el error en la medida de la masa
es insignificante en comparación con el error en el volumen medido durante la valoración
(ver el ejemplo, más adelante).
Por ejemplo, se supone que 22.45 ± 0.03 cm3 de una solución de hidróxido de sodio
reacciona con 781.4 ± 0.1 mg de hidrogenoiodato de potasio. Como el peso equivalente del
hidrogenoiodato de potasio es 389.92 g, la masa medida es 2,004 miliequivalentes. La
concentración de la solución de hidróxido de sodio por lo tanto es 2.004 meq/0.02245 L =
89.3 meq/L. En química analítica, una solución de una sustancia que contiene un
equivalente por litro se conoce como una solución normal (abreviado N), por tanto la
solución de hidróxido de sodio sería 0.0893 N.1 El error relativo (ur) en la medida de la
concentración puede estimarse asumiendo una distribución gaussiana de los errores:
Esta disolución de hidróxido de sodio puede utilizarse para medir el peso equivalente de un
ácido desconocido. Por ejemplo, si se necesitan 13.20 ± 0.03 cm3para neutralizar 61.3 ± 0.1
mg de un ácido desconocido, el peso equivalente del ácido es:
Porque cada mol de ácido puede liberar solamente un número entero de moles de iones
hidrógeno, la masa molar del ácido desconocido debe ser un múltiplo entero de 52.0 ± 0.1
g.
El término "peso equivalente " tiene un sentido distinto en análisis gravimétrico: Es la masa
de precipitado que corresponde a un gramo de analito (la especie de interés). Las diferentes
definiciones vinieron de la práctica de citar resultados gravimétricos como una fracción en
masa del analito, a menudo expresado como un porcentaje. Un término relacionado es el
factor de equivalencia, un gramo dividido por el peso equivalente, que es el factor numérico
por el que hay que multiplicar la masa de precipitado para obtener la masa de analito.
El análisis gravimétrico es uno de los más precisos entre los métodos comunes de análisis
químico, pero exige mucho tiempo y mucho trabajo. Ha sido ampliamente superado por
otras técnicas como la espectroscopia de absorción atómica, en la que la masa de analito se
lee a partir de una curva de calibración.
Conversión de unidades
La conversión de unidades es la transformación del valor numérico de una magnitud
física, expresado en una cierta unidad de medida, en otro valor numérico equivalente y
expresado en otra unidad de medida de la misma naturaleza.
Este proceso suele realizarse con el uso de los factores de conversión y las tablas de
conversión de unidades.
Frecuentemente basta multiplicar por una fracción (factor de una conversión) y el resultado
es otra medida equivalente, en la que han cambiado las unidades. Cuando el cambio de
unidades implica la transformación de varias unidades, se pueden utilizar varios factores de
conversión uno tras otro, de forma que el resultado final será la medida equivalente en las
unidades que buscamos.
Por ejemplo, para pasar 8 metros a yardas, sabiendo que una yarda (yd) equivale a 0,914 m,
se dividirá 8 por 0,914; lo que dará por resultado 8,75 yardas.
Matemáticas:
Parábola (matemática)
Para otros usos de este término, véase parábola.
Secciones cónicas.
La trayectoria de una pelota que rebota es una sucesión de parábolas.
La parábola aparece en muchas ramas de las ciencias aplicadas debido a que su forma se
corresponde con las gráficas de las ecuaciones cuadráticas. Por ejemplo, son parábolas las
trayectorias ideales de los cuerpos que se mueven bajo la influencia exclusiva de la
gravedad (ver movimiento parabólico y trayectoria balística).
Historia
La tradición indica que las secciones cónicas fueron descubiertas por Menecmo en su
estudio del problema de la duplicación del cubo,1 donde demuestra la existencia de una
solución mediante el corte de una parábola con una hipérbola, lo cual es confirmado
posteriormente por Proclo y Eratóstenes.2
Sin embargo, el primero en usar el término parábola fue Apolonio de Perge en su tratado
Cónicas,3 considerada obra cumbre sobre el tema de las matemáticas griegas, y donde se
desarrolla el estudio de las tangentes a secciones cónicas.
Si un cono es cortado por un plano a través de su eje, y también es cortado por otro plano
que corte la base del cono en una línea recta perpendicular a la base del triángulo axial, y si
adicionalmente el diámetro de la sección es paralelo a un lado del triángulo axial, entonces
cualquier línea recta que se dibuje desde la sección de un cono a su diámetro paralelo a la
sección común del plano cortante y una de las bases del cono, será igual en cuadrado al
rectángulo contenido por la línea recta cortada por ella en el diámetro que inicia del vértice
de la sección y por otra línea recta que está en razón a la línea recta entre el ángulo del cono
y el vértice de la sección que el cuadrado en la base del triángulo axial tiene al rectángulo
contenido por los dos lados restantes del triángulo. Y tal sección será llamada una
parábola
Apolonio de Perge
Es Apolonio quien menciona que un espejo parabólico refleja de forma paralela los rayos
emitidos desde su foco, propiedad usada hoy en día en las antenas satelitales. La parábola
también fue estudiada por Arquímedes, nuevamente en la búsqueda de una solución para un
problema famoso: la cuadratura del círculo, dando como resultado el libro Sobre la
cuadratura de la parábola.
Propiedades geométricas
Diagrama que muestra la propiedad reflexiva, la directriz (verde), y las líneas que unen el foco y la
directriz de la parábola (azul)
Aunque la identificación de parábola con la intersección entre un cono recto y un plano que
forme un ángulo con el eje de revolución del cono igual al que presenta su generatriz, es
exacta, es común definirla también como un lugar geométrico:
De esta forma, una vez fija una recta y un punto se puede construir una parábola que los
tenga por foco y directriz de acuerdo a la siguiente construcción. Sea T un punto cualquiera
de la recta directriz. Se une con el foco dado F y a continuación se traza la mediatriz (o
perpendicular por el punto medio) del segmento TF. La intersección de la mediatriz con la
perpendicular por T a la directriz da como resultado un punto P que pertenece a la parábola.
Repitiendo el proceso para diferentes puntos T se puede aproximar tantos puntos de la
parábola como sea necesario.
De la construcción anterior se puede probar que la parábola es simétrica respecto a la línea
perpendicular a la directriz y que pasa por el foco. Al punto de intersección de la parábola
con tal línea (conocida como eje de la parábola) se le conoce como vértice de la parábola y
es el punto cuya distancia a la directriz es mínima. La distancia entre el vértice y el foco se
conoce como distancia focal o radio focal.
Lado recto
Al segmento de recta comprendido por la parábola, que pasa por el foco y es paralelo a la
directriz, se le conoce como lado recto.
La longitud del lado recto es siempre 4 veces la distancia focal.
Siendo D, E los extremos del lado recto y T, U las respectivas proyecciones sobre la
directriz, denotando por W la proyección del foco F sobre la directriz, se observa que
FEUW y DFWT son cuadrados, y sus lados miden FW=2FV. Por tanto el segmento DE es
igual a 4 veces el segmento FV (la distancia focal).
Las tangentes a la parábola que pasan por los extremos del lado recto forman ángulos de
45° con el mismo, consecuencia de que FEUW y DFWT sean cuadrados, junto con la
construcción mencionada en la sección anterior. Además, tales tangentes se cortan en la
directriz de forma perpendicular, precisamente en el punto de proyección W del foco,
propiedades que pueden ser aprovechadas para construir una aproximación geométrica del
foco y la directriz cuando éstos son desconocidos.
Todas las parábolas son semejantes, es únicamente la escala la que crea la apariencia de que
tienen formas diferentes.
Dado que la parábola es una sección cónica, también puede describirse como la única
sección cónica que tiene excentricidad . La unicidad se refiere a que todas las
parábolas son semejantes, es decir, tienen la misma forma, salvo su escala.
Un argumento geométrico informal es que al ser la directriz una recta infinita, al tomar
cualquier punto y efectuar la construcción descrita arriba, se obtiene siempre la misma
curva, salvo su escala, que depende de la distancia del punto a la directriz.
Tangentes a la parábola
Uso de las propiedades de las tangentes para construir una parábola mediante dobleces en papel.
Sea Q otro punto de la parábola y sea U su proyección en la directriz. Puesto que FQ=QU y
QU<QT, entonces FQ<QT. Dado que esto es cierto para cualquier otro punto de la
parábola, se concluye que toda la parábola está de un mismo lado de MP, y como la
desigualdad es estricta, no hay otro punto de la parábola que toque a la recta MP, esto
quiere decir que MP es la tangente de la parábola en P.
Aplicaciones prácticas
Una consecuencia de gran importancia es que la tangente refleja los rayos paralelos al eje
de la parábola en dirección al foco. Las aplicaciones prácticas son muchas: las antenas
satelitales y radiotelescopios aprovechan el principio concentrando señales recibidas desde
un emisor lejano en un receptor colocado en la posición del foco.
Análogamente, una fuente emisora situada en el foco, enviará un haz de rayos paralelos al
eje: diversas lámparas y faros tienen espejos con superficies parabólicas reflectantes para
poder enviar haces de luz paralelos emanados de una fuente en posición focal. Los rayos
convergen o divergen si el emisor se desplaza de la posición focal.
Los faros de los automóviles envían haces de luz paralelos, si la bombilla se sitúa en
el foco de una superficie parabólica.
Ecuaciones de la parábola
Una parábola cuyo vértice está en el origen y su eje coincide con el eje de las ordenadas,
tiene una ecuación de la forma y=ax2 donde el parámetro a especifica la escala de la
parábola, incorrectamente descrita como la forma de la parábola, ya que como se dijo antes,
todas las parábolas tienen la misma forma. Cuando el parámetro es positivo, la parábola se
abre «hacia arriba» y cuando es negativo se abre «hacia abajo».
Al ser PM paralela a AC, los triángulos HVP, HKA y BCA son semejantes y así:
Pueden haber muchas parábolas que tengan un mismo vértice (variando el parámetro a) en
la primera ecuación. Sin embargo, dados dos puntos fijos, existe sólo una parábola que los
tiene por vértice y foco ya que la directriz queda automáticamente fija como la
perpendicular a la línea que une el foco con el vértice y a esa misma distancia del último.
De forma alterna:
La ecuación de una parábola con vértice en (0,0) y foco en (0,p) es
Finalmente, las ecuaciones cuando el vértice no está en el centro se obtienen mediante una
traslación. En el caso común de la parábola vertical hacia arriba se tiene
Hasta ahora se han descrito solo parábolas con sus ejes paralelos a alguno de los ejes de
coordenadas. De esta forma las fórmulas son funciones de x ó de y. Pero una parábola
puede tener su eje inclinado con respecto a un par de ejes de coordenadas ortogonales.
La expresión algebraica que describe una parábola que ocupe cualquier posición en
un plano es:
si y sólo si