You are on page 1of 4

Werner Herzog o el cine de las grandes pasiones

"El cine de Herzog pretende resistir los modelos aceptados del


pensar y del ver." Eric Rentschler en The films of Werner Herzog

"La palabra oscuro es temáticamente muy importante en el


Romanticismo, especialmente en Alemania, y remite a la filtración
de una identidad con la naturaleza en las partes interiores,
escondidas de la mente." Northrop Frye en The Romantic Myth: a
study of english romanticism

"En cierta forma, quiero hacer revivir la gran cultura alemana,


desgarrada por el cataclismo de la guerra... Mis personajes son
rebeldes desesperados, solitarios. Saben que su lucha está abocada
al fracaso; sin embargo, siguen tensos, heridos, cada vez más solos,
hasta la locura." Werner Herzog

Cineasta visionario que retrató como pocos en sus espléndidos films lo


imposible y los demonios nocturnos de unos personajes atípicos y presos de una
angustia casi metafísica, Werner Herzog (1942) es junto a Rainer Werner
Fassbinder no solo el otro gran genio del Nuevo Cine Alemán, sino también uno
de los nombres imprescindibles del cine europeo contemporáneo.

Tras realizar una serie de arriesgados viajes y dedicarse a los más diversos
menesteres en distintos lugares del mundo (soldador, contrabandista,
decorador de televisión...), a los veinte años decide dedicarse al cine fundando
su propia productora (Werner Herzog Filmproduktion) y rueda dos cortos
(Herakles, 1962-1965; y Spiel im sand, 1964). Será en 1967 cuando ruede su
primera película, Signos de vida (Lebenszeichen), cuyo argumento (un soldado
que se encuentra confinado junto a un grupo de compañeros en el fuerte de una
isla de Grecia enloquece cuando cree ver un millar de molinos de viento en los
campos del lugar) y condiciones de rodaje (el equipo tuvo que soportar, tal y
como les ocurre a los personajes del film, un calor abrasador), prefiguran las
constantes que marcarán la obra herzogiana: la imaginación visionaria, la
tentación del absurdo, las epopeyas-límite individuales o colectivas, las
referencias a la tradición del romanticismo alemán, y la influencia del
expresionismo.
Los personajes que transitan los films de Herzog se caracterizan por su
anormalidad: a él le interesan los seres marginales, solitarios, extraños, locos,
impedidos, grotescos, distorsionados, deformados o megalómanos cuyo destino
final es el fracaso, la autodestrucción ante la imposibilidad que supone su
desafío a la propia existencia. Tales personajes marcan dos etapas en su obra:

a) Etapa de los seres anticonvencionales, compuesta por films como También


los enanos empezaron pequeños (Auch zwerge haben klein angefangen, 1970;
una historia protagonizada por unos enanos encerrados en un correccional que
organizan una rebelión en la que caben desde la crucifixión de un mono hasta el
sacrificio de cerdos pasando por otros actos igual de descabellados), El enigma
de Kaspar Hauser (Jeder für sich und Gott gegen alle, 1974; inspirada en la
leyenda de un hombre que, después de vivir treinta y tres años encerrado en un
sótano sin contacto humano alguno, aprende en menos de cinco años a leer,
escribir poesía y tocar el piano tras aparecer un día en una plaza de Nürenberg
con un libro de plegarias y una carta dirigida al maestro de lecturas del pueblo),
Stroszek (1977, historia de un hombre que pasa de la cárcel en Alemania a la
emigración en América, lugar donde continuará recluido gracias a la falacia del
sueño americano y la progresiva pérdida de identidad que sufrirá en su
aventura), y Nosferatu (1979, prodigioso remake del clásico de Murnau que
sirvió a Herzog para dar su propia visión acerca del No muerto, cuyo decadente
y arrebatado romanticismo atrae la enfermedad y la muerte al pueblo teutón
donde se instala). A todas estas obras cabría añadir su sobrecogedor documental
sobre una mujer sorda y ciega: El país del silencio y la oscuridad (Land des
Schweigens und der Dunkelheit, 1970).

b) Etapa de los seres megalómanos representados por Klaus Kinski, el alter-ego


del autor, con títulos como Aguirre o la cólera de Dios (Aguirre, der Zorn
Gottes, 1972, con un Lope de Aguirre lunático y visionario que parte en busca
del mítico El Dorado desafiando a sus propios hombres y a la mismísima
naturaleza); Corazón de cristal (Herz aus Glass, 1976, sobre un profeta que al
intentar descubrir el imposible secreto de la elaboración del cristal-rubí conduce
a los habitantes de una aldea a la locura colectiva y al cumplimiento de unas
fatales profecías); Fitzcarraldo (1982, historia de un magnate cauchero
empeñado en montar un utópico teatro de la ópera en mitad de la selva), o
Cobra verde (1987, sobre un aventurero brasileño exiliado a África para
dedicarse al tráfico de esclavos, dominados por él con mano dura hasta que
diversas guerras civiles se interponen en sus planes).

Como síntesis de unos y otros, Werner Herzog afirmará que "las figuras de mis
películas sobrepasan sus propios límites y acaban fracasando en su desafío
descomunal contra los elementos. Con frecuencia se me califica como alguien
que sólo presenta locos o mutilados, y eso no es cierto: un Kaspar Hauser es
alguien que vive radicalmente su dignidad humana. La sociedad proba y
burguesa es la excéntrica. Yo tendría mucho cuidado al decir que la locura, la
aberración, son necesarias para alcanzar la dignidad humana. Pero entiendo que
es necesario ver en el cine la exageración de aquello que somos como hombres".

Compartiendo protagonismo con los anti-héroes herzogianos, la naturaleza, los


paisajes, constituyen un elemento imprescindible que, acompañados de las
maravillosas partituras de su músico habitual Popol Vuh, alcanzan proporciones
míticas al ser el marco propicio para la leyenda, la ensoñación, la locura, la
destrucción, la muerte, la huida hacia ninguna parte enfermiza y fatal de los
seres que los pueblan. En Herzog la naturaleza siempre se muestra tal y como
es, motivo por el cual siempre se empeñó en buscar localizaciones que
sobrepasaran la ficción para dar una sobrecogedora impresión de realidad, de
mostrar en directo las hazañas de sus anti-héroes. En este sentido, la fusión
autor-obra llega a resultar escalofriante porque, al igual que aquéllos, Werner
Herzog tuvo que luchar rodaje tras rodaje contra los obstáculos que la propia
naturaleza le brindaba: empeñado en acometer siempre lo imposible, en revivir
las empresas de sus personajes con la mayor dosis de realismo posible, nunca le
importó arriesgar su propia vida o la de cualquiera de los componentes de su
equipo. Filmar los sueños y locuras de sus personajes se convirtió para el autor
en su propia aventura, lo que le llevó a soportar inundaciones, tormentas de
arena, condiciones climatológicas penosas e, incluso, el encarcelamiento... Su
ilusión por ver realizadas sus fantasías estéticas llegó a convertirlo en un
déspota a ojos de sus colaboradores, sabedores de los peligros a los que eran
expuestos y la poca importancia que ello causaba en el director: "Mis películas
son más importantes que cualquiera de las vidas de las personas que trabajen en
ellas o se opongan durante el rodaje a ellas (...) Sé lo que es posible en el cine, lo
que es posible hacer con las imágenes: no temo a las empresas
desproporcionadas conmigo mismo, ya que puedo atreverme con ellas pues
suponen un reto para mí".

Además de las citadas, otras obras del cine de Herzog son Woyzeck (1978),
Donde sueñan las verdes hormigas (Wo die grünen Ameisen träumen, 1983), y
magníficos documentales -muy coherentes todos ellos con el espíritu de sus
películas de ficción- como El gran éxtasis del escultor Steiner (Die grosse
Ekstase des Bildschnitzers Steiner, 1974), How much wood would a woodchuck
chuck (1975-76), La Soufriere (1976), Glaube und Währung (1980) o Ballade
von kleinen Soldaten (1984).

Como punto y final, una declaración de principios de Herzog: "El cine se


desarrolla en el terreno de los sueños, de los anhelos y deseos colectivos... algo
especial que no se da en la pintura, la arquitectura o la literatura... Me inclino
hacia un cine que pueda fabricar el mundo de otra manera, que pueda
devolvernos intactos nuestros sueños, nuestros deseos".

You might also like