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Introducción

El interés por la valoración del nivel de confort térmico nació como una
consecuencia de la aparición de las técnicas de acondicionamiento de aire, cuyo fin era
justamente lograr que las personas se sintieran confortables y precisaban por tanto de
métodos que permitieran evaluar en qué medida se alcanzaban sus objetivos; el más
conocido de los índices de evaluación del confort fue la "temperatura efectiva",
desarrollado por Yaglou y colaboradores en 1923. Desde entonces han aparecido muchos
otros índices, pero la mayoría de ellos no engloban variables que en un ambiente
industrial son de gran importancia, como la presencia de calor radiante, la intensidad de
trabajo, etc., por lo que su utilidad en el campo laboral es muy limitada.

En este panorama la aparición en 1970 de la obra "Thermal Confort" de P.O.


Fanger representó un avance sustancial, al incluir en el método de valoración propuesto la
práctica totalidad de las variables que influyen en los intercambios térmicos hombre-medio
ambiente y que, por tanto, contribuyen a la sensación de confort; estas variables son:
nivel de actividad, características del vestido, temperatura seca, humedad relativa,
temperatura radiante media y velocidad del aire.

El concepto de ecosistema es especialmente interesante para comprender el


funcionamiento de la naturaleza y multitud de cuestiones ambientales que se tratarán con
detalle en el próximo trabajo.
Hay que insistir en que la vida humana se desarrolla en estrecha relación con la
naturaleza y que su funcionamiento nos afecta totalmente. Es un error considerar que
nuestros avances tecnológicos: autos, grandes casas, industria, etc. nos permiten vivir al
margen del resto de la biosfera y el estudio de los ecosistemas, de su estructura y de su
funcionamiento, nos demuestra la profundidad de estas relaciones.
En el siguiente trabajo se desglosaran estos dos temas de una manera breve, pero
completa para la explicación de ambos temas.
El confort térmico

Es una sensación neutra de la persona respecto a un ambiente térmico


determinado. Según la norma ISO 7730 el confort térmico “es una condición mental en la
que se expresa la satisfacción con el ambiente térmico”.

El confort térmico depende de varios parámetros globales externos, como la


temperatura del aire, la velocidad del mismo y la humedad relativa, y otros específicos
internos como la actividad física desarrollada, la cantidad de ropa o el metabolismo de
cada individuo.

Para llegar a la sensación de confort, el balance global de pérdidas y ganancias de


calor debe ser nulo, conservando de esta forma nuestra temperatura normal, es decir
cuando se alcanza el equilibrio térmico.

A continuación exponemos algunos intervalos de valor de los parámetros de


confort externos que interactúan entre sí para la consecución del confort térmico y que se
encuentran representados en las Cartas Bioclimáticas:

 Temperatura del aire ambiente: entre 18 y 26 ºC

 Temperatura radiante media superficies del local: entre 18 y 26 ºC

 Velocidad del aire: entre 0 y 2 m/s

 Humedad relativa: entre el 40 y el 65 %

Condiciones atmosféricas que afectan al ser humano

 Temperatura: el adecuado control de la temperatura del medio ambiente que


circunda el cuerpo humano elimina el esfuerzo fisiológico de acomodación,
obteniéndose con ellos un mayor confort y la consiguiente mejora del bienestar
físico y de las condiciones de salubridad.
 Humedad: una gran parte del calor que posee el cuerpo humano se disipa por
evaporación a través de la piel. Como quisiera que la evaporación se favorece con
la humedad relativa del aire baja y se retarda si esta es alta, se reduce que la
regulación de la humedad tenga una importancia tan vital como la de la
temperatura.
Condiciones para alcanzar el confort térmico

El cuerpo humano se puede considerar como una maquina térmica que


intercambia energía con su entorno, en forma de calor y humedad. Se alcanza el confort
térmico, solo si hay equilibrio entre calor producido por el metabolismo y las diferentes
formas de disipación. Estas son: transferencias conductivas, por contacto entre el cuerpo
y otros solidos: por ejemplo, los pies con el suelo, o la mano con una mesa. Esas
transferencias son de poca importancia, en general.

 Transferencias convectivas: piel ropa, o circulación de aire en los pulmones.


 Transferencia por radiación: desde la piel o la ropa, hacia el entorno.
 Transferencias latentes: debido a los procesos de respiración, o evaporación-
transpiración.
Criterios de confort
Se considera que existe confort térmico, cuando se dan simultáneamente las dos
siguientes condiciones:
 Equilibrio térmico global: la producción de calor del cuerpo humano es igual a la
emisión del calor hacia el entorno. Con potencias frigoríficas normales y una
regulación de temperatura adecuada, la obtención del equilibrio térmico global no
presenta dificultad. Este mismo criterio, en la práctica, se usa tanto para la
previsión del consumo de energía, como para la verificación formal de las
condiciones de confort.
 Confort térmico: el individuo no siente en ninguna parte de su cuerpo, ni calor, ni
frio desagradable. Las causas de incomodidad (corrientes de aire, efectos de
pared, etc) son múltiples, constituyen el segundo criterio, el cual en la práctica,
necesita estudios más profundos.
Ecosistema
Es un sistema natural que está formado por un conjunto de organismos
vivos (biocenosis) y el medio físico donde se relacionan (biotopo). Un ecosistema
es una unidad compuesta de organismos interdependientes que comparten el
mismo hábitat. Los ecosistemas suelen formar una serie de cadenas que muestran
la interdependencia de los organismos dentro del sistema. También se puede
definir así: «Un ecosistema consiste de la comunidad biológica de un lugar y de los
factores físicos y químicos que constituyen el ambiente abiótico».
Este concepto, que comenzó a desarrollarse entre 1920 y 1930, tiene en
cuenta las complejas interacciones entre los organismos (por
ejemplo plantas, animales, bacterias, protistas y hongos) que forman la comunidad
(biocenosis) y los flujos de energía y materiales que la atraviesan.

Clasificación de los ecosistemas

Los ecosistemas han adquirido, políticamente, una especial relevancia ya que en


el Convenio sobre la Diversidad Biológica («Convention on Biological Diversity», CDB) —
ratificado por más de 175 países en Río de Janeiro en junio de 1992— se establece «la
protección de los ecosistemas, los hábitats naturales y el mantenimiento de poblaciones
viables de especies en entornos naturales» como un compromiso de los países
ratificantes. Esto ha creado la necesidad política de identificar espacialmente los
ecosistemas y de alguna manera distinguir entre ellos. El CDB define un «ecosistema»
como «un complejo dinámico de comunidades vegetales, animales y de microorganismos
y su medio no viviente que interactúan como una unidad funcional».

Con la necesidad de proteger los ecosistemas, surge la necesidad política de


describirlos e identificarlos de manera eficiente. Vreugdenhil et al. Argumentaron que esto
podría lograrse de manera más eficaz mediante un sistema de clasificación fisonómico-
ecológico, ya que los ecosistemas son fácilmente reconocibles en el campo, así como en
imágenes de satélite. Sostuvieron que la estructura y la estacionalidad de la vegetación
asociada, complementados con datos ecológicos (como la altitud, la humedad y el
drenaje) eran cada uno modificadores determinantes que distinguían parcialmente
diferentes tipos de especies. Esto era cierto no sólo para las especies de plantas, sino
también para las especies de animales, hongos y bacterias. El grado de distinción de
ecosistemas está sujeto a los modificadores fisionómicos que pueden ser identificados en
una imagen y/o en el campo. En caso necesario, se pueden añadir los elementos
específicos de la fauna, como la concentración estacional de animales y la distribución de
los arrecifes de coral.

Algunos de los sistemas de clasificación son los siguientes:

 Clasificación fisonómica-ecológica de formaciones vegetales de la Tierra: un


sistema basado en el trabajo de 1974 de Mueller-Dombois y Heinz Ellenberg, y
desarrollado por la UNESCO. Describe la estructura de la vegetación y la cubierta
sobre y bajo el suelo tal como se observa en el campo, descritas como formas de
vida vegetal. Esta clasificación es fundamentalmente un sistema de clasificación de
vegetación jerárquico, una fisionomía de especiesindependientes que también tiene
en cuenta factores ecológicos como el clima, la altitud, las influencias humanas tales
como el pastoreo, los regímenes hídricos, así como estrategias de supervivencia tales
como la estacionalidad. El sistema se amplió con una clasificación básica para las
formaciones de aguas abierta.
 Sistema de clasificación de la cubierta terrestre («Land Cover Classification
System», LCCS), desarrollado por la Organización para la Agricultura y la
Alimentación (FAO).

Varios sistemas de clasificación acuáticos están también disponibles. Hay un intento


del Servicio Geológico de los Estados Unidos («United States Geological Survey», USGS)
y la Inter-American Biodiversity Information Network (IABIN) para diseñar un sistema
completo de clasificación de ecosistemas que abarque tanto los ecosistemas terrestres
como los acuáticos.

Desde una perspectiva de la filosofía de la ciencia, los ecosistemas no son unidades


discretas de la naturaleza que se pueden identificar simplemente usando un enfoque
correcto para su clasificación. De acuerdo con la definición de Tansley («aislamientos
mentales»), cualquier intento de definir o clasificar los ecosistemas debería de ser
explícito para la asignación de una clasificación para el observador/analista, incluyendo su
fundamento normativo.

Estructura

Al sumar la estructura de un ecosistema se habla a veces de la estructura abstracta


en la que las partes son las distintas clases de componentes, es decir, el biotopo y
la biocenosis, y los distintos tipos ecológicos de organismos
(productores,descomponedores, predadores, etc.). Pero los ecosistemas tienen además
una estructura física en la medida en que no son nunca totalmente homogéneos, sino que
presentan partes, donde las condiciones son distintas y más o menos uniformes, o
gradientes en alguna dirección.

El ambiente ecológico aparece estructurado por diferentes interfaces o límites más o


menos definidos, llamados ecotonos, y por gradientes direccionales, llamados ecoclinas,
de factores fisicoquímicos del medio. Un ejemplo es el gradiente de humedad,
temperatura e intensidad lumínica en el seno de un bosque, o el gradiente en cuanto a
luz, temperatura y concentraciones de gases (por ejemplo O2) en un ecosistema léntico.

La estructura física del ecosistema puede desarrollarse en la dirección vertical y


horizontal, en ambos casos se habla de estratificación.

 Estructura vertical. Un ejemplo claro e importante es el de la estratificación lacustre,


donde distinguimos esencialmente epilimnion, mesolimnion (o termoclina)
e hipolimnion. El perfil del suelo, con su subdivisión en horizontes, es otro ejemplo de
estratificación con una dimensión ecológica. Las estructuras verticales más complejas
se dan en los ecosistemas forestales, donde inicialmente distinguimos un
estrato herbáceo, un estrato arbustivo y un estrato arbóreo.

 Estructura horizontal. En algunos casos puede reconocerse una estructura


horizontal, a veces de carácter periódico. En los ecosistemas ribereños, por ejemplo,
aparecen franjas paralelas al cauce fluvial, dependientes sobre todo de la profundidad
del nivel freático. En ambientes periglaciales los fenómenos periódicos relacionados
con los cambios de temperatura, helada y deshielo, producen estructuras regulares en
el sustrato que afectan también a la biocenosis. Algunos ecosistemas desarrollan
estructuras horizontales en mosaico, como ocurre en extensas zonas bajo climas
tropicales de dos estaciones, donde se combina la llanura herbosa y el bosque o
el matorral espinoso, formando un paisaje característico conocido como
la sabana arbolada.
Conclusión

Podemos definir el confort como un estado de completo bienestar físico, mental y


social. Pretendemos que las personas se encuentren bien, no que estén menos mal. El
confort, depende que multitud de factores personales y parámetros físicos.

De entre todos los factores, el confort térmico representa el sentirse bien desde el punto
de vista térmico, pueden resultar dañinos, e incluso mortales, para el ser humano.

El problema ecológico y la crisis ambiental surgen del hecho de que los seres
humanos pueden intervenir activamente el medio para satisfacer sus necesidades, y a
través de ello, están causando mucho daño al medio y a todos los seres vivos que
dependen de ese medio.
La intervención de la humanidad sobre la naturaleza se ha ampliado en la era
moderna como consecuencia del desarrollo científico y tecnológico. Algunas personas
han sometido a la naturaleza a una sobreproducción, explotando recursos
naturales renovables y no renovables de manera incontrolada, poniendo, de este modo,
en peligro la vida sobre el planeta.
El aumento incesante de la población y la revolución industrial crearon la
necesidad de incrementar la obtención de materiales que sirvieran como materia prima
para las fábricas. Por este motivo se produjo un incremento en las actividades mineras. Al
mismo tiempo, el crecimiento de la población provocó un incremento en la producción
de alimentos, lo que dio origen al desarrollo de actividades como la agricultura y
la ganadería, de no tomar medidas urgente estamos condenando la vida en este planeta a
una extinción sin precedentes.
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

I.U. P. “SANTIAGO MARIÑO”


MATURÍN. EDO, MONAGAS

ALUMNA: PROFESORA:

MAT, JUNIO DEL 2014

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