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Beta vulgaris var.

cicla, la acelga

Historia:

Un poco de historia
La acelga es una hortaliza de origen mediterráneo. Se tiene certeza que los griegos la
utilizaban desde el siglo V a.C.

En la edad media y durante muchos siglos fueun alimento básico de las sociedades europeas.

La acelga era un alimento básico en la Europa medieva

Origen y distribución:

El origen de la acelga está vinculado a las tierras bañadas por el Mar Mediterráneo, sur de
Europa y Norte de África, y algunos expertos consideran Italia como primera referencia para su
utilización en la alimentación. Esta zona costera cuenta con un clima benigno, sin cambios
bruscos de temperaturas, donde la planta se desarrolla rápidamente. También se encuentran
textos que hablan de un posible consumo de esta verdura en Mesopotamia, durante el siglo IX
a.C.

Las acelgas han supuesto un aporte alimenticio para animales y humanos desde el Neolítico,
aprovechando sus hojas y raíces. Durante la antigüedad fue habitual disfrutarla en mesas de
Egipto, Grecia en el siglo V a.C., Roma o el mundo árabe.

Pero sería este último pueblo quien daría el primer paso para cultivar esta hortaliza y
aprovechar sus amplias propiedades medicinales y terapéuticas.

Posteriormente el papel de la acelga en la cocina quedó reducido a recetas para personas con
escaso poder económico y forraje para animales. A lo largo del siglo XIX incluso se abandonó el
consumo de su raíz, destinándose esta a la producción de azúcar o extracción de alcohol. Otras
variedades no aptas para el consumo humano o la producción comercial quedaban para
alimentación animal.

Afortunadamente el consumo de acelgas en los hogares remontó el vuelo convirtiéndose,


junto a las espinacas, en dos verduras fundamentales para llevar a cabo dietas sanas.

Zonas de producción

En la Península Ibérica el cultivo de acelgas destaca en las comunidades del norte, centro y
este, incluyendo Murcia, Valencia y Cataluña como principales productoras. A nivel
internacional existen plantaciones de una gran extensión, sobresaliendo los países de Europa
central y meridional, así como América del Norte y Asia, donde fue introducida por los
europeos.

En la Región de Murcia crece de forma silvestre la Acelga del Campo, no obstante se ha


desarrollado el cultivo de esta verdura principalmente en la Huerta de Murcia, Campo de
Cartagena, Lorca y Comarca del Noroeste. En los municipios y pedanías cercanos a la vega del
Segura a su paso por la capital de la región es habitual encontrar plantaciones de acelgas y
otras hortalizas que han sustituido en los últimos años a diversos frutales, así como el ahorro
de costes en su riego y recogida. En el Campo de Cartagena la llegada en las últimas décadas
del siglo XX de las aguas del Trasvase Tajo-Segura propiciaron el cambio de una agricultura
extensiva de secano a ciertas plantaciones de regadío entre las que se encuentran numerosas
variedades de hortalizas.

Durante los años 80 y 90 del pasado siglo se produjo un aumento en la producción de acelgas
en estas dos áreas debido a la proliferación de plantaciones bajo plástico que adelantaban las
cosechas, reduciendo además la utilización y el gasto en agua.

Clasificación taxonómica:

Encuadramiento taxonómico de la acelga


Chenopodiaceaeae Vent. Beta Vulgaris L. var. cicla L.

Descripción botánica de la acelga


Beta Vulgaris L.- Plantas herbáceas anuales, bienales o perennes, alógamas con
autocompatibilidad parcial.
Raíz generalmente engrosada. Tallo ramificado y acostilado.
Hojas basales en roseta, ovado-cordadas a rómbico-cuneadas y hojas caulinares rómbicas.
Peciolos suculentos.
Flores en panículas cimosas, axilares o terminales, con más de 6 flores por cima. Segmentos
del periantio de hasta 3mm en su máximo desarrollo. 2n=18, existiendo cultivares triploides (
2n=27) y tetraploides ( 2n = 36 ) obtenidos artificialmente.
Se cultiva por su raíz sacarífera, forrajera o comestible o por sus hojas y peciolos comestibles o
forrajeros.
Multiplica por semilla.
Regiones templadas y frías.
Beta Vulgaris L. var. cicla L.- Se cultiva por sus pecíolos y hojas que se consumen.

Taxonomía

Reino: Plantae

Subreino: Tracheobionta

División: Magnoliophyta

Clase: Magnoliopsida

Subclase: Caryophyllidae

Orden: Caryophyllales

Familia: Chenopodiaceae
Género: Beta

Especie: B. vulgaris

Subespecie: B. vulgaris var. cicla


(L.) K.KOCH

Variedades y cultivares:

La acelga es una verdura perteneciente a la familia Quenopodiaceae y de la especie Beta


vulgaris. Se trata de una planta bianual, de ciclo largo cuyo sistema radicular presenta una raíz
bastante profunda y fibrosa que protege los nutrientes del suelo en el que es cultivada sin
agotarlos. Sus hojas son la parte comestible mostrándose ovales, suavemente acorazonadas,
con marcados nervios que nacen desde la zona central del tallo y un color uniforme que abarca
toda la gama de verdes, dependiendo de la variedad. Las pencas son largas, anchas y carnosas,
con tonos blancos, amarillentos e incluso rojos. Tras un periodo de temperaturas bajas ofrecen
una floración con flores solas o en grupos de dos o tres, con cáliz verdoso compuesto por 5
sépalos y 5 pétalos. Su fruto contiene en el interior 3-4 semillas.

Por norma general las acelgas se recolectan cuando su peso alcanza entre 750 gramos y 1 kilo,
presentando las hojas un tamaño cercano a los 25 cm., indicando entonces el momento
óptimo para la cosecha.

Variedades

Existe un número reducido de variedades de acelgas, aunque su producción es muy elevada.


Se clasifican dependiendo de su color, tamaño de las hojas-pencas, grosor de estas últimas y
grado de recuperación que presenta la planta tras el corte de las hojas. Las dos variedades más
cultivadas en Europa y Norteamérica son:

Amarilla de Lyon. De hojas grandes, con forma ondulada, tonos verde-amarillo claro, penca
blanca de 10 cm. de anchura, producción abundante y excelente sabor, de ahí que sea muy
apreciada por su calidad.

Bressane. Sus hojas son onduladas, de gran tamaño, verde oscuro, pencas anchas y blancas. Se
trata de una planta muy vigorosa que necesita de un amplio marco de plantación.

Estas dos variedades garantizan que durante todo el año los mercados dispongan de acelgas
para su comercialización, no obstante existen otras que complementan la oferta como Paros,
Green, Fordook giant, Lucullus, Brigntlights o Gigante carmesí.

Acelga del Campo. Crecen espontáneamente en la huerta y el campo en la Región de Murcia,


por lo que han sido recogidas tradicionalmente para elaborar ensaladas y otras preparaciones
gastronómicas. También son conocidas como acelgas negras o bledas.
Propiedades nutritivas

El alto contenido en agua de las acelgas les confiere pocas cantidades de hidratos de carbono,
proteínas o grasas, proporcionando escaso valor energético y convirtiéndola en un alimento
recomendado para elaborar dietas de adelgazamiento.

Pero si es un producto muy rico en nutrientes reguladores como la fibra, sales minerales o
vitaminas. Entre estas últimas destaca la abundancia en folatos, sobresaliendo la
protovitamina A (que se transforma en Vitamina A una vez ingerida por el ser humano y a
medida que la necesita el organismo) y vitamina C, recogidas en las hojas más externas, las
más comercializadas. Estas sustancias aportan beneficios como la formación de anticuerpos
para el sistema inmunológico, prevención del desarrollo de enfermedades degenerativas,
cardiovasculares o cáncer, antioxidantes, elaboración de enzimas en el hígado, hormonas
sexuales o suprarrenales, mejoras en la visión, así como buen estado de la piel, mucosas,
cabello y huesos. Otro grupo de personas que se ven beneficiados por las propiedades de esta
hortaliza son las propensas a padecer infecciones respiratorias como la faringitis, laringitis o
bronquitis.

También dispone la acelga en su composición de potasio, magnesio, sodio, yodo, hierro y


calcio. Las propiedades de estos minerales regulan la actividad muscular, equilibran el
funcionamiento de intestinos, nervios y músculos, potencian la salud de los huesos, mejoran la
inmunidad, así como colaboran en la labor intestinal con un suave efecto laxante y diurético
que reduce la hipertensión o la retención de líquidos. También intervienen en el buen
funcionamiento de la glándula tiroides y en el desarrollo del feto, por lo que su consumo
resulta muy beneficioso en mujeres embarazadas. Las cantidades de hierro que aporta la
colocan como uno de los productos a ingerir en caso de anemia.

Además la presencia en su composición de ácido oxálico previene la formación de cálculos


renales y artritis.
Características morfológicas:
Caracteres morfológicos de la acelga
Es una planta bianual de la misma especie botánica que la remolacha. A diferencia de
esta, la raíz es ramificada y poco carnosa.
Las hojas son muy grandes, con un pecíolo y nerviación central muy desarrollados. Los
limbos de las hojas son grandes y redondeados y en ocasiones recubren ligeramente los
pecíolos hasta su base. El color de las hojas es variable, desde colores amarillos hasta
verdes oscuros. Esto a que se ha producido una selección en función de las exigencias del
mercado de cada zona.
En función de la parte que se quiera consumir el estado fenológico de recolección será
diferente. Si se pretenden consumir las hojas enteras, se dejara desarrollar la hoja hasta
un porte medio o pequeño. Si lo que se quiere aprovechar es el pecíolo o pella, se dejará a
la planta que desarrolle ampliamente las hojas.
En el segundo año de cultivo emite el tálamo floral. Este tallo es muy ramificado y con
flores dispuestas en tallo ascendente.
La infrutescencia es un glomérulo debido a que 2 o 3 flores quedan englobadas en un solo
fruto.
En 1 g se pueden encontrar 60 glomérulos, y su poder germinativo es de 4 años.
Caracteres fisiológicos de la acelga
Es un cultivo que prefiere los climas templados- húmedos. Se adapta muy bien al los fríos
que se producen en el clima continental español y a las condiciones de las zonas
templadas de España. Cuando las hojas están totalmente desarrolladas se muestran
sensibles a las heladas.
Se desarrolla mejor en suelos de consistencia media, frescos, profundos y bien provistos
de materia orgánica, por lo que habitualmente necesita aportes de estiércol bien
descompuesto.
Es poco tolerante a la acidez y tiene una tolerancia media-alta a la salinidad.
Ciclo biológico o agronómico de la acelga
La siembra de este cultivo se puede realizar durante todo el año, con excepción de los
meses más fríos: noviembre, diciembre ,enero y febrero. En zonas templadas se puede
incluso sembrar en noviembre y febrero, siempre que las temperaturas no bajen
demasiado.
Debido a este escalonamiento es posible obtener producción durante todo el año, sobre
todo si se van cortando las hojas según van creciendo.
De todos modos, la época más corriente de siembra es en los meses de verano, debido a
que se consigue el máximo crecimiento y la menor tendencia a la subida a flor.

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