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NIÑOS PRIVADOS
DE UN MEDIO
FAMILIAR NORMAL
Reproducción de un estudio
de las Naciones Unidas
3a Edición
eh
EDITORIAL HVMANITAS
BUENOS AIRES
5
TITULOS PUBLICADOS
Un estudio sobre las necesidades de los niños que carecen de hogar en su país se incluyó
en el programa de trabajo adoptado por la Comisión de asuntos sociales en su sexta sesión.
La primera redacción de ese estudio se presentó a la Comisión en su siptima sesión, en 1951,
habiéndose diferido su examen hasta la octava sesión. 1*3
La Comisión decidió, además, incluir en su programa de trabajo los siguientes estudios:
normas concernientes al tratamiento de los niños en los institutos, adopción, tutela de niños,
tratamiento igual de niños legítimos e ilegítimos. Distintos aspectos de la acción preven
tiva, así como de la curativa y protectora enfavor de las personas sin hogar, han sido tra
tados en otros estudios de la Organización de las Naciones Unidas, por ejemplo: Me
didas de orden económico en favor de la familia; Métodos de Administración
de Servicios Sociales; y Asistencia a los extranjeros indigentes.
El presente estudio se basa casi exclusivamente sobre los datos de que dispone la Se
cretaría, no habiéndose distribuido ningún cuestionario al respecto. Esos datos comprenden
informes entregados por los distintos países para la confección de los informes anuales *
y de la Serie legislativa relativa a la protección de la infancia y de la juventud,.
así como informes dados por los consultantes ante la Organización de las Naciones Unidas.
Grupos de trabajo, encargados de estudiar la protección de la infancia en la India, los Países
Bajos, la Unión Sudafricana y el Reino Unido, redactaron informes especiales para cada
uno de esos países. Los gobiernos de Turquía y Yugoslavia también remitieron informes.
La elección de los países para los cuales se redactaron monografías se inspiró, en primer
lugar, en la preocupación de mostrar la situación que existe actualmente en distintas regio
nes geográficas, los diferentes sistemas y métodos empleados y los diversos grados de des
arrollo alcanzados en la asistencia a los niños. 8
Conforme a la sugerencia hecha durante la séptima sesión de la Comisión de cuestiones
sociales, el proyecto de informe (E/CN.5 /237) se mandó a los gobiernos de los Estados
Miembros para que hicieran sus observaciones al respecto. Estas llegaron de los gobiernos
de ocho países: Canadá, Estados Unidos, Francia, Grecia, India, Nueva Zelandia, Reino
Unido, Suecia y Checoslovaquia. Checoslovaquia, Turquía, la U.R.S.S. y Yugoslavia
agregaron informes suplementarios.
Las siguientes instituciones especializadas: 017, UNESCO y OMS remitieron sus
informes sobre cuestiones relacionadas con el presente estudio. 4*Ciertas organizaciones no
gubernamentales (ante todo la Unión internacional de protección de la infancia y el Insti
tuto internacional de protección de la infancia, en el Uruguay) también presentaron informes
muy útiles.
INTRODUCCION
Bomlay Children's Act de la India, se llama “ niño” a “ toda persona que no haya
cumplido los 16 años” K En varios países, las leyes que reglamentan el trabajo
de niños fijan en 15 años la edad mínima de admisión en un émpleo industrial,
pero esa edad puede excepcionalmente reducirse a 12 o 13 años. La Convención
de la Organización internacional del Trabajo, que fija la edad mínima de ad
misión de niños en los trabajos industriales, adoptada en 1937, 2 prevé que “los
niños menores de 15 años no pueden emplearse ni trabajar en establecimientos
industriales, públicos o privados.”
18. Desde el punto de vista social, se considera, por lo general, que los pa
dres tienen ciertas responsabilidades en cuanto a la conducta de sus hijos meno
res y, si estos últimos son citados a comparecer ante la justicia para responder
de una infracción, los padres tienen no solo el derecho, sino el deber de presen
tarse ellos mismos ante el tribunal.
19. La disociación familiar, que priva a los niños del medio familiar normal,,
puede atribuirse a tres causas principales: a) el desarrollo rápido de la indus
tria; b) flagelos tales como las guerras, revoluciones o catástrofes naturales;
c) factores sociales o psico-sociales tales como la ilegitimidad, la separación
o el divorcio, la muerte, enfermedad, abandono o negligencia, la criminalidad
o la inestabilidad mental de uno o ambos cónyuges.
20. El desarrollo de la sociedad industrial repercutió sobre la estructura y las
funciones de la familia considerada como institución. H a transformado la
familia, que antes era una unidad económica y social más o menos autónoma,
en un grupo que depende del exterior en cuanto a los bienes y servicios nece
sarios a su subsistencia. Los cambios introducidos por la industrialización per
miten a un número mayor de ciudadanos elevar su nivel de vida, pero la tensión
ejercida sobre el individuo por la inseguridad del empleo y también por una
especialización cada vez mayor, la monotonía de muchas ocupaciones y la falta
de una compensación suficiente en forma de reposo, ocio y variedad en el tra
bajo, surten su efecto en la situación material de la familia así como en sus rela
ciones internas. La pobreza, la desocupación, el sub-empleo crónico y las malas
condiciones de vivienda, figuran aún entre los principales factores que privan
a algunos niños de un medio familiar normal. La inquietud que esas condi
ciones crean en el hogar puede influir muy seriamente en las relaciones exis
tentes entre padres e hijos. Los niños cuya madre trabaja todo el día y cuyas
necesidades materiales y psicológicas no son satisfechas completamente, pueden
sufrir en forma similar la misma privación.
21. Los cambios rápidos de orden económico, social y cultural que se veri
fican hoy en día en vastas regiones del mundo, ejercen una influencia muy
fuerte sobre el sistema familiar y provocan a menudo la disociación de la familia.
Familias acostumbradas a vivir de recursos naturales, modestos pero seguros,
van a establecerse en regiones industriales donde la magra remuneración en
dinero, que constituye en adelante sus recursos, la expone a caer en el des
amparo. Cuando el padre se separa de la familia para ir a trabajar a la ciudad,
corre el riesgo de no reunirse más con ella por no poder llamarla a su lado.
£1 rápido crecimiento de las poblaciones urbanas es a menudo la causa de que
las familias vivan en casas detestables, abarrotadas de inquilinos, en un ambiente
perjudicial para la salud física y moral.
MEDIO FAMILIAR NORMAL 1)
22. La acción ejercida por la sociedad sobre la vida de la familia es, hoy
en día, más fuerte que nunca. Inversamente, el comportamiento fundamental
de la familia determina la actitud futura de los hijos en cuanto miembros de
la sociedad. Actualmente la familia ha perdido gran cantidad de sus funciones
de orden material y cultural, las cuales fueron asumidas por la sociedad y sus
distintos órganos. Sin embargo, se aprecia cada vez más la importancia del
papel que la familia desempeña en el desarrollo de la sensibilidad del niño.
La sociedad se preocupa, en primer lugar, por mantener la familia en cuanto
institución, pues ninguna fórmula de sustitución, por eficaz que fuese, podría
reemplazarla. Durante los últimos años, un número cada vez más considerable
de países reforzaron los métodos destinados a elevar el nivel de las familias para
evitar que los niños pierdan el hogar a causa de la miseria; también multipli
caron los medios para mejorar las relaciones entre los miembros de la familia,
cuando su ruptura amenaza con destruir la vida familiar. Toda mejora de las
relaciones entre la familia y la sociedad contribuirá a establecer un fundamento
social más sólido con miras a una vida familiar estable.
23. Los países que hoy en día toman el camino de la industrialización
rápida, tal vez puedan sacar provecho de las malas experiencias de otros países
y evitar, por una legislación apropiada y la creación de servicios sociales, conse
cuencias similares en el orden social. Todas las medidas tendientes a elevar el
nivel de vida de las familias y mejorar los servicios que contribuyen a prevenir
la disociación familiar son importantes, porque suprimen la necesidad de re
tirar al niño de su hogar y causarle semejante pena por una mera razón de
pobreza o porque no haya servicios para satisfacer las necesidades del niño
o de la familia dentro del hogar mismo.
24. El examen de los efectos que azotes tales como las güeñas, revoluciones y
persecuciones, así como las catástrofes naturales, tales como terremotos, hambre,
inundaciones y epidemias, pueden ejercer sobre el medio familiar normal, se
limita aquí a la presentación de algunos datos estadísticos. El número de per
sonas afectadas por el gran terremoto de 1949, en el Ecuador, se estima en apro
ximadamente 225.000 de las cuales 6.000 muertos y 100.000 sin albergue; el
de niños que necesitaron una asistencia especial durante la segunda guerra
mundial, en 60 millones en Europa y 65 millones en la China. 1 En las regio
nes europeas devastadas por la guerra, un número considerable de niños quedaron
sin hogar, en el sentido literal de la palabra, con o sin sus padres, y se estima
en 13 millones la cantidad de aquellos que la última guerra dejó huérfanos
en las mismas regiones. 2
25. Las necesidades de los huérfanos de guerra exigen medidas especiales,
porque no se trata tan sólo de cuidados materiales de larga duración y de una
tutela legal, sino también de una educación que las circunstancias hacen, a
veces, muy difícil, porque el ambiente del niño puede haber sido destruido
completamente.
26. Hoy en día nos damos cuenta mejor de los efectos destructivos que
pueden producir en un medio familiar normal la pobreza y otros factores sociales1
V psico-sociales del ambiente inmediato, tales como la ilegitimidad, la separación,
el divorcio, la muerte de los padres, la enfermedad prolongada de éstos o de
los hijos, la crueldad, el abandono, la criminalidad o la inestabilidad mental.
Los esfuerzos hechos para poner remedio a tales condiciones ya han traído gran
des progresos, pero la mayoría de los países están desprovistos de la información
estadística indispensable para un estudio detallado de los efectos producidos
por esas diferentes causas. .A consecuencia de ciertas encuestas, efectuadas
en el Reino Unido, los Estados Unidos y Suecia, se ha dado a conocer que
la muerte de uno o ambos padres es causa de la privación de un medio familiar
normal probablemente en menos del 25 por ciento de la totalidad de los casos;
la ilegitimidad, en una proporción que varía entre el 10 y el 40 por ciento;
la “ negligencia o abandono” , el “ desamparo” , la “falta de autoridad paterna
o materna” , y la “ inadaptación del niño” , etc., son culpables en un 60 por
ciento de los casos estudiados en la Gran Bretaña, y en un 26 por ciento de los
casos estudiados en Nueva York. La separación y el divorcio son los factores
determinantes en una proporción que varía entre el 5 y el 25 por ciento de
los casos; la enfermedad prolongada o la hospitalización de padre o madre
lo son probablemente en un 5 al 10 por ciento de los casos. 1
27. En lo que concierne a los factores psicológicos y emotivos, puede decirse
que en los países donde la economía está poco desarrollada, la razón principal
por la cual los niños carecen de un ambiente familiar normal es probablemente
la pobreza. En los países donde el nivel de empleo es elevado, donde las me
didas de seguridad social y los servicios sociales son satisfactorios y donde el
índice de mortalidad es bajo, la causa principal es probablemente la inestabi
lidad de carácter de los padres que se muestran incapaces de establecer buenas
relaciones en el seno de la familia y de asegurar a los niños un medio familiar
normal.
28. Los niños sin padres, pero que están al cuidado de miembros de la
familia, no se consideran como privados de un medio familiar normal, en el
sentido estricto del término. Tal como ya lo señalamos, el sentido de la respon
sabilidad familiar es tradicional en vastas regiones de Asia, Africa y América
del Sur y también en ciertas regiones de los países occidentales. El huérfano
acogido en el hogar de un pariente goza evidentemente de una ventaja muy
grande, porque puede tener el sentimiento de pertenecer realmente a esa fa
milia, lo que no sucede cuando se le coloca en casa de extraños. Es posible que
sea explotado, si el móvil principal de los que le acogen no es el deseo de darle
un hogar, sino el de procurarse a sí mismos alguna satisfacción o ventaja, y aún
existe otro peligro: el de que sea objeto de una solicitud exagerada, lo cual
sucede con frecuencia cuando niños pequeños son acogidos por sus abuelos,_
29. Los niños sin padres, y sin familiares que puedan cuidar de ellos en
lugar de aquéllos, son, por lo general, huérfanos de padre y madre y niños
abandonados. En muchos países, esos huérfanos representan una gran parte
de los niños sin hogar. Esto es así sobre todo después de una guerra u otra
catástrofe.
30. Las razones principales del abandono de niños son la pobreza de los
padres y los prejuicios sociales contra las madres solteras. Gran cantidad de
niños mendigos y vagabundos, o de los que trabajan en condiciones perjudi
ciales en numerosas regiones del mundo, pertenecen a este grupo, igual que
los niños abandonados por la madre poco después de su nacimiento.
31. Los niños de quienes se ocupa uno solo de los padres plantean un pro
blema muy diferente. Este grupo comprende a los nacidos fuera del matri
monio y aquéllos cuyo grupo familiar está “ deshecho” . Las estadísticas rela
tivas a los niños ilegítimos son muy incompletas pero, según los datos disponi
bles, parece que constituyen una gran proporción de los que viven en insti
tuciones. Se comprueba, por ejemplo, que en el Canadá un 30,5 por ciento
de los niños asistidos por los poderes públicos, fuera de su hogar, son ilegítimos;
en Suecia, la proporción es de un 40 al 50 por ciento. En la mayoría de Ios-
países faltan las cifras, y raros son aquéllos donde es posible obtener informa
ciones seguras acerca de lo que sucede con esos niños, del número de los que
sobreviven, de los legitimados ulteriormente por el casamiento de sus padres
o adoptados por otras familias, o que se crían en instituciones diversas sin que
jamás se haga ningún esfuerzo por colocarlos en úna familia normal.
32. En su informe sobre La situación jurídica del niño ilegítimo, la Liga de las
Naciones ha echado las bases de un estudio sobre esta cuestión. Como se ad
mite, por lo general, que los niños de ese grupo son particularmente vulnerables
y que, en muchos países, faltan servicios apropiados para ellos, la Organiza
ción de las Naciones Unidas emprenderá ulteriormente un estudio especial
acerca de esta cuestión. 1
33. En el grupo de los niños cuyo “ círculo familiar está deshecho” entran
no sólo aquéllos cuyos padres fallecieron, sino también aquéllos a quienes el
abandono, la separación o el divorcio privaron de padre o madre, aquéllos
cuyos padres viven y trabajan lejos sin permanecer en contacto estrecho, y hasta
sin conservar contacto alguno con el hogar, o aquéllos cuyos padres están ale
jados por mucho tiempo, a consecuencia de hospitalización o encarcelamiento,
por ejemplo. El solo hecho de que el padre o la madre estén fuera del hogar
no es suficiente para suprimir el hogar mismo. Este sólo deja de existir si, por
razones financieras u otras, el cónyuge que queda no estuviere en condiciones
de mantenerlo. Muchos estudios consagrados a los niños sin hogar o a los niños
los físicamente disminuidos a los niños que, con motivo de graves trastornos
afectivos o de una inadaptación, causados por un sentimiento de frustración
y de ansiedad y por la agresividad de los padres, requieren cuidados y un trata
miento especiales.
38. Cuando los niños pierden su hogar a causa de migraciones en masa,
de estrechez económica o guerra, se plantean problemas muy especiales. Desde
muchos puntos de vista, sus aspectos sociales y económicos son análogos a los
del problema de los niños huérfanos y abandonados; sin embargo, los hechos
psicológicos son muy diferentes: en efecto, el niño no sólo fue arrancado de su
medio familiar, sino que sus relaciones con el mundo de los adultos pueden estar
completamente trastornadas. 1
39. Los hijos de familias ambulantes no son niños sin hogar en el sentido
ordinario del término, pero con todo están privados de la seguridad fundamental
y del medio familiar normal importantes para todos los niños. La inquietud
que acompaña la pobreza y la desocupación se acentúa aún cuando la familia
se desplaza constantemente, como lo hacen, en algunos países, los trabajadores
de la agricultura y silvicultura. Se descuida la educación de los hijos de tales
familias, y sus posibilidades de entablar relaciones satisfactorias con otros y
de integrarse armoniosamente en la colectividad son reducidas.
40. En lo que atañe a los grupos minoritarios, el sentimiento de inferioridad
engendrado por medidas discriminatorias, y la tensión entre la minoría y la
mayoría, así como entre distintas generaciones dentro de la minoría misma,
pueden causar graves frustraciones a los niños.
1 Cf. las publicaciones de la UNESCO, La infancia víctima de la guerra, No. 461, 1949, y
Niños sin hogar, No. 574, 1949.
III
45. En muchos países poco desarrollados, el hecho de que los niños carecen
de una enseñanza escolar básica plantea un problema grave. Asimismo, en cier
tos países donde la ley prevé la enseñanza obligatoria, esta disposición no puede
aplicarse por falta de escuelas y maestros; o bien puede suceder que los niños
estén impedidos de ir al colegio por la falta de los medios de transporte, la po
breza, la carencia de ropa y zapatos, o aun por la necesidad de trabajar para
ayudar a su familia. El problema de la enseñanza se agrava aún cuando se
trata de niños sin hogar, de niños vagabundos, mendigos, o que, desde otros
puntos de vista, viven en condiciones perjudiciales. En muchos países, las insti
tuciones sólo proveen a los niños de techo y alimento, sin ninguna enseñanza
escolar ni profesional.
46. Por otra parte, la educación de los niños no se limita a la enseñanza;
comprende también el arte más amplio de desarrollar la personalidad y las
predisposiciones del niño para que se convierta en buen ciudadano y se adapte
a la sociedad. La falta de educación apropiada no sólo tiene por consecuencia,
en el caso de los niños sin hogar, la de disminuir sus posibilidades de hallar
un empleo conveniente y de adaptarse a la sociedad, sino que traba también
el desarrollo normal de su personalidad. Más de un niño se ve obligado a hacer
frente a problemas y situaciones que están muy por encima de su edad y apti
tudes, y no recibe la asistencia que le permitiría desarrollarse progresivamente,
tal como lo haría un niño que vive en condiciones normales.
47. La educación de un niño puede comprometerse hasta en una institución
donde la falta de relaciones de orden afectivo hace difícil su desarrollo moral.
Los niños privados de un ambiente familiar normal no sólo pueden carecer de
la posibilidad de adquirir hábitos sociales normales, sino que corren el riesgo
de adoptar modos de comportamiento antisociales (desocialización) como resul
tado de los daños causados por esa privación. Así, su adaptación a la sociedad
queda más comprometida aún.
IV
LA ACCIÓN PREVENTIVA
Medidas generales
48. Es evidente que los ingresos familiares están en estrecha relación con la
situación económica general de un país, y por consiguiente hay que hacer un
esfuerzo sobre un frente muy amplio para elevar los niveles de vida. Si queremos
impedir la disociación familiar, es necesario que la familia disponga, gracias
a la producción o al empleo, de un ingreso que le permita llevar una existencia
holgada y decente.
49. Los objetivos por alcanzar para satisfacer las condiciones esenciales
de la protección de la infancia están enunciados en la Declaración universal
de los Derechos del hombre, en el proyecto de declaración de las Naciones
Unidas, sobre los Derechos del niño ,* y en el informe del Comité adminis
trativo de coordinación ante el Consejo económico y social. 12
50. En ei transcurso de los últimos años, una gran cantidad de países pu
sieron en ejecución distintos métodos para elevar el nivel de vida de las fa
milias y niños. La adopción de diferentes medidas económicas y sociales, la
mejora de las condiciones de trabajo, higiene, vivienda, enseñanza y ocio, contri
buyen indirectamente a prevenir un estado de cosas que podría desembocar en la
desaparición del hogar. El examen detallado de métodos destinados a elevar
el nivel de vida familiar no entra en los márgenes del presente estudio. Puede
decirse, sin embargo, que, para ser eficaces y prácticos, esos métodos deben
tener en cuenta la situación económica y social del país así como su cultura.
La creación de servicios ha de ser objeto de minuciosos estudios con miras de
mejorar, a la vez, la situación económica, material, social y cultural del niño.
51. Para evitar la disociación familiar, es de capital importancia consolidar
la situación económica de las familias que tienen hijos. Un estudio internacional
sobre la seguridad social, publicado en 1950 por la Oficina Internacional del
Trabajo, señala que “ veintiún países de Europa o del Commonwealth britá
nico y dos países de América latina establecieron sistemas de subsidios fami
liares” . 3 Estudios sobre las Medidas de orden económico en favor de la familia
52. Algunos niños corren más peligro que otros de ser privados de un medio
familiar normal, y tienen necesidad de servicios especiales, tales como la asis
tencia económica y social para los niños sin manutención, huérfanos e hijos
ilegítimos; los servicios de vigilancia y servicios de tratamiento individual en
el hogar; las guarderías de niños y los servicios de asistentes familiares. Por
costosos que parezcan muchos de esos servicios, no puede recalcarse demasiado
la importancia que presentan contribuyendo a evitar la colocación de los ni
ños fuera de su hogar normal.
53. Muchos países ofrecen una pensión especial a los huérfanos: por ejemplo
Egipto, Grecia, los Países Bajos, el Reino Unido, Suecia y Checoslovaquia. Las
condiciones en las cuales se adjudican esas pensiones varían notablemente de
un país a otro. Por lo general, se pagan hasta la edad de 16 años, pero a veces
hasta los 18 o aún hasta que el niño termine sus estudios. Esas asignaciones
representan ya sea un complemento de la pensión de viuda, o un aumento de
la pensión que recibe una viuda con hijos a su cargo, o bien un subsidio dis
tinto. El monto del mismo también varía: por lo general se sitúa entre la mitad
y la tercera parte de la pensión de la viuda. Una exposición completa de esas
prestaciones se halla en la publicación de la O IT titulada Estudio internacional
sobre la seguridad social. 1
54. La ayuda económica y social a las madres, sobre todo a aquellas que
trabajan, está estrechamente ligada con esas medidas de seguridad social. En
algunos países, la legislación protege a la mujer contra el despido por embarazo
o parto, y le asegura la reintegración en ei empleo. En varios países, la legis
lación prevé primas al nacimiento para ayudar a las familias que deben sufra
gar gastos excepcionales causados por el nacimiento de un hijo, o prestaciones
en dinero a las mujeres que trabajan, durante el período de inactividad moti
vado por el nacimiento de un hijo. 2
55. Las guarderías, a las cuales las madres que trabajan confían sus hijos
durante la jornada, se han desarrollado mucho durante los últimps años, debido
al aumento que ha habido en la demanda de mano de obra femenina, sobre
todo durante y después de la segunda guerra mundial. Muchos países favorecen
la creación de guarderías mediante un sistema de subvenciones, permisos y
obtener una colocación satisfactoria, tan pronto como sea posible, en una fami
lia o institución. Un mayor número de asistentes sociales especializados en ese
dominio permitiría ayudar a las madres a tomar, sin esperar demasiado, una
decisión definitiva: ya sea la de tener a sus hijos junto con ellas, ya sea la de
hacerlos adoptar, lo cual evitaría que tengan que pasar sucesivamente por diver
sas instituciones y familias y criarse sin conocer seguridad afectiva alguna.
63. En algunos países, la acción de las autoridades sólo se ejerce con res
pecto a los niños ilegítimos que les sean señalados directamente como “ niños
abandonados” , “niños expósitos”o “ niños desamparados” ; otros países, en cam
bio, toman ciertas medidas obligatorias acerca de todos los niños ilegítimos para
proteger a la vez a la madre y al hijo.- En la mayoría de los países, la madre
es tutora legal del hijo ilegítimo y está encargada de mantenerlo; en algunos
países, sin embargo, la ley impone la designación de un tutor especial cuya
misión consiste en asesorar a la madre. En algunas provincias del Canadá, una
sociedad de asistencia a la infancia puede ser tutora; en otras, el niño es pupilo
de la provincia, y el jefe de departamento asume las funciones de tutor. En Fran
cia, el tutor es el Estado, mientras que en los Países Bajos es siempre una per
sona privada o una sociedad protectora de la infancia.
64. Algunas legislaciones prevén un procedimiento mediante el cual puede
establecerse la paternidad y obligarse al padre de un hijo ilegítimo a contri
buir financieramente a su manutención y la de la madre. La investigación de
la paternidad está permitida en algunos países y prohibida en otros. En algunas
provincias del Canadá, las madres solteras tienen derecho a los subsidios asig
nados a las madres; en Suecia y Dinamarca, los poderes públicos pueden con
ceder a la madre soltera, a la cual el padre del niño deje de abonar los alimentos
que le corresponden, un adelanto de fondos cuya devolución el Estado después
reclama al padre. En otros países, empero, el hijo ilegítimo sólo tiene derecho
a una asistencia financiera si se le considera como “ desamparado” o “ nece
sitado” .
65. El niño empleado de manera prematura o excesiva en la industria o
la agricultura, se halla, por ese mismo hecho, privado de un medio familiar
normal. El trabajo de niños, a pesar de. los reglamentos adoptados por nume
rosos países para prohibirlo y controlarlo, constituye todavía un grave problema,
y la O IT ha tratado de resolverlo de varias maneras. Entre las reglamentaciones
destinadas a prevenir la explotación de niños y jóvenes, pueden citarse aquellas
que fijan un salario mínimo para todos los menores que trabajen, las que prevén
la limitación de las horas de trabajo, las que sólo permiten el otorgamiento
de certificados de autorización de empleo luego de una encuesta que deje cons
tancia de que el niño terminó la escuela y que es físicamente capaz de trabajar,
y finalmente las que fijan la edad de admisión en el trabajo.
66. Una serie de convenciones, recomendaciones y reglamentos interna
cionales, fijan la edad de admisión al trabajo en las distintas ramas de acti
vidades. Una reglamentación especial acerca del control de la mano de obra
infantil no siempre es eficaz.
MEDIO FAMILIAR NORM AL 25
Descubrimiento, diagnóstico
1 Digefl of the Fact-Finding Report to the Mid-Century White House Conference on children and
Touth (1950), pág. 148.
28 N IÑOS PRIVADOS DE U N
1 Cate of children committee report (informe Curtis), Londres, 1946, pág. 169.
MEDIO FAMILIAR NORM AL 33
tituir un estado intermedio hasta que el niño tenga un empleo que lo indepen
dice completamente. Si los hijos de la familia guardiana trabajan con la misma,
en una chacra por ejemplo, parece preferible no hacer excepciones con el niño
alojado, y dejar que trabajen en las mismas condiciones que los demás.
115. En la mayoría de los países, el concepto de alojamiento que responde
a las necesidades del niño ha evolucionado durante los últimos años: ya no
se considera como suficiente procurarle al niño alimento, un techo y ropas;
se opina que deben hacerse esfuerzos por asegurarle una atmósfera afectuosa
donde pueda crecer y desarrollarse armoniosamente. Para lograr tal fin, es
importante informarse primeramente sobre la clase de hogar y la personalidad
de los padres suplentes, así como sobre las razones por las cuales éstos desean
- acoger a un niño, todo ello paralelamente con la encuesta acerca de la perso
nalidad del niño, su hogar y sus padres verdaderos. Es deseable que desde un
principio se elaboren planes a largo plazo si se quiere evitar que los niños se
vean expuestos a continuos cambios.
116. Cuando se trata de huérfanos o niños abandonados que necesitan
un alojamiento más o menos permanente, y que son bastante grandes como para
comprender su situación, es importante que el niño pueda tomar parte activa
en su alojamiento, porque ello le da la sensación de que se toma en considera
ción su personalidad. Siempre que el niño tenga sus propios padres, hay que
someter a éstos y a la familia guardiana a un tratamiento individual para ayu
dar a unos y otros a comprender la situación. En muchos casos, el traslado de
un niño de un hogar a otro podrá evitarse probablemente si los padres guar
dianes conocen la verdad desde un principio .y están dispuestos a aceptar al niño
y su comportamiento, así como el de su familia, y si, desde el comienzo, se esta
blecen planes a largo plazo, teniendo en cuenta las realidades, para deter
minar el tipo de alojamiento familiar que conviene a cada niño qué debe
colocarse.
117. En el Canadá, en Francia, Nueva Zelandia, Suecia, el Reino Unido
y los Estados Unidos, se recurre a los alojamientos familiares retribuidos más
que a los gratuitos. En los Países Bajos, gran cantidad de niños son objeto de
alojamientos retribuidos, pero también hay casos de alojamiento gratuito, y
entonces muchas veces los padres guardianes están encargados de la tutela
del niño. Lo mismo sucede, habitualmente, en varios países de América latina.
Con todo, muchos niños se confían gratuitamente a parientes o amigos, y los
poderes públicos ignoran la mayor parte de tales alojamientos. El Grupo de
trabajo de la Unión Sudafricana señala en su informe que el alojamiento fa
miliar no está tan desarrollado en ese país como en los demás: sólo un 11 por
ciento del número total de niños estaban alojados en familias.
tencia se hallan en instituciones, pero esta cifra no confiere una idea exacta
de la situación. En efecto, en la provincia de Quebec, casi todos los niños se
hallan en instituciones, mientras que en otras provincias la mayoría de los niños
están alojados en familias guardianas. En Nueva Zelandia, el 60 por ciento
aproximadamente de los pupilos de la nación reciben también asistencia en
hogares familiares o en casa de parientes o amigos. En el Reino Unido, un
28 por ciento aproximadamente de los niños están alojados en hogares fami
liares, y en los Estados Unidos la proporción alcanza un 42 por ciento.
119. La adopción legal suele considerarse como la mejor de las soluciones
posibles para los niños que tienen necesidad de una asistencia permanente, como
por ejemplo los huérfanos y los hijos ilegítimos que no pueden permanecer
con la madre. Dadas las muchas cuestiones que plantea un estudio analítico
de la legislación, así como de las costumbres relativas a la adopción, la Co
misión de asuntos sociales propuso que la Organización de las Naciones Unidas
emprenda un estudio especial del problema. 1 La adopción legal crea entre
el adoptado y la persona que le acoge, un lazo tan parecido como posible a
aquel que une padres e hijos. Cuando el carácter de los niños se aviene con
el de las personas que los toman a su cargo, la adopción es, sin duda, la mejor
solución para los niños carentes de familias. Sin embargo, no siempre puede
recurrirse a ella para resolver el problema que consiste en procurar a los niños
sin hogar una familia que reemplace la suya, ya que cierta cantidad de ellos
sólo reciben una asistencia temporaria, que muchos no pueden ser adoptados
debido a sus relaciones familiares, y que, entre los que sí podrían serlo, algunos
no llenan las condiciones requeridas.
120. La adopción es legal en la mayoría de los países europeos, así como en-
el Canadá y los Estados Unidos. En los países de América latina, no se recurre
tan frecuentemente a la adopción legal, pero la colocación en los hogares fa
miliares donde los padres suplentes están investidos de cierta patria potestad,
es muy difundida.
121. En algunos países, las adopciones son llevadas a cabo aún por personas
y organizaciones sin mandato, y los tribunales no tienen obligación de proceder
a la menor investigación social. Las organizaciones sociales se preocupan mucho
de esta cuestión, porque estiman que una averiguación profundizada, tanto
acerca del niño como de sus padres adoptivos, es necesaria para asegurar el
bienestar del niño y salvaguardar los intereses de la familia.
Aspectos legislativos
Poderes y responsabilidades
130. Una de las tareas principales de los poderes públicos, en lo que con
concierne a la categoría‘de niños que nos ocupa, es la de asegurar la aplica
ción de las medidas legislativas y administrativas adoptadas por la legislación
y otros órganos del Estado en escala nacional, regional y local. Pueden hacerlo
por medios de administración directa, inclusive la supervisión e inspección,
o por delegación de poderes. Encontramos ejemplos de repartición de poderes
‘ E/CN.5/224.
* La Comisión de asuntos sociales incluyó en su programa de trabajo un estudio sobre,
la tutela (E/1982 - E/CN.5/254, anexo III).
MEDIO FAMILIAR NORMAL 43
E l personal
136. Los organismos públicos y las obras privadas de los distintos países
emplean un numeroso personal para brindar servicio a los niños privados de
un medio familiar normal. Además, en ciertas regiones, los organismos pri
vados desempeñan un gran papel en materia de servicios de consulta y super
visión. Sin embargo, el personal empleado carece manifiestamente de for
mación. 2
137. La formación del personal de las instituciones para niños entra parti
cularmente en el cuadro del presente estudio. Los niños que no pueden criarse
en su familia tienen necesidad de una asistencia dada en un ambiente que
recuerde, tanto como sea posible, la vida familiar. Se reconoce generalmente
que el cuidado de niños es una especialización y que, en el interés y para la
felicidad del niño, es necesario disponer de un personal concienzudamente
elegido, especialmente formado en materia de protección de la infancia, y de
psicología. A consecuencia de la evolución que se produce actualmente en el
modo de asistencia a los niños privados de un medio familiar normal, parece
que una formación adecuada se impone más que nunca. En razón de la cre
ciente importancia que se da al alojamiento familiar y de la tendencia a re
servar cada vez más la asistencia en instituciones para las necesidades particu
lares o excepcionales, se ha hecho necesario ocuparse más en formar a la vez
el personal que se ocupa del alojamiento, y el de las instituciones.
138. En los países donde se ha establecido desde hace algunos años la cos
tumbre de confiar a los niños a familias guardianas, se ha reconocido general
mente que era preciso formar especialmente el personal encargado de elegir
a esas familias y vigilar a los niños. Esa formación suele estar asociada con otras
formas de enseñanza con vistas al servicio social. Puede constituir una materia
especial en un curso de servicio social, o bien ser objeto de un curso especial
suplementario.
139. El cuidado de los niños criados en instituciones de internación diur
nas y nocturnas es netamente una tarea seria y difícil. Aun cuando, con el tiempo,
fuere posible dar una asistencia más individual a la mayoría de los niños que
actualmente son objeto de tal colocación, habrá siempre quienes por razones
particulares, tendrán necesidad de ser alojados en instituciones. El personal
encargado de esos niños, por lo menos temporariamente, debe tener los cono
cimientos y cualidades personales que le permitan crear una atmósfera familiar
y brindar a cada niño, con comprensión, lo que necesita, teniendo en cuenta
su pasado y toda su personalidad.
140. Sólo algunos países han organizado una formación especial para el
personal de las instituciones, mientras que otros emplean personas que han re
cibido otro género de formación; o hasta favorecen cierta formación adquirida
en la práctica. Suiza organiza cursos especiales de “ monitores” . Francia y el
Reino Unido instituyeron recientemente cursos especiales de “ educadores”
para las personas empleadas en los hogares de niños. Un diploma oficial se-
otorga a las personas que han seguido esos cursos con éxito. Los mismos están
destinados esencialmente a las personas que desean prepararse para el cargo
de “ padre” o “ madre” en los hogares de niños, y los matrimonios pueden re
cibir esa formación. En todos esos cursos se dedica un lugar importante a la
salud mental de los niños. En los países donde existen escuelas maternales-
pensiones, se prevé generalmente una formación especial para el personal.
141. Nunca se insistirá lo suficiente sobre la importancia que presenta la>
formación del personal que se requiere para responder a las necesidades de-
MEDIO FAMILIAR NORMAL 45
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Pág.
P refacio ............................................................................................................. 5
I. Introducción..................... ................................................................ . 7
III. La privación del medio fam iliar normal: sus efectos sobre
el n iñ o ............................................... 18