You are on page 1of 3

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

PODER JUDICIAL

CIRCUITO JUDICIAL PENAL DEL ESTADO ZULIA

JUZGADO NOVENO DE CONTROL

192° y 143°

MARACAIBO, 21 DE JUNIO DE 2.005

ACTA DE AUDIENCIA ORAL

En el día de hoy, Martes (21) de Junio del año dos mil cinco (2.005), siendo las once de la tarde (11:00 a.m.),
día y hora fijados por este Tribunal de Control para llevarse a efecto la audiencia oral para oír a las partes, en
virtud de la solicitud hecha por los Abogados en Ejercicios JESUS VERGARA PEÑA Y RICHARD PORTILLO
TORRES, apoderados Judiciales de la victima ciudadana MERI ESPINA DE FUENMAYOR, de conformidad con
lo establecido en el Cuarto Aparte del Artículo 282 del Código Orgánico Procesal Penal. Verificada la presencia
de las partes se constató que se encuentran presentes el Abogado DOUGLAS VALLADARES, Fiscal Decimo
del Ministerio Público del Estado Zulia, la ciudadana MERI ESPINA DE FUENMAYOR, el Apoderado Judicial
Abogado JESUS VERGARA. Seguidamente este Tribual de Control procede a oír al fiscal del Ministerio Público,
quien expuso:” El ministerio público en este acto considera que es necesario presentar el acto conclusivo y
posteriormente resolver sobre la medida innominada solicitada.” Es todo. Seguidamente se le concede el
derecho de palabra al apoderado Judicial, Abogado JESUS VERGARA, quien expuso: “Ratifico en este acto la
solicitud presentada a este tribunal y a la fiscalia décima del ministerio público, invocando en este acto la
decisión de la sala constitucional Nº 333 de fecha 14 de marzo del año dos mil uno que faculta a este tribunal a
decretar medidas cautelares, así mismo el inmueble objeto de la protección cautelar invocada se encuentra
ocupado por unos ciudadanos que bajo el argumento de haberlo adquirido del ciudadano Fernando Hernando
Boscan, en fecha 16-05-00 bajo el Nº 29 protocolo 1º, Nº 24, permanece en dicho inmueble causándole

1
deterioro al mismo y existir en las actas plena prueba de la comisión del delito ya que consta en el expediente a
los folios 145 al 153 acusación presentada por la fiscalia veinticinco del ministerio público de fecha 31 de julio
del dos mil dos en contra del ciudadano Alfonso Atenogenes Hill Bozo, por la comisión del delito de Expedición
indebida de Certificaciones y documentos, previsto y sancionado en el artículo 75 de la derogada ley orgánica
de salvaguarda del patrimonio público, lo que evidencia claramente la comisión del delito y en consecuencia
debe ser objeto de protección cautelar por este tribunal . Es todo. Acto seguido el Tribunal de Control hace el
siguiente pronunciamiento: Vista la solicitud que hiciera el Fiscal del Ministerio Publico, y analizados los motivos
que sustentan dicha solicitud, así como oída la opinión del apoderado judicial de la victima, presente en esta
audiencia. Observa este sentenciador que efectivamente la investigación se inicia en fecha 26-12-00, y los
apoderados judiciales de la ciudadana Mery de Fuenmayor, solicita de conformidad tonel artículo 282 del
Código Orgánico Procesal Penal, a fin de solicitar Control Judicial Constitucional a fin de resolver Medida
Cautelar Innominada, de conformidad con lo establecido en el artículo 551 del mismo instrumento adjetivo
Penal, que consiste en poner en posesión a su mandante de un inmueble ubicado en el edificio Residencia
Lugano Piazza, apartamento 4C, ubicado en la calle 83B, Parroquia Santa Lucia de esta ciudad de Maracaibo.

Este sentido observa este sentenciador que efectivamente el artículo 551 del Código Orgánico Procesal Penal
remisión inmediata en las normas del Código de Procedimiento Civil relativa a la aplicación de medida Cautelar
relacionada con el aseguramiento de bienes muebles o inmuebles; Igualmente observa este sentenciador que
en fecha 24 de agosto del año 2001, este tribunal decreto Medida de Prohibición de enajenar y gravar sobre un
inmuebles ubicado en la calle 83B, Edificio Lugano Piazza, Angulo Noroeste, piso 4, apartamento 4C,
protocolizado ante la oficina subalterna del Primer Circuito de Registro del Municipio Maracaibo del Estado
Zulia, en fecha 16-04-77 anotado bajo el N° 05, tomo 08, protocolo sin numero, ello de conformidad con los
artículos 585 y 588, numeral 3 del Código de Procedimiento Civil.

Debe señalar este sentenciador con asesora severidad que el artículo 585 del Código de Procedimiento Civil,
establece las medidas que considere necesaria cuando exista riesgo manifiesta de que quede ilusoria la
ejecución del fallo y siempre que se denlos extremos del FUMUS BONNIS JURIS Y EL PERICULUM INMORA;
llamando poderosamente la actuación que ya este tribunal ha asegurado con medida cautelar innominada de
prohibición de enajenar y gravar sobre dicho inmueble , medida actual vigente y el decretar una nueva medida
innominada por el poder cautelar general de posesión anticipada sobre el inmueble constituiría un
adelantamiento sobre los resultados de un litigio; cogiendo este sentenciador el criterio sstenido en sentencia
pronunciada por la sala constitucional en fecha 02-12-03, bajo el N° 3306, en la que se dejo constancia de lo
siguiente:

“El Juez de la causa principal, al dictar el decreto de las medidas cautelares innominadas, objeto de
impugnación, en el particular primero, suspendió la realización de la asamblea general de accionistas de
CORPORACIÓN DIGITEL C.A., convocada para el 28 de mayo de 2003, y sobre este punto, la parte accionante
del amparo denuncia que con tal determinación se ésta violando el derecho de asociación previsto en el artículo
52 de la constitución.

Ahora bien, lo que se persigue y es objeto del juicio principal es la disolución y consecuente liquidación de
CORPORACIÓN DIGITEL, C.A, por lo que no estamos en presencia de una acción de nulidad o impugnación
de asamblea de una sociedad mercantil, al haber decretado, el juez presuntamente agraviante, la suspensión
de la celebración de una destinada a tratar sobre la reposición de capital o la disolución de dicha sociedad, con
esta intervención judicial no solo estamos en presencia de una medida impertinente e inadecuada, sino que la
misma es claramente ilegal, pues constituye una injerencia ilegitima en la autonomía de voluntad de las
sociedades de comercio. Además, con la referida medida cautelar se estaría adelantando pronunciamiento
sobre la decisión final.”

Asi mismo el magistrado Pedro Rondón Hazz, en sentencia de fecha 22-12-03 emitiendo voto salvado de dicha
sentencia manifestó entre otras cosas:

”...Por otro lado, con dicha medida no se cumple con la finalidad de una medida cautelar acordada en amparo,
esta es, evitar que el supuesto agravio constitucional se haga irreparable, primeramente lugar, por cuanto no se
observa que pudiese generarse un agravio de éste tipo, y, en segundo lugar, debido a que , prácticamente, con
dicha medida se obtiene una ejecución anticipada e irreversible de un posible fallo a favor de la recurrente, lo
cual no constituye la finalidad no alcancé de este tipo de medida.

2
La anterior afirmación no contradice en modo alguno, el voto salvado de quien suscribe respecto de la
posibilidad de que se acuerde medidas cautelares positivas o anticipativas, como única forma que se garantise
la eficacia del fallo (vid., voto salvado en decisión n° 3606/03, del 02.12).

Las medidas positivas y anticipativas se definen, “Aquellas que impoone la parte contraria la obligación de
realizar una conducta concreta y en principio provisional, necesaria para asegurar el objeto del litigio”(vid.
CALAMANDREI PIERO, Providencia Cautelares, Editorial, Bibliografica Argentina Buenos Aires, 1984, p. 55., y
CUENCA, HUMBERTO, Derecho Procesal Civil, Tomo II, Ediciones Biblioteca UCV, sexta ed.,Caracas, p. 182),
medidas cuyas procedencias no solo es aceptada, ademas, exigidas en el Derecho Procesal, porque es la única
forma de que se garanticé la eficacia del fallo cuando el objeto del proceso es una pretensión de condena a un
hacer o a un dar, en razón de los principios de instrumentales y homogeneidad de la pretensión cautelar
respecto de la pretensión principal.

Ademas, es requisito sine cua non de este tipo de medidas la reversibilidad, es decir, que para el caso de que
se desestime la pretensión principal la situación jurídica de la parte afectada con la medida pueda volver al
estado en que se encontraba para el momento cuando ésta fue acordada .

Criterios estos y opiniones doctrinarias que considera este juzgador ajustado a derecho para declarar sin lugar
la Medida Cautelar Innominada solicitado por la representante de la ciudadana Meri Espina de Fuenmayor, más
aún cuando ya este tribunal ha decretado Medida Cautelar que garantiza las resultas del proceso sin entrar
adelantar opinión sobre el desenlace de la causa. Asi se declara.

Por los fundamentos antes expuestos, este JUZGADO NOVENO DE CONTROL DEL CIRCUITO JUDICIAL
PENAL DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA, Administrando Justicia en nombre de la
República Bolivariana de Venezuela y por Autoridad de la Ley, y de conformidad con lo previsto en el Artículo
282 del Código Orgánico Procesal Penal, DECLARA SIN LUGAR LA MEDIDA CAUTELAR INNOMINADA
SOLICITADA por el Abogado Jesús Vergara, apoderado Judicial de la victima ciudadana Meri Espina de
Fuenmayor, Quedan notificadas las partes. Quedando asentado la decisión bajo el N° 1.145-05. Es Todo,
Terminó, Se Leyó y Conformes Firman:

EL JUEZ DE CONTROL,

You might also like