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Extractivismo minero y fractura sociometabólica

El caso de Minera Alumbrera Ltd., a veinte años de explotación

Mining extractivism and socio-metabolic fracture


The Minera Alumbrera Ltd. case: twenty years of exploitation

Horacio Machado Aráoz (Argentina)


Univ. Nacional de Catamarca CITCA-CONICET
machadoaterreno@arnet.com.ar

Leonardo Javier Rossi (Argentina)


CITCA - CONICET
leo.j.rossi@live.com.ar

Fecha de recepción: 30/06/2017


Fecha de aceptación: 9/08/2017

Resumen Abstract
E l siguiente texto ilustra los impactos ecoló-
gicos, culturales y socioproductivos en comu-
nidades rurales atravesadas por la explotación
T he following text explains the ecological,
cultural, social and productive impacts
on the communities where Minera Alumbrera
de Minera Alumbrera en Catamarca, a la luz del (Catamarca) do their extraction. We use the
concepto de fractura sociometabólica desarro- concept of sociometabolic rift developed early by
llado tempranamente por Marx y retomado Marx and theorized by several authors to analyze
por diversos autores para analizar y dar cuenta these impacts produces by the extractivism, a
de los efectos ecosistémicos y socioambientales systematic practice of capitalism.
inherentes a la dinámica de la acumulación
capitalista.

Palabras clave: Fractura sociometabólica, Keywords: Sociometabolic rift, megamining,


megaminería, extractivismo, territorio. extractivism, territory

Horacio Machado Aráoz y Leonardo Javier Rossi | Extractivismo minero y fractura sociometabólica
Dossier Minería | Artículos Convocatoria General [ 273 ]
A modo de introducción

L as problemáticas ecológicas como fuente de


conflictividad social y movilización política,
se han constituido como un rasgo característico
“naturaleza”. Más específicamente, mientras
que la ampliación de la frontera extractivista
intensificó las resistencias protagonizadas por
y cada vez más relevante del capitalismo tardío, organizaciones de poblaciones afectadas y mo-
en particular, desde la crisis del régimen de vimientos socioambientales, por el otro lado,
acumulación de posguerra en adelante. El drás- fuerzas políticas y gobiernos sostuvieron a raja-
tico proceso de reconfiguración neocolonial del tabla ese modelo de crecimiento. En especial,
mundo operado a través de la globalización neo- los gobiernos progresistas defendieron sus
liberal y la intensificación de las modalidades políticas extractivistas presentándolas como
de acumulación por despojo (Harvey, 2004) ha condición necesaria para “la superación de la
repercutido de manera agravada en la geografía pobreza” y la “inclusión social” de los sectores
económica y política latinoamericana, cuya sociales históricamente marginados. La concep-
riqueza en recursos naturales ha pasado a ser un ción ideológica de que había que optar entre la
factor indispensable para los proyectos intere- “preservación del medioambiente” o la “supera-
sados en “sostener” la tasa de crecimiento de la ción de la pobreza” fue rearticulada en este nuevo
economía mundial. escenario como clave de bóveda de las disputas
Un caso emblemático de este fenómeno lo políticas1. Un argumento, en realidad, neoliberal
constituye la abrupta expansión de la minería (la primacía del crecimiento económico, resol-
transnacional a gran escala en América Latina en verá, a largo plazo, los problemas sociales y
general y en Argentina en particular, a partir de las ecológicos)2 fue férreamente asumido por los
reformas impulsadas por el Banco Mundial en los gobiernos de la región, incluso aquellos que se
años 90. Instauradas por gobiernos neoliberales, reivindicaban como “postneoliberales” y/o “de
el apoyo explícito del Estado a la expansión de izquierda”.
la minería transnacional se ha sostenido férrea- A nuestro entender, estas disputas ideológico
mente en las décadas siguientes, aún en los países políticas expresan sintomáticamente la separa-
que experimentaron significativos cambios de ción ontológica que la Razón Moderna instituyó
gobierno, con el arribo de fuerzas progresistas y/o entre Sujeto y Naturaleza, como fundamento
de centroizquierda al poder estatal. En la primera epistémico y práctico de su modo de concebir,
década del nuevo milenio la región asistió a un conocer y relacionarse con el Mundo. El impera-
fuerte ciclo de crecimiento económico de la mano tivo del dominio, control y explotación (aunque sea
de la aceleración de la exportación de materias “racional”, ahora predicado como “sustentable”)
primas, en un contexto donde la demanda china de la Naturaleza como “condición” para la eman-
mantuvo los precios en alza. Ese contexto signó cipación humana, sigue reproduciendo esa idea
un derrotero de cambio radical en la matriz primordial de la Razón imperial, que concibió a la
productiva y socioterritorial en la región, carac- Tierra como “objeto colonial”, fundamento y base
terizada por una ruta de reprimarización, concen- de todas las conquistas (Machado Aráoz, 2010). El
tración, y extranjerización de sus economías. imaginario colonial desarrollista que atraviesa e
Paradójicamente, el proceso de reversión de las impregna las modu-laciones ideológicas tanto de
políticas de ajuste de los 90 y de mejoramiento los gobiernos de “derecha” y de “izquierda” en la
relativo de los indicadores socioeconómicos que región sigue reeditando esa gravosa dicotomía.
experimentaron amplios sectores sociales, en el En buena medida ese imaginario sigue resultan-
marco de la primera década del siglo XXI en la do eficaz para invisibilizar los procesos de de-
región, ha estado estructural y materialmente predación de las fuentes primarias de la vida,
sustentado en el fuerte dinamismo de las expor- como condición y efecto de la dinámica de la
taciones de materias primas, fenómeno que acumulación capitalista.
-como ha sido analizado- significó la recreación En este trabajo ofrecemos una mirada crítica
y el rediseño de las modalidades históricas de la que justamente apunta a correr el velo ideológico
dependencia estructural y la inserción subor-
dinada de la economía regional, ahora articulada 1
Entre los principales intelectuales de izquierda que han
a la voracidad industrial de China (Machado argumentado en este sentido incluimos a Atilio Borón, Emir
Aráoz, 2015b). Sader, Álvaro García Linera y Mónica Bruckmann. En un
Los debates y conflictos sociopolíticos emer- trabajo anterior (Machado Aráoz, 2015c) puede verse un
análisis crítico de sus posiciones.
gentes en este escenario parecieron intensificar 2
Nos referimos a los trabajos de Grossman y Krueger (1991;
el aparente antagonismo entre “sociedad” y 1995) sobre la curva ambiental de Kuznets.

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del “crecimiento” como amortiguación de los que la expansión del extractivismo (en este caso, el
efectos expropiatorios de la acumulación por extractivismo minero) tiene sobre las economías
despojo. Para ello recurrimos a la revisión del locales, en términos de acumulación por despojo
concepto de metabolismo social y de fractura y expropiación ecobiopolítica. Dar cuenta de estos
sociometabólica provisto originariamente por procesos nos parecen fundamentales para revisar
Marx para analizar los efectos e implicaciones y reorientar las búsquedas teórico políticas de
nuevos horizontes emancipatorios en el siglo XXI.

Desvincular(nos) de la Naturaleza, el origen

P ara afrontar en términos realistas los cruciales


problemas ecológicos del presente, creemos
imprescindible una revisión de los análisis críti-
especificidad de lo humano. Con ella Marx
refiere a los imprescindibles y continuos inter-
cambios energético materiales que vinculan a
cos en torno a la relación Sujeto-Naturaleza, tal los cuerpos humanos vivientes con el resto de
como ha sido hegemónicamente concebida por los seres y elementos de la biósfera, haciendo
la colonialidad del saber/poder moderno. de tal modo materialmente posible su sobrevi-
El materialismo histórico de Marx provee, a vencia. Dichos intercambios consisten en flujos
nuestro entender, una base ontológica apropiada energético materiales que circulan en dos gran-
para restablecer una concepción relacional- des direcciones, y cuyos vectores claves son el
dialéctica, allí donde ha primado erróneamente alimento y el trabajo: de un lado, hay un flujo fun-
una mirada dicotómica y, en última instancia, damental de agua, aire y alimento que va de la
antropocéntrica. Tierra a los cuerpos/poblaciones proveyendo los
El punto de partida de Marx para comprender nutrientes básicos de los que dependen. Del otro
la relación Naturaleza-Sociedad es el concepto lado, ello supone un correlativo flujo energético
de Metabolismo Social que, en definitiva, pone que va de los de los cuerpos-poblaciones a la
en el centro de los procesos de hominización/ Tierra en forma de trabajo social. Éste, como
humanización de la Naturaleza al proceso social energía inseparablemente física-psíquica-emo-
de trabajo. Pues, para Marx, “(L)la primera premisa cional, es la condición universal para la interacción
de toda la historia humana es la existencia de indi- metabólica entre el hombre y la naturaleza, la
viduos humanos vivos. El primer hecho a constatar es, perenne condición de la existencia humana impuesta
por tanto, la organización corpórea de esos individuos por la naturaleza (Marx, 1867).
y la relación por eso existente con el resto de la Se comprende así, en qué medida, para Marx,
naturaleza (Marx y Engels, 1974: 19). el metabolismo social es la condición ecológico-
Partir de los individuos humanos vivientes, política fundamental para la existencia de los
implica, ante todo, negar radicalmente toda individuos y las sociedades humanas. A través
separación entre Naturaleza y Sociedad y recha- de las nociones de metabolismo social y de trabajo,
zar todo antropocentrismo. O, si se prefiere, su- da cuenta, por un lado, del proceso de irrupción
pone partir de la afirmación básica de que el ser de lo humano en la historia de la materia (homi-
humano es naturaleza, tal como puede leerse en nización). La emergencia de lo humano como
los Manuscritos de 1844: tal dentro del proceso geo-histórico-biológico de
complejización de las formas de vida, acontece
La naturaleza es el cuerpo inorgánico del como producto el específico obrar humano
hombre; es decir, la naturaleza en cuanto no (trabajo) en la procuración de su subsistencia;
es el mismo cuerpo humano. Que el hombre es por medio de su propia práctica, que el ser
vive de la naturaleza quiere decir que la humano viviente va produciendo a sí mismo
naturaleza es su cuerpo, con el que debe como un ser socio-cultural, tecnológico y político,
mantenerse en un proceso constante, para como rasgos distintivos de la especie.
no morir. La afirmación de que la vida física Y esta misma categoría es la que toma como
y espiritual del hombre se halla entroncada punto de partida para el análisis de la especificidad
con la naturaleza no tiene más sentido que histórica del capitalismo, entendido éste como
el que la naturaleza se halla entroncada modo de producción que opera y emerge de una
consigo misma, y que el hombre es parte de drástica fractura sociometabólica (Marx, 1867;
la naturaleza. Foster, 2000).
Marx emplea la noción de fractura metabólica
Sobre esa base, Marx introduce la noción como categoría para dar cuenta de los procesos
de metabolismo social para dar cuenta de la históricos que se suscitaron en Europa en

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torno los masivos cercamientos de campos, la centrado en la desestructuración de sistemas
expulsión a gran escala de campesinos hacia las socioeconómicos feudales, y con la tala de bosques
ciudades, y el cambio de patrón productivo en como una de las principales degradaciones eco-
vastas áreas agrícolas. Su centro de atención es lógicas desatadas en tierras de lo que luego sería
la pérdida de nutrientes naturales en los suelos Europa, para posteriormente avanzar a territorios
ahora dedicados a abastecer las incipientes de ultramar. Como destaca Moore, las fronteras
urbes, y despojados de sus ciclos de reposición de mercantiles más significativas se basaron en la explo-
fertilidad en una proyección plausible, mediante tación del medio ambiente con los ejemplos colo-
una agricultura artesanal que va dejando paso a niales extractivos del azúcar, la minería de plata
la industrialización de la actividad. Esta fractura y oro, tabaco, entre otros (2003:24). El concepto
metabólica no sólo operaba en la división anta- de frontera mercantil nos permite ver con mayor
gónica entre ciudad y campo al interior europeo claridad la fractura metabólica operada entre la
sino que a un nivel más global, colonias enteras expansión del espacio capitalista y la producción
veían el robo de sus tierras, sus recursos y su suelo anclada territorialmente. El gran triunfo del capi-
en apoyo de la industrialización de los países talismo a lo largo de su derrotero ha sido evitar los
colonizadores (Foster, 2000: 253). costos de la degradación ecológica local y regional
En términos de Wallerstein, la economía-mundo mediante la reubicación de sus actividades de acu-
europea del siglo dieciséis se volvió irremediablemente mulación. En otros términos, el capitalismo es
capitalista (115). El cambio trascendental que constitutivamente un sistema global y globalizador
implica la creciente privatización de toda for- (Moore, 2003:43). La modernidad capitalista aparece
ma de trabajo y de aspectos básicos para el desa- como el resultado desde sus inicios de transacciones
rrollo de la vida, como el suelo, el alimento, la transcontinentales cuyo carácter verdaderamente glo-
vestimenta hasta entonces regidos bajo otras bal sólo comenzó con la conquista y la colonización de
lógicas de reproducción lleva a alertar ya en el las Américas (Coronil, 111).
siglo XIX sobre la imposibilidad física de ese En este recorrido se torna clave la noción de
proceso incesante de acumulación de capital. extractivismo que, como observamos a la luz de
Una mirada crítica de este proceso epistémico de esta síntesis histórica, es una práctica económico
largo y profundo alcance lleva a considerar que político cultural estructural del actual sistema-
la sociedad capitalista ha violado las condiciones mundo. El capitalismo nace de y se expande con
de sostenibilidad impuestas por la naturaleza y a través del extractivismo (Machado Aráoz,
(Foster, 252). 2015a:15); es el eje de la acumulación originaria o
Basado en este análisis y tomando en cuenta sus bien de la acumulación por desposesión (Harvey).
propias investigaciones históricas sobre el proceso El extractivismo es un profundo proceso de des-
de expansión colonial del capitalismo, Jason territorialización, transformaciones ecológicas,
Moore ha destacado que la incesante dinámica desplazamientos de poblaciones junto con sus
de la acumulación requiere como condición sine prácticas productivas y culturales que hacen
qua non, el continuo corrimiento de la frontera parte inescindible de este permanente proceso
mercantil, lo que va arrasando ecosistemas desde de reproducción del capital (Machado Aráoz
sus inicios hasta la actualidad. En un comienzo, 2013, 2015a).

Minería colonial, condición del capital

L a “acumulación primitiva” colonial, lejos de ser


una precondición para el desarrollo capitalista,
ha sido un elemento indispensable de su dinámica
económicas-culturales autóctonas. Tanto en la
etapa de colonización y conquista; la era liberal
y la conformación de las economías primario-
interna (Coronil, 111). Dentro de la larga historia exportadoras (fines del siglo XIX e inicios del XX);
colonial de América Latina el rol de la actividad como en la etapa neoliberal actual permanece la
minera ha tenido un lugar protagónico. Desde condición colonial con la explotación de recursos
la centralidad que encarnó la extracción de naturales como una de sus dinámicas centrales
plata y oro en la primera fase colonial, con el (Teubal y Palmisano).
cerro de Potosí como geografía destacada, hasta Para dimensionar el impacto que significó el
la actual etapa de multiplicación de proyectos territorio colonizado en la dinámica del capital
megamineros a lo largo de las montañas de internacional, vale observar que en el siglo XVI
sur y centro América, el extractivismo minero sólo en Potosí se producía el 74% de la producción
recrea una y otra vez el ciclo de fractura meta- mundial de plata (Id. 137). Potosí significó el
bólica: desplazamiento de poblaciones loca- ejemplo por excelencia del capitalismo moderno
les, afectación de los ciclos naturales en los temprano. En este territorio y sus alrededores,
territorios sacrificados, irrupción de las prácticas dinámicas culturales de raigambre agraria fueron

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arrasadas para dar paso a una de las grandes urbes geopolítica por medio de la cual el mundo se mun-
del mundo en ese entonces, en paralelo que miles dializó sino más bien la colonialidad es constitu-
y miles de cuerpos nativos eran extinguidos como tiva de las relaciones sociales y de poder del
mano de obra minera; las prácticas de la empresa sistema-mundo en sus más diferentes escalas (126).
colonial contaminaban cursos de agua como En términos de Gunder Frank, las relaciones
nunca antes; y poblados de regiones próximas metrópolis-satélites no se circunscriben sólo a la
eran incorporados a la dinámica capitalista escala imperial sino que permean y estructuran la
como abastecedores de alimentos reformulando propia vida económica, sociopolítica, y cultural de
los ciclos de producción e intercambio de comu- los países colonizados (148). Esa dinámica, como
nidades enteras (Moore, 2003). Destaca Moore se observó en el ejemplo fundante del Potosí, se
en La Naturaleza en la transición del feudalismo al recrea en los diversos territorios colonizados en
capitalismo: La división ciudad-campo del trabajo múltiples direcciones, convirtiendo a satélites de
que tomó forma con el auge de Potosí no sólo expresaba las metrópolis en centros al interior de la tierra
relaciones de poder económico y político. Expresaba colonial. Desde ese entonces a la actualidad se
igualmente las con-tradicciones metabólicas del reinventa la lógica imperial y el colonialismo
sistema que surgía (p. 27). interno en términos de dominación del capital
Ese corrimiento de la frontera minera hacia nacional e internacional, como en la ocupación
América implicaba el avance de otras fronte-ras al de los espacios territoriales y sociales de un país
interior del territorio americano: desde el altiplano a otro y al interior de un mismo país (González
hasta la costa, el proceso de anexión al capitalismo Casanova, 421,422).
significó desentramar procesos ecológicos, Desde una mirada actual, esta lógica (siempre
complementariedad en el abastecimiento alimen- en diálogo con el pasado colonial) configura re-
tario, tiempos agroproductivos con base en el giones enteras dependientes de una actividad
territorio habitado, destrucción de sistemas hi- económica implantada externamente que some-
dráulicos, hambre. La frontera minera alteró estos te no sólo con objetivos económicos sino en lo
sistemas en todas las zonas, apunta Moore (2003:29- político, cultural, social, psicológico y jurídico.
30). Las minas exigían grandes desplazamientos de Como nos plantea la teoría de la dependencia,
población y desarticulaban las unidades agrícolas en estos enclaves las decisiones del proyecto
comunitarias; no sólo extinguían vidas innumerables extractivista se toman en el exterior, mientras
a través del trabajo forzado, sino que además, indi- que los beneficios de la empresa apenas pasan en
rectamente, abatían sistemas colectivos de cultivo su flujo de circulación por el suelo donde tiene
(Galeano, 64). Potosí escenificó el consumo, la os- su origen sin tener realmente conexiones con la
tentación, la acumulación, la inversión, el cálculo, economía local. El capital inversor sí se vincula
el costo-beneficio y su revés: hambre, pobreza ex- con el poder central dependiente (nación-
trema, una pobreza inédita y desconocida hasta el provincia-municipio) para gestionar la concesión
momento” (Machado Aráoz, 2014:97). Genocidio- en negociaciones, siempre desligadas de la
ecocidio-epistemicidio son eslabones inseparables posibilidad de cualquier desarrollo autónomo
de la férrea cadena que marca históricamente el por parte de quienes habitan los territorios
principio de la minería colonial (Machado Aráoz, elegidos para la apropiación de recursos por
2014:111). Pero este principio colonizador no será parte del capital inversor (Cardoso y Faletto). A
sólo devastación y ruina sino que sentará bases decir de Milton Santos, las economías primario-
histórico culturales y geográficas mediante com- exportadoras significan una sucesiva pérdida de
plejos sistemas de violencia que moldearán los control en la organización espacial por parte de
territorios y los cuerpos disciplinados para su los Estados dependientes, donde mediante las
cíclica reproducción. inversiones del capital la demanda procedente del
Como destaca Porto Gonçalves (2009): el centro queda directa e inmediatamente marcadas
colonialismo no fue simplemente una configuración en la sociedad, en la economía y en el espacio (50).

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El reimpulso en clave neoliberal

D esde fines de la década del ochenta una nueva


avanzada minera atraviesa América Latina.
Esta vez, tras la crisis de sobreacumulación del
que atravesó la región en la década del 2000. Con
la irrupción creciente de gobiernos de centroiz-
quierda, nacionales-populares y progresistas el
capitalismo internacional iniciada en la década avance del extractivismo minero también vio
del setenta reaparece un voraz apetito del capital acrecentarse, triplicándose las exportaciones
trasnacional por los recursos naturales como de la actividad en otro lapso de ocho años. Fa-
medio de anclaje del capital excedente (Harvey, cilidades comerciales, fiscales, financieras, am-
2004). Harvey (2001) analiza cómo en el marco de bientales, y de las fuerzas de seguridad forman
una geografía imperial del capital, los espacios parte del apoyo estatal a la actividad que renovó
subalternizados son objetos de recursivos ciclos su impulso en los últimos quince años bajo el
de acumulación por despojo, mediante nuevos denominado consenso de los comoditties (Svampa)
corrimientos de la frontera del capital. o consenso de Beijing (Machado Aráoz, 2014),
En el marco neoliberal, se produce un despla- junto con otras actividades extractivas (granos,
zamiento en los mecanismos de regulación po- hidrocarburos, forestal). La megaminería se
lítica que tenderá a trastocar de forma radical las torna política de Estado por encima de cualquier
relaciones entre espacio y poder estatal. Opera matiz político-partidario.
entonces una disipación de la ilusión de compe- El reimpulso minero trae una vez más, bajo
tencia y control sobre el territorio por parte del Es- nuevos lenguajes y prácticas, el anclaje colonial
tado, en favor de una amplia autonomía del capital de la economía latinoamericana. Esta laxitud
que se traduce en la aprobación jurídica-política del Estado para con el capital extractivo se en-
a una diversidad de tecnologías utilizadas para cuentra amparado, nuevamente, en discursos
explotar la naturaleza, humana y no humana que transitan en torno a las categorías de
(Ciuffolini, 18-19). Consenso de Washington me- desarrollo, modernización y progreso. Otra vez,
diante, los países de la región dieron paso a la la razón colonial-moderna-eurocentrada permea
liberalización y des-re-regulación de la economía y modela el andamiaje institucional que soporta
en pos de incentivar las inversiones extranjeras estas prácticas de expoliación. En esta línea,
directas, según marcaban las pautas de los como nos plantea Antonelli, con el marco legal y
organismos económicos internacionales. Tres la decisión política sólo no alcanza:
fueron los pilares centrales de estos lineamientos:
Plena seguridad jurídica sobre la propiedad de Como toda colonización, la megaminería
las concesiones mineras (preeminencia de la trasnacional requiere no sólo de la legalidad
propiedad minera sobre los derechos superfi- de las normativas […] sino una lengua, una
ciarios; total garantía legal y judicial de las inver- episteme, una genealogía, iconografías y re-
siones extranjeras); Grandes beneficios fiscales tóricas, su ética y su filantropía, sus afectos
y comerciales (estabilidad jurídica por períodos públicos y pasiones políticamente fuertes, y
de entre 25 y 30 años; eliminación de tasas de una profusión de discursos e instituciones
importación y exportación; desgravación de de legitimación (100).
impuestos internos y de regalías mineras o su
limitación a tasas insignificantes; libre dispo- La naturaleza cosificada, quebrada en su
nibilidad de divisas y desregulación total sobre la vínculo metabólico del ser humano, tiene como
remisión de utilidades); Una legislación y sistema destino inevitable ser puesta a disposición del
de controles ambientales extremadamente laxos capital mega-minero sin reparar en la historia
(Machado Aráoz, 2011, 159) etnosocioecológica del territorio a sacrificar. No
Argentina dio paso a la Ley de Inversiones se contemplan los millones de litros de agua que
Mineras (24.196/93) que habilitó la privatización se utilicen en tiempo récord en zonas semiáridas o
del subsuelo, en sintonía con lo que ocurría por los riesgos de contaminación con metales pesados
la misma época en países como México, Ecua-dor, ni el quiebre de las prácticas agrícolas que serán
Bolivia, Brasil y Perú. En ese escenario se desató desplazadas de esa geografía. Podemos pensar
un boom minero que se tradujo en un crecimiento esta nueva arremetida del capital extractivista
de las inversiones en exploración medidas en en términos de fascismo territorial (Sousa Santos,
millones de dólares de 400 por ciento en ocho 2010:26), enclaves donde el capital trasnacional
años en Latinoamérica. regula socialmente a los habitantes del territorio
La expansión de la megaminería no detuvo sin su participación y contra sus intereses, previa
su marcha pese al cambio de escenario político neutralización y/o cooptación del Estado, cuando

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no de forma violenta, justamente en naciones que Las múltiples territorialidades (Porto Gonçalves,
ya están marcadas por la huella colonial europea. 2003; 2009; 2016) campesinas, indígenas, de
Bajo diferentes formas, la tierra originaria tomada pequeños agricultores con sus prácticas, sabe-
como prerrogativa de conquista y la subsecuente res e historias son tensionadas, cuando no eli-
‘privatización’ de las colonias se encuentran presentes minadas, por esta territorialidad megaminera,
en la reproducción del fascismo territorial (Ibíd.). discurso y práctica extractiva, que tiene como
El desarrollo de la minería metalífera a gran escala permanente línea de llegada el desarrollo, donde
puede pensarse como un ejemplo paradigmático en toda innovación tecnológica producida en el contexto
el cual una visión de la territorialidad se presenta de la modernidad se ve necesariamente como avance,
como excluyente de las existentes (o potencialmente independientemente de sus motivaciones, impactos
existentes) (Svampa, Bottaro y Sola Álvarez, 43). y consecuencias (Machado Aráoz, 2014:57).

Catamarca, explosiones “socio-metabólicas”*

E n3 explotación desde 1997, Minera Alumbrera


es un caso testigo de la avanzada neoliberal
extractivista de los noventa. Actualmente la
Según datos de la empresa, se extrae un pro-
medio anual de 400.000 toneladas de concen-
trado que contienen aproximadamente 100.000
mayoría de su paquete accionario está en manos toneladas de cobre, 33.000 onzas de oro doré, y
de la suiza Glencore, mientras que las empresas 300.000 onzas troy de oro4. Para desarrollar este
canadienses Goldcorp y Yamana Gold cuentan proceso, Minera Alumbrera obtuvo del gobierno
con 37,5% y 12,5% cada una. La empresa tiene una de Catamarca un permiso de extracción de 1.200
capacidad de explotación anual de 120 millones litros por segundo (unos 100 millones de litros
de toneladas métricas de material rocoso a partir diarios) de la reserva de agua fósil del Campo
del cual extrae un concentrado polimetálico, del Arenal. Con cada tonelada de concentrado
cuyos principales motivos extractivos declarados de cobre se exportan 200.000 litros de agua en
son cobre, oro y molibdeno. una región históricamente agraria y con un
En el departamento Belén se encuentra la clima semiárido, con un régimen de lluvias de
mina, el tajo abierto, que presenta una dimensión entre 150 y 300 milímetros anuales. El producto
aproximada de 2.000 metros de diámetro por 800 bruto, mezclado con ácidos, es transportado por
metros de profundidad, conformado en escalones un mineraloducto hasta Tucumán, en el que se
de 17 metros de altura; el dique de cola, con una registraron al menos cuatro derrames, entre
superficie de 2,5 kilómetros de extensión y unos 2006 y 20085.
treinta metros de altura, donde se depositan los La mera visualización a grandes rasgos de la
residuos del procesamiento minero, y donde matriz de insumo-producto de la explotación,
la propia empresa reconoció filtraciones a las grafica en forma contundente la amputación
napas subterráneas. ecológica inherente al modelo extractivo: una
remoción física de un ecosistema, que destruye
no sólo el entramado biológico, como las especies
3
La producción, procesamiento y análisis de datos en base vivas, sino también su basamento material con
a los cuales elaboramos esta sección es el resultado de un nula capacidad de reposición en escala de vida
largo proceso de investigación empírica iniciado hace humana (Gudynas, 54).
diez años, mediante el seguimiento del proceso extractivo Ahora bien, puede decirse que esta amputa-ción
minero en la provincia. A la información recopilada en
ese proceso, hemos incorporado un trabajo de campo
no es sólo ecológica, sino también socio-económica
realizado durante los meses de marzo a junio de 2016 y pues introduce una factura de dis-continuidad
entrevistas a informantes claves (técnicos de organismos radical entre esta explotación y la dinámica
públicos, agentes de INTA y de otras reparticiones estatales socioproductiva y territorial, propia de la economía
ligadas a la promoción de las actividades productivas, pe- local preexistente. Pues, como tal, nos hallamos
queños y medianos productores y líderes campesinos).
El proceso metodológico se ha complementado también
frente a una economía básicamente agroganadera
con la investigación documental y estadística relevada en y artesanal, articu-lada a los flujos comerciales
organismos público (dirección de estadísticas provincial,
INDEC, Ministerio de la Producción de la Provincia de 4
En www.alumbrera.com.ar (última visita 22/06/2017)
Catamarca, Ministerio de Economía de la Nación, Secretaría 5
Más datos sobre el impacto de Minera Alumbrera pueden
de Minería de la Nación). encontrarse en Machado Aráoz (2009) y Aranda (2015).

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del mercado inter-no. Dentro de la estructura infraestructura y capacidades productivas locales
agraria, se puede distinguir un pequeño sector son prácticamente desechadas como potenciales
diferenciado de mediados y grandes productores “proveedores” de la empresa, tal como diversos
agrarios especializados (nogal, especies) que estudios han podido constatar en otras regiones
cuentan con las mayores dotaciones de agua, mineras (Culverwell, 2001; Chaparro, 2001;
tierra, tecnología mecanizada y crédito; y, por Kuramoto, 2000).
otro lado, un amplio sector campesino-indígena La empresa minera ni siquiera es una gran
con mucho menores extensiones de tierra y demandante de mano de obra local. Pese a que
dificultades de acceso al agua de riego, pero que en la expectativa de generación de empleos ha sido
esas condiciones sostienen prácticas productivas recurrentemente esgrimida para inducir la legi-
más diversificadas, que combinan tanto la cría timación social de la explotación, es sabido que
de ganado (carne y lana) como la transformación este tipo de explotaciones es marcadamente
artesanal de la lana y la elaboración de tejidos , con capital-intensiva y donde la mayor parte de
diferentes cultivos agrícolas para el autoconsumo las franjas técnicas y gerenciales de puestos de
y el abastecimiento alimentario local (maíz, trabajo se cubren con personal trasnaciona-
trigo, zapallos, papas, hortalizas, etc.). En el de- lizado. Según reconoce un informe del Ministerio
partamento Belén, donde se haya emplazada la de Hacienda de la Nación (2016),
zona de mina, la actividad ganadera y textil fue
históricamente la base de la economía local y es la creación de puestos de trabajo ha sido
la que se ha erigido como su marca identitaria relativamente baja en relación al valor de
tradicional, conociéndose el departamento como la producción generado, hecho que, según
cuna del poncho. Actualmente cuenta con más de señala esta cartera, tendría correspondencia
65 mil camélidos; más de 50 mil caprinos y más con la tendencia mundial de la gran minería
de mil ovinos. Los sistemas productores de carne y a incrementar la productividad en base a un
fibra se definen como extensivos, trashumantes o uso intensivo de capital.
sedentarios, de subsistencia, con baja adopción de
tecnología y basados en el uso del recurso forrajero Asimismo, es considerada por la OIT una ac-
natural. Asimismo, la base de subsistencia de tividad de alto riesgo para la seguridad y la salud de
las economías domésticas se complementa con los trabajadores7. Durante los años de operación,
ingresos extraprediales provenientes principal- Minera Alumbrera ha ocupado entre 800 y 1200
mente del sector púbico: empleos públicos, munici- trabajadores directos, y entre 700 y 1000 puestos de
pales, planes sociales, jubilaciones y pensiones6. trabajo vía contratistas, en tanto que la ocupación
En este escenario socioterritorial y productivo, de trabajadores locales ha oscilado entre 100 y
las características y condiciones tecnológicas, 300, siendo, en su gran mayoría, personal de lim-
económicas, comerciales, financieras e incluso pieza y servicios de mantenimiento, operarios
jurídicas de la actividad megaminera contrastan de maquinarias y camiones, transportistas. De
fuertemente como una explotación absolutamente acuerdo a un Informe del Ministerio de Economía
exótica y sin mayores posibilidades o condiciones de la Nación, el total de puestos de trabajo gene-
de articularse de modo virtuoso/productivo a los rados por Alumbrera representa el 1,9 % del total
entramados y flujos de la economía local. Todas las de empleados de la provincia; con lo cual, la pro-
características y modalidades sociotecnológicas porción de trabajadores locales que trabajan en la
de la explotación minera la configuran de modo mina, constituye un porcentaje inferior al 0,5%8.
emblemático como una típica economía de enclave: La baja incidencia a nivel de generación de
más allá de los requerimientos (imprescindibles) empleos y de dinamización de otros sectores
de los bienes ecológicos que usufructúa y extrae productivos de la economía local, contrasta no-
(no sólo las reservas minerales, sino también los tablemente con el resto de los indicadores de la
bienes hídricos, energéticos y la capacidad de actividad, por caso, los volúmenes y valores ex-
sumidero de los ecosistemas locales), la empre- portados. En función de la operación de Alumbrera,
sa es absolutamente prescindente para su opera- la provincia representa el 100% del cobre y el
ción de otros factores de producción o subsiste- molibdeno que se extrae y se exporta en el país;
mas productivos locales. La gran mayoría de además, el sector minero da cuenta del 94,5% del
insumos (desde los aditivos químicos hasta el total de exportaciones provinciales, teniendo
catering del personal) así como las maquinarias, como principales destinos Alemania, Japón y Es-
equipamiento y servicios especializados es sumi- paña. En 2014, el 91,5% del valor de la producción
nistrada por conglomerados de proveedores tras- minera metalífera provincial correspondió a
nacionalizados (Buitelaar, 2001). No sólo por una los minerales que se extraen en conjunto en La
cuestión de “estándares de calidad” sino sobre todo Alumbrera (cobre, 40,6%; oro, 29,1% y molibdeno,
por la escala y magnitud de los requerimientos, la 21,7%, respectivamente). Además de Alumbrera,
6
Aportes al Desarrollo Territorial de la Puna y Valles Áridos 7
Informes productivos provinciales Catamarca, año 1, N°11.
de Antofagasta de la Sierra, Belén y Santa María-Catamarca Diciembre de 2016. Ministerio de Hacienda de la Nación.
(INTA cartera 2013-2019). 8
Íbidem.

[ 280 ] Horacio Machado Aráoz y Leonardo Javier Rossi | Extractivismo minero y fractura sociometabólica
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las operaciones de FMC Lithium (una empresa Vale decir que el enclave constituye una inte-
de capitales norteamericanos que opera en el gración subordinada, parcial y selectiva del po-
Salar del Hombre Muerto) hacen de provincia, tencial productivo de un territorio, pero que
la principal productora de litio y diatomita a involucra una transformación dependiente
nivel nacional (en 2014, produjo el 97,6% del total (subalternización) del conjunto de la sociedad
nacional de litio y el 72,6% de diatomita). donde dicho enclave se enquista. En el caso que
Estos datos e indicadores generales de la ex- nos ocupa de Minera Alumbrera, la dinámica de
plotación minera la delinean como un caso subsunción de la sociedad local en su conjunto
típico de economía de enclave. Un informe del se ha materializado justamente a través de
Ministerio de Producción de la Provincia señala la mediación del sistema político (el Estado
lacónicamente: provincial y municipal), que -como parte de los
dispositivos de amortiguamiento de la conflic-
la actividad extractiva metalífera, con el tividad social que irrumpieron en torno a la
cobre como principal producto, se consti- explotación10-, avanzó en un derrotero de expan-
tuyó en el principal factor para el creci- sión fiscal, tanto a través de políticas sociales
miento de los indicadores macroeconó- como del empleo público.
micos provinciales. No obstante ello, su Tal como señalaran Cardoso y Faletto, los
funcionamiento, con características de en- capitales centrales precisan de la articulación
clave, le impidió convertirse en motor de la con el poder político local, que controla los
economía provincial9. mecanismos jurídico-políticos de otorgamiento
de las concesiones de explotación; y también,
Ahora bien, conviene precisar que el concepto (agregamos) que asumen el rol de garantizar
de enclave no hace sólo referencia a la absoluta la gobernabilidad y la seguridad jurídica de las
discontinuidad de una actividad respecto del inversiones. En ese cuadro, interpretamos el pro-
resto de la economía en cuestión, sino más bien ceso expansivo que muestra el sector público
a una desarticulación que, lejos de ser inocua provincial a lo largo de las dos últimas décadas.
para el resto de los sectores productivos, induce En efecto, en particular, el empleo público ha
al conjunto hacia una dinámica de integración sido una variable que nuestra una tasa de creci-
subordinada. Los efectos del enclave, más que miento continua y que se ha acelerado aún más
con el desacoplamiento, tienen que ver con la dis- durante la última década: con un promedio de
locación; más precisamente, la dislocación de los 34% en los noventa, y llegó a alcanzar un 53%
ejes y los centros de control y toma de decisiones que del total de asalariados en la provincia durante
rigen el funcionamiento de la economía local. En la primera década del 2000. En el presente, en
su análisis clásico, Cardoso y Faletto (1969) definen contraste con los exiguos puestos de trabajo de
el enclave en función de la pérdida del comando Alumbrera, y frente a un total de 33.511 empleos
interno sobre el funcionamiento general de la privados, la cantidad de empleados en el sector
economía local; su desarrollo económico pasa a público asciende a 57.222 empleos, vale decir, el
expresar el dinamismo de las economías centrales 63% del total (2016).
(2007:48). En una economía de enclave, la articu- En tanto y en cuanto la expansión del sector
lación entre la sociedad local y el mercado público (por tanto de la economía local) depende
mundial adopta estas características: del volumen de la renta extractivista que el Esta-
do logra apropiarse, la dinámica general de la
◊ la producción es una prolongación directa de economía provincial (su ritmo de crecimiento
las economías centrales en un doble sentido: y/o sus niveles de contracción) pasan a depender
puesto que el control de las decisiones de in- en general de los flujos y comportamientos de
versión depende directamente del exterior, y los capitales extractivistas centrales. En este
porque los beneficios generados por el capital sentido, nos parece teórica y empíricamente
(impuestos y salarios) apenas “pasan” en su flujo relevante conectar los efectos del enclave con
de circulación por la nación dependiente, yendo el concepto de fractura sociometabólica. Como se
a incrementar la masa de capital disponible dijo, el efecto principal y sistémico del enclave es
para inversiones de la economía central. producir la dislocación del comando económico
◊ No existen realmente conexiones con la eco- de una sociedad; entonces tenemos la idea de
nomía local -con el sector de subsistencia o fractura sociometabólica como dislocación. Pero
con el sector agrícola vinculado al mercado también, atendiendo a los cambios socioecoló-
interno-, pero sí con la sociedad dependiente, gicos, territoriales y culturales que se derivan
a través de canales como el sistema de poder, de esta dislocación, cabría entender la fractura
porque ella define las condiciones de la con- sociometabólica como un proceso de deterioro
cesión. (2007: 53. Resaltado nuestro).
10
Sobre la dinámica de conflictividad social desencadenada
9
Plan de Desarrollo Productivo Provincial, Dirección Provincial en torno a Minera Alumbrera y el ciclo de protestas, nos
de Programación del Desarrollo (DPPD), Ministerio de la remitimos a lo ya desarrollado en otros trabajos (Machado
Producción, Gobierno de Catamarca. (2005). Aráoz, 2009; 2012; Ponce, Machado Aráoz y Perea, 2012).

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Dossier Minería | Artículos Convocatoria General [ 281 ]
sistémico y desplazamiento estructural de las prác- Entrevistado 1: Hay un cambio muy grande dado por
ticas y capacidades productivas endógenas de los el cambio de productores a trabajadores con sueldo
territorios/poblaciones locales. fijo. Ese fue un cambio fuerte. Mucha gente pasa del
Una vía clave donde se manifiesta esa fractura campo a tener un sueldo municipal o provincial, y
sociometabólica como erosión del tejido produc- se ha generado una deserción im-portante en áreas
tivo local, es a través de la afectación en la can- productivas.
tidad y calidad de los bienes ecosistémicos de los Entrevistado 3: Muchos productores tienen otra entrada
que dependen tanto el emplazamiento extracti- de dinero, no sólo de la producción, con contratos de
vista como las economías locales; en este caso, el municipios, empleados municipales, algún plan o pro-
factor hídrico se convierte en una pieza clave de grama que los asiste. Son muy pocos los productores
dicha “fractura”. Los requerimientos de agua de que viven específicamente de su actividad. De alguna
la explotación minera operan el desplazamiento forma hay una gran dependencia, y eso es más fuerte
directo de economías domésticas cuyas activi- en los municipios donde las regalías mineras son más
dades agrícolas son completamente dependientes fuertes.
del riego, tal como se ha visto en el valle de
Santa María (Machado Aráoz, 2009). Asimismo Como se observa en estos relatos, el proceso
la degradación de los pastizales naturales en la de monetización opera acentuando el desplaza-
zona de mina, ha provocado la pérdida de impor- miento de la economía local tradicional orga-
tantes volúmenes de forraje, incidiendo en una nizada fundamentalmente en base a producir
significativa disminución de las actividades ga- bienes de uso para autoconsumo o circulación
naderas, e incluso, el despoblamiento de pues- interna. La mayor dotación de dinero (operada
tos y localidades eminentemente pastoriles/ circunstancial y temporalmente por la expansión
artesanales (los casos más paradigmáticos del sector público) propende estructuralmente
son los poblados ya prácticamente extintos de al desplazamiento desde una economía produc-
Amanao y Vis Vis, en el departamento Belén). tiva, de autoabastecimiento, hacia una economía
La degradación y pérdida de las capacidades mercantil-asistencializada. Las mejoras en infra-
productivas también ha sido notable en los estructura vial y en los medios de comunicación,
sectores agrícolas de los departamentos Belén hacen más accesibles la introducción de mercan-
y Andalgalá. Respecto al primero, de acuerdo a cías externas y producen cambios significativos
los registros de la Dirección Provincial de Rie- en los patrones de consumo que, en general, los
go desde fines de los 90 hasta la actualidad, la hacen más dependientes del abastecimiento
superficie cultivada en el departamento se ha externo.
reducido en 2600 hectáreas. En el caso de An- El aumento del empleo público y la localización
dalgalá, de acuerdo a las estimaciones de la de las obras públicas y las inversiones en infra-
Estación Experimental del INTA, la superficie estructura y servicios (educación, salud, carrete-
cultivada anual ha descendido de 1700 hectáreas ras, etc.) dinamizó un pronunciado proceso de
a principios del 2000 a 800 hectáreas en los desplazamiento de la población rural hacia los
últimos años; en tanto que también se verifica un centros urbanizados de las cabeceras departa-
fuerte descenso de las unidades productivas, que mentales; y económicamente ello se tra-dujo en el
pasaron de 800 a 450 EAPS. pasaje de una economía agroganadera hacia otra
En términos generales, avanzando en la expli- economía centrada en actividades comerciales y
citación empírico-analítica de la noción de frac- de servicios (construcción); sectores cuyo dinamis-
tura sociometabólica cabría señalar que la misma mo es, en definitiva, dependientes de los flujos mo-
da cuenta de una profunda alteración de las netarios de sector público.
prácticas productivas, de las configuraciones terri- Uno de los aspectos especialmente críticos de
toriales y de los entramados sociocomunitarios y los cambios en las pautas de consumo, es el de
culturales en general que hacen a las condiciones los patrones alimentarios. Como señala una de
estructurales de la productividad de la economía las entrevistadas:
local. En el caso que estamos analizando, cabe
pensar que la erosión del tejido productivo local Entrevistado 1: Se ve claramente un cambio de patrón
obedece no sólo a la degradación ecológica y al alimentario. Pudimos ver cambios en la dieta en el
menor acceso a los bienes naturales de los que úl-timo tiempo. Tuvo que ver con políticas públicas,
dependen las actividades agropecuarias, sino como el Programa de Igualdad de Oportunidades.
también a los trastornos que el enclave pro- Y (además) en la zona de Belén hubo un cambio muy
duce sobre las expectativas y los imaginarios grande en infraestructura y comunicaciones a partir de
sociales. Esos trastornos tienen que ver con una eso (la llegada de la minería); en la ciudad se asientan
devaluación generalizada de la economía de hoteles, restaurantes, un montón de actividades que
valores de uso frente a la dinámica de los valores hacen al movimiento actual de la ciudad, y hacen a ese
de cambio y a cambios territoriales inducidos cambio de introducir más fácil y más rápido alimentos,
por la dinámica del empleo y la disponibilidad y a la pérdida de cuestiones culturales. Todavía se ve
monetaria. Diversos entrevistados dan cuenta de como un beneficio este desarrollo. Es gente que no te-
estos fenómenos: nía vinculación con productos más prácticos, de fácil

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preparación. Y hay zonas que estaban totalmente En definitiva, el caso de la radicación del em-
aisladas hace veinte años, ahora tienen carretera, prendimiento extractivista Minera Alumbrera
internet, movimiento de transporte, eso hizo más fácil muestra emblemáticamente cómo la expansión
que se incorporaran en la zona alimentos que antes del capital pone en acción una serie de dispositivos
no estaban. Se ve aumento de productos refinados y que desplazan una actividad económico-político-
aumento de bebidas azucaradas, eso principalmente lo cultural (agricultura) que hace a la identidad
vemos en los niños. En general también comenzás a ver de una comunidad. Lo hace de forma directa
pérdida de productos tradicionales, lo que hace esperar en la competencia por los bienes comunes, y de
que esos espacios lo ganen otros productos importados. forma indirecta mediante la introducción de
dinámicas económicas (planes sociales, empleo
La desvalorización de los productos locales y formal, comercio de alimentos procesados) que
de las prácticas productivas locales, el acceso a reorganizan los sistemas de vida. Como nos plan-
mayores niveles de monetización vía empleos tea la noción de enclave, casi como un mandato,
“urbanos” (con altos costos de oportunidad respec- la empresa extranjera no emprende vínculo al-
to de las actividades agrícolas y ganaderas) incide guno con la agricultura de subsistencia local,
fuertemente en las expectativas económicas y orientada a los circuitos endógenos. La viabilidad
laborales, sobre todo de los jóvenes. Al respecto, de ésta implicaría indefectiblemente un límite al
uno de los testimonios tomados en el trabajo de avance del capital extractivista. El vaciamiento
campo señala: del campo de los agricultores tradicionales es
condición y consecuencia de la acumulación por
Entrevistado 2: Los últimos talleres pusieron como pro- desposesión; es parte constitutiva de la fractura
blema la migración de los jóvenes, que ya no quieren socio-metabólica desatada por el avance de la
trabajar en el campo. Un trabajo de diez horas en el frontera mercantil.
campo no reditúa lo que seis en el empleo público. Va La trayectoria histórica de los cambios sociote-
quedando gente de edad más elevada que hay tareas que rritoriales y productivos de las economías loca-
ya no puede realizar, y se va cortando la producción. les permite observar cómo, a medida que se inten-
sificaron las actividades extractivas a gran escala
Por último, sin la pretensión de un análisis en la provincia (minería y agronegocios) creció la
exhaustivo, conectando los análisis de los propios dependencia de vastos sectores de la población
pobladores con los desarrollos clásicos sobre la del empleo público y/o de diversos planes
productividad de los tejidos comunitarios (nos asistenciales desencadenando un fuerte proceso
referimos a los trabajos de Marcel Mauss y Karl de concentración de la estructura patrimonial,
Polanyi), cabe mencionar que otro elemento de productiva y comercial, cuya contracara ‘social’
erosión de las capacidades productivas loca-les, es el creciente desplazamiento (expropiación) de
pasa o tiene que ver con el impacto de la con- los segmentos poblacionales locales más débiles.
flictividad social ocasionada en torno a la acepta-
ción o rechazo de la explotación minera. En este
caso, la fractura sociometabólica se expresa como Entrevistado 2: Hay un lugar donde hay tensión, inconvenientes
fractura de los lazos sociales y comunitarios de serios de tensiones sociales que es Andalgalá. Hubo un freno de
la convivencia colectiva. Varios de lo/as entre- esa tensión debido a que no se dio aval a una nueva empresa
vistados lo señalan como el impacto más grave de para continuar con la línea de lo que venía haciendo minera La
Alumbrera. Es un motivo de alerta; se está pendiente de los mo-
la minería11. vimientos que hacen las empresas para ver qué acciones tomar.
Entrevistado 3: Genera una división muy fuerte entre las co-
11
Entrevistado 1: En talleres donde vamos a recabar informa- munidades, totalmente partidas; familias divididas por la
ción de los productores, en Andalgalá el tema más fuerte es el te- “minería sí” o “minería no”. Eso caló muy profundo. Cuando
ma de la minería. Ha generado una división social importante, hubo represión, policías tenían que reprimir a sus familiares
los promineros y los anti-mineros. Eso es muy fuerte ahí. Es la pro- que estaban en contra de la minería. Hay técnicos (de desarrollo
blemática más grande en los talleres. Todo queda relegado a eso. rural) que han tenido problemas por cuestionar la minería.

Horacio Machado Aráoz y Leonardo Javier Rossi | Extractivismo minero y fractura sociometabólica
Dossier Minería | Artículos Convocatoria General [ 283 ]
Las múltiples heridas de la fractura sociometabólica

E n el escenario analizado pudimos apreciar


cómo una compleja trama de operaciones se
pone en juego a partir del avance de la frontera
de expropiación ecobiopolítica para explicitar cómo
opera un sistema integral de dominio, control y dis-
posición que se ejerce sobre el complejo de la vida so-
del capital megaminero: la promoción de sujetos cial en general (Machado Aráoz, 2013, 140), desde
sujetados a la dinámica del valor de cambio, la sus expresiones materiales más elementales como
negación de discursos “oficiales” sobre la agricul- el agua, la tierra y el alimento hasta las diversas
tura campesina como modo de vida posible -que dinámicas sociocomunitarias y culturales. Si a
redunda en falta de apoyo estructural a esas eco- nivel macro la actual fase del extractivismo se
nomías-, el avance de la frontera urbana, y la com- caracteriza por la degradación extrema de las
petencia por los bienes comunes (agua-tierra- condiciones biofísicas de existencia de la especie
montañas) se traducen en un despoblamiento humana; a nivel microbiopolítico la producción
silencioso del campo, de los agricultores y de sus capitalista está signada por la configuración de sub-
actividades tradicionales. El ser agricultor, a fin jetividades crecientemente desvinculadas y enajena-
de cuentas, es puesto en tela de juicio como hori- das de los flujos que nos sostienen como cuerpos
zonte de existencia posible en este territorio de humanos vivientes” (Machado Aráoz, 2016:224).
sacrificio. Ese desplazamiento, si bien implica la En otros términos, esta “hiperindustrialización/
migración campo-ciudad, significa una profunda tecnificación/artificialización de la vida (patrones
transformación del territorio, donde se borran de consumo) de unas economías/sociedades de-
un amplio espectro de saberes y prácticas trans- manda y requiere de la híper-reprimarización
mitidos por generaciones. Ni más ni menos se de otras”. La megaminería materializa la expro-
pierde un potente entramado cultural vinculado piación geográfica (Machado Aráoz, 2011) de un
a producción, intercambio y consumo autónomo “occidente” que aún corre su frontera mercantil en
de alimentos, y al necesario uso sostenible de la base a la extinción, una y otra vez, de las culturas-
naturaleza. economías-territorialidades otras negadas, allí
Estos relatos nos permiten una primera aproxi- donde se asienta el capital extractivo. Expropia-
mación a cuestiones a profundizar en torno a las ción que en su dimensión biopolítica expropia los
transformaciones ecosocioterritoriales que la medios que nos hacen cuerpos: el agua, el aire, el suelo,
fractura sociometabólica, impulsada por la mega- en suma, el territorio (Id. 172).
minería, implica en esta región catamarqueña. Esta dinámica necroeconómica del capital se
Como observamos, aparecen a primera vista asienta principalmente en la sistemática depre-
cambios en las dinámicas alimentarias, en las dación sobre las agroculturas (Machado Aráoz y
prácticas económicas, en los valores sociales, y Paz, 151), siendo éstas sabedoras de los ciclos de
las relaciones comunales, tensionadas a niveles la naturaleza, entendedoras del territorio como
que desfiguran la cotidianeidad y la historia espacio de vida y para la vida, defensoras de la
local. Los testimonios expresan como factor autonomía alimentaria moldeada a lo largo de
común las tensiones entre tiempos distintos. Re- generaciones, artesanas de saberes que han tran-
cordemos que el tiempo del capital industrial, sitado el territorio por siglos.
con su obsesión de acumulación incesante para En base a los planteos pioneros de Marx sobre
desarrollarse construye a los otros tiempos como la fractura sociometabólica y los ejemplos ana-
atrasados, donde toda diferencia y diversidad lizados, intentamos evidenciar la potencia del ca-
(natural o cultural) debe ir dejando paso a la pitalismo en reinventar una y otra vez la maqui-
monocultura que tiene en el progreso, la moder- naria devastadora de los ciclos energéticos
nidad, y la ciudad “civilizada” su locus por exce- naturales que hacen al complejo proceso de vida
lencia, su horizonte (Porto Gonçalves, 2016). del que el hombre es victimario y víctima. A
La penetración del capital como mediador de modo de cierre, tomamos la energía vital de esas
los vínculos al interior de la comunidad no desem- comunidades que se resisten a aceptar el “destino
boca en otra dirección que una dependencia inevitable” que ofrece el discurso minero oficial,
estructural extrema por parte de la población culturas que apuestan a sembrar en las “zonas de
local. Comunidades históricamente agrarias, pro- sacrificio” un “campo de historia-esperanza”, que
ductoras de alimentos para autoconsumo, van practican desde su estar en el territorio la defensa
dando paso a una progresiva pérdida de capaci- de la agricultura y la soberanía alimentaria, que
dad de autosuficiencia alimentaria, que no es otra reivindican el ser agricultores, y aleccionan
cosa, que las energías vitales que el hombre como sobre la olvidada reciprocidad con la naturaleza.
parte de la naturaleza intercambia con otros Parafraseando a Porto Gonçalves (2016, 310),
componentes de la biosfera a fin de reproducir la comunidades que hacen de su lucha por la tierra,
vida. Es en este sentido que planteamos la noción una lucha por la Tierra.
[ 284 ] Horacio Machado Aráoz y Leonardo Javier Rossi | Extractivismo minero y fractura sociometabólica
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[ 286 ] Horacio Machado Aráoz y Leonardo Javier Rossi | Extractivismo minero y fractura sociometabólica
RevIISE | Vol 10 Año 10 - octubre 2017 - marzo 2018. Argentina. pp. 273-286 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar

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