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ANÁLISIS NO LINEAL
DE ESTRUCTURAS
Año 2004
II
ÍNDICE
CAPÍTULO 1
Las ecuaciones que gobiernan el comportamiento no lineal del sólido (por ejemplo ecuaciones
de equilibrio) se escriben en la llamada forma integral débil utilizando el principio de los
trabajos virtuales o el principio de estacionariedad de la energía potencial total. Las
aproximaciones de los elementos finitos son introducidas en las ecuaciones integrales
obteniéndose un conjunto de ecuaciones no lineales algebraicas que son resueltas usualmente
con la técnica iterativa de Newton-Raphson.
a) Análisis lineal:
El momento externo, producido por la carga F resulta:
M ext = FL (1.1)
La ecuación constitutiva del resorte es lineal, luego el momento resistente interno es:
M int = kα (1.2)
FL2
∆ =α L = (1.4)
k
Definiendo la rigidez de la ménsula como la fuerza necesaria para producir un desplazamiento
unitario se obtiene:
F k
K= = 2 (1.5)
∆ L
La comparación entre (1.9) y (1.5) se presenta en la fig.1.2(b), donde se observa que para
pequeños desplazamientos ambas soluciones coinciden, y que la solución exacta conduce a
una flecha que tiene, como debe ser, un valor asintótico: ∆ = L .
M F
M int = k α
FL
Exacto
M ext = F L cosα
Lineal
α ∆
π /2 L
(a) (b)
Figura 1.2: (a) Solución para la condición de equilibrio. (b) Relación carga-flecha
4 CAPÍTULO 1 Oscar Möller
1.2.2. Columna
La barra rígida es posicionada verticalmente y solicitada por una carga P como se muestra en
la fig.1.3(a).
P PL
k
No lineal
Lineal
1
Punto de
L
bifurcación
k 0 α
(a) (b)
PL
k − PL = 0 → =1 (1.13)
k
INTRODUCCIÓN A PROBLEMAS NO LINEALES 5
para cualquier valor de α . Esta solución está representada en la fig.1.3(b) por la línea
horizontal de trazos.
La ec. (1.13) es el típico análisis de estabilidad lineal y donde:
k
P= (1.14)
L
es la carga crítica, o carga de pandeo.
Ejercicio 1.1
Calcular la carga crítica de la estructura mostrada en la figura aplicando el principio de la
mínima energía potencial total, considerando pequeños desplazamientos.
u
M
∆
kα
L
α α
α
k
∆ =α L
u = L − L cos α = L (1 − cos α )
∂F 1 ∂nF
F ( x) = F ( x0 ) + ( x − x0 ) + LL + ( x − x0 ) n
∂x ( x = x0 ) n ! ∂x n ( x = x0 )
α2 α2
u = L (1 − 1 + )=L
2 2
6 CAPÍTULO 1 Oscar Möller
1
Energía de deformación: U= kα 2
2
α2
Potencial de las cargas exteriores V = − P u = − PL
2
1 α2
Energía potencial total Π = U +V = kα 2 − P L
2 2
Por la condición de equilibrio, la variación primera de la energía potencial total debe ser nula,
entonces:
1 PL
δΠ = 0 → k 2α δα − 2α δα = 0
2 2
δα [kα − PLα ] = 0 → (k − PL ) α = 0 por ser δα arbitrario
Solución trivial: α =0
k
Solución no trivial: k − PL = 0 → Pc =
L
____________________
P P
F
Exacto
∆ k
L Lineal
L
k ∆
FL2
(a) (b)
k
Figura 1.4: (a) Barra con carga axial y transversal. (b) Relación carga-flecha
de donde resulta:
FL F
α= = (1.19)
k − PL k
−P
L
FL
∆= (1.20)
k
−P
L
Se observa que (1.19) y (1.20) son lineales con relación a F y no lineales con relación a P .
Es por eso que los problemas con carga axial, relacionados con el concepto de pandeo, son no
lineales aún para el caso de pequeños desplazamientos.
Los resultados para la relación carga-flecha usando la relación exacta (1.16) y la
aproximación (1.20) se grafican en la fig.1.3(b).
Con la aproximación (1.20), cuando P = k / L = Pc , resulta α → ∞ ∀F ≠ 0 . Si F = 0 , no
hay perturbación lateral, solo compresión por P . Basta tener una pequeña fuerza F , o
excentricidad adicional para que α → ∞ . Sin embargo α no puede ser mayor que 180º, surge
del error de linealizar ec(1.17).
Este tipo de enfoque es esencialmente el mismo que se utiliza en el caso de columnas para la
determinación de la carga crítica de pandeo de Euler, cuando se sustituye la curvatura por la
expresión simplificada (linealizada).
El valor de la rigidez, a partir de (1.20) resulta:
F k P
K= = 2 − = K L + KG (1.21)
∆ L L
El primer término es la rigidez lineal KL y el segundo es la rigidez geométrica KG , también
llamada rigidez no lineal KNL , que depende de los esfuerzos normales. Cuando:
k
P= → K =0 (1.22)
L
y P es la carga crítica de pandeo.
8 CAPÍTULO 1 Oscar Möller
Ejercicio 1.2
Calcular la carga crítica para el siguiente caso. Utilizar el principio de la mínima energía
potencial total.
P
k
L L
α α
∆
⎧kα α ≤αy
M int = ⎨ (1.23)
⎩M y α >αy
A
A’ Teoría lineal (configuración indeformada)
FL
k
α
M int (t1 )
M int (t 2 )
M ext
α
α (t1 ) α (t 2 )
Ejercicio 1.3
Calcular la respuesta carga - desplazamiento del punto B de la estructura representada en la
figura. Se supone que los desplazamientos y las deformaciones son pequeñas, es decir sólo se
considera la no linealidad física, y que la carga es aplicada lentamente.
P(KN)
u
2
área A=1cm P
40
A B C
La = 10cm Lb = 5
σ 16
σy ET
t
E E = 10 4 KN / cm 2
ET = 10 2 KN / cm 2
ε ε y = 0.002
εy
σ y = E ε y = 20 KN / cm 2
Ecuaciones de equilibrio P
P = Fa − Fb
Fa Fb
Ecuaciones de compatibilidad u
u
εa =
La
u
εb =
Lb
Ecuaciones constitutivas
ε → σ de acuerdo a la figura
F =σ A
a) Comportamiento elástico:
u u 1 1
P = σ a A −σ b A = E εa A + E εb A = E A ( + ) = E A u( + )
La Lb La Lb
INTRODUCCIÓN A PROBLEMAS NO LINEALES 11
P P P
Resulta: u= = =
1 1 1 1 3000
E A ( + ) 10 4 1 ( + )
La Lb 10 5
Luego:
u 10 4 P 1
σa = E = = P
La 10 3000 3
u 10 4 P 2
σ b = −E = =− P
Lb 5 3000 3
Resulta:
3
Pel = 20 = 30 KN → σ a = 10 KN / cm 2 , σ b = −20 KN / cm 2
2
30
u= = 1 × 10 −2 cm
3000
b) Comportamiento elasto-plástico:
La condición de equilibrio sigue siendo:
P = Fa − Fb
Reemplazando
[ ]
P = E ε a A + ET (ε b − ε y ) + σ y A = E A
u
La
+ ET A
u
Lb
− ET A ε y + σ Y A
EA ET A
=u( + ) − ET A ε y + σ Y A
La Lb
Se resuelve
P + ET A ε y − σ Y A P + 0.2 − 20 P − 19.8
u= = =
EA ET A 1000 + 20 1020
+
La Lb
Para P = 40 KN → u = 1.98 × 10 −2 cm
1.98 × 10 −2
εa = = 1.98 × 10 −3 → σ a = E ε a = 19.8 KN / cm 2 < σ y = 20
10
1.98 × 10 − 2
εb = = 3.96 × 10 −3 → σ b = − ET (ε b − ε y ) − σ y = −20.196 KN / cm 2
5
12 CAPÍTULO 1 Oscar Möller
P(KN)
40
30
16
u (10 −2 cm)
! Ejercicio 1.4
Calcular la respuesta carga - desplazamiento del punto 2 para la siguiente estructura. Se
supone comportamiento elástico lineal de la barra. Considerar grandes desplazamientos.
P
Fuerza interna en la barra
L 2
L e F = ke
1 ∆ EA
= e
15° L
L F
∆
β
β
15°
L-e
INTRODUCCIÓN A PROBLEMAS NO LINEALES 13
Condición de equilibrio:
P = F sen β
( L − e) cos β = L cos15°
( L − e) sen β = L sen 15° − ∆
L sen 15° − ∆ sen 15° − ∆ / L
sen β = =L
L−e L−e
( L − e) 2 = L2 − 2 L sen 15° ∆ + ∆2
L − e = L2 − 2 L sen 15° ∆ + ∆2
2∆ ∆
e = L − L2 − 2 L sen 15° ∆ + ∆2 = L ( 1 − 1 − sen 15° + ( ) 2 )
L L
Se reemplaza en la ecuación de equilibrio y resulta:
P = k e sen β
L ∆ k L2 1 − ∆
= k L (1 − ) (sen 15° − )= (sen 15° − )
L − L (1 − ) L L 1 − (1 − ) L
P 1 ∆
=( − 1 ) (sen 15° − )
kL 2∆ ∆ L
1− sen 15° + ( ) 2
L L
P
× 10 −3
kL
Si la estructura es cargada 6
monótonamente creciente, el
desplazamiento “salta” de A a B
4 A
(snap-through). Si la estructura es B
cargada con desplazamientos
controlados, se obtiene la respuesta
2
completa. ∆
L
0.2 0.4 0.6
-2
-4
14 CAPÍTULO 1 Oscar Möller
∂F
F (u) = F (u i ) + (u − u i ) + términos no lineales (1.25)
∂u u =u i
∂F
F (u i ) + (u i +1 − u i ) ≅ Pi +1 (1.26)
∂u u =u i
Se define:
∂F
K T (u i ) = : matriz tangente (1.27)
∂u u = ui
∆Pi = F (u i +1 ) − F (u i )
: incremento de fuerzas (1.29)
= Pi +1 − Pi
u i +1 = u i + ∆u i (1.31)
∂F
F (u k ) + (u k +1 − u k ) ≅ P (1.32)
∂u u =u k
K T ∆u k = P − F (u k ) (1.33)
u k +1 = u k + ∆u k (1.34)
donde el superíndice k indica el orden de iteración.
El proceso es usualmente convergente en las cercanías de una solución, pero si el valor inicial
no es adecuado se puede tener divergencia. También puede haber divergencia si la función
tiene un punto de inflexión.
Cuando la iteración converge, el error en la iteración k+1 tiende a ser la combinación lineal
de los cuadrados de los errores en la iteración k , por lo que se dice que el método de
Newton-Raphson es de segundo orden.
P P
K Tk
∆Pi F (u k )
K T (u i )
u u
ui u i +1 uk u k +1
∆u i ∆u k
[
∆u ik+1 = K T (u ik+1 ) ]
−1
(Pi +1 − F (u ik+1 ) ) (1.35)
[
∆u ik+1 = K T (u i0+1 ) ]
−1
(Pi +1 − F (u ik+1 ) ) (1.37)
[
∆u1i = K T (u i0 ) ]−1
(Pi − F (u i0 ) ) (1.39)
[
∆u i0+1 = K T (u i0 ) ]
−1
(Pi − F (u1i ) ) (1.41)
! Ejercicio 1.5
Representar gráficamente los métodos 1.3.4, 1.3.5 y 1.3.6
! Ejercicio 1.6
Utilizar el método incremental - Newton-Raphson para encontrar la solución para P = 1 , con
F(u) = 2u – u2 . Dividir la carga en 2 incrementos iguales.
∂F
KT = = 2 − 2u
∂u
INTRODUCCIÓN A PROBLEMAS NO LINEALES 17
k=0
∂F
K T (u10 ) = = 2 − 2 u = 2 − 2×0 = 2
∂u (u =u10 )
k=1
K T (u11 ) = 2 − 2 × 0.25 = 1.50
∆u11 = 1.50 −1 (0.5 − 0.4375) = 0.04167
0.04167
u12 = u11 + ∆u11 = 0.25 + 0.04167 = 0.2917 εu = = 0.143
0.2917
0.5 − 0.4983
F (u12 ) = 2 × 0.2917 − 0.2917 2 = 0.4983 εF = = 0.0034
0.5
k=2
K T (u12 ) = 2 − 2 × 0.2917 = 1.4166
∆u12 = 1.4166 −1 (0.5 − 0.4983) = 0.0012
0.0012
u13 = u12 + ∆u12 = 0.2917 + 0.0012 = 0.2929 εu = = 0.0041
0.2924
0.5 − 0.5
F (u13 ) = 2 × 0.2929 − 0.2929 2 = 0.5000 εF = =0
0.5
k=0
K T (u 20 ) = 2 − 2 × 0.2929 = 1.4142
∆u 20 = 1.4142 −1 (1.0 − 0.5) = 0.3536
u 12 = u 20 + ∆u 20 = 0.2929 + 0.3536 = 0.6465
F (u 12 ) = 2 × 0.6465 − 0.6465 2 = 0.8750
k=1
K T (u 12 ) = 2 − 2 × 0.6465 = 0.707
∆u 12 = 0.707 −1 (1.0 − 0.8750) = 0.1768
0.1768
u 22 = u 12 + ∆u 12 = 0.6465 + 0.1768 = 0.8233 εu = = 0.215
0.8233
1.0 − 0.9688
F (u 22 ) = 2 × 0.8233 − 0.8233 2 = 0.9688 εF = = 0.0312
1.0
18 CAPÍTULO 1 Oscar Möller
k=2
K T (u 22 ) = 2 − 2 × 0.8233 = 0.3534
∆u 22 = 0.3534 −1 (1.0 − 0.9688) = 0.0883
0.0883
u 23 = u 22 + ∆u 22 = 0.8233 + 0.0883 = 0.9116 εu = = 0.097
0.9116
1.0 − 0.9922
F (u 23 ) = 2 × 0.9116 − 0.9116 2 = 0.9922 εF = = 0.0078
1.0
k=3
K T (u 23 ) = 2 − 2 × 0.9116 = 0.1768
∆u 23 = 0.1768 −1 (1.0 − 0.9922) = 0.0441
0.0441
u 24 = u 23 + ∆u 23 = 0.9116 + 0.0441 = 0.9557 εu = = 0.046
0.9557
1.0 − 0.9980
F (u 24 ) = 2 × 0.9557 − 0.9557 2 = 0.9980 εF = = 0.002
1.0
DEFORMACIONES 19
CAPÍTULO 2
DEFORMACIONES
ϕ :B → S ⊂ R 3 (2.2)
∂ϕ ( X, t ) ∂u( X, t )
V ( X, t ) = = = u! ( X, t ) (2.4)
∂t ∂t
o hacer una descripción Euleriana, denominándose velocidad espacial y dada por:
v (ϕ ( X, t ), t ) = V ( X, t ) (2.5)
Por supuesto, el fenómeno físico es el mismo, cambiando las expresiones de las funciones
según que variables independientes hayan sido elegidas.
X2
Original Deformada
t=0 t=t
Q’
Q
dX u ( X, t ) dx
P P’
x = ϕ ( X, t )
X1
X3
Figura 2.1: Configuraciones, desplazamientos
Una malla Lagrangiana de elementos finitos está fija en las coordenadas materiales, es decir
está ‘pegada’ a la materia, en consecuencia los elementos se deforman junto con el material,
permaneciendo la malla coincidente con el cuerpo a lo largo de toda la deformación. Esto
puede producir severas distorsiones en los elementos, por lo tanto es limitada la magnitud de
la deformación que puede ser simulada con una malla Lagrangiana. Por otro lado, una malla
Euleriana está fija en las coordenadas espaciales, manteniéndose la forma y tamaño de los
elementos constantes a lo largo de la deformación. Por supuesto, la malla no permanece
coincidente con el cuerpo y se produce traspaso de materia a través de los contornos de los
elementos.
Dadas las características mencionadas, la descripción Lagrangiana es la más natural y efectiva
a ser utilizada en problemas de mecánica de sólidos, donde se estudia el comportamiento de
cada partícula a lo largo de toda la deformación. En tanto, la descripción Euleriana tiene
mayor aplicación en problemas de mecánica de fluidos, donde se estudia el comportamiento
de la materia que atraviesa un volumen de control estacionario.
Dentro de la descripción Lagrangiana pueden desarrollarse dos tipos de formulaciones:
• Lagrangiana Total: Las medidas de tensiones, deformaciones, derivadas e integrales se
realizan sobre las coordenadas materiales o Lagrangianas, es decir, las variables están
descriptas en la configuración original.
DEFORMACIONES 21
∂ϕ ( X, t ) ∂x ∂x
F( X, t ) = ≡ , ó Fij = i (2.6)
∂X ∂X ∂X j
dX = [F( X, t )] .dx
−1
(2.8)
donde:
∂X ∂X
[F(X, t )]−1 = ≡ (2.9)
∂ϕ ( X, t ) ∂x
Los cuerpos tienen su masa distribuida en forma continua sobre su volumen, de modo que un
volumen suficientemente pequeño tiene una masa arbitrariamente pequeña. La masa del
cuerpo B es definida para una configuración co como:
M = ∫ ρ o dV (2.10)
co
M = ∫ ρ o dV = ∫ ρ dV (2.11)
co c
22 CAPÍTULO 2 Oscar Möller
cambiando de variables:
M = ∫ ρ o dV = ∫ ρ J dV (2.12)
co co
dϕ (B ) ρ0
J ( X, t ) = det[F( X, t )] ≡ = >0 (2.13)
dB ρ
Esta relación, conocida como descomposición polar de F, puede ser probada por
descomposición espectral (ver Simo - Hughes 1998, pag. 241-242), o puede ser interpretada
conceptualmente, por aplicación de la regla de diferenciación en cadena, diciendo que la
deformación total es obtenida aplicando primero las elongaciones y luego las rotaciones, es
decir:
∂x ∂x ∂x *
= (2.16)
∂X ∂x * ∂X
R RΤ = 1 , V = VΤ , U = UΤ (2.18)
de modo que cualquier deformación F puede ser obtenida aplicando primero una deformación
simétrica U y luego una rotación rígida R , o también aplicando primero una rotación R y
luego una deformación simétrica V.
(∗)
Se recuerda del álgebra matricial que:
si M es matriz simétrica: MT = M, si M es matriz antisimétrica: MT = -M, si M es matriz ortogonal: MT = M-1.
DEFORMACIONES 23
C = U 2 = F ΤF (2.19)
B = V2 = F FΤ (2.20)
dS 2 = dX Τ dX (2.21)
Después de la deformación ϕ ( X, t ) , P pasa a P’, Q pasa a Q’, y el cuadrado de la longitud ds
de P’Q’ es:
ds 2 = dx Τ dx (2.22)
por (2.6) se puede escribir:
de modo que
ds 2 − dS 2 = dX Τ (F Τ F − 1) dX
(2.25)
= dx Τ (1 − F −Τ F −1 ) dx
1 ∂ui ∂u j ∂u k ∂u k
Eij = + + (2.28)
2 ∂X j ∂X i ∂X i ∂X j
1 ∂u i ∂u j ∂u k ∂u k
eij = + + (2.29)
2 ∂x j ∂xi ∂xi ∂x j
U 2 = F Τ F = (1 + H ) Τ (1 + H )
(2.32)
≅ 1 + (H + H Τ )
de modo que
1
U ≅ 1+ (H + H Τ ) (2.33)
2
Dado que F = RU , es evidente de (2.33) que
1
R ≅ 1 + (H − H Τ ) (2.34)
2
de modo que escribiendo
1
ε= (H + H Τ ) (2.35)
2
1
ω = (H − H Τ ) (2.36)
2
se obtiene aproximadamente
U =1+ε (2.37)
R = 1+ω (2.38)
RΤ = 1 − ω (2.39)
ε y ω son los tensores de deformación y rotación infinitesimales. Las ecs. (2.35) y (2.36)
indican que, en el caso de pequeños desplazamientos, la descomposición polar exacta F = RU
es sustituida por la descomposición aditiva H = ε + ω . La (2.35) puede ser obtenida a partir
de la (2.28) despreciando los productos.
DEFORMACIONES 25
! Ejercicio 2.1
Analizar la deformación de una barra con el extremo i en el origen de coordenadas, como se
indica en la figura:
X2 , x2
α
X1 , x1
i j
donde
c = cos α , s = sen α (b)
De la ec.(2.6) se tiene
ck − s 0 c / k s/k 0
F = sk c 0 F −1
= − s c 0 (c)
0 0 1 0 0 1
k 2 0 0
C = U 2 = F ΤF = 0 1 0 (d)
0 0 1
de modo que
k 0 0
U = 0 1 0 (e)
0 0 1
que indica un estiramiento de intensidad k a lo largo del eje X1. De la (e) se tiene:
1 / k 0 0
U −1
= 0 1 0 (f)
0 0 1
26 CAPÍTULO 2 Oscar Möller
de modo que
c − s 0
R=FU −1
= s c 0 (g)
0 0 1
c 2 k + s 2 cks − sc 0
V = R U R Τ = cks − sc s 2k + c2 0 = F R −1 = F R Τ (h)
0 0 1
La deformación F puede ser obtenida a través de:
a) Un estiramiento U seguido de una rotación R
b) Una rotación R seguida de un estiramiento V
Se observa que V es diferente a U debido a la rotación.
Para el caso de α = 90°, k = 1, y se tiene como corresponde:
1
E= (C − 1) = 0
2 (i)
1
e = (1 − B −1 ) = 0
2
en tanto que si se aplica la teoría infinitesimal, se tendría:
u1 = (c k − 1) X 1 − s X 2
u 2 = s k X 1 + (c − 1) X 2 (j)
u3 = 0
de donde:
ck − 1 − s 0
H = sk c − 1 0 (k)
0 0 0
y finalmente:
− 1 0 0 0 − 2 0
ε = 0 − 1 0
1
ω = − 2 0 0
1
(l)
2 2
0 0 0 0 0 0
∂v ∂v
L= = ∇v , ó Lij = i (2.40)
∂x ∂x j
∂ ∂ϕ ( X, t ) ∂v
F! = = (2.42)
∂t ∂X ∂X
1 ∂v ∂v j
D=
1
2
( )
L + LT , ó Dij = i +
2 ∂x j ∂x i
(2.44)
1 ∂v ∂v j
W=
1
2
( )
L − LT , ó Wij = i −
2 ∂x j ∂xi
(2.45)
Teniendo en cuenta que:
F! = R
! U + RU
! =R
! R T RU + RU
! U −1R T F = Ω + RU (
! U −1R T F ) (2.46)
D=
2
(
1 ! −1
R UU + U −1 U
! RT) (2.48)
W=Ω+
2
(
1 ! −1
R UU − U −1 U
! RT ) (2.49)
Se observa inmediatamente que para una variación como cuerpo rígido del movimiento, esto
! = 0 , resulta D = 0 y W = Ω .
es U
28 CAPÍTULO 2 Oscar Möller
! Ejercicio 2.2
Analizar la deformación por corte indicada en la figura, y caracterizada por:
X2 , x2
X1 , x1
x1 = X 1 + k X 2 t
x2 = X 2 (a)
x3 = X 3
Se puede calcular
1 k t 0 1 − k t 0
F = 0 1 0 F −1
= 0 1 0 (b)
0 0 1 0 0 1
Un círculo de ecuación
X 12 + X 22 = 1 (d)
x12 + x 22 (1 + k 2 t 2 ) − 2 x1 x 2 t = 1 (e)
1 kt 0
Τ
U = C = F F = k t 1 + k 2 t 2
2
0 (f)
0 0 1
De la ec.(2.4) se tiene:
DEFORMACIONES 29
x!1 = k X 2
x! 2 = 0 (g)
x! 3 = 0
0 k 0
L = F F = 0 0 0 = grad x!
! −1
(h)
0 0 0
de donde resulta
0 k 0 0 k 0
D = k 0 0
1 1
W = − k 0 0 (i)
2 2
0 0 0 0 0 0
0 k t 0
H = 0 0 0 (k)
0 0 0
de donde:
0 k t 0 0 k 0
1
0 0 ε! = k 0 0 = D
1
ε = k t (l)
2 2
0 0 0 0 0 0
0 k t 0 0 k 0
1
0 0 ! = − k 0 0 = W
1
ω = − k t ω (m)
2 2
0 0 0 0 0 0
____________________
30 CAPÍTULO 2 Oscar Möller
! = 1 (F! T F + F T F! ) = 1 F T (F −T F! T + F! F −1 )F = F T DF
E (2.50)
2 2
ε=
1
2
[
ln U + (ln U) T ] (2.52)
∂∆u ∂∆u i
∇∆u = , ó ∆u i , j = (2.53)
∂x ∂x j
1 1 ∂∆u i ∂∆u j
∆e = (∇∆u + ∇∆u T ) , ó ∆eij = + (2.54)
2 2 ∂x j ∂x i
Expresando en forma de tasas, y recordando la (2.51), se obtiene:
∆e ! 1 ∂v ∂v j
≅ e = D = R.ε! .R T , ó e!ij = i + (2.55)
∆t 2 ∂x j ∂x i
Esta última expresión es similar a la deformación lineal (2.35), excepto que involucra
derivadas sobre la configuración actual deformada de la tasa de los desplazamientos.
DEFORMACIONES 31
donde ϕ son las deformaciones prescriptas definidas en una porción ∂ ϕ B del contorno ∂B .
Por supuesto, en la simulación de fenómenos de fractura no se cumplen estas condiciones.
(prescripto)
{
V ϕ = η : ϕ (B ) → R 3 η(ϕ ( X) ) = 0 para ϕ ( X) ∈ ϕ (∂ ϕ B) } (2.57)
Nótese que V ϕ cambia con cada ϕ ∈ C , por lo tanto se denomina variación espacial a cada
elemento η ∈V ϕ . Mediante un cambio de variables se define la variación material:
η 0 ( X) = η(ϕ ( X) ) , ∀ η ∈V ϕ (2.58)
V 0 = {η 0 : B → R 3 η 0 ( X) = 0 para X ∈ ∂ ϕ B } (2.59)
∂η 0 i ∂η i ∂ϕ k
= , ó GRAD η 0 = ∇η.F (2.60)
∂X j ∂x k ∂X j
Una importante observación a realizar es que: la velocidad espacial (2.5), para un tiempo fijo
t, es una variación admisible, esto es v(•, t ) ∈V t ϕ , debido a que para cada x ∈ t ϕ (B ) existe
un vector v (x, t ) ∈ R 3 , es decir v(•, t ) : t ϕ (B ) → R 3 , y además v(•, t ) se desvanece en los
contornos prescriptos, es decir v(x, t ) = 0 para todo x ∈ ϕ (∂ ϕ B ) . Por lo tanto, t v = v (•, t )
satisface las condiciones de (2.57), y por supuesto t V ( X)= t v(ϕ ( X) ) satisface las de (2.59),
resultando V (•, t ) un elemento de V 0 .
TENSIONES 33
CAPÍTULO 3
TENSIONES
Configuración de Configuración
referencia actual
donde t0 es la fuerza unitaria (fuerza por unidad de área) actuante en la superficie dΓ0, y t es
la actuante en dΓ. Los versores normales n 0 y n definen la posición de los planos de área
dΓ0 y dΓ, respectivamente. La (3.2) involucra la fuerza unitaria y la superficie de la
configuración actual, por esta razón la tensión de Cauchy σ es llamada con frecuencia tensión
física o tensión verdadera. Como es sabido, por el teorema de conservación de momento
angular (o teorema de Cauchy), el tensor de Cauchy es simétrico. Por otro lado, la primer
tensión de Piola-Kirchhoff P, de acuerdo a la (3.1), tiene una definición similar a la de
Cauchy, excepto que está expresada en términos de la fuerza unitaria y superficie de la
configuración de referencia o indeformada. Este tensor no es simétrico y su traspuesta P T es
llamada tensión nominal. Con el objeto de obtener un tensor simétrico, la (3.1) es
transformada con F −1 , definiéndose así el segundo tensor de Piola-Kirchhoff S a partir de la
siguiente relación:
de donde se deduce:
P = Jσ.F −T (3.6)
Premultiplicando la (3.3) por F, e igualando a la (3.1) se tiene:
P = F.S (3.7)
Y comparando las (3.6) y (3.7), se llega a:
S = JF −1 .σ.F −T (3.8)
Estas y otras medidas de tensiones pueden definirse también, a partir del principio de
conservación de energía (ver Belytschko – Liu – Moran 2000, pag. 122 a 125), como trabajo
conjugadas de las distintas medidas de deformaciones. Estableciendo la igualdad de la
potencia mecánica (o tasa de energía) específica en la configuración indeformada, ρ 0 w! , se
puede escribir:
ρ 0 w! = Jσ : D = P : F! = S : E! = τ : D = τ : D (3.9)
de donde, en base a las definiciones de las medidas de deformaciones, dadas en la sección 2.2,
se puede despejar las relaciones entre las distintas medidas de tensiones. Las relaciones entre
σ , P y S son las dadas en (3.6), (3.7) y (3.8), mientras que el tensor de tensiones de Kirchhoff
queda definido como:
TENSIONES 35
donde c(t) es una función sólo del tiempo que representa un desplazamiento, y Q(t) es una
matriz ortogonal, función sólo del tiempo, que representa una rotación. El movimiento es
llamado rígido porque se preserva la distancia entre dos puntos cualesquiera x 1 , x 2 ∈ S :
2 2
x1+ − x 2+ = Q(t ).(x 1 - x 2 ) ⇒ x1+ − x +2 = x1 - x 2 (3.13)
2
donde x1 - x 2 = (x1 - x 2 ) T .(x1 - x 2 ) es el cuadrado de la distancia Euclidiana.
∂x + ∂x
F+ = = Q(t ) = Q(t ).F (3.14)
∂X ∂X
Un tensor espacial se dice objetivo cuando ante un movimiento como cuerpo rígido se
transforma según las reglas de transformación de tensores, es decir, para tensores de segundo
orden, según el doble producto de matrices de rotación:
! Q T . Sin
el cual no se transforma objetivamente debido al término adicional antisimétrico Q.
embargo, de acuerdo a (2.44) y (3.16), la velocidad de deformación se transforma
objetivamente:
D + = Q.D.Q T (3.17)
Mientras que, de acuerdo a la (2.45), el tensor rotación resulta no objetivo:
36 CAPÍTULO 3 Oscar Möller
! .Q T
W + = Q.W.Q T + Q (3.18)
Los tensores materiales, que son tensores definidos en la configuración de referencia,
permanecen inalterados ante movimientos espaciales superpuestos de cuerpo rígido. Así, por
ejemplo, de (2.26) y (3.16):
E+ =
1
2
[ ]
(F + ) T .F + − I + = (F T .Q T .Q.F − I ) ≡ E
1
2
(3.19)
[ ] 2 = (F T .Q T .Q.F ) 2 = (F T .F ) 2 ≡ U
1 1 1
U + = (F + ) T .F + (3.20)
y también, de (2.47):
Ω+ = R ! .Q T
! + .(R + ) T = Q.Ω.Q T + Q (3.22)
σ + = Q.σ.Q T (3.23)
pero su tasa, que viene dada por:
! .Q T ).σ + − σ + .(Q
σ! + = Q.σ! .Q T + (Q ! .Q T ) (3.24)
resulta claramente no objetiva debido a los últimos dos términos. En la expresión anterior se
utilizó la derivada de la inversa:
d dQ −1
(Q −1 ) = −Q −1 Q (3.25)
dt dt
Análogamente, el tensor de Kirchhoff τ es objetivo, es decir:
τ + = Jσ + = Q.τ.Q T (3.26)
sin embargo, su tasa es no objetiva:
! .Q T ).τ + − τ + .(Q
τ! + = Q.τ! .Q T + (Q ! .Q T ) (3.27)
Al igual que los tensores materiales, los tensores espaciales definidos en configuraciones
corrotadas, como por ejemplo (2.51) y (3.11), se mantienen inalterados ante movimientos
espaciales superpuestos de cuerpo rígido:
+
D = (R + ) T .D + .R + = R T .Q T .Q.D.Q T .Q.R ≡ D (3.28)
y
+
τ = (R + ) T .τ + .R + = R T .Q T .Q.τ.Q T .Q.R ≡ τ (3.29)
TENSIONES 37
Por supuesto, los escalares tampoco se ven afectados por estos movimientos de cuerpo rígido.
Por ejemplo, de (2.14) y (3.14), y teniendo en cuenta que el determinante de cualquier matriz
de rotación es igual a la unidad, se obtiene:
Pero la anterior no es una ecuación válida a ser utilizada cuando se producen rotaciones de
cuerpo rígido. Para ilustrar el problema, considérese la barra de la fig.3.2 sometida a una
tensión inicial σ x = σ 0 . Luego la barra es sometida a una rotación de 90º sin elongación
alguna (movimiento de cuerpo rígido), en consecuencia, como se vio en la sección 2.4, resulta
D = 0. Sin embargo, en la figura se aprecia como cambian las tensiones de Cauchy, haciendo
que σ! ≠ 0 . Por lo tanto, se puede pensar que ‘algo’ le falta a la ecuación (3.31), y es
precisamente tener en cuenta las rotaciones como cuerpo rígido del material.
Además, si se hubiera producido una elongación de la barra, por ejemplo en la posición final,
se hubiese generado un incremento ∆σ en la tensión, que no podría sumarse directamente a
la tensión del estado anterior para obtener la tensión actual:
t + ∆t 0 0 σ 0 0 0 0
σ ≠ t σ + ∆σ → ≠ + (3.32)
0 σ 0 + ∆σ 0 0 0 ∆σ
Figura 3.2: Cambio en las tensiones de Cauchy debido a una rotación de cuerpo rígido.
38 CAPÍTULO 3 Oscar Möller
Las rotaciones como cuerpo rígido son tenidas en cuenta por las tasas objetivas de los tensores
de tensiones. Uno de estos tensores objetivos es la tasa de Jaumann de la tensión de Cauchy:
σ ∇J = σ! − Wσ − σW T (3.33)
cuya ecuación constitutiva en tasa objetiva es:
σ ∇J = C σJ : D , ó σ ij∇J = C ijkl
σJ
Dkl (3.34)
donde C σJ es el tensor constitutivo de cuarto orden, que contiene las características del
material, correspondiente a esta medida de tensiones. Por lo tanto, la forma correcta de la
ecuación (3.31), para el cálculo de la tasa del tensor de Cauchy, es:
σ! = σ ∇J + Wσ + σW T = C σJ
%$:# D + Wσ
%"$+ σW
"#
T
(3.35)
material rotación
Se aprecia que el cálculo de la tasa del tensor de Cauchy está compuesto de dos partes: la
respuesta objetiva del material, debido a deformaciones específicas, y el cambio de las
tensiones debido a las rotaciones de cuerpo rígido.
Muchas de las ecuaciones de la mecánica no lineal son obtenidas de manera elegante y simple
cuando están expresadas en términos de tasas de la tensión de Kirchhoff. En consecuencia, se
define la tasa objetiva de Jaumann del tensor de Kirchhoff como:
τ ∇J = τ! − Wτ − τW T = C τJ : D (3.36)
Otros tensores tasas objetivas usados frecuentemente son la tasa de Truesdell y la tasa de
Green-Naghdi de la tensión de Cauchy. La tasa de Truesdell de la tensión de Cauchy viene
definida como:
[ ]
τ ∇c = J σ! − Lσ − σLT + traza (L)σ = Jσ ∇T (3.38)
Por esta razón a τ ∇c también se la denomina tasa ponderada de Truesdell. Teniendo en cuenta
la primer igualdad de (3.10), y (2.14), la (3.38) puede ser escrita como:
τ ∇c ≡ Lv τ = τ! − Lτ − τLT = C τ : D (3.39)
τ ∇c ≡ Lv τ = τ ∇J − Dτ − τD (3.41)
σ ∇G = σ! − Ωσ − σΩ T = C σG : D (3.42)
La objetividad de estos tensores tasa se prueba fácilmente teniendo en cuenta las
expresiones (3.16), (3.18), (3.22), (3.23) y (3.24), obteniéndose:
(σ ∇J ) + = σ! + − W + .σ + − σ + .( W + ) T = Q.σ ∇J .Q T (3.43)
Cualquiera de los tensores tasas objetivas anteriores puede ser utilizado para calcular σ! , en
consecuencia, para que el resultado no varíe, los tensores constitutivos C deben diferir según
la tasa objetiva elegida. Por lo tanto, se les agrega superíndices para especificar la tasa
objetiva a la que está asociada.
Por último, también se pueden definir ecuaciones constitutivas en términos de magnitudes
corrotadas:
τ! = C τ : D (3.46)
Por supuesto, estas ecuaciones son insensibles a cualquier movimiento espacial superpuesto
de cuerpo rígido. En (3.28) se demostró que D + = D , en tanto, la tasa de la tensión corrotada
de Kirchhoff, recordando (3.11), (3.25) en términos de R, y (2.47), resulta:
S = C SE : E , ó S ij = C ijkl
SE
E kl (3.50)
donde C SE es el tensor constitutivo elástico, constante, de cuarto orden que contiene los
coeficientes del material.
La energía de deformación por unidad de volumen, para un estado multiaxial de tensiones,
está dada por:
1 SE
w = ∫ S ij dE ij = ∫ C ijkl
SE
E kl dE ij = C ijkl E ij E kl (3.51)
2
La existencia de este funcional implica reversibilidad, camino independencia y ausencia de
disipación de energía en el proceso de deformación (ver Belytschko – Liu - Moran 2000, pag.
221 a 223).
La correspondiente relación constitutiva en tasas es:
! , ó S! = C SE E!
S! = C SE : E ij ijkl kl (3.52)
SE ∂2w SE ∂2w
C = , ó C ijkl = (3.54)
∂E∂E ∂E ij ∂E kl
∂2w ∂2w
= (3.55)
∂E ij ∂E kl ∂E kl ∂E ij
de donde:
τ SE
C ijkl = Fim F jn Fkp Flq C mnpq (3.59)
Lv τ = C τ : D (3.60)
Expresiones análogas pueden ser obtenidas para cualquiera de los tensores tasas objetivas
vistos en la sección 3.3, deduciéndolas a partir de las relaciones entre dichos tensores.
Una importante consideración a realizar es que, a partir de relaciones hiperelásticas
invariantes de la forma (3.49), se pueden deducir ecuaciones constitutivas espaciales en tasas,
también invariantes, de la forma (3.60). Pero la inversa no se cumple, es decir, a partir de
cualquier ecuación en tasas de la forma (3.60) (cualquier tensor constitutivo C), no siempre es
posible obtener un funcional de energía almacenada w tal que las tensiones sean calculadas
con (3.49) (ver Simo - Hughes 1998, pag. 258).
σ ∇ = C σ∇ : D , ó τ ∇ = C τ∇ : D (3.61)
las deformaciones elásticas son pequeñas, y por ende el trabajo remanente en un ciclo cerrado
elástico también es pequeño.
ECUACIONES DE EQUILIBRIO 43
CAPÍTULO 4
ECUACIONES DE EQUILIBRIO
~ ∂Pij ~ ∂V ( X, t )
DIV P + ρ 0 B = ρ 0 A , ó + ρ 0 Bi = ρ 0 i en B (4.1)
∂X j ∂t
t 0 = P.n 0 ∂ tB
(4.2)
~!
Expresión válida para un incremento de carga dado por B y t! 0 en un cierto tiempo fijo t.
∂B B
!
Teniendo en cuenta que ∫ t P! .n 0 .η 0 d∂B = ∫ t 0 .η 0 d∂B , la (4.5) finalmente queda:
∂B ∂ tB
~! !
∫ P! : GRAD η 0 dB − ∫ ρ 0 B.η 0 dB − ∫ t 0 .η 0 d∂B = 0
t
(4.7)
B B ∂ tB
= [ L. F. S + F. S! ]: GRAD η
t t t t t
0
= [ L. F. S. F + F. S! . F ]. F
t t t t T t t t T t −T
: GRAD η 0
= [ L. τ + L τ ]: GRAD η . F
t t t
v 0
t −1
= [ L. τ + L τ ]: ∇ η
t t t
v
t
(4.8)
dϕ (B ) ρ
dB = ,y ρ= 0 (4.9)
J J
Las fuerzas por unidad de masa son independientes de la configuración en que se miden,
~!
entonces: B( X) = b! (x) . Además, de (2.58) se tiene que: η 0 ( X) = η(x) , e igualando (3.1) y
(3.2) en el contorno del cuerpo surge: t 0 .d∂B = t.d∂ϕ (B ) . Por lo tanto, la (4.7) en el tiempo
fijo t y en magnitudes espaciales resulta:
dϕ (B )
∫ [t L.t τ + t Lv τ ]:t ∇η J = ∫ b! .t η. ρ.dϕ (B ) + ∫ t.t η.d∂ϕ (B )
! (4.10)
t ϕ (B ) t ϕ (B ) ∂ t ϕ (B )
ECUACIONES DE EQUILIBRIO 45
De acuerdo a lo comentado al final de la sección 2.3 (la velocidad espacial, en un tiempo fijo
t, es una variación admisible t v ∈V t ϕ ), se puede sustituir t η por t v , y t ∇η por t L = t ∇v . En
la expresión (4.11) se agrega el símbolo δ para indicar el carácter virtual de estas variaciones
de la deformación. Recordando además que: Lv τ = C τ : D , donde se puede reemplazar D por
L debido a la simetría menor de Cτ, la (4.10) queda expresada:
∫
t
[
δL : t L.t τ + t C τ :t D ] dϕJ(B ) = ∫ t δv.b! . ρ.dϕ (B ) + ∫ t δv.t!.d∂ϕ (B ) (4.11)
t t
ϕ (B ) ϕ (B ) ∂ t ϕ (B )
Esta es la forma débil de la ecuación de equilibrio expresada en tasas, que permite calcular, en
un cierto tiempo t, la velocidad espacial actual t v , para una cierta carga, dada por el miembro
derecho de (4.11), sobre una cierta configuración t ϕ en la que se halla en equilibrio un cierto
campo de tensiones t τ .
σ 1 σ 11 ε 1 ε 11
σ 11 σ 12 ε 11 ε 12
σ≡ → {σ} ≡ σ 2 = σ 22 , y ε ≡ → {ε} ≡ ε 2 = ε 22 (4.12)
σ 21 σ 22 σ σ ε 21 ε 22 ε 2ε
3 12 3 12
En tanto, los tensores constitutivos de cuarto orden se convierten a matrices de segundo orden
de la siguiente manera:
notación deVoigt
σ = C : ε , ó σ ij = C ijkl ε kl → {σ} = [C]{ε} , ó σ a = C ab ε b (4.13)
Si el tensor C posee simetría mayor (3.56), la matriz [C] resulta simétrica. La notación de
Voigt, también llamada notación matricial, utiliza los corchetes {} y las llaves [] para
identificar vectores y matrices respectivamente.
El producto t δL:t C τ :t D , que forma parte del primer miembro de la (4.11), puede ser
reemplazado por t δD:t C τ :t D , debido a la simetría menor (3.57) del tensor C τ . Luego,
discretizando el cuerpo continuo en elementos finitos, utilizando la notación de Voigt, y
teniendo en cuenta (3.10), la (4.11) se transforma de la siguiente manera:
46 CAPÍTULO 4 Oscar Möller
dϕ (B ) !
{δuˆ! }T . ∫ B T .[ t C τ ].B . {uˆ } + {δuˆ! }T . ∫β
T
.[ t σ ].β.dϕ (B ) . {uˆ! } =
t J t
ϕ (B ) ϕ (B )
(4.15)
!
= {δuˆ! }T . T ! T
∫ N .{b! }. ρ.dϕ (B ) + {δuˆ } . ∫ N .{t}.d∂ϕ (B )
T
t
ϕ (B ) ∂ t ϕ (B )
u!ˆ11
!1
uˆ
u! N 0 # Nn 0 2
{u! } = N.{u!ˆ } , ó 1 = 1 " (4.17)
u! 2 0 N1 # 0 N n ! n
ˆ
u1
u!ˆ 2n
u!ˆ 1
L1 u!1,1 N 1,1 0 # N n ,1 0 1
L u! N u!ˆ 1
! 0 # N n,2 0 2
{L} = β.{uˆ } , ó 2 = 1, 2 = 1, 2 " (4.18)
L3 u 2 ,1 0 N n ,1
! N 1,1 # 0
L 4 u! 2, 2 0 u!ˆ n
N 1, 2 # 0 N n, 2 1
u!ˆ 2n
∂u! i ∂N i
con u! i , j = y N i, j = , ambas medidas sobre la configuración t ϕ (B ) .
∂x j ∂x j
Nótese que, por sobreentenderse su forma y para simplificar la escritura, en algunas de las
magnitudes no se colocan los corchetes o llaves de la notación de Voigt. La distribución de
los elementos de las matrices [ t σ ] y [C τ ] es obtenida considerando la igualdad que se debe
mantener entre el producto tensorial y el producto matricial:
t σ 11 t
σ 21 0 0
t t
σ σ 22 0 0
t
δL:t L.t σ = {δu!ˆ }T .β T .[ t σ ].β.{u!ˆ } ⇒ [ t σ ] ≡ 12 (4.19)
0 0 t
σ 11 t
σ 21
t t
0 0 σ 12 σ 22
tCτ t τ
C 1121 t τ
C 1112 t τ
C 1122
t τ1111
C t
C τ2121 t
C τ2112 t τ
C 2122
t
δL:t Cτ :t L = {δu!ˆ }T .β T .[ t Cτ ].β.{u!ˆ } ⇒ [ t Cτ ] ≡ t τ2111 (4.20)
C t τ
C 1221 t τ
C 1212 C 1222
t τ
t τ1211
C 2211
t
C τ2221 t
C τ2212 t τ
C 2222
ECUACIONES DE EQUILIBRIO 47
t C1111
τ t τ
C1122 t τ
C1112
τ
⇒ [ t C τ ] ≡ t C 2211 t τ
C 2222 t τ
C 2212 (4.21)
t C1211
τ t τ
C1222 C1212
t τ
u!ˆ11
D1 u!1,1 N 1,1 0 # N n ,1 0 u!ˆ 12
!
{D} = B.{uˆ } , ó D 2 = u! 2, 2 = 0 N 1, 2 # 0 N n,2 " (4.22)
D (u! + u! ) N N 1,1 N n, 2 N n ,1 u!ˆ1n
3 1, 2 2 ,1 1, 2 #
u!ˆ 2n
Para buscar la solución paso a paso del problema no lineal, con pasos discretos de tiempo ∆t,
se requiere que la (4.15) esté expresada en forma incremental. En consecuencia, es necesario
transformar los diferenciales de tiempo (o tasas) a diferencias finitas:
t + ∆t
∂u ∆ u u− t u
v = u! ≡ ≅ = (4.23)
∂t ∆t ∆t
De acuerdo a lo discutido en la sección 1.3, todas las magnitudes se definen sobre la última
configuración equilibrada (tiempo t), y se pasa a la siguiente (tiempo t+∆t) mediante un
proceso iterativo, como el de Newton-Raphson. Por lo tanto, se linealiza el problema
considerando que tanto las variables en tasas como sus incrementos están referenciados sobre
la configuración del tiempo t, es decir, se utilizan las mismas matrices β de (4.18) y B de
(4.22), medidas en el tiempo t, para el cálculo incremental. La matriz de rigidez del sistema de
elementos finitos, que surge de la linealización del primer miembro de la (4.15), se denomina
matriz de rigidez tangente.
dϕ (B )
∫ B .[ C ].B J + ∫ β .[ σ ].β.dϕ (B ) .{∆uˆ } =
T t τ T t
t ϕ (B ) t ϕ (B )
(4.24)
= ∫N .{∆b}. ρ.dϕ (B ) + ∫N .{∆ t}.d∂ϕ (B )
T T
t ϕ (B ) ∂ t ϕ (B )
El primer miembro se conoce comúnmente como fuerzas nodales internas, por ser las
reacciones internas que equilibran al segundo miembro, conocido como fuerzas nodales
48 CAPÍTULO 4 Oscar Möller
externas. Nótese que las fuerzas internas están relacionadas al incremento de los
desplazamientos nodales ∆û a través de dos términos: el primero debido a la respuesta del
material, y el segundo debido al estado actual de tensiones, el cual lleva en cuenta todos los
efectos geométricos de la deformación, como rotaciones y elongaciones. En consecuencia, a
estos términos se los denomina rigidez de material K mat y rigidez geométrica K geo ,
respectivamente, y la suma de ambas forma la matriz de rigidez tangente del sistema de
elementos finitos. En forma matricial compacta se puede escribir la siguiente ecuación:
(K mat + K geo ) . ∆uˆ = ∆Fext (4.25)
siendo:
dϕ (B )
K mat = ∫
t ϕ (B )
B T .[ t C τ ].B
J
(4.26)
K geo = ∫ β T .[ t σ ].β.dϕ (B )
t ϕ (B )
(4.27)
La solución de la (4.25), que da los desplazamientos nodales ∆û , se calcula con cualquier
método de resolución de sistemas de ecuaciones algebraicas, luego de imponer las
condiciones de borde (o de contorno) al sistema de elementos finitos, y en cada iteración del
proceso incremental. Debido a que el problema es no lineal, y de acuerdo a lo discutido en la
sección 1.3, al final de cada iteración o ciclo de cálculo aparece un error o residuo ℜ que,
para un proceso incremental, vale:
ℜ = ∆Fext − ∆Fint ≠ 0 (4.29)
dϕ (B )
= ∆Fext − ∫ B T .[ t C τ ].∆eˆ + ∫
T
β .[ σ].∇∆u.dϕ (B ) ≠ 0
t ˆ (4.30)
t ϕ (B ) J
t ϕ (B )
∆eˆ1 ∆eˆ11
1 ∂∆uˆ ∂∆uˆ j
∆eˆ = B.∆uˆ = ∆eˆ2 = ∆eˆ 22 , con ∆eˆij = t i + t
t (4.31)
∆eˆ 2∆eˆ 2 ∂ x j ∂ xi
3 12
∇∆uˆ1 ∆uˆ1,1
∇∆uˆ ∆uˆ
2 1, 2 ∂∆uˆ
∇∆uˆ = β.∆uˆ =
t
= , con ∆uˆ i , j = t i (4.32)
∇∆uˆ 3 ∆u 2,1
ˆ ∂ xj
∇∆uˆ 4 ∆uˆ 2, 2
El cálculo del residuo ℜ con la (4.30) puede introducir, en algunos casos, errores
numéricos por redondeo, que se acumulan hacia adelante al avanzar en el tiempo con los
incrementos de carga. Para evitar estos errores y lograr un mejor control en el cálculo de la
tensión total en el tiempo t+∆t, se puede calcular el vector residuo como la diferencia que
surge de plantear el equilibrio del cuerpo en un instante determinado t+∆t, con el total de los
esfuerzos actuantes en ese momento, es decir:
Esta expresión también puede ser obtenida a partir de la ecuación de equilibrio (4.3).
Procediendo de manera similar a lo realizado entre (4.5) y (4.7):
B B
= t τ:t ∇ η (4.35)
siendo:
t
Fext = ∫ N T .{t b}. ρ.dϕ (B ) + ∫ N T .{t t}.d∂ϕ (B )
t ϕ (B )
(4.38)
∂ t ϕ (B )
50 CAPÍTULO 4 Oscar Möller
La igualdad (4.37) es válida cuando todas las magnitudes están medidas sobre una
configuración equilibrada, genéricamente en el tiempo t. Al avanzar al tiempo t+∆t, debido a
la no linealidad del problema, la igualdad anterior no se cumple, resultando la (4.33). En dicha
expresión la magnitud de las variables corresponde al tiempo actual t+∆t, pero están aplicadas
sobre la última configuración equilibrada conocida (tiempo t).
El vector residuo ℜ , calculado con (4.30) o (4.33), es tenido en cuenta como carga para la
siguiente iteración de cálculo. El proceso iterativo se detiene, para proceder con el siguiente
incremento de tiempo (o carga), siguiendo la técnica de Newton-Raphson mencionada en la
sección 1.3, cuando el valor de ℜ se hace menor o igual a una cierta tolerancia
preestablecida.
ELASTOPLASTICIDAD 51
CAPÍTULO 5
ELASTOPLASTICIDAD
5.1. GENERALIDADES
Los materiales que desarrollan deformaciones totalmente recuperables (deformaciones
elásticas) sólo hasta un cierto nivel de tensiones o límite elástico, y deformaciones
irrecuperables (deformaciones plásticas) mas allá de este límite, se denominan materiales
elastoplásticos. Estos materiales también son clasificados como tasa independientes (o tiempo
independientes) porque la respuesta del material no depende de la tasa de deformación, es
decir, de la velocidad con que se aplica la carga, contrastando con los materiales
viscoelastoplásticos, típicamente tasa dependientes (o tiempo dependientes).
En el campo plástico los materiales elastoplásticos presentan un comportamiento disipativo y
camino dependiente, esto es, parte de la energía de deformación es irreversiblemente
transformada a otras formas de energía, como calor, generándose deformaciones plásticas
irreversibles cuya magnitud habrá que conocer antes de calcular las tensiones. En
consecuencia, al depender las tensiones de la historia completa de la deformación, no pueden
calcularse con una simple función de la deformación actual. En estos casos sólo pueden
establecerse relaciones entre tasas (o incrementos) de tensiones y de deformaciones,
adoptándose, como fuera señalado en las secciones 1.3 y 2.1, procesos incrementales de
solución con formulaciones Lagrangianas actualizadas.
La inclusión en el análisis de la no linealidad geométrica permite la representación de los
grandes desplazamientos, rotaciones y elongaciones que sufre el material a lo largo del
proceso de carga, pero requiere del uso de magnitudes y relaciones constitutivas objetivas, de
acuerdo a lo visto en la sección 3.3. Además, estas leyes constitutivas pueden ser
hiperelásticas o hipoelásticas, según deriven o no de un funcional de energía almacenada (ver
sección 3.3). En consecuencia, los modelos de plasticidad se denominan hiperelastoplásticos o
hipoelastoplásticos, según la respuesta del material en el campo elástico siga una ley
hiperelástica o hipoelástica, respectivamente. En ambos casos, la formulación del campo
plástico se desarrolla de manera análoga a la plasticidad infinitesimal (o de pequeñas
deformaciones), es decir, se utiliza la teoría clásica de plasticidad (ver Zienkiewicz – Taylor
1991, vol. 2, pag. 228 a 239), cuyos principales elementos son:
52 CAPÍTULO 5 Oscar Möller
τ ∇ + = C τ∇ : D + (5.1)
Recordando la transformación objetiva de los tensores de segundo orden (3.15), se puede
escribir:
y reordenando se tiene:
∇
τ mn = (Qim Q jn Qkp Qlq C ijkl
τ∇
) D pq (5.3)
condición que se satisface sólo para materiales isotrópicos. Para eliminar esta restricción, se
elige la relación constitutiva (3.46), τ! = C τ : D , en términos de los tensores tasa de la tensión
corrotada de Kirchhoff y tasa de deformación corrotada, insensibles a rotaciones de cuerpo
rígido, es decir, τ! + ≡ τ! y D + ≡ D . En consecuencia:
ELASTOPLASTICIDAD 53
τ! + = C τ : D + ≡ τ! = C τ : D (5.5)
cumpliéndose la condición (5.1) para toda rotación rígida, no imponiendo restricciones a este
tensor constitutivo, esto es, C τ puede ser anisotrópico.
Si el material fuera isotrópico, resulta:
τ
C ijkl = λδ ij δ kl + µ (δ ik δ jl + δ il δ jk ) (5.6)
E νE
µ= ,y λ= (5.7)
2(1 + ν ) (1 + ν )(1 − 2ν )
las constantes de Lamé en función del módulo Young E y del coeficiente de Poisson ν .
Otro de los requerimientos a tener en cuenta en la elección de la ecuación constitutiva
hipoelástica es la simetría de la matriz de rigidez tangente de los elementos finitos, necesaria
para acelerar la solución del sistema de ecuaciones (4.25) y reducir la demanda de
almacenamiento en memoria en el cálculo computacional. Esta simetría, como puede
observarse en las (4.26) y (4.27), se cumple si las matrices [ t σ ] y [C τ ] son simétricas. De
acuerdo a (4.19), la matriz [ t σ ] es simétrica por ser simétrico el tensor de Cauchy σ , y de
acuerdo a (4.21), la matriz [C τ ] será simétrica si el tensor constitutivo C ijkl
τ
posee simetría
mayor. Recordando (3.47), (3.39) y (2.43), se tiene:
τ! = C τ : D = R T ( τ! − Ωτ − τΩ T )R
[
= R T τ! − Wτ − τW T + ( W − Ω) τ + τ ( W − Ω) T R ]
= R T [Lv τ + Dτ + τD + ( W − Ω) τ + τ ( W − Ω) T ]R
donde:
1
′ =
C ′ : D = Dτ + τD , ó C ijkl (δ ik τ jl + δ ilτ jk + δ jk τ il + δ jl τ ik ) (5.9)
2
y
C′′ : D = ( W − Ω) τ + τ ( W − Ω) T (5.10)
R ( C τ : R T DR )R T = (C τ + C′ + C′′) : D (5.11)
o en notación indicial:
τ
Rim R jn Rkp Rlq C mnpq Dkl = (C ijkl
τ
′ + C ijkl
+ C ijkl ′′ ) Dkl (5.12)
de donde se despeja:
C τ = RR C τ R T R T − C′ − C′′ , ó C ijkl
τ
= Rim R jn Rkp Rlq C mnpq
τ
′ − C ijkl
− C ijkl ′′ (5.13)
54 CAPÍTULO 5 Oscar Möller
Los tensores C τ y C ′ poseen simetría menor y mayor, pero el tensor C ′′ no posee simetría
mayor (ver Simo – Hughes 1998, pag. 273), tornando no simétrico al tensor C τ . En
consecuencia, la matriz de rigidez material tangente (4.26) resulta no simétrica. Por lo tanto,
para conservar la simetría de la matriz de rigidez tangente debería eliminarse el tensor C ′′ , es
decir, se debería considerar que W = Ω , resultando, a partir de la primer igualdad de (5.8)
que:
τ! = R T τ ∇J R (5.14)
[C τ ] = [ C τ ] − [C′] (5.15)
donde la matriz [C′] para problemas bidimensionales, según (5.9) y (4.14), resulta:
2τ 11 0 τ 12
[C′] ≡ 0 2τ 22 τ 12 , con τ 12 = τ 21 (5.16)
τ 12 τ 12 1
(τ 11 + τ 22 )
2
D = DE + DP (5.17)
La parte elástica es la que se relaciona, a través de la ecuación constitutiva (5.15), con la tasa
corrotada de la tensión de Kirchhoff, esto es:
τ! = C τ : D E = C τ : ( D − D P ) (5.18)
Mientras que la parte plástica queda definida por la regla de flujo plástico como:
! .a ( τ, k )
DP = Λ (5.19)
∂Q ( τ , k )
a ( τ, k ) = (5.20)
∂τ
∂F ( τ, k )
dε P = dΛ (5.21)
∂τ
El resto de las ecuaciones de plasticidad, incluidas las deducciones del parámetro plástico dΛ
τ
y de la matriz constitutiva elastoplástica C EP se desarrollan de manera totalmente análoga al
caso de plasticidad infinitesimal (linealidad geométrica), pero en términos de las tensiones
corrotadas τ . Además estos desarrollos son comunes a los de los modelos
hiperelastoplásticos. Por lo tanto, fueron agrupados en la sección 5.4.
Con el objeto de analizar con más detalle la influencia de la parte asimétrica del tensor
constitutivo C τ , y tratando de ampliar lo ya publicado por Simo – Hughes (1998, pag. 273), a
continuación se estudia en cuales casos este tensor C τ puede ser supuesto simétrico, y en
cuales otros casos no es posible realizar tal suposición.
τ! = R T ( τ! − Ωτ − τΩ T )R
[ ]
= R T Lv τ + ( L − Ω ) τ + τ ( L − Ω ) T R (5.22)
D=
1
2
( 1
) [
L + LT = (L − Ω) + (L − Ω) T
2
] (5.23)
C τ : RT
1
2
[
( L − Ω ) + (L − Ω) T R = ]
2
[ ]
= R T C τ : (L − Ω) + (L − Ω) T + C′′′ : (L − Ω)R
1
(5.24)
donde:
C′′′ : (L − Ω) = (L − Ω) τ + τ (L − Ω) T , ó C ijkl
′′′ = δ ik τ jl + δ il τ jk (5.25)
τ 1 τ τ
Teniendo presente que C τ posee simetría menor, se tiene: C mnpq = (C mnpq + C mnqp ) . Por lo
2
tanto se puede despejar en notación indicial:
1 τ
Cˆ ijkl
τ
= (C ijkl τ
+ C ijlk τ
) = Rim R jn Rkp Rlq C mnpq ′′′
− C ijkl (5.26)
2
56 CAPÍTULO 5 Oscar Möller
′′′ = C ijkl
C ijkl sim asim
+ C ijkl (5.27)
donde:
sim
′ = 1
C ijkl ≡ C ijkl (δ ik τ jl + δ il τ jk + δ jk τ il + δ jl τ ik ) , C ijkl
′ = C ′jikl = C ijlk
′ = C klij
′ (5.28)
2
posee simetría mayor y menor, y:
Por supuesto, en los demás casos, en que C asim posea un valor no despreciable, el tensor C τ
se tiene que calcular con (5.13) o (5.26), debiendo resolverse necesariamente sistemas no
simétricos de ecuaciones de elementos finitos.
F = FEFP (5.31)
∂w (ε E )
τ= (5.32)
∂ε E
∂x ∂x ∂x *
= (5.33)
∂X ∂x * ∂X
siendo C τ el tensor constitutivo elástico constante que contiene las características del
material y que relaciona:
τ = C τ : ε E , ó τ ij = C ijkl
τ
ε klE (5.37)
∂ 2 w (ε E ) ! E
τ! = : ε = C τ : ε! E = C τ : D E (5.38)
∂ε E ∂ε E
ELASTOPLASTICIDAD 59
∂ 2 w (ε E ) τ ∂2w
Cτ = , ó C ijkl = (5.39)
∂ε E ∂ ε E ∂ε ijE ∂ε klE
con µ y λ las constantes de Lamé definidas en (5.7). La evaluación del tensor constitutivo
C τ , utilizado en el cálculo de la matriz de rigidez material (4.26), se realiza con la expresión
(5.13), o de acuerdo a lo discutido debajo de dicha expresión, para mantener la simetría de la
matriz de rigidez tangente, se puede despreciar el tensor C ′′ , resultando:
C τ = R E R E C τ (R E ) T (R E ) T − C′ , ó C ijkl
τ
= Rim
E E E E
R jn Rkp τ
Rlq C mnpq ′
− C ijkl (5.41)
con C ′ definido en (5.9). Y para el caso particular de materiales isotrópicos, se puede escribir
en notación matricial o de Voigt:
[C τ ] = [ C τ ] − [C′] (5.42)
L = F! F −1 = (F! E F P + F E F! P )(F P ) −1 (F E ) −1
= F! E (F E ) −1 + F E F! P (F P ) −1 (F E ) −1 = LE + LP (5.43)
L = (R E ) T .L.R E = LE + LP (5.44)
con:
! E .(U E ) −1
LE = (R E ) T .LE .R E = (R E ) T .Ω E .R E + U (5.45)
L = D + W ≡ L E + LP = ( D E + W E ) + ( D P + W P ) (5.47)
siendo:
60 CAPÍTULO 5 Oscar Möller
DE =
2
[
1 E 1 ! E E −1
L + ( LE ) T = U
2
] [ ! E ≡ ε! E
(U ) + (U E ) −1 U ] (5.48)
WE =
1 E
2
[ ] 1 ! E E −1
L − ( LE ) T = ( R E ) T Ω E R E + U
2
[ !E
(U ) − (U E ) −1 U ] (5.49)
DP =
1 P
2
[ 1
] [
L + ( LP ) T = U E F! P (F P ) −1 (U E ) −1 + (U E ) −1 (F P ) −1 F! P U E ≡ ε! P
2
] (5.50)
WP =
2
[
1 P 1
] [
L − ( LP ) T = U E F! P (F P ) −1 (U E ) −1 − (U E ) −1 (F P ) −1 F! P U E
2
] (5.51)
donde se utilizó la simetría tanto de U E como de F P . Las partes elástica y plástica de la tasa
de la deformación logarítmica simétrica ε! , aplicadas a las últimas igualdades de (5.48) y
(5.50), respectivamente, pueden ser calculadas recordando (2.51) y la segunda expresión de
(5.34):
ε! = U
2
[
1 ! −1 !
U + U −1 U ]
=
2
[
1 !E P
(U F + U E F! P )(F P ) −1 (U E ) −1 + (U E ) −1 (F P ) −1 (F! P U E + F P U
! E) ]
=
2
[
1 ! E E −1
] [
! E + 1 U E F! P (F P ) −1 (U E ) −1 + (U E ) −1 (F P ) −1 F! P U E
U (U ) + (U E ) −1 U
2
]
= ε! E + ε! P (5.52)
Teniendo en cuenta que:
DE =
1 E
2
[ ] 1
[
L + (LE ) T = R E D E (R E ) T , y D P = LP + (LP ) T = R E D P (R E ) T
2
] (5.53)
τ : D = τ : (D E + D P ) ≡ τ : D = τ : ( D E + D P ) (5.54)
La regla de flujo plástico puede ser definida como (ver Belytschko – Liu - Moran
2000, pag. 268):
donde cada uno de los elementos de la última igualdad tienen el mismo significado que los
definidos en (5.9). Pero también, manteniendo la analogía con la plasticidad infinitesimal, la
regla de flujo plástico en materiales hiperelastoplásticos puede ser expresada como:
Cualquiera de las definiciones (5.55) o (5.56) conducen a la misma evaluación del gradiente
de deformación plástico F P del tiempo actual t+∆t. Utilizando el mismo razonamiento que en
(5.33), se puede decir que un incremento de deformación se produce en dos etapas, primera
una plástica, desde el tiempo anterior equilibrado t hasta la configuración ficticia relajada del
tiempo intermedio t * (está claro que en este caso: t < t * < t+∆t), y luego otra elástica, desde
el tiempo t * hasta el tiempo actual t+∆t. Planteando entonces la integral en el tiempo de
(5.55), o (5.56), desde t hasta t * , las deformaciones elásticas se mantienen invariables, en
consecuencia:
[ ]
t∗
t∗ t∗
t
U . ∫ F! P .(F P ) −1 dt.( t U E ) −1 = t U E .ln F P
E
.( t U E ) −1 = t U E . ln F P .( t F P ) −1 .( t U E ) −1 =
t
t
t + ∆t
= ∆ε =
P
∫ Λ! .a (τ, k ).dt (5.57)
t
donde la última integral es calculada como una sumatoria por el algoritmo de retorno de
tensiones. Despejando el gradiente de deformación plástico del tiempo actual, se tiene:
t + ∆t ∗
[
F P ≡ t F P = exp ( t U E ) −1 .∆ε P .t U E .t F P ] (5.58)
Al igual que lo aclarado al final de la sección 5.2, el resto de las ecuaciones de plasticidad en
términos de las tensiones corrotadas son comunes a las del modelo hipoelastoplástico, y son
desarrolladas en la siguiente sección.
∂F ( τ, k )
dε P = dΛ (5.60)
∂τ
Y el incremento de deformación elástica, según (5.18) o (5.38), se puede escribir como:
62 CAPÍTULO 5 Oscar Möller
dε E = [ C τ ] −1 dτ (5.61)
∂F ( τ , k )
d ε = dε E + dε P = [ C τ ] −1 dτ + dΛ (5.62)
∂τ
La condición de plastificación, que determina el nivel de tensiones τ para el cual se inician
las deformaciones plásticas, puede ser escrita en forma genérica como:
F ( τ, k ) = f ( τ ) − g (k ) = 0 (5.63)
∂F ∂F ∂F
dF = dτ + dk = dτ − A.dΛ = 0 (5.64)
∂τ ∂k ∂τ
donde el parámetro A viene dado por:
∂F dk
A=− (5.65)
∂k dΛ
Luego, a partir de (5.62) y (5.64), análogamente a la plasticidad infinitesimal, se deduce el
incremento del multiplicador plástico:
a T [C τ ] dε
dΛ = T τ (5.66)
a [ C ]a + A
donde a es la dirección del flujo plástico (5.20), representado en plasticidad asociada por el
vector normal a la superficie de fluencia:
∂F ( τ, k ) ∂f ( τ ) ∂f ∂f ∂f ∂f ∂f ∂f
a= ≡ , ó aT = , , , , , (5.67)
∂τ ∂τ ∂τ 11 ∂τ 22 ∂τ 33 ∂τ 23 ∂τ 31 ∂τ 12
La matriz constitutiva elastoplástica, definida por:
dτ = [ C EP
τ
]d ε = [ CEP
τ
](d ε E + d ε P ) (5.68)
puede ser deducida a partir de (5.62) y (5.66), obteniéndose en notación matricial o de Voigt:
[ C τ ].a.a T .[ C τ ]
τ
[ C EP ] = [C τ ] − (5.69)
a T .[ C τ ].a + A
y en notación tensorial:
ELASTOPLASTICIDAD 63
τ τ
C τ .a.a T .C τ C ijmn a mn a pq C pqkl
τ
CEP =C − T τ
τ
, ó (C EP ) ijkl = C ijkl −
τ τ
(5.70)
a .C .a + A τ
a rs C rstu a tu + A
Una función escalar de variable tensorial satisface la condición de objetividad, según (3.30),
si cumple:
+
f = f , ó f (τ + ) = f (τ) (5.71)
Como las tensiones corrotadas de Kirchhoff se mantienen invariables ante rotaciones rígidas,
esto es τ + ≡ τ de acuerdo a (3.29), entonces no se imponen restricciones a la función de
fluencia, es decir, f (τ ) puede representar un comportamiento anisotrópico en la
plastificación. De otra manera, si la variable tensorial fuera una medida de tensión que no es
invariable ante rotaciones rígidas, tal el caso de σ según (3.23) o τ según (3.26), entonces la
función de fluencia, para que se cumpla (5.71), debería ser una función isotrópica de las
tensiones, y por lo tanto, debería depender solamente de los invariantes de tensiones (ver
Simo – Hughes 1998, pag. 261). De acuerdo a lo visto aquí y en (5.5), se observa que
formular el comportamiento del material en términos de tensiones corrotadas no impone
restricciones de isotropía a la respuesta del modelo, ni en el campo elástico ni en el plástico.
donde:
∂I 1
a1T = = {1, 1, 1, 0, 0, 0}
∂τ
1
a 2T =
∂ (J 2 2 )
∂τ
{
= τ 11d , τ 22
d
, τ 33
d
}
, 2τ 12 , 2τ 23 , 2τ 31
1
(5.73)
2 J2
−
∂θ
a 3T =
∂τ
d d J J J
= τ 22 τ 33 − τ 23
2
+ 2 , τ 11
d d
τ 33 − τ 13
2
+ 2 , τ 11
d d
τ 22 − τ 12
2
+ 2 , 2τ 11
d d
τ 23 , 2τ 22 d
τ 13 , 2 τ 33 τ 12
3 3 3
En tanto, las constantes C i , al igual que la forma explícita de la función de fluencia (5.73),
están definidas según el criterio de plastificación que se adopte, el cual depende del material
en estudio.
Se desarrolla la formulación, en términos de las tensiones corrotadas de Kirchhoff, del criterio
de plastificación de Von Mises, aplicable a sólidos metálicos. Para realizar dicha tarea es
64 CAPÍTULO 5 Oscar Möller
necesario calcular inicialmente los invariantes de tensiones. El primer invariante del tensor de
Cauchy es:
I 1 = σ ii = σ : I (5.74)
I 1 = τ ii = J (R E ) T σR E : I = Jσ : R E I (R E ) T = Jσ : I = JI 1 (5.75)
=
1
2
[ 1
]
J (R E ) T σ d R E : J (R E ) T σ d R E = J 2 (σ d : σ d ) = J 2 J 2
2
(5.77)
El tercer invariante del tensor desviador de Cauchy, teniendo en cuenta la simetría de σ , es:
1 1 1
J 3 = σ ijd σ djk σ kid = σ d : (σ d σ d ) T = σ d : σ d σ d (5.78)
3 3 3
y expresado en términos de la tensión corrotada de Kirchhoff es:
1 1 1
J 3 = τ ijdτ jkd τ kid = τ d : τ d τ d = J 3 (σ d : σ d σ d ) = J 3 J 3 (5.79)
3 3 3
El criterio de plastificación de Von Mises establece los siguientes valores de las constantes de
(5.72):
C1 = 0
C 2 = J −1 3 (5.80)
C3 = 0
mientras que la función de fluencia, representada gráficamente en la fig.5.2, y para
endurecimiento isotrópico, resulta:
F ( τ, k ) = f ( τ ) − g (k ) = 0 (5.81)
g (k ) = g (k ) ⇒ f ( τ ) = f (σ ) (5.82)
ELASTOPLASTICIDAD 65
f (σ ) = 3 J 2 (5.83)
f ( τ ) = J −1 3 J 2 = J −1 f ( τ ) (5.84)
∂F dk ∂g dk ET
A=− = = H'= (5.85)
∂k dΛ ∂k dΛ E
1− T
E
siendo E y ET los módulos de elasticidad longitudinales correspondientes al campo elástico
y plástico, respectivamente, obtenidos ambos de ensayos unidimensionales.
σ3
σ2
Superficie de fluencia
σ1
CAPÍTULO 6
6.1. INTRODUCCIÓN
La ingeniería estructural ha tenido siempre como objetivo fundamental lograr niveles de
seguridad que correspondan a probabilidades extremadamente bajas de ocurrencia de eventos
de consecuencias significativas. La forma de alcanzar este objetivo ha variado enormemente a
través de los siglos, desde amenazas de penas severas al constructor y sus propiedades, según
la ley de “ojo por ojo” de Hammurabi en el reino de Babilonia, hasta las modernas
prescripciones de los códigos basados en probabilidades, y análisis de confiabilidad para
sistemas específicos.
En el caso particular de la ingeniería sismorresistente, la filosofía de diseño, aceptada
mundialmente desde hace más de dos décadas, consiste en (i) Prevenir daños en terremotos
menores de ocurrencia frecuente durante la vida útil de la estructura; (ii) Prevenir daños
estructurales y minimizar los daños en elementos no estructurales durante terremotos
moderados que ocasionalmente podrían ocurrir; (iii) Evitar el colapso y daños muy
significativos para proteger la vida de las personas en terremotos severos de ocurrencia rara.
Para implementar dicha filosofía, en la actualidad se utiliza la “Ingeniería sísmica basada en la
performance” en la cual es necesario cuantificar la respuesta de la estructura para poder
evaluar los diferentes niveles de performance. Los criterios de diseño de estructuras de
hormigón armado sismorresistente conducen a esperar un comportamiento “elástico” solo
para sismos frecuentes y ocasionales, y permitiendo importantes deformaciones en el campo
no lineal y disipación de energía en regiones críticas para sismos de ocurrencia rara a muy
rara.
Entonces, para predecir la respuesta de estructuras bajo acciones sísmicas, son necesarios
modelos matemáticos que representen el comportamiento elástico y el histerético de las
diferentes regiones críticas, dentro de un esquema general de solución de problemas
dinámicos con no linealidad física y geométrica.
Muchos modelos han sido propuestos en las últimas tres décadas. Ellos pueden ser agrupados
en tres categorías de acuerdo con un nivel creciente de refinamiento y complejidad:
68 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
! Modelos globales: la respuesta no lineal es representada por muy pocos grados de libertad,
por ejemplo un grado de libertad horizontal por piso en un pórtico. Estos modelos son útiles
en etapas de diseño preliminar para estimar distorsiones de piso y demandas de ductilidad de
desplazamientos. La confiabilidad en la predicción de desplazamientos es pobre, y la
determinación de esfuerzos internos en los elementos (vigas, columnas), a partir de este
número limitado de grados de libertad es prácticamente imposible.
! Modelos de elementos finitos “discretos” (barras): la estructura es modelada como un
ensamble de elementos que describen el comportamiento histerético de miembros de
hormigón armado. Relaciones constitutivas no lineales se introducen a nivel de elemento en
un sentido promedio, ó a nivel de secciones. Correspondientemente dan origen a dos posibles
formulaciones: (i) no linealidad concentrada, (ii) no linealidad distribuida.
! Modelos de elementos finitos 2D, 3D: miembros y nudos son discretizados en un gran
número de elementos finitos. No linealidad física y geométrica se introducen a nivel tensión-
deformación, pudiéndose representar toda clase de fenómenos tales como deterioro de
adherencia entre acero y hormigón, fricción en la interfaz entre fisuras, creep, relajación,
fenómenos térmicos, etc.
En este trabajo se desarrollan modelos del segundo grupo que constituyen el mejor balance
entre simplicidad y precisión en el estudio de respuesta no lineal. Modelos globales producen
poca información sobre esfuerzos internos, deformaciones y distribución de daño en la
estructura. Por otro lado, modelos refinados de elementos finitos 2D ó 3D, que no implica
necesariamente el de menor error de previsión (Carqueja y Riera, 1997), están limitados al
análisis de regiones críticas o subensambles. De todas manera los resultados obtenidos con
estos últimos, sumados a evidencias experimentales, son útiles para definir los parámetros de
los modelos de barra.
6.2. ANTECEDENTES
Se resumen a continuación los principales modelos desarrollados desde hace más de tres
décadas, dentro de los catalogados como modelos de elementos finitos “discretos” o barras.
Uno de los primeros elementos fue presentado por Clough et.al. (1965) que consiste en un
modelo de dos componentes en paralelo, uno elástico perfectamente plástico que representa la
fluencia y el otro perfectamente elástico que representa el endurecimiento. La rigidez del
miembro es la suma de las rigideces de sus componentes. Uno de los inconvenientes es la
dificultad de considerar el deterioro de la rigidez de elementos de hormigón armado durante
las reversiones de los ciclos de carga.
El modelo en serie propuesto por Giberson (1967, 1969) consiste en un elemento elástico
lineal con un resorte no lineal adicionado en cada extremo, donde se concentra toda la
plasticidad. La ventaja es que cualquier ley histerética puede ser considerada, especial para
introducir relaciones fenomenológicas obtenidas de ensayos experimentales.
Las primeras relaciones constitutivas fueron las de Clough (1965) y luego Takeda et al.
(1970) con un modelo trilineal más refinado con un gran número de reglas para la descarga y
recarga intentando simular evidencias experimentales.
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 69
Una diferente aproximación fue introducida por Otani (1974) donde el elemento está formado
por dos voladizos conectados en un punto de contraflexión. El comportamiento global del
modelo se obtiene por integración de las curvaturas a lo largo de los dos voladizos. La
principal limitación es la posición del punto de inflexión fijo y en el centro de la barra para no
perder la simetría en la matriz de rigidez. Resortes no lineales en los extremos simulan, por
primera vez, la rotación concentrada por deslizamiento de armadura.
Mahin y Bertero (1976) modificaron factores de ductilidad representados por el modelo de
dos componentes para considerar que las deformaciones inelásticas se difunden dentro del
elemento.
Anderson y Townsend (1977) investigaron el efecto de diferentes modelos histeréticos en el
comportamiento de las regiones críticas: (a) modelo bilineal elasto plástico con
endurecimiento; (b) modelo bilineal con degradación e igual rigidez en descarga y recarga; (c)
modelo trilineal con degradación para conexiones viga-columna. Se mostró que la reducción
de rigidez tiene una gran importancia, y el modelo trilineal degradante para la conexión
aparece como el más preciso.
Soleimani et al. (1979) considera por primera vez que la deformación inelástica se extiende
progresivamente desde los extremos, en función de la historia de carga. La rotación
concentrada en los extremos se modela con la curvatura de la sección extrema de la barra y
una longitud efectiva fija durante el análisis. Es un modelo basado en flexibilidad que
garantiza el equilibrio a lo largo de todo el elemento.
El efecto de la carga axial sobre la rigidez a flexión fue considerado por Takayanagi y
Schnobrich (1979) en un estudio de respuesta sísmica de tabiques acoplados. El efecto del
corte en las vigas de acoplamiento es también analizado, junto con la rotación localizada en la
unión con el tabique, a través de resortes no lineales.
Emori y Schnobrich (1981) compararon los resultados de varios modelos: (a) modelo de
resortes concentrados (similar al modelo de Otani); (b) modelo compuesto por varios resortes
conectados por elementos rígidos, con la capacidad de desplazar el punto de inflexión durante
el análisis; (c) se cambian los resortes extremos por un elemento de longitud Lp donde la
mayor deformación inelástica es esperada. Este elemento se forma por capas permitiendo la
interacción entre esfuerzo axial y flexión.
Para tener en cuenta la real pendiente de endurecimiento post-fluencia de la relación momento
rotación de los resortes extremos (en los modelos tipo Giberson o de un componente),
Anagnostopoulos (1981) señaló un proceso iterativo para modificar el endurecimiento de la
relación momento curvatura.
Banon et al. (1981) introdujo, en el modelo de un componente, el efecto de estrangulamiento
o “pinching” debido al corte y deterioro de adherencia, a través de resortes no lineales en los
extremos. También propuso indicadores de daño para cuantificar la performance de la
estructura durante el terremoto. La degradación por corte también fue considerada por
Brancaleoni et al. (1983).
El análisis de diferentes modelos histeréticos fue realizado por Saiidi (1982): elasto-plástico
perfecto, elasto-plástico con endurecimiento, modelo de Clough, y un nuevo modelo de Q-
histéresis. Los dos primeros son simples pero no realistas. Los restantes, más complejos,
contemplan la degradación de rigidez durante la descarga y recarga. Se compararon resultados
con el modelo de Takeda encontrándose el Q-histéresis como el más preciso.
70 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
Un nuevo modelo de plasticidad distribuida fue presentado por Meyer et al. (1983), similar al
de Soleimani, pero con diferente rigidez en la zona plástica durante la recarga y utiliza el
modelo de Takeda para la relación momento curvatura. No tiene en cuenta la rotación
concentrada en los extremos.
Sonzogni y Bignon (1983) desarrollaron un modelo con plasticidad distribuida sobre una
longitud finita, incluyendo deformaciones por corte, influencia de la carga axial sobre el
momento de fluencia, y degradación de la rigidez elástica en función de la deformación
plástica.
Un estudio analítico y experimental sobre el efecto del deterioro del anclaje en los extremos
fue realizado por Otani et al. (1985). Utilizó el modelo de un componente con las reglas de
Takeda. Los resortes en los extremos también se caracterizan con el modelo de Takeda
considerando “pinching” durante la recarga.
Keshavarzian y Schnobrich (1985) extendieron el modelo de Soleimani a columnas. También
Roufaiel y Meyer (1987) ampliaron el modelo de Meyer et al. (1983) incorporando los efectos
de fuerza axial y corte en el comportamiento histerético a flexión.
Filippou y Issa (1988) subdividen el elemento en diferentes subelementos, cada uno de los
cuales describe un simple efecto: (a) subelemento elástico que modela el comportamiento a
flexión antes de la fluencia de las armaduras; (b) subelemento plástico para el
comportamiento inelástico a flexión con gradual extensión de la longitud plastificada en los
extremos de acuerdo a la historia de carga; (c) subelemento conexión que modela la rotación
concentrada en la interfaz barra nudo por deterioro del anclaje y deslizamiento de armaduras.
Las leyes constitutivas en cada subelemento son simples, mientras que el modelo completo
presenta un comportamiento histerético complejo debido a la interacción entre los
subelementos.
Filippou et al. (1992) extendieron el trabajo anterior incorporando un subelemento que
describe la distorsión por corte especialmente en las regiones extremas plastificadas, y un
subelemento para columnas como una ampliación del modelo para vigas considerando el
efecto de carga axial.
También Spacone et al. (1992) presentaron un elemento de viga con no linealidad distribuida
y dos resortes rotacionales en los extremos. Está basado en flexibilidad y satisface
estrictamente el equilibrio interno. Desarrolla un algoritmo robusto de solución del problema
no lineal para la determinación del estado del elemento, y una relación diferencial momento
curvatura para el comportamiento histerético de las secciones de control, incluyendo la
consideración del daño progresivo.
Un modelo con múltiples resortes para el análisis de columnas, que considera la interacción
entre fuerza axial y momento flector bidireccional, fue presentado por Li y Otani (1993). Otro
modelo global introducido por Miramontes et al. (1996) está basado en una ley cíclica
uniaxial momento-curvatura, con una nueva formulación para la degradación de la resistencia
y rigidez en las ramas de endurecimiento y ablandamiento, dependiendo de la historia de
cargas.
Una correlación entre el modelo desarrollado por Filippou et al. (1992) y evidencias
experimentales en un pórtico de 2 niveles fue presentado por D´Ambrisi y Filippou (1997),
mostrando el buen desempeño y la posibilidad de analizar el efecto de diferentes componentes
del modelo.
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 71
Otra interesante aproximación son los modelos de barra formados por fibras. Las
características geométricas de las fibras son su posición local y, z a lo largo del eje x del
elemento, y su relación constitutiva se define a nivel tensión deformación de cada material. La
relación constitutiva en cada sección se obtiene por integración de las respuestas de las fibras.
Los primeros modelos basados en flexibilidad fueron propuestos por Kaba y Mahin (1984),
extendido al caso de flexión biaxial por Zeris y Mahin (1988 y 1991). Permiten considerar la
interacción entre fuerza axial y flexión en forma natural.
Taucer et al. (1991) y Spacone et al. (1996) propusieron un nuevo modelo de fibras junto con
un algoritmo consistente de solución del problema no lineal, apropiado para comportamiento
histerético altamente no lineal de miembros con ablandamiento, como columnas bajo carga
axial variable. El algoritmo iterativo para determinar el estado del elemento mantiene
equilibrio y compatibilidad dentro del elemento y satisface las relaciones constitutivas en cada
sección dentro de una tolerancia especificada.
Se han desarrollado modelos de barras aplicando la teoría de elastoplasticidad, con la cual se
obtiene una matriz de rigidez elastoplástica, en cada paso de tiempo o incremento de carga,
que relaciona el incremento de esfuerzos internos (resultante de tensiones) con incrementos de
desplazamientos en los nodos extremos de la barra. Algunos de estos trabajos son los de
Wong y Tin-Loi (1990), Saka y Hayalioglu (1991), Graff y Eisenberger (1991), Chen y
Blandford (1991), Cavalcanti y Creus (1991), Möller y Rubinstein (1995), Möller, Rubinstein
y Etse (1997).
Siguiendo la línea del modelo de barra presentado por Filippou, un elemento para pórtico
plano, con relaciones momento-curvatura para la sección recta de la barra y momento-
rotación para la conexión obtenidas de detallados análisis previos, junto con extensiones a
problemas dinámicos y efectos no lineales geométricos de grandes desplazamientos, se
muestra en Möller et al. (1997), (1998), Möller (2001).
Todos los detalles de estos elementos se describen en las secciones 6.4 y 6.5.
∫ ∫
t + ∆t t + ∆t t + ∆t t + ∆t t + ∆t !! t + ∆t
τ ij δ ( t + ∆t eij ) dV = R− ρ ui δ ( t + ∆t u i ) dV −
t + ∆t t + ∆t
V V
(6.1)
∫
t + ∆t t + ∆t t + ∆t
− µ u!i δ ( t + ∆t u i) dV
t + ∆t
V
donde τij son los componentes del tensor de tensiones de Cauchy, eij son las componentes
del tensor de deformaciones infinitesimal, R es el trabajo virtual de las fuerzas exteriores, ρ
es la densidad de masa, µ es un parámetro de amortiguamiento viscoso, u!!i , u!i , ui son las
72 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
t
V
donde Sij son las componentes del 2º tensor de tensiones de Piola-Kirchhoff, y εij las
componentes del tensor de deformaciones de Green-Lagrange.
Se realiza la siguiente descomposición incremental:
t + ∆t
t S ij = t S ij + t S ij = t τ ij + t S ij
t + ∆t
t ε ij = t ε ij = t eij + t η ij (6.3)
1 1
t eij = ( t u i , j + t u j ,i ) , t η ij = t u k ,i t u k , j
2 2
En la notación utilizada el supraíndice izquierdo indica el instante en que se evalúa, cuando
no se escribe significa que es un incremento de t a t+∆t . El subíndice izquierdo indica la
configuración de referencia, cuando no se escribe significa que es igual al supraíndice. La
coma indica derivación con respecto a la variable siguiente. (⋅⋅) indica derivación con respecto
a la variable tiempo t.
También se aproxima con la linealización:
∫ ∫t t τ ij δ ( t ηij ) ∫
t + ∆t t + ∆t !!
t C ijrs t ers δ ( t eij ) t dV + t
dV = R− t
ρ ui δ (ui ) t dV −
t t
V V V
(6.5)
∫ ∫
t + ∆t
− t
µ u! i δ (u i ) dV − t tτ
ij δ ( t eij ) dV t
t t
V V
t
∫ t C ijrs t e rs δ ( t eij ) t dV = δ (∆u T ) K EP ∆u
V
∫t t τ ij δ ( t η ij ) = δ (∆u T ) K NL ∆u
t
dV
V
t + ∆t t + ∆t
R = δ (∆u T ) P
∫
t + ∆t !! t + ∆t !!
t
ρ ui δ (ui ) t dV = δ (∆u T ) M u (6.6)
t
V
∫
t + ∆t t + ∆t
t
µ u! i δ (u i ) t dV = δ (∆u T ) C u!
t
V
∫t t τ ij δ ( t eij ) = δ (∆u T ) t F
t
dV
V
Reemplazando (6.6) en (6.5) y eliminando la variación virtual δ (∆u T ) por ser arbitraria, se
obtiene el equilibrio dinámico a nivel de elemento:
t + ∆t t + ∆t !! t + ∆t
(K EP + K NL ) ∆u = P−M u−C u! − t F (6.7)
Rotando a coordenadas globales y ensamblando las acciones de los elementos sobre los nodos
− P , junto con las cargas exteriores R se define el equilibrio dinámico del sistema:
− t + ∆t P + t + ∆t
R=0 (6.8)
Esta última ecuación (6.9) es similar a la (4.25), donde ahora se han agregado los términos de
fuerzas de inercia y de amotiguamiento. El segundo miembro de (6.9): t + ∆t R − t F representa
el incremento de fuerzas externas entre t a t+∆t , considerando el residuo del equilibrio en el
tiempo t, y equivalente a ∆Fext de (4.25).
74 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
6.4.2. Desplazamientos
La fig.6.1 muestra el sistema de coordenadas locales utilizado para todo el elemento (∼), y el
sistema local referido a la zona deformable (-) excluyendo los extremos rígidos. Además se
representan los incrementos de desplazamientos, que para mayor claridad en la notación se
preceden de ∆.
∆u1 ˆ
∆u = = H ∆u (6.10)
∆
2
u
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 75
h 0 0 h4 0 0
H= 1
h6
(6.11)
0 h2 h3 0 h5
con
x1 x1 2 x x1 x x
h1 = 1 − h2 = 1 − 3 ( ) + 2 ( 1 )3 h3 = Lc ( − 2 ( 1 ) 2 + ( 1 )3 )
Lc Lc Lc Lc Lc Lc
x1 x1 2 x x1 2 x
h4 = h5 = 3 ( ) − 2 ( 1 )3 h6 = Lc (− ( ) + ( 1 )3 ) (6.12)
Lc Lc Lc Lc Lc
H es la matriz de las funciones de forma, donde se ha supuesto variación lineal para los
desplazamientos axiales y cúbica para los transversales, considerando al elemento sin cargas
de tramo.
Se establecen las siguientes relaciones geométricas
~ˆ
∆ uˆ = Tφc G Tφ ∆u
(6.13)
~ˆ ˆ
∆F = TφΤ G Τ TφΤc ∆F
donde:
ˆ
∆ uˆ , ∆F : incrementos de desplazamientos y fuerzas de las secciones extremas de la zona
deformable, referidos al sistema t x1 , t x 2 .
~ˆ
~ˆ , ∆F
∆u : incrementos de desplazamientos y fuerzas de las secciones extremas, referidos a
los ejes locales iniciales 0 ~
x ,0~
1x . 2
Siendo:
t φ G 1 t φ
Tφc = c = Tφ =
t φc G 2 t φ
G
cos φ c sen φ c 0 cos φ sen φ 0
t φc = − sen φ c cos φ c 0 t φ = − sen φ cos φ 0 (6.14)
0 0 1 0 0 1
1 0 0 1 0 0
G 1 = 0 1 r1 G 2 = 0 1 − r2
0 0 1 0 0 1
76 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
El esfuerzo de corte Q se obtiene por equilibrio de la barra. Para el estado elástico las
ecuaciones constitutivas de la sección son:
N EA u1,1
=
EI u 2,11
(6.16)
M
donde E es el módulo de elasticidad, A es el área e I es el momento de inercia de la sección
recta.
A partir de la teoría general de elastoplasticidad, con plasticidad asociada, para un material
elastoplástico con endurecimiento, y considerando un comportamiento elástico hasta la
plastificación completa de la sección, resulta la función de fluencia para sección rectangular:
2
M N
Y (F, κ ) i = + −1= 0 , i = A, B (6.17)
M p (κ M ) N p (κ N )
M
M
Mp
1.00 ∂Y
Mp ∂F
N
N Np
Np 1.00
0
h1,1 0 0 h4,1 0 0
BL =
h6,11
(6.19)
0 h2,11 h3,11 0 h5,11
dh d 2 hi
con hi , j = i , hi , jj = , resulta:
dx j dx 2j
1 6 12 4 6
h1,1 = − h2,11 = − + x1 h3,11 = − + 2 x1
Lc L2c L3c Lc Lc
1 6 12 2 6
h4,1 = h5,11 = − x1 h6,11 = − + 2 x1 (6.20)
Lc L2c L3c Lc Lc
EA EA
L 0 0 − 0 0
Lc
c
12 EI 6 EI
0 −
12 EI 6 EI
L3c L2c L3c L2c
4 EI 6 EI 2 EI
0 − 2
Lc Lc Lc
KL = (6.21)
EA
0 0
Lc
12 EI 6 EI
sim. −
L3c L2c
4 EI
Lc
b) Rigidez no lineal
A partir del segundo término del miembro izquierdo de la ecuación (6.5) se obtiene
siendo:
1
t η11 = ( t u12,1 + t u 22,1 )
2 (6.23)
1
t η 21 = t η12 = ( t u1,1 t u1, 2 + t u 2,1 t u 2, 2 )
2
0 0 0
(6.25)
Lc
= δ (∆ uˆ ) ∫Τ Τ
B NL S B NL dx1 ∆ uˆ = δ (∆uˆ Τ ) K NL ∆ uˆ
0
h1,1 0 0 h4,1 0 0
0 h2,1 h3,1 0 h5,1 h6,1
B NL = (6.26)
h1,1 0 0 h4,1 0 0
0 h2,1 h3,1 0 h5,1 h6,1
1 6 6 4 3
h1,1 = − h2,1 = − x1 + x12 h3,1 = 1 − x1 + 2 x12
Lc L2c L3c Lc Lc
1 6 6 2 3
h4,1 = h5,1 = x1 − x12 h6,1 = − x1 + 2 x12 (6.27)
Lc L2c L3c Lc Lc
N Q
Q
N MA + MB
S= Q=− (6.28)
N Q Lc
Q N
N Q N Q
L − 0 − 0
Lc Lc Lc
c
6N N Q
−
6N N
5 Lc 10 Lc 5 Lc 10
2 Lc N N L N
0 − − c
15 10 30
K NL = (6.29)
N Q
− 0
Lc Lc
6N N
sim. −
5 Lc 10
2 Lc N
15
c) Rigidez elastoplástica
La relación entre incrementos de fuerzas y de desplazamientos en las secciones A y B,
referido al sistema local t x1 , t x 2 es:
ˆ
∆F = K ep ∆ uˆ (6.30)
donde:
ˆ ∂Y
∆ uˆ = ∆ uˆ e + ∆ uˆ p = K −1∆F + ∆Λ (6.31)
ˆ
∂F
80 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
∆F Τ = {∆N A , ∆Q A , ∆M A , ∆N B , ∆QB , ∆M B }
ˆ
(6.32)
∂Y Τ ∂Y A 1 ∂Y Τ
E=A+ K , A= A Ai = − ∆κ i
AB
, , i = A, B (6.36)
ˆ
∂F
ˆ
∂F ∆λi ∂κ i
ˆ ∂Y −1 ∂Y Τ ˆ
∆ F = K − K E K ∆ u = K ep ∆ uˆ (6.37)
ˆ ˆ
∂F ∂F
2 N A Sig M A
2 0 0 0 0
Τ
∂Y N M pA
= pA (6.38)
ˆ 2 NB Sig M B
∂F 0 0 0 0
N 2pB M pB
{
∆κ Τ = ∆κ AΤ , ∆κ BΤ } (6.39)
con:
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 81
∆κ N ∆ (∆l ) p N 2 N / N p2
∆κ i = N = = ∆λi
M i
(6.40)
∆κ M i M ∆θ p i Sig M / M p i
∂Y ∂Y
∂Y Τ ( ∂κ ) A (
∂κ M
)A 0 0
= N
(6.41)
∂κ 0 ∂Y ∂Y
0 ( )B ( )B
∂κ N ∂κ M
con:
∂Y ∂Y d N p N d Np
= = − 2 3 H ′N , H N′ =
∂κ N ∂N p d κ N Np d ∆l p
∂Y ∂Y d M p Sig M dMp
= =− ′
HM , ′ =
HM (6.42)
∂κ M ∂M p d κ M M 2p dθp
4N3 M
Ai = 5
H ′N + ′
HM (6.43)
Np M 3p
Los factores H’N y H’M deben estar relacionados entre sí y con la tensión de fluencia del
material; se propone:
∆N p = A ∆σ y
Z d
∆M p = Z ∆σ y = ∆N p = ∆N p (6.44)
A 4
donde d es la altura de la sección rectangular. Además
∆N p = H ′N ∆(∆l ) p = H ′N ∆λ 2 N / N 2p
d
′ ∆λ SigM / M p =
∆M p = H M H ′N ∆λ 2 N / N 2p (6.45)
4
El factor H’M se obtiene a partir de la relación momento curvatura de la sección recta de la
barra, para la rama de endurecimiento o ablandamiento, con pendiente h(EI) es:
∆M p = h (EI) ∆φ (6.46)
∆M ∆θ p
∆φ = ∆φ e + ∆ φ p = + (6.47)
EI lp
HM′ lp
′ ∆θ p =
∆M p = H M ∆φ (6.49)
HM′ lp
1+
EI
Comparando (6.46) con (6.49) resulta finalmente:
h EI
′ =
HM (6.50)
1− h l p
8 Np
H N′ = H M
′ SigM (6.51)
d2 N
Para
A
N → 0 ⇒ H ′N → ∞ , ∆(∆l ) → 0 , luego ∆N p = ∆M p (6.52)
Z
El momento plástico y el esfuerzo normal plástico se actualizan para cada sección extrema de
la barra con:
n +1 n
Np Np H ′ 2 N / N p2
M = + ∆λi N
′ i
(6.53)
p i M p i HM Sig M / M p i
Las expresiones obtenidas están referidas a la zona deformable del elemento Lc en el sistema
actualizado t x1 , t x 2 . Sumando las ecuaciones (6.18) y (6.25), teniedo en cuenta el
comportamiento elastoplástico (6.37), y las relaciones (6.13), se obtiene la expresión del
trabajo virtual interno para el elemento completo referido al sistema de coordenadas locales
iniciales 0 ~
x1 , 0 ~
x2 :
~ˆ Τ ) T Τ G Τ T Τ K T G T ∆u
~ˆ = δ (∆u ~
~ˆ Τ ) K ~ˆ
δ ( ∆u φ φc ep φc φ ep ∆u (6.54)
~
donde K ep es la matriz de rigidez elastoplástica referida al sistema de coordenadas locales
iniciales.
ˆ
∫t t τ ij δ ( t eij ) = δ (∆ uˆ T ) t F
t
dV (6.55)
V
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 83
ˆ
donde t F es el vector de fuerzas en las secciones A y B en el instante t , que se va
actualizando en cada paso incremental:
t + ∆t ˆ ˆ ˆ
F = t F + ∆F (6.56)
ˆ
El incremento de fuerzas ∆F se calcula a partir del incremento de desplazamientos. En lugar
de utilizar la relación linealizada (6.37), se obtiene una mejor aproximación considerando el
acoplamiento entre los desplazamientos axiales y transversales como se muestra en la fig.6.4.
El alargamiento ficticio ∆* origina una fuerza normal espúrea que se corrige automáticamente
en el proceso iterativo.
Entonces, en función de ∆θA, ∆θB y ∆(∆l) resultan las siguientes expresiones explícitas para
los incrementos de fuerzas internas:
∆N B = − ∆N A = [ k11 − k112
′ − 2Y11Y42 E12
(Y112 E11 ′ ) ] ∆(∆l )
′ + Y422 E 22
+ k11 [ k 33Y11Y31 E11
′ + (k 36Y11Y62 − k 33Y31Y42 ) E12
′ − k 36Y42Y62 E 22
′ ] ∆θ A (6.57)
+ k11 [ k 36Y11Y31 E11
′ + (k 33Y11Y62 − k 36Y31Y42 ) E12
′ − k 33Y42Y62 E 22
′ ] ∆θ B
84 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
donde:
EA + N A 4 EI 2 Lc N B 2 EI Lc N B
k11 = , k 33 = + , k 36 = −
Lc Lc 15 Lc 30
(6.61)
2N A Sig .M A 2N B Sig .M B
Y11 = , Y31 = , Y42 = , Y62 =
N 2p Mp N p2 Mp
′ − Y42 E 22
∆λ B = k11 (−Y11 E12 ′ ) ∆(∆l ) + (k 33Y31 E12
′ + k 36Y62 E 22
′ ) ∆θ A
(6.67)
′ + k 33Y62 E 22
+ (k 36Y31 E12 ′ ) ∆θ B
∆θ Ap = ∆λ AY31
∆θ Bp = ∆λ B Y62 (6.68)
∆(∆l ) = ∆λ B Y42 − ∆λ AY11
p
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 85
ˆ
Con todas estas consideraciones se obtiene finalmente ∆F y a partir de (6.56) las fuerzas
ˆ
actualizadas t + ∆t F en extremos de la zona deformable y referido al sistema local
t + ∆t
x1 , t + ∆t x 2 . Hay que transformar estas fuerzas y referirlas al sistema de ejes locales iniciales
de toda la barra 0 ~ 1x ,0~
x :
2
86 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
t + ∆t ~ˆ ˆ
F = TφΤ G Τ TφΤc t + ∆t
F (6.72)
La expresión (6.55) referida al sistema local inicial, teniendo en cuenta las relaciones (6.13)
resulta:
ˆ ~ˆ
~ˆ Τ ) T Τ G Τ T Τ (T Τ G Τ T Τ ) −1 t F ~ˆ
~ˆ Τ ) t F
δ (∆ uˆ Τ ) t F = δ (∆u φ φc φ φc = δ ( ∆u (6.73)
∫ ∫ρ A ∫ρI
t + ∆t !! t + ∆t !! t + ∆t !!
t
ρ ui δ (u i ) dV
t
= u i δ (∆u i ) dx1 + u 2,1δ (∆u 2,1 ) dx1
t 0 0
V (6.74)
Lc Lc t + ∆t !ˆ! t + ∆t !ˆ!
= δ (∆u ) ρ A ∫ H H dx1 + ρ I ∫ H θΤ H θ dx1
ˆ Τ Τ
u = δ (∆ uˆ Τ ) M u
0 0
0 0 0 0 0 0
Hθ =
h6,1
(6.75)
0 h2,1 h3,1 0 h5,1
con h2,1 , h3,1 , h5,1 , h6,1 según (6.27). Realizando las integraciones en (6.74) se obtiene la
matriz de masa M :
140 0 0 70 0 0
156 22 Lc 0 54 − 13Lc
m Lc 4 L2c 0 13Lc − 3L2c
M=
420 140 0 0
sim. 156 − 22 Lc
4 L2c
(6.76)
0 0 0 0 0 0
36 3Lc 0 − 36 3Lc
mI 4 L2c 0 − 3Lc − L2c
+
30 A Lc 0 0 0
sim. 36 − 3Lc
4 L2c
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 87
~ˆ Τ ) T Τ G Τ T Τ M T G T ~ˆ
t + ∆t !! ~
~ˆ Τ ) M ~ˆ
t + ∆t !!
δ ( ∆u φ φc φc φ u = δ ( ∆u u (6.77)
~
donde M es la matriz de masa referida al sistema de coordenadas locales iniciales.
t + ∆t t + ∆t ˆ ~ˆ T ) ˆ
t + ∆t ~
R = δ (∆ uˆ T ) P = δ ( ∆u P (6.79)
~ˆ
donde t + ∆t P es el vector que contiene las fuerzas sobre los nodos extremos y necesarias para
el equilibrio de la barra.
~ ~ˆ = t + ∆t ~
ˆ
~ ~ˆ ~
t + ∆t !! t + ∆t
~ˆ ~ˆ
K ep ∆u P−M u−C u! − t F (6.80)
6.4.10. Solución
Los términos de la ecuación (6.80) se transforman a coordenadas globales de la estructura
mediante la matriz de rotación Tα en función del ángulo α entre los ejes globales y locales
iniciales. Realizada la rotación, las fuerzas − t + ∆t P̂ ,sobre los nodos de la estructura, de todos
los elementos se ensamblan y junto con las cargas exteriores directamente aplicadas sobre los
nodos t + ∆t R̂ definen el equilibrio dinámico del sistema (6.8):
88 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
− t + ∆t Pˆ + t + ∆t ˆ =0
R (6.81)
K mn ∆u mn = R n − Fnm−1 − M u
!! n − C u! n (6.82)
Se adopta una variación para la aceleración dentro del paso de tiempo en función de
parámetros β y γ, luego integrando resulta:
u! n = u! n−1 + γ ∆t u
!! n + (1 − γ ) ∆t u
!! n −1
u n − u n−1 = ∆u n = β ∆t 2 u
!! n + ( 12 − β ) ∆t 2 u
!! n−1 + ∆t u! n−1 (6.83)
Para γ = 12 , β = 1
resulta el método de la aceleración promedio o regla trapezoidal, que es el
4
!! n , u! n en función de
más usado por ser incondicionalmente estable. A partir (6.83) se expresa u
∆u n , reemplazando en (6.82) y reordenando:
m
K *n ∆u mn = R n − F nm−1 + M Q n−1 + C Pn −1 (6.84)
m
donde K *n = K mn + a0 M + a1 C
Q n−1 = a 2 u! n−1 + a3 u
!! n−1 (6.85)
Pn−1 = a 4 u! n−1 + a5 u
!! n−1
1 γ 1
con a0 = a1 = a2 =
β ∆t 2 β ∆t β ∆t
1 γ γ
a3 = −1 a4 = − 1 a5 = ∆t ( − 1) (6.86)
2β β 2β
K *n = K n + a0 M + a1 C (6.87)
∆R *n = R n − Fn −1 + M Q n −1 + C Pn−1 (6.88)
K *n ∆u n = ∆R *n → ∆u n (6.89)
u n = u n−1 + ∆u n
u! n = a1 ∆u n − Pn−1
!! n = a0 ∆u n − Q n−1
u (6.90)
∆u n → ∆Fn → Fn = Fn−1 + ∆Fn
5. Iteraciones de equilibrio: m = 0
6. Para la iteración de equilibrio m-ésima: m ← m + 1
- Actualizar la matriz de rigidez
m
K *n = K mn + a 0 M + a1 C (6.91)
- Resolver
m
K *n ∆(∆u) mn = ∆(∆R * ) mn → ∆ (∆u) mn (6.93)
- Verificar convergencia
Observaciones:
! En el proceso iterativo, el sistema de ecuaciones a resolver para la iteración m (6.93) se
obtiene a partir de:
!! mn = a 0 ∆u mn − Q n−1 = a0 (∆u mn−1 + ∆(∆u) mn ) − Q n−1 = a0 ∆(∆u) mn + u
u !! mn−1 (6.97)
análogamente:
u! mn = a1 ∆(∆u) mn + u! mn−1 (6.98)
reemplazando en la ecuación de movimiento para la iteración m :
!! mn + C u! mn + K mn ∆(∆u) mn = R n − F m−1
Mu (6.99)
n
resulta:
[K m
n ]
+ a0 M + a1C ∆(∆u) mn = R n − F nm−1 − M u
!! mn−1 − C u! mn−1
m
(6.100)
K *n ∆(∆u) mn = ∆(∆R ) mn
fc
f cc′
confinado
Eu
f c′0 f un
f new
no confinado
Ec f r0
εt 2ε c 0 εc
ε pl ε c 0 ε cc ε spall ε pl ε r 0 ε un ε re
ft
f t′
εt
f c′0 = 0.85 f c′
f cc′ = K cc f c′0 (6.102)
ε cc = ε c 0 ( 1 + R ( K cc − 1 ) )
con f c′0 : resistencia in-situ del hormigón no confinado y f cc′ , ε cc : tensión y deformación a la
resistencia máxima.
En las ecuaciones (6.102) es R = 5 : un parámetro calibrado con resultados experimentales y
K cc factor que depende de la presión de confinamiento f rx , f ry dado por la armadura
transversal.
1
Para f r = ( f rx + f ry ) , siempre que 0.40 ≤ f rx / f ry ≤ 2.50 resulta:
2
f cc′ fr f
K cc = = 2.254 1 + 7.94 − 2 r − 1.254 (6.103)
f c′0 f c′0 f c′0
Asx Asy
f rx = f yh k e f ry = f yh k e (6.104)
s hc s bc
Para secciones comprimidas k e = Ace / Acc relación entre el área efectivamente confinada y
área del núcleo, ver fig.6.8. Para secciones flexocomprimidas k e = S ce / S cc relación entre los
momentos estáticos con respecto al eje baricéntrico del área efectivamente confinada y el área
del núcleo.
Ace
x s′ s
h hc
Acc = bc hc
bc
b
Planta Vista
El comportamiento para carga cíclica presenta diferentes situaciones según se trate de la rama
de descarga o recarga, ver fig.6.7.
Para la descarga desde una rama de recarga en compresión se utiliza la misma expresión
(6.105) donde ε pl es la deformación plástica correspondiente a la última reversión desde la
curva envolvente.
! Descarga en tracción: la resistencia a tracción se deteriora en función de la magnitud de la
deformación previa a compresión, siendo:
f c = E t ( ε c − ε pl ) (6.106)
f c = f r0 + Er ( ε c − ε r0 ) (6.107)
Una transición parabólica se utiliza para empalmar con la curva monotónica en:
2 + f cc′ / f c′0
ε re = ε un + ( f un − f new ) (6.108)
Er
94 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
f s = Es ε s 0 ≤εs ≤εy
fs = f y ε y ≤ ε s ≤ ε sh (6.109)
p
ε −εs
f s = f su + ( f y − f su ) su ε sh ≤ ε s ≤ ε su
ε su − ε sh
donde p = E sh ( ε su − ε sh ) / ( f su − f y )
fs
f su
fy E sh
Es
εs
εy ε sh ε su
! Reversión desde curva esqueleto, ver fig.6.10, es una curva suavizada por el efecto
Bauschinger. La curva esqueleto se desplaza a las nuevas coordenadas origen (ε m 0 , 0) ,
donde ε m 0 es función de la historia de deformación plástica.
f0
ε m0 = ε 0 − + ε shift (6.110)
Es
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 95
fs
ε ss−
ε ss+ (ε b+ , f b+ )
(ε 0− , f 0− )
ε m− 0 εs
ε m+ 0 (ε j , f j )
ε shift
(ε b− , f b− )
(ε 0+ , f 0+ ) ε ss+
ε ss−
ε b− = ε m− 0 − ε ss+
f b− = f y− (6.111)
ε b+ = ε m+ 0 − ε ss−
p
+
ε su + ε ss−
f b+ = f su+ +( f y+ − f su+ ) + +
(6.112)
ε su − ε sh
Los supraíndices (+), (-) pueden ser intercambiados para reversiones hacia compresión (-), o
hacia tracción (+).
ε b* = ε max + ε shift
f b* = f max (6.113)
donde (ε max , f max ) son las coordenadas de deformación y tensión máximas alcanzadas en los
ciclos anteriores.
fs
ε ss+ ε shift
(ε 0− , f 0− )
(ε b* , f b* )
ε m− 0 εs
ε m+ 0
(ε 0+ , f 0+ )
(ε b− , f b− )
ε ss+
+ +
Para reversiones desde el plafond de fluencia ε shift = ε su ( ε 0+ − ε b− ) , y para reversiones desde
+ +
la zona de reendurecimiento: ε shift = ε su ( ε 0+ − ε b− ) − 0.5 f y+ / E s+ .
En ambos casos los supraíndices (-), (+) pueden ser intercambiados según el caso.
La relación tensión – deformación de la rama suavizada entre coordenadas de reversión
(ε 0 , f 0 ) y coordenadas de empalme (ε b , f b ) es :
1− Q
f s = f 0 + ( ε s − ε 0 ) Em ( Q + 1/ R
) (6.114)
E (ε − ε 0 )
1+ m s
f ch − f 0
Para determinar la máxima deformación a compresión ε suc que admite la barra antes del
pandeo, se ha propuesto una expresión analítica, válido para acero de 420 MPa de tensión de
fluencia (Zahn et al., 1986) que representa resultados experimentales:
s
ε suc = 0.0095 − 0.098 4 ≤ s / dB ≤ 9
dB
ε suc = − 0.06 s / dB < 4 (6.115)
hormigón acero
Aci εi f ci M
εc
y φ N
As j εj fsj
deformaciones tensiones
Ecuación de compatibilidad
ε i = ε c + φ yi (6.116)
Ecuaciones de equilibrio
n m
N ext = N int = ∑ Aci f ci + ∑ Asi f si
i =1 i =1
n m
M ext = M int = ∑ Aci f ci y i + ∑ Asi f si y i (6.117)
i =1 i =1
98 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
En forma incremental
Si es mayor que la tolerancia, se ajusta la posición del eje neutro con (6.119) donde ahora
∆φ = 0 porque la curvatura ya tiene el valor incrementado de ese paso.
El proceso se repite hasta que ∆N int (6.121) sea menor que la tolerancia. Ahí es M int = M ext
momento flector asociado a φ .
cuando la fibra más comprimida de hormigón llega a una deformación de 0.002. Luego la
curvatura de fluencia es
Mi
φy = φ ′y (6.122)
M ′y
La ductilidad de curvatura es
φu
µφ = (6.123)
φy
donde φ u es la curvatura última que está asociada a la ocurrencia de alguno de los siguientes
estados límites:
a) Degradación del momento resistente en un 20 % con el proceso cíclico: para que las
regiones con importantes deformaciones plásticas puedan disipar energía apropiadamente,
deben tener un ciclo histerético estable. Evidencias experimentales muestran un
comportamiento aceptable mientras no se supere este límite.
b) Agotamiento de la capacidad de absorber energía por parte de la armadura transversal: en
la fig.6.7 se observa la diferencia entre el área bajo la curva de hormigón no confinado y
confinado. Se asume que el incremento de trabajo realizado por las fuerzas de compresión
sobre el volumen de hormigón y barras de acero longitudinales susceptibles de pandear
(retenidas por los estribos de confinamiento), tiene que ser balanceada por la energía
absorbida en la armadura transversal que confina el volumen de hormigón considerado,
debido a que sin su presencia dicho incremento no existiría. La ecuación de balance es:
Wcc + W s − Wc 0 = Wh (6.124)
M m+ K
+ s + EI
L
+ h EI B,J
M y A
G,I
H
rEI EI EI
F 0 C M φ
N = cte
D M y−
s − EI h EI−
M m−
O E,N
A B
u As FAs FBs u Bs
CB MB
NA ∆l B
∆l A
NB
θA y θB
MA CA
u iA u Bi
FAi FBi
τ
σs σ s + dσ s
dx
x x ui
u ( x) = 1 − =Na
l l u j
1 1 u i
ε ( x ) = − =Ba (deformación constante) (6.128)
l l u j
σ ( x) = E ε ( x )
Ni i j Nj
N1 1 2 3 ! i j ! n N
n
ui uj
u1 un τi τj
l
EA 1 − 1
T i = ∫ δε T σ dV = δa T
l − 1 1
a
V
Ni l
T e = δa − ∫ δu ( x) π d B τ ( x) dx
T
(6.129)
N j 0
N i EA 1 − 1 1 / 3 1 / 6 u i
Ti =Te → = + C π dB l
N j l − 1 1 1 / 6 1 / 3 u j
k DD k DR ∆u D ∆FD
k =
k RR ∆u R ∆FR
(6.130)
RD
donde el subíndice D indica grado de libertad desplazable, y el R indica grado de libertad
reactivo, que en este caso son el 1 y n de la fig.6.16.
Condensando los grados de libertad 2 a n-1 , y dado que ∆FD = 0 , se obtiene:
[
∆FR = k RR − k RD k −1
DD k DR ∆u R ] (6.131)
(1 − b) ε *
σ* = b ε * + (6.132)
(1 + ε * R )1 / R
ε −εr σ −σr Ep
siendo ε* = σ* = b=
ε0 − εr σ0 −σr Es
ε 0 − ε pr
con ξ= R0 = 20 a1 = 18.5 a 2 = 0.15
εy
Fronteddu (1992) propone para definir el parámetro b una curva envolvente con pendiente
variable. En este trabajo, en forma simplificada, se considera b constante.
σ τ
ξ2 (ε pr2 , σ pr2 )
(ε 02 , σ 02 ) τ1
R0
Ep
R(ξ 2 )
Es τ3
ε u
τ f0 u1 u 2 u3
R(ξ1 )
(ε r2 , σ r2 ) ξ1 τ1
! Curva envolvente
u α
τ = τ1 ( ) u ≤ u1
u1
τ = τ1 u1 < u ≤ u 2
τ 3 − τ1
τ = τ1 + (u − u 2 ) u 2 < u ≤ u3 (6.134)
u3 − u2
τ =τ3 u > u3
! Descarga: tiene lugar a través de una recta con pendiente Eu hasta alcanzar una resistencia
a fricción τ f .
! Recarga: a través de una recta hasta alcanzar la envolvente reducida. En el trabajo original
de Eligehausen et al. (1983) esta recta es horizontal, luego Filippou et al. (1983-a) la
considera como un polinomio de cuarto orden. En este trabajo se simplifica con dos rectas
como se indica en la fig.6.18.
! Envolvente reducida: el deterioro por el efecto cíclico se considera reduciendo los valores
iniciales de τ 1 y τ 3 con un parámetro de daño d:
τ 1 ( N ) = τ 1 (1 − d )
τ 3 ( N ) = τ 3 (1 − d ) (6.135)
d = 1 − exp (−1.2 ( E / E 0 )1.1 )
siendo E la energía total disipada y E0 la energía absorbida bajo incremento monotónico hasta
u3 .
! Resistencia a fricción: depende del máximo valor u max en cualquier dirección de carga y
de la resistencia última τ 3 ( N ) de la correspondiente curva envolvente reducida de ese
semiciclo.
0.9 u u max
τ f 0 ( N ) = [ ( 0.1 + ) max ] τ 3 ( N ) ≤ 0.5
0.5 u max / u 3 u 3 u3
u
= ( 0.1 + K 1 max ) τ 3 ( N ) (6.136)
u3
u max
τ f 0 (N ) = τ 3 (N ) > 0.5
u3
Ef
d f = 1 − exp ( − 1.2 ( ) 0.67 ) (6.137)
Ef0
la del paso anterior. Para las restantes franjas, donde la fisura está abierta, el incremento de
deformación en ese paso es nulo.
us > 0
ε s (acero)
∆l
θ
sector fisura
cerrada εb (hormigón)
ui < 0
desplazamientos us > 0 deformaciones
de control
! Utilizando la ecuación constitutiva de Kent y Park (1971) modificada luego por Scott et
al. (1980), y teniendo en cuenta la resistencia a tracción, ver fig.6.20, se calculan las
tensiones. Sumando para todas las franjas donde la fisura está cerrada se obtiene la
colaboración del hormigón:
donde ε 0 = 0.002 K K = 1 + ρ s f yh / f c′
0.5
Z=
3 + 0.29 f c′ 3 h′
+ ρs − 0.002 K
145 f c′ − 1000 4 sh
εp εr ε
= 0.15 + 0.10 ( r ) 2 (6.141)
ε0 ε0 ε0
Una vez completada la descarga, el modelo “congela” la deformación con tensión nula hasta
que la fisura se cierre nuevamente y un nuevo incremento de deformación de compresión sea
aplicado. La recarga tiene lugar por la misma recta de descarga hasta alcanzar la envolvente.
σc
Kf c′
Z
f c′
εr
0.2 Kf c′
εt εc
0.002 ε 0 εp εu ε cu
f t′
∆N A = ∆F As + ∆F Ai + ∆C A ∆N A ∆(∆l ) A
∆M A = ∆F As ys + ∆FAi y i + ∆C A y A ∆M ∆θ
→ A
=[ KT ] A (6.142)
∆N B = ∆FBs + ∆FBi + ∆C B ∆N B ∆(∆l ) B
∆M B = ∆FBs y s + ∆FBi y i + ∆C B y A ∆M B ∆θ B
∆FA k AA k AB ∆u A
=
k BB ∆u B
(6.143-a)
∆FB k BA
110 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
∆N A k AA k AA y k AB k AB y ∆(∆l ) A
∆M k AA y 2 k AB y k AB y 2 ∆θ
A
= A
(6.144)
∆N B k BB k BB y ∆(∆l ) B
∆M B capa
armad .
sim. k BB y 2 capa
armad .
∆θ B
∆FAs
∆ε As = = k As ∆u As y también ∆ε As = ∆ε cA + y s ∆θ A
E s As
∆F Ai
∆ε iA = = k Ai ∆u iA y también ∆ε iA = ∆ε cA + y i ∆θ A (6.145)
E s As
Se aproxima ∆FB = f ∆u A con los resultados del paso o iteración anterior, luego
−1
∆F A = [ k AA + k AB k BB ( f − k BA ) ] ∆u A = k A ∆u A (6.147)
k As y i − k Ai y s k As − k Ai
yi y s
∆ε cA yi − y s yi − y s ∆(∆l ) A
= (6.148)
∆θ A k A − k A k A y s − k A y i ∆θ A
s i s i
yi − y s y s − yi
∆ε cA k A 0 ∆(∆l ) A
=
k A ∆θ A
(6.149)
∆θ A 0
Se reemplaza (6.149) en (6.139) y se obtiene la colaboración del hormigón en cada sección
del nudo. Debido a la simplificación introducida en (6.147), la interacción entre las secciones
A y B queda implícita en el coeficiente f. Luego:
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 111
Finalmente se suma la colaboración de las capas de armadura (6.144) y del hormigón (6.150),
obteniéndose la rigidez tangente para el nudo: KT de la ecuación (6.142).
K DD K DR ∆v D ∆PD
K =
K RR i −1 ∆v R i ∆PR i
(6.152)
RD
se resuelve:
∆v D = K −DD
1
[ ∆PD − K DR ∆v R ] (6.153)
∆u D = K −DD
1
[ ∆FD − K DR ∆u R ] (6.154)
∆u j − ∆u i
∆ε = → σ con la tercera ecuación en (6.127)
l
∆u i → τi , ∆u j → τ j con la cuarta ecuación en (6.127)
112 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
τj τi −τ j
N i = −σ A + p l ( + ) (6.155)
2 3
τj τi −τ j
N j =σ A + pl ( + )
2 6
Las fuerzas sobre los nodos N i , N j se ensamblan en ∆FD y se realizan iteraciones j hasta
que ∆FDj = 0 con una tolerancia.
∆(∆u D ) j = K −DD
1
[ ∆FDj − K DR ∆(∆u R ) j ] (6.156)
En estas iteraciones ∆(∆u R ) j = 0 dado que u R ya tiene el valor impuesto para este paso.
Con las fuerzas en las secciones extremas de la barra, se calcula la colaboración en los
esfuerzos internos N, M, que por ejemplo para la sección A resulta:
N A = ∑ σ i Ai M A = ∑ σ i Ai y i (6.158)
Sumando la colaboración de las armaduras (6.157) con la del hormigón (6.158) se obtienen
las fuerzas internas en la sección.
Conocido el vector de fuerzas internas del nudo Fi, se inicia un proceso iterativo m hasta
ajustar las fuerzas internas con las externas aplicadas.
Se repite todo el proceso desde (6.152) hasta lograr que ∆Pim = 0 con una tolerancia. En estas
iteraciones m es ∆(∆v R ) m = 0 porque v R tiene ya el valor final impuesto para el paso i.
La historia de carga utilizada es desfavorable pero usual en efectos sísmicos, como es de igual
sentido y magnitud de rotación en ambas caras del nudo, lo que produce tracción de un lado y
compresión del otro en cada capa de armadura, exigiendo la adherencia acero hormigón.
Las reglas de histéresis corresponden a una modificación del modelo de Clough et al. (1966),
considerando los resultados de evidencias experimentales y estudios analíticos (Filippou et
al., 1992). Se incorpora la posibilidad de una rama de ablandamiento.
Estas reglas se resumen a continuación, ver fig.6.21:
! La curva envolvente tiene una rama inicial representativa del comportamiento elástico
hasta alcanzar el momento de fluencia My. Luego sigue una etapa de endurecimiento con
pendiente hK hasta Mm y finalmente otra rama con pendiente sK que puede ser positiva o
negativa en caso de ablandamiento. Existe una envolvente para los momentos positivos y otra
con parámetros diferentes para los momentos negativos.
M m+
Q
s+K +
R
B,P
+ +
h K
M y+ A
L,O
c 2θ 0*
H,J
M*
K
c1M *
K+
M
G 0 I θ
θ 0* C S
K−
T
− M y+
U D
E
M y−
F,V − −
s−K − h K
X
W M m−
A i j B
ri Lc rj
L
Subelemento elastoplástico
+
Subelemento conexión
+
Subelemento corte
=
Superelemento
pi EI EI , EA p j EI
i j
zi zc zj
Lc
M y−
M y+
My 1 2 3
M ( x ) t +1
zi ∆z i M ( x) t
M y+
z j zi
i j i j
z i (real )
z i = z i real
My
zi zj zj
(ciclo anterior)
i j z i = Lc − z j
My ∆z i
zi
zi
z j = Lc − z i
Mm
M
My
Mm
1
My
2
1 2 3 ! n 3
n
φ
φ
1 2 3 ! n
Mi − M y
si Mi > M j → zi = , z j = Lc − z i
V
Mj −My
si Mi < M j → zj = , z i = Lc − z j (6.160)
V
donde V es el esfuerzo de corte, constante en el elemento, ver fig.6.24(c).
Mi − M y
z i ( real ) = > zi a → z i = z i a + ∆z i (6.161)
V
similarmente para z j , ver fig.6.24(d).
Para calcular los coeficientes de la matriz de flexibilidad tangente se utiliza el principio de los
trabajos virtuales, ver fig.6.25. Para f11 resulta:
T e = ∆M i f 11
∆M ( x) (6.162)
Ti = ∫ m( x) ∆φ ( x) dx = ∫ m( x) p EI
dx
Lc Lc
∆θ i f 11 f 12 ∆M i
=
∆θ j f 21 f 22 EP ∆M j (6.163)
∆(∆l ) = f ax ∆N
Lc
con f 11 = [ 2 + 2 γ i ( 1 − ( 1 − ξ i ) 3 ) + 2 γ j ξ 3j ]
6 EI
L
f 12 = f 21 = c [ − 1 − γ i ( 3 ξ i2 − 2 ξ i3 ) − γ j ( 3 ξ 2j − 2 ξ 3j ) ]
6 EI
120 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
Lc
f 22 = [ 2 + 2 γ j ( 1 − ( 1 − ξ j ) 3 ) + 2 γ i ξ i3 ]
6 EI
z zj 1 1
donde ξ i = i , ξ j = , γi = −1 , γ j = −1
Lc Lc pi pj
Lc
f ax =
EA
Notar que para z i = z j = 0 los coeficientes se reducen al caso elástico conocido.
∆M (x) m (x)
∆M i 1
∆M ( x)
pi EI
∆M ( x) ∆M ( x)
EI p j EI
zi zc zj f11
2 N Lc N Lc
−
∆M i 15 30 ∆θ i
= N L 2 N Lc ∆θ j
∆M j − c (6.164)
30 15 NL
N
∆N i = ∆N j = − ∆(∆l )
Lc
∆M i k11 k12 ∆θ i C = f 11 f 22 − f 12 f 21
=
∆M j k 21 k 22 EP ∆θ j k11 = f 22 / C
(6.165)
1 k12 = − f 12 / C = k 21
∆N i = ∆N j = ∆(∆l )
f ax k 22 = f 11 / C
Luego (6.164) se suma con (6.165) y el resultado se vuelve a invertir para tener así la
flexibilidad del subelemento elastoplástico.
∆θ i f 11 f 12 ∆M i
=
∆θ j f 21 f 22 EPNL ∆M j (6.166)
∆(∆l ) = f ax ENL ∆N
rígido
i j
Lc
No considera explícitamente la interacción entre los momentos y fuerzas actuando en las caras
opuestas de un nudo interior. Esta interacción es pequeña mientras no se deteriore
considerablemente la adherencia, la cual no es probable que ocurra en estructuras bien
diseñadas.
Sin embargo la interacción es tenida en cuenta implícitamente en este modelo, ya que los
parámetros de la curva envolvente se obtienen del análisis completo del nudo que sí considera
la interacción, con la aproximación de suponer a priori la historia de carga.
La flexibilidad del subelemento resulta:
∆θ i f 1 ∆M i
θ = (6.167)
∆ j f 2 CON ∆M j
122 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
0
y
t
x
t
y B
∆θ ic φc j
∆θ iep
∆θ jep
∆θ jc
i
φ
A
0
A i j B x
ri Lc rj
L
Figura 6.27: Elemento en su posición inicial (0) y para un tiempo genérico (t)
∆θ i ∆θ i ∆θ i f 11 f 12 f1 ∆M i
θ = θ + = +
∆ j ∆ j EPNL ∆θ j CON f 21 f 22 EPNL f 2 CON ∆M j (6.168)
∆(∆l ) = f ax ENL ∆N
∆Qi ∆Q j
∆θ i
∆N i j ∆N j
i
∆M i ∆θ j ∆M j
Lc + ∆(∆l )
∆M i k11 k12 ∆θ i
= → ∆M = k fl ∆Θ
k 22 ∆θ j
(6.169)
∆M j k 21
Llamando a:
∆v 2 ∆Qi
∆v ∆M
1 / Lc 1 − 1 / Lc 0
∆P fl =
i
T= ∆v fl = 3
1
(6.170)
1 / Lc 0 − 1 / Lc ∆v5 ∆Q j
∆v 6 ∆M j
se obtienen las siguientes relaciones
∆Θ = T ∆v fl
(6.171)
∆P fl = T T ∆M = T T k fl ∆Θ = T T k fl T ∆v fl = kˆ fl ∆v fl
∆N = k a ∆(∆l )
∆N i k a − k a ∆v1 ˆ
= → ∆Pa = k ax ∆v ax (6.172)
∆N j − k a k a ∆v 4
t φ G i t φ
Tφc = c G= Tφ =
t φc G j t φ
(6.175)
1 0 0 1 0 0
G i = 0 1 ri G j = 0 1 − r j
0 0 1 0 0 1
Con el planteo realizado para las relaciones constitutivas y la cinemática del elemento, se
resuelve un problema de grandes desplazamientos con pequeñas deformaciones (lineales y no
lineales). En análisis con pequeños desplazamientos, es decir sin considerar la actualización
geométrica, resulta Tφc = Tφ = I matriz unidad.
140 0 0 70 0 0
156 22 Lc 0 54 − 13 Lc
ˆ = m Lc 4 L2c 0 13 Lc − 3 L2c
M +
420 140 0 0
sim 156 − 22 Lc
4 L2c
(6.177)
0 0 0 0 0 0
36 3 Lc 0 − 36 3 Lc
mI 4 L2c 0 − 3 Lc − L2c
+
30 A Lc 0 0 0
sim 36 − 3 Lc
4 L2c
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 125
6.5.2.6. Amortiguamiento
La quinta ecuación de (6.6) define la matriz de amortiguamiento C. Se utiliza en este trabajo
el amortiguamiento de Rayleigh (Clough y Penzien, 1975) que propone una combinación
lineal de masa y rigidez. Así cumple condiciones de ortogonalidad con los modos naturales
(no estrictamente necesario en este caso), y queda definida a partir de las relaciones de
amortiguamiento de dos modos de vibración:
C =α M + β K (6.179)
Siendo C1 = 2 ξ1 ω 1 M 1 = α M 1 + β K 1 = α M 1 + β ω 12 M 1
C 2 = 2 ξ 2 ω 2 M 2 = α M 2 + β K 2 = α M 2 + β ω 22 M 2
2 (ω 2 ξ 2 − ω 1 ξ 1 )
Resulta α = 2 ω 1 ξ 1 − β ω 12 β= (6.180)
ω 22 − ω 12
En este caso los incrementos en cada iteración ∆u m se calculan desde el origen del paso,
evaluando para ello un vector de fuerzas iniciales ∆R0m −1 y la matriz de rigidez tangente
actualizada K m , como se muestra en la fig.6.29.
Se resumen el algoritmo de solución, donde ahora el subíndice n indica el paso de tiempo y el
supraíndice m la iteración de equilibrio. A partir de (6.182) resulta:
K n1
K n2 K n3
Fn
∆Fn
∆R02
∆R01
Fn−1
u
u n−1 ∆u 1n un
∆u n2
∆u n3
Se adopta una variación para la aceleración dentro del paso de tiempo, en función de
parámetros β y γ, luego integrando:
u" n = u" n−1 + γ ∆t u
"" n + (1 − γ ) ∆t u
"" n −1
u n − u n−1 = ∆u n = β ∆t 2 u
"" n + ( 12 − β ) ∆t 2 u
"" n−1 + ∆t u" n−1 (6.184)
Para γ = 12 , β = 1
resulta el método de la aceleración promedio o regla trapezoidal, que es el
4
"" n , u" n en función de
más usado por ser incondicionalmente estable. A partir (6.93) se expresa u
∆u n , y reemplazando en (6.183) y reordenando:
m
K *n ∆u mn = R n − Fn−1 + M Q n−1 + C Pn−1 − ∆R 0mn−1 (6.185)
m
donde K *n = K mn + a0 M + a1 C
Q n−1 = a 2 u" n−1 + a3 u
"" n−1 (6.186)
Pn−1 = a 4 u" n−1 + a5 u
"" n−1
1 γ 1
con a0 = a1 = a2 =
β ∆t 2
β ∆t β ∆t
1 γ γ
a3 = −1 a4 = − 1 a 5 = ∆t ( − 1) (6.187)
2β β 2β
∆u mn → ∆R 0mn (6.191)
5. Verificar convergencia
Si converge pasar a 6
Si no converge: m = m + 1 , actualizar K mn y volver a 1.
6. Actualizar vectores
u n = u n−1 + ∆u mn
u" n = a1 ∆u mn − Pn−1
"" n = a0 ∆u mn − Q n−1
u (6.193)
Q n = a 2 u" n + a3 u
"" n
Pn = a 4 u" n + a5 u
"" n
∆u mn → ∆Fn → Fn = Fn −1 + ∆Fn
! m = 1 , volver a 1
∆N m = k a ∆(∆l ) m (2.194)
∆M mE = k m ∆Θ m + ∆M 0m−1 (6.197)
∆M mE = (∆m E ) ep
m
= (∆m E ) con
m
(6.198)
∆Θ con
m
= f con
m
(∆m mE − ∆m 0m −1 ) con (6.199)
m
donde f con es la flexibilidad definida en (6.167) y ∆m 0m −1 es el vector de momentos iniciales
en la conexión, ver fig.6.30.
M M
∆M pEI EI
∆M E
∆φ pl ∆φ el
∆m Rm
∆m0m ∆φ
mn −1 EI
θ φ
θ n−1 ∆θ m
Se actualizan las rotaciones, adicionando (6.199) siempre desde el final del paso anterior
Si la norma euclídea de (∆m um ) con excede una tolerancia especificada, se actualiza la matriz
de flexibilidad de la conexión (6.167): (f um +1 ) con .
Se invierte y se obtiene la rigidez, lo que permite calcular los momentos iniciales, ver
fig.6.30:
∆Θ ep
m
= ∆Θ elm + ∆Θ mpl = f el (∆m mE − ∆m 0m −1 ) + f plm (∆m mE − ∆m 0m −1 ) (6.204)
M in −1 + M jn−1 ∆mimE + ∆m mj E
Vn−1 = ∆V m
= (6.205)
Lc Lc
Luego se calcula la posición del punto de inflexión al inicio del paso n, ver fig.6.32, con:
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 131
M in−1 M jn −1
Li = Lj = (6.206)
Vn−1 Vn −1
∆mim
E ∆mim
Z
M iy
M in−1
Lj
z im−1 ∆z i
zi
Li
∆mimE − ∆mim0−,φ1 1 1
∆φ im = ∆φ imel + ∆φ impl = + (∆mimE − ∆mim0−,φ1 ) ( − ) (6.207)
EI p im EI EI
mimch
Viφ = (6.209)
Li
∆m mjE − ∆m mj0−,1φ 1 1
∆φ mj = ∆φ mjel + ∆φ mj pl = + (∆m mj E − ∆m mj0−,1φ ) ( − ) (6.210)
EI p mj EI EI
φ mjn = φ jn −1 + ∆φ mj → m mjR (6.211)
132 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
m mjch
V jφ = (6.212)
Lj
M in −1 + ∆mimE − M i y
zi = , si z i > z im−1 → z im = z im −1 + ∆z i (6.213)
Vn −1 + ∆V m
M iy
V iZ = (6.214)
Li − z im −1
M jn −1 + ∆m mj E − M j y
zj = , si z j > z mj−1 → z mj = z mj−1 + ∆z j (6.215)
Vn −1 + ∆V m
M jy
V jZ = (6.216)
L j − z mj −1
∆mim V1 Li M in −1
∆m mZ = mZ = −
∆m jZ V1 L j M jn −1
Ahora se actualizan los momentos iniciales, de acuerdo con las siguientes posibilidades:
! Si V1 = Viφ se calcula:
∆mimZ − ∆mim0−,φ1 1 1
(6.219)
= + (∆mimZ − ∆mim0−,φ1 ) ( − )
EI p im EI EI
! Si V1 = V jφ se calcula:
! Si V1 = ViZ ó V1 = V jZ se calcula:
M M
Mn
m
mch m Rm
∆m Z2
mn−1 ∆m02 ∆m1Z
∆m10
M n−1
φ θ
φ n −1 ∆φ Zm ∆θ Z1
∆φ m ∆θ Z2
∆θ
Figura 6.33: Momento interno y cambio Figura 6.34: Avance evento a evento
de pendiente M - φ
134 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
Una vez evaluado los momentos iniciales en los subelementos (6.202) y (6.225), los
incrementos de momentos en los extremos del elemento se determinan con:
∆M E = k ∆Θ + ∆M 0 = ∆M + ∆M 0
∆M E = ∆m Eel = ∆m E pl = ∆m Econ
∆Θ el = f el ∆m Eel = f el (∆M + ∆M 0 )
∆Θ pl = f pl (∆m E − ∆m 0 ) pl = f pl (∆M + ∆M 0 − ∆m 0 pl )
mi − miR
n −1
∆M n = Rn (6.229)
Rn
m − m Rn −1
j j
Utilizando (6.171) se calcula:
∆P fln = T T ∆M n (6.230)
Combinando ∆P fln y ∆Pan a partir de (6.194), se obtienen las fuerzas internas ∆Pn
asociadas a los 6 grados de libertad de la zona deformable de la barra.
Para considerar el efecto de grandes desplazamientos se actualiza primero el vector P sobre la
configuración al inicio de este paso n.
Pn = Pn −1 + ∆Pn (6.231)
Ahora con la configuración actualizada al final del paso n se realizan las transformaciones
(6.174).
En estas transformaciones, en la matriz G, se utilizan los valores reales de cosθ, senθ, tgθ, sin
la aproximación utilizada para obtener la matriz de rigidez en (6.176).
Finalmente el vector (6.232) rotado a coordenadas estructurales se ensambla en el vector Fn
de (6.193).
esquema sin considerar los cambios de rigidez dentro de cada paso, es decir no hay
iteraciones de equilibrio, entonces sí el tamaño del paso juega un rol principal en la precisión
de los resultados.
∆m ∆m m
∆m1E
∆m1R
∆m1′E
mn −1 ∆m1′R
∆m1R
∆m E2 ∆m10
∆m R2 K1
∆m10 ∆m1E K 1′
∆m R2 ∆m R3
∆m02 ∆φ φ n −1 φ
∆φ 1
∆θ 1 ∆φ 1 ∆φ 1′
∆φ 2
∆θ 2
∆θ 3
(a ) ∆m02 (b) (c)
divide el paso por la mitad y se rehace el proceso iterativo. Si tampoco converge se vuelve a
dividir por la mitad. El número de subdivisiones también tiene un límite dado como dato.
Si en una subdivisión converge, luego el escalón siguiente se realiza hasta completar el paso
original, en una sola vez. Si ahí no converge, ese escalón comienza a ser subdividido en la
misma forma anterior, y así sucesivamente.
Si se agota el número de subdivisiones prefijadas sin convergencia, el “truco” que se propone
es avanzar directamente desde la última convergencia hasta el final del paso siguiente como
se muestra en la fig.6.36. La importancia del error producido dependerá de la variación de la
carga en ese paso, y también del número de pasos consecutivos sin convergencia.
Rn
error
conv. 2° subdiv. Rn +1
conv. 1° subdiv.
Rn −1
n −1 n n +1
1° subdiv.
2° subdiv.
no conv. 3° subdiv.
avance hasta n + 1
Esta última solución propuesta permite seguir avanzando hasta completar el análisis sin que el
programa quede “colgado”. Se juzga luego la importancia de los pasos sin convergencia, que
también son indicados en la salida de los resultados.
Cuando se produce una modificación del ∆t original, es necesario recalcular las constantes
(6.187) y los vectores (6.186).
Se recomienda utilizar un número máximo de iteraciones de equilibrio reducido, NITM = 7, y
un número máximo de subdivisiones del orden de 2*NITM, para luego saltar al paso siguiente
desde la última convergencia.
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 139
También se ha utilizado como parámetro de daño a la distorsión de piso (Toussi y Yao, 1983).
Estos índices no consideran el efecto cíclico.
c) Índices basados en la degradación de rigidez: propuestos por Banon et al. (1981) quien
utiliza la relación de daño a flexión:
140 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
Kf
FDR = (6.236)
Kr
K f (K m − K 0 )
FDR = (6.237)
K m (K f − K 0 )
con K0 rigidez inicial, Kf rigidez secante en la falla y Km rigidez secante para el máximo
desplazamiento.
e) Índices basados en daño acumulado: se distinguen los que están basado en la formulación
de fatiga con bajo ciclaje, que son función de la deformación plástica acumulada, y aquellos
basados en la energía histerética absorbida durante la carga.
Entre los primeros se encuentran:
! Rotación acumulada normalizada (Banon et al., 1981)
NCR =
∑ θm −θ y (6.238)
θy
exp( s b) − 1 δ m ,i
DI = , b =c∑ , s, c : ctes (6.240)
exp( s ) − 1 i δ f
luego FD ( x i ) = F ( x i ) (1 − DI )
! Chung et al. (1989) generaliza la conocida ley de Coffin, Mason y Miner y proponen:
ni+ ni−
DI = ∑ (α i+ +α i− ) (6.241)
i N i+ N i−
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 141
µ j −1
con log N j + b log ( )=0 → b
µ umon − 1
D +
=
∑ E +p ,i + ∑ E i+
, DI = D + + D − − D + D − (6.243)
E +f + ∑ E i+
DI =
φm
+ βe
∫ dE (6.245)
φu M y φu
donde φ m y φ u son los valores máximo demandado y último, bajo carga monotónica, de
curvatura o rotación, ∫ dE es la energía histerética disipada, M y el momento de fluencia
y β e una constante que depende de las características del detallamiento de la sección,
además de las fuerzas axiales y de corte presente.
142 CAPÍTULO 6 Oscar Möller
g) Índices globales: dos tendencias se han presentado para calcular un índice de daño para la
estructura completa.
! Medidas basadas en parámetros modales: se relaciona el cambio en el período
fundamental de vibración con el nivel de daño, Di Pasquale y Cakmak (1987, 1988).
2 2
Tund Tdam Tund
Dm = 1 − , D pl = 1 − , D f =1− (6.246)
Tm Tm2 2
Tdam
donde Tund , Tm y Tf son los períodos no dañados al inicio, el valor máximo durante el
sismo, y el valor final remanente.
! Combinación de índices locales: se realiza un promedio ponderado entre los índices
daño calculado para cada sección crítica de la estructura. La forma más general fue
presentada por Bracci et al. (1989).
DI G =
∑ wi DI i(b+1) (6.247)
∑ wi DI ib
Algunos autores utilizan wi = Ei , b = 0 , es decir el factor de peso es la energía disipada
en cada elemento.
Con el parámetro b se asigna más importancia a los elementos más dañados, y es así que
otros autores definen wi = 1.00 y b = 1.00 resultando:
DI G =
∑ DI i2
(6.248)
∑ DI i
También es posible asignar un mayor factor de peso wi a aquellos elementos cuya falla
puede desencadenar el colapso total de la estructura.
Entre todos estos índices de daño se ha seleccionado, para ser utilizado en este trabajo, el
índice de Park y Ang (6.245) porque tiene en cuenta dos parámetros de daño como son el
efecto de la máxima deformación y el efecto de acumulación de daño por repetición de ciclos
de carga. Además este índice ha sido y es utilizado en numerosos trabajos y se ha calibrado
con daños observados en terremotos reales (Park, Ang y Wen, 1987)
DI < 0.10 sin daño o fisuras menores localizadas
0.10 ≤ DI < 0.25 daño menor, ligeras fisuras difundidas
0.25 ≤ DI < 0.40 daño moderado, fisuración severa, desprendimientos localizados
0.40 ≤ DI < 1.00 daño severo, aplastamiento del hormigón, armadura expuesta
DI ≥ 1.00 colapso
Se ha señalado a DI = 0.40 como límite entre daños reparables e irreparables y también para
DI > 0.80 como colapso inminente.
APLICACIONES A ELEMENTOS TIPO BARRA 143
CAPÍTULO 7
EJEMPLOS
L E, A, I
1
EA
L 0 0 0 0 0
12 EI 6 EI 6N N
KL = 0 − 2 , K NL = 0 −
L3
L 5L 10
6 EI 4 EI 0 N 2 LN
0 − −
L2 L 10 15
146 CAPÍTULO 7 Oscar Möller
La ecuación de equilibrio escrita en forma incremental (6.9), y para el caso de carga estática,
resulta:
t + ∆t
(K L + K NL ) ∆u = R − tF
La carga crítica se obtiene cuando se anula la rigidez, es decir cuando la matriz de rigidez se
vuelve singular. Matemáticamente se expresa:
det (K L + K NL ) = 0
Siendo N = − P , resulta
EA
L 0 0
12 EI 6 P 6 EI P
K = K L + K NL = 0 − − 2 +
L3 5L L 10
6 EI P 4 EI 2 LP
0 − L2 + 10 L
−
15
det K = 0 → [ ( 3 − )( −
EA 12 EI 6 P 4 EI 2 PL 6 EI P
) − ( 2 + )2 ]= 0
L L 5L L 15 L 10
Resulta:
EI
Pc = 2.486 !
L2
Este resultado es muy aproximado a la carga crítica de Euler obtenida con una función
senoidal para representar la deformada:
π 2 EI EI
Pc ( Euler ) = 2
= 2.467 2
(2 L) L
L E, A, I : constantes
2π 2 EI EI
Pc ( Euler ) = 2
= 19.7 2
L L
det (K L + K NL ) = 0
Para los grados de libertad desplazables mostrados en la fig.7.3, y siendo N = -P, la matriz de
rigidez resulta:
EA
0
K = K L + K NL = L
4 EI 2 LP
0 −
L 15
Luego:
EA 4 EI 2 PL
det K = 0 → ( − )=0
L L 15
Resulta:
EI
Pc = 30
L2
2
1
1
Se observa una diferencia importante con respecto a la carga crítica de Euler. El error está en
discretizar toda la barra con un solo elemento. La función de interpolación utilizada,
polinomio cúbico, con solamente dos grados de libertad, no puede aproximar la verdadera
deformación.
1 1 2 2 3
P
l l
L
Coordenadas locales
2 4 2 4
1 6 2 6
1 5 1 5
3 3
2
5
1 Coordenadas estructurales
4
3
Figura 7.4: Discretización con dos elementos. Sistemas de coordenadas y grados de libertad
1 2 3 4 5
EA
l
12 EI 6 N
0 + sim.
l3 5l
6 EI N 4 EI 2 l N
K ( 2) = K L + K NL = 0 + +
2
l 10 l 15
− EA
0 0
EA
l l
6 EI N 2 EI l N 4 EI 2 l N
0 + − 0 +
l2 10 l 30 l 15
2 EA
l
24 EI 12 N
0 + sim.
3
l 5l
8 EI 4 l N
K = K L + K NL = 0 0 +
l 15
− EA 0 0
EA
l l
6 EI N 2 EI l N 4 EI 2 l N
0 + − 0 +
l2 10 l 30 l 15
La carga crítica se obtiene cuando se anula la rigidez, es decir cuando la matriz de rigidez se
vuelve singular. Matemáticamente se expresa:
det (K L + K NL ) = 0
EJEMPLOS 149
El segundo determinante no depende de N, por lo tanto debe ser nulo el primer determinante:
2 l3 N
4l+ sim.
15 EI
EI l2 N 24 12 l N
det = 2 6 + + =0
l 30 EI l 5 EI
l3 N 4 l3 N
2l− 0 8l+
30 EI 15 EI
N
Llamando λ = resulta:
EI
4 l + (2 / 15) l 3 λ sim.
6 + (l / 10) λ (24 / l ) + (12 / 5) l λ
2
=0
2 l − (l / 30) λ
3
0 8 l + (4 l / 15) λ
3
Este resultado es mucho más aproximado al verdadero valor crítico dado por Euler, que el
obtenido considerando a la barra como un solo elemento.
150 CAPÍTULO 7 Oscar Möller
TipoI TipoII
1
4φ 16 + 1φ 12 4φ16 + 1φ 12
1
2 .00 m
2 ∆ imp 40 est φ 6 c /10 est φ 6 c / 14
4φ 12 2φ 6
20
Figura 7.5: Geometría de la ménsula
M / M ACI
0.8 0.8 B A
0.6 0.6 C
0.4 0.4
0.2 0.2
0 0
0 5 10 15 20 25 0 5 10 15 20 25
PHI / PHIY PHI / PHIY
80 80
60
P ( KN )
60
P ( KN )
El. Tipo 4
40 40
El. Tipo 2 El. Tipo 4
20 El. Bidim. 20 El. Tipo 2
El. Bidim.
0 0
0 2.5 5 7.5 10 12.5 15 0 2.5 5 7.5 10 12.5 15
u ( cm ) u ( cm )
(a) (b)
Figura 7.7: Respuesta de la ménsula con desplazamientos impuestos
columna
6
12 φ 3 4 "
36" 17"
est φ 14 " c / 16"
1 2 3 4
17"
5 36"
viga
H eq ∆ imp
4 φ 34 "
P = 470 kip 16" est φ 1
4 " c / 3.5"
72" 72" 3 φ 58 "
9"
Figura 7.8: Subensamble viga columna interior
Se ensayaron dos subensambles iguales. El BC4 fue sujeto a un solo ciclo con grandes
desplazamientos en ambos sentidos, simulando el efecto de un pulso sísmico muy severo. El
BC3 se ensayó con un gran número de ciclos con desplazamientos crecientes.
En primer lugar se modeliza el nudo utilizándose la metodología descripta en 6.5.1.2.
implementada en el programa CONEX mencionado al final de 6.5.1.2.6. Las dimensiones y
nomenclaturas empleada se observan en la fig.7.9.
EJEMPLOS 153
La respuesta del nudo del specimen BC4 se presenta en las figs.7.10 a 7.13. En las figs.7.10 y
7.11 se observa que, debido a que la armadura superior tiene el doble de sección que la
inferior, la resistencia es mayor para momentos de tracción arriba (positivo en cara A y
negativo en cara B).
θA
4 φ19
MB
40.6
MA 3φ16
θB
A 43.2 B
250
125
Numérico
M (KNm)
Experimental
0
-125
-250
-20 -15 -10 -5 0 5 10 15 20
ROT. *10-3 (rad)
250
125 Numérico
M (KNm)
Experimental
0
-125
-250
-20 -15 -10 -5 0 5 10 15 20
ROT. *10-3 (rad)
El primer medio ciclo es con momentos negativos en ambas caras, siendo muy satisfactoria la
concordancia entre resultados numéricos y experimentales. En la respuesta numérica de la
recarga se observa una primera rama con muy poca rigidez, luego un punto de inflexión
seguido de una respuesta no lineal, todo atribuible a la forma de la ecuación constitutiva τ - u.
En la cara A se observa otro punto de inflexión que corresponde al contacto del hormigón,
siguiendo luego por la envolvente, hecho considerado explícitamente en el modelo de
comportamiento histerético, ver 6.5.1.2.8. La sección B con tracción abajo presenta una
rotación mayor que la A, asociado a una deformación y deslizamiento mayor de la capa de
armadura inferior, con la fuerza de compresión resistida por la armadura superior con poca
colaboración del hormigón, razón por la cual no se manifiesta el segundo punto de inflexión.
Los puntos de inflexión aparecen suavizados en la respuesta experimental debido a que tanto
en la fricción de la barra que desliza como en el contacto del hormigón ocurren fenómenos
locales de degradación en los bordes de las fisuras, que producen una rigidización gradual por
contactos progresivos. De todas maneras la aproximación de los resultados numéricos a los
experimentales es aceptable.
Las figs.7.12 y 7.13 muestran el deslizamiento y la deformación de la armadura inferior en la
sección A. La diferencia entre la deformación de la respuesta numérica con la experimental
puede atribuirse a que el valor experimental es la deformación promedio de un sector de
barra, mientras que el numérico es la deformación en la sección A.
250
125
Numérico
M (KNm)
Experimental
0
-125
-250
-5 -4 -3 -2 -1 0 1
DESLIZ. u (mm)
Figura 7.12: Deslizamiento de la armadura inferior en sección A, specimen BC4
250
Experimental Numérico
125
M (KNm)
-125
-250
-20 0 20 40 60
DEF.*10-3
Figura 7.13: Deformación de la armadura inferior en sección A, specimen BC4
EJEMPLOS 155
250
125 Numérico
M (KNm)
0
-125
-250
-15 -10 -5 0 5 10
ROT. *10-3 (rad)
Figura 7.14: Relación M - θ para la sección A, specimen BC3
250
125 Numérico
M (KNm)
-125
-250
-15 -10 -5 0 5 10
ROT. *10-3 (rad)
Figura 7.15: Relación M - θ para la sección B, specimen BC3
250
Numérico
125
Experimental
M (KNm)
-250
-15 -10 -5 0 5 10
ROT. *10-3 (rad)
Figura 7.16: Ciclo N°7 de la relación M - θ para la sección A, specimen BC3
La respuesta numérica del nudo del specimen BC3 se muestra en las figs.7.14 y 7.15 para las
caras A y B. Se observa el estrangulamiento típico de la respuesta histerética debido al
deterioro cíclico de la adherencia, siendo éste el fenómeno que marca la falla del nudo. En la
156 CAPÍTULO 7 Oscar Möller
fig.7.16 se compara el ciclo Nº 7 con los valores experimentales, observándose una buena
concordancia.
La estrategia de solución numérica resultó satisfactoria desde el punto de vista que permitió
obtener una buena solución de un problema no lineal muy complejo, pero presentó
dificultades en la convergencia en los puntos de inflexión y en los de máximo desplazamiento,
debido al cambio brusco de rigidez en el primer caso y a la rigidez casi nula en el segundo.
La complejidad del análisis momento rotación del nudo, como así también, aunque en menor
medida, el de momento curvatura de la sección de la barra, justifica la estrategia de realizar
análisis previos de conexiones y secciones, obteniéndose los valores de los parámetros que
caracterizan los modelos simplificados utilizados en los subelementos del elemento de barra.
Luego de obtener las relaciones momento curvatura de las secciones de viga y columna con
MPHI1, similarmente al ejemplo anterior, se resumen en la tabla 7.2 todos los parámetros
encontrados.
Tabla 7.2: Parámetros para las relaciones constitutivas
Se estudia ahora la respuesta del specimen BC3 sometido a una carga normal constante en la
columna, que simula la carga de pisos superiores, y a ciclos reversibles con desplazamientos
crecientes ∆ imp en la parte inferior como se muestra en la fig.7.8. Se mantienen las unidades
originales del ensayo experimental: Kips, in.
Para considerar solo pequeños desplazamientos, la fuerza horizontal real H a realizar para
producir el desplazamiento ∆ imp se corrige eliminando el efecto de grandes desplazamientos
H eq = H + P ∆ / 2 h siendo h = 36″.
La relación H eq − ∆ imp numérica se presenta en fig.7.17 (a), mientras que los experimentales
en fig.7.17 (b) sin los primeros ciclos elásticos. El comportamiento del modelo numérico es
muy satisfactorio y además el algoritmo usado para la solución del problema no lineal resultó
suficientemente robusto, permitiendo pasos con incrementos de desplazamientos grandes y
utilizando la subdivisión automática del paso solamente para unos pocos casos necesarios.
Los l5 ciclos completos fueron realizados con sólo 268 pasos de desplazamiento, cumpliendo
ampliamente con el criterio buscado de balance entre precisión y simplicidad.
La fig.7.17 (c) muestra la respuesta numérica para el mismo esquema de fuerza equivalente
Heq y sin considerar la rotación concentrada entre vigas y nudo. Se obtienen desplazamientos
de sólo 2/3 de los valores reales, confirmando la necesidad de tener en cuenta este efecto en
análisis de pórticos que incursionan fuertemente en el campo no lineal.
EJEMPLOS 157
40
Heq. ( Kips ) 20
-20
-40
-60
-4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4
u ( in ) (a)
40
Heq. ( Kips )
20
-20
-40
-60
-4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4
u ( in ) (b)
40
Heq. ( Kips )
20
-20
-40
-60
-4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4
u ( in ) (c)
40
20
H ( Kips )
-20
-40
-60
-4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4
u ( in ) (a)
40
20
H ( Kips )
-20
-40
-60
-4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4
u ( in ) (b)
En resumen, con este ejemplo se pone de manifiesto la potencialidad del modelo numérico
para representar la rotación concentrada en la interfaz barra nudo, luego la respuesta del
subensamble con ciclos reversibles de desplazamientos impuestos, y la consideración de
grandes desplazamientos conjuntamente con la no linealidad física.
EJEMPLOS 159
viga
4 4 φ 20
1.25 m
50 est.φ 8 c / 12.5
3 ∆
4 φ 20
0.50 m 5 6 25
2 columna
1.25 m
30 10 φ16
1
est.φ 8 c / 8
40
0.4 2.00 m
Debido a la simetría en las armaduras de las secciones de viga y columna, los parámetros de
la tabla 7.3 se aplican a las rama + y – de los modelos de comportamiento histerético.
La definición de los parámetros para el índice de daño de Park y Ang (2.245) se realiza con el
procedimiento propuesto en el punto 6.5.4., es decir obtener la curvatura última y energía
disipada para 1 y 4 ciclos y calcular entonces φu , βe .
Resulta:
Se observa cómo el mejor confinamiento en la columna que en la viga origina una menor
diferencia entre φ u4 y φ u1 es decir menor deterioro por el efecto cíclico, resultando un menor
valor para β e . De todas formas estos resultados se aproximan al valor recomendado de
β e = 0.05 para secciones bien detalladas.
En el ensayo experimental la falla también se produjo al final del segundo ciclo a ductilidad
global 5 por pandeo de la armadura comprimida de la viga.
-200
-150
Numérico
-100
-50
P ( KN )
0
Experimental
50
100
150
200
100 75 50 25 0 -25 -50 -75 -100
Despl. ( mm )
-200
-150
-100
-50
P ( KN )
0
50
100
150
FALLA
200
100 75 50 25 0 -25 -50 -75 -100
Despl. ( mm )
-200
-150
-100
-50
P ( KN )
0
50
100
150
FALLA
200
100 75 50 25 0 -25 -50 -75 -100
Despl. ( mm )
Finalmente en la fig.7.22 se muestra el resultado del análisis cíclico con el modelo de barras
pero sin considerar la rotación concentrada en la interfaz barra-nudo. La relación de
desplazamientos máximos indica que un 23% del desplazamiento total se debe a la rotación
localizada. Esta influencia es menor que en el ejemplo del nudo interior 7.4, lo cual es de
esperar por tratarse en este caso de un nudo exterior.
En resumen, con este ejemplo se evidencia nuevamente la habilidad del modelo numérico
para representar la respuesta de subensambles solicitados a ciclos reversibles crecientes en
desplazamientos.
El procedimiento propuesto para la calibración de los parámetros del índice de daño de Park
y Ang conduce, en este ejemplo, a una predicción del momento de la falla exactamente
coincidente con lo ocurrido en el ensayo experimental, además de coincidir en el estado límite
que produce la falla, pandeo de la armadura comprimida, determinado en el análisis momento
curvatura de la sección de la viga.
3.00 m
- Tabiques
Pisos 1 a 5 : 20 x 200 cm
! Propiedades de materiales
Hormigón : H-30
3.00 m Acero : ADN-420
! Amortiguamiento
ξ = 0.05
4.00 m
Figura 7.23: Datos para la estructura de tabiques acoplados con vigas esbeltas de 5 pisos
164 CAPÍTULO 7 Oscar Möller
Armadura
Armadura Longitudinal
Elemento Sección Dim. Transversal
Superior Inferior Caras lat. Perim. Suplem.
Vigas Apoyo 20/60 4φ16+1φ12 3φ16 1φ10 φ8c/11.5 -
Pisos 1,2 Tramo 20/60 2φ16 3φ16 1φ10 φ8c/15 -
Vigas Apoyo 20/50 4φ16 2φ16+1φ12 1φ10 φ8c/11.5 -
Piso 3,4,5 Tramo 20/50 2φ16 2φ16+1φ12 1φ10 φ8c/12.5 -
Tabique
Todas 20/200 12φ12 12φ12 φ8c/20 φ8c/20 φ6c/12
Piso 1
Tabique
Todas 20/200 12φ12 12φ12 φ8c/20 φ8c/20 -
Piso 2
Tabique
Todas 20/200 4φ12 4φ12 φ8c/20 φ8c/20 -
Piso 3,4,5
La curvatura última para 4 ciclos se alcanza con una ductilidad µ φ 4 = 17.5 con estado límite
de deformación en compresión de la armadura inferior. Para 1 ciclo resulta µ φ1 = 31.7 con
estado límite de deformación en tracción de la armadura inferior.
En la tabla 7.5 se resumen los parámetros para las secciones tipo.
EJEMPLOS 165
250
Mm = 212.1 sEI
200
hEI
falla 4 ciclos falla 1 ciclo
M (KNm)
150
My = 141.3 µφ =17.5 µφ =31.7
100
EI
50
0.1043 0.1948
0
0 0.025 0.05 0.075 0.1 0.125 0.15 0.175 0.2 0.225
φ (rad/m)
TABIQUES VIGAS
Parámetro Extremos Tramo Extremos Tramo
Piso 1 Pisos 2 a 5
Pisos 1, 2 Pisos 1, 2 Pisos 3 a 5 Pisos 3 a 5
EIp (MNm2) 921.72 555.64 33.757 25.246 20.869 15.460
My+ (KNm) 1504 856.50 134.01 129.95 91.95 90.85
Mm+ (KNm) 1978.2 1106.5 191.59 200.36 144.69 140.55
h+ 0.0213 0.0193 0.0178 0.0334 0.0237 0.0316
s+ 0.0053 0.0037 0.00388 0.0060 0.0052 0.0073
φu+ 1 ciclo 0.04048 0.04731 0.16090 0.15780 0.18950 0.19390
4 ciclos 0.03872 0.04067 0.09140 0.09520 0.0990 0.07600
-
My (KNm) -1504 -856.50 -169.78 -87.59 -141.29 -71.50
Mm- (KNm) -1978.2 -1106.5 -246.53 136.28 -212.11 -112.08
h- 0.0213 0.0193 0.0239 0.0237 0.0308 0.0249
s- 0.0053 0.0037 0.0108 0.00376 0.00889 0.0062
φu- 1 ciclo -0.04048 -0.04731 -0.15400 -0.16370 -0.19480 -0.20700
4 ciclos -0.03872 -0.04067 -0.11000 -0.11620 -0.10430 -0.07700
βe 0.020 0.020 0.050 0.050 0.050 0.050
166 CAPÍTULO 7 Oscar Möller
! Relaciones momento-rotación
Con los datos de la geometría y armaduras de las conexiones y mediante el programa de
computación CONEX descripto en 6.5.1.2.6., se calculan los parámetros para el modelo de
comportamiento histerético M-θ explicitado en 6.5.1.2.8. y fig.6.21 .
250
Mm = 211.6 sK
200
My = 160.3 hK
falla
M (KNm)
150
100
K
50
13.13
0
0 2 4 6 8 10 12 14 16
θ (rad)
viga-nudo viga-nudo
Parámetro
pisos 1,2 pisos 3 a 5
K+ (MNm) 202.39 117.32
My+ (KNm) 151.39 107.70
Mm+ (KNm) 215.60 144.00
h+ 0.0420 0.0399
s+ 0.0219 0.0284
θu+ (rad) 0.01240 0.01490
K- (MNm) 277.68 171.29
My- (KNm) -220.20 -160.33
Mm- (KNm) -289.73 -211.57
h- 0.0494 0.0451
s- 0.0334 0.0199
θu- (rad) -0.00986 -0.01313
βe 0.05 0.05
EJEMPLOS 167
600
V u = 535
500
V y = 450
400 Criterio 2 Criterio 1
Du = 26.00 Du = 31.20
Corte basal ( KN )
100
Dy = 6.87
0
0 5 10 15 20 25 30 35
Desplaz.piso 5 ( cm )
200 0.4%
Acel. a G (cm/seg2)
Dist.piso 4 ( % )
100 0.2%
0 0.0%
-100 -0.2%
m ax:0.337
-200 -0.4%
0 2 4 6 8 10 12 0 2 4 6 8 10 12
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
5 0.12
Indice daño global DIG
0.1
Desp.piso 5 u (cm)
2.5
0.08
0 0.06
0.04
-2.5
0.02
m ax:-4.06
-5 0
0 2 4 6 8 10 12 0 2 4 6 8 10 12
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
400 0.12
m ax:303.3
Indice daño local DImáx
Corte basal Vo ( KN )
0.1
200
0.08
0 0.06
0.04
-200
0.02
-400 0
0 2 4 6 8 10 12 0 2 4 6 8 10 12
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
600 0.8%
400
Acel. a G (cm/seg2)
0.4%
Dist.piso 4 ( % )
200
0.0%
0
-0.4%
-200
-400 -0.8%
max: 1.175
-600 -1.2%
0 5 10 15 20 25 30 0 5 10 15 20 25 30
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
10 0.6
Indice daño global DIG
Desp.piso 5 u (cm)
5
0.45
0
0.3
-5
0.15
-10
max: -14.79
-15 0
0 5 10 15 20 25 30 0 5 10 15 20 25 30
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
600 0.6
max: 472.5
Indice daño local DImáx
Corte basal Vo ( KN )
400
0.45
200
0 0.3
-200
0.15
-400
-600 0
0 5 10 15 20 25 30 0 5 10 15 20 25 30
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
600 3.0%
max: 2.157
Acel. a G (cm/seg2)
300 2.0%
Dist.piso 4 ( % )
0 1.0%
-300 0.0%
-600 -1.0%
-900 -2.0%
0 3 6 9 12 15 18 21 0 3 6 9 12 15 18 21
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
30 0.75
max: 28.73
Indice daño global DIG
Desp.piso 5 u (cm)
20 0.6
10 0.45
0 0.3
-10 0.15
-20 0
0 3 6 9 12 15 18 21 0 3 6 9 12 15 18 21
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
600 0.75
Indice daño local DImáx
Corte basal Vo ( KN )
400 0.6
200
0.45
0
0.3
-200
-400 0.15
max: -561
-600 0
0 3 6 9 12 15 18 21 0 3 6 9 12 15 18 21
Tiempo t ( seg ) Tiempo t ( seg )
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