Professional Documents
Culture Documents
Reunificación
Historia
Religión
6. Jerusalem tiene más sinagogas per cápita que cualquier otra ciudad del mundo.
10. Jerusalem es mencionada más de 600 veces en la Biblia hebrea, pero ni una
sola vez en el Corán islámico.
11. En la Edad Media, los cristianos les prohibieron a los judíos el ingreso a
Jerusalem. Posteriormente, los musulmanes levantaron la veda.
12. Hay más de 70 nombres diferentes para Jerusalem en las escrituras hebreas
(por ejemplo, Sión).
Turismo
16. El Monte de los Olivos, en Jerusalem, alberga 150.000 tumbas judías, algunas
de las cuales datan del siglo XV.
17. Bajo control israelí, los judíos no tienen permitido rezar en el Monte del
Templo, el lugar más sagrado de su religión.
Gobierno
20. Si bien todas las dependencias del gobierno israelí, así como
la Knéset (parlamento), están ubicadas en Jerusalem, en la ciudad no hay ninguna
embajada extranjera. El presidente Donald Trump está analizando la opción de
trasladar la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalem.
Arqueología
23. La arqueología demostró que los judíos vivieron en Jerusalem desde el año
3000 AEC.
Educación
Cultura
26. Jerusalem tiene una de las discotecas mejor calificadas en el mundo: Haomán
17.
28. Bob Dylan realizó el bar mitzvá de Jesse, su hijo mayor, en el Muro de los
lamentos.
Demografía
32. Si bien la población del país que se autodefine como ‘judíos seculares’ es el
44%, la población judía secular de Jerusalem es sólo el 19%.
Economía
39. Cerca del 37% de las familias de Jerusalem vive bajo la línea de la pobreza,
representando el 61% de los niños de la ciudad.
40. Jerusalem alberga más de 400 compañías de high-tech.
43. Las familias árabes de Jerusalem tienen casi el triple de probabilidad de vivir
bajo la línea de la pobreza en comparación a las familias judías de la ciudad. Esto
se atribuye a la gran diferencia en la cantidad de años de educación.
45. Las mujeres de Jerusalem tienen un ingreso 25% menor a los hombres,
comparado al 46% menor de las mujeres de Tel Aviv.
46. La compañía Mobileye, fundada en Jerusalem y adquirida por Intel este año,
fue protagonista de la mayor adquisición de una compañía de tecnología israelí en
la historia.
Inmigración y migración
47. Este año, una proporción relativamente alta (casi el 50%) de los nuevos
ciudadanos de Jerusalem tienen entre 20 y 34 años de edad.
48. De quienes se mudaron a Jerusalem, el 38% llegó de Beit Shémesh y Tel Aviv.
(Una de estas cuatro legiones, la décima, era la más famosa. Era comandada por
Tito, el hijo de Vespasiano, y tenía un jabalí como su símbolo).
El objetivo romano era la aniquilación de los judíos que habían osado levantarse
en contra de Roma y que, increíblemente, habían tenido éxito.
Mientras que siempre fueron brutales en sus tácticas de guerra, los romanos se
superaron a sí mismos cuando se trató de reprimir la revuelta en Judea. Su
objetivo era enviar un claro mensaje a todo el Imperio: toda resistencia en contra
de Roma terminará en una devastación completa y total.
Pero, incluso con cuatro legiones, Vespasiano tenía una dura batalla por delante.
Josefo
Uno de los primeros en resistirse fue la fortaleza de Yodfat, que había sido
construida sobre la ladera del Monte Atzmón. Allí, el comandante de las fuerzas
judías de Galilea, Yosef ben Matitiahu —mejor conocido como Flavio Josefo—
opuso una heroica resistencia, pero pese a esto no fue capaz de soportar la
acometida romana.
Cuando la derrota parecía segura, los zelotes del grupo decidieron que era mejor
morir en sus propias manos que ser vendidos como esclavos o ver a sus familias
ser despiadadamente asesinadas por los romanos.
Por lo tanto, hicieron un pacto para matar a sus propias esposas, hijos y a ellos
mismos. Josefo fue uno de los pocos sobrevivientes; en lugar de suicidarse, se
rindió ante los romanos.
Vespasiano advirtió de inmediato que Josefo podía ser útil para los romanos y lo
usó como guía/traductor y luego como crónico de la guerra.
Los trabajos de Josefo han sobrevivido hasta el día de hoy. Entre sus principales
obras se encuentran Antigüedades y La guerra judía, la historia de todos los
eventos que tomaron lugar antes, durante y después de la Gran Revuelta Judía,
desde el año 66 EC al 70 EC.
Obviamente Josefo tenía su propia parcialidad en las cosas. Él escribía para los
romanos (probablemente esa es la razón por la cual sus trabajos sobrevivieron
intactos), pero había nacido y se había criado como judío. Por lo tanto, en sus
escritos pareciera como que intentara agradar a todos al mismo tiempo, por lo que
hay que leerlos con mucha cautela y muy críticamente (al final, le echa la culpa de
la revuelta a unos pocos romanos crueles —como Floro— y a los zelotes).
Gamla
Durante todo el verano y otoño del año 67 EC, Vespasiano marchó a través del
norte de Israel suprimiendo la resistencia judía. Algunos se rindieron sin luchar,
como Tiberias. Otros lucharon hasta el final.
Una de las más heroicas historias es la de la ciudad de Gamla, la cual se
encontraba ubicada en las Alturas del Golán.
(Gamla permaneció cubierta por las arenas del tiempo durante 1900 años, hasta
que Israel recuperó las Alturas del Golán en 1967).
Los romanos aniquilaron Gamla por completo, matando a unos 4.000 judíos. Los
5.000 habitantes restantes, en lugar de esperar a ser brutalmente asesinados por
los romanos, saltaron a su muerte desde los acantilados que rodean la ciudad (es
por eso que Gamla es llamada la Masada del norte).
Jerusalem
En el verano del año 70 EC, habiendo liquidado virtualmente a todos los otros
focos de resistencia, los romanos finalmente comenzaron a marchar hacia
Jerusalem. Rodearon la ciudad y la sometieron a un sitio.
Por lo tanto, parecía ser que los romanos estaban en una muy mala situación.
Estaban tratando de sitiar a una de las ciudades más grandes del mundo antiguo,
la cual estaba considerablemente fortificada, tenía una gran cantidad de agua y
comida, y también tenía mucha gente decidida que no le temía a la muerte (1).
Jerusalem podría haber pasado a la historia como la única ciudad que los
romanos no pudieron conquistar a través de un sitio. Pero no lo hizo.
La razón por la que no lo hizo fue sinat jinam, 'odio infundado' entre los judíos.
Guerra civil
Mientras los romanos sitiaban la ciudad por fuera, los judíos luchaban una guerra
civil en el interior.
Cuando los moderados intentaron quitar a los zelotes del Monte del Templo,
Iojanán de Gush Jalav llevó mercenarios no judíos, los idumeos, para asesinar a
los judíos moderados.
Como si eso no fuera suficiente, los zelotes destruyeron los grandes almacenes de
comida para que la gente sólo tuviera la opción de luchar o morir de hambre.
“Los soldados, por la ira y el odio que albergaban hacia los judíos, clavaban
a los que atrapaban, uno tras otro, en las cruces; la multitud era tan grande,
que el suelo estaba ansioso por más cruces, y las cruces estaban ansiosas
por más cuerpos” (Josefo, Guerras 5.11.1).
El líder de los fariseos y jefe del Sanedrín, Rabí Iojanán ben Zakai, vio que
Jerusalem no podría resistir. Era demasiado tarde. Pero los zelotes querían
continuar su lucha suicida, por lo que formuló un plan.
Para ese entonces, los zelotes no permitían que nadie dejase la ciudad (como si
alguien quisiera huir para ser crucificado), a excepción de los entierros. En un
desesperado intento por tratar de salvar algo del inminente desastre, Rabí Iojanán
ben Zakai se puso a sí mismo en un ataúd y fue llevado ante Vespasiano.
Vespasiano le dio a Rabí Iojanán una escolta para los sabios de Torá del
momento, para que dejaran Jerusalem y formaran un Sanedrín en Yavne.
Probablemente no. Para ese entonces, los romanos tenían que demostrar su
poderío. No podía salvar a Jerusalem; pero el rápido pensar de Rabí Iojanán salvó
al judaísmo (2).
Gracias a que los romanos le concedieron su deseo a Rabí Iojanán, los sabios
sobrevivieron, y con ellos sobrevivió también la cadena de transmisión de la Torá y
consecuentemente todo el pueblo judío.
Entretanto, dado que Vespasiano era ahora emperador, debía volver a Roma. Por
lo tanto, puso a cargo del sitio a Tito, su hijo, y le ordenó que terminara el trabajo.
10 de Tevet
En 424 AEC, el rey de Babilonia, Nabucodonosor, comenzó
su sitio a Jerusalem. En realidad hubo poco daño en ese
primer día, pero comenzó una cadena de desastres que
terminó con la destrucción del Templo Sagrado. El 10 de
Tevet todavía es observado por los judíos como un día de
ayuno público, como es mencionado por el profeta Zacarías
(8:19). Un año después del sitio de Nabucodonosor, en esta
fecha en 423 AEC, Jeremías compró un campo y profetizó
que “Casas, campos y viñedos serán comprados nuevamente en esta
tierra” (Jeremías 32:15). Esto le dio esperanza a generaciones de judíos de un
retorno a la Tierra Santa – una profecía que hemos visto cumplida en tiempos
modernos.
8 de Tishrei
En el año 825 AEC, el pueblo judío comenzó una
celebración de 14 días para inaugurar el Templo
Sagrado en Jerusalem. El proyecto del Templo
había sido iniciado por el Rey David, y construido
por su hijo, el Rey Salomón. El Templo de Salomón
fue el centro espiritual de la vida judía por 410
años, hasta su destrucción en manos de los babilonios en 422 AEC.
22 de Tishrei
En 825 AEC, el Rey Salomón se despidió de los
judíos que habían venido a Jerusalem para una
ceremonia de inauguración del Templo Sagrado
que se extendió durante 14 días (Reyes 1, 8:66). El
Rey David había traído el Arca del Testimonio al
Monte Moriá en Jerusalem, pero por haber sido un
guerrero, Dios no le permitió erigir el Templo. Sin
embargo, su hijo Salomón lo hizo. El Templo fue el lugar más importante de Israel
–un imán espiritual para los anhelos de la nación judía. La magnífica estructura
tardó siete años en ser construida, y permaneció en pie 410 años, hasta que fue
destruida por los babilonios bajo el gobierno de Nabucodonosor.
24 de Tishrei
En 336 AEC, los profetas Ezra y Nehemías
convocaron a la comunidad judía en Jerusalem. Allí,
como está registrado en el libro bíblico de Nehemías
(capítulo 9), recordaron los eventos principales de la
historia judía, y se comprometieron a mantener el
antiguo pacto.
26 de Tishrei
En 1973, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó
una resolución de cese del fuego para terminar la
Guerra de Iom Kipur. La estrategia diplomática de Henry
Kissinger obligó a Israel y a Egipto a aceptar el cese del
fuego. Sin embargo, la lucha continuaría por otros cuatro
días. En la guerra, Israel sufrió la pérdida de 2.600
soldados y 800 tanques. Cuatro años después, el líder
egipcio Anwar Sadat visitaría Jerusalem y anunciaría su
buena disposición para un tratado de paz permanente.
28 de Tishrei
En 1930, el gobierno británico emitió el Passfield White
Paper, una declaración formal de política en palestina.
El escrito era un intento para tranquilizar a los árabes
después de los motines de 1929: durante seis días de
motines árabes en Jerusalem, Gaza, Hebrón y Tzfat,
135 judíos fueron asesinados y más de 300 heridos. El
White Paper criticó a la agencia judía por promover oportunidades para el empleo
judío, afirmando que dañaba el desarrollo económico de la población árabe. Más
aún, el escrito exigía que los judíos obtuvieran permiso de las autoridades
británicas para adquirir tierra. El resultado fue que la inmigración judía se redujo
enormemente.
30 de Tishrei
En 1958 fue puesta la piedra angular para el
edificio de la Kneset israelí en Jerusalem. La
Kneset está compuesta por 120 miembros, el
mismo tamaño que tenía la Gran Asamblea
(Kneset HaGuedolá) que sirvió como el cuerpo
rabínico durante la era del Segundo Templo (La
Gran Asamblea redactó los libros bíblicos de Ezequiel, Daniel y Ester, y compuso
muchas plegarias como la Amidá). Hoy en día, la Kneset israelí es conocida como
un bastión de democracia en el Medio Oriente, con mujeres, árabes y otras
minorías representadas.
23 de Jeshván
En 164 AEC, tras la victoria de los Macabeos, fue
purificado y reinaugurado el Templo Sagrado en
Jerusalem. Las piedras del altar del Templo que habían
sido profanadas por los griegos fueron puestas en una
cámara de depósito en el Monte del Templo. En los
tiempos talmúdicos, este día era celebrado como una
festividad.
24 de Jeshván
Yortzait del Barón Edmond de Rothschild (1845-1934).
Miembro de la dinastía banquera Rothschild, prefirió
perseguir intereses artísticos, adquiriendo una importante
colección de pinturas y estampados que legó al museo del
Louvre. En 1882, Rothschild se convirtió en un importante
partidario del movimiento sionista, comprando tierra por todo
Israel y subsidiando los asentamientos judíos. Financió la
primera ciudad judía nueva, Rishon Letzion (“el primero de Sión”), al igual que
Zijrón Yaakov, Cesarea y alrededor de 30 asentamientos más. También estableció
la industria vinícola israelí cuando ayudó a judíos rusos a huir de pogromos en la
década de 1880 y plantó viñedos en Israel. En 1954, sus restos fueron re-
enterrados en Israel. Para honrar su memoria, su hijo pagó la construcción del
edificio de la Kneset en Jerusalem.
29 de Jeshván
Yortzait de Israel Bak (1797-1874), pionero de la imprenta
en la moderna Israel. En el siglo 16 habían sido impresos
seis libros en la ciudad de Tzfat, al norte de Israel.
Pasaron 245 años hasta que otro libro hebreo fuera
publicado en la Tierra Santa, cuando Bak se mudó de
Ucrania a Israel. Estableció una imprenta hebrea en Tzfat
y publicó un Sidur y el libro de Levítico con comentarios.
Un terremoto destruyó su imprenta en 1837, y una revuelta drusa el año siguiente
la destruyó nuevamente. Luego, en 1841, Bak se mudó a Jerusalem y estableció
la primera imprenta hebrea en la ciudad santa.
4 de Kislev
En 346 AEC, una delegación de judíos babilonios
llegó a Jerusalem para preguntarle al profeta Zacarías
si el ayuno de Tishá B’Av debía ser discontinuado
(Zacarías Cap. 7). Tishá B’Av es una conmemoración
de la destrucción del Templo, y en ese momento, el
Segundo Templo acababa de ser construido. La
respuesta, como está registrado en el Talmud, es que si Israel continúa bajo
control extranjero, el ayuno continúa – aún si el Templo está construido. Pero si el
Templo está construido e Israel se gobierna a sí mismo, entonces el día de ayuno
se convierte en un día de celebración. En este caso, dado que el Segundo Templo
fue eventualmente destruido (también en Tishá B’Av, 420 años después), es
conmemorado hasta el día de hoy como un día nacional de duelo para el
judaísmo.
10 de Kislev
En 1977, el presidente egipcio Anwar Sadat se dirigió a la Kneset en
Jerusalem. Sadat fue el primer líder árabe en realizar una visita oficial
a Israel, después de recibir una invitación de Menajem Begin. Sadat
había orquestado el ataque egipcio a Israel en la Guerra de Iom Kipur
en 1973, pero después de sufrir una derrota se resignó a la existencia
del Estado de Israel. Gran parte del mundo árabe estaba iracunda por
la visita de Sadat y su cambio de estrategia. Un año después, Sadat y Begin
firmaron el acuerdo de paz de Camp David, por lo que recibieron el Premio Nobel
de la Paz. Como parte del trato, Israel se retiró de la península del Sinaí en fases,
devolviéndole a Egipto la totalidad del área en 1983.
17 de Kislev
En 1947, la ONU votó a favor de la partición de
Palestina. La zona judía fue dividida en tres parcelas
no contiguas, sin consideraciones de seguridad: la
parte este de Galilea, la costa desde Haifa a Tel Aviv y
el incultivable desierto del Negev. La otra mitad de la
tierra formaría un nuevo estado árabe. Jerusalem, con
100.000 habitantes judíos, estaría completamente
rodeada por el estado árabe y sería administrada como
una zona internacional. A pesar de estos términos
desfavorables, la Agencia Judía aceptó
inmediatamente el Plan de Partición, y los árabes
inmediatamente lo rechazaron. La lucha comenzó poco
después, llevando a un asalto a gran escala en 1948 por tropas del Líbano, Siria,
Egipto, Jordania, Arabia Saudita y Yemen.
21 de Kislev
De acuerdo a Meguilat Taanit, en el 4 siglo AEC,
Alejandro Magno se encontró con Shimón HaTzadik, el
Sumo Sacerdote del Santo Templo. Shimón temió que
Alejandro destruyera Jerusalem, por lo que salió a su
encuentro antes de que llegara a la ciudad. Al ver al
Sumo Sacerdote, Alejandro hizo la extraña maniobra de
desmontar y reverenciarse. Cuando se le pidió que explicara sus acciones,
Alejandro dijo que había visto al Sumo Sacerdote antes, en un sueño. Alejandro
interpretó esta visión como un buen augurio y por eso tuvo piedad de Jerusalem,
absorbiendo pacíficamente a Israel en su creciente imperio. Como muestra de
gratitud, los Sabios decretaron que todo primogénito judío de esa época fuera
llamado Alejandro – que continúa siendo un nombre judío hasta el día de hoy.
25 de Kislev
En 165 AEC, los macabeos derrotaron al ejército griego y
reinauguraron el Santo Templo de Jerusalem. Ellos encontraron un
solo frasco de aceite puro (suficiente para un día) y encendieron la
Menorá, que milagrosamente estuvo encendida por ocho días.
También en este día –1100 años antes— Moisés y el pueblo judío
completaron la construcción del Tabernáculo, el santuario portátil
que los acompañó durante los 40 años de vagar por el desierto. Sin
embargo, el Tabernáculo fue inaugurado tres meses más tarde; la
tradición dice que el 25 de kislev fue, por así decir, “compensado”
siglos después – cuando ocurrió el milagro de Janucá y el Templo fue reinaugurado. Hoy en
día, los judíos de todo el mundo encienden la menorá de Janucá para conmemorar el
milagro del aceite, y para conmemorar su mensaje que continúa iluminando nuestras vidas
hasta el día de hoy.
F a c e b o o k 10GmailTwitter
1 de Iyar
En 372 AEC se pusieron en Jerusalem los cimientos
del Segundo Templo, como está registrado en el Libro
de Ezra (3:8). El nieto de un rey judío, Zerubavel,
lideró al primer grupo de judíos que regresaron desde
el exilio en Babilonia. Ayudó a quitar los escombros
calcinados que llenaban el sitio del Segundo Templo,
y los cimientos fueron puestos en medio de expectación pública y júbilo. Este
Segundo Templo se convertiría en el centro de culto judío por 420 años, antes de
ser destruido por los romanos en el año 70 EC. Hoy en día, el Muro de los
Lamentos es un remanente del complejo del Templo, el punto central de las
plegarias judías por milenios.
2 de Tevet
En esta fecha en 1947, la Legión Árabe rodeó
Jerusalem y aisló a sus 100.000 habitantes judíos del
resto de la población israelí. Para marzo del 1948 la
ciudad ya estaba completamente bajo sitio, y en
mayo, Jordania invadió y ocupó el este de Jerusalem,
dividiendo la ciudad por primera vez en la historia, y
llevando a miles de judíos al exilio. Los árabes procedieron a destruir las 58
sinagogas del Cuarto Judío, y utilizaron lápidas judías del Monte de los Olivos
para construir caminos y letrinas. El Muro Occidental, que estaba fuera de los
límites para los judíos (a pesar del acuerdo de cese del fuego concediendo libertad
de acceso a todos los lugares sagrados), fue restituido nuevamente con la victoria
israelí en la guerra de 1967
3 de Tevet
Yortzait del rabino Jaim Shmulevitz (1902-1979), decano de la famosa Ieshivá de
Mir por más de 40 años, quien fue conocido por su inagotable amor a Dios y a la
humanidad. Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, el rabino Shmulevitz y
sus estudiantes obtuvieron milagrosamente visas de tránsito, emitidas con gran
riesgo por el Sr. y la Sra. Sugihara del Consulado de Japón. Viajaron desde la
Lituania devastada por la guerra, en el tren transiberiano, a un refugio seguro en
Shangai, China. Después de la guerra, el rabino Shmulevitz restableció la Ieshivá
de Mir en Jerusalem, que desde entonces ha crecido hasta tener un cuerpo
estudiantil de 5.000 alumnos. Sus discursos éticos son considerados un clásico.
5 de Tevet
En 422 AEC, el profeta Ezequiel escuchó la noticia de que
Jerusalem había sido conquistada por un poder extranjero,
como está registrado en el libro bíblico de Ezequiel (33:21). En
la ley judía, un período de duelo (por ejemplo al escuchar la
muerte de un ser querido) puede comenzar al “escuchar” las
malas noticias. Algunos comentaristas talmúdicos
recomendaron por esta razón que el 5 de Tevet fuera instituido como un día de
ayuno público.
10 de Tevet
En 424 AEC, el rey de Babilonia, Nabucodonosor, comenzó
su sitio a Jerusalem. En realidad hubo poco daño en ese
primer día, pero comenzó una cadena de desastres que
terminó con la destrucción del Templo Sagrado. El 10 de
Tevet todavía es observado por los judíos como un día de
ayuno público, como es mencionado por el profeta Zacarías
(8:19). Un año después del sitio de Nabucodonosor, en esta
fecha en 423 AEC, Jeremías compró un campo y profetizó
que “Casas, campos y viñedos serán comprados nuevamente en esta
tierra” (Jeremías 32:15). Esto le dio esperanza a generaciones de judíos de un
retorno a la Tierra Santa – una profecía que hemos visto cumplida en tiempos
modernos.
2 de Shvat
Esta fecha marca la muerte del Rey Alexander Yanai
(Jano), rey hasmoneo de Judea desde 103 AEC hasta
76 AEC. Mientras estaba sirviendo como Sumo
Sacerdote en el Templo en Jerusalem, Yanai se burló
del servicio de Sucot, en cuyo punto la multitud mostró
su descontento apedreándolo con etroguim. Yanai
respondió haciendo que sus soldados mataran a 6.000 personas en el patio del
Templo. Yanai se alineó con la facción helenista conocida como los Saduceos, y
se opuso a la corriente principal de los rabinos, los fariseos. En varias ocasiones
Yanai ordenó matar fariseos y festejó mientras presenciaba las ejecuciones. De
acuerdo a las fuentes tradicionales, Yanai se arrepintió más adelante y cooperó
con los fariseos.
10 de Shvat
Yortzait del rabino Shalom Sharabi (1720-1777), conocido por el
acrónimo de su nombre: Rashash. Sharabi nació en Yemen y se
convirtió en el Gran Rabino de Egipto, antes de asentarse
finalmente en Israel. Era un maestro en cábala, y su libro de
plegarias, Nehar Shalom, incluye meditaciones místicas en
diversas plegarias y mitzvot. Está enterrado en el Monte de los
Olivos, en Jerusalem.
11 de Shvat
En este día en 1601 fueron quemados libros hebreos que
habían sido confiscados en Roma por las autoridades de
la Iglesia. Este fue un tema desafortunado durante toda la
edad media: en 1592, el Papa Clemente VIII había
declarado que el Talmud y otros textos hebreos eran
“obscenos”, “blasfemos” y “abominables” — y ordenó que fueran confiscados y
quemados. Siglos antes, el Papa Gregorio IX persuadió al rey francés Luis IX a
quemar unas 10.000 copias del Talmud (24 vagones llenos) en París. En 1553, el
cardenal Peter Caraffa (el futuro Papa Pablo IV) ordenó que copias del Talmud
fueran quemadas en Estados Papales y por toda Italia. Y a pesar de todos los
intentos de extinguir nuestra fe, la luz de la Torá brilla hoy en día con mucha
intensidad.
Yortzait del rabino Noaj Weinberg, fundador y decano de Aish HaTorá. El rabino
Weinberg es ampliamente considerado como “el padre del movimiento baal
teshuvá” que ha transformado profundamente al pueblo judío y al mundo.
Comenzó Aish HaTorá en 1974 con cinco estudiantes, en un pequeño
departamento de la ciudad vieja de Jerusalem. Bajo su tutela, Aish HaTorá creció
hasta tener sedes en los cinco continentes con programas educativos innovadores
como el Seminario Discovery, el programa de liderazgo Jerusalem Fellowships,
Hasbara Fellowships para el activismo israelí, HonestReporting.com, y por
supuesto, aishlatino.com. Su calidez, ingenio, extraordinaria sabiduría, sentido de
responsabilidad, mensaje positivo y amor por toda la gente ayudó a decenas de
miles a obtener más significado en la vida y a experimentar una relación con Dios.
Buena parte de su sabiduría está encapsulada en sus “48 Caminos a la
Sabiduría”.
28 de Shvat
En 163 AEC el Rey Antíoco V levantó el sitio de Jerusalem. El
día fue observado en los años subsiguientes como una
festividad. Antíoco V sólo tenía nueve años cuando se convirtió
en el líder de la dinastía seléucida, después de la muerte de su
padre Antíoco IV Epífanes, el opresor de los judíos que
provocó la revuelta de los macabeos.
29 de Shvat
Yortzait del rabino Noson Tzvi Finkel (1849-1927), mejor
conocido como el Alter de Slobodka (una ciudad en Lituania).
Era experto en sacar a la luz el potencial de cada individuo,
alentando a sus estudiantes a refinar su carácter y a ser
grandiosos tanto en erudición como en ética. Muchos de sus
discípulos, quienes estudiaron en su famosa Ieshivá de
Slobodka, se convirtieron en importantes líderes del judaísmo
del siglo 20 –los rabinos Itzjak Hutner, Yaakov Kamenetzky, Aaron Kotler, Yaakov
Itzjak Ruderman, Yejezquel Sarna y Eleazar M. Shaj. Su propio hijo, Eliezer
Yehuda Finkel, se convirtió eventualmente en el decano de la famosa Ieshivá de
Mir, hoy en día ubicada en Jerusalem, que es la Ieshivá más grande del mundo
con más de 5.000 estudiantes.
3 de Adar
En 350 AEC fue completada la construcción del Segundo
Templo Sagrado en Jerusalem, como está registrado en el
libro bíblico de Ezra (6:15). La reconstrucción del Templo
había comenzado bajo el gobierno de Cyrus cuando los
persas se apoderaron del imperio Babilonio. Luego la
reconstrucción fue interrumpida por 18 años, y continuada
con la bendición de Darío II, el rey persa que se dice que era
el hijo de Ester. El Segundo Templo no tenía gran parte de la gloria del primero: no
estaba el Arca del Testimonio, y los milagros diarios y los profetas ya no eran
parte del escenario. El Segundo Templo estuvo en pie por 420 años, antes de ser
destruido por los romanos en 70 EC.
12 de Adar
El 12 de adar marca la inauguración de las renovaciones
que Herodes hizo al Segundo Templo Sagrado en
Jerusalem en el año 11 AEC. Herodes fue el rey de
Judea en el primer siglo AEC, y construyó grandes
proyectos como la fortaleza de Masada y el Herodión, la
ciudad de Cesárea y fortificaciones alrededor de la
ciudad vieja de Jerusalem. El más ambicioso de los
proyectos de Herodes fue la reconstrucción del Templo, que estuvo en mal estado
por más de 300 años. Las renovaciones de Herodes incluyeron una inmensa
plataforma, que sigue siendo hasta el día de hoy la plataforma hecha por el
hombre más grande del mundo; hicieron falta 10.000 hombres y 10 años sólo para
construir los muros de contención alrededor del Monte del Templo; el Muro
Occidental que conocemos hoy en día es parte de ese muro de contención. El
Templo mismo era un sitio magnífico, cubierto de oro y mármol. Como lo dice el
Talmud: “Quien no ha visto el edificio de Herodes, nunca en su vida ha visto un
edificio verdaderamente grandioso”.
28 de Iyar
En 1967, paracaidistas israelíes completaron la captura de
la Ciudad Vieja de Jerusalem, restituyendo el control judío
en el Monte del Templo, el sito de las plegarias judías por
siglos. Se abrió una plaza en frente del Muro, y una semana
después, decenas de miles de judíos se abarrotaron en el
sitio en la festividad de Shavuot. El 28 de Iyar es celebrado
hoy en día como Iom Ierushalaim, conmemorando la reunificación de la Ciudad
Santa, que se ha mantenido como la capital de la nación judía por 3.000 años.
2 de Tamuz
En 1927, la ciudad de Nablus (Shjem bíblica) fue
convulsionada por un terremoto de 6,2 grados en la
escala de Richter. Cerca de 300 personas murieron,
1.000 resultaron heridas, y muchos de los edificios
históricos de la ciudad fueron destruidos. El flujo del río
Jordán se detuvo por 21 horas debido a derrumbes, y el sismo causó daños en
Jerusalem, Jericó y Amán. En Israel, existe una zona de intensa actividad sísmica
a lo largo de la falla del Mar Muerto, fracturando el límite entre las placas Arábiga y
Sinaí. La tensión geológica es evidente por el estrato plegado expuesto en las
colinas alrededor de Jericó. Esta zona incluye numerosos volcanes y termas.
9 de Tamuz
En 423 AEC, las tropas de Nabucodonosor hicieron una brecha
en las paredes de la vieja Jerusalem y entraron a la ciudad.
Cuatro semanas después, el Templo Sagrado fue destruido, y
los judíos exiliados a Babilonia. Originalmente, el 9 de tamuz era
observado como un día de ayuno y duelo. Sin embargo, setenta
años después, cuando el Segundo Templo fue construido, el
ayuno fue abolido y el día se convirtió en una festividad. Unos 500 años después,
cuando Jerusalem cayó el 17 de Tamuz –previo a la destrucción del Segundo
Templo— los sabios decretaron el 17 de tamuz como un día de ayuno para
conmemorar ambas tragedias.
9 de Av
En 423 AEC, el Primer Templo Sagrado fue destruido por
el fuego, cuando las tropas babilonias de Nabucodonosor
conquistaron Jerusalem. También en este día, fue
destruido el Segundo Templo a manos de los romanos en
70 EC. Tishá B’Av ha sido un día de calamidad para el pueblo judío por mucho
tiempo: en este día, durante el tiempo de Moisés, los judíos en el desierto
aceptaron el reporte calumnioso de los espías, resultando en el decreto de
posponer la entrada a la tierra de Israel. Otras graves desgracias durante la
historia judía ocurrieron el nueve de Av: La inquisición española terminó con la
expulsión de los judíos de España en la víspera de Tishá B’Av en 1492. La
Primera Guerra Mundial estalló en la víspera de Tishá B’Av en 1914, cuando
Alemania le declaró la guerra a Rusia; el resentimiento alemán por la guerra
preparó el terreno para el Holocausto. En la víspera de Tishá B’Av de 1942
comenzó la deportación en masa de los judíos del Gueto de Varsovia, en ruta a
Treblinka. Hoy en día, Tishá B’Av es el día judío nacional de duelo, no comemos,
bebemos ni nos bañamos. Las luces en la sinagoga son ensombrecidas, y leemos
el Libro de las Lamentaciones, el lamento poético de Jeremías por la destrucción
de Jerusalem.
12 de Av
En 1263 comenzó la famosa disputa entre Najmánides y un
judío convertido al cristianismo, Pablo Cristiani. El Rey Jaime
de España había autorizado el debate religioso, para tratar de
“probar” que religión es verdadera. Najmánides aceptó
participar de mala gana, sólo después de haberle sido
asegurada la libertad de expresión. Najmánides ganó la batalla, pero perdió la
guerra: Sus argumentos le ganaron el respeto del Rey (y un premio de 300
monedas de oro), pero la iglesia ordenó que Najmánides fuera enjuiciado con
cargos de blasfemia, y se vio forzado a huir de España. A la edad de 72
Najmánides se mudó para pasar sus últimos años en Jerusalem.
18 de Av
En 1929, pandillas árabes atacaron comunidades judías por todo
Israel. Rumores falsos, alimentados por sermones difamatorios
en las mezquitas, declararon que los judíos estaban
preparándose para asumir el control de los lugares sagrados, y
que los judíos estaban llevando a cabo “asesinatos al por mayor
de árabes”. Pandillas musulmanas se lanzaron al ataque,
matando a 17 judíos en Jerusalem y a 18 en Tzfat. Las peores
atrocidades ocurrieron en Hebrón, en donde un solo policía británico custodiaba
toda la ciudad y no pudo hacer nada para detener el desenfreno. En Hebrón,
fueron asesinados 67 judíos. Los sobrevivientes fueron reubicados en Jerusalem,
dejando a Hebrón sin judíos por primera vez en siglos.
25 de Av
En 1315, el Rey Luis X de Francia invitó a volver a los
judíos que habían sido expulsados unas décadas antes por
el Rey Luis IX. Esto marcó una pauta en la vida judía en
Francia: las expulsiones y las subsecuentes invitaciones a
retornar. La monarquía francesa estaba tratando de
establecer su tierra como la “nueva Jerusalem”, y para cumplir con esta misión
intentó varias cruzadas en Israel. En 1615, el Rey Luis XIII ordenó que los
cristianos tuvieran prohibido hablar con los judíos, bajo pena de muerte.
Eventualmente, en 1683, el Rey Luis XIV expulsó a los judíos de la colonia de
Martinica.
El fin de israel
El reino del sur de Israel —llamado Yehudá— duró casi 134 años más que el reino
del norte. Esto se debió en gran medida a que no era tan inestable ni estaba tan
corrompido por la idolatría.
En el norte había un rey cada un promedio de doce años, mientras que en el sur el
reinado promedio duraba alrededor del doble.
A diferencia de los reyes del reino del norte, algunos de los reyes del reino del sur
eran muy rectos. Y si hubo un rey que se destacó del resto fue Jizkiahu (que, a
propósito, se casó con la hija del profeta Yeshayahu). Fue el decimocuarto rey
después del Rey David, y reinó desde el año 590 hasta el 561 AEC. El Tanaj dice
sobre él:
Él hizo lo recto ante los ojos de Hashem, como todo lo que había hecho
David su padre… Él confió en Hashem, Dios de Israel. Después de él no
hubo otro como él entre todos los reyes de Yehudá, ni tampoco entre los que
estuvieron antes que él.(Reyes 2 18:3-5).
Fue durante el gobierno de Jizkiahu que el reino del norte fue destruido por los
asirios y que las diez tribus fueron exiliadas, por lo que Jizkiahu fortificó Jerusalem
anticipando la invasión asiria a Israel. Y parte de su trabajo puede ser visto hoy en
día.
Fortificación de Jerusalem
Otra cosa que hizo Jizkiahu fue ampliar el sistema de aprovisionamiento de agua
de la ciudad (que, como vimos en la parte 18, depende del manantial Guijón, el
cual se encuentra fuera de las paredes de la ciudad). Para hacerlo, Jizkiahu
organizó dos equipos de excavadores para que realizasen un túnel desde Guijón
hasta una reserva dentro de la ciudad. Un equipo comenzó de un lado, el otro del
otro, y se encontraron en algún punto intermedio. Considerando la limitada
tecnología de la época, el túnel que cavaron es un asombroso trabajo de 533
metros de largo.
La ciudad logró ser fortificada justo a tiempo antes de que los asirios, liderados por
Sanjerib, pusiesen a la ciudad en estado de sitio. Esto ocurrió en el año 547 AEC.
Mencionamos antes (en la parte 21) que muchos de los tesoros del Medio Oriente
están actualmente en el Museo Británico de Londres. Uno de esos ítems es un
prisma de arcilla de seis lados que describe la campaña militar de Sanjerib. Una
inscripción en la tableta lee: "Jizkiahu, rey de Yehudá, yo encierro a Jerusalem
como un pájaro en una jaula". Es notorio que la descripción de la caída de
Jerusalem está ausente, lo cual se debe a que ésta efectivamente no cayó.
El poderoso ejército asirio asedió la ciudad y las cosas se veían bastante mal,
pero el profeta Yeshayahu le aseguró al pueblo que la ciudad no caería. Fiel a la
predicción de Yeshayahu, una plaga golpeó el campo asirio y su ejército fue
diezmado de un día a otro.
Mala semilla
Hizo lo malo ante los ojos de Hashem… erigió altares al Báal… Hizo pasar a
su hijo por fuego, practicó la astrología y leyó presagios, practicó la
nigromancia y conjuró espíritus. Aumentó en hacer el mal ante los ojos de
Hashem, para provocar su enojo" (Reyes 2, 21:2-6).
Menashé era tan malo que incluso hizo que el profeta Yeshayahu —su propio
abuelo— fuese asesinado. La culpa de la caída final de Jerusalem se le adjudica,
en gran parte, al malvado comportamiento de Menashé.
El rey siguiente, Amón, era tan malo como Menashé. Pero luego vino Ioshiyahu,
quien realmente amaba a Dios y quien llevó a cabo una ola de impresionantes
reformas religiosas. Desafortunadamente cuando murió esas reformas murieron
con él y el declive espiritual continuó.
(Hay una tradición que dice que Ioshiahu anticipó esto y sabía que el reino del sur
pronto sería invadido y caería al igual que el del norte, por lo que decidió esconder
el Arca del Pacto para que no cayese en manos enemigas. En entregas futuras
discutiremos dónde puede estar hoy). (1)
Mientras tanto, el imperio asirio —que había sido una gran amenaza para Israel—
fue invadido por una nueva potencia mundial, llamada Babilonia. Y fueron los
babilonios quienes invadieron a continuación Israel.
Los babilonios
Los babilonios designaron su propio rey fantoche de entre los judíos: Sedequías.
Esto resultó ser un gran error porque, si bien Sedequías era un gobernante débil,
también era sumamente ambicioso y eventualmente decidió rebelarse en contra
de sus señores feudales babilonios. Apenas lo hizo, Nabucodonosor, el emperador
Babilonio, ordeno que Jerusalem fuese sitiada.
Pero como siempre, Dios les dio a los judíos mucho tiempo para enmendar sus
caminos mientras los babilonios realizaban el sitio de Jerusalem. El profeta
Jeremías le pidió a todos que se arrepintiesen, pero su mensaje —que repitió
incansablemente durante 40 años— fue desatendido. En vez de eso, ¡fue
golpeado y arrojado a la prisión!
Años antes, Jeremías había escrito el Libro de las Lamentaciones, el cual predijo
con gran detalle la destrucción del Templo de Jerusalem, pero el rey en ese
momento (Iehoiakim) había impedido que el rollo fuera leído en público. (2)
Hoy leemos el Libro de las Lamentaciones todos los años en el 9 de av, el horrible
día en que estas predicciones se hicieron realidad.
El sitio a Jerusalem
El sitio duró dos años. Hay clara evidencia arqueológica de este evento, la cual
puedes ver por ti mismo en la Ciudad Vieja de Jerusalem.
Cerca del “Muro Ancho” de Jizkiahu puedes visitar el Museo Torre Israelí. Está a
unos 20 metros bajo tierra, y allí puedes ver los restos de una puerta de tres
metros en el muro defensivo norte de la ciudad (los arqueólogos la llaman la
"Puerta E"). En este lugar, los arqueólogos que excavaron a principios de la
década del 70 encontraron evidencia clara del sitio babilonio.
Entre las cosas que encontraron estaban las puntas de flecha de los israelitas y de
los babilonios. ¿Cómo supieron? Porque las puntas de flecha tenían nombres
grabados, ya que en los tiempos antiguos eran muy valiosas. También
encontraron una capa de tierra carbonizada, atestiguando la quema de la ciudad,
tal cual es relatado en el Libro de Reyes (ver Reyes 2, 25:9). Otra evidencia
fascinante fue encontrada en el área "G" de la Ciudad de David, incluyendo un
sello inscrito con el nombre de Guemaria hijo de Shafán, un escriba mencionado
en el libro de Jeremías (ver Jeremías 36:10).
Después de dos años de sitio, los judíos no pudieron resistir más. Habían sido
obligados a pasar hambre hasta la sumisión.
La lengua del infante, por la sed, se pega a su paladar; los niños piden pan y
nadie se los da. Los que solían comer manjares delicados vagan desolados
por las calles. Los que fueron criados en ropas color carmesí se revuelcan
en basura… Su apariencia se ha vuelto más negra que el hollín, no son
reconocidos en las calles, su piel se ha marchitado sobre sus huesos, se
tornó tan seca como la madera… Las manos de las mujeres compasivas han
hervido a sus propios hijos; se convirtieron en su comida cuando la hija de mi
pueblo fue destruida… (Lamentaciones 4:4-5, 8-10).
Sedequías encontró un final horrible, al igual que el resto de los israelitas, como
relata el Tanaj:
Con la destrucción del Templo —el 9 de Av del año 422 AEC— la conexión
especial que el pueblo judío tenía con Dios fue cercenada. Al igual que con la
caída de Israel en el norte, la causa superficial de la destrucción de Jerusalem fue
una revuelta, esta vez contra Babilonia, pero la Torá deja en claro que la causa
real fue el comportamiento inmoral de los judíos. (3)
Pese a que antes los babilonios habían estado satisfechos convirtiendo a Israel en
una colonia, esta vez su castigo fue mucho peor. Decidieron aplicar la política
asiria del exilio y expulsar a todos los judíos de la Tierra Prometida
nvasiones y conquistas
– Periodo egipcio: El ataque, asedio y control de las fuerzas del Faraón
comenzaron en el siglo XVI a.C. y terminaron en el siglo XIV.
– Periodo judío: En el año 977 o el 1004 a.C. el rey David (la paz y las
bendiciones de Dios sean con él) tomó el control de la ciudad, edificó en
ella su palacio, construyó murallas para protegerla, le cambió en nombre
a Ciudad de David (Ir David)y la declaró capital del reino unificado de
Israel. De los 5.000 años de antigüedad que tiene Jerusalén, el periodo
judío es de tan solo 73 años: cuarenta durante el reinado de David, y los
treinta y tres restantes bajo el mando de su hijo Salomón.
Hacia el año 922 a.C. el reino se dividió en dos, Jerusalén pasó a ser la
capital de Judá y Samaria fue la capital de Israel.
– Periodo persa: Este periodo se extendió desde el año 537 al año 333
a.C.
– Regreso de los persas: En el año 614 d.C. los sasánidas junto con los
judíos asediaron la ciudad casi un mes, entraron a la ciudad y masacraron
a decenas de miles de cristianos que residían en Jerusalén. Dominaron la
ciudad hasta que en el año 629 las tropas del emperador Heraclio la
recuperaron.