Professional Documents
Culture Documents
La motivación es lo que nos permite seguir adelante en la vida y nos da la energía necesaria para
alcanzar nuestras metas y no declinar ante las dificultades u obstáculos que se nos presentan en el
camino.
Anuncios
Ya sea que te falte motivación en la vida o requieras de mayor motivación para alcanzar tus metas o
superar algún problema, las siguientes son 12 formas de aumotivarse que podrías tomar en cuenta:
Sigue tu pasión
La primera forma de encontrar motivación en la vida es siguiendo nuestra pasión, es decir, dedicándonos
a hacer aquello que nos apasiona en la vida.
Es posible motivarnos a hacer algo con factores externos tales como el dinero o el prestigio, pero si
aquello que hacemos no está relacionado con nuestra pasión o por lo menos nos gusta hacer, difícilmente
podremos mantener la motivación en el largo plazo.
Para encontrar tu pasión, podrías hacerte preguntas tales como a qué te dedicarías si ya no tuvieras que
preocuparte más por el dinero, cuáles son las actividades que cuando las realizas te olvidas del paso del
tiempo, o en qué actividades tienes talento y destacas ante los demás.
Para encontrarle el gusto a lo que haces, podrías pensar en lo bien que te sientes al hacerlo, en lo mucho
que aprendes, o en cómo ello te permite ayudar a los demás; por ejemplo, para encontrarle el gusto al
negocio en el que estás, podrías pensar en lo realizado que este te hace sentir, en todo lo que aprendes, y
en cómo este te permite servir a otras personas.
Anuncios
Ponte metas
Ponernos metas es otra gran forma de automotivarnos ya que estas nos dan una razón para seguir
adelante, nos ayudan a enfocarnos y nos representan un desafío.
Sin embargo, para que el ponerse metas sea efectivo es necesario que estas cumplan con algunos
requisitos tales como ser metas retadoras pero estar dentro de nuestras posibilidades, y ser metas
impuestas por nosotros mismos o, en todo caso, metas con las que estemos de acuerdo.
Ponte tanto metas grandes y generales que te ayuden a establecer un rumbo en la vida (por ejemplo, ser
económicamente independiente), como metas pequeñas y especificas que te ayuden a ganar confianza y
medir tus progresos (por ejemplo, aumentar tus ingresos en un 10% para el próximo mes).
Por ejemplo, para motivarte en la consecución de tu meta de tener mucho dinero, podrías pensar en
razones para alcanzarla tales como darle una buena educación a tus hijos, poder ayudar a otras personas
o sentirte realizado; o para motivarte en tu intento de bajar de peso, podrías pensar en razones para
lograrlo tales como sentirte saludable, mejorar tu autoestima o encontrar una pareja.
Por ejemplo, si tu meta es ser libre financieramente, podrías motivarte siendo consciente de cada
pequeña meta cumplida o logro obtenido que te acerque a ella (por ejemplo, haber aumentado tus
ingresos o haber ahorrado una determinada cantidad de dinero) y, de ser posible, celebrarlo (por
ejemplo, con una cena con tu pareja en un buen restaurante).
Ponte incentivos
Además de reconocer las pequeñas metas cumplidas o logros obtenidos en la consecución de nuestras
grandes metas, podemos también optar por ponernos incentivos.
Por ejemplo, podrías acordar con tu pareja que cuando alcances tu meta de aumentar tus ingresos lo
celebrarán con una cena en un buen restaurante; o podrías acordar contigo mismo que cada vez que
vayas al gimnasio te recompensarás con un dulce bajo en calorías que venden en la cafetería.
Estas personas podrían estar conformadas por personas que conozcas, a las cuales podrías preguntarles,
por ejemplo, por las dificultades tuvieron que superar para alcanzar el éxito o sus metas, o por personas
que no conozcas personalmente y de las cuales podrías, por ejemplo, leer sus historias o biografías.
Por ejemplo, llegar a acumular deudas puede significar para muchas personas una situación agobiante y
estresante; sin embargo, ante el problema de las deudas tú podrías optar por tomar este como un desafío
y un motivo para trabajar más o para hallar nuevas fuentes de ingresos.
Por ejemplo, para motivarte a ganar más dinero, podrías optar por pagarte a ti mismo primero antes que
a tus acreedores, o irte a vivir a un lugar lejos de aquél en donde vives, de tal modo que te obligues a
trabajar más o encontrar alguna forma de aumentar tus ingresos.
Para ayudar a otras personas, podrías hacer obras de bien social, ofrecerte de voluntario en alguna
organización que se dedique a ello, o vender un producto que mejore la calidad de vida de las personas o
que haga del mundo un mejor lugar para vivir.
Sin embargo, también puedes sentir que ayudas a los demás cuando simplemente ayudas a tus familiares
o amigos a superar sus problemas, escuchas y apoyas moralmente a tus trabajadores o subordinados, o
sirves de la mejor manera posible a tus clientes.