Professional Documents
Culture Documents
ocurrir al lector por la lectura o práctica del material contenido en esta obra. Se
recomienda que antes de seguir cualquier actividad física se consulte en un
experto en la materia y/o médico.
Lohan Chi Kung. Tesoro para la salud
© Jose Rafael Beneyto Galbis
ISBN: 978-84-16393-33-6
Maquetación y diseño editorial: Georgia Delena
www.maquetacionlibros.com
Todos los derechos reservados. Se prohíbe toda la reproducción total o parcial
de esta obra sin el permiso expreso de su autor.
Para Núria e Irene, mis auténticos tesoros.
Mi más sincero agradecimiento a todas aquellas personas, tanto occidentales
como orientales, que me han transmitido sus conocimientos. En especial a los
maestros Chen Yong Fa, por abrir los conocimientos de su familia al mundo, a
Jose Fernández, por enseñarme la mayoría de las cosas que sé del sistema
Lohan, y también a Javier Sánchez, mi primer maestro, por permitirme
adentrarme en este fascinante mundo.
Índice
Portada
Título
Créditos
Dedicatoria
Agradecimientos
1. Introducción
2. Qué es Chi Kung. Porqué practicarlo
3. Qué es Lohan Chi kung. Porqué practicarlo
4. Cómo conseguirlo. Métodos de trabajo
5. Teoría del Yin-Yang
6. Puntos importantes
7. LOHAN CHI KUNG. La Ciencia del Buda
8. Tipos de respiración en Lohan Chi kung
9. Conclusión
Sobre el Autor
1. Introducción
Es muy probable que conozcas los beneficios que puede aportarte la práctica
regular de ejercicio físico moderado.
Seguramente también conoces buenas razones para realizar ejercicios de
respiración.
Y lo más probable es que también seas consciente de las ventajas de practicar
ejercicios de concentración y meditación.
Pues si conoces todo esto, imagina por un momento una actividad que te
ofrezca los beneficios de los tres; ejercicio físico adecuado, ejercicios de
diferentes tipos de respiración, y práctica de ejercicios de
concentración/meditación…
Pues esto es lo que te ofrece el chi kung, ¡y más concretamente el Lohan chi
kung!
Solemos acordarnos de nuestra salud cuando tenemos algún problema con
ella. Entonces buscamos soluciones bien sea en la medicina convencional o en la
complementaria.
Pero cada vez más se insiste en los hábitos saludables de vida como método
preventivo para cuidar nuestra salud. Una correcta alimentación, ejercicio físico
moderado, respirar correctamente, descanso adecuado, etc.
Y es aquí donde la práctica del Chi kung nos puede ayudar. En realidad, como
podrás ver más adelante, ese es uno de los grandes objetivos del chi kung;
preservar nuestra salud.
Y en esto, puedo asegurarlo, el Lohan Chi kung es un auténtico tesoro.
Pero para poder llevar a cabo con éxito cualquier actividad es necesario saber
con exactitud qué queremos obtener con ella, conocer cual es el objetivo con la
que la realizamos.
Una vez lo tengamos claro, podremos analizar como lo podemos conseguir.
Con el chi kung pasa exactamente lo mismo. Desde el primer momento
deberíamos entender para qué se practica. Conocer de forma clara el objetivo
que perseguimos con su entrenamiento.
Y ese es precisamente el propósito de este libro. Explicar de una forma clara y
sencilla cual es el objetivo principal del Lohan Chi kung y como vamos a
alcanzarlo.
Existen multitud de libros sobre chi kung, y entre ellos algunos dedicados al
sistema Lohan. Los hay que son realmente buenos y por lo general más
“complejos” que el que tienes ahora entre tus manos.
Pero precisamente uno de mis objetivos al escribir este libro es que resulte
sencillo. Considero que lo más importante en el aprendizaje de Lohan Chi kung
es la práctica. Puede parecerte algo obvio, pero puedo asegurarte que algo tan
lógico suele fallar en muchos practicante o incluso en maestros de este arte.
Tener muchos conocimientos teóricos no sirve de nada si no se entienden
perfectamente, y sobre todo, si no se saben aplicar a la práctica, que al fin y al
cabo es lo que nos aportará los numerosos beneficios que se pueden obtener
con el trabajo de chi kung.
No es necesario ser especialista en medicina china para poder practicar los
ejercicios. Basta con tener muy claros determinados conceptos y teorías. Espero
que poder ayudarte a conseguirlo…
2. Qué es Chi Kung. Porqué practicarlo
Existen muchísimos sistemas de chi kung. Es fácil entender que en un país tan
extenso como China se hayan desarrollado a lo largo de su historia multitud de
prácticas con el fin de preservar la salud.
Ya desde tiempos remotos la civilización china intentó evitar la enfermedad
mediante diversos métodos. Algunos de ellos trataban de curar las diferentes
dolencias cuando éstas ya habían aparecido, cuando ya mostraba los síntomas.
Pero pronto se dieron cuenta de la importancia de prevenir la enfermedad.
Centrados en buscar un método preventivo de salud, diferentes maestros
observaron que, aparte de otros aspectos como la alimentación, el descanso o las
condiciones climáticas, la actividad física de una persona tenía un efecto directo
sobre ésta.
Observaron que no solo un exceso de trabajo físico podía ser perjudicial
(como solía ocurrirles a la clase baja de la sociedad obligada a trabajar de sol a
sol), si no que la ausencia de cualquier ejercicio físico resultaba nefasto para la
salud (como solía pasarles a los miembros de las clases altas de la sociedad).
A partir de entonces fueron desarrollando diversos tipos de ejercicios con el
objetivo de promover la salud a través de una correcta actividad física.
Dichos ejercicios fueron evolucionando de forma diferente dependiendo de
los practicantes a los que iban dirigidos y las necesidades concretas de éstos.
No podían ser iguales los que practicaban la nobleza con un nivel de actividad
física baja, que los que practicaban un grupo de monjes cuya finalidad era paliar
los efectos de largas horas de meditación en posturas estáticas. Tampoco podían
ser los mismos que los destinados a las clases populares con el fin de
recuperarles de un excesivo trabajo físico.
Pero todos ellos seguían manteniendo la idea original de promover un estado
óptimo de salud a través de diferentes prácticas que favorecían la correcta
circulación de la sangre y la energía por todo el cuerpo, ayudando de esta
manera tanto a la correcta nutrición de todos las células y tejidos del organismo,
como a la eliminación de toxinas y productos de desecho producidos por éstas.
A todo este conjunto de diferentes prácticas o ejercicios se le conocía de forma
genérica con el nombre de Nei gong (Hei kung en cantonés), que significaba
“trabajo interno”. Pero otro nombre que se solía utilizar y con el que se le
empezó a conocer en occidente es el de CHI KUNG (氣 功).
Aunque en ocasiones resulta difícil encontrar una traducción exacta de los
caracteres chinos, ya que en ocasiones un solo ideograma representa una idea o
un concepto bastante amplio, podemos traducir CHI KUNG como “trabajo de la
energía “.
La palabra Kung 功 hace referencia a la práctica o trabajo de esa serie de
ejercicios desarrollados a lo largo de los siglos con la finalidad de preservar la
salud.
La palabra CHI 氣 hace referencia a la energía vital que posee todo organismo
y que dirige su funcionamiento. El chi circula junto con la sangre impulsándola
por todo el cuerpo para mantenerlo saludable. Es un concepto muy utilizado por
la cultura china para designar la actividad del ser humano. Luego veremos con
más detalle a qué nos referimos cuando hablamos de CHI.
Por lo tanto, ya tenemos una primera definición de chi kung que nos ayuda a
entender su significado y la finalidad con la que lo vamos a practicar:
- CHI KUNG: Consiste en una serie de ejercicios destinados a
favorecer la correcta circulación de la sangre y la energía por todo el
cuerpo con el objetivo de mantenerlo saludable
1.-Trabajo de JING
Para conseguir mejorar nuestro cuerpo físico es imprescindible moverse. El
movimiento siempre está presente en los ejercicios de lohan chikung. No sólo es
una de las formas más efectivas que tenemos para movilizar el chi, si no que
resulta indispensable para desarrollar nuestro Jing. Puede ser más intenso, más
suave, incluso sutil, dependiendo de la finalidad del ejercicio, pero siempre
existe un movimiento que favorece la circulación de la energía. Como suele
decirse en ocasiones “bisagra que se mueve no se oxida”
Con el movimiento aumentamos la temperatura corporal y mejoramos la
circulación de la sangre, con lo que también mejoramos la circulación del chi.
Para la medicina china la circulación de la energía y la sangre van unidas, con lo
cual favoreciendo el movimiento de una se favorece el movimiento de la otra.
“El chi es el comandante de la sangre” y “la sangre es la madre del chi” son
dos expresiones muy utilizadas en medicina china para explicar esta
interdependencia entre estos dos elementos.
Los movimientos que se utilizan en el sistema van de rectilíneos a circulares,
de grandes a pequeños, y de externos a internos según vayamos avanzando en
las diferentes niveles que lo conforman.
Pero en una primera etapa en la que buscamos trabajar específicamente el
JING, (que es la base sobre la que se sustentan los otros dos tesoros),
prestaremos especial atención a los estiramientos. Con ellos vamos a estirar todo
nuestro sistema músculo esquelético, desde la columna vertebral hasta las
extremidades. Buscaremos trabajar huesos, músculos, tendones y ligamentos.
Existen diferentes tipos de estiramientos, y los que vamos a trabajar en nuestro
sistema son los dinámicos. Es importante entender que para poder estirar un
grupo muscular de forma activa, debemos contraer otro, con lo cual vamos a
alternar movimientos de estiramiento/contracción que nos ayudarán a mejorar la
circulación de la sangre y por lo tanto del chi.
2.-Trabajo de CHI
Para el trabajo específico del aspecto CHI, vamos a utilizar la respiración.
Aunque como podemos ver el movimiento y la concentración también ayudan a
movilizar la energía y llevarla donde queramos, en nuestro sistema cobra
especial importancia el trabajo de diferentes tipos de respiración para conseguir
este cometido.
Según la medicina tradicional china, la respiración impulsa el movimiento del
chi por todo el cuerpo. Solo con la respiración somos capaces de acelerar o
ralentizar nuestro ritmo cardíaco (haciendo respiraciones más cortas o más
largas). Como consecuencia podemos entender que con la respiración podemos
influir en la circulación de la sangre, y por tanto, de la energía.
Dentro del sistema Lohan se trabajan diversos métodos de respiración, yendo
de más sencillos a más complicados. Pero de momento lo importante entender
que con ellos vamos a desarrollar nuestro aspecto Chi
3.-Trabajo de SHEN
Para el trabajo de nuestro aspecto Shen vamos a utilizar principalmente la
concentración. Deberemos aprender donde colocar nuestra atención (muchas
veces utilizamos el término “mente” para referirnos en realidad a nuestra
atención o concentración) en la realización de cada uno de los ejercicios.
Volviendo a la medicina china, ésta nos indica que “allá donde va la mente va
el chi”.
Podremos utilizar nuestra concentración de varias formas, desde centrarnos en
diversos puntos o zonas del cuerpo, sintiendo los diferentes estiramientos o
prestar atención a diversas sensaciones que producen los diferentes ejercicios.
Pero siempre nuestro trabajo mental irá coordinado con el movimiento y la
respiración para hacer más eficaces los diferentes ejercicios que vayamos
practicando.
5. Teoría del Yin-Yang
Una vez entendido el objetivo general del Lohan chi kung, es necesario
conocer con claridad el significado de la teoría del YIN (陰) y del YANG (陽).
No solo saber lo que representa, sino también cual es su aplicación a los
ejercicios que vamos a realizar.
Yin-Yang es un concepto filosófico utilizado en la antigua China. Designa una
concepción del mundo, a partir de la cual se explica la Naturaleza y todo su
funcionamiento.
Podemos clasificar todos los fenómenos que en ella acontecen mediante esta
teoría, y como no, también es aplicable al ser humano. Tanto su anatomía como
sus acciones pueden ser clasificadas según el concepto de Yin o Yang.
También es una teoría aplicable al Lohan chikung. Es mas, conocer con
claridad el concepto de Yin y Yang, será determinante en nuestro trabajo y nos
ayudará a conseguir un efecto u otro en nuestra práctica. En posteriores
capítulos aprenderemos a aplicar este conocimiento a los ejercicios y como
influye en ellos.
Pero primero, veamos de forma básica pero clara, cual es su significado de
dicha teoría.
Qué es YIN-YANG
Imagina por un momento una colina. A uno de sus lados le da el sol. En el
otro, hay sombra.
En el lado soleado hay luz, calor, y como consecuencia hay más actividad. En
la parte sombreada hay frío, oscuridad, y como consecuencia hay más quietud.
La parte soleada es el Yang. La parte con sombra es el Yin.
Como explicaba antes, esta concepción binaria se aplica a todos los aspectos
de la naturaleza.
Como norma general, podemos clasificar como yang todo aquello que sea:
• móvil
• caliente
• ascendente
• centrípeto
• luminoso
• exterior
• superficial
• actividad
Y podemos clasificar como Yin;
• inmóvil
• frío
• descendente
• centrífugo
• oscuro
• interior
• profundo
• descanso
El ser humano no escapa a esta regla. Como dice el Su Wen (un tratado
antiguo de “medicina china”): “toda estructura tisular del organismo puede
dividirse en dos partes opuestas que están encarnadas por el Yin-Yang”
Veamos algunos ejemplos de esta clasificación;
• Yang: Hombre, parte anterior-lateral, parte superior, superficie, entrañas,
energía, etc.
• Yin: Mujer, parte anterior-medial, parte inferior, interior, órganos, sangre,
etc.
Por supuesto, también es aplicable a los ejercicios de chi kung. Veamos de
forma muy general ejemplos de cómo clasificar algunos movimientos;
• Yang: inspirar, tensar, subir, etc.
• Yin; espirar, relajar, bajar, etc.
Pero hay que tener en cuenta, que la naturaleza Yin o Yang de cualquier
elemento o acción no es absoluta sino relativa. Es decir, será Yin o Yang en
relación a otro elemento.
Además es importante entender que Yin y Yang no son dos tipos diferentes de
energía, sino que representan los dos polos opuestos, pero al mismo tiempo
complementarios de cualquier cosa.
Esta relación de interdependencia entre los dos elementos se ve perfectamente
representada por famoso dibujo Taiji (esencia suprema):
Es decir, las puertas son puntos desde donde se inician los movimientos de la
cabeza, los brazos y las piernas. Como vimos con anterioridad, el movimiento es
una de las formas de mover y dirigir el chi o energía, así como nuestra principal
herramienta para trabajar el jing (parte física). Las puertas nos ayudarán por
tanto a dirigir el chi a cada una de las partes del cuerpo.
Es importante entender que en Lohan chikung, al igual que en la mayoría de
artes marciales y estilos de chi kung, los movimientos se generan desde la
cintura o desde el cuerpo. Las puertas nos ayudan a conseguirlo. Cualquier
movimiento de las piernas comenzará con un movimiento de la puerta baja.
Cualquier movimiento de los brazos se iniciará desde la puerta media. Y
finalmente, cualquier movimiento de la cabeza se realiza desde la puerta alta.
Lo que conseguimos con esto es, no solo mover piernas, brazos y cabeza, sino
también involucrar la parte correspondiente de nuestro tronco o cuerpo central
(bajo, medio o alto), mejorando la eficacia del movimiento y ampliando nuestra
zona de trabajo, y por tanto, los beneficios que vamos a conseguir.
Lo que logramos con esto es, por ejemplo, que los brazos no se muevan de
forma independiente al tronco. Cada movimiento de brazos se inicia con un
movimiento de la puerta media, que producirá una expansión de nuestro pecho,
involucrando de esta manera toda la musculatura de dicha zona, aumentando de
esta manera el área de trabajo, así como la eficacia del movimiento de los
brazos. Lo mismo sucede con las piernas y la puerta baja y la cabeza con la
puerta alta.
Generalmente hablaremos de “abrir la puerta” cuando la estiremos, tensando la
parte posterior donde se sitúa y expandiendo la parte del cuerpo o tronco
correspondiente.
Lo que conseguimos con ello es subir la energía hasta la puerta
correspondiente y desde ahí la llevaremos a las extremidades. Suele coincidir
con la fase yang del ejercicio, donde solemos inspirar.
Hablaremos de “cerrar la puerta” cuando la relajemos, estirando la parte
posterior (columna vertebral) y contrayendo o cerrando la parte anterior del
cuerpo. Lo que conseguimos es que la energía que hemos llevado a las
extremidades vuelva al cuerpo. Suele coincidir con la fase yin del ejercicio, en la
que espiramos.
El movimiento de las puertas siempre va desde abajo hacia arriba, tanto al
“abrirlas” como al “cerrarlas”. Es decir, cuando desde una posición neutra
empecemos un ejercicio, primero abriremos la puerta baja, posteriormente la
puerta media y finalmente la puerta alta. Para relajar seguiremos el mismo orden;
primero la puerta baja, le seguirá la media y terminaremos con la alta.
La importancia del sam jiao dentro del Lohan chi kung viene determinada por
su relación con la respiración.
Acabamos de ver que una de las principales funciones que se le atribuyen al
sam jiao es la de la distribución de la energía por todos los órganos internos.
También hemos visto que uno de los métodos que tenemos en el Lohan Chi
kung para favorecer la circulación del chi es la respiración.
En el capítulo dedicado a la respiración veremos como existen varias formas
de respirar, y que uno de los métodos de los que disponemos es la respiración
por alturas. Estas diferentes alturas o zonas se corresponden con cada uno de los
jiaos y con los diferentes ejercicios respiratorios conseguiremos favorecer la
circulación de la energía en cada uno de ellos.
De esta manera, la alternancia de las diferentes fases yin y yang, o lo que es los
mismo, de la contracción-relajación de los dos meridianos ayudaran al
movimiento o circulación de chi hacia arriba y hacia abajo.
7. LOHAN CHI KUNG. La Ciencia del
Buda
Ahora ya conocemos las teorías básicas necesarias para poder practicar Lohan
Chi kung de forma correcta. En realidad, casi todo lo visto anteriormente es
aplicable a cualquier sistema de chi kung. Aunque cada uno tiene sus objetivos,
su propio sistema de entrenamiento, y sus teorías fundamentales, los conceptos
de los tres tesoros, el Yin y el Yang, el Samjiao, los Tantiens, etc. son utilizados
por la mayoría de ellos.
A partir de ahora, voy a centrarme más específicamente en el sistema Lohan.
Veremos cuales son sus orígenes, su estructura, y finalmente algunos de sus
métodos de trabajo más básicos. Lo que vamos a aprender a continuación es en
realidad la aplicación práctica de cómo tenemos que utilizar todos los conceptos
y teorías que hemos visto con anterioridad. Vamos allá…
CHAN HEUNG
Esta es una forma desarrollada principalmente para el trabajo del JING. Por lo
tanto, el aspecto más importante a tener en cuenta es el movimiento. Como su
nombre indica, no deja de ser un sistema de boxeo, pero cuya finalidad principal
es el trabajo (muchas veces traducido como cambio, o transformación) de
músculos, tendones, ligamentos y huesos.
La forma consiste en una serie de ejercicios en los que vamos estirando
diferentes grupos musculares. Es por ello que predominan los movimientos
rectilíneos.
El movimiento guiará a la respiración y la concentración. Es decir, lo primero
que hacemos es movernos, y dicho movimiento hará que el aire entre o salga de
forma natural. De manera muy general, en los movimientos en los que
estiremos, el aire entrará, y en los que relajemos, saldrá. Nuestra mente también
seguirá al movimiento, poniendo nuestra atención en la correcta ejecución del
ejercicio y sintiendo las sensaciones que producen los diferentes estiramientos
con su posterior relajación.
Estirar un músculo de forma activa o dinámica implica contraer su antagonista,
con lo cual, en realidad, la forma va alternando el estiramiento y contracción de
diferentes grupos musculares lo que produce una serie de beneficios que luego
explicaré.
También es muy importante el trabajo que se realiza a lo largo de la forma
sobre la columna vertebral. Cada uno de los ejercicios la estira o rota de forma
diferente, actuando sobre toda ella o sobre algún segmento en concreto.
El objetivo general de esta forma es fortalecer nuestro sistema músculo-
esquelético, aumentando al mismo tiempo nuestra flexibilidad y elasticidad, así
como favorecer la circulación de sangre y energía por todo el cuerpo.
Pero veamos con un poco más de detalle los beneficios que podemos obtener
con los ejercicios de estiramientos (o mejor dicho de estiramiento, relajación,
contracción), y por lo tanto, de ésta forma:
• Músculos;
- Someter a los músculos a series de movimientos en los que se llega a su
máximo estiramiento y su máxima contracción ayuda a mantener su
elasticidad y resistencia.
- Ayudan a reducir posibles contracturas, con lo cual el funcionamiento
general del músculo es mejor.
- Uno de los efectos más interesantes que conseguimos con los ejercicios de
estiramientos es el de drenaje; si comparamos el músculo con una esponja
que en este caso está llena de sangre, al estirarlo ayudamos a vaciarlo,
escurriendo la sangre que había dentro y eliminando toxinas y productos de
desecho. Al relajar y soltar el estiramiento, al igual que haría una esponja, el
músculo se vuelve a llenar de sangre, en esta ocasión oxigenada, con lo que
recibirá un mayor aporte de nutrientes. De esta manera conseguimos
favorecer la circulación de la sangre, y por tanto de energía, en los diferentes
grupos musculares, mejorando su nutrición y la eliminación de productos de
deshecho, con todos los beneficios que esto comporta.
• Huesos;
- En la fase de estiramiento de la mayoría de los ejercicios, lo que buscamos
en realidad es separar los diferentes huesos que conforman cada articulación;
es decir, aumentar por un instante el espacio interarticular, como se indica en
el dibujo.
- Esto libera dichas articulaciones, con lo que ayuda la regeneración ósea. Esto
cobra especial importancia cuando se trata de la columna vertebral, ya que,
aunque sea de forma ligera, ayudamos a descomprimir el espacio entre
vértebras.
- Está demostrado que el ejercicio físico moderado ayuda a ralentizar la
pérdida de masa ósea.
- Al favorecer músculos más elásticos y sin contracturas, conseguimos
eliminar presiones o tensiones sobre los huesos con lo que evitamos uno de
los factores que favorecen el desgaste de éstos.
• Ligamentos;
- La separación o descompresión de la que hablábamos anteriormente somete
a cierta tensión a los diferentes ligamentos cuya función es, precisamente,
mantener la articulación unida. Esta presión controlada a la que son
sometidos ayuda a su fortalecimiento.
• Tendones
- Otro de los grandes beneficiados de los ejercicios de esta forma son los
tendones. Como he comentado anteriormente, estirar un grupo muscular de
forma activa, implica contraer sus antagonistas. Además, después de una
fase del ejercicio en la que llegamos a su máxima extensión soltamos y
vamos contrayendo hasta que llega un punto en el que volvemos a iniciar un
nuevo estiramiento. Con esto lo que se consigue es que los estiramientos se
inician desde la contracción del músculo, convirtiéndolo en su fase inicial en
un estiramiento excéntrico. Dichos estiramientos, al estar el músculo
inicialmente aún contraído, repercute especialmente sobre el tendón, lo que
lo mantiene más elástico y resistente.
De hecho, los estiramientos excéntricos suponen una excelente arma
terapéutica en fisioterapia y masaje para el tratamiento de patologías tendinosas.
Los tendones suelen ser una de las estructuras más olvidadas en el trabajo de
las diferentes actividades físicas. La práctica de Lohan chi kung nos ayuda a
cubrir este hueco.
• Zona media:
Cuando usamos la puerta media nos daremos cuenta que lo que hacemos es
aproximar las escápulas y expandir la caja torácica, lo cual nos ayuda a dirigir el
aire a esa zona
En esta ocasión inspiraremos y espiraremos por la boca. La posición, y por lo
tanto el sonido que emitimos al espirar es el correspondiente a la letra “Oooo”.
Al utilizar dicha posición permite mayor entrada y salida de aire que en la
ocasión anterior, y por lo tanto nos ayuda a realizar una respiración más
profunda.
Aquí, la lengua no realizará ningún movimiento. Permanecerá relajada en el
centro tanto al inspirar como al espirar.
• Zona baja:
Cuando usamos la puerta baja expandimos hacia afuera el bajo abdomen, lo
que contribuye a que el aire se dirija a la zona más profunda de los pulmones.
Además inclinaremos ligeramente el mentón hacia abajo cerrando la zona alta, lo
cual nos ayudará a que el trabajo se centre en la zona baja.
Inspiramos y espiramos por la boca, adoptando una posición como si
fuésemos a pronunciar la letra “A“. Al espirar emitimos el sonido “Aaee”
Con la lengua tocaremos el paladar inferior, justo donde nacen los dientes
inferiores tanto al inspirar como al espirar.
RESPIRACIÓN EQUILIBRADA
Partiendo de que ya tenemos claros los conceptos de Yin y de Yang,
definiremos la respiración equilibrada como aquella que tiene un efecto
neutro en nuestro organismo.
Es decir, con ella no pretendemos activarnos (Yang) ni sedarnos (Yin), lo que
buscamos es un efecto neutro o de equilibrio. Buscaremos favorecer la
circulación de la energía, pero de una forma equilibrada.
Para conseguir esto nos centraremos en que nuestra inspiración dure lo
mismo que nuestra espiración. Generalmente, y como referencia, contaremos
hasta tres al inspirar y contaremos también hasta tres al espirar. Evidentemente
esta cuenta de tres será más rápida o más lenta dependiendo de la capacidad
pulmonar de cada persona. Simplemente se trata de contar para conseguir que
inspiración y espiración duren lo mismo.
REPIRACIÓN YANG
En este tipo de respiración haremos la inspiración más larga que la
espiración. También se conseguiría un efecto similar marcando más la
inspiración (haciéndola más fuerte).
Para facilitar nuestro objetivo, contaríamos hasta cuatro al inspirar y hasta tres
al espirar.
El efecto que conseguimos con este tipo de respiración es un trabajo Yang;
subir la energía, estirar nuestro cuerpo, acelerar la circulación, etc.
RESPIRACIÓN YIN
Con este tipo de respiración conseguimos el efecto contrario, es decir,
obtendremos un trabajo Yin; bajar la energía, relajar el cuerpo, sedar la
circulación, etc.
Para conseguirlo haremos la inspiración más corta que la espiración.
Volviendo a las cuentas, contaremos hasta tres al inspirar y hasta cuatro al
espirar.
Solo con este tipo de respiración básica y entendiendo la teoría del Yin y del
Yang, ya hemos visto cómo podemos obtener diferentes efectos en nuestro
cuerpo haciendo pequeñas variaciones en la duración de las diferentes fases de
la respiración.
Es algo básico, sencillo, pero extremadamente útil para nuestra práctica.
Veremos como lo que acabamos de ver es aplicable a la mayoría de los
ejercicios, y entendiéndolo de forma correcta, podremos adaptarlos a nuestros
objetivos, dependiendo de si lo que buscamos es trabajar de forma más activa,
estimulante, de forma más relajante, más suave o simplemente queremos hacer
un trabajo más equilibrado.
Hay más formas de transformar una respiración neutra en Yang o Yin:
- Una respiración más rápida nos obligará a realizar una respiración más
superficial, con lo que conseguiremos un efecto yang, ayudando a subir
nuestras pulsaciones, nuestra energía, et. Por el contrario, una respiración
más lenta nos llevará a hacerla más profunda, con lo que obtendremos un
efecto más Yin; mayor relajación, bajar nuestro ritmo cardíaco, etc.
QUAI SIK (RESPIRACIÓN DE TORTUGA)
El ciclo respiratorio se compone de cuatro fases;
Inspiración-pausa-espiración- pausa
Anteriormente hemos visto cómo podemos variar la duración de la inspiración
y la espiración según nuestras necesidades.
Pero también podemos utilizar las pausas existentes entre ambas para
conseguir determinados objetivos.
La conocida como “quai sik” o respiración de la tortuga consiste en contener
la respiración. Es decir, aumentamos la duración de alguna de dichas pausas con
una finalidad concreta.
De forma muy general, podemos decir que dentro del Lohan chi kung
utilizamos este tipo de respiración con la intención de mantener el chi o energía
en una zona concreta durante un tiempo determinado. La duración de la
retención que practicamos en nuestro sistema suele ser bastante corta,
generalmente de uno o dos segundos. Suele realizarse junto a una pausa en el
movimiento del ejercicio que estemos realizando y concentrándonos en la zona
o punto donde queramos mantener la energía.
Existen dos variantes de este tipo de respiración; aquella en la que hacemos
una pausa tras la inspiración y aquella que la hacemos después de espirar.
Veamos con un poco más de detalle cada una de ellas.
1-Consiste en inspirar, mantener el aire y luego soltarlo. Tiene un efecto más
Yang, es decir buscamos tonificar el punto o zona que estemos trabajando.
2-En esta ocasión espiramos, hacemos entonces una pausa, para luego seguir
con la inspiración. Con ello se obtiene un efecto más Yin. Buscamos
sostener el chi en una zona o punto concretos pero con una finalidad más
relajante.
FIN