CASTILLA Y ARAGON: 1469-1504.

Los Reyes Católicos:

El rey Juan II de castilla falleció el21 de junio de 1454, y dejo tres hijos: el heredero Enrique IV el impotente,
Isabel y Alfonso.
Don Enrique IV el impotente, tuvo una hija, doña Juana a quien por su filiación dudosa, denominaron La
Beltraneja, fue reconocida como legitima heredera del trono. El Rey Juan II de Aragón, que aspiraba a reunir
su trono con el de Castilla, proyecto casar a su hijo Fernando con doña Isabel. El rey de Portugal don Alfonso
V, el africano, era otro pretendiente de la princesa. A la muerte del infante don Alfonso el 5 de junio de 1468,
su hermana Isabel continuo encabezándola rebelión que aquel había iniciado contra don Enrique IV, el
impotente con el apoyo de los aragoneses. Sin embargo, don Enrique fue admitido como rey hasta el final de
su vida, y doña Isabel, fue jurada cual princesa heredera en lugar de doña Juana la Beltraneja. Por su parte el
rey de Aragón obtuvo para su hijo la mano de doña Isabel, y pese a todas las dificultades y la oposición doña
Isabel se casa con don Fernando en Valladolid el 19 de octubre de 1469. Tal era la falta de recursos de los
contrayentes, que pidieron dinero prestado para pagar los gastos de la ceremonia.
EL CONTRATO MATRIMONIAL:
El objetivo principal de este convenio fue limitar la intervención de don Fernando de Aragón en el gobierno de
castilla. Los dos reinos debían permanecer completamente autónomos e independientes. Las instituciones
castellanas serian respetadas. Los dominios castellanos no serían enajenados sin autorización personal de
la reina. Don Fernando se comprometía a residir en castilla y a no salir del país, a menos que su esposa lo
consintiese y a seguir la lucha contra los moros. A la muerte de enrique IV, en 1474, don Fernando de Aragón
que no había quedado conforme con la proclamación que se hizo de doña Isabel como reina de castilla,
sostuvo que las mujeres estaban excluidas de la sucesión del trono y que a él le correspondía directamente la
corona, como descendiente del rey juan I de castilla. Esta actitud obligo a que se aclarase el contrato
matrimonial. En las nuevas disposiciones se dijo que todos los documentos públicos serian firmados por
ambos reyes que la justicia se administraría en su nombre, y de esta manera son Fernando que ya era
soberado de Sicilia y heredero de la corona de Aragón fue proclamado con limitaciones, rey de castilla en
1475.
EL TRATADO DE ALCACOVAS (1479):
A la muerte de don enrique IV, comenzó en castilla una guerra civil, porque los partidarios de la Beltraneja no
acataron la proclamación de doña Isabel como reina de dicho país. Alfonso de Portugal se casa con Juana la
Beltraneja, ambos reclamaban el trono de castilla, y en su causa invaden el país en 1475, el conflicto se
extendió más allá de la península ibérica y los portugueses c combatieron con los castellanos en las Canarias
y la Guinea. La paz se logra en 1479, con el tratado de ALCACOVAS, donde se perpetuo la paz entre
castellanos y portugueses, y doña Isabel fue reconocida como legitima soberana de castilla. En 1479 el papa
Alejandro VI otorgo a los monarcas castellanos el honroso y preciado título de REYES CATOLICOS. EN
1504, se produce el CODICILIO, la reina tres días antes de morir, el 23 de noviembre de 1504, dicto un
codicilo donde manifestó su voluntad sobre varios asuntos de gobierno. Uno de ellos fue el trato que debía
darse a los naturales de la India. Al manifestar que su conversión al cristianismo debía ser el primer cuidado
de los gobernantes de castilla.
LA REORGANIZACION DE CASTILLA 1480- 1504.
Las cortes de Toledo (1480) Los reyes católicos después de firmar la paz con Portugal y desembarazados de
todos los enemigos interiores y exteriores, comenzaron a reorganizar su reino. En las cortes de Toledo
(1480), fueron el punto de partida de esta reorganización. Se crearon 5 concejos, que dotaron a la corona del
instrumento necesario para realizar su reformas en lo político, eclesiástico, militar, jurídico económico y social.
Además se crearon los VISITADORES ANUALES, y se ordenó el libre comercio entre castilla y Aragón. Se
dispuso que los moros y judíos, viviesen en barrios apartados de los cristianos, es decir en sus ALJAMAS O
GUETOS.
La obra de los reyes católicos:
Los monarcas, auxiliados por sus consejos emprendieron la reorganización del estado tenido por objeto
unificarlo, totalizando toda la autoridad sin limitaciones en manos de los reyes. Las cortes después de las de
Toledo fueron convocadas en raras oportunidades. Los nobles y los eclesiásticos perdieron toda influencia. La
corona intervino en la vida de las municipalidades y confirió mayor realce y prestigio a la acción de los
corregidores (representantes y ejecutores de la autoridad real). La justicia fue objeto de cuidadosas reformas
y se organizaron las cancillerías o audiencias, pero la unificación de la legislación no comenzó hasta después
de la muerte de Isabel. Las finanzas quedaron bajo la estricta administración del tesoro público, saneando la
moneda con la creación del EXCELENTE DE GRANADA O DUCADO DE ORO, como base de su sistema en
el año 1497. El ejército adopto una nueva táctica y armamento, y se desarrolló la marina tanto del estado
como de particulares. Las relaciones entre el estado y la iglesia se rigieron por el REGALISMO, que
caracterizo siempre a los monarcas de castilla.
La imprenta fue introducida en castilla en 1474 y su difusión origino un extraordinario florecimiento literario y
científico. El humanismo llego a castilla mediante la constante acción de los súbditos aragoneses y otros
oriundos de Italia. La obra de gobierno cumplida por los reyes católicos ha sido el primer ejemplo de la
realización de un estado fuerte, unificado y centralizado. Además iniciaron reformas sociales profundas, con el
reconocimiento del derecho de los pobladores a trasladarse libremente de un lugar a otro, sin necesidad de la
autorización de su señor, es decir suprimiendo a los siervos de la gleba.
LA SUPREMA Y GENERAL INQUISICION O TRIBUNAL DEL SANTO OFICIO:
La unidad de raza y de religión fue el principal objetivo que persiguieron los reyes, al establecer esta
institución, denominada popularmente LA SUPREMA. La autoridad de la iglesia y la del estado se sumaron
cuando en el año 1483, se formó el consejo de la suprema inquisición. El tribunal funcionaba en varias
ciudades, cabezas de jurisdicción u obispados. Y tal era la independencia de la institución, que no se admitía
apelación de sus fallos a roma. Los reyes católicos el 30 de marzo de 1492, decretaron que todos los judíos
habitantes en sus reinos se convirtiesen o abandonasen las tierras en un plazo de 4 meses. Muchos se
convirtieron pero la mayor parte, unos doscientos mil, prefirieron expatriarse y se refugiaron en Italia, Portugal
y en tierras africanas. Los moros y judíos conversos por voluntad o a la fuerza caían bajo la autoridad del
tribunal del santo oficio y eran condenados a la hoguera.
SANTA HERMANDAD: Era una organización militar, legislativa, judicial y administrativa que tenía una
jurisdicción amplísima y tenía como fin poner límites y terminar con los robos y desordenes por parte de
bandidos que asaltaban los caminos, campos y ciudades y reprimirlos con castigo sus excesos. Si bien esta
santa hermandad se constituyó durante el reinado de enrique I, con los reyes católicos se establecieron
nuevas bases para la actuación de la santa hermandad quienes ahora tenían bajo sus órdenes a los alcaldes
y comisarios, en todas las ciudades, villas, valles, etc. Las penas impuestas eran terribles. Azotes,
mutilaciones de orejas, manos o pies y muerte de saeta. Los arqueros hacían guardia en los caminos públicos
para controlar la situación.
LA EXPANSION CASTELLANA:
La unificación de la península ibérica en un solo estado y su expansión en tierra ultramarinas fue el suprema
ideal de los reyes católicos. En vida de doña Isabel se realizó la conquista de las islas canarias, se terminó
con la guerra de granada, se descubrió américa y se establecieron las primeras colonias en las indias
occidentales, se afirmó el dominio español en Nápoles y se promovió la conquista de marruecos, Argelia y
Túnez.
EL TESTAMENTO DE ISABEL LA CATOLICA: A punto de morir doña Isabel extendió su testamento
designando como heredera y sucesora de todos sus reinos y señoríos a su hija doña Juana y en caso de
que esta no pudiese gobernar, nombro como regente a su esposo don Fernando, hasta que don Carlos, hijo
de la princesa y de Felipe el hermoso tuviese veinte años cumplidos. La unión de castilla y Aragón durante la
vida de Isabel, si bien fue asentado en un convenio, no quiso decir nunca que los dos reinos se confundiesen
en uno solo. Y al descubrirse las indias occidentales se expresó categóricamente que los aragoneses no
tenían parte en el goce de las nuevas posesiones porque ellas habían acrecentado la corona de castilla en
virtud de los gastos realizados por doña Isabel y a la empresa de Cristóbal colon.
El REINADO DE DOÑA JUANA Y FELIPE EL HERMOSO (1504-1507): La reina Isabel muere en 1504, la
heredera al trono doña Juana la loca, esposa de don Felipe el hermoso de borgoña se hallaba en Flandes. En
su ausencia don Fernando actuó como regente de acuerdo con el testamento de Isabel. En Flandes el
archiduque asumió el título de rey de castilla tan pronto supo que su suegra había muerto, exigiendo que don
Fernando renunciase a la regencia. El rey Fernando proclamo a su hija y al esposo como reyes de castilla.
Don Fernando con el fin de continuar con la obra iniciada valiéndose de sutiles recursos políticos y
diplomáticos se concilio con el rey de Francia y concertó su nuevo matrimonio con GERMANA DE FOIX, en
1505. Los títulos de su prometida al reino de navarra ábranle camino para la conquista de dicho país y la
unificación de todos los de la península ibérica. Después del casamiento se planteó un conflicto entre la reina
Juana, Felipe su esposo y el rey Fernando ya que si bien se había convenido entre todos que la
administración de castilla se haría en nombre de Fernando Felipe y Juana y que parte de las rentas de castilla
e indias correspondían al rey católico, lo que se planteaba ahora era la necesidad de que don Fernando se
retirase a Aragón entregando el gobierno de castilla a sus hijos.
Se sabe que se realizó un pacto reservado entre yerno y el suegro donde se resolvía que en ningún caso le
seria confiado a doña Juana a causa de su estado mental., aunque se dice que el mismo día de haber firmado
este tratado Fernando protesto contra su validez diciendo que le habían sido impuesta por las fuerzas. En
septiembre de 1506, el rey Fernando se embarcó hacia sus dominios italianos y el mismo mes y año murió
repentinamente, don Felipe el hermoso, recayendo las sospechas en don Fernando, de quien se había dicho
que lo había enviado a envenenar. La reina Juana enloqueció totalmente, y su padre tardo en regresar, hasta
el año siguiente. Castilla quedo desamparada y en la anarquía hasta que don Fernando se presentó en 1507,
para hacerse cargo en forma definitiva de la regencia del reino, resuelto a imponerse a la gran nobleza. En
febrero de 1509, doña Juana fue recluida en la fortaleza de Tordesillas por el resto de sus días. Y las cortes
de Madrid reconocieron la regencia de don Fernando en 1510. Establecido en castilla don Fernando se
empeñó en dilatar las fronteras en favor de los primeros planes de unificación y engrandecimiento que inicio
mientras vivía su esposa Isabel.