You are on page 1of 1

Una sucesión ecológica es, entonces, un proceso evolutivo; es resultado de la modificación del ambiente

físico por causas internas o externas a la comunidad. Culmina con el establecimiento de un ecosistema
biológicamente estable (se alcanza el clímax) que se perpetúa a sí mismo.

La sucesión ecológica es un proceso ordenado de cambios direccionales de la comunidad y por tanto


predecibles. Las comunidades clímax mantienen un doble equilibrio de las especies entre sí, y éstas con las
propiedades ambientales; es, reiteramos, la máxima meta biológica a la que una sucesión puede llegar.

Las sucesiones suelen referirse a las comunidades


vegetales. Durante el clímax de estas
comunidades (cuya estructura es compleja) los
fenómenos de competencia en el seno de la
asociación son ínfimos, manteniéndose una
armonía óptima con las condiciones del suelo y la
climatológica del lugar.

En las fases más tempranas de una sucesión, las


especies más abundantes son las
denominadas oportunistas, que se reproducen a
gran velocidad pero que poseen una
escasa biomasa. En el proceso estas especies
serán sustituidas por otras con menor tasa de
Las sucesiones suelen referirse a las comunidades
reproducción y mayor biomasa.
vegetales.

Una empresa española de reciente creación especializada en bosques, medio ambiente y


desarrollo rural ha combinado la siembra forestal con semillas especialmente tratadas para
repoblar y reforestar terrenos quemados o ubicados en zonas abruptas con mayor rapidez y
un menor costo.
La Redacción Recomienda
 Reforestemos Patagonia firma un acuerdo con la Wildlife Conservation Society
 Ecologistas piden actuar para evitar erosión del suelo tras incendio Cómpeta
 Nicaragua quiere plantar un millón de árboles en el llamado "corredor seco"

Se trata de una iniciativa de interés teniendo en cuenta quecada año se queman en España una
media de 117.000 hectáreas (cantidad que se eleva a 468.000 en toda la Europa
mediterránea), de las cuales una tercera parte son terrenos arbolados que, según los
expertos, en la mayor parte de los casos no se recuperan por culpa de la escasez de inversiones
pero también por el tipo de plantación habitual.
A falta de dinero, una fórmula para mejorar la situación es la que aplica Sylvestris, compañía
fundada hace un año pero integrada por una plantilla de técnicos con más de dos decenios de
experiencia, que ha obtenido resultados notables de reforestación en este corto espacio de tiempo.
“Tradicionalmente, se sembraba igual que lo hacían los propios árboles: diseminando grandes cantidades de
semillas de un modo aleatorio, lo que dio lugar a bosques muy densos que, al no ser cuidados de la manera
adecuada, hoy son fácilmente pasto de las llamas”, explica a Efeverde Enrique Enciso, fundador de la

You might also like