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El Hombre y la Máquina

ISSN: 0121-0777
maquina@uao.edu.co
Universidad Autónoma de Occidente
Colombia

MUÑOZ SUÁREZ, CARLOS MARIO


Reseña de "La Objetividad, un argumento para obligar" de Humberto Maturana
El Hombre y la Máquina, núm. 24, enero-junio, 2005, pp. 162-163
Universidad Autónoma de Occidente
Cali, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=47812408015

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LIBROS
I II
La Objetividad,
“Candor y confianza” son los El texto se divide en cuatro par-
un argumento para dos estados a partir de los cuales tes: 1) la ontología del explicar, 2)
obligar Humberto Maturana invita a leer su la realidad, 3) la ontología del co-
libro, un libro que en específico no nocimiento, y 4) el fenómeno social.
se centra en profundos tópicos acer- De acuerdo con esta clasificación se
Humberto Maturana ca de la realidad, sino, de manera puede observar el un carácter bio-
149 páginas puntual, como el mismo autor afir- lógico influenciado por una re-
ma, es un libro sobre la “explica- flexión fenomenológica, reflejada
Editorial Océano
ción de las experiencias y las rela- por ej.: en la distinción lenguaje y
ciones humanas”. lenguajear. Este estilo propio de H.
Maturana tambien se ve reflejado en
El “objeto” de estudio del libro
otros de sus libros como La reali-
es, pues, el observador. En una re-
dad. ¿Objetiva o construida? o Bio-
flexión que habla acerca de la reali-
logía del emocionar o alba emoting.
dad como aquello que es construi-
do y, contrariamente a esto, toma- La primera parte se cuestiona
do al interior de las relaciones hu- acerca de la relación entre el (común)
manas como el punto de control de vivir y las explicaciones que el ser
la justificación y formación de “ar- humano pueda crear. Maturana
gumentos racionales”. Esta última muestra que las explicaciones una
idea es la que revalúa Maturana. Es vez configuradas articulan un rol
a este operar en el lenguaje, y en determinantemente operante en el
específico a la argumentación, en vivir. Las explicaciones cambian la
donde la realidad se muestra como praxis del vivir aun cuando no son
independinte al hacer del ser huma- necesarias (originariamente) para
no, y como un punto de autoridad, dicha praxis.
en donde Maturana centra su re- En este capítulo, determinante
flexión. Reflexión en la cual remue- para el resto del libro, Maturana in-
ve aquellos supuestos firmes de la corpora una distinción clave, esta
realidad, planteando un constructi- es: objetividad trascendental (sin
vismo y modificando nuestra expe- paréntesis) y objetividad constitu-
riencia, generando cambios o firme- tiva (con paréntesis). La objetivi-
zas en las realidades que nosotros dad trascendental según Maturana
mismos, en relación con los otros, es ciega en tanto no reconoce el
hemos construido. Puesto que hacer del observador sobre la rea-
“...todo el vivir humano ocurre...en lidad, esta crítica se encuentra en
las relaciones humanas en la conti- contra de aquel sistema filosófico
nua creación de mundos...”. llamado realismo metafísico, cuyas
Este magnífico ensayo, magní- ejemplificaciones pueden encon-
fica fusión de biología y filosofía trarse en Descartes y Kant, y más
(y en específico de ontología y epis- contemporaneamente en J. Sear-
temología) se centra de manera pun- le. Por otro lado, a partir de la ob-
tual en la pregunta acerca de la «rea- jetividad constitutiva el ser expli-
lidad como aquel punto de control ca la realidad como aquello origi-
argumentativo», y por consiguien- nariamente construido por él y con-
te en el carácter de lo-real y su ori- sidera sus capacidades cognitivas
ginaria relación con el hacer del ob- como fenómenos biológicos que
servador. surgen en el vivir.
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LIBROS
En la segunda parte del libro de un individuo por otro en el flujo III
Maturana afirma que no somos ani- de las relaciones humanas. El hom- Por último, algo que no se ha
males racionales, por el contrario, bre en su carácter de animal emo- mencionado, el último apartado del
dice que somos animales emocio- cional-lenguajeante configura el libro (no el cuarto capítulo, sino) un
nales, lenguajenates, que a través interés por el otro en su praxis del epílogo titulado: “Amor, sabiduría
de sistemas racionales usamos “co- vivir. En este sentido y fuera de toda y acción”, parece ser el entramado
herencias operacionales del lengua- discusión ética bizantina, Matura- reflexivo que Maturana, en un sen-
je”. En este sentido la racionalidad na redefine el concepto de ‘amor’ tido más práctico, nos invita a exa-
es redefinida. Este apartado en es- desde una perspectiva biológico- minar, por ejemplo relacionando
pecial lleva a pensar acerca de la social definiéndolo como “...la emo- temas como: ciencia y tecnología,
relación entre constructivismo e ción que constituye la coexistencia democracia, el presente, etc., siem-
idealismo, dos sistemas totalmente social...”. Idea que puede rastrearse pre entremezclando esto con expli-
distintos que, erróneamente, suelen también en su discusión con Susa- caciones teóricas y metateóricas las
ser confundidos. na Bloch (en Biología del emocio- cuales se estructuran articulando
La tercera parte del libro se fun- nar y alba emoting) junto con el conceptos como: existencia sistémi-
damenta, de manera especial, en el hecho de que nuestra cultura haya ca, homo sapiens amans, acopla-
hecho argumentado por Maturana convertido el amor en una virtud. miento estructural, etc.
de que el “observador surge en el Esto es algo que revalúa Maturana
desde su posición como biólogo- El texto de maturana no es un
lenguaje y... no existe fuera de len- texto que se restrinje a una discipli-
guaje”. epistemólogo. En este apartado
na o área de estudio, es algo que
Maturana implícitamente pule el
En esta parte analiza las relacio- surge más de un interés reflexivo,
concepto de coexistencia no-social
nes entre «observador-observa- que recoge muchos frutos de árbo-
y social.
ción», «conocer» y «mente y cuer- les cercanos, es decir, un interés re-
po». Respecto a este último punto, Cultura, epigénesis, corporali- flexivo interdisciplinar que, sin
Maturana asegura que nuestro vivir dad, lenguajear, emociones, obser- embargo, nos deja ver a contraluz
se despliega en dos dominios feno- vador, observación, objetividad, re- la formación biológica y epistemo-
ménicos independientes. Estos son: laciones humanas, dominios expli- lógica de su autor. Fundador del
el dominio de la corporalidad y el cativos, etc., constituyen el firme concepto de autopoiesis y gran
de la conducta. Dos dominios que tejido que Maturana ha construido constructivista.
no se intersectan pero que están para que el mundo de habla hispa-
Con todo esto, Maturana se da
“acoplados en sus realizaciones”, na (y otros muchos que compren-
el lujo, en La objetividad. Un argu-
esta es una idea que invito al lector dan nuestra lengua) comience a re-
mento para obligar, de construir
a revisar por sí mismo, debido a que valuar ciertos paradigmas que se
afirmaciones (posibilitándonos a su
1) el presente texto no abarca esa han anclado durante mucho tiempo
vez el lujo de leerlas) como: “...en
intención y 2) el presente texto pre- en el ser humano, sus relaciones y
verdad, vivir en la negación de la
tende despertar en usted (lector) explicaciones.
consensualidad, del amor y de la
cierto curioso interés por el tema acá Un tejido policromático se nos ética, como el fundamento de nues-
tratado. tros distintos modos de coexisten-
ofrece para reconstruir nuestras con-
En la cuarta y última parte, vicciones, reafirmándolas o reva- cia, constituye la negación de la
como se mencionó anteriormente, luándolas y mostrándonos, a través humanidad. Ahora podemos estar
son los fenómenos sociales el obje- de su cromática lucidez, que el ser conscientes de esto...”. Lo cual es
to de análisis. En este sentido y humano es ante todo (de modo ex- un gran legado.
guardando coherencia con los tres plicativo) un constructor, o en otras
capítulos precedentes, Maturana palabras, una entidad biológica que
niega la idea de que el ser humano debe ser consciente de su ‘hacer’, CARLOS MARIO MUÑOZ SUÁREZ
sea ético por ser racional. Por el siendo este ‘hacer’ algo a su vez, he- Estudiante del Departamento de Filosofía y del
contrario, afirma a la ética como cho por el hombre, su cultura y sus Instituto de Psicología de la Universidad del Va-
lle. Grupo de Investigación Mentis.
algo que se construye en el interés explicaciones. neurofilosofia1@yahoo.com.mx

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