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—Miércoles 28 de AlurU de 1015 LA VANGUARDIA

Queda prohibida la reproducción de minas del Estado justificados en forma, probablemente de fábricas ni de Indus- un paso hacia esa envolvente absoluta
erticulos publicados en LA VANGUAR- tendrán derecho á percibir una renta vi- tria textil en España, si llegara á regir que se pierde en las brumas de lo infi-
DIA sla indicar la procedencia. talicia equivalente á la cuarta parte deí sin radicales transformaciones. nito.
salario mayor que durante dos años haya J. AGUILERA El Universo fiaico y mecánico está muy
percibido. Estas pensiones serán transfe- lejos de ser io que nos revelan nuestras im-
INSTITUTO DE REFORMAS SOCIALES ridles á la viuda y á los hijos menores de
diez y Biete años. Lo probable es que con
presiones sensoriales.Pero, por el momen-
to, bagamos omisión de la formidable false-
esta clase de contratos no se construye- dad que representa para la percepción
ran más obras públicas en España por
Un tntao á sn obra cuenta del Estado. A eso el Instituto le
llama contrato de trabajo.
Como decíamos el pasado miércoles, Espa-
ña se divierte, pero de veras, con toda el al-
del Universo el yo receptor (de cuyo reía*
tivismofiBio-psicológicoquizáB me ocupe
ma. Nunca se ha divertido tanto; se le llevan en otra ocasión) y supongamos un orga«
n Veamos otro proyecto de ley: él de la comida, se queda bostezando de hambre, nismo receptor perfecto, libre por coro*
Si el árbol se conoce por el fruto, por prohibición del trabajo nocturno en la pa- pero Dios proveerá. pleto de espejismos y de nebulosidades de
los proyectos de ley que ha estudiado y nadería. Casi todas las industrias manu- SI esta patria nuestra fuera Francia, y el eualqu.er orden.
preparado el Instituto podremos deducir factureras transforman productos que no señor Benavente, el señor Rusiñol, el señor
también su naturaleza doctrinaria y bu- pasan al consumo inmediatamente. Kn to- Linares Rivas fueran Víctor Hugo, no podía En eata Naturaleza que percibimos no
ró rática, su influencia altamente pertur- das ellas, por esa razón, es posible la su- deparárseles mejor ocasión para dejarle ta- existe ningún punto del espacio desde el
badora para el ti a bajo y la paz pública presión del trabajo nocturno. En cambio
mañito al autor de Le Roi s'amwe con escri- cual se nos muestre «simultánea». Exis-
bir El Puetílo ee divierte. ten tantas «-Naturalezas» relativas como
en España. existen otras industrias que elaboran ar- Y no se divierte precisamente con espectá- puntos escojamos de observación.
Dejemos aparte una serie de leyes de tículos que deben ser consumidos no ya culos más ó írtenos intelectuales, sino llenan- Situémonos en la Tierra, conforme en
carácter social, pero que no afectan á la en dias, en horas fijadas de antemano. En do los cinematógrafos, los circos taurinos y
ella ya estamos, y no compliquemos el ra-
organización y reglamentación del traba- este caso se encuentra la fabricación de los teatros con funciones exclusivamente vi-
jo, tales como contrato de aprendizaje, pan; las tahonas trabajan de noche para suales. Aquello de: '(Lejos de nosotros la fatal ciocinio atendiendo á sus movimientos. En
ley de la silla, ley de conciliación y arbi- que los consumidores puedan comer el pa- manía de pensar» como le decían á Fernando la imposibidad de concretar una posición
traje, que son completamente inocuas, necillo á primera hora de Ja mañana y VII los catedráticos de Cervera ha venido á absoluta de reposo, supongamos que por
ser fot norma de nuestro público. unos instantes se detiene en su movimien-
pero visten, ó la de casas baratas, que es pan tierno en las comidas. En las plazas de toros de Sevilla y de Ma- to de traslación y que también se detiene
también e r a gran vaciedad, pues todos Si la población en vez de trabajar de drid llenos enormes ante el atractivo de una el movimiento de arrastre de todo el sis-
sabemos que con ella no se ha de re- día y descansar de noche invirtiera la faematsuperjor; en las Arenas de Barcelona, tema solar por entre las estrellas. Es-
solver poco ni mucho el gran problema de costumbre general, entonces las panade- idem de lienzo, ante la espectativa de una bue-
te Universo que contemplamos ¿es el Uni-
la habitación, ó !a ley del Instituto de rías tendrían que trabajar de día para que na tarde de hule (alusión al que se pone en las
Previsión Nacional, copiada de la institu- pudiera haber pan tierno por la noche. camas de los heridos) con unos tarazas tre- * erso de este instante, es el Universo de
ción caalana «Cajj de Pensiones para la Pues bien, á los señores del Instituto de mendos y unos novilleros inexpertos, sin per- ahora? No. Este «ahora» sólo es aplicable
Vejez», con la diferencia de que la Caja Reformas Sociales se les ocurrió cómo me- juicio de ser los curiosos furibundos abolicio- á nosotros. Hay tantos «ahoras» como as-
nistas de la pena de muerte y peticionarios de tros brillan en el Cielo. En este «aho-
tiene vida propia, y el Instituto Nacional dida de supresión del trabajo nocturno co- indultos para toda laya de asesinos y parrici- ra» relativo terrestre observamos , por
de previsión, á pesar de toda la protec- menzar por la panadería. das. ej'emplo, la imagen de Sirio, correspon-
ción del Estado, vive excusivamente de No nos extrañemos, sin embargo, de lo que
las i-ub"enciones y del favor oficial. Las sin El proyecte se elaboró en el año 1911,
duda como repercusión de la campaña pasa* Ya se sabe que en este país rige el prin- dit nte á 10 año-* antes de nuestro «ahora»;
la de las Pléyadas, á 200 años antes; ve-
operaciones que hace para el público son que se hizo cipio de que á las penas, puñaiás. Nunca,
contadas, pero en cambio existen magni- en Francia durando loa afioa ni siquiera hoy, por más que digamos, se mos- mos Júpiter uonde estaba 30 minutos an-
ficas oñcinaa y buen número de emplea- 1909 y 1910 para suprimir el trabajo noc-
turno en la industria de la panificación.
tró tan divertida España como en el siglo
XVII, cuando corríamos desbocados al despe-
tes de «ahora»; vemos las mareas oceáni-
cas obedecer posteriormente á ios «ahoras»
dos. Pero á pesar de la gran fuerza que tienen ñadero del que no hemos vuelto ya á salir. relativos del Sol y de la Luna. Todos los
Y vamos á las leyes que ha preparado en el Parlamento francés los partidos ra- En vez de Ceriñola y Garellano, Esquirós y objetos que nos rodean, todo lo que senti-
el Instituto que afectan á la organización dical-socialista y socialista, el público de Pavia, Muhlbcrg y Otumba, San Quintín y mos, todo lo que actúa á nuestro alrede-
del trabajo. París, que no se conformaba con comer el Gravelinas, Gembloux y Amberes, Lepanto y dor nada es originariamente simultáneo
Túnez, sucedíanse Monjuich, Montesclaros,
Contrato de Trabajo.—El primer pro- pan duro, consecuencia que se sigue de la Montmeló, Rocroy, Lens, las Dunas, Estre- con nuestro «ahora», y á nuestras percep-
yecto fue dado al púhi co en mayo ae 1905, supresión del trabajo nocturno, reaccionó moz; firmábamos los humillantes tratados de ciones se manifiestan tantos «tiempos lo-
hace la friolera <'.Q diez años. Lo han pre- tan fuertemente contra el proyecto, que Munster, de los Pirineos, de Nimega, de Ris- cales» como puntos de energía puedan
sentado a las Cortes los sigu entes minis- lo hizo naufragar antes de llegar á su dis- wiek; perdíamos las Flandes francesa y belga, existir por el espacio.
tros de la Gobernación: Don Bernabé Dá- cusión. el Rosellón, el Franco Condado, Jamaica, in-
Al contrario; nuestro «ahora», es para
vila, legislatura de 1906; don JuanLacier- numerab'tes trozos de colonias; jamás hubo
Nosotros que, repito, vestimos en estas tanto jolgorio; jamás nos divertimos tanto. Sirio un «futuro» de 10 años, es decir, has-
va, legisla tm a de i90«; don Fernando Me- cuestiones á la última moda, tenemos el ¡Más valientes, aunque zurrados, que nosotros! ta que el rayo luminoso terrestre que parte
rino, legislatura del año 1910; finalmente, proyecto de ley antes aludido pendiente Si no teníamos un político, ni un general, en estos in-tantes de nuestro planeta lle-
e> señorHánebez Guerra reprodujo el pro- de discusión del Congreso de los Diputa- ni un hacendista contábamos con Velázquez ¡4ue á aquella fulgurante estrella; en ge-
yecto el año pasado. dos, y es de esperar no llegue á sor apro- y Muríllo y sobre todo con una legión de co- neial todos los «ahoras» de nuestro «tiem-
Diez aíioa de trasiego parlamentario bada una ley que tantos perjuicios y mo- mediógrafos y comediantes, de farsantes y po local» son «futuros» para loa tiempos
sin poder ser aprobado. Y es que no hay lestias había de causar al público y que danzantes que era una bendición. ¿Qué se nos locales de todos los demás puntos del es-
por dónde coger el tal proyecto, que pa- probablemente tampoco se cumpliría. daba no tener soldados, ni barcos, ni dinero, pacio.
rece d ctado para otro planeta, y no ha ni pan, si contábamos con Lope y Calderón
Pero donde el Instituto de Reformas So- que nos presentaban como unos Cides, si nos ¿Es que el «tiempo local» de Sirio es
habido medio de obteaer los votos, á pe- ciales ha dado la prueba más ciara y pa- reíamos tanto, aunque sin cenar, con los en- anterior ó posterior en absoluto al de la
s;ir del buen d-^seo de todos los ministros tente de su inutilidad, es en la cuestión tremeses y los saínetes, con las romerías y los Tierra? En absoluto, no ea anterior ni pos-
de la Gobernación de complacer al Insti- promovida por la hualga de los hiladores juegos de toros, las jácaras y los encarama- terior. Es anterior «relativamente» a la
tuto y no obs ante la docilidad tradicional y tejedores, en julio y agosto de 1912, en nes, las seguidillas y tas procesiones? Tierra, y el «presente» de la Tierra es
de nuestras mayorías parlamentarias. Barcelona, que dio lugar al R. D. deí so- Así éramos y así somos. Nada nos importa «futuro» relativamente á Sirio. Ni el habi-
Puea este proyecto de ley es el que tie- fior Alba regulando la jornada en la in- que nos quiten ésto, lo otro y lo de más allá, tante de la Tierra ni el habitante de Sirio
ne más mig;*s. >egún su nombre, parece dustria textil. pues nunca podrán quitarnos hy baílao. ¡Ven-
ga lo que quiera! ¿Santiago? ¿Cavile? ¿Ouién podrán establecer de ningún modo una
qi-e debería tener por objeto recular las Recordarán nuestros lectores qué la sabe mañana? ¡Y quél prioridad absoluta acerca de sus añoras.
relaciones jurídicas entre el que contrata publicación de aquella disposición íué ob- Por algo decimos: ¡Ancha Castilla! ¡Ruede Y no se crea que al exponer este con-
j; el que presta su trabajo, mediante una jeto de grandes discusiones entre loa pa- la bola! ¡Viva la gresca! ¡Y el que venga atrás cepto relativo del tiempo pretenda expli-
remuneración. Bueno, pues eso es lo de tronos y aun dentro del elemento obrero. que arree! car, de acuerdo con las primeras ideas de
menos en ese proyecto. Los sociólogos del Pero el caso es que terminó la huelga en ¡Vaya una grada gobernar con un pueblo Lorentz y Fitzgerald, el resul'ado negati-
Instituto, con malicia un poco infantil, Barcelona y pueblos del llano, aceptándo- así! vo de las ex. eiiencias de Micbelson y
por medio de una ingeniosa combinación, se por las dos partes la jornada de tres CUALQUIERA
otros físicos sobre la velocidad de la luz
introdujeron en los preceptos de la ley mil horas al año y dándose determinada en relación con la dirección y sentido del
ima serie de disposiciones que afectan á interpretación á la disposición guberna- movimiento de traslación de la Tierra.
la organización del trabajo de conformi- mental, desde luego de acuerdo también COMENTARIOS CIENTÍFICOS Conforme indiqué en mi anterior articulo,
dad con los cánones del más » uro socia- con el gobernador civil de la provincia, considero que lo más plausible os admitir
lismo de hace veinte anos. Porque, eso sí, que lo era entonces el señor Francos Ro- los dos postulados de Einstein, que, por
nuestro Instituto copia del extranjero, y dríguez.
por eso minino no anda nunca ve.-tido á la
Alp más solre e! prácio de la relalMaS consideraciones de carácterfilosófico,pue-
den transformarse en verdades lógicas,
ú tima moda: va á la penúltima ó ante- decreto En el preámbulo del antes citado real En el artfcuío que últimamente tuve el
se decía textualmente: «El pro- honor de publicar en estas páginas me llevándonos á la conclusión radical, sin
penúltima. yecto que el ministro que suscribe tiene ocupé en los principios fundamentales de atenuantes ni paliativos, que el famoso
La malicia á que me refería está en lo el honor de someter á la regia firma, no la teoría de la relatividad, teoría que, é «éter», que en el fon Jo no ha dempeñado
siguiente: en un artículo de la ley se dice: es sino leal y casi automático desarrollo, mi entender, representa un considerable otro papel que el de sujeto del verbo on-
«fíí contrato de trabajo podrá celebrarse dentro de la legalidad española, de la fór- y definitivo progreso en nuestros conoci- dular, quede suprimido en absoluto.
por escrito ó de palabra. En este último mula común entre patronos y obreros de mientos de la realidad, entendiéndose que Pero si consideraciones lógicas nos lle-
caso, cuando no puedan probarse las con- las industrias textiles.» Y en el articulado con ello no nos entregamos incondicional- van á estas conclusiones, consideraciones
diciones del mismo se entenderá celebra- se encargaba al Instituto la redacción del mente á todas las consecuencias imagina- fiaicas ó de observación convergen hacia
do con arreglo á las disposiciones de esta reglamento para el cumplimiento de la das por los creadores de dicha escuela el mismo punto. Si las experiencias de
lay». L,as disposiciones de ia ley son: la real disposición. cientíüco-filoaófica. Es indudable que es- Michelson demostraron que la traslación
jornada de ocho horas; que en la retribu- Si la nueva ley impuesta por E. D. no tas nuevas ideas penetrarán trabajosa- de la Tierra no influye lo más mínimo en
ción del trahajo por unidad del trabajo es otra cosa que la traducción de una fór- mente en la mente humana, y sucederá iaa franjas de interferencia de un foco te-
pola se atenderá á la duración del servi- mula convenida entre patronos y obreros, así por dos motivos: en primer lugar por- rrestre, experiencias que fueron el origen
cio, independientemente de la cantidad y entre tanto se estudiaba el reglamento que el asunto, en si mismo, es algo cóm- del segundo, po-tulado de Einstein, la teo-
de obra realizada, y cuando sea por medi- por el Instituto aplicábase aquí sin pro- piieado; y, en segundo lugar, por efecto ria de la aberración astronómica, cuando
da de obra be atenderá sólo á la cantidad testa alguna la nueva legalidad, con el de prejuicios» profundamente grabados en procede de un foco en movimiento con re-
y calidad de la obra y trabajo realizado, asentimiento del gobernador civil. La ta- nuestro espíritu, por ley de inercia psí- lación á la Tierra, nos demuestra que el
pagándose por pieza, trozos ó medios tro- rea encomendada al Instituto de Refor- quica. ; ter no existe (proposición del que sus-
sos, indep ndientemente del tiempo in- mas Sociales era por los mismos tan fácil La teoría relativista no ea ninguna teo- cribe).
vertido, y otras condiciones por el estilo. que más no podía ser: traducir en el arti- ría demoledora: todo lo contrario. Conser- Supongamos dos focos luminosos en re-
Lo principal, como habrá visto el lec- culado de un reglamento Jo que la prácti- va todo3 ios principios fundamentales, pe- poso relativo y sumergidos ambos en el
tor, era establecer, comoquien no qu érela ca sancionaba. ro los corrige ó amplía á partir de térmi- éter, también en reposo relativo ó en mo-
cosa, en todas las industrias la jornada de Eso es lo que hubiera hecho sin duda nos hasta ahora inatendidos. Esta teoría vimiento rectilíneo y uniforme respecto á
ocho horas y destruir el trabajo á destajo; gente poco versada en la ciencia socioló- no va á enturbiar ni un momento la me- dichos puntos, y admitamos que los ele-
por eso se dice que en la retribución por gica, los profanos. Los científicos, con un moria de aquellos excelsos genios que se mentos de onda luminosos se propagan en
unidad de trabajo, será independiente de alto espíritu fllosóflco, trataron de inter- llamaron Galileo, Néwton, Descartes, Ber- el éter con velocidad constante. Suponga-
la cantidad de obra, y cuando la retribu- pretar el texto legal, sin tener para nada nouülis, Lasrrange, Laplace. Aquellos mos, en fin, que la distancia relativa entre
ción sea por unidad de obra no se atende- en cuenta la realidad, y salió de las sec- grandes hombres conquistaron con fuerza ambos puntos sea tan grande que, prácti-
rá ai tiempo. Como si el tiempo no tuvie- ciones un proyecto de reglamento tan dis- avasalladora el primer término, el gran camente, los rayos luminosos legan para-
ra valor en la producción y el costo de la paratado, que aun después de haber su- término, de una serle rápidamente con- lelos á uno y otro punto. La propagación
isano de obra no fuera una relación entre frido profundas y radicales modificacio- vergente destinada á acercarnos indefini- de un rayo luminoso, dentro de la teoría
lis, cantidad producida por un obrero y el nes en las sesiones del pleno, aun asi, el damente á la verdad. Si aquellos hombrea ondulatoria, durante un intervalo de tiem-
tiempo empleado en obtener esa produc- gobierno no se atrevió á llevarlo á la Ga~ estuvieran en posesión de los elementos po infinitamente pequeño, puede represen-
ción. ceta, en la seguridad de que su sola publi- científicos con que hoy contamos, si vivie- tarse por una hilera de puntos figurativos
Pero hay más embuchado aún. Cuando cación había de provoear uno de loa ma- ran en nuestros tiempos ¡qué asombrosos de una fase, dotados de un movimiento
el contrato es escrito y sa fija por deter- yores y más graves conflictos sociales en. frutos recogeríamos en el campo de la rectilíneo y uniforme de propagación. Por
minado plazo, no podrá rescindirse más Cataluña; y entonces el gobierno, á mi ciencia filosófica! el principio de la relatividad, ios mismos
que por mutuo disenso ó por motivos jus- juicio, con muy buen acuerdo, acordó lle- El hombre ae ha sentido siempre muy fenómenos se observarán desde cualquie-
tificados Lo cual quieie decir que, en la var esta cuestión á las Cortea, para lo terrestre, y síerapte ha recibido con rece- ra de les dos focos en cuanto entren en
práct ea, nadie .celebrará esta clase de cual encargó al Instituto redactara un lo aquello que, al parecer, va á sacarle movimiento relativo. Si desde un foco A
eontrafos para evitarse pleitos y cuestio- proyecto de ley enteramente nuevo. de la plácida somnolencia intelectual en obaei varaos el fenómeno clásico de la abe-
nes. Pero añade la ley: cuando se trata de Y así estamos; el Instituto está traba- que vivía. Es preciso convencernos, con rración de Bradley, nos seiá imposible
contratos celebrados por la Administra- jando actualmente en este proyecto, lo serenidad y firmeza, de nuestra misión y decir si ésta aberración es debida á que
ción del Estado ó á nombre de ésta, los cual es motivo más que suficiente para da nuestra representación, no en la Tie- el foco A, en que estamos, se mueve de
contratos se ajustarán siempre por tiempo que se echen á temblar todos IOB interesa- rra, de esta Tierra, de la que creemos ser derecha á izquierda, con relación á B, ó
apara objeto determinado, es decir, no se- dos en la industria textil, patronos y obre- los dueños absolutos, sino de nuestra re- si es el foco B el que se mueve de izquier-
rán resésndiblee. La duración de la jorna- ros, porque ahora no tiene el Instituto ni presentación en el Universo, como sim- da á derecha respecto á A. El observador
da será de .ocho horas; los salarios se fija- la pauta del R. D., ni, debido á las anor- ples habitantes « relativos » del mismo. situado en B haría el miarno raciocinio.
rán con arréalo á los informes pedidos á los males circunstancias creadas por la gue- Tengumoa suficiente valor para mirar la Por lo demás, este mismo res jltado ob-
técnicos y á las Asociaciones obreras, y fi- rra, precedentes extranjeros da donde co- realidad cara á cara y estudiémosos fría- tendríamos construyendo el frente de on-
nalmente los obreros al cabo de veinte piar. Será un proyecto completamente mente á nosotros mismos. Con debilidad y da para el foco A ó para el foco B. Ahora,
años áe trabajos ea fábricas, talleras ó original, y habrá que verlo. No quedaría apasionamientos triviales, jamás se dará bien; cuando observamos una estrella, BÓ~