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Mariano Matamoros

(Mariano Matamoros y Guridi; México, 1770 - Morelia, 1814) Sacerdote y patriota


mexicano que luchó por la independencia a las órdenes de José María Morelos. Mariano
Matamoros siguió estudios de bachiller en artes y teología y se ordenó presbítero en
1796. Ejerció como párroco en la capital virreinal y en Jantetelco (actual estado de
Morelos); fue en esta ciudad donde, en 1811, se dictó contra él orden de búsqueda y
captura como sospechoso de promover la causa independentista.

Tras lograr huir, en diciembre de 1811 se unió en Izúcar (actualmente Izúcar de


Matamoros, en Puebla) a las tropas insurgentes lideradas por José María Morelos. El
propio Morelos lo nombró coronel un mes después. Al mando de sus tropas,
Matamoros conquistó en febrero de 1812 la ciudad de Cuautla y la defendió del cerco
realista.

En noviembre de 1812, ya como lugarteniente de Morelos, se distinguió en la toma de


Oaxaca y, en junio de 1813 Morelos lo ascendió a general. Matamoros derrotó en
Tonalá y en San Agustín del Palmar a las tropas realistas. El 23 de diciembre de 1813
atacó la ciudad de Valladolid (actual Morelia), pero se vio obligado a retirar a sus
hombres.

Perseguido por los soldados de Ciriaco de Llano y Agustín de Iturbide (que era por
entonces militar realista), fue capturado en Puruarán (Michoacán) el 5 de enero de
1814 y fusilado en Valladolid un mes después, a pesar de la oferta de Morelos de
intercambiarlo por doscientos prisioneros realistas.
Juan Aldama

(San Miguel el Grande, actual México, hacia 1769 - Chihuahua, id., 1811) Patriota mexicano.
Miembro de una hacendada familia criolla, siguió la carrera militar en el ejército español y llegó a
ser capitán de caballería del Regimiento de la Reina.

Sin embargo, la injusticia del sistema mercantilista español, que impedía el comercio de México
con cualquier otro país que no fuera España, y la marginación de los criollos de los altos cargos
de la administración colonial y del mando del ejército, en manos exclusivamente de españoles
llegados de la península Ibérica, convencieron a Juan Aldama de la necesidad de rebelarse
contra la metrópoli, ideal compartido por la mayor parte de los miembros de la aristocracia
criolla mexicana.

Como su hermano Ignacio Aldama, tomó parte en la conspiración de Valladolid (1809) y en las
juntas secretas de Querétaro y de San Miguel (1810). Partidario del levantamiento dirigido por el
curaMiguel Hidalgo, quien, el 16 de septiembre de 1810, proclamó la independencia de México,
Juan Aldama asumió la dirección militar de los sublevados, con el grado de teniente general.
Participó en la batalla de Monte de las Cruces y en el asalto de Guanajuato.

A pesar de las victorias iniciales, la primera revuelta secesionista mexicana pronto comenzó a
debilitarse a causa de la superioridad militar de las tropas españolas. En efecto, los insurrectos,
mal armados y poco disciplinados, fueron derrotados por el ejército realista de Calleja en Aculco
(7 de noviembre de 1810) y en Puente de Calderón (16 de enero de 1811).

Ante la imposibilidad de continuar el avance sobre Ciudad de México, Juan Aldama decidió
retirarse hacia el norte, pero fue hecho prisionero por los españoles en Acatita de Baján, junto
con otros líderes revolucionarios, como Ignacio María de Allende. Acusados de traición, todos
ellos fueron fusilados en Chihuahua, el 26 de junio de 1811.
Miguel Hidalgo y Costilla

Hidalgo nació en la hacienda de San Diego de Corralejo, Pénjamo, Guanajuato, el 8 de mayo de


1753. Fue el hijo segundo de Don Cristóbal Hidalgo y Costilla y de Doña Ana María de Gallaga.
Cursó estudios en el Colegio de San Nicolás, donde llegó a ser rector, en la ciudad de Valladolid
(actual Morelia).

En el año 1778 fue ordenado sacerdote y en 1803 haciéndose cargo de la parroquia de Dolores,
en Guanajuato. Se preocupó en mejorar las condiciones de sus feligreses, casi todos indígenas,
enseñándoles a cultivar viñedos, la cría de abejas y a dirigir pequeñas industrias de loza y
ladrillos. En 1809 Hidalgo se unió a una sociedad secreta formada en Valladolid cuyo fin era
reunir un congreso, para gobernar la Nueva España en nombre del rey Fernando VII, preso de
Napoleón y, en su caso, obtener la independencia del país. Descubiertos los conjurados, la
insurrección se trasladó a Querétaro donde Hidalgo se reunió con Ignacio Allende.

El 16 de septiembre de 1810, llevando un estandarte con la imagen de la Virgen de Guadalupe,


patrona de México, Hidalgo lanzó el llamado grito de Dolores que inició la revuelta y,
acompañado de Allende, consiguió reunir un ejército formado por más de 40.000 mexicanos.
Tomaron Guanajuato y Guadalajara, pero no consiguieron llegar a la ciudad de México. El día 11
de enero de 1811 fue derrotado cerca de Guadalajara por un contingente de soldados realistas.
Hidalgo escapó hacia Aguascalientes y Zacatecas, pero fue capturado y condenado a muerte. Su
cabeza, junto con la de Allende y otros insurgentes se exhibió, como castigo, en la alhóndiga de
Granaditas de Guanajuato. Tras el establecimiento de la República Mexicana, en 1824, se le
reconoció como primer insurgente y padre de la patria. El estado de Hidalgo lleva su nombre y la
ciudad de Dolores pasó a llamarse Dolores Hidalgo en su honor. El 16 de septiembre, día en que
proclamó su rebelión, se celebra en México el Día de la Independencia.

Su último día ha sido descrito así: "Vuelto a su prisión, le sirvieron un desayuno de chocolate, y
habiéndole tomado, suplicó que en vez de agua se le sirviese un vaso de leche, que apuró con
extraordinaria muestra de apetecería y gustaría. Un momento después se le dio aviso de que era
llegada la hora de marchar al suplicio; lo oyó sin alteración, se puso en pie y manifestó estar
pronto a marchar. Salió, en efecto, del odioso cubo en donde estaba, y habiendo avanzado
quince o veinte pasos de él, se paró por un momento, porque el oficial de la guardia le había
preguntado si alguna cosa se le ofrecía que disponer por último; a esto contestó que sí, que
quería que le trajesen unos dulces que había dejado en sus almohadas: los trajeron en efecto, y
habiéndoles distribuido entre los mismos soldados que debían hacerle fuego y marchaban a su
espalda, los alentó y confortó con su perdón y sus más dulces palabras para que cumpliesen con
su oficio; y como sabía muy bien que se había mandado que no disparasen sobre su cabeza, y
temía padecer mucho, porque aún era la hora del crepúsculo y no se veían claramente los
objetos, concluyó diciendo: "La mano derecha que pondré sobre mi pecho, será, hijos míos, el
blanco seguro a que habéis de dirigiros".
Mariano Abasolo

Mariano Abasolo, nació en el año de 1783. En el poblado de Dolores perteneciente al Estado de


Guanajuato. Su nombre completo fue José Mariano de Abasolo. Era Capitán del ejército
denominado “Dragones de la Reina”. Sin embargo como los planes de los insurgentes eran
derrocar al gobierno virreinal y por el ende el español. Militares de alto rango, entre ellos
Mariano Abasolo, estaban decididos a efectuar la conspiración. Siendo continuada hasta el mes
de diciembre del año 1809. Fue perseguido ya que el Virrey se entera que un grupo de criollo
realizaban reuniones clandestinas. Y aunque Mariano Abasolo y Allende, fueron privados de su
libertad, posteriormente fueron liberados, lo que no fue impedimento para volver a reunirse en
privado. Aunque tuvieron que cambiar el lugar de reuniones. De la capital cambiaron a la ciudad
de Querétaro, siendo específicamente en la casa del matrimonio Miguel Domínguez y Josefa
Ortiz de Domínguez. Cabe resaltar que en esa reunión fue Allende quien invito a Mariano
Abasolo, y también lo hizo con Juan Aldama y Joaquín Arias quien se convertiría en un delator,
por traicionar y revelar estas reuniones. Mariano Abasolo, no participo en la lucha, sin embargo,
como poseía mucho dinero si financiaba la lucha armada. Y como acción también destacable, fue
cuando el 15 de septiembre de 1810, por ordenes del Cura Hidalgo, se toma a la tarea con la
ayuda de un pequeño ejército, de robar armas y municiones, para ser distribuidas entre los
insurgentes. Llego a ser nombrado Capitán General, cuando tomo la ciudad de Celaya. En él
años de 1811, después de dirigirse al norte del país, con la intención de llegar a los Estados
Unidos para solicitar el apoyo del gobierno. Fueron capturados los insurgentes Hidalgo, Allende y
por supuesto Mariano Abasolo. Todos los demás fueron condenados a morir fusilados y luego
decapitados y mostradas sus cabezas como ejemplo y reprimenda para lo que continuaran en la
lucha Pero en cuanto a Mariano Abasolo, le fue perdonada la vida y trasladado a España. Esto se
debió a la oportuna intervención de su esposa, ya que ella pertenecía a una familia que era
poderosa al tener relaciones con españoles de la Nueva España. Y aunque Abasolo no murió
como los insurgentes. Fue encerrado en los calabozos del Castillo de Santa Catalina, localizado
en Cádiz, España. Siendo mantenido recluido hasta que murió un |4 de abril del año 1816.
Josefa Ortiz de Domínguez

María Josefa Crescencia Ortiz Téllez- Girón mejor conocida como Doña Josefa Ortiz de Domínguez o la
Corregidora, (19 de abril de 17731 2 - Ciudad de México, 2 de marzo de 1829), fue insurgente de la
Independencia de México y esposa del corregidor de Querétaro, Miguel Domínguez. Después de contraer
matrimonio con el Corregidor Miguel Domínguez y vivir en Querétaro fue una pieza clave para el inicio de la
lucha de Independencia de México que encabezó el cura Miguel Hidalgo y Costilla en Dolores. Fue una de las
participantes en la conspiración de Querétaro. Sus padres fueron Pedro Ortiz –capitán del regimiento de Los
Verdes y Manuela. Nació en La Nueva Valladolid (hoy Morelia). Su padre fue asesinado en su deber, cuando
Josefa era apenas una niña. Su madre murió poco tiempo después. De esta suerte, la que sería Corregidora
de Querétaro quedó a cargo de su hermana mayor, María Sotero Ortiz, quien apoyó a Josefa para ingresar al
prestigiado Colegio de las Vizcaínas en la ciudad de México. Se casó con Miguel Domínguez, visitante
frecuente del colegio, en el año de 1791. En 1802 Miguel Domínguez fue promovido por el virrey de Nueva
España al cargo de Corregidor de la ciudad de Santiago de Querétaro. Doña Josefa se identificaba con el
abuso sufrido por la comunidad de criollos por parte de los gachupines, tal como llamaban a los españoles
nacidos en la península: ella misma era una criolla. Los criollos eran considerados como ciudadanos de
segunda clase por el régimen colonial, en virtud de haber nacido en la Nueva España (una colonia) y no en la
metrópoli. Por ello, eran relegados a puestos de segundo nivel en la administración pública del virreinato.
Este hecho creó un gran descontento con el paso de los años, y los criollos comenzaron a organizarse en
grupos literarios donde se difundían las ideas de la Ilustración, prohibidas por la Iglesia Católica. Doña Josefa
se integró en una de estas sociedades, y convenció a su esposo tiempo después, de integrarse también a
ella.

Después de la planificación, los rebeldes estaban listos para levantarse en armas el primero de octubre de
1810. Sin embargo, el 13 de septiembre fueron descubiertos por un infiltrado, que informó a las autoridades
del virreinato de las actividades del grupo literario de Querétaro. El corregidor Miguel Domínguez fue
obligado a conducir un cateo en las casas de la ciudad, con el propósito de capturar a los líderes insurgentes.
Para protegerla, encerró a la corregidora en un cuarto bajo llave. No obstante lo anterior, Josefa Ortiz de
Domínguez pudo advertir al cura de Dolores Miguel Hidalgo y Costilla, haciendo sonar uno de sus zapatos
contra el suelo, el alcalde Ignacio Pérez escuchó el llamado y bajo mandato de ella advirtió al cura del pueblo
de Dolores, en Guanajuato, que la conspiración había sido descubierta, razón por lo cual Miguel Hidalgo y
Costilla, el párroco de Dolores, convocó al pueblo a levantarse en armas durante la misa patronal del pueblo,
en la madrugada del 16 de septiembre de 1810, con lo que dio inicio la guerra por la Independencia de
México.

Según el historiador Alejandro Villaseñor, en su libro Biografía de los héroes y caudillos de la independencia,
Julián Villagrán apresó al oidor Collado que regresaba a México después de haber dado causa a los
conspiradores, entre los presos se encontraba Doña Josefa, que quedó libre en cumplimiento a lo pactado
entre Julián Villagrán y el oidor del rey Collado[cita requerida]. Falleció en la Ciudad de México el 2 de marzo
de 1829, víctima de una pleuresía. Por sus acciones y su influencia en el desarrollo de los hechos previos al
inicio de la Guerra de Independencia y sobre todo por ser el personaje fundamental quien propició el inicio
de esta gesta, se le ha llegado a considerar como Madre de la Patria3 . Actualmente sus restos mortales
descansan en el Panteón de los Queretanos Ilustres, en la ciudad de Santiago de Querétaro.
Vicente Guerrero

Militar y revolucionario mexicano (Tixtla, actual Guerrero, 1783 - Cuilapan, 1831). Vicente
Guerrero provenía de una familia de campesinos y arrieros de origen mestizo.

En 1811 tuvo contacto con Hermenegildo Galeana, quien lo convenció para que se uniera al
movimiento independentista, pues había sido enviado por José María Morelos para tomar Taxco.
Morelos reconoció los méritos de Guerrero y le otorgó el grado de capitán, ordenándole
instruirse en el manejo de las armas, fabricación de pólvora, estrategias de guerra, etc.

En 1812 tomó parte en la conquista de Oaxaca, y de nuevo por su demostración continua de


valor fue ascendido a teniente coronel. Comisionado por Morelos para que reforzara la zona
costera del sur, Vicente Guerrero conquistó Puerto Escondido, Santa Cruz de Huatulco y participó
en la toma de Acapulco.

En 1814, Guerrero y su ejército escoltaron a los miembros del Congreso a Tlacotepec para darles
seguridad, y después fue enviado a la mixteca como apoyo a las fuerzas insurgentes de Juan N.
Rosáins y Ramón Sesma. Su táctica consistía en ataques sorpresivos y rápidos, lo cual le dio
gran fama por su efectividad.

En 1815, con la aprehensión y fusilamiento de Morelos, Guerrero se replegó a la sierra del Sur.
Los jefes insurgentes Rosáins y Sesma aceptaron el indulto del gobierno. El virrey Apodaca
intentó coaccionar a Guerrero, valiéndose de su padre, para que también lo aceptara él, pero se
negó. En 1818 Guerrero, reconocido como general en jefe del ejército del Sur, mantenía
contacto con Pedro Ascencio, en la zona de Iguala y Taxco.

A finales de 1820 el coronel Agustín Iturbide fue designado por el virrey para que pusiera fin a la
insurgencia, pero Iturbide se pasó del lado insurgente y redactó el llamado Plan de Iguala
(1821), integrado por una proclama de independencia y un plan para el establecimiento de un
Gobierno mexicano.

Cuando Iturbide se coronó emperador de México, Guerrero tomó las armas para derrocarlo.
Después apoyó incondicionalmente al presidente Guadalupe Victoria y se afilió a la logia
masónica yorkina. En 1829, Vicente Guerrero fue nombrado presidente constitucional pero,
destituido a los pocos meses, se enemistó con Anastasio Bustamante, a quien al parecer mandó
asesinar. Tras sufrir una traición, Guerrero fue fusilado en Cuilapan.
Agustín de Iturbide

(Valladolid, actual México, 1783 - Padilla, id., 1824) Militar y polítco mexicano. Hijo de un
terrateniente español y una criolla noble, Agustín de Iturbide se enroló en el ejército realista a la
edad de catorce años. Se negó a participar en la insurrección contra los españoles, dirigida por
el cura Hidalgo, y defendió la ciudad de Valladolid contra las fuerzas revolucionarias; su notable
actuación le valió el ascenso a capitán.

Con este nuevo grado, Agustín de Iturbide combatió a las guerrillas indígenas, y acabó por
capturar a Albino Licéaga y Rayón, logro que le valió un nuevo ascenso. Posteriormente, fue
nombrado comandante general de la provincia de Guanajuato, donde se distinguió por su
implacable persecución de los rebeldes. Diversas acusaciones (abuso de autoridad y
malversación) propiciaron que el virrey Calleja lo destituyera, pero fue absuelto de todos los
cargos gracias al apoyo del auditor Bataller.

Con treinta y siete años fue nombrado comandante general del Sur y se le encomendó la tarea
de sofocar la insurrección de Guerrero, una de las últimas que continuaban en liza. Al no
conseguirlo, se reunió con éste y, juntos, presentaron el denomindo Plan de Iguala, en el que se
proclamaban tres garantías: la independencia de México, la igualdad de derechos para españoles
y criollos y, por último, la supremacía de la Iglesia Católica. Rápidamente, el ejército trigarante
pasó a dominar todo el país. En vista de ello, el nuevo representante del rey de España, Juan
O'Donojú, firmó el tratado de Córdoba, por el que se reconocía la independencia de México.

Un año más tarde, Iturbide se autoproclamó emperador (Agustín I), si bien muy pronto hubo de
enfrentarse a una conspiración de carácter republicano. Decidió entonces disolver el Congreso y
nombró una Junta que actuaba por completo a su servicio. En contra de estas medidas, el
gobernador de Veracruz, el general Santa Anna, resolvió proclamar la República, e
inmediatamente recibió el apoyo de otros generales, e incluso de las tropas que en principio
debían acabar con la revuelta. Por último, Iturbide se vio obligado a abdicar. Se exilió en Europa
(1823) y un año después volvió a su país, ignorante de que allí había sido condenado a muerte.
Detenido a su llegada, fue fusilado a la edad de cuarenta y un años.
José María Morelos y Pavón

José María Morelos y Pavón (Valladolid, Michoacán, 30 de septiembre de 1765 - Ecatepec,


Estado de México, 22 de diciembre de 1815) fue sacerdote, militar insurgente y patriota
mexicano, que organizó y fue el artífice de la segunda etapa (1811-1815) de la Guerra de
Independencia de México.

Nació en Valladolid, y estudió durante los primeros años de su vida con su abuelo materno. En
1789, entró al seminario de Valladolid, donde se graduó en 1795. En 1799, fue nombrado cura
de Carácuaro, donde permaneció hasta 1810.

Fue comisionado por Miguel Hidalgo, el 20 de octubre de 1810 en Charo (Michoacán), como jefe
insurgente en el sur de México, encargado de tomar ciudades importantes y cortar la
comunicación con los países de Asia Oriental, y su principal encomienda fue tomar el puerto de
Acapulco, considerado estratégico para la comunicación de la Nueva España.

Desde 1811 y hasta el inicio de su declive militar en 1814, Morelos, ayudado de muchos
lugartenientes, logró conquistar la mayor parte del sur del país y parte del centro, en la región
del actual estado de Morelos, donde se desarrolló, entre el 9 de febrero y el 2 de mayo de 1812,
su acción militar más famosa, el Sitio de Cuautla, en la ciudad homónima, que lo convirtió en el
principal enemigo del ejército realista.

También organizó el Congreso de Anáhuac, el primer cuerpo legislativo de la historia mexicana,


cuyas sesiones tuvieron lugar en Chilpancingo (actual Estado de Guerrero) durante septiembre y
noviembre de 1813. Allí Morelos presentó sus Sentimientos de la Nación. El Congreso aprobó el
22 de octubre de 1814, en Apatzingán, la primera Constitución de México, aunque Morelos
después declaró que "es mala por impracticable".

Tras varias derrotas, fue capturado el 5 de noviembre de 1815 en Temalaca, por el coronel
Manuel de la Concha, fue juzgado por la Inquisición, y finalmente fusilado en San Cristóbal
Ecatepec, el 22 de diciembre de 1815.

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