Seminario Teológico Adventista Interamericano

Recinto UNADECA

“Cronograma del desarrollo doctrinal en la

Iglesia Adventista del Séptimo Día”

Presentado en cumplimiento parcial

de los requisitos del curso
Doctrina de la salvación
THST540

por
Eliécer Lara Guillén

Alajuela, Costa Rica

Noviembre 2017
 Desarrollos doctrinales en la iglesia adventista

Para comprender adecuadamente el desarrollo doctrinal de la iglesia

Adventista necesitamos examinar tres de los conceptos abrazados por los pioneros
adventistas a través de sus dirigentes.

1. Su visión dinámica de la “verdad presente”, 2. Su posición respecto a

establecer un conjunto de doctrinas, 3. Su visión acerca del continuo
proceso de entendimiento y maduración de los conceptos doctrinales.

2. El adventismo no nació en el vacío.

Las Raíces teológicas del Adventismo.

1. El primero de ellos es que Joseph Bates, el apóstol del sábado, especificaría que
el sábado del séptimo día, era uno de los preceptos que debían ser
restablecidos a la iglesia antes de que Jesús regresará.

2. Bates y White introdujeron el antitrinitarismo en el movimiento adventista

tomándolo del restauracionismo.

3. Otra fuente de orientación que formó parte del contexto teológico de los
primeros adventistas fue el metodismo, o movimiento weslayano (Juan Wesley
1703-1791)…Elena de White creció en la iglesia metodista, de la cual fue
expulsada. Este aceptaba plenamente la justificación por la fe como algo
momentáneo, mientras que la santificación era obra de la obra de toda la vida”

4. Una cuarta influencia, fue el deísmo: una creencia escéptica que rechaza al
cristianismo, a su creencia en los milagros y a su Biblia sobrenatural. El deísmo
utiliza la razón humana en vez de la Biblia, como su autoridad suprema. Esto es
algo importante para poder entender la herencia teológica adventista, ya que
Guillermo Miller fue deísta.

5. El quinto elemento que formo parte del ambiente teológico del adventismo de
los primeros años fue la influencia puritana que moldeo en gran medida el
mundo de los norteamericanos del siglo XIX. Los puritanos no solamente
pusieron un gran énfasis en la autoridad de la Biblia, y en la obligación de los
cristianos de guardar la ley, sino que recalcaron la estricta observancia del día
de reposo (el primer día de la semana, que llamaban “día del señor” o Sabbath
en inglés y lo observaban de la misma manera que el sábado bíblico).

Resumen de la cronología del desarrollo de las creencias en la iglesia

Adventistas del Séptimo Día.

1830 Willian Miller laico bautista, comenzó a predicar algo singular acerca del
milenio. Creía que Jesús iba a regresar al principio del periodo de los mil años
descrito en Apocalipsis 20.

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1840 Habían ideas comunes entre los adventistas de fines dela década, y principios
de la siguiente… el día de reposo estaba comprendido entre las seis de la tarde
del viernes y las seis de la tarde del sábado. Era licito comer carne de cerdo y
otros animales inmundos Levítico. 11 y Deuteronomio 14.

1842 Aunque se consideraba por lo general que la teología era del dominio de doctos
eruditos, el impacto de las ideas democráticas más radicales de principios del
siglo XIX abrió las puertas para que los laicos asumieran iniciativas de
liderazgo. Esto es muy importante para el adventismo, ya que ni William Miller
ni los primeros dirigentes observadores del sábado habían estudiado teología.
Según afirmaba Miller, Dios podía conducir a los fieles hacia la verdad aunque
“no supiera ni hebreo ni griego”.

1843 24 de agosto Se usa el término “verdad presente” usado por los milleritas para
referirse al inminente regreso de Jesús. Más tarde lo emplearon para referirse
al “movimiento del séptimo mes”

1844 Octubre Crisis del Gran chasco.

1844 Teoría de “la puerta cerrada”, según la cual en octubre de 1844 habría
concluido la gracia o el tiempo de prueba, así como la misión evangelizadora de
la iglesia.

1844 El término “La verdad presente” incluía el sábado, el santuario, y otros

conceptos relacionados, que los adventistas observadores del sábado habían
descubierto.

1847 Enero José Bates uso el concepto de la verdad presente en relación a la verdad
del sábado. Aplicándolo también a la totalidad del mensaje del tercer ángel de
Apocalipsis 14.

1848 Las doctrinas básicas, las que siempre se considerarían los pilares de su fe,
también reconocían que el estudio continuado podría llevarles a una
comprensión más completa de estas “verdades”.

Rechazo de un credo formal

1850 Elena de White " Tenemos la verdad"

1852 Los pioneros adventistas no aceptan la creencia N° 2 que trata de la Trinidad,

entre ellos Joseph Bates, Jaime White. M.E. Cornell.

XIX Esa denominación había tomado la posición de que la Biblia sería su único
credo, que el carácter cristiano sería su única prueba de discipulado.
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1857 Jaime White “ La verdad presente es una verdad actual y no una verdad futura,
y que las escrituras son una lámpara que ilumina…”

1861. Cuando finalmente, más de una década después, los adventistas publicaron una
declaración de sus creencias fundamentales, con mucho cuidado anunciaron
que “no tenían artículos de fe, credo, o disciplina fuera de la Biblia”.

1869 Los fundadores de la iglesia tenían dificultades para aceptar la creencia N° 4

que sostiene que Jesús es tanto eterno como realmente Dios. Entre ellos
encontramos a J.N. Andrews, E.J. Waggoner.

1872 Se publicó un pequeño panfleto que categorizaba las creencias básicas de los
adventistas del séptimo día en 25 artículos, no para “lograr uniformidad” sino
más bien para “atender preguntas”, “para corregir falsas afirmaciones”, y “para
eliminar impresiones erróneas”. Estos 25 principios fundamentales, más tarde
reimpresos en la Review y también en Signs of the Times, constituyeron una
plataforma conveniente para analizar los desarrollos operados en la teología
adventista durante el primer cuarto de siglo formativo de la existencia
organizada de la denominación.

Conceptos trinitarios

1872 Proclamaban una creencia en “un Dios”, y “un Señor Jesucristo”, pero no había
ninguna afirmación del concepto trinitario de Dios que era común en la mayoría
de las afirmaciones de los credos cristianos.

1848 Jaime White se había referido al concepto de la Trinidad como “no bíblico”.
Loughborough, Uriah Smith, J. H. Waggoner y D. M. Canright eran sólo los más
destacados de los teólogos adventistas que concordaban con White y Bates en
que el trinitarismo era contrario al sentido común y de origen pagano.
Hombres como White, Bates y Canright objetaban cualquier concepto trinitario
que presentara a los tres miembros de la Deidad como privados de
personalidades individuales y “sin forma ni figura”. Para los intérpretes
estrictos de la Biblia tales ideas eran “nauseabundas”. Urías Smith razonaba
que las referencias bíblicas al Espíritu Santo como cuando apareció como
paloma o como lenguas de fuego mostraban que no podía ser una persona.

1850 11 de enero. Elena Afirmo “tenemos la verdad, los sabemos, alabado sea Dios”.

1891 Urías Smith él definía al Espíritu Santo como “esa emanación divina y
misteriosa por medio de la cual ellos [el Padre y el Hijo] llevan adelante su obra
grande e infinita”.

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1890. Nunca hubo un período cuando Cristo no existió, escribió ella en su biografía de
Jesús, El Deseado de todas las gentes. En cuanto al Espíritu Santo, era una
“persona” y “Dios en todo sentido”.

1890 28 de octubre Smith describió al Espíritu Santo, como una “divina influencia” y
no una “persona como el padre y el Hijo”

La expiación

1846 O. R. L. Crosier, en un artículo en el Day-Star Extra comenzó a hacer una aguda

distinción en cuanto al momento de la expiación.

1847 Joseph Bates, el apóstol del sábado, especificaría que el sábado del séptimo día,
era uno de los preceptos que debían ser restablecidos a la iglesia antes de que
Jesús regresara.

1846 14 de junio. El congreso de la Asociación General aprobó “que no se llevará a

cabo ninguna revisión del conjunto de las Creencias fundamentales, tal y como
aparecen en el Manual, excepto durante un congreso de la Asociación General

1850 Estudios adicionales del sistema levítico convencieron a Hiram Edson y a J. N.

Andrews que el comienzo del gran día anti típico de la expiación no limitaba a
quienes podrían aceptar los últimos mensajes de Dios y podrían ser cubiertos
por la sangre expiatoria de Cristo. Ellos notaron que la ofrenda regular por el
pecado continuaba aun en el décimo día del mes séptimo.

1850 Un examen de los escritos de Elena G. de White indica que durante las décadas.

1856 7 de febrero. Jaime White “cambiaria cualesquiera otras doctrinas si se

encontraran en la Biblia razones sólidas para hacerlo”.

1857 Urias Smith “Pero ni siquiera imaginamos que tenemos toda la verdad.
Confiamos que seguiremos progresando; nuestra senda se hará cada vez más
luminosa hasta que llegue el día perfecto. Por lo tanto mantengamos una
actitud inquisitiva, en búsqueda de una mayor luz, de una mayor verdad.

1858 Elena recrimino a S.N Haskell porque el se preocupaba en exceso de por el

tema de las carnes inmundas… le escribió indicándole que si él tenía la
convicción de que era impropio consumir carne de cerdo, no debía crear un
alboroto al respecto. Luego añadió…Él (Dios) enseñara a su iglesia cuál es su
deber.

1860 Sus conceptos de la expiación se ampliaron gradualmente.

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1861 8 de octubre. John Loughborough resalto lo que los pioneros adventistas
consideraban un problema de los credos. “el primer paso hacia la apostasía es
preparar un credo que nos diga en que debemos creer. El segundo, es convertir
dichos credo en un aprueba de fe. El tercero, es juzgar a los miembros sobre la
base de dicho credo. El cuarto, es llamar herejes a quienes no acepten el credo.
El quinto comenzar a perseguirlos.

Jaime White: “redactar un credo equivale a preparar las hogueras, y a cerrar

el paso a cualquier otro desarrollo futuro”. “La biblia es nuestro credo.
Rechazamos todo lo que se asemeje a un credo redactado por los hombres”
Jaime White deseaba que los adventistas se mantuvieran receptivos ante el
Señor pudiera revelarles “con el paso del tiempo”.

Los delegados del congreso votaron de manera unánime adoptar un “pacto

denominacional” en vez de un credo. “Nosotros, los abajo firmantes, nos
unimos como iglesia, bajo el nombre de Adventistas del séptimo Día, pactando
guardar los mandamientos de Dios, y la fe de Jesús.

1864 Elena G. de White Se refirió al sacrificio de Cristo en la cruz como la expiación

del pecado; y su obra en el santuario celestial “derramaba sobre sus discípulos
los beneficios de esa expiación”.

1872 La primera declaración de Urías Smith sobre las creencias con algún tipo de
aceptación oficial.

1890 Elena de White “La verdad es algo dinámico, y debemos avanzar hacia una luz
mayor… Debemos tener una fe viva en nuestros corazones, y esforzarnos por
adquirir mayores conocimientos y una luz más brillante”

1892 Elena de White escribió “No hay excusa para que alguno tome la posición de
que no hay más verdades para ser reveladas”. Y que todas nuestras
exposiciones de las Escrituras carecen de errores. “Que ciertas doctrinas hayan
sido sostenidas como verdaderas durante años no es una prueba de que
nuestras ideas son infalibles. El tiempo no convertirá el error en verdad, y la
verdad tiene la capacidad de ser imparcial. Ninguna doctrina verdadera
perderá algo por una investigación cuidadosa” (OP 35)

1894 7 de agosto. Elena de White “Es un hecho que tenemos la verdad, y que
debemos aferrarnos con tenacidad a nuestras creencias inconmovibles; sin
embargo, no debemos contemplar como sospechosa cualquier luz que Dios nos
envíe, y decir (realmente no vemos la necesidad de más luz en adición a las
antiguas verdades que hemos recibido y en las cuales estamos cimentados”

1903 27 de enero. Elena escribió “en el futuro un mayor discernimiento, ya que la

verdad es capaz de crecer en forma continua… Nuestro examen de la verdad es
todavía algo inconcluso. Solamente hemos cosechado unos pocos rayos de luz.

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1931 La segunda declaración o compendio de las creencias.

1980 La tercera de las declaraciones acerca de las creencias. El conjunto de las 27

Creencias Fundamentales adoptado en el congreso de la asociación General de
1980. Con un adición de la creencia N° 11 en el congreso de 2005.

Desde principios de los años treinta hasta 1980, apareció en los anuarios y
manuales de la iglesia una declaración de creencias.

2005 Las 28 creencias fundamentales de los adventistas del séptimo día según el
manual de iglesia edición 2005.

“Estas declaraciones podrán ser sometidas a revisión en un Congreso de la

Asociación General, cuando el Espíritu Santo haya llevado a la iglesia a una
comprensión más completa de la verdad bíblica o se encuentren una
formulación mejor para expresar las enseñanzas de la Santa Palabra de dios”

Por lo tanto, el concepto de un cambio progresivo se ubica en el corazón de la

teología adventista.

Bibliografía.

Knight, Georges R. El Legado Adventista, Nuestra Identidad, Origen y desarrollo. . F. L.

EE. UU. : APIA Asociaicón Publicadora Interamericana, GEMA Editores, 2008.