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¿Qué es la memoria a corto plazo?

La memoria a corto plazo (MCP) se puede definir como el mecanismo de memoria que nos permite
retener una cantidad limitada de información durante un periodo corto de tiempo. La memoria a corto
plazo retiene temporalmente la información procesada, tanto si luego se desvanece, como si después
pasa a la memoria a largo plazo. Así, la memoria a corto plazo tiene dos propiedades principales: una
capacidad limitada y una duración finita.

 Capacidad de la memoria a corto plazo : Si se te pide que recuerdes una serie de 10 dígitos, lo más
probable es que recuerdes entre 5 y 9 números. Esto es porque la cantidad de información que puede
retener la memoria a corto plazo es de 7 elementos con una variación de 2, por exceso o defecto.
Naturalmente, la capacidad de la MCP es ligeramente variable, por lo que hay personas con una
capacidad aún mayor o menor.

 Duración de la memoria a corto plazo : La cantidad de tiempo que podemos retener los dígitos o la
información no es infinita. Nuestra memoria a corto plazo puede mantener la información hasta 30
segundos. No obstante, podemos ampliar el tiempo que permanece la información en nuestra MCP si
la repetimos constantemente o la dotamos de significado (por ejemplo, identificar como el número pi
el conjunto de dígitos “3 – 1 – 4 – 1 – 5 – 9...”).

¿Qué es la memoria a largo plazo?


La memoria a largo plazo (MLP) se puede definir como el mecanismo cerebral que nos permite codificar y
retener una cantidad prácticamente ilimitada de información durante un periodo largo de tiempo. Los
recuerdos que almacenamos en la memoria a largo plazo pueden durar desde unos segundos hasta varios
años.

La memoria a largo plazo resulta un elemento clave para realizar nuestras tareas cotidianas sin errores y
de forma autónoma. Este tipo de memoria hace referencia a la capacidad del cerebro para almacenar
hechos, conocimientos o destrezas y recuperar más tarde esos recuerdos. La memoria a largo plazo es
una capacidad muy amplia y compleja que implica una gran cantidad de estructuras cerebrales. Por esto
mismo, es muy sensible al daño cerebral. Afortunadamente, la práctica y el entrenamiento cognitivo
puede mejorar esta importante función cognitiva.

Si tenemos en cuenta el tiempo que permanece la información en el sistema de memoria, podemos


diferenciar la memoria sensorial, la memoria a corto plazo, la memoria de trabajo y la memoria a largo
plazo. No obstante, la memoria a largo plazo cuenta con diferentes subdivisiones:

 Memoria declarativa: Es aquella información almacenada en nuestra memoria de la que podemos dar
cuenta verbalmente.
 Memoria semántica: Hace referencia al conjunto de información que poseemos acerca del mundo que
nos rodea.
 Memoria episódica: Incluye el recuerdo de los hechos concretos que hemos vivido, con una intensa
relación con el episodio de aprendizaje.
 Memoria no declarativa: Es el tipo de información que almacenamos en nuestra memoria, pero de la
que “no podemos hablar” como tal.
 Memoria procedimental: Consiste en el conjunto de información de movimientos musculares que
hemos conseguido automatizar mediante la práctica, como los hábitos y las destrezas. P
 Priming: Se refiere a la facilitación que se produce cuando activamos algún concepto en nuestro
cerebro.
 Condicionamiento clásico: Se trata de la relación entre un estímulo condicionado y una respuesta que
previamente ha sido emparejada con un estímulo incondicionado.

https://www.cognifit.com/es/habilidad-cognitiva/memoria-a-largo-plazo

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