You are on page 1of 4

CAPITAL DE TRABAJO

Se puede decir que la importancia del capital de trabajo es una inversión que realiza la
empresa en activos realizables en el corto plazo, como es el efectivo, los valores
negociables, las cuentas por cobrar y los inventarios.

El capital de trabajo es la diferencia entre los activos y las obligaciones de una empresa,
y de su correcto equilibrio y gestión depende la salud financiera de la misma.

Una buena administración de dicho capital es esencial para la operación diaria de toda
organización, pero también para su liquidez, su rentabilidad y sus planes de
crecimiento.

El capital de trabajo, que es el excedente de los activos corrientes después de pagar las
obligaciones corrientes, es lo que permite que una empresa funcione de manera correcta,
pues se utilizan para pagar insumos, salarios y las obligaciones financieras contraídas.

En el caso de los activos corrientes, nos referimos a:

Efectivo
Cuentas por cobrar
Inventarios
Valores comerciables
Pagos por adelantado

En cuanto a las obligaciones corrientes, incluyen:

Cuentas por pagar


Ingresos no percibidos
Salarios por pagar

Cuando una empresa cuenta con ingresos y activos suficientes para cubrir los gastos de
operación y las obligaciones, se dice que sus finanzas son sanas.

¿Qué necesita un negocio para operar? En principio, tener que vender. Y esta
producción de bienes o servicios requiere de gastos de operación que se deben cubrir
puntualmente, como pagos a proveedores, sueldos, publicidad, servicios, costos de
distribución, etc.

Las ventas son las que generan los ingresos, pero una buena administración financiera
de estos es lo que permite que se asignen las cantidades correctas a cada rubro y aún
queden fondos para reinvertir en el crecimiento del negocio.

Mantener una buena parte de los activos en forma líquida es una buena forma de poder
responder rápidamente a las obligaciones, y el activo más líquido es el efectivo.
Sin embargo, contar con activos, como las cuentas por cobrar, que se puedan convertir
en efectivo rápidamente mediante una transacción de factoraje, por ejemplo, ayudará a
la empresa a hacer frente a cualquier gasto imprevisto, o incluso aprovechar una
fluctuación a la baja en el precio de algún insumo.

Es así que la liquidez, la rentabilidad y, también, el crecimiento de la empresa se basa


en la buena gestión del capital.

En caso de una mala administración financiera, el resultado es la insolvencia y, quizá, la


bancarrota. Esto empieza cuando el negocio no puede hacer frente a sus pagos a
proveedores y acreedores.

Es en situaciones así cuando las empresas mal administradas recurren a préstamos que
pueden ser demasiado costosos, dado su riesgo financiero, o a vender a precios de
liquidación sus activos menos líquidos.

En ambos casos, puede ser difícil que una empresa se recupere del descalabro
financiero.

Cada empresa maneja diferente sus finanzas pues depende de su giro, su sistema de
facturación y de cobranza, y su carga de obligaciones.

El capital de trabajo es importante ya que es el recurso económico destinado al


funcionamiento inicial y permanente del negocio, que cubre el desfase natural entre el
flujo de ingresos y egresos

Los métodos para mejorar el ratio del capital de trabajo, el resultado de dividir los
activos entre las obligaciones, incluyen:

Dar un seguimiento periódico a los gastos y las deudas próximas a vencer y


planear con anticipación cómo se van a pagar.
Incrementar las utilidades promoviendo las ventas y la cobranza y reduciendo
los costos de operación o retrasando lo más posible los pagos.
Realizar operaciones financieras que permitan intercambiar deuda a corto plazo
por otra a largo plazo, liberando así fondos para invertir en la producción y, por
tanto, en la generación de utilidades.

En suma, la óptima administración de las finanzas de la empresa garantizará que logre


sus objetivos y maximice su rentabilidad. De un buen flujo de capital depende no solo el
crecimiento de tu negocio, sino también su supervivencia.

Si a todo lo expuesto sumamos que la buena gestión de este capital es determinante en


la capacidad de las Pymes para acceder a los mercados financieros, y en las tasas de
interés que puedan negociar, se refuerza el argumento de su importancia.
Si apenas estás iniciando tu negocio, no eches en saco roto esta información y
recomendaciones. Tu empresa deberá mantenerse por sus propios medios al menos
hasta que logre operar en números negros.

Si tu intención es hacerlo crecer, gestionar tu cobranza, buscar financiamiento adicional


y equilibrar los pagos a proveedores y acreedores, serán igual de importantes.

Hacer que tus ingresos alcancen para cubrir tus costos de operación y demás
obligaciones es vital, y alcanzar un equilibrio requerirá de una cuidadosa planeación
financiera.

Y no olvides el aspecto de la liquidez. Contar con el efectivo que necesites en el


momento oportuno puede ahorrarte malas decisiones financieras.
BIBLIOGRAFÍA

Baltodano, L. (2015). Recuperado el 28 de ABIRL de 2018, de


http://slideplayer.es/slide/3550220/

BASE, N. (11 de MARZO de 2017). GRUPO FINANCIERO BASE. Recuperado el 28


de ABRIL de 2018, de https://blog.bancobase.com/por-que-es-tan-importante-
el-capital-de-trabajo-para-una-empresa

GERENCIE. (24 de ABRIL de 2018). Recuperado el 28 de ABRIL de 2018, de


https://www.gerencie.com/capital-de-trabajo.html

GESTION EMPRESARIAL. (NOVIEMBRE de 2014). Recuperado el 28 de ABRIL de


2018, de http://degestionempresarial.blogspot.pe/2014/11/componentes-del-
capital-de-trabajo.html

Merino, u. P. (2009). Recuperado el 28 de ABRIL de 2018, de


https://definicion.de/capital-de-trabajo/

Rodriguez, G. (26 de JUNIO de 2011). Recuperado el 28 de ABRIL de 2018, de


https://es.slideshare.net/GeissellRodriguez/capital-de-trabajo-y-flujo-de-efectivo

You might also like