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UNIVERSIDAD NACIONAL DE

CAJAMARCA
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas
Escuela Académico Profesional de Derecho

CONCURSO DE LEYES Y
DELITOS

AUTORES:
▪ García Alcántara, Valeria Alessandra
▪ Pérez Delgado, Edgar Johan
▪ Rojas Urrutia, Leslie Rosmery
▪ Rubio Tirado, Ana Raquel

Cajamarca, Perú

2018
INTRODUCCIÓN

Según la filosofía el derecho es un fenómeno de la realidad, existe entonces una relación entre el
hombre y el sistema jurídico, no podemos prescindir del hombre en la realización del derecho
porque la humanidad es la que crea y aplica el derecho, aún más, crea y aplica a sí misma el
derecho por lo tanto el tema de concursos de delitos surge en consecuencia de una realidad social
de seres humanos que repercute en el sistema jurídico que regula a los ,mismos, creando un
fenómeno delictual complejo, en el cual el trasgresor naturalmente no se limita a infringir la norma,
una sola vez, generalmente acciona en momentos y circunstancias diferentes, ello crea la
posibilidad de una problemática jurídica ya que se infiere que se pueda infringir el Ordenamiento
Jurídico más de una vez.

La subsunción de una conducta a un tipo legal hace necesario establecer si existe una relación
entre diversos tipos aplicables (concurso de leyes), así mismo establecer si hay unidad o pluralidad
en el accionar (concurso de delitos).

Siendo ello un tema abordado por el Derecho e importante en su esencia para el mismo, la
Dogmática Jurídica, ha establecido situaciones diferentes, en las cuales aparece esta complicada
realidad social y jurídica, en modo de guía de solución, en beneficio del legislador quien brindara
leyes en favor de la búsqueda de una solución normativa, para permitir su correcta la regulación.

Estableciéndose la existencia de esta situación y la importancia de su aplicación se ubica entonces


dentro de la legislación dentro en un capítulo dedicado a la aplicación de la pena en parte general,
precisando estas normas en el sistema jurídico nacional.

Por otro lado, se encuentra en debate la ubicación sistemática de estas figuras concursales, a
través de dos tipos de posiciones, existe también una teoría dominante de integración que toma
en cuenta ambas, sin embargo, aún es parte de la discusión dogmática actual.
I. ANÁLISIS DOGMÁTICO
1.1. Concurso de delitos
1.1.1. Unidad y Pluralidad de delitos (Concurso de delitos)
En el tema de concursos de delitos se debe precisar cuando ocurre un hecho y
también cuando ocurren varios.
Cuando se muestra un hecho en varios delitos se habla de un “concurso ideal
de delitos”, pero cuando se habla de varios hechos constitutivos de varios delitos
se refiere a “concurso real de delitos”.
También se dice que el concurso de delitos es el cumulo de infracciones penales
todas cometidas por la misma persona y como agrega Maggiore (citado en
Bramont, 2000), el problema de concurso de delitos es también un problema de
concurso de personas.
Así se tiene el caso de variedad de acciones y la unidad de delitos como es el
delito continuado o el delito de masas.
Se tiene:
• Un hecho varios delitos = concurso ideal
• Varios hechos varios delitos = concurso real
• Varios hechos un delito = concurso ideal impropio
Los criterios para poder determinar la unidad del hecho son:
• Criterio finalista
Lo que se determina es la unidad de propósito en una sola dimensión.
temporal-especial. La voluntad orientada hacia una finalidad, conforme
apreciación objetiva de un observador imparcial y la experiencia de
vida. Se trató de un enfoque onto- naturalístico moderado.
• Criterio normativo:
Aquí la unidad de acción se determina a partir del tipo penal,
afirmándose el punto de vista jurídico. (Javier Villa, 1998 cita a Hans
Jescheck, 1981).
1.1.2. Concurso real
El concurso real no sugiere mayores dificultades teóricas, pues estamos ante
varios hechos o acciones, cada uno de los cuales constituyen un delito particular
e independiente, aunque puedan merecer un solo procedimiento penal (Javier
Villa, 1998, p.439).
El concurso real está recogido en el Art.50° del código penal, el cual
establece:
“Cuando concurran varios hechos punibles que deben considerarse como
otros tantos delitos independientes, se impondrá la pena del delito más
grave, debiendo el juez tener en cuenta los otros, conformidad con el
art.48°”.
Modificado por:
“Cuando concurran varios hechos punibles que deban considerarse como
otros tantos de delitos independientes, se sumaran las penas privativas de
libertad que fije el juez para cada uno de ellos hasta un máximo del doble
de la pena del delito más grave, no pudiendo exceder de 35 años. Si alguno
de estos delitos se encuentra reprimido con cadena perpetua se aplicará
únicamente esta”1
• Elementos del concurso real
o Unidad de sujeto activo. - las acciones deben ser realizadas por
el mismo sujeto.
o Pluralidad de acciones punibles. - se deben dar una pluralidad
de delitos provenientes de una pluralidad de acciones.
o Ausencia de conexión entre las acciones. - cada una de las
acciones deben ser independientes, tales acciones pueden
consistir ya sea en movimientos corporales o voluntarios (Luis
Bramont, 2000 cita a Hurtado Pozo, 1987).
o Tratamiento penal del concurso real o material. - El problema
principal del concurso real es la determinación de la pena a
aplicar.
• Tipos de concurso real
o Homogéneo: cuando los delitos que se cometen son iguales o
de la misma naturaleza.
o Heterogéneo: ocurre cuando los delitos son diferentes.

1.1.3. Concurso real retrospectivo


Está regulado en el Art. 51° del código penal, el cual señala que:

1
Artículo modificado por el Artículo 3° de la ley N°28726 del 09/05/2006.
“si después de la sentencia condenatoria se descubriese otro hecho punible
cometido antes de ella por el mismo condenado de igual o de distinta
naturaleza que merezca una pena inferior a la impuesta, cualquiera que sea
el estado en el que se encuentre, el órgano jurisdiccional o los sujetos al
proceso, solicitarán copia certificada del fallo ejecutoriado y en mérito de la
misma, el órgano jurisdiccional dictara el sobreseimiento definitivo de la
causa y ordenará archivarla. Si el hecho punible descubrimiento mereciere
una pena superior a la aplicada, el condenado será sometido a un nuevo
proceso y se impondrá la nueva pena correspondiente.”2
Modificado por:
“si después de la sentencia condenatoria se descubriese otro hecho punible
cometido antes de ella por el mismo condenado, será sometido a proceso
penal y la pena que fije el juez sumara a la anterior hasta un máximo del
doble de la pena del delito más grave, no pudiendo exceder de 35 años. Si
alguno de estos delitos se encuentra reprimido con cadena perpetua, se
aplicará únicamente ésta, sin perjuicio de fijarse la reparación civil para el
nuevo delito”.
El concurso real retrospectivo difiere del concurso real normal ya que en éste
caso no se da la simultaneidad en el juzgamiento, porque sólo después que el
sujeto activo ha sido sentenciado se descubre que había cometido otro delito.
Nos encontramos entonces ante una regla procesal básica en material de
concurso real de delitos, éste no desaparece aún en el caso de que, después
de una sentencia firme, haya que juzga a esa misma persona por otro lado,
cometido antes de esa misma condena. La circunstancia puramente ocasional
de haberse retardado el descubrimiento o el juicio del delito anterior, no quita
que el culpable se halle en aquellas circunstancias objetivas que aconsejan la
acumulación material. (Hurtado Pozo, 1987citado por Luis Bramont, 2000;
p.302)…”para la imposición de la pena en el dominado concurso retrospectivo
se debe tener en cuenta el criterio de que no debe castigarse al agente más
severamente que si se le hubiese juzgado simultáneamente por todos los delitos
cometidos”
• Supuestos

2
Ejemplo propuesto por Luis Bramont, 2000.p.298.
o Si el delito descubierto es sancionado con una pena inferior a
la impuesta, se dictará su sobreseimiento. Esta medida puede
traer serios inconvenientes porque evitaría que se investiguen
los “delitos menores”.
o Se da cuando el delito descubierto merece una pena superior
a la aplicada y esto da a un nuevo proceso donde se impondrá
la nueva pena.
1.1.4. Concurso ideal
Se manifiesta cuando una sola acción configura al mismo tiempo dos o más
delitos y está regulado en el Art. 48° del código penal, el cual establece que:
“cuando varias disposiciones son aplicables al mismo hecho se reprimirá con la
que establezca la pena más grave.
Las penas accesorias y medidas de seguridad podrán ser aplicadas, aunque
solo estén previstas en una de esas disposiciones”
Modificado por:
“Cuando varias disposiciones son aplicables al mismo hecho se reprimirá hasta
con el máximo de la pena más grave, pudiendo incrementarse esta hasta en
una cuarta parte, sin que en ningún caso pueda exceder de treinta y cinco años”
3

Es decir, esta figura se da cuando un solo hecho jurídico o acción configuran al


mismo tiempo dos o más delitos y, por lo tanto, se dañan dos o más bienes
jurídicos (Bramont, 2000, p.297).
Los autores señalan:
“El concurso ideal consiste en la comisión de varios delitos mediante un solo
acto: hay una sola acción y varios delitos” (José Rodríguez, 1979).
“El concurso ideal posibilita la adecuada consideración “pluridimensional”, así
como la apreciación exhaustiva “de una” acción, por simultanea aplicación de
diversos tipos: únicamente el conjunto de estos tipos permitirá ofrecer el
adecuado perfil de la acción (Reinhart Maurach, 1962, p.437).
• Clases de concurso ideal
o Homogéneo

3
Artículo modificado por el Artículo 3° de la ley N°28726 del 09/05/2006.
Se dice que es un concurso ideal homogéneo cuando una sola
acción tiende a configurar dos o más delitos iguales.
Ejemplo:
Un soldado dispara un rifle de alto poder y mata al mismo
tiempo a dos personas, ha cometido dos homicidios. 4
o Heterogéneo
Viene hacer un concurso ideal heterogéneo cuando se produce
una sola acción que configuran dos o más delitos diferentes.
Ejemplo:
Un hombre le da una patada a una madre gestante, produce
lesiones sobre a madre y el aborto del feto. 5
La ciencia penal ha debatido en ocasiones, aunque hoy es un
tema que no recibe tanta atención, si el concurso ideal era
mejor apreciar uno o varios delitos. (Bramont Luis cita a
Gonzalo Quintero, 1992, p.641).

1.1.5. Pluralidad de acciones y unidad de delitos


Esto se encuentra regulado en el Código Penal, Art. 49, con una modificación
establecida por la Ley N°26683:
“Cuando varias violaciones de la misma ley penal o de igual o semejante
naturaleza hubieran sido cometidas en el momento de la acción o en
momentos diversos, con actos ejecutivos de la misma resolución criminal,
serán considerados como un solo delito continuado y se sancionaran con
la pena correspondiente al más grave. Si con dichas violaciones, el agente
hubiera perjudicado a una pluralidad de personas, la pena será aumentada,
en un tercio de la máxima prevista para el delito más grave. La aplicación
de las anteriores disposiciones quedará excluida cuando resulten afectados
bienes jurídicos de naturaleza eminentemente personal pertenecientes a
sujetos distintos”
• Delito Continuado:
Existe una situación en la que aparentemente ocurren varios delitos,
llamados también comportamientos homogéneos típicos, que se dan de

4
Ejemplo propuesto por Luis Bramont, 2000.p.297.
5
Ejemplo propuesto por Luis Bramont, 2000.p.298.
manera sucesiva en el tiempo, estas acciones infringen la misma norma
jurídica. Este proceso es conocido como proceso continuado unitario (Mir
Puig,1996), unidad jurídica de acción (Hans Jescheck, 1993) o nexo de
continuidad (Gunther Stratenwerth, 1982) citados por Javier Villa, 1998.
Mir Puig (1999) citado por Bramont (2000) “El delito continuado constituye
otra construcción de la doctrina de la jurisprudencia”, esta construcción
teórica de la dogmática tiene el fin de darle solución al problema de
determinar conductas particulares de una comisión desarrollada en un
periodo prolongado.
Para explicar la naturaleza jurídica del delito continuado se han presentado
tres teorías:
o Teoría de la ficción: Su aparición se da en Italia entre los siglos XVI y
XVII, se podría afirmar que es la más aceptada, esta teoría propone que
el delito continuado debe ser considerado una ficción jurídica, si bien se
han dado lugar a una cantidad de delitos en momentos diferentes,
podemos fusionarlos de algún modo, en virtud de que tienen una unidad
en la finalidad y que el bien jurídico que ha sido afectado es el mismo o
es semejante. Esta teoría también hace posible que se evite la
acumulación de penas.
o Teoría Realista: “el delito continuado supondría una unidad real de
acción, en cuanto los actos parciales responden a un solo designio
criminal (unidad subjetiva) y producen una sola lesión jurídica (unidad
objetiva). Que la resolución criminal actúe en una o varias veces
afectaría solo a los modos de ejecución” (Mir Puig, 1999 citado por
Bramont, 2000), esta teoría la constituye como una unidad real de
acción y aunque los hechos se lleven en distintos momentos esto se
refiere solo al modo de ejecución.
o Teoría del Realismo Jurídico o Realidad Jurídica: Se reconoce al delito
continuado como una construcción jurídica, es decir una creación del
derecho, que cuando no se encuentra contemplado en la ley, se
fundamente mediante el derecho consuetudinario, debido a su uso
como instrumento práctico.
Señala Maurach, 1962 citado por Miguel Bramont, 2000: “La necesidad de
acumular a tales acumulaciones de acciones típicamente independientes
entre sí, “compendio de tipos”, como una acción y de tomar en cuenta el
incrementado desvalor únicamente en la medición de la pena, responde,
ante todo, a razones procesales. El apreciar siempre aquí siempre una
pluralidad de acciones, llevaría consigo una desproporcionada sobre carga
sobre el juez de instrucción. En efecto conforme a las reglas de pluralidad
de actos debería determinarse cada hecho particular, ya que en el concurso
real el fallo de culpabilidad debe descansar en el conjunto de los hechos
cometidos. Estas embarazosas averiguaciones apenas se manifestarán, sin
embargo, en la fijación de la pena”

Deben concurrir los siguientes requisitos para establecer la existencia de un


delito continuado:

o Los actos individuales deben dirigirse contra el mismo bien jurídico o


sujeto pasivo
o Diversas violaciones de la Ley Penal, las cuales pueden ser iguales o
de la misma naturaleza. Aparece entonces un caso de concurso real
que bajo una ficción jurídica será considerado una sola acción. Es
apreciable por lo tanto que cada acción reviste caracteres propios de
una infracción punible, sin embargo, se realiza un acto de unificación,
por la sencillez mayor en un juicio de una actividad continuada. Cabe
resaltar que con ello el autor no siempre obtiene beneficio
o Las violaciones se deben haber cometido en momentos diversos, los
cuales serán reconocidos como actos parciales, deben darse de modo
homogéneo.
o Una resolución criminal, debe haber una finalidad determinada, algunos
autores lo denominan dolo continuad, y se refiere a la homogeneidad
subjetiva. Señala Luis Bramont (2000) lo que presupone una unidad de
acción, de tal modo que el agente renueve la misma o similar resolución
de actuar bajo la eficacia modificadora de circunstancias iguales o
semejantes.
• Delito Masa:
También se encuentra definido en el artículo 49, éste se caracteriza por el
sujeto pasivo, que viene a ser un conjunto de personas, para que pueda
aprehenderse esta figura jurídica es necesario incurrir, es decir “sujeto
pasivo en masa “como lo define Mir Puig, 1999 citado por Javier Villa 1998.
Sainz Cantero,1951 citado por Javier Villa 1998, señala que: “el delito masa
es aquel en el que el sujeto activo, mediante una sola acción o por varias
acciones que, consideradas independientemente, constituiría cada una de
ellas un delito o falta, ponen en ejecución un designio criminal único,
encaminados a defraudar a una masa de personas, cuyos componentes
individuales, en principio indeterminados, no están unidos entre sí por
vínculos jurídicos”
Luis Bramont (2000) lo define como “unitario propósito criminal en el que
figurar como destinatarios y sujetos pasivos una masa de personas, en
principio indeterminadas a las cuales con identidad de medios se les intenta
defraudar”
Doctrinalmente podemos citar a María Castiñeira: “se ha considerado que el
delito masa se da siempre que el sujeto activo, mediante una sola acción o
por varias acciones que, consideradas independientemente, constituiría
cada una de ellas un delito o falta, pone en ejecución un designio criminoso
único encaminado a defraudar a una masa de persona, cuyos componentes
individuales, en principio indeterminados, no están unidos entre sí.”

1.2. Concurso de leyes


1.2.1. Concepto
Es un problema de interpretación(Bramont, 2000, p.310), y solo habrá concurso
de leyes cuando uno o varios hechos son incluibles en varios preceptos legales
de las que solo uno puede aplicarse(Puig,1985, citado en Aggeo, 1996), dicho
de otra manera el concurso aparente de leyes solo se considera como tal si
cumple con: a) el delito sea único y b)concurrencia de leyes que puedan ser
aplicadas de manera simplemente alternativas, sin que estas puedan ser
aplicadas todas a la vez., es decir, el concurso de leyes debe ser delito único
por efecto de una relación existente entre los tipos concurrentes que hacen que
los mismos se excluyan (Aggeo, 1996,p.21).
1.2.2. Discusión sobre la denominación “concurso de leyes”
Los estudiosos sostienen criterios diversos en relación con el nombre que se da
a este
concurso, o si es o no un verdadero concurso y a los principios que se aplican
para resolverlo. Pozo (1987, p.313) nos señala dos posturas entre los juristas:
• Los juristas que creen que trata de un concurso aparente
Zaffaroni (citado en Aggeo,1996) denomina al concurso de leyes “concurso
ideal impropio”, puesto que solo en apariencia dos o más leyes penales
concurren, pero que en realidad una de las leyes concurrentes excluye a las
restantes.
Jescheck (Citado por Aggeo, 1996) la denomina “unidad de ley” haciendo
referencia a la determinación del contenido del injusto y de la culpabilidad
de una acción punible puede ya determinarse exhaustivamente con la ayuda
de “una” de las leyes penales en juego, además que la ley desplazada no
aparece en absoluto en el fallo.
Aggeo (1996, p.158) afirma lo aparente se utiliza en el sentido de que parece
y no es, se muestra, se exterioriza como algo que no es en realidad, debe
semejarse a algo; en nuestro caso, al concurso.
• Los juristas que afirman que se trata de un verdadero concurso
La acción cumple realmente y de manera sucesiva, con los tipos legales de
las diferentes disposiciones; y que sólo, posteriormente, mediante un
proceso mental, se llega a la exclusión de una en favor de otra.
En este enfrentamiento de posturas es notorio que los segundos ven el
problema en el momento en que se desarrolla la actividad judicial al escoger
la norma a aplicarse, y los primeros, en el momento de su aplicación.
1.2.3. Principios de concurso de leyes
Los principios son reglas destinadas a ayudar al juez en su labor de interpretar
y aplicar la ley, en doctrina, no existe acuerdo en cuanto al número de principios
que orienten al juez en este campo, ni sobre la significación de cada uno de
ellos. Generalmente, se mencionan los principios de especialidad, el referente
a los hechos anteriores o posteriores impunes-subsidiariedad, de consunción, y
de alternatividad (pozo 1987, p.299).
• Principio de especialidad
Según Steint, se da cuando varios tipos penales aplicables al caso, uno de
ellos prevé mas especialmente el hecho que los otros se aplicará por
especifica (o especial) esta disposición.
Ejemplo:
Cuando un hijo mata a su padre comete los tipos penales de homicidio (art.
106) y parricidio (art. 107). El principio de especialidad reclama que se le
aplique el tipo penal de parricidio. 6
• Principio de subsidiaridad
Según Steint, conforme a este principio se aplica supletoriamente un
precepto cuando la acción no se subsume plenamente en la disposición
principal.es decir a palabras de Stein, se da una posición opuesta a la del
principio de especialidad, cuando no se puede cumplir con todos los
requisitos que establece el tipo especial se aplicara el tipo general.
Ejemplo:
Si una persona entra en una casa mediante el escalamiento con el propósito
de hurtar bienes y, luego este no se puede demostrar, no se puede condenar
al agente por hurto agravado, pero si por el delito de violación de domicilio.7
• Principio de consunción
Lex consumens derogat lex comsumpta. Según Stein este surge cuando el
contenido de una acción típica incluye a otro tipo penal-un delito que abarca
a otro delito-; es decir conforme a este principio un precepto incluye o
engloba a otros hechos.
Ejemplo:
Si una persona destruye una pared con el propósito de realizar un robo lleva
a cabo un delito de daños(art. 205), pero este delito quedara desplazado por
el delito de robo(art. 188).8
• Principio de alternativa
Según Binding(citado por Pozo,1987), se trata de casos en que la misma
acción es contemplada desde diferentes puntos de vista, por diversas
disposiciones legales, de las cuales una es aplicable, en la medida que la
otra no estatuye una pena más grave, es decir, se aplicará el tipo penal que

6
Ejemplo propuesto por Stein, 1998, p.443
7
Ejemplo propuesto por Bramont, 2000, p.312
8
Ejemplo propuesto por Bramont, 2000,p.312
implique mayor pena, con lo cual queda excluido los preceptos
benevolentes.
Ejemplo:
En el delito de hurto y de apropiación ilícita sobre un tesoro, constituyen un
apoderamiento de cosa ajena, ya que el tesoro pertenece en forma parcial
al propietario del suelo. Pero dado que el apoderamiento recae sobre un
tesoro, se aplica el art. 192° núm. 1-apropiacion ilícita de un tesoro- 9

1.3. Discusión dogmática


TEORÍA DEL CONCURSO DE LEYES Y DELITOS
En doctrina penal la unanimidad no existe acerca del lugar sistemático en el que debe
ubicarse la teoría del concurso. La divergencia se da a partir de establecer un objeto a
la teoría del concurso, es decir: si sólo debe enfocarse a los casos de concursos de
leyes o si debe enfocarse al concurso de delitos.
Otro autor importante como VILLAVICENCIO TERREROS citado por CÉSAR
AUGUSTO PAREDES VARGAS, refiriéndose a los concursos, sostiene que se ha
debatido en torno al lugar en el que deben estudiarse éstas figuras concursales en la
sistemática del hecho punible, es decir la teoría del delito y la teoría de la pena
(posiciones monistas). La teoría dominante considera mejor la ubicación, de éste tema,
dentro de ambas teorías (posiciones dualistas). El mismo autor alude a que en la
legislación comparada a los concursos se les identifica indistintamente en la teoría de
la pena, en capítulos de la parte general, en disposiciones independientes, al regular la
responsabilidad penal o en las reglas de aplicación de la pena. Puntualiza el autor
mencionado, que la legislación nacional ubica a esta figura en un capítulo dedicado a la
aplicación de la pena en la parte general y sostiene además que, en lo referente a la
problemática política-criminal, las mismas se ubican en el terreno de la determinación
de la pena.
• Unidad y Pluralidad de Acciones
En la doctrina nacional HURTADO POZO citado por CÉSAR AUGUSTO
PAREDES VARGAS refiere que ésta regulación es estudiada considerando,
por un lado, los criterios para establecer si existe unidad o pluralidad de
acción y, por otro, los denominados concursos ideal y real de delitos.

9
Ejemplo propuesto por Bramont, 2000,p.
La doctrina vacila en cuanto al modo en que ha de ser designado el supuesto
que se produce cuando, como dice MIRPUIG, uno o varios hechos son
incluibles en varios preceptos penales de los que sólo uno, puede aplicarse,
so pena de vulnerar el principio non bis in idem. De esta manera concurre
entonces un sólo delito.
La doctrina ha entendido que el punto clave o el punto de partida de la teoría
del concurso es la distinción entre unidad y pluralidad de acción, dado que
en ella se apoya la atribución de consecuencias jurídicas diversas para el
concurso ideal y para el concurso real.
En realidad, la estructura de la teoría del concurso es una diferente a la que
normalmente se encuentra: primero hay que comprobar si existe un único
delito, es decir, plantearse la cuestión del número de delito. Sólo cuando
resulta una pluralidad de delitos se debe comprobar si se han cometido a
través de una acción o a través de varias acciones. Este criterio es
completado por JAKOBS quien refiriéndose al concurso aparente indica que,
en principio, importa averiguar si se han realizado varios delitos o bien no
existe concurso porque se trata del mismo delito que está formulado de
diversos modos.
• Ubicación Sistemática
Autores como BUSTOS RAMIREZ/HORMAZABAL MALAREE, sostienen
que el concurso de leyes llamado también aparente de leyes penales, como
su nombre lo indica, es fundamentalmente un problema de interpretación de
los tipos legales que se resolverá por el principio de especialidad o
consunción. En cambio, el concurso de delitos es un problema de
determinación de la pena.
Coincidiendo en que cada supuesto del concurso de normas es un problema
de interpretación, manifiesta CASTELLO NICAS, que la institución del
concurso de leyes merece mejor ubicación en el ámbito de la Teoría de la
Ley Penal, tras haber analizado la estructura de ésta, las clases de leyes
penales y las fuentes extralegales del Derecho Penal.
Frente a ésa tendencia, otro sector de la doctrina española (BACIGALUPO,
CEREZO MIR y MIR PUIG) citado CÉSAR AUGUSTO PAREDES VARGAS,
se ocupan conjuntamente de los supuestos de concurso de leyes y de
delitos, aunque no se pronuncian expresamente sobre la posición
sistemática de la teoría del concurso. El primero de los nombrados118
agrupa los supuestos de concurrencia de leyes penales y concurrencia de
delitos, como problemas esencialmente distintos: el concurso de leyes
afecta a la relación de los tipos penales entre sí, mientras que el concurso
de delitos presupone que ya se ha resuelto ésa relación y de lo que se trata
es de averiguar si la acción se subsume bajo un tipo penal o varios y si el
autor ha realizado varias acciones y varias lesiones de la ley penal. El
segundo119 dedica un capítulo a la unidad y pluralidad de delitos y
posteriormente se ocupa del concurso de delitos y del concurso de leyes. El
tercero120 los agrupa bajo el título “Unidad y pluralidad de delitos”.
Concurso de leyes
• Para finalizar con el análisis de la discusión dogmática concluye, CESAR
AUGUSTO PAREDES VARGAS con lo siguiente: las cosas no están más
claras en lo que se refiere al concurso de delitos. En la mayor parte de los
códigos penales las disposiciones que lo regulan se incluyen en la parte
relativa a la determinación de la pena. Así sucede en el Código Penal de
España que incluye éstos preceptos bajo la rúbrica “Reglas especiales para
la aplicación de las penas” o en el Código Penal Alemán en el que las reglas
concursales se incluyen en la sección 3era. Medición de la pena si hubiese
varias infracciones legales (art. 52 al 55). Esto no significa que se acepte sin
más la inclusión de la teoría de la pena. Y puede decirse que en el plano
doctrinal sigue sin estar resuelta la cuestión de la ubicación sistemática de
la teoría del concurso de delitos, a la teoría de las consecuencias jurídicas,
o finalmente si constituyen un capítulo independiente se comprende por la
falta de acuerdo, en cuanto a la función que cumplen las normas
concursales. En función de donde se ponga el acento la teoría del concurso
se puede adscribir a la teoría del tipo o a la de consecuencias jurídicas. Si
como se sostiene, las normas concursales son normas de segundo nivel con
respecto a las de la Parte Especial, constituidas por un supuesto de hecho
y una consecuencia jurídica distintas y su función es la de suministrar
criterios para resolver la concurrencia de varias normas en la calificación de
la conducta de un individuo y la de determinar las sanciones aplicables, se
debe arribar a la conclusión de que la teoría del concurso pertenece tanto a
la teoría del tipo como a la teoría de la determinación de la pena.
II. CUADRO COMPARATICO CON EL PROYECTO DEL CODIGO PENAL

PROYECTO DEL NUEVO


CÓDIGO PENAL
CÓDIGO PENAL

Título III: De las penas


Título II: Aplicación de la pena
Capitulo II: Aplicación de la pena
Art. 62°. -Cuando varias
disposiciones son aplicables al
Art. 48°. -Cuando varias mismo hecho delictivo, este se
disposiciones son aplicables al reprime con la que establezca la
mismo hecho se reprimirá hasta pena más grave incrementada en
CONCURSO
con el máximo de la pena más una cuarta por encima del máximo
IDEAL DE
grave, pudiendo incrementarse legal, sin que en ningún caso pueda
DELITOS
ésta hasta en una cuarta parte, sin exceder de treinta y cinco años. Si
que en ningún caso pueda exceder alguno de los delitos en concurso se
de treinta y cinco años. encuentra reprimido con pena
indeterminada, solo se aplica esta
pena.
Art. 49°. -Cuando varias
violaciones de la misma Ley Penal
o una de igual o semejante
naturaleza hubieran sido Art. 63°. -Cuando varias violaciones
cometidas en el momento de la de la misma ley penal o una de igual
acción o en momentos diversos, o semejante naturaleza hubieran
con actos ejecutivos de la misma sido cometidas en el momento de la
resolución criminal, serán acción o en momentos diversos,
considerados como un sólo delito con actos ejecutivos de la misma
continuado y se sancionarán con la resolución criminal, son
pena correspondiente al más considerados como un solo delito
DELITO
grave. Si con dichas violaciones, el continuado y se reprimen con la
CONTINUADO
agente hubiera perjudicado a una pena correspondiente al más grave.
pluralidad de personas, la pena La aplicación de las disposiciones
será aumentada en un tercio de la del párrafo anterior queda excluida
máxima prevista para el delito más cuando resulten afectados bienes
grave. La aplicación de las jurídicos de naturaleza
anteriores disposiciones quedará eminentemente personal
excluida cuando resulten pertenecientes a sujetos distintos.
afectados bienes jurídicos de
naturaleza eminentemente
personal pertenecientes a sujetos
distintos.
Art. 64°. -
1. Cuando concurran varios
hechos punibles que deban
Artículo 50°. –
considerarse como otros tantos
Cuando concurran varios hechos
delitos independientes, se
punibles que deban considerarse
suman las penas que fije el juez
como otros tantos delitos
para cada uno de ellos hasta un
independientes, se sumarán las
máximo del doble de la pena del
penas privativas de libertad que fije
CONCURSO delito más grave
el juez para cada uno de ellos
REAL DE 2. En los supuestos previstos en el
hasta un máximo del doble de la
DELITOS primer párrafo, la sumatoria de
pena del delito más grave, no
penas no puede exceder el
pudiendo exceder de 35 años. Si
máximo legal previsto para
alguno de estos delitos se
cada una de ellas, salvo que el
encuentra reprimido con cadena
delito se encuentre reprimido
perpetua se aplicará únicamente
con pena privativa de libertad
ésta
indeterminada, en cuyo caso se
aplica esta última.

Artículo 50°-A.-
Cuando se realiza una pluralidad
de acciones que deban
considerarse como faltas
independientes que perjudican a
varias personas e infringen el
CONCURSO
mismo precepto penal o preceptos
REAL DE FALTAS
de igual o semejante naturaleza,
será sancionado como autor del
delito correspondiente y se le
impone la pena privativa de libertad
prevista para este, teniendo en
cuenta el perjuicio total causado.
Artículo 65.-
Artículo 51°. – Si después de la sentencia
Si después de la sentencia condenatoria se descubriere otro
condenatoria se descubriere otro hecho punible cometido antes de
hecho punible cometido antes de esta por el mismo condenado, éste
ella por el mismo condenado, será es sometido a proceso penal y la
sometido a proceso penal y la pena pena que fije el juez se suma a la
que fije el juez se sumará a la anterior hasta un máximo del doble
CONCURSO
anterior hasta un máximo del doble de la pena del delito más grave, no
REAL
de la pena del delito más grave, no pudiendo exceder de treinta y cinco
RETROSPECTIVO
pudiendo exceder de 35 años. Si años de pena privativa de libertad.
alguno de estos delitos se Si alguno de los delitos en concurso
encuentra reprimido con cadena se encuentra reprimido con pena
perpetua, se aplicará únicamente indeterminada, solo se aplica esta
ésta, sin perjuicio de fijarse la pena, sin perjuicio de fijarse la
reparación civil para el nuevo reparación civil para el delito
delito. posteriormente descubierto.
III. JURISPRUDENCIA

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA SALA PENAL PERMANENTE CONSULTA Nº 126 –


2004. LIMA Lima, veinte de diciembre de dos mil cuatro.- VISTOS; la consulta que por
imperio de la ley eleva la Sala Penal Nacional del auto superior de fojas cuatrocientos
veinte, que declara no haber mérito a pasar a juicio oral contra Pedro Pablo Cotrina
Sánchez por delito contra la tranquilidad pública asociación terrorista en agravio del
Estado; con lo expuesto por la señora Fiscal Supremo en lo Penal; y, CONSIDERANDO:
Primero: Que el Colegiado Superior, de conformidad con el dictamen del señor Fiscal
Superior de fojas cuatrocientos dos, declaró no haber lugar a juicio oral contra el acusado
Cotrina González por delito de asociación terrorista y haber lugar a juicio oral por el delito
de colaboración terrorista; que, al respecto, estimó que el citado imputado realizó actos
de colaboración al brindar su domicilio como depósito y almacenar en él sustancias
explosivas, así como que no se acreditó que integre o forme parte de “Sendero Luminoso”;
que, sin embargo, la Fiscalía Suprema en el dictamen que antecede señaló que los
manuscritos incautados, que la pericia grafo técnica determinó que provienen de su puño
gráfico, acreditan la pertenencia a Sendero Luminoso por parte del imputado, por lo que
existe un concurso ideal entre asociación terrorista y colaboración terrorista. Segundo:
Que el acusado Cotrina González ha sido condenado por sentencia firme, derivadas de
los hechos materia de este proceso, por el delito de colaboración terrorista, ocasión en
que se precisó que si bien el propio imputado admitió ser simpatizante de Sendero
Luminoso no integró la organización, a la vez que se anotó que en su domicilio se
encontraron dos bolsas de polietileno conteniendo trescientos setenta gramos de nitrato
de amonio y sesenta y tres paquetes de fósforos de cuarenta unidades cada uno –acta
de incautación de fojas veintidós y pericia de fojas noventa y seis- y manuscritos que
provenían de su puño gráfico –pericia de fojas ciento treinta y cuatro-; que los manuscritos
signados como muestras “A” y “B” se refieren a anotaciones – ciertamente favorables a
la organización- realizadas por el imputado respecto a una entrevista realizada al líder de
Sendero Luminoso, a referencias genéricas a la misma, 2 y a palabras sueltas que incluye
expresiones como agenda, escuela, reglaje, etcétera; que el contenido de dichos
manuscritos no permitan estimar con absoluta certidumbre que el imputado a la fecha de
los hechos ya estaba integrado a la organización terrorista y que el almacenamiento de
la sustancia explosiva lo hizo como una tarea o acción propia de una acreditada y
sostenida militancia terrorista. Tercero: Que es de precisar que los delitos de asociación
terrorista y colaboración terrorista son tipos penales autónomos y, como tal, están
contemplados en normas jurídicas específicas: artículos cinco y cuatro, respectivamente,
del Decreto Ley número veinticinco mil cuatrocientos setenta y cinco, y que por su propia
naturaleza son implicantes entre sí, por lo que no se puede admitir, en ningún caso,
supuestos de concurso ideal; que el delito de colaboración terrorista: a) es un delito de
mera actividad y de peligro abstracto –no requiere que los actos perpetrados estén
causalmente conectados a la producción de un resultado o de un peligro delictivo
concreto, aunque es obvio que requiere de una acción apta en sí misma para producir un
peligro al bien jurídico (idoneidad potencial de los actos de favorecimiento), delito que es
independiente de las posibles acciones o actos terroristas-; b) importa la comisión de
actos preparatorios –realizar, obtener, recabar y facilitar actos de colaboración-
especialmente castigados como favorecimiento de la comisión de actos terroristas y de
los fines de un grupo terrorista –anticipación de la barrera de protección penal que se
justifica en la importancia de los bienes jurídicos fundamentales que afecta el terrorismo
y en la objetiva peligrosidad que las conductas de colaboración adquieren en la actividad
terrorista, esto es, en la prevención de conductas gravemente dañosas para la
comunidad-; c) es un delito residual o subsidiario, pues que se castigan los hechos
siempre y cuando no se llegue a producir un resultado típico determinado -en tanto
constituye un auxilio o una preparación de otro comportamiento-, pues de ser así –en
virtud del principio de absorción- se castigará como coautoría o participación del delito
efectivamente perpetrado; y, d) el dolo del autor está integrado por la conciencia o
conocimiento del favorecimiento a la actividad terrorista y a la finalidad perseguida por los
grupos terroristas; que, asimismo, el sujeto activo de este delito sólo puede serlo aquella
persona que no pertenece o no está integrada a una organización terrorista es decir por
un “extraneus”; que, como señala la doctrina penalista mayoritaria, una interpretación
distinta conduciría a una confusión con el delito de asociación 3 terrorista, siendo de
resaltar que los sujetos integrantes de aquella pueden realizar sin duda las actividades
típicas de colaboración o favorecimiento, pero en tal caso no estarán sino haciendo
patente su condición de afiliado; que, por otro lado, el tipo penal identifica o precisa seis
actos de colaboración, aun cuando en el primer párrafo se inclina por una definición
amplia de su contenido general –así: “cualquier tipo de bienes o medios (…) cualquier
modo favoreciendo la comisión de delitos (…)”-; que en la descripción de actos de
colaboración el legislador utiliza formulas abiertas para evitar lagunas de punibilidad –
verbigracia: “(…) cualquier otro que específicamente coadyuve o facilite las actividades
de elementos terroristas o grupos terroristas (…) prestación de cualquier tipo de ayuda
que favorezca la fuga de aquellos (personas pertenecientes a grupos terroristas)”-; que,
pese a ello, en aras del respeto al principio general de seguridad jurídica y al principio
penal de lex stricta, es del caso puntualizar que la interpretación que ha de presidir dichas
fórmulas típicas necesariamente será restrictiva y, por ende corresponde asumir la
vigencia de la cláusula implícita de equivalencia en cuya virtud las conductas de
colaboración típicamente relevantes sólo serán aquellas que importen una evidente
gravedad e intrínseca idoneidad del acto realizado por el agente en función a la entidad
de las actividades terroristas y a las finalidades de los grupos terroristas. Cuarto: Que, en
virtud del carácter general de la interpretación del tipo penal de colaboración terrorista, es
del caso establecer su carácter vinculante en aplicación del numeral uno del artículo
trescientos uno guión A, del Código de Procedimientos Penales, introducido por el
Decreto Legislativo número novecientos cincuenta y nueve. Por estos fundamentos:
APROBARON el auto consultado de fojas cuatrocientos veinte, del dieciséis de abril de
dos mil cuatro, que declara no haber mérito para pasar a juicio oral contra Pedro Pablo
Cotrina González por delito contra la tranquilidad pública- afiliación a la organización
terrorista o asociación terrorista en agravio del Estado; con lo demás que contiene;
ESTABLECIERON como precedente vinculante el tercer fundamento jurídico de esta
Ejecutoria Suprema, MANDARON se publique en el Diario Oficial “El Peruano” y, de ser
posible en la Página Web del Poder Judicial; y los devolvieron. S.S. SAN MARTÍN
CASTRO PALACIO VILLAR 4 BARRIENTOS PEÑA LECAROS CORNEJO MOLINA
ORDÓÑEZ
EXP. N.° 02348-2010-PHC/TC
LIMA
JORGE LÓPEZ
PAREDES

SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

En Lima, a los 10 días del mes de diciembre de 2010, el Pleno Jurisdiccional del Tribunal
Constitucional, con la asistencia de los magistrados Mesía Ramírez, Beaumont Callirgos,
Vergara Gotelli, Calle Hayen Eto Cruz, Álvarez Miranda y Urviola Hani, pronuncia la
siguiente sentencia

ASUNTO

Recurso de agravio constitucional interpuesto por don Jorge López Paredes contra la
sentencia expedida por la Segunda Sala Especializada en lo Penal de Procesos con
Reos en Cárcel de la Corte Superior de Justicia de Lima, de fojas 536, su fecha 30 de
abril de 2010, que declaró infundada la demanda de autos.

ANTECEDENTES

Con fecha 16 de septiembre de 2008 el recurrente interpone demanda de hábeas


corpus contra la ex Fiscal Provincial en lo Penal Ad Hoc, doctora Flor de
María Mayta Luna, la ex Juez Penal de Lima, doctora Carmen Rojassi Pella, los Vocales
de la Primera Sala Penal para Procesos con Reos en Cárcel de la Corte Superior de
Justicia de Lima, los Vocales Superiores que integraron la Sala Penal Especializada en
los Delitos de Tráfico Ilícito de Drogas de la Corte Superior de Justicia de Lima y los
Vocales Supremos que conformaron la Sala Especializada en Delitos de Tráfico Ilícito de
Drogas de la Corte Suprema de Justicia de la República. Solicita que se declare la nulidad
absoluta del proceso que se le sigue (Expediente N.º 7717-97), se realice un nuevo
proceso y se ordene su libertad al haber transcurrido el exceso de plazo estipulado en el
artículo 137.º del Código Procesal Penal.

Mediante diligencia de certificación el 29 de octubre de 2008 (fojas 92), el


recurrente desistió de interponer la demanda de hábeas corpus contra la ex Fiscal
Provincial en lo Penal Ad Hoc, doctora Flor de María Mayta Luna; los Vocales de la
Primera Sala Penal para Procesos con Reos en Cárcel de la Corte Superior de Justicia
de Lima, los Vocales Superiores que integraron la Sala Penal Especializada en los Delitos
de Tráfico Ilícito de Drogas y los Vocales Supremos que conformaron la Sala
Especializada de Delitos de Tráfico Ilícito de Drogas de Corte Suprema de Justicia de la
República, por lo que la demanda sólo está dirigida contra la ex juez Penal de Lima,
doctora Carmen Rojassi Pella. Alega la vulneración de los derechos a la vida, a la libertad
ambulatoria, al debido proceso, a la tutela Jurisdiccional efectiva, a la motivación de las
resoluciones judiciales con mención expresa de la ley aplicable y a derechos conexos.

Señala el recurrente que el 26 de enero de 1995 la jueza emplazada le inició


proceso por la comisión del delito por acopio, transporte, procesamiento,
almacenamiento, exportación y lavado de dinero en forma de organización en agravio del
Estado, (Expediente N.º 01-95-RSR-JEL) contemplados en los artículos 296, 297, inciso
primero; 296-A, 296-B, incorporado al Código Penal por la Ley 25426, modificado por la
Ley 26233, del 21 de agosto de 1993, donde le impuso mandato de detención; y que al
haber acontecido los hechos descritos muchos años antes, no debería aplicarse dicha
modificatoria puesto que la ley penal aplicable es la vigente en el momento de la comisión
del hecho punible.

El Quincuagésimo Juzgado Penal de Lima, el 10 de marzo del 2010, declara


infundada la demanda considerando que las reiteradas ejecutorias de la Sala Suprema
Especializada en Tráfico Ilícito de Drogas han resuelto en similares situaciones que el
ilícito instruido que al tener la calidad de delito continuado, este se denuncia, investiga y
sanciona desde el momento en que se descubre el hecho y no desde que se inicia.

La Segunda Sala Especializada en lo Penal de Procesos con reos en Cárcel de la


Corte Superior de Justicia de Lima, con fecha 30 de abril de 2010, confirma la apelada
por los mismos fundamentos.
FUNDAMENTOS

1. El recurrente pretende demostrar que se le ha abierto instrucción en aplicación de


los artículos 296, 297, inciso primero; 296-A, 296-B, incorporado al Código Penal por la
Ley 25426, modificado por la Ley 26233, del 21 de agosto de 1993, que no se
encontraban vigentes al momento de ocurridos los hechos delictivos que se le imputan
como delito; por lo que solicita que se declare la nulidad absoluta del proceso que se le
sigue (Expediente Nº 7717-97), se realice un nuevo proceso y se ordene su libertad al
haber transcurrido el exceso de plazo estipulado en el artículo 137.º del Código Procesal
Penal.

Cuestión previa

2. De manera preliminar al pronunciamiento de fondo, este Tribunal considera


pertinente señalar que los temas de connotación penal, tales como la valoración de las
pruebas que para su efecto se actúen en la vía correspondiente, la subsunción de las
conductas en determinado tipo penal, así como la aplicación de la adecuación de la pena
impuesta a un condenado son aspectos propios de la jurisdicción ordinaria y no de la
justicia constitucional. En efecto, si bien dentro de un proceso de hábeas corpus se puede
examinar la constitucionalidad de los actos jurisdiccionales, siempre que incidan de
manera directa y negativa en el derecho a la libertad personal, a fin de que una vez
acreditado el agravio del derecho a la libertad individual se declare su nulidad y se
disponga las medidas correctivas pertinentes, ello no comporta que el juzgador
constitucional se subrogue a la justicia ordinaria en temas propios de su competencia.
La Constitución Política establece en sus artículos 103.° y 139.°, inciso 11), lo
siguiente:
a. Artículo 103°. (...)La ley, desde su entrada en vigencia, se aplica a las consecuencias
de las relaciones y situaciones jurídicas existentes y no tiene fuerza ni efectos
retroactivos; salvo, en ambos supuestos, en materia penal cuando favorece al reo (...).

b. Artículo 139°. Son principios y derechos de la función jurisdiccional: (...) 11. La


aplicación de la ley más favorable al procesado en caso de duda o de conflicto entre leyes
penales.
3. Conforme a ello, en nuestro ordenamiento jurídico rige, en principio, la aplicación
inmediata de las normas. En el derecho penal sustantivo la aplicación inmediata de las
normas determina que a un hecho punible se le aplique la pena vigente al momento de
su comisión (Cfr. STC 1300-2002-HC/TC, Fundamento 7).

4. El principio de retroactividad benigna, por lo tanto, propugna la aplicación de una


norma penal posterior a la comisión del hecho delictivo, a condición de que dicha norma
contenga disposiciones más favorables al actor. Ello, sin duda, constituye una excepción
al principio de irretroactividad de la aplicación de la ley sustentada en razones político-
criminales, en la medida en que el Estado no tiene interés (o no en la misma intensidad)
en sancionar un comportamiento que ya no constituye delito (o cuya pena ha sido
disminuida) y, esencialmente, en virtud del principio de humanidad de las penas, el cual
se fundamenta en la dignidad de la persona (artículo 1º de la Constitución).

Sobre el principio de legalidad penal

5. El principio de legalidad penal ha sido consagrado en el artículo 2º, inciso 24, literal
“d”, de la Constitución Política del Perú, según el cual "Nadie será procesado ni
condenado por acto u omisión que al tiempo de cometerse no esté previamente calificado
en la ley, de manera expresa e inequívoca, como infracción punible, ni sancionado con
pena no prevista en la ley”.

6. Este Colegiado ya ha señalado que, como regla general, la tipificación penal y la


subsunción de las conductas ilícitas no son ni deberían ser objeto de revisión en estos
procesos. Al fin y al cabo, ni la justicia constitucional puede considerarse en forma análoga
a la justicia penal, ni aquella resulta una tarea que entre en el ámbito de competencia de
los jueces constitucionales (STC 8646-2005-PHC/TC).

7. De ahí que solo excepcionalmente quepa efectuar un control constitucional sobre


una resolución judicial por afectación del principio de legalidad penal y, en concreto, en
aquellos casos en los que, al aplicar un tipo penal o imponer una sanción, el Juez penal
se aparte del tenor literal del precepto o cuando la aplicación de un determinado precepto
obedezca a pautas interpretativas manifiestamente extravagantes o irrazonables,
incompatibles con el ordenamiento constitucional y su sistema material de valores.

Sobre el momento de la comisión de un delito

8. El artículo 9 del Código Penal señala que el momento de la comisión de un delito


es aquel en el cual el autor o partícipe ha actuado u omitido la obligación de actuar,
independientemente del momento en que el resultado se produzca.

Sobre el Delito continuado

9. El artículo 49 del Código Penal establece que cuando varias violaciones de la


misma ley penal o una de igual o semejante naturaleza sean cometidas en el momento
de la acción o en momentos diversos, mediante actos ejecutivos de la misma resolución
criminal, estas serán consideradas como un solo delito continuado y se sancionarán con
la pena correspondiente al más grave.

Sobre el caso materia de autos

10. Al promoverse el presente hábeas corpus sólo en contra de la jueza


Carmen Rojassi Pella, que vio en primera instancia el proceso en el que el beneficiado
está procesado, se entiende que cuando cuestiona la motivación de las resoluciones
judiciales con mención expresa de la ley aplicable, se refiere a la emisión del auto de
apertura de instrucción que dictó el 26 de enero de 1995 contra el beneficiado y otros, por
los delitos de tráfico ilícito de drogas por los hechos descritos y tipificados dentro de los
tipos penales 296, 296-A 296-B y 297 inciso primero, segundo párrafo, del Código Penal.

11. La falta de motivación del auto de apertura debe ser analizada de acuerdo con el
artículo 77.° del Código de Procedimientos Penales, que establece como requisitos para
el dictado del auto de apertura de instrucción que de los actuados aparezcan indicios
suficientes o elementos de juicio reveladores de la existencia de un delito, que se haya
individualizado a los inculpados y que la acción penal no haya prescrito o no concurra otra
causa de extinción de la acción penal.
12. En el presente caso se observa que en la resolución cuestionada sí se han
precisado los elementos de juicio reveladores de la existencia de toda una red de
personas dedicadas a la ilegal actividad del tráfico ilícito de drogas en el interior del país
así como en el ámbito internacional, presumiéndose una organización delincuencial que
está dirigida por los hermanos López Paredes, así como que se individualizó la conducta
del favorecido en la realización del hecho delictivo y la calificación de modo específico del
delito o los delitos que se atribuyen al denunciado, hechos descritos y tipificados dentro
de los tipos penales 296, 296-A 296-B y 297 inciso primero, segundo párrafo, del Código
Penal (fojas 124).

13. Al respecto, el Decreto Ley N.º 25428 fue publicado el 9 de abril de 1992 e incorpora
a la Sección II, Capítulo III, del Título XII del Código Penal, los artículos 296-A y 296-B los
cuales establecen: “El que interviene en la inversión, venta, pignoración, transferencia o
posesión de las ganancias, cosas o bienes provenientes de aquellos o del beneficio
económico obtenido del tráfico ilícito de droga”, y “El que interviniere en el proceso de
lavado de dinero proveniente del tráfico ilícito de drogas o del narcoterrorismo, ya sea
convirtiéndolo en otros bienes, o transfiriéndolo a otros países, bajo cualquier modalidad
empleada por el sistema bancario o financiero o repatriándolo para su ingreso al circuito
económico imperante en el país, de tal forma que ocultare su origen, su propiedad u otros
factores potencialmente ilícitos”.

14. En consecuencia, no se aprecia del contenido del auto de apertura la falta de


motivación sin que se haya hecho mención expresa de la ley aplicable, por lo que la
alegada falta de motivación debe desestimarse.

15. Sin perjuicio de lo expuesto, el Tribunal considera pertinente señalar que la


sentencia emitida por la Sala Penal Especializada en delitos de Tráfico Ilícito de Drogas,
el 2 de agosto de 2000 menciona “que respecto al fundamento de la defensa en el sentido
de que la norma aplicable al caso sub examine no estaba vigente a la fecha de la comisión
de los hechos, no es cierto porque conforme aparece de autos el delito se descubrió el 9
de enero de 1995 y el tipo penal 296-A se incorporó al Código Penal el 9 de abril de 1992
según Decreto Ley 25428; […] Además de que en reiteradas Ejecutorias La Sala Suprema
Especializada en Tráfico Ilícito de Drogas que ha resuelto situaciones similares que el
ilícito instruido tiene la calidad de delito continuado y se denuncia investiga y sanciona
desde cuando se descubre el hecho y no desde cuando se inicia aquel” (fojas 393),
Asimismo, señalar que […] tiene el agravante de ser el jefe o cabecilla de la organización
tal como él mismo lo señala y admite en su declaración jurada”. (fojas 394).

16. Respecto a la imposición de la cadena perpetua, ello también está de acuerdo a


ley, pues la Ley Nº 26223, publicada el 21 de agosto de 1993, modificó el artículo 296-B,
señalando que “el que interviene en el proceso de lavado de dinero proveniente del tráfico
ilícito de drogas (…), será reprimido con pena de cadena perpetua”.

17. Respecto a que la duración del plazo de la detención provisional habría transcurrido
en exceso según lo estipulado en el artículo 137.° del Código Procesal Penal; de las
instrumentales y demás actuados que obran en los autos, se aprecia que el beneficiario
fue sentenciado por la Sala Penal Especializada en Delitos de Tráfico Ilícito de Drogas, el
2 de agosto de 2000, a cadena perpetua como autor del delito contra la salud pública
tráfico ilícito de drogas (artículos 296, 296-A 297B y 297, inciso primero, segundo párrafo,
del Código Penal) (fojas 390- 433), sentencia que fue confirmada por la Resolución de la
Corte Suprema Especializada de Tráfico Ilícito de Drogas (fojas 434-438), por lo que
resulta de aplicación la causal de improcedencia prevista en el inciso 5 del artículo 5.° del
Código Procesal Constitucional, toda vez que el supuesto agravio al derecho a la libertad
personal del recurrente –que habría comportado el acusado exceso de detención
provisional en el proceso que se le seguía– ha cesado con la emisión de la citada
resolución.

Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la


Constitución Política del Perú

HA RESUELTO

1. Declarar IMPROCEDENTE la demanda respecto a la vulneración del plazo de detención


provisional.

2. Declarar INFUNDADA la demanda respecto a la vulneración de los derechos a la vida, a


la libertad ambulatoria, al debido proceso, a la tutela jurisdiccional efectiva y a la
motivación del auto apertura de instrucción con mención expresa de la ley aplicable
y derechos conexos.
Publíquese y notifíquese.
SS.

MESÍA RAMÍREZ
BEAUMONT CALLIRGOS
VERGARA GOTELLI
CALLE HAYEN
ETO CRUZ
ÁLVAREZ MIRANDA
URVIOLA HANI
IV. CONCLUSIONES

o El sujeto activo puede realizar dos o más delitos con una o varias acciones, se
dice que el concurso de delitos no viene si no hacer un cúmulo de infracciones
penales cometidas por una misma persona y que no siempre se trata de sumar
las penas cuando los delitos son varios.
o El concurso ideal se da cuando un solo hecho jurídico o acción configuran al
mismo tiempo dos o más delitos por otro lado el concurso real se presenta
cuando hay una pluralidad de acciones realizadas por un sujeto activo
constituyendo una pluralidad de delitos ,así también se hace mención al
concurso real retrospectivo que difiere del concurso real normal ya que en
este caso se da la simultaneidad en el juzgamiento, porqué solo después que
el sujeto activo ha sido sentenciado se descubre que había cometido otro delito
y esto concierne al concurso de delitos.
o El delito continuado se establece cuando una situación en la que
aparentemente ocurren varios delitos, llamados también comportamientos
homogéneos típicos, que se dan de manera sucesiva en el tiempo, estas
acciones infringen la misma norma jurídica; por otro lado, aparece el delito
de masa consiste en la misma situación, pero se le suma una característica
adicional, que su fin se dirige a un sujeto pasivo conformado en masa.
o El concurso de leyes se da al igual que el concurso ideal por la existencia de un solo
delito, pero a diferencia de este último al encontrarse una concurrencia de tipos estos
se excluyen entre sí, es decir solo puede aplicarse una ley y no todas a la vez; esta
definición no tiene discusión entre los juristas más si la hay en como denominar esta
concurrencia, existiendo así dos posturas: los juristas que ven el problema en el
momento en que se desarrolla la actividad judicial(concurso de leyes) y los que ven
el problema al momento de aplicar la ley(concurso aparente de leyes o unidad de ley);
para solucionar este problema el juez se ayuda de algunos principios, los cuales
generalmente son de especialidad, de subsidiariedad, de consunción, y de
alternatividad.
o Sobre la discusión dogmática, ante tanta divergencia entre diversos autores
conocedores del derecho; desde mi punto de vista concluiré que lo más idóneo es
ubicar a la teoría del concurso en las dos teorías que son: la teoría del delito y la
teoría de la pena.
V. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Aggeo, M. Á. (1996). Concurso De Delitos En Materia Penal. Buenos Aires, Argentina:


Universidad S.R.L.

Pozo, J. H. (1987). Manual Del Derecho General (2da edición). Lima, Perú: EDILI.

Stein, J. V. (1998). Derecho Penal Parte General. Lima, Perú: San Marcos,

Torres, L. M.-A. (2000). Manual Del Derecho Penal. Lima, Perú: Santa Rosa.

Vargas, C. A. (2016). teoría del concurso de leyes y delitos. Amag Perú, IX. recuperado
de http://repositorio.amag.edu.pe/bitstream/handle/123456789/232/teoria-
concurso-leyes-delitos.pdf?sequence=1&isAllowed=y

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