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Epidemiología y etiopatogenia del asma

capítulo 35
P. Barranco Sanz, I. Galán Labaca, A.B. Cid Sánchez, A. Valls Sánchez

EPIDEMIOLOGÍA DEL ASMA tienen estos cuestionarios es el de la comparabilidad entre paí-


ses con diferentes culturas, ya que la interpretación de los sín-
Desde una perspectiva conservadora, se estima que el asma tomas relacionados con el asma varía con las traducciones y
afecta a 300 millones de personas en el mundo y, teniendo en las adaptaciones al idioma de los términos originales emplea-
cuenta la previsión de crecimiento y el mayor grado de urbaniza- dos. Para evitarlo, se han empleado cuestionarios estandariza-
ción, se espera que, en 2025, otros 100 millones de personas sufran dos previamente validados, como el del Estudio de Salud Respi-
esta enfermedad(1). Esta frecuencia muestra gran variabilidad geo- ratoria de la Comunidad Europea (ECRHS) en la población
gráfica y temporal, tendiendo, después de décadas de fuerte incre- adulta(5,6) o el del Estudio Internacional de Asma y Alergia en la
mento, a estabilizarse. Sin embargo, las causas que determinan infancia (ISAAC) en la población infantil(7). Con el fin de unificar
esta variabilidad permanecen sin esclarecerse. En los comienzos del la interpretación de los términos escritos, este último emplea
siglo XXI, la carga sanitaria que genera es de suficiente magnitud también un vídeo-cuestionario(8).
como para que muchos gobiernos reconozcan la prioridad de ela- Además de estar basados en criterios subjetivos, los cuestio-
borar estrategias para su prevención y control. De hecho, se han narios están sujetos a otros sesgos importantes, como el de
dado pasos importantes en la mejora de su manejo clínico, que recuerdo. Por el contrario, entre sus ventajas destacan el menor
están teniendo efectos en la disminución de los indicadores rela- coste, la mayor optimización de la selección muestral y la obten-
cionados con la demanda sanitaria y con la mortalidad. ción de mejores tasas de respuesta que los estudios con medi-
ciones objetivas.
Definición de asma bronquial La validez de esta forma de medición depende de la defini-
Desde el punto de vista clínico, y a falta de una definición ción empleada. La utilización de los síntomas como criterio suele
más precisa que satisfaga las necesidades de las diferentes dis- incrementar la sensibilidad (probabilidad de que una persona
ciplinas científicas, hay consenso al considerar, de forma opera- con la enfermedad sea clasificada correctamente como asmá-
tiva, al asma como una enfermedad que cursa con inflamación tica) a la vez que disminuye la especificidad (probabilidad de que
crónica de las vías respiratorias e hiperreactividad bronquial (HRB), un individuo no asmático sea correctamente clasificado como
que provoca episodios recurrentes de sibilancias, disnea, opre- no enfermo). Por el contrario, la utilización, como criterio, del
sión torácica y tos, asociándose con un menor o mayor grado diagnóstico previo de asma, será altamente específica (es poco
de obstrucción al flujo aéreo, la mayoría de las veces reversible probable que una persona que no ha sido diagnosticada de asma
de forma espontánea o con tratamiento(2). conteste que tiene asma), pero disminuirá la sensibilidad. Para
Sin embargo, a la hora de aplicar esta definición a la investi- superar esta dificultad se ha propuesto una combinación de sín-
gación epidemiológica, las dificultades son manifiestas. La mayo- tomas junto al diagnóstico de asma.
ría de los estudios epidemiológicos utilizan cuestionarios de sín- Por otro lado, es habitual que, para evitar la confusión con
tomas, pruebas de medición de la HRB o la combinación de ambos, otras enfermedades respiratorias obstructivas, como la enferme-
a fin de diferenciar a la población asmática de la no asmática(3). dad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), se limite la edad de
estudio a las poblaciones jóvenes, donde esta enfermedad es infre-
Utilización de cuestionarios cuente, como en el ECRHS, o se evite el estudio en los niños de
La utilización de cuestionarios basados en la información corta edad, donde el diagnóstico puede confundirse con otros
autodeclarada por la persona entrevistada, o, en el caso de los procesos que cursen con espasmos bronquiales o HRB transitoria.
niños pequeños, por un familiar, sobre la ocurrencia de los sín-
tomas relacionados con el asma o el haber sido diagnosticado Medición de la hiperreactividad bronquial
de esta enfermedad, son los métodos más frecuentemente emple- Con el fin de ganar objetividad, las pruebas de provoca-
ados para definir el asma. Una de las principales limitaciones que ción bronquial, bien con estímulos directos (las más empleadas),
610 Epidemiología y etiopatogenia del asma

como la metacolina o la histamina, o indirectos, como el ejer- La fase I del ISAAC estuvo constituida por 257.800 niños de
cicio físico o los cambios osmóticos con aerosoles salinos hiper- 6-7 años de edad, procedentes de 91 centros de 38 países, y por
tónicos, se han utilizado con bastante frecuencia en los estudios 463.801 niños de 13-14 años de edad, de 155 centros de 56
epidemiológicos(9). La principal ventaja es que permiten compa- países(15). Globalmente, el 10,2% de los niños de 6-7 años habían
rar la frecuencia de la enfermedad entre diferentes poblaciones. tenido, alguna vez en la vida, al menos una crisis de asma y el
Sin embargo, diversos estudios han puesto de manifiesto limi- 11,8% tuvieron sibilancias en el último año; en los niños de 13-
taciones en la sensibilidad y especificidad de la prueba, de modo 14 años, la prevalencia fue del 11,3 y del 13,8%, respectiva-
que, al enfrentar sus resultados al diagnóstico clínico de asma, mente. La variación entre países y dentro de los mismos fue extra-
la sensibilidad oscila alrededor de un 50% y la especificidad, ordinariamente alta, con un rango entre el 4,1 y 32,1% en la
sobre un 85%(10,11). Esta baja sensibilidad contrasta con los valo- prevalencia de sibilancias en el grupo más joven, y entre el 2,1
res observados en la clínica, y puede explicarse por el hecho de y 32,2% en el grupo de los niños mayores. En la Figura 1 se des-
que, en los estudios poblacionales, la mayoría de los sujetos cribe la variación de la prevalencia acumulada de asma, donde
asmáticos tienen una enfermedad leve(3). los países anglosajones, y principalmente Australia y Nueva
La decisión sobre los instrumentos que se van a emplear Zelanda, ostentan las tasas más elevadas, junto con algunos paí-
dependerá del tipo de estudio que se vaya a realizar. Si inte- ses de Centroamérica y Sudamérica.
resa estimar la prevalencia, probablemente la mejor opción sea En el ECRHS participaron 137.619 adultos de 18 a 44 años
utilizar un cuestionario de síntomas y asma diagnosticado. Si procedentes de 48 centros de 22 países(16). Como promedio
el tipo de estudio se relaciona con modelos causales, deberá pri- (mediana), el 4,5% (rango: 1,3-9,7%) tenían asma activa y el
mar la especificidad(12) y, por tanto, las pruebas de provocación 20,7% (rango: 4,1-32%) habían presentado sibilancias en el
pueden ser la mejor elección. Sin embargo, debido a la pobre último año. También en este estudio los países anglosajones, con
concordancia entre la clínica de asma y la HRB(3), se recomienda Australia y Nueva Zelanda a la cabeza, presentaron las frecuen-
analizar ambos índices por separado. Por otro lado, además de cias más elevadas (Figura 2). Ambos estudios, el ISAAC y el
definir al asma como variable dicotómica (enfermo o no enfermo), ECRHS, mostraron una fuerte correlación en las estimaciones de
también puede utilizarse una graduación de síntomas convir- prevalencia(17).
tiéndola en continua. Esta alternativa puede ser muy útil cuando Los datos del ISAAC(15) y del ECRHS(18) en España reflejan
el tamaño muestral es limitado(4). también una gran variabilidad entre los distintos centros (Figu-
ras 3 y 4), situándose en ambos estudios en posiciones interme-
Frecuencia, distribución y carga de enfermedad dias respecto a otros países participantes. La prevalencia obser-
Incidencia vada en otros estudios, como el realizado en la Comunidad de
La estimación de la incidencia (casos nuevos de enfermedad Madrid, oscila también en este rango de valores(19).
en una población durante un periodo de tiempo definido) pro-
viene de los estudios de tipo cohorte, en los que se sigue durante Utilización de servicios sanitarios
un periodo de tiempo a una muestra, muchas veces de base Demanda en atención primaria
poblacional. El promedio de incidencia anual, definida como El primer nivel de asistencia capta un gran espectro del asma,
asma diagnosticada por un médico, oscila entre 0,6 y 29,5 por recibiendo, además de la demanda por asma moderada y grave,
cada 1.000 personas(13). Este rango tan amplio es atribuido a los los cuadros más leves. Al igual que en las estimaciones pobla-
diferentes grupos de edad estudiados y a la propia variabilidad cionales, la exactitud diagnóstica es ampliamente mejorable,
geográfica. En España, los resultados del ECRHS muestran, en especialmente en el parámetro de sensibilidad(20,21).
la población de 20 a 44 años, un promedio de 5,5 casos nuevos En la población general, la incidencia anual de episodios de
por 1.000 anuales(14). asma en los servicios de atención primaria de Inglaterra y Gales,
que disponen de un sistema de atención relativamente similar al
Prevalencia nuestro, es de alrededor del 2%(22). En España, algunas redes de
Los estudios de prevalencia (proporción de personas enfer- “médicos centinela”, constituidas por pediatras y generalistas,
mas en un momento o periodo de tiempo determinado) son, vigilan de forma específica esta enfermedad. En la Comunidad
con mucho, los más utilizados para estimar la frecuencia de esta de Madrid, las estimaciones más recientes describen una inci-
enfermedad. La prevalencia puede referirse a las personas que dencia anual de 3,5 episodios por cada 100 habitantes de 0 a
han tenido asma alguna vez en la vida, lo que define el término 14 años y de 0,6% en los mayores de 14 años(23), es decir, datos
“asma acumulada”, o en un periodo reciente, generalmente muy parecidos a los observados en Inglaterra y Gales(22).
en los últimos 12 meses, lo que se denomina “asma actual o
activa”. Demanda de urgencias hospitalarias
Como comentábamos anteriormente, dos estudios multi- La demanda en urgencias hospitalarias refleja una mayor
céntricos, el ISAAC en población infantil y el ECRHS en adultos, gravedad de esta enfermedad, aunque varía en función de las
estiman la prevalencia de asma utilizando criterios estandariza- características de los dispositivos asistenciales. En España, alre-
dos y permiten comparar las variaciones de la frecuencia de enfer- dedor del 1% del total de urgencias atendidas en el hospital en
medad entre regiones y países. la población mayor de 14 años es debida a esta enfermedad(24,25),
Australia (4)
Australia (1)
Perú (1)
Nueva Zelanda (6)
Nueva Zelanda (4) Singapur (1)
Omán (1)

12: 315-35(15).
Reino Unido (15)
Reino Unido (4) Japón (1)
Costa Rica (1)
Estados Unidos (1) Nigeria (1)
Filipinas (1)
Kuwait (1)
Suecia (3) Panamá (1)

Respir J 1996; 9: 687-95(16).


Estados Unidos (3)
Suiza (1) Canadá (2)
Uruguay (1)
Irlanda (1)
Irlanda (2) Brasil (5)
Sudáfrica (1)
Portugal (2) Francia (5)
Paraguay (1)
Portugal (4)
Francia (5) Marruecos (3)
Líbano (1)
Holanda (3) Tailandia (2)
Hong Kong (1)
Kenia (2)
13-14 años

Noruega (1) Malta (1)


Malasia (5)
Italia (3) Chile (4)
España (8)
Suecia (2)
Dinamarca (1) Italia (13)
Taiwán (1)
España (6) Bélgica (1)
6-7 años

Pakistán (1)
Argentina (2)
Bélgica (2) Finlandia (4)
China (5)
India (1) Austria (2)
Alemania (2)
Méjico (1)
Islanda (1) India (14)
Grecia (1)
Alemania (2) Latvia (2)
Rumanía (1)
Georgia (2)
Austria (1) Irán (2)
Etiopía (2)
Argelia (1) Estonia (2)
Corea del Sur (2)
Polonia (3)
Grecia (1) Rusia (1)
Uzbekistán (2)
Estonia (1) Albania (1)
Indonesia (1)
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores

0%
2%
4%
6%
8%
0%
5%

10%
12%
14%
10%
15%
20%
25%
30%

and Allergies in Childhood). Entre paréntesis el número de centros participantes en cada país. Adaptado de Eur Respir J 1998;

Community Respiratory Health Study). Entre paréntesis el número de centros participantes en cada país. Adaptado de Eur
FIGURA 2. Prevalencia de “asma activa” (ataques de asma en el último año o tomar medicación). Estudio ECRHS (European
FIGURA 1. Prevalencia de “asma acumulada” (asma alguna vez en la vida). Estudio ISAAC (International Study of Asthma
611
612 Epidemiología y etiopatogenia del asma

6-7 años 13-14 años


Bilbao 10,1 Bilbao 16,3
Valencia 12,1
Valencia 6,2
Barcelona 11,1
Cartagena 6,2 Cádiz 11,2
Cartagena 10,5
Pamplona 4,3
Pamplona 8,7
Castellón 4,3 Castellón 7,8
Valladolid 6,3

Mediana ISAAC España 6,2 Mediana ISAAC España 11

0 6 28 410 12 0 5 10 15 20
% %
FIGURA 3. Prevalencia de “asma acumulada” (asma alguna vez en la vida). Estudio ISAAC (International Study of Asthma
and Allergies in Childhood) España. Adaptado de Eur Respir J 1998; 12: 315-35(15).

Hombres de 20-44 años Mujeres de 20-44 años


Huelva 2,4 Huelva 3,4

Albacete 2,3 Albacete 2,7

Oviedo 2,3 Barcelona 2,7

Barcelona 1,5 Oviedo 2

Galdakao 1,4 Galdakao 1,6

Mediana ECRHS España 2,3 Mediana ECRHS España 2,7

02 31 4 0 1 2 3 4
% %
FIGURA 4. Prevalencia de crisis de asma en los últimos 12 meses. Estudio ECRHS (European Community Respiratory Health
Study) España. Adaptado de Med Clín (Barc) 1995; 104: 487-92(18).

cifra que se incrementa si consideramos también a la población Existe una importante variabilidad entre los países, más atri-
infantil. La carga de enfermedad en este nivel asistencial se apro- buible a problemas de codificación de la causa de la muerte y
ximaría a 200 episodios por cada 100.000 habitantes y año(26). a desequilibrios en la cobertura sanitaria, que a diferencias en
la frecuencia o gravedad del asma. Como se puede observar en
Ingresos hospitalarios la Figura 5, los países de Europa del Este, Asia, Sudáfrica y Cen-
El asma es una de las principales causas de hospitalización troamérica, cuya frecuencia de enfermedad (a excepción de estos
en la infancia, de modo que 1 de cada 4 personas atendidas en últimos) no está considerada entre las más altas, describen las
urgencias hospitalarias requieren ser ingresadas para el control mayores tasas de mortalidad. Por el contrario, los países anglo-
de su enfermedad. A finales de los años 1990, la frecuencia de sajones, que presentan las mayores tasas de frecuencia de enfer-
hospitalizaciones en Estados Unidos fue de 180 episodios por medad, tienen una mortalidad contenida. En España, durante
cada 100.000 habitantes y año(27), valores intermedios a los obser- el año 2002 se produjeron 894 fallecimientos, lo que supone
vados en Escocia, donde se alcanzaban los 236 por 100.000(28), que 1 de cada 412 muertes está originada por esta enfermedad,
y en Canadá, con unas tasas de 10 por 100.000 habitantes y con una tasa de 2,1 por 100.000 habitantes, una de las más
año(29). bajas de la región europea(31).
Aunque se dispone de pocos datos de los ingresos hospita-
larios en España, las cifras corresponden a incidencias del orden Distribución del asma
de 50 ingresos (primarios y repetidos) por cada 100.000 habi- Edad y sexo
tantes y año(26). El inicio del asma se produce en las épocas tempranas de
la vida(32) donde alcanza su máxima frecuencia, especialmente
Mortalidad en lo que atañe a los indicadores de demanda sanitaria(27). Según
Una de cada 250 muertes es debida al asma, lo que supone datos de prevalencia, en España en población de 2 a 44 años,
una frecuencia muy baja comparada con la originada por otras casi 1 de cada 2 asmáticos reconocen que la primera crisis se ini-
enfermedades crónicas. Sin embargo, la mayoría de estos falle- ció antes de los 5 años(18).
cimientos son evitables y suponen un fracaso en el manejo de La distribución por sexo varía con la edad. Así, en la infan-
la enfermedad. De hecho, el asma está incluida en la lista de cia, el asma es más frecuente en los hombres que en las muje-
enfermedades de mortalidad evitable(30). res, invirtiéndose esta relación en la adolescencia(33-35). Esta dis-
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 613

cialmente la mayor distribución en la población femenina. Tam-


bién se han implicado cambios hormonales para explicar esta
reversibilidad(38). Por otro lado, parece que los hombres y las
mujeres responden de forma diferente a su enfermedad, obser-
vándose diferencias en la utilización de los recursos asistencia-
les, en la observancia del tratamiento y en la estimación de la
calidad de vida(39,40).

Nivel socioeconómico
El estudio de la relación entre el asma y el nivel socioeconó-
mico es difícil, ya que no se puede distinguir, a partir de las defi-
niciones utilizadas, entre la enfermedad “real” y la “diagnosti-
cada”, que pueden interpretarse de forma desigual entre subgrupos
de población con diferente nivel educativo y/o clase social(41).
En la actualidad se aprecia una falta de consistencia en la aso-
ciación entre el asma y la baja posición socioeconómica(42,43).
FIGURA 5. Distribución geográfica de la mortalidad (ICD-9:
490-493) por asma. Tasa de mortalidad por 100.000 asmá-
Puede atribuirse a que numerosos factores de riesgo, tales como
ticos de 5-34 años. Fuente: Global Burden of Asthma (GINA)(1). el tabaquismo, el bajo peso al nacer, la contaminación atmosfé-
rica, la exposición a determinados alérgenos y la obesidad, son
más frecuentes en los estratos de población de clase social baja.
tribución se observa en todos los indicadores de morbilidad, pero Por el contrario, la atopia, la fiebre del heno y el eccema, son más
es más evidente en la prevalencia poblacional y en la demanda frecuentes en las poblaciones de mayor nivel socioeconómico.
sanitaria en los dispositivos asistenciales del primer nivel. Pre-
cisamente en la Figura 6 se puede observar la diferente distri- Tendencias recientes
bución por edad y sexo objetivada por la red de “médicos Después de décadas en las que el incremento de la frecuen-
centinela” en atención primaria(23). Aunque no se conocen exac- cia del asma parecía imparable, diversos estudios muestran impor-
tamente los mecanismos implicados, parece que el mayor grado tantes cambios en la tendencia de esta enfermedad(44-46):
de estrechamiento, la hipertonicidad muscular de las vías res-
piratorias(36), así como la mayor frecuencia de atopia en los varo- Mortalidad
nes durante la infancia, podrían explicar estas diferencias. En Durante las décadas de los 1960 y 1970, diversos países
la edad adulta, diversos subtipos de asma, como la enfermedad anglosajones experimentaron un importante incremento de la
respiratoria exacerbada por la Aspirina®(37), pueden explicar par- mortalidad por asma(47-49). En esa época, la mortalidad se mani-

70 Hombres Mujeres

60
Episodios por mil habitantes

50

40

30

20

10

0
a4

a9

y+
a1

a1

a2

a2

a3

a3

a4

a4

a5

a5

a6

a6

a7

a7

a8

85
0

10

15

20

25

30

35

40

45

50

55

60

65

70

75

80

Grupos de edad
FIGURA 6. Distribución de la demanda sanitaria por asma en atención primaria por edad y sexo. Fuente: Red de Médicos
Centinela de la Comunidad de Madrid, 2003(23). Consejería de Sanidad y Consumo.
614 Epidemiología y etiopatogenia del asma

festó también en forma de picos epidémicos en el Reino Unido, La mejoría de los indicadores de la mortalidad y de la
Irlanda, Australia, Noruega y Nueva Zelanda(50-52), que fueron demanda sanitaria, así como de los síntomas relacionados con
atribuidos a diferencias en el manejo terapéutico de la enferme- el asma en las encuestas de prevalencia, en comparación con los
dad(53,54). cambios menos positivos de la prevalencia diagnosticada, sugie-
Las tendencias más recientes describen un descenso de la ren un mayor control de la enfermedad(82,85). De hecho, los estu-
mortalidad en la población general en países de gran diversidad dios ecológicos, que relacionan los datos de demanda sanita-
geográfica(55,61), incluido España(61). ria con las ventas de medicamentos, han descrito una asociación
del incremento de su utilización, especialmente de los corticoi-
Morbilidad des inhalados, con el descenso de los ingresos hospitalarios(74,76,79).
En la Tabla I se sintetiza la numerosa información publicada
desde el año 2000, sobre diversos indicadores de morbili- Calidad de vida
dad(22,28,29,62-102). La demanda sanitaria por asma, especialmente Al igual que en otras enfermedades crónicas, las medidas de
en población infantil, después de décadas de incremento, parece calidad de vida relacionadas con la salud son útiles para valo-
estar estabilizándose o descendiendo en diversos países de dife- rar de forma más integral la enfermedad y su repercusión en las
rentes continentes. Mientras la morbilidad en atención prima- actividades cotidianas. Es una medida multidimensional que
ria muestra descensos muy recientes, a partir de la segunda recoge como dominios más importantes el estado funcional, el
mitad de los años 1990(22,62,63,66,67), los cambios en el patrón de físico, el psicológico o emocional y el social(103). Los cuestiona-
la morbilidad hospitalaria son anteriores, con descensos de la rios de calidad de vida se correlacionan con la gravedad del
frecuencia de hospitalización por asma desde finales de los asma(104), resultando incluso más sensibles que medidas objeti-
años 1980 y principios de los 1990. A pesar de ello, existen vas como la HRB(105), especialmente en personas con asma leve.
variaciones en algunos estratos poblacionales, especialmente Existen numerosos instrumentos de medición validados, espe-
en los niños de corta edad, en que se están detectando incre- cíficos o no de esta enfermedad(103), algunos de ellos en nues-
mentos(70,72,74-77). tro contexto social, como el Cuestionario de Calidad de Vida en
A diferencia de los cambios bastante consistentes de la el Asma de Juniper (AQLQ), el Cuestionario Respiratorio del St.
demanda sanitaria, los estudios de prevalencia poblacional no George (SGRQ)(106), el Cuestionario de Calidad de Vida en el Asma
muestran todavía patrones tan claros. A pesar de ello, diversos Pediátrica (PAQLQ)(107), o el de Salud y Enfermedad Infantil: edi-
estudios comienzan a describir una tendencia hacia la estabili- ción de Perfil Adolescente (CHIP-AE)(108).
zación(83,88,90,96,99), o incluso un descenso de la prevalen- Una reciente revisión no ha encontrado evidencia de que las
cia(92,95,97,101), situación que no se observaba en la década pasada. limitaciones en las actividades cotidianas en la infancia y en la
En España, aun con las limitaciones de los escasos datos dis- adolescencia debidas al asma tengan consecuencias sociales o
ponibles, la demanda en los servicios de atención primaria(23) y económicas importantes a largo plazo(109).
en los de urgencias hospitalarias(70) también tiende a estabili-
zarse. Sin embargo, la información de ingresos hospitalarios es Coste económico
inconsistente(26,70). Respecto a la prevalencia poblacional (Tabla Los costes directos de una enfermedad son definidos como
II), la comparación de la segunda encuesta del estudio ISAAC en los recursos consumidos, incluidos los asociados a fármacos, con-
España muestra un incremento de la prevalencia en las pobla- sultas médicas y gasto hospitalario. Los costes indirectos son
ciones de 6-7 y 13-14 años, mientras que los síntomas relacio- aquellos recursos perdidos, incluyendo el absentismo laboral (del
nados con el asma sólo aumentan en los participantes más jóve- enfermo y/o de sus familiares), y los debidos a muerte prema-
nes(87). En la Comunidad de Madrid también se ha observado un tura o incapacidad. Mientras que los costes directos pueden ser
incremento de la prevalencia acumulada y asma activa en la medidos con exactitud, no ocurre lo mismo con los indirectos,
población de 18 a 44 años(26). dado que su evaluación depende de diversas condiciones socia-
Se ha debatido mucho sobre el significado de estos cambios, les incluyendo la situación del mercado laboral y de la protec-
especialmente si el fuerte aumento de la frecuencia durante las ción social(110).
últimas décadas correspondió a un incremento real de la inci- Los estudios de evaluación económica del asma se han
dencia de la enfermedad, a un mejor diagnóstico, o incluso a un basado en dos estrategias: aquellos que usan bases de datos
incremento de la gravedad. En la reconstrucción de las ten- poblacionales administrativas estimando costes para regiones
dencias de la incidencia en las cohortes nacidas entre 1946-1971 o países, y aquellos que utilizan muestras clínicas de pacientes.
del estudio ECRHS, el riesgo se incrementó en las sucesivas cohor- Los estudios de base poblacional tienen la ventaja del mayor
tes en la mayoría de los países, tanto en hombres como en muje- grado de generalización, mientras que los basados en muestras
res, y tanto en el asma de inicio en la infancia como en el asma de pacientes tienen mayor grado de exactitud en el diagnós-
de inicio en la edad adulta. Este incremento generacional, expli- tico y permiten analizar costes según el grado de intensidad de
cado por un efecto periodo y/o cohorte, parece estar relacio- la enfermedad, que en el caso del asma es un aspecto muy
nado con un verdadero incremento de la enfermedad aunque importante(111).
no se puede descartar un efecto debido al incremento genera- Hay una gran variabilidad entre los países, que deriva de las
cional del diagnóstico del asma(32). diferencias en la metodología de evaluación de los costes, en
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 615

TABLA I. Tendencias recientes* de diversos indicadores de demanda sanitaria por asma

Primer autor Años de


(referencia) País estudio Edad Indicador estudiado Definición Tendencia

Demanda en atención primaria


Bollag (62) Suiza 1989-2002 Todas Incidencia de episodios en Diagnóstico médico Incremento hasta 1994, estabilización
atención primaria hasta el 2000, y posterior descenso
Fleming (22) Reino Unido 1989-1998 Todas Incidencia de episodios en Diagnóstico médico Incremento hasta 1993-94 y
(Inglaterra y Gales) atención primaria posterior descenso
Senthilselvan (63) Canadá 1991-1998 Todas Prevalencia en atención primaria Diagnóstico médico Disminución
Soriano (64) Reino Unido 1990-1998 Todas Prevalencia en atención primaria Diagnóstico médico Incremento
Stafford (65) Estados Unidos 1978-2002 Todas Incidencia de episodios en la ICD-9: 493 Incremento desde 1978 a 1990 y
atención sanitaria (extrahospi- posterior estabilización
talaria principalmente)
Sunderland (66) Reino Unido 1980-2002 0-14 Incidencia de episodios en Diagnóstico médico Incremento hasta 1993 y posterior
(Inglaterra y Gales) atención primaria descenso
Vargas (67) Méjico 1991-2001 0-64 Incidencia de episodios en Diagnóstico médico Incremento hasta 1997 y posterior
atención primaria, urgencias descenso
e ingresos hospitalarios
I n g re s o s h o s p i t a l a r i o s
Akinbami (68) Estados Unidos 1980-1999 0-17 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 Incremento hasta 1996 y posterior
estabilización
Ansari (69) Australia (Victoria) 1993-2000 Todas Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 Descenso
Benito (70) España (Bilbao) 1993-1997 0-14 Demanda de urgencias Diagnóstico médico Estabilización de las urgencias,
Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 aunque aumentan en < 5 años.
Descenso de los ingresos
Björ (71) Suecia 1987-2000 0-8 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493; Incremento hasta 1993, estabilización
ICD-10: J45-46 hasta 1996 y posterior descenso
Crighton (29) Canadá (Ontario) 1988-2000 Todas Ingresos hospitalarios ICD-9-MC: 493 Descenso
Engelsvold (72) Noruega (Rogaland) 1984-2000 1-14 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 Incremento hasta 1990 y posterior
estabilización. Incremento en niños
de 1-2 años; descenso en 3-4 y
estabilización en mayores
Getahun (73) Estados Unidos 1995-2002 Todas Ingresos hospitalarios ICD-9-MC: 493; Descenso
ICD-10: J45-J45.9
Jonnasson (74) Noruega (Oslo) 1980-1995 0-14 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 Incremento en 0-4 años
Kao (75) Taiwan 1990-1998 2-14 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 Incremento, especialmente en 2-4 años
Korhonen (76) Finlandia (Kuopio) 1988-1997 0-16 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493; Incremento de primeras admisiones,
ICD-10: J45-J46 especialmente en menores de 2 años
y descenso de readmisiones
Malmstrom (77) Finlandia 1976-1995 0-14 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493 Incremento, especialmente en 0-4
años. En 10-14 años desciende
Morrison (28) Reino Unido 1981-1997 Todas Ingresos hospitalarios ICD-9: 493; Descenso en 0-14 años e incremento
(Escocia) ICD-10: J45-J46 en > 14 años
Ng (78) Singapur 1991-1998 Todas Ingresos hospitalarios ICD-9: 493; Descenso
ICD-10: J45-J46
Wennergren (79) Suecia 1985-2000 5-18 Ingresos hospitalarios ICD-9: 493; Descenso
ICD-10: J45-J46
*Artículos publicados desde el año 2000.
ICD: Clasificación Internacional de Enfermedades, -9: 9ª revisión, -10: 10ª revisión.
616 Epidemiología y etiopatogenia del asma

TABLA II. Tendencias recientes* de la prevalencia de asma

Primer autor Años Número de


(referencia) País de estudio participantes Edad Indicador estudiado Definición Tendencia

Anderson (80) Reino Unido 1995-2002 15.083/15.755 12-14 Prevalencia de asma y Asma acumulada y Incremento de asma
(Inglaterra, síntomas relacionados síntomas relacionados acumulada
Escocia, Gales, con el asma con el asma en los Descenso de síntomas
Guernsey, Man últimos 12 meses
y Jersey) autodeclarados
Anthracopoulos Grecia (Patras) 1978/1991/1998 3.735/2.952/3.397 8-10 Prevalencia de asma y Asma y sibilancias en Incremento
(80) síntomas relacionados los dos últimos años y
con el asma actuales
Barraclough (82) Reino Unido 1992-93/1998-99 3.047/2.803 20-44 Prevalencia de asma y Asma acumulada y Incremento de asma y
(Newcastle- síntomas relacionados síntomas autodeclarados síntomas asmáticos
upon-Tyne) con el asma e HRB en los últimos 12 meses Descenso de la HRB
Provocación bronquial con
metacolina
Braun-Fahrlander Suiza 1992-93/1995- 1.324/1.668/1.250 13-14 Prevalencia de asma y Asma y síntomas auto- Estabilización
(83) 97/1999-2000 síntomas relacionados declarados en los últimos
con el asma 12 meses
Brogger (84) Noruega (Oslo) 1972/1998-99 17.694/15.664 15-70 Prevalencia de asma y Asma y sibilancias Incremento
síntomas relacionados acumuladas autodeclarados
con el asma
Chinn (85) Multicéntrico 1991-93/1998/-03 11.168 20-44 Prevalencia de asma y Asma activa y síntomas en Incremento de
ECRHS síntomas relacionados los últimos 12 meses prevalencia de asma
con el asma pero no de síntomas
Downs (86) Australia 1982/1992/1997 769/850/1.016 8-11 Prevalencia de asma y Asma acumulada y Incremento
(Wagga) síntomas relacionados sibilancias actuales
con el asma
García-Marcos España 1994-95/2002-03 42.417/42.813 6-7 y Prevalencia de asma y Asma acumulada y Incremento de
(87) 13-14 síntomas relacionados sibilancias actuales prevalencia de asma
con el asma Aumento de síntomas
en 6-7 años y estabili-
zación en 13-14 años
Kalyoncu (88) Turquía 1994/1999 4.299/4.512 18-19 Prevalencia de asma y Asma y sibilancias actuales Estabilización de
(Ankara) síntomas relacionados autodeclarados prevalencia de asma
con el asma Incremento síntomas
Latvala (89) Finlandia 1960-2003 ND 18-19 Prevalencia de asma Diagnóstico médico en reco- Incremento
nocimiento del servicio militar
Lee (90) China 1995/2001 3.618/4.448 6-7 Prevalencia de asma y Asma acumulada y Estabilización
(Hong Kong) sibilancias sibilancias acumuladas y
actuales autodeclarados
Linneberg (91) Dinamarca 1989/1998 3.624/4.185 15-41 Prevalencia de asma Falta de aire en presencia Incremento
(Copenhague) alérgico de polen, pelo de animales
y polvo de casa
autodeclarados
Mommers (92) Alemania 1989/1993/ 1.794/1.526/ 8-9 Prevalencia de síntomas Sibilancias y falta de aire Descenso de sibilancias
1997/2001 1.670/1.154 relacionados con con sibilancias desde 1989
el asma Aumento de falta de aire
con sibilancias desde
1989 a 1997 y posterior
descenso hasta 2001
Ng Man Kwong Reino Unido 1991/1999 4.580/5.321 8-9 Prevalencia de asma y Asma y sibilancias Incremento
(93) (Sheffield) síntomas relacionados acumuladas y actual
con el asma autodeclarados
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 617

TABLA II. Tendencias recientes* de la prevalencia de asma (continuación)

Primer autor Años Número de


(referencia) País de estudio participantes Edad Indicador estudiado Definición Tendencia

Rizwan (94) Reino Unido 1991//1993/1998 1.171/2.368/1.964 5-11 Prevalencia de asma y Asma acumulada y tos, Incremento prevalencia
(Liverpool) síntomas relacionados sibilancias, falta de aire asma
con el asma en los últimos 12 meses, Estabilización síntomas
autodeclarados
Robertson (95) Australia 1993/2002 2.843/2.968 6-7 Prevalencia de asma y Asma y sibilancias Descenso
(Melburne) síntomas relacionados acumuladas y actual
con el asma autodeclarados
Ronchetti (96) Italia (Roma) 1974/1992/1998 2.259/1.229/1.139 6-14 Prevalencia de asma Asma acumulada Incremento desde 1974
a 1992 y posterior
estabilización
Toelle (97) Australia 1982/1992/2002 816/1.052/1.222 8-11 Prevalencia de asma y Asma y sibilancias Incremento de 1982 a
(Belmont) síntomas relacionados acumuladas y actual 1992 y posterior
con el asma autodeclarados descenso
Upton (98) Reino Unido 1972-76/1996 1.708/1.124 45-54 Prevalencia de asma y Asma acumulada y Incremento de
(Renfrew síntomas relacionados sibilancias y falta de aire prevalencia de asma
y Pasley) con el asma actuales Descenso de síntomas
Verlato (99) Italia (Turín, 1991-93/1998-00 6.031/6.876 20-44 Prevalencia de asma y Ataques de asma y Estabilización de la
Pavía, Verona) síntomas relacionados síntomas relacionados con prevalencia de asma
con el asma el asma en los últimos Incremento síntomas en
12 meses autodeclarados 20-26 años
Descenso síntomas en
32-45 años
Wang (100) Singapur 1994/2001 6.238/9.363 6-7 y Prevalencia de asma y Asma y sibilancias Estabilización en asma
12-15 síntomas relacionados acumuladas y actual acumulada en 6-7 años
con el asma autodeclarados e incremento en 12-15
Descenso de sibilancias en
6-7 y aumento en 12-15
Wong (101) China 1994-95/2002 4.667/3.321 13-14 Prevalencia de síntomas Sibilancias autodeclaradas Descenso
(Hong Kong) relacionados con el asma
Wooddruff (102) Estados Unidos 1980-2000 13.376 0-17 Prevalencia de asma Asma autodeclarado en Incremento
(en año 2000) los últimos 12 meses
*Artículos publicados desde el año 2000.

especial los indirectos, y de las diferencias en el tratamiento y ORÍGENES DEL ASMA: FACTORES DE RIESGO
en el sistema sanitario(110,112). En España, dos estudios basados DE LA ENFERMEDAD
en muestras de pacientes han puesto de manifiesto los costes
de esta enfermedad controlando el grado de gravedad. El pri- Genéticos
mero de ellos, realizado en Barcelona en 1995(113), objetivó En la actualidad sigue sin conocerse el origen del asma. Se
un coste por paciente y año de 2.879 dolares, de los cuales el ha observado que tiende a agruparse en familias y que la con-
30,8% correspondieron a costes directos y el 69,2%, a indirec- cordancia de asma en los gemelos monocigotos es mayor que
tos. El otro estudio, realizado en 8 centros hospitalarios durante la encontrada en los gemelos no idénticos. Los diferentes tra-
el año 2000(114), estimó en 1.556 € el coste de una crisis asmá- bajos desarrollados en la genética del asma sustentan que se
tica de base hospitalaria, del cual 93,5% correspondieron a trata de una enfermedad que, además de ser multifactorial, es
costes directos y el 6,2%, a indirectos. En ambos estudios el poligénica, ya que no se ha encontrado un gen suficiente para
12-13% del total del gasto correspondían al tratamiento far- causar la enfermedad, sino numerosos genes ligados o aso-
macológico. Es importante destacar que los pacientes con asma ciados a ella. Por otra parte, hay una fuerte evidencia de que
grave, aun teniendo en cuenta que son una pequeña propor- los genes encontrados confieren susceptibilidad en lugar de la
ción del total de los asmáticos, generan una gran parte del propia enfermedad, como ocurre en la enfermedad mende-
gasto sanitario. liana(115).
618 Epidemiología y etiopatogenia del asma

En este sentido, parece lógico continuar en la búsqueda de asma y la atopia, ya que codifican las síntesis de citocinas (IL-3,
un perfil genético que contemple varios genes cuyos efectos IL-4, IL-5, IL-9, IL-12, IL-13 y factor estimulador de colonias de
(tanto de susceptibilidad como de protección) varíen de acuerdo granulocitos y monocitos [GM-CSF]) y de los receptores corti-
a las interacciones que mantengan con el ambiente y con otros costeroideo y β2-adrenérgico. El gen de la IL-4 desempeña un
genes, todo ello condicionado parcialmente por el componente papel importante en la respuesta inmune atópica porque induce
étnico de la población. la síntesis de IgE por las células B y aumenta la diferenciación de
Dada la estrecha relación del asma con la respuesta alérgica las células T hacia un fenotipo Th2.
Th2 mediada por la IgE, se ha contemplado la idea de que la
enfermedad es el resultado de una alteración de la regulación o Cromosoma 6
de los mecanismos efectores de la respuesta inmune que la des- Los genes del complejo principal de histocompatibilidad
vía hacia un patrón Th2. (MHC) se encuentran en la región 6p21. Esta región ha mos-
Así, diferentes estudios han recogido la importancia de trado una unión fuerte al fenotipo de asma y de atopia, así como
algunas regiones cromosómicas en el asma o en ciertos fe- una influencia en el desarrollo de las enfermedades alérgicas(120).
notipos relacionados con el asma (IgE total, IgE específica El cromosoma 6p contiene el gen del TNF-α, citocina proinfla-
frente a alérgenos, HRB, eosinofilia). Estas regiones se locali- matoria que se ha implicado en la patogénesis del asma y en
zan en los cromosomas 5q31-33, 6p21-23, 11q13, 12q14-24 la síntesis de la IgE total(121).
y 13q21-24. La arginina es el sustrato de la sintasa del óxido nítrico (NOS)
Para los estudios de la asociación del asma con las variantes y también de la arginasa I. La arginasa I se localiza en la región
polimórficas de los genes candidatos, no es posible hacer una cromosómica 6p23 y se encarga de la síntesis de poliaminas y
lista de genes predisponentes o protectores porque los resulta- de prolina que controlan la proliferación celular y la producción
dos de las investigaciones realizadas por el momento no son de colágeno. Kocyigit y cols.(122) observaron un grado de corre-
concluyentes. Hoffjan y cols.(116) consideran que hay ocho genes lación entre la actividad de la arginasa y los valores de manga-
sobresalientes, porque sus variantes han sido asociadas con feno- neso (Mn), elemento necesario para la actividad y la estabilidad
tipos de asma en cinco o más publicaciones. Estos son: la inter- de la enzima. Una concentración de Mn más baja podría causar
leucina IL-4, IL-13, ADRB2, HLA-DRB1, el factor de necrosis tumo- una menor actividad de la arginasa favoreciendo la sobrepro-
ral (TNF), alfa-linfotoxina LTA, la subunidad β del receptor de alta ducción de óxido nítrico en el asma.
afinidad de la IgE (FcεRIβ) y el gen IL-4RA. A continuación se
comentan algunos datos relevantes encontrados en los estudios Cromosoma 7
de expresión genética. En ciertas familias finlandesas y franco-canadienses se
observó una asociación del cromosoma 7p14-p15 con la exis-
Estudios de expresión genética tencia de asma y con los valores de la IgE. Posteriormente, el
Cromosoma 1 gen GPRA (receptor asociado a la proteína G para la suscep-
La adenosina es un nucleótido regulador que se genera como tibilidad del asma) se ha asociado con niveles elevados de la
respuesta al daño y al estrés celular. Algunos estudios muestran IgE(123).
que el receptor de la adenosina A1 (A1AR) puede activar los neu-
trófilos y los monocitos. La adenosina ha sido asociada con la Cromosoma 11
regulación del asma y de otras enfermedades respiratorias(117). Muy cerca de la región del cromosoma 11q13, que contiene
El A1AR desempeña un papel en la regulación de la inflamación el gen del FcεRIβ, se han encontrado los genes de la GST (trans-
al aumentar la producción de IL-4 e IL-13 y de moco, esto último, ferasa del tioglutatión), que se han involucrado en el asma y en
a través del estímulo del CLCA1 (miembro 1 de la familia del la atopia(124).
canal del cloro activado por el calcio).
Cromosoma 12
Cromosoma 2 El cromosoma 12 contiene varios genes candidatos que pue-
Dos grupos de trabajo independientes han publicado los den ser importantes en el desarrollo del asma y de la atopia.
resultados de su clonación posicional en el cromosoma 2. Encon- Se incluyen el gen precursor del interferón γ (IFNγ), el CD69 (antí-
traron 2 genes candidatos diferentes en la región del agrupa- geno de activación precoz CD69), el VDR (receptor de la vita-
miento (cluster) de la IL-1 y en la región 2q14, relacionados con mina D3), el STAT6 (transductor de la señal y activador de la
el equilibrio de las citocinas inflamatorias: IL-1RN (precursor pro- transcripción 6) y el NOS1 (sintasa de óxido nítrico de tipo 1).
teico del antagonista del receptor de la IL-1) y DPP10 (dipeptidil Varios estudios han mostrado una asociación del cromosoma
peptidasa 10)(118,119). 12q13-26 con el asma o con los diversos fenotipos relacionados
con ésta en poblaciones diferentes(125,126).
Cromosoma 5
Varios genes en la región del cromosoma 5q31-33, conoci- Cromosoma 13
dos como el agrupamiento de la IL-4, pueden ser importantes La región cromosómica 13q14 se ha relacionado con el desa-
en el desarrollo o progresión de la inflamación asociada con el rrollo del asma y con la síntesis elevada de la IgE(127).
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 619

Cromosoma 14 Factores en la edad temprana


La asociación de los marcadores del cromosoma 14 con el Citocinas en el ambiente uterino
desarrollo de asma o de los fenotipos relacionados con ésta se Las citocinas que se generan en el útero probablemente pro-
ha ilustrado con algunas asociaciones de genes, tal como el AATC tegen al feto de las respuestas inmunitarias citotóxicas mater-
(precursor de la α-1 antiquimotripsina)(128). nas, aunque pueden afectar también el desarrollo del sistema
Recientemente, se ha observado una asociación entre el mar- inmune fetal. Por ejemplo, las citocinas Th2 (IL-4, IL-5 e IL-10)
cador D14S63, localizado en el gen del PTGDR (receptor de la que se producen en el útero durante la gestación, tanto en los
prostaglandina D2), y los valores séricos de la IgE total en fami- humanos como en los roedores, pueden inhibir la respuesta
lias asmáticas(129). inmune materna mediada por células que podría ser perjudicial
para el feto(135).
Cromosoma 20 Las mismas citocinas que protegen al feto de la respuesta
El gen ADAM33 (desintegrina y metaloproteasa 33) se loca- citotóxica inmunitaria materna pueden afectar al desarrollo
liza en el cromosoma 20p13, y puede contribuir al desarrollo de del sistema inmunológico fetal. Unos niveles elevados de citoci-
asma y de HRB a través de la modificación de la liberación de nas Th2 pueden reducir la secreción de IFNγ y de otras citocinas
citocinas y de los receptores para éstas en la superficie celular(130). Th1 por el feto, induciendo un desequilibrio en la producción
Se ha sugerido que el ADAM33 puede estar involucrado en la de citocinas y favoreciendo el desarrollo de las enfermedades
adhesión celular y en la reestructuración de la pared de las vías alérgicas. La alergia materna favorece la desviación de la res-
respiratorias(131). puesta inmunitaria fetal hacia un patrón Th2, lo que podría expli-
car el mayor riesgo de desarrollar enfermedades alérgicas en los
Apoptosis de los eosinófilos niños que tienen antecedentes de alergia materna respecto a
La expresión de los genes de los eosinófilos y su papel en la los hijos de padre alérgico.
fisiopatología del asma ha sido extensamente estudiada por Tem-
ple y cols.(132). El estudio recoge cambios en el perfil de la expre- Sensibilización uterina
sión del ARN mensajero después del tratamiento con IL-5. Se Se dispone de datos experimentales de que la sensibilización
observaron ochenta genes para mostrar una diferencia en la regu- a determinados alérgenos puede ocurrir en el útero. Se han des-
lación entre los eosinófilos tratados o no tratados con IL-5. crito varios casos de reacciones alérgicas en niños tras ingerir
Para la mayoría de estos genes se detectó un aumento de la por primera vez un determinado alimento. Considerando que la
expresión(73), mientras que sólo en siete genes se detectó una dis- IgE no puede atravesar la placenta, una explicación posible para
minución de su expresión. El aumento de la expresión de los genes este fenómeno puede ser que el feto la deglute al pasar al líquido
se sospecha que está involucrado en la adherencia (ICAM-1, CD24), amniótico por difusión. En este sentido, se ha observado una
en la migración, en la activación (IL-8, ERK-3, CCR-1, CD69) y en correlación entre la IgE materna y la que contiene el líquido
la supervivencia de los eosinófilos y/o de las células hematopo- amniótico(136). Los alérgenos también pueden difundir a través
yéticas (Pim-1, EGR-1). La expresión de cuatro genes (Pim-1, SLP- de la misma vía de la madre al feto(137).
76, DSP-5, CD24) fue importante en la supervivencia de los eosi- El intestino fetal también se involucra como consecuencia
nófilos en respuesta a la IL-5. De éstos, se ha sugerido que los dos de las interacciones materno-fetales, de modo que a partir de
genes que se restringieron a los eosinófilos (Pim-1 y SLP-76) podrían las semanas 14 a 16 de gestación se encuentran en él células
ser miembros importantes de las vías de regulación inflamato- presentadoras de antígeno, portadoras de moléculas de la clase
rias que controlan la supervivencia de dicho tipo celular. II del MHC, que pueden reconocer los antígenos que le llegan
deglutidos desde el líquido amniótico.
La respuesta al alérgeno o a la IL-4 Los receptores para la IgE, como son el CD23 y el CD21, se
Se realizó un estudio mediante la técnica de análisis en micro- expresan a partir de la semana 11 de gestación en células mono-
matrices (microarray) (40.000 genes) en un modelo de mono nucleares de la sangre periférica del feto, siendo capaces de res-
con asma alérgica. La expresión de los genes en el tejido pulmo- ponder a los alérgenos comunes a partir de la semana 22. Los
nar se evaluó 4, 18 y 24 horas después de la inhalación del antí- valores de la IgE en el cordón umbilical no se relacionan con el
geno Ascaris suum (broncoconstricción) o de la IL-4 (respuesta desarrollo posterior de asma, aunque los valores de la IgE sérica
alérgica). Los cambios observados en la expresión de los genes al final del primer año de vida se han asociado con la aparición
fueron diferentes en función de si la provocación se efectuaba posterior de sibilancias y asma. Esto nos hace pensar que en el
con el antígeno o con la IL-4(133). primer año de vida debe ocurrir algún hecho que altera la ten-
dencia del niño a responder con una enfermedad alérgica(138).
Factores medioambientales Los niños de alto riesgo, que padecen síntomas sugestivos
La expresión del fenotipo asmático depende de dos factores de alergia a los dos años, desarrollan respuestas presintomáti-
principales: la predisposición genética y la influencia medioam- cas Th2 en su primer año de vida. En cambio, en los niños de
biental, que ejercen un efecto aditivo sobre el riesgo de pade- bajo riesgo, asintomáticos, la respuesta Th2 está disminuida
cer asma infantil, mayor que el que se esperaría de cada uno de en su primer año de vida. La inmadurez de la función Th1 en
ellos por separado(134). el periodo perinatal puede ser un mecanismo importante en la
620 Epidemiología y etiopatogenia del asma

falta de supresión de la respuesta Th2 en los niños atópicos(139). mismo, se ha observado un aumento de los eosinófilos y de
Según algunos estudios, la administración de determinados anti- los neutrófilos en las muestras de esputo inducido de los pacien-
bióticos durante el embarazo aumenta la incidencia de atopia tes asmáticos durante las exacerbaciones de la enfermedad(149).
mientras que la administración de probióticos puede ayudar a El incremento de los eosinófilos y de los basófilos en la vía res-
prevenir el desarrollo de alergia en el niño(140). piratoria está asociado al gran número de sus progenitores en
el torrente sanguíneo 24 horas después de la inhalación del alér-
Factores de riesgo en edades posteriores geno, lo que sugiere que éste estimula a la médula ósea. Esta
Exposición a los alérgenos hipótesis se confirmó al constatar un incremento de las células
Los alérgenos ambientales han sido identificados como una progenitoras en la médula ósea 24 horas después de la inhala-
importante causa de asma en los estudios epidemiológicos(141). ción del alérgeno en pacientes con asma moderada(150).
Más del 80% de los niños con asma están sensibilizados a alér-
genos ambientales, particularmente a aquellos que se encuen- Infecciones
tran en su ambiente más cercano(142). El papel de las infecciones en la aparición de asma se ha dis-
La exposición a aeroalérgenos es una fuente importante de cutido ampliamente, tanto para apoyarlo como para descartarlo,
sensibilización alérgica y un precipitante común de los síntomas incluso desde hace años se acepta que algunas infecciones y las
asmáticos, tanto en los niños como en los adultos. La importan- exposiciones microbianas pueden, en cierto modo, proteger
cia que cada uno de ellos tiene como desencadenante de asma frente al desarrollo de asma. La reducción de estas exposiciones
dependerá, entre otros factores, del área geográfica en la que podría ser un factor principal en el incremento global de asma(151).
viva el sujeto asmático, de las condiciones particulares de la Se ha propuesto, así, que las mejoras en la higiene contribu-
vivienda y de la convivencia con animales domésticos. yen al incremento de la prevalencia del asma debido a que el
Aunque hay una amplia variedad de aeroalérgenos que pue- organismo adquiere menos capacidad para defenderse frente a
den provocar asma, los ácaros domésticos(141), la cucaracha(143), las infecciones. Esto se conoce como la “hipótesis higienista”.
la alternaria(144) y, posiblemente, el gato(145), son los más relacio- Se han relacionado las siguientes exposiciones microbianas con
nados con la patogénesis del asma. Los mecanismos mediante una menor incidencia de asma: sarampión, hepatitis A y la colo-
los que estos alérgenos contribuyen al desarrollo del asma no nización temprana del tracto gastrointestinal. Los estudios rela-
están totalmente establecidos pero pueden estar relacionados cionados con Mycobacterium tuberculosis y con la vacunación
con su actividad enzimática y antigénica. de la tos ferina no permiten concluir que exista relación con la
La formación de anticuerpos IgE específicos frente a los aero- alergia. También el hecho de una menor utilización de antibió-
alérgenos (ácaros, pólenes, hongos y epitelios de animales), gene- ticos, la vida en las granjas, el pertenecer a familias numerosas
ralmente, no ocurre hasta los 2 ó 3 años de vida. Así, el asma y el inicio temprano de la asistencia a la guardería parecen actuar
inducida por aeroalérgenos es prácticamente nula en el primer como factores protectores contra el desarrollo de asma(152). Esto
año de vida para aumentar en prevalencia durante la infancia se podría explicar debido a que el contacto cercano con otros
y la adolescencia, y alcanzar su máximo en la segunda década niños que puedan tener infecciones o la exposición a agentes
de la vida. Hay algunos trabajos que, paradójicamente, demues- infecciosos en la edad temprana favorecerían, posiblemente a
tran que los niños que tienen un gato en casa tienen menos fre- través de una estimulación de la respuesta Th1, el desarrollo nor-
cuencia de sensibilización a alérgenos y menos incidencia de mal del sistema inmune. No obstante y, a pesar de los datos
asma entre los 7 y los 11 años. Se piensa que se debe a la for- publicados, esta hipótesis no es aceptada unánimemente(153).
mación de anticuerpos IgG e IgG4 frente al antígeno que da Se ha visto que algunas infecciones respiratorias causadas
lugar a una respuesta Th2 modificada, sin producción de IgE. por ciertos virus (virus respiratorio sincitial [VRS], virus parain-
No se sabe si la presencia de gato en casa puede tener efectos fluenza…)(154), por Chlamydia(155) o por Mycoplasma(156) pue-
permanentes sobre el sistema inmunitario. De todas formas, los den jugar un papel importante como causa mayor de exacerba-
niños que son alérgicos al gato y tienen asma por este antígeno ción del asma, pudiendo incluso contribuir a su patogénesis y
deben evitar su exposición y, en consecuencia, la convivencia a las posibles persistencia y gravedad de la enfermedad. La repli-
con dicho animal(146). cación viral en las células epiteliales de la vía respiratoria da lugar
La exposición a la Alternaria, en particular, puede producir a un edema de la pared bronquial lo que, junto con la produc-
síntomas asmáticos graves, considerándose que la sensibiliza- ción de moco, contribuye a la obstrucción de las vías respirato-
ción a este alérgeno es un factor de riesgo para el desarrollo de rias, lo que se traduce por la aparición de sibilancias. La respuesta
asma persistente(147). inmunitaria producida por los virus también colabora en la pato-
Los estudios sobre el asma inducida por alérgenos han sido génesis del asma ya que, al inducir la secreción de quimiocinas
muy importantes para demostrar el papel crucial de la inflama- como la IL-8 y el RANTES, favorecen el reclutamiento de células
ción en la patogenia del asma. Estos estudios han examinado el mononucleares y de neutrófilos, dando lugar a la inflamación
líquido del lavado broncoalveolar (BAL) antes y después de la de las vías respiratorias.
inhalación del alérgeno(148) y han demostrado una respuesta infla- Algunos estudios realizados en niños y adultos con asma
matoria de los eosinófilos de las vías respiratorias, asociada al demuestran que las infecciones respiratorias virales, sobre todo
desarrollo de la respuesta tardía inducida por el alérgeno. Asi- por rinovirus, son la causa más importante de descompensacio-
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 621

nes del asma, llevando a visitas frecuentes al servicio de urgen- mación o aumentando la alergenicidad de las sustancias ambien-
cias e incluso a requerir hospitalización(157). Durante la infancia, tales. Pueden también actuar como meros irritantes inespecífi-
ciertos virus y, en especial, el VRS, se han implicado en la expre- cos incrementando los síntomas de una reacción alérgica en
sión de los fenotipos del asma(158). Las infecciones por el VRS en curso.
los lactantes son un factor predisponente para la presencia de En zonas muy contaminadas puede observarse, mediante
sibilancias en la infancia aunque es más dudoso que estas infec- microscopía electrónica, cómo estas partículas, la mayoría de
ciones sean la causa o el desencadenante del asma. Sí parece ellas hidrocarburos aromáticos policíclicos, se aglomeran en la
demostrado que la aparición de sibilancias durante la lactancia superficie del polen. Esta interacción podría, por sí misma, acti-
producidas por el VRS es un factor de riesgo que se asocia con var la liberación de partículas alergénicas por el grano del
la atopia como causa de persistencia del asma en el adulto(159). polen(163).
Behrendt y Becker(164) observaron que los granos de polen
Ejercicio pueden liberar sustancias proinflamatorias parecidas a las pros-
La realización de ejercicio físico es uno de los precipitantes taglandinas y a los leucotrienos y lo hacen con mayor intensidad
más comunes de broncoconstricción en los en sujetos asmáti- si se recogen en los márgenes de las carreteras con mucho trá-
cos, estimándose que afecta al 70-80% de éstos y que, en oca- fico. Según estos hallazgos, el grano de polen no sería sólo un
siones, es la única manifestación de la enfermedad. Es frecuente vehículo que transporta los alérgenos, sino que podría contri-
que los niños, sobre todo los más mayores, refieran tos, sensa- buir directamente a la activación de la mucosa epitelial de las
ción de opresión torácica y/o falta de aire y/o sibilancias tras la vías respiratorias. Por otra parte, las partículas procedentes de
realización de ejercicio físico, en especial, la carrera al aire libre. la combustión del gasóleo recubren los pólenes recogidos cerca
En general, su presencia delata la existencia de un asma que no de las autopistas, pudiendo ejercer un efecto adyuvante.
está controlada(160,161). La magnitud de dicha respuesta depende Las partículas del gasóleo pueden también incrementar la
del grado de HRB del sujeto. sensibilización y la respuesta alergénica a los pólenes, contribu-
Los mediadores más importantes implicados en su patoge- yendo al transporte de los alérgenos, disminuyendo el aclara-
nia son los leucotrienos y la histamina. Las condiciones ambien- miento mucociliar y aumentando la permeabilidad de las célu-
tales de frío y sequedad propician su aparición. Con el ejercicio las de la mucosa de las vías respiratorias.
aumenta la ventilación, llegando a las vías respiratorias más aire El humo del tabaco es una sustancia irritante, y hay pruebas
en estas condiciones. Se origina así un aumento de la osmolari- suficientes que asocian su exposición con el desarrollo y las exa-
dad del líquido periciliar que estimula las terminaciones nervio- cerbaciones del asma bronquial. La exposición intrauterina al
sas y produce un broncoespasmo reflejo y una liberación de humo del tabaco constituye un factor de riesgo para padecer
mediadores de la inflamación que amplifican la respuesta de sibilancias y asma en los primeros años de vida, altera el creci-
obstrucción al flujo aéreo. miento pulmonar y provoca una disminución de la función pul-
monar(165). A nivel epidemiológico, el tabaco es el único factor
Otros factores medioambientales involucrados de riesgo claramente modificable; de ahí la gran importancia
Contaminación que adquiere la intervención a dicho nivel.
Hay estudios que confirman que la prevalencia de asma es
mayor en los países occidentales poblados, con un alto grado Factores nutricionales
de industrialización, que en los países en vías de desarrollo, con El aumento de prevalencia de asma infantil en países desa-
poblaciones de predominio rural. Se ha observado que la situa- rrollados ha coincidido con un cambio en los hábitos dietéticos,
ción geográfica es otro factor de riesgo para el desarrollo de consistente en el aumento del consumo de alimentos procesa-
asma bronquial. En los países europeos se observa un aumento dos, en detrimento de la leche, la verdura y la fruta. Se piensa,
de oeste a este en la prevalencia del asma infantil, de modo que por tanto, que el cambio en la epidemiología del asma podría
en Suecia hay una mayor prevalencia de sensibilización atópica asociarse a los cambios en los hábitos dietéticos.
y de asma que en países como Polonia o Estonia(162). Las vitaminas antioxidantes (vitamina E, C y carotenos) podrían
La niebla toxica industrial (dióxido de azufre) y la niebla toxica proteger a las vías respiratorias del daño pulmonar consecuen-
fotoquímica (ozono y óxido de nitrógeno), junto con las partí- cia de la oxidación que induce la inflamación crónica. La vita-
culas procedentes de la combustión de los gases de los moto- mina C, dotada de una considerable actividad antioxidante, se
res diésel son los tipos principales de contaminación atmosfé- localiza en el fluido extracelular del pulmón y contribuye a la
rica. Existen pocas pruebas de que la contaminación sea la causa regeneración de la vitamina E oxidada ligada a la membrana per-
directa del aumento de la prevalencia de asma, aunque sí se mitiendo que vuelva a funcionar(166). Esta vitamina es un ele-
ha descrito como un desencadenante de los síntomas en indivi- mento constitutivo de la membrana celular y representa la prin-
duos que sufren asma. Así, los contaminantes ambientales pue- cipal defensa del organismo frente a la lesión oxidativa de la
den actuar en diferentes niveles durante la respuesta alérgica, membrana; se piensa, además, que es capaz de inhibir la migra-
como inmunomoduladores, aumentando la producción y el cam- ción de los neutrófilos y la síntesis de la IgE. Algunos autores han
bio de isotipo hacia IgE, o potenciando la respuesta inflamato- asociado el bajo consumo de vitamina C con el aumento de la
ria frente a los alérgenos; como inductores directos de infla- prevalencia de asma e, incluso, con la disminución de la función
622 Epidemiología y etiopatogenia del asma

pulmonar(167). Por otra parte, el consumo de vitamina C podría dos de la circulación, los mastocitos, los macrófagos y las célu-
reducir los episodios de sibilancias en niños e incluso la frecuen- las dendríticas son células residentes de la vía respiratoria.
cia y la gravedad de los ataques de asma que estarían, tanto en Las células dendríticas procesan el alérgeno y se lo presen-
niños como en adultos jóvenes, inversamente relacionados con tan a las células T. En respuesta a los alérgenos, los linfocitos T
la ingestión frecuente de fruta fresca, vitamina E y verduras(168). producen una serie restringida de citocinas. En particular, las
Por otra parte, una dieta pobre en magnesio se ha relacionado citocinas implicadas en la respuesta alérgica (IL-4, IL-5) son sin-
también con una disminución de la función pulmonar, con epi- tetizadas por los linfocitos Th2, subtipo de las células T CD4+
sodios de sibilancias y con el desarrollo de HRB en adultos. o colaboradoras. El otro subtipo, las células Th1, se han invo-
Los pocos estudios que evalúan los efectos de los ácidos gra- lucrado en la defensa contra virus y antagonizan la respuesta
sos poliinsaturados (PUFA) en el asma muestran resultados con- alérgica. Los pacientes atópicos sintetizan en mayor medida IL-
flictivos. En general, los PUFA modifican la inmunidad celular, la 4, que favorece la respuesta Th2 y la síntesis de la IgE, a la vez
producción de la IgE y, en definitiva, las respuestas alérgicas, ejer- que bloquea la respuesta Th1.
ciendo los PUFA omega-3 y omega-6 distintos efectos en la infla- Las células T colaboradoras no son la única fuente de citoci-
mación. Los sujetos que regularmente consumen pescado fresco nas favorecedoras de la respuesta alérgica, por el contrario, los
graso (PUFA omega-3) muestran menor prevalencia de asma y mastocitos, los basófilos, los eosinófilos, las células T supreso-
de HRB, así como unos valores de función pulmonar basal más ras, los fibroblastos y las células del músculo liso pueden sinte-
elevados. No se ha encontrado una explicación completa para tizar IL-4, IL-5, IL-9 o IL-13, todas ellas codificadas por la región
el mecanismo por el que los PUFA actúan en la inflamación del 5q del cromosoma 5(170).
sistema respiratorio(169). La liberación de proteasas neutras por los mastocitos activa-
dos, por la vía del receptor de la IgE, puede activar los recepto-
res de las células endoteliales y epiteliales que, a su vez, lleva a
PATOGENIA DEL ASMA la producción de citocinas y moléculas de adhesión que, selec-
tivamente, reclutan eosinófilos y neutrófilos al foco de la infla-
Como hemos comentado anteriormente, las principales carac- mación. Los eosinófilos juegan un papel importante en la pato-
terísticas del asma son: la inflamación y la reestructuración de génesis del asma alérgica(171). Secretan, además de proteínas
la pared bronquial; la hiperreactividad de las vías respiratorias catiónicas, múltiples mediadores inflamatorios incluyendo cito-
a diversos estímulos y la obstrucción reversible, parcial o total- cinas, TNF-α, factor transformador del crecimiento (TGF)-β, pros-
mente, al flujo aéreo. taglandina E2 (PGE2), leucotrienos cisteinílicos, factor activador
de las plaquetas (PAF), así como moléculas de oxígeno reactivas,
Inflamación bronquial péptidos citotóxicos y enzimas de degradación, como la elastasa
La inflamación persistente de la vía respiratoria se considera y la colagenasa(172). Así, la respuesta inflamatoria es la causante
la característica principal del asma en cualquier estado de gra- directa de los procesos de daño y de reparación tisular.
vedad; afecta a toda la pared bronquial, incluyendo el epitelio,
el músculo liso, las glándulas secretoras de la submucosa, las Glándulas secretoras
células secretoras del epitelio, los vasos sanguíneos y las termi- Se ha reconocido recientemente que la hipersecreción mucosa
naciones nerviosas. En la inflamación participan múltiples célu- participa de manera importante en la patogenia del asma: con-
las (principalmente, eosinófilos y linfocitos), y mediadores infla- tribuye al estrechamiento de las vías respiratorias y forma tapo-
matorios. nes de moco, hallazgo frecuente en las autopsias de los pacien-
En el líquido del BAL de los pacientes asmáticos se encuen- tes fallecidos por esta enfermedad. Los tapones de moco pueden
tra un aumento del número de linfocitos, mastocitos y de eosi- causar obstrucción bronquial, alterar la relación ventilación-per-
nófilos, así como evidencia de activación de los macrófagos, en fusión y contribuir a la hipoxemia. Este moco, de consistencia
comparación con los controles no asmáticos. Las biopsias bron- viscosa, se encuentra compuesto por un exudado rico en proteí-
quiales muestran un aumento del número y de la activación nas plasmáticas, entre ellas albúmina; ácidos nucleicos; glico-
de los mastocitos, de los macrófagos, de los eosinófilos y de los proteínas secretadas por las células epiteliales y por los macró-
linfocitos T. fagos y restos celulares, en especial procedentes de los
La inflamación en el asma alérgica está dirigida por la res- eosinófilos(173).
puesta IgE frente a los alérgenos específicos. Esta respuesta infla- La principal proteína del moco de las vías respiratorias es la
matoria alérgica se caracteriza por una intensa infiltración celu- mucina, de la que se han identificado varios subtipos, de los cua-
lar resultante de la activación de las células residentes y de las les el más abundante es el MUC5AC. La mucina se encuentra
células circulantes que son reclutadas a las vías respiratorias. Una almacenada en el interior de las células secretoras, liberándose
importante característica del infiltrado inflamatorio es la natu- en respuesta a diversos estímulos, ya sean irritantes, nerviosos
raleza multicelular de la reacción que, principalmente, está com- o inflamatorios, destacando entre estos últimos la proteína catió-
puesta por eosinófilos pero que incluye, además, neutrófilos, lin- nica del eosinófilo (ECP), la elastasa del neutrófilo y la quimasa.
focitos y células mononucleares en un grado variable. Mientras La producción excesiva de moco se atribuye a una hiperplasia
que los eosinófilos, los neutrófilos y los linfocitos T son recluta- y/o hipertrofia de las glándulas submucosas, de modo que en
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 623

las autopsias de pacientes fallecidos por asma se describe con molécula de adhesión intercelular (ICAM)-1(178), encontrándose
frecuencia ectasia glandular, conocida como diverticulitis bron- la mayor parte de ellos elevados en los asmáticos.
quial(174). Es característico, además, el aumento del número de La extensión del daño epitelial se correlaciona con la gra-
las células secretoras epiteliales en comparación con la pobla- vedad de la enfermedad y con el incremento en la expresión del
ción sana. EGFR, clave de la regulación de la función epitelial. Sin embargo
y a diferencia de la EPOC, esta sobreexpresión del EGFR no se
Epitelio acompaña del reemplazo de las células epiteliales dañadas(179).
El daño del epitelio bronquial es característico del asma. Las Por otro lado, el daño epitelial puede acompañarse de un incre-
vías respiratorias están tapizadas por un epitelio ciliado pseudo- mento en la reparación y, a través de la liberación de mediado-
estratificado, formado por una capa de células basales anclada res, en especial el TGFb, el EGF y los factores de crecimiento
a la membrana basal a través de hemidesmosomas, y recubierta, de los fibroblastos (FGF), favorecer la fibrosis y la reestructura-
a su vez, por otra capa de células columnares ciliadas y de célu- ción de la arquitectura bronquial(178).
las secretoras. En los asmáticos se observa una pérdida de las
células columnares ciliadas, que puede ser hasta de un 15-45% Membrana basal subepitelial
en relación con los sujetos sanos. Un hallazgo frecuente en el En el bronquio del paciente asmático se aprecia un engro-
esputo de estos pacientes son los llamados cuerpos de Creola, samiento de la membrana basal subepitelial, consecuencia del
que son acúmulos de las células epiteliales resultantes de la des- depósito de colágeno en la lámina reticular (reticularis), de modo
camación. que las láminas densa y lúcida no están alteradas. El engrosa-
En las necropsias de los pacientes fallecidos por una crisis miento de la membrana basal se debe al depósito del colágeno
asmática existen amplias zonas de la superficie bronquial en las de los tipos I, II, III, y V y de la fibronectina producidos por los
que se ha desprendido la capa epitelial, dejando áreas de la mem- miofibroblastos subepiteliales (estimulados por el TGF-β), cuyo
brana basal completamente desnudas. Estos mismos hallazgos número está aumentado en los pacientes con asma. Este engro-
se observan en las muestras de biopsia bronquial de los asmáti- samiento se observa de forma más patente en el asma grave con
cos estables e incluso de los pacientes con asma leve, de modo eosinofilia(180).
que la denudación del epitelio no puede ser atribuida a artefac-
tos post mortem(175). En el epitelio de los pacientes asmáticos se Músculo liso
ha observado una reducción del contacto entre los desmosomas La hipertrofia (aumento del tamaño de la célula) y/o la hiper-
y las células epiteliales(176). Un estudio reciente muestra que la plasia (aumento del número de células) de las fibras del músculo
membrana basal de los asmáticos está significativamente menos liso bronquial son características del asma. Se pueden identifi-
recubierta por células columnares superficiales que la de contro- car dos modelos: el tipo I, que se caracteriza por la presencia de
les sanos(177). Los mecanismos de daño epitelial no están claros y hiperplasia limitada a las vías respiratorias centrales, y el tipo II,
se especula sobre la posibilidad de que exista en el asma un en el que domina la hipertrofia y afecta, tanto a las vías respira-
defecto primario en el epitelio que determine una respuesta anor- torias centrales, como a las periféricas. La hipertrofia muscular,
mal a los estímulos que dañan el epitelio e inician el proceso infla- ausente en otras enfermedades obstructivas, confiere gran rigi-
matorio. La expresión de la molécula de adhesión CD44 y del dez a la pared bronquial y, además, tiene una especial capaci-
receptor del factor de crecimiento epitelial (EGFR), ambos mar- dad para producir importantes grados de obstrucción en los
cadores de lesión epitelial, se encuentra aumentada en el asma, bronquiolos. Se considera que el aumento de la masa del mús-
lo que se ha atribuido al daño ejercido por las proteínas catióni- culo liso es uno de los factores individuales más importantes que
cas liberadas por los eosinófilos (proteína básica principal [MBP], determinan el grado de estrechamiento del calibre bronquial. El
ECP, etc.), así como por las moléculas de oxígeno y de nitrógeno aumento del espesor de la capa muscular contribuye al engro-
altamente reactivas que se forman durante la cascada oxidativa. samiento de la pared y al proceso de reestructuración bronquial.
También se ha descrito que algunos alérgenos, como el Der Diversos mediadores, tales como el factor de crecimiento simi-
p1 o el Der p9, son proteasas por lo que, además de su activi- lar a la insulina (IGF), la α-trombina, los tromboxanos, el TNFα
dad inmunológica, ejercen una acción proteolítica directa sobre o la IL-6, entre otros, estimulan la proliferación del músculo liso.
el epitelio(178). Las células epiteliales secretan gran número de Por el contrario, los agonistas β2, la PGE2 y el TGF-β, pueden
sustancias, algunas con efecto protector (antiproteasas, lisozima, inhibir su proliferación(181). Las células musculares poseen cierta
complemento, IgA) y otras, por el contrario, con propiedades capacidad secretora, sintetizando IL-8, óxido nítrico o GM-CSF,
pro-inflamatorias y constrictoras del músculo liso (los metabo- a la vez que expresan moléculas de adhesión como la ICAM-1,
litos del ácido araquidónico, 12,15-diHETE y el 8,15-diHETE, qui- la molécula de adhesión celular vascular (VCAM) 1 y el CD44(178).
miotácticos para los eosinófilos, los neutrófilos y los monocitos).
Las células epiteliales liberan también quimiocinas (RANTES, pro- Vasos sanguíneos
teína quimiotáctica de los monocitos (MCP)-1 y MCP-4, eota- La circulación bronquial parece tener un importante papel
xina, etc.), citocinas activadoras linfocitarias, como la IL-16 y el en la regulación del calibre de la vía respiratoria ya que los aumen-
oncogén regulador del crecimiento Gro-a, entre otros y expre- tos del flujo, que incrementan el grosor de la mucosa bronquial,
san moléculas de adhesión para células inflamatorias, como la contribuyen al estrechamiento de la luz.
624 Epidemiología y etiopatogenia del asma

En el asma, como consecuencia de la liberación de factores junto con una mayor resistencia de las vías respiratorias al paso
de crecimiento como el TNFα o el factor de crecimiento del de aire.
endotelio vascular (VEGF), aumenta el número de vasos sanguí- La prevalencia de la HRB oscila entre el 4 y el 35% de la pobla-
neos en la vía respiratoria, apreciándose también un incremento ción general(183). Estas variaciones son debidas probablemente a
de su permeabilidad. Los macrófagos y los eosinófilos activa- diferentes factores, como los métodos usados para medir la res-
dos constituyen, probablemente, las principales fuentes del puesta, los puntos de corte utilizados y el tipo de población estu-
VEGF. El aumento de la permeabilidad vascular puede aumen- diada. En algunas ocasiones se ha comunicado cierta asocia-
tar el volumen de las secreciones bronquiales, el edema de la ción entre el grado de HRB, la gravedad del asma y la cantidad
mucosa, alterar el aclaramiento mucociliar y favorecer la sín- de tratamiento necesario para controlar los síntomas(184,185).
tesis de nuevos mediadores a partir de precursores plasmáticos, La HRB se demuestra mediante las pruebas de provocación
como las cininas. bronquial que emplean diferentes agentes broncoconstrictores,
la elección de los cuales determina en gran medida el resultado
Sistema nervioso y el significado de la misma. Los más utilizados y, en consecuen-
En la regulación nerviosa autónoma del tracto respiratorio cia, los más estandarizados, son la histamina y los agonistas coli-
intervienen, además de las vías colinérgicas y adrenérgicas, las nérgicos (metacolina), que producen broncoconstricción mediante
fibras no adrenérgicas y no colinérgicas, así como varios neu- la estimulación directa del músculo liso. Al igual que en el caso
ropéptidos. Los productos generados en el proceso inflamato- del asma, se ha observado una agrupación familiar en la HRB
rio también pueden sensibilizar las terminaciones nerviosas sen- que puede estar presente ya en edades tempranas de la vida,
soriales del epitelio bronquial, haciéndolas hiperalgésicas. La siendo la historia familiar de asma y el tabaquismo en los pro-
hiperalgesia y el dolor son los signos cardinales de la inflama- genitores factores de riesgo para su desarrollo(173).
ción y, en la vía respiratoria, pueden participar en los mecanis- Se han identificado marcadores genéticos de la HRB a la his-
mos de la tos y de la disnea. Los mecanismos implicados en la tamina en la región cromosómica 5q, cercana al locus que regula
hiperalgesia no son bien conocidos, pero intervienen mediado- los niveles séricos de la IgE y, de la HRB a la metacolina en la
res, como las prostaglandinas y ciertas citocinas y neurotrofinas, región 11q, en relación con la subunidad β del FcεRI. Entre los
como el factor de crecimiento de los nervios (NGF), que son sin- polimórficos específicos del gen del receptor β2 adrenérgico, el
tetizados por varios tipos de células, tanto estructurales como Glu 27 se ha asociado con la HRB a la metacolina, mientras que
inflamatorias, y que determinan la proliferación y la sensibiliza- el Gly16 se ha relacionado con la presencia de asma nocturna.
ción de los nervios pulmonares sensoriales, estimulando la libe- La HRB también se ha correlacionado con diversos marcadores
ración de neuropéptidos con efectos inflamatorios, tales como de la inflamación, como el aumento del número de eosinófilos,
la sustancia P, la neurocinina A y el péptido relacionado con el de mastocitos y de linfocitos T en el líquido del BAL o con el
gen de la calcitonina (CGRP)(178). depósito de colágeno y de ECP en la membrana basal de las
muestras de biopsia bronquial(186).
Hiperreactividad de las vías respiratorias Entre los cambios estructurales propios de las vías respirato-
Es un término que describe la tendencia de las vías respira- rias de asmáticos destacan la descamación epitelial, el depó-
torias a estrecharse demasiado (una reacción exagerada) y con sito de colágeno subendotelial y la hiperplasia y/o hipertrofia del
facilidad, en respuesta a varios estímulos, ya sean físicos, quími- músculo liso, que se encuentran incluso en las formas leves del
cos o inmunológicos. Es una característica universal del asma asma y se han implicado en la patogénesis de la HRB. Por último,
aunque no exclusiva ya que puede presentarse en otras enti- la HRB se asocia estrechamente con el gen ADAM33, que se
dades clínicas como la EPOC, la fibrosis quística o incluso en indi- expresa preferentemente en las células del músculo liso, en los
viduos sanos. miofibroblastos y en los fibroblastos, pero no en las células epi-
La HRB sigue una distribución unimodal en la población teliales, en los linfocitos T, ni en los leucocitos. Esta expresión
general y puede variar con el tiempo, incrementándose, en los selectiva del gen ADAM33 en las células mesenquimales sugiere
individuos predispuestos, después de la exposición a los alér- que podría desempeñar un papel en la disfunción del músculo
genos, a algunos productos industriales o a ciertos agentes liso y de los fibroblastos y, por lo tanto, estar implicado en el
infecciosos, y disminuyendo en relación con las intervenciones desarrollo de asma y de HRB(131).
medioambientales o farmacológicas. La HRB podría ser conse-
cuencia de la exposición a agentes medioambientales o a altos Obstrucción al flujo aéreo
niveles de sustancias tóxicas en individuos genéticamente pre- Otra de las características del asma incluida en su definición
dispuestos. Es un fenómeno multifactorial, que varía de un es la obstrucción al flujo aéreo y su reversibilidad como resul-
individuo a otro y que comprende mecanismos favorecedores, tado del tratamiento o espontáneamente.
como la disminución del calibre bronquial, la hiperplasia y/o la El valor del volumen espiratorio máximo en el primer segundo
hipertrofia del músculo liso, el daño epitelial y el desequilibrio (FEV1) es el índice que, debido a su robustez, se emplea con
en el sistema nervioso autónomo con un predominio colinér- mayor frecuencia para cuantificar el grado de obstrucción bron-
gico (182). Como consecuencia de ello, se produce un mayor quial, siendo, además, uno de los principales determinantes de
acceso del inhalante a la mucosa y a la inervación autónoma la HRB a la metacolina(187). Algunos estudios han descrito una
Enfermedades alérgicas de las vías respiratorias inferiores 625

correlación entre los valores del FEV1 y el grado de engrosamiento bios que experimentan las vías respiratorias como consecuencia
submucoso en las muestras de biopsia bronquial de los sujetos de la conjunción de los procesos de daño repetido y de repara-
con asma. Por otra parte, el deterioro de la función pulmonar ción epitelial prolongada y que se engloban bajo el nombre de
está relacionado con la duración del asma, siendo más rápido reestructuración de las vías respiratorias y que implica a múlti-
y notorio el descenso de los valores del FEV1 en los pacientes con ples células y estructuras (epiteliales, músculo liso, endoteliales,
asma grave y sintomatología persistente, que en aquellos con mucosas, matriz extracelular, nervios, etc.)(192). Se observa un
asma leve o asintomática(188). Se ha sugerido, asimismo, que las aumento de la producción de factores de crecimiento profi-
caídas en los valores del FEV1 podrían estar relacionadas con la bróticos, en especial del TGFβ, que determinan la proliferación
persistencia de la inflamación bronquial. Little y cols.(189) demos- y la diferenciación de los fibroblastos a miofibroblastos, que
traron que la existencia de una obstrucción irreversible al flujo desempeñan un papel central en el proceso de esclerosis de
aéreo se correlacionaba con el grado de inflamación neutrofí- las vías respiratorias.
lica en las muestras de esputo inducido (número de neutrófilos
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