DOMINGO 25 DURANTE EL AÑO - 23 DE SEPTIEMBRE 2018 -Nº 2425 -CICLO B
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“EL QUE QUIERA SER EL PRIMERO, QUE SE HAGA EL ÚLTIMO”
En la primera lectura (Sab 2, 12. 17-20)
el Sabio nos presenta cómo las fuerzas
del mal, encarnadas en los incrédulos,
quieren ahogar la fuerza salvífica de
Dios que se manifiesta en la vida de
los justos. Al “justo” lo persiguen no por
capricho, ni por odio irracional, sino
porque les resulta incómodo, porque
con su estilo de vida les echa en cara
la maldad en la que viven, poniendo en
evidencia su perversa existencia.
En la segunda lectura (Sant 3,16-4,3) el Apóstol Santiago dice
que en la comunidad donde existen envidias, divisiones y toda
clase de maldades, reina la sabiduría que nace de este mundo
y que lleva a desórdenes, guerras y asesinatos. Con imágenes
bélicas describe la situación interna de la comunidad, que vive
en peleas a causa de una mentalidad de envidia, rivalidad y
materialista. En cambio, donde reina la Sabiduría que viene de
lo alto, la comunidad practica la justicia de Dios, y el cristiano es
sembrador de paz y de dicha verdadera.
En el Evangelio (Mc 9,30-37) Jesús en su camino hacia
PREGUNTAS ¿Cómo ejerzo la autoridad en casa, en el trabajo, en la política y en el lugar donde tengo responsabilidades?//
DE REFLEXIÓN ¿Por qué las personas buscan los primeros puestos y los honores?
RITOS DE ENTRADA
M. Si queremos integrar una auténtica comunidad cristiana,
hemos de superar sin cesar las diferencias entre nosotros. No
podemos buscar privilegios, ni esperar honores en la comuni-
dad cristiana, como habían ocurrido con el grupo de los Doce
Apóstoles, según nos informa el Evangelio de este domingo.
Acojámonos como corresponde a seguidores de Jesús y encar-
gados de la misma Misión.
1. CANTO DE ENTRADA “Estamos de fiesta con Jesús” (VSJ 48; E.R 19)
Estamos de fiesta con Jesús,
al Padre queremos ir;
estamos reunidos en su Mesa
y es Cristo quien va a servir.
Poderoso es nuestro Dios, poderoso
es nuestro Dios,
poderoso es nuestro Dios, poderoso es
nuestro Dios,
Él sana, Él salva, poderoso es nuestro Dios,
perdona y limpia, poderoso es nuestro Dios.
Poderoso es nuestro Dios…
Su amor nos demuestra por doquier,
otorga a todos su amistad,
su pan y su vino nos regala,
por Madre a la suya da.
2. SALUDO
C. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.
Jerusalén atraviesa Galilea y se detiene
por última vez en Cafarnaum, la ciudad
en la que ha estado gran parte de su vida,
y además, es el punto de partida de su
misión de anunciar el Reino. Por segunda
vez, Jesús anuncia a sus discípulos su
Pasión (Mc 8,31-33; 10,31-34), para
que puedan entender, asumir su misión
y su destino como el Mesías enviado
por Dios. Sin embargo, los discípulos
no comprendían lo que les decía, y
continuaban esperando un Mesías victorioso que les daría
buenos cargos en el futuro Reino (Mc 10, 34-40).
Jesús aprovecha la discusión de sus discípulos sobre quién es
el más importante, para poner de manifiesto las condiciones
para entrar en el Reino. No sólo habrá que recorrer el camino
de la Cruz, sino que además deberán asumir la vida de siervos;
sólo entonces comprenderán la nueva estructura social: “los
últimos serán los primeros”. Con el gesto de abrazar y colocar
a un niño en medio de ellos, Jesús invita a acoger con amor y
solidaridad a los más sencillos, a los humildes, a los pobres y a
los descartados de la sociedad.
C. La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios Padre
y la comunión del Espíritu Santo estén con todos ustedes
R. Y con tu espíritu.
3. ACTO PENITENCIAL
C. El Señor Jesús, que nos invita a la mesa de la Palabra y de
la Eucaristía, nos llama ahora a la conversión. Reconozcamos,
pues, que somos pecadores e invoquemos con esperanza la
misericordia de Dios. (Silencio breve).
C. Tú que eres el Camino que conduce al Padre:
Señor, ten piedad.
C. Tú que eres la Verdad que ilumina a los pueblos:
Cristo, ten piedad.
C. Tú que eres la Vida que renueva el mundo:
Señor, ten piedad. 
C. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone
nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Amén.
4. CANTO DEL GLORIA: “Gloria a Dios, Gloria a Dios” (VSJ 88; E.R. 707)
Gloria a Dios, gloria a Dios, Gloria al Padre (2).
A Él le sea la Gloria.
Aleluya, amén (2).
Gloria a Dios, gloria a Dios, Gloria al Hijo (2-2)
A Él le sea la Gloria (2)
Aleluya, amén (2)
Gloria a Dios, gloria a Dios, Espíritu Santo (2)
A Él le sea la Gloria. (2)
Aleluya, amén. (2)
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5. ORACIÓN COLECTA
C. Oremos (Silencio). Dios nuestro, que estableciste el
fundamento de la ley divina en el amor a ti y al prójimo,
concédenos que, cumpliendo lo que mandas, merezcamos
alcanzar la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por
los siglos de los siglos. Amén.
6. PRIMERA LECTURA
M. La presencia del justo es una acusación continua contra
los malvados que no pueden soportar. Para que sus malas
obras no sean puestas en evidencia, matan al inocente.
Lectura del libro de la Sabiduría 2,12.17-20
Dicen los impíos:
Tendamos trampas al justo, porque nos molesta y se opone a
nuestra manera de obrar; nos echa en cara las transgresiones Lectura de la carta de de Santiago 3, 16-4,3
a la Ley y nos reprocha las faltas contra la enseñanza recibida. Hermanos:
Veamos si sus palabras son verdaderas y comprobemos lo
que le pasará al final.
Porque si el justo es hijo de Dios, Él lo protegerá y lo librará lo alto es, ante todo, pura; y además, pacífica, benévola y
de las manos de sus enemigos.
Pongámoslo a prueba con ultrajes y tormentos, para conocer el bien; es imparcial y sincera. Un fruto de justicia se siembra
su temple y probar su paciencia. Condenémoslo a una pacíficamente para los que trabajan por la paz.
muerte infame, ya que él asegura que Dios lo visitará».
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
7. SALMO RESPONSORIAL 53, 3- 6. 8
R.  El Señor es mi apoyo verdadero.
Dios mío, sálvame por tu Nombre,
defiéndeme con tu poder.
Dios mío, escucha mi súplica,
presta atención a las palabras de mi boca. R.
9.
EVANGELIO
M. Jesús aprovecha la oportunidad de una
acalorada discusión entre los discípulos para
tener con ellos una gran catequesis. Habían
discutido en el camino sobre quién era el
más importante entre ellos… Escuchemos
con atención lo que Él les dijo.
Aleluia.
Dios nos llamó, por medio del Evangelio,
para que poseamos la gloria de
nuestro Señor Jesucristo.
Aleluia.
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo
según san Marcos 9, 30-37
Jesús atravesaba la Galilea junto con sus
discípulos y no quería que nadie lo supiera,
porque enseñaba y les decía: «El Hijo del
hombre va a ser entregado en manos de los
hombres; lo matarán y tres días después de
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Dios mío, sálvame por tu Nombre,
Porque gente soberbia se ha alzado contra mí,
hombres violentos atentan contra mi vida,
sin tener presente a Dios.R.
 
Pero Dios es mi ayuda,
el Señor es mi apoyo verdadero:
Te ofreceré un sacrificio voluntario,
daré gracias a tu Nombre, porque es bueno. R.
8. SEGUNDA LECTURA
M. La ambición y la codicia, el afán de tener y de ser más que
los demás, es fuente de discordia y veneno que corrompe a
las personas y a los grupos. En cambio, el seguidor de Jesús
actúa y organiza su vida con los criterios del Evangelio.
Donde hay rivalidad y discordia, hay también desorden y
toda clase de maldad. En cambio, la sabiduría que viene de
conciliadora; está llena de misericordia y dispuesta a hacer
¿De dónde provienen las luchas y las querellas que hay
entre ustedes? ¿No es precisamente de las pasiones que
combaten en sus mismos miembros? Ustedes ambicionan,
y si no consiguen lo que desean, matan; envidian, y al no
alcanzar lo que pretenden, combaten y se hacen la guerra.
Ustedes no tienen, porque no piden. O bien, piden y no
reciben, porque piden mal, con el único fin de satisfacer sus
pasiones.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
su muerte, resucitará». Pero los discípulos no
comprendían esto y temían hacerle preguntas.
Llegaron a Cafarnaúm y, una vez que
estuvieron en la casa, les preguntó: « ¿De
qué hablaban en el camino?» Ellos callaban,
porque habían estado discutiendo sobre
quién era el más grande.
Entonces, sentándose, llamó a los Doce y
les dijo: «El que quiere ser el primero, debe
hacerse el último de todos y el servidor de
todos».
Después, tomando a un niño, lo puso en medio
de ellos y, abrazándolo, les dijo: «El que recibe
a uno de estos pequeños en mi Nombre, me
recibe a mí, y el que me recibe, no es a mí al
que recibe, sino a aquel que me ha enviado».
Palabra del Señor.
Gloria a Ti, Señor, Jesús.
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COMUNIDAD EUCARÍSTICA: COMUNIDAD MISIONERA

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10. HOMILÍA/SILENCIO Por los hombres que viven unidos,
11. PROFESIÓN DE FE por los hombres que buscan la paz,
por los pueblos que no te conocen,
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la te ofrecemos el vino y el pan.
tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que
fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de 14. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue C. Acepta con bondad, Señor, las ofrendas de tu pueblo, y, por
crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al medio de este sacramento celestial, haz que se haga vida en
tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está nosotros cuanto proclamamos por la fe. Por Jesucristo, nuestro
sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí Señor. Amén.
ha de venir a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión PLEGARIA EUCARÍSTICA
de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la
carne y la vida eterna. Amén 15. CANTO DE COMUNIÓN “A tu Mesa, Señor” (VSJ 222; E.R 2331)
12. ORACIÓN UNIVERSAL A tu Mesa, Señor, nos invitas a todos:
beberemos tu Copa, comeremos tu Pan.
C. Unidos como hermanos, hijos de Dios Padre, y con la
confianza en su infinito amor presentemos nuestras oraciones, La vida así es más bella, comiendo de tu Pan:
diciendo: Por Cristo, Modelo autoridad, óyenos. comunidad de hermanos podremos soñar.
Caminar y luchar con la fuerza que da tu Pan.
Por la Iglesia Cristiana Católica: para que siendo servidora de El que come este Pan, vivirá para siempre:
la humanidad, testimonie la alegría del Evangelio. Oremos. este es el Pan de vida, Pan de resurrección.
Por los gobernantes y los responsables de dirigir el destino De justicia y de paz, hambre tiene tu pueblo:
de las naciones: para que cumplan su tarea practicando sácianos a tu mesa y enséñanos a amar.
el mensaje de Jesús: “Él que quiere ser el primero, debe En el Pan que nos das mueres Tú por nosotros:
hacerse el último y el servidor de todos”. Oremos. comunión es entrega, servir a los demás.
Por el mes dedicado a la Sagrada Biblia: para que este 16. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
tiempo de gracia nos haga oyentes de la Palabra de Dios C. Te pedimos, Padre, que acompañes siempre con tu auxilio
y discípulos –misioneros de Jesucristo. Oremos. a los que alimentas con tus sacramentos, para que en estos
misterios recibamos los frutos de la redención y la conversión de
Por nuestros hermanos, hermanas privados de libertad: nuestra vida. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén
para que no pierdan la fe en el Señor, la protección de
María Santísima en la advocación “Nuestra Señora de la RITO DE CONCLUSIÓN
Merced” y sientan nuestra solidaridad cristiana. Oremos.
Por nuestra comunidad parroquial: para que su vida M. “El que quiera ser el primero, debe hacerse el último de
cristiana y todas sus actividades se inspiren, se apoyen todos y el servidor de todos”. Que este gran mensaje de Jesús
ilumine, de aquí en adelante, nuestra actuación en la familia, en
en la Palabra de Dios. Oremos. la comunidad, en la Iglesia, en la empresa, en el sindicato, en la
(La asamblea expresa otras intenciones referidas al momento sociedad y en la política.
que vive nuestro país y las demás naciones). 17. BENDICIÓN
C. Escucha Dios Padre estas intenciones que te hemos C. La paz de Dios, que supera todo lo que podemos pensar,
presentado y las que están en nuestro corazón. Por Jesucristo custodie sus corazones y sus pensamientos, en el conocimiento y
nuestro Señor. Amén. en el amor de Dios y de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo. Amén
C. La bendición de Dios todopoderoso, del Padre, del Hijo (✝) y
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA del Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y permanezca para
siempre. Amén.
13. CANTO DE LAS OFRENDAS. “Por los niños que empiezan la vida” C. Pueden ir en paz.
(VSJ 143; E.R.1509) R. Demos gracias a Dios.
Por los niños que empiezan la vida, 18. CANTO FINAL: “Cantemos, cantemos” (VSJ 269; E.R. 2712)
por los hombres sin techo ni hogar,
por los pueblos que sufren la guerra, Cantemos, cantemos con fe y devoción,
te ofrecemos el vino y el pan. que reine, oh María, tu gran corazón.
Ave, Ave, Ave, Maria, Ave, Ave, Ave, Maria.
Pan y vino sobre el altar La espada quisiera quitártela yo,
son ofrendas de amor, que allí te la puso mi vil corazón .
pan y vino serán después,
tu Cuerpo y Sangre, Señor. (2-4) Los pobres enfermos levantan su voz,
Esperan remedio de tu corazón
SUGERENCIAS PARA LA CELEBRACIÓN
4Colocar en el Templo gallardetes, pancartas o banners, recordando a los fieles que toda autoridad es servicio, a
ejemplo de Jesús.
4Responsables de la Pastoral Carcelaria asumen los ministerios de Acogida, Lectores y Salmista.
4En el rito de ofrenda, junto con el Pan y el Vino, presentar las acciones que la parroquia realiza a favor de las
personas privadas de libertad.
4Después de la homilía, el Sacerdote invita a los fieles a meditar en silencio, el mensaje de la Palabra.
4Concluida la celebración, la Asamblea canta el Ave María dedicado a Nuestra Señora de la Merced, Madre de las
personas privadas de libertad.
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A PROPÓSITO DE NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED

La devoción a la Virgen de la Merced se difundió en La

Paz, Bolivia en el siglo 17, hoy se le rinde veneración
el 24 de septiembre. La devoción filial se expresa de
muchas maneras: Se le cambia tres veces sus vestiduras
cada año; el 3 de Agosto se recuerda la primera vez que
Ella derramó lágrimas; el 24 de Septiembre es su fiesta:
Nuestra Señora de la Merced es Madre y Protectora de
las personas privadas de libertad.

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RITOS INICIALES DE LA
CELEBRACIÓN EUCARÍSTICA.
(Segunda Entrega)
4. Acto Penitencial: La Asamblea inicia la celebración expresando su conversión a Dios misericordioso.
Responde así a la invitación de Jesucristo: “Conviértanse y crean en el Evangelio” (Mc 1,15). También
es necesario reconciliarse con los hermanos antes de presentar la Ofrenda del altar (Mt 5,25). Se
trata de confesar, alabar, preferentemente la misericordia infinita de Dios, más bien que confesar los
pecados. Hay cuatro fórmulas: 1ª) Nos invita a reconocer nuestros pecados delante de Dios y de los
hermanos: “Yo confieso…; 2ª Nos hace esperar la manifestación de la Misericordia de Dios y de su
salvación; 3ª Nos lleva a confesar y reconocer que la misericordia de Dios es mayor que nuestros
pecados. Jesucristo, vence con su Resurrección la realidad de nuestros pecados; 4ª La bendición
y aspersión del agua bendita que podría realizarse en las Misas dominicales, especialmente, en el
tiempo pascual. Este rito es un claro signo del agua bautismal.
5. El Gloria: Es un himno antiguo (siglo II) con el cual la Iglesia reunida en el Espíritu Santo, alaba
al Padre y suplica al Hijo, Cordero y Mediador. Es una hermosa alabanza a Dios, fruto de la
inspiración de las comunidad cristianas antiquísimas. Tanto el Señor, ten piedad como el Gloria,
no son elementos presidenciales sino cantos de la Asamblea. El Gloria no se canta en Adviento,
tampoco en Cuaresma.
6. Oración Colecta: Es la primera oración del que preside la Misa que recoge, sintetiza y reúnes, de
ahí su nombre colecta, los sentimientos, las intenciones que en silencio ha formulado la Asamblea.
Su función es dar el sentido de la celebración del día. Tiene cuatro partes: 1) La invocación a Dios
Padre; 2) Una frase (cláusula) en la cual se expresa el carácter propio del día o del acontecimiento
que se celebra u otro motivo en el que se inspira la petición; 3) La petición: Se pide lo esencial, lo
que interesa a todos; 4) Conclusión, siempre de carácter Trinitario: Por Nuestro Señor Jesucristo,
en la unidad del Espíritu Santo…La Asamblea responde con el Amén.
(Para ampliar, recomendamos esta publicación: Limón Miguel, Sorbos de Liturgia, vol.1, Santa Cruz, 2016).
Visitenos en

Dios nos habla cada día: del 24 al 30 de Septiembre.

Liturgia de las Horas: I Semana.
Lunes: Nuestra Señora de la Merced: Pr 3,27-34; Sal 14,2-4b.5; Lc 8,16-18, o Jn 2,1-12
Martes: Pr 21,1-6.10-13; Sal 118,1.27.30.34-35.44; Lc 8,19-21
Miércoles: Pr 30,5-9; Sal 118,29.72.89.101.104.163; Lc 9,1-6
Jueves: Ecl 1,2-11; Sal 89,3-6.12-14.17; Lc 9,7-9
Viernes: Ecl 3,1-11; Sal 143,1a.2-4; Lc 9,18-22
Sábado: Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael Dn 7,9-10.13-14; o Ap 12,7-12a; Sal 137,1-5; Jn 1,47-51
Domingo 26: Nm 11, 16-17a.24-29; Sal 18,8.10.12-14; St 5,1-6; Mc 9,38-43.45.47-48

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