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PALTO 11 087.00
ESPÁRRAGO (7 865.50 ha
ALCACHOFA 1 017 ha
ARÁNDANO
MAÍZ AMARILLO DURO
MARACUYÁ
CAÑA DE AZÚCAR
1. Preparación del terreno: La caña de azúcar por ser un cultivo permanente requiere de una
buena preparación de suelo llegando en condiciones favorables mayores de los 50cm de
profundidad, para realizar este trabajo se requiere de maquinarias de alta potencia mayor
180HP al volante.
Gradeo: Este trabajo consiste en pasar doble grada pesada. La primera pasada sirve para
incorporar restos de las cosechas anteriores; se ejecuta con un implemento de 18 discos de 36
pulgadas, voltea al suelo hasta una profundidad de 20 a 30 cm. La segunda pasada se realiza
después de la segunda pasada de subsolación sirve para mullir el suelo para realizar un buen
tapado de la semilla al momento de la siembra.
Subsolación: Se lleva a cabo con tractores de rueda con una potencia mayor de 220HP al igual
que el gradeo se ejecutó por dos oportunidades. Primera subsolaciòn se realiza después del
primer gradeo con implemento de 2 hasta 4 puntas separada a cada 75cm se mueve el suelo
de 20 a 30cm. Segunda subsolaciòn se pasan las puntas subsoladoras con un Angulo de 15
grados con respecto a la primera subsolaciòn; consiste en destruir las capas de suelo
compactado e impermeable llega a una profundidad de 50cm.
Surcado: El distanciamiento entre surcos es de 1.5mt. Es necesario realizarlo con marcador con
el fin de tener surcos uniformes lo que será de utilidad para mecanizar las cañas socas.
La longitud y la pendiente de los surcos dependen de la textura del suelo. - Los suelos francos
tendrán surcos promedio de 100mt. con una pendiente de 0.002% a 0.003%. - En suelos
arenosos los surcos deben tener menores de 80mt. Y una pendiente de 0.003% a 0.006%.
Acequiado: Esta labor generalmente se realiza con los cajones surcadores, en algunos casos se
utiliza el implemente llamado chatin.
Aplicación de MO: La materia orgánica es importante porque ayuda a retener la humedad del
suelo, se considera como reserva de nutrientes; es recomendable utilizar estiércol de ave
porque es un producto de fácil mineralización. La cantidad a aplicarse depende de la capacidad
económica del agricultor y/o la calidad del suelo.
Subsolación de soca: Inmediatamente después de la cosecha del campo se recomienda la
subsolaciòn del lomo de los surcos para romper las raíces viejas, capas duras y de esta manera
oxigenar el suelo para su posterior riego. Al igual que para la preparación de terrena para la
siembra se utiliza maquinaria pesada con una potencia mayor de 180HP.
Reacondicionado de surco: Esta labor se puede realizar con un tractor de ruedas de 160HP
que tenga un implemento llamado reacondicionador de surco que consta de cuatro discos
invertidos entre sí y con cuatro puntas para optimizar el trabajo de los discos que formaran los
nuevos bordos de los surcos.
ALCACHOFA
Al tratarse de un cultivo bianual o trianual, la preparación del suelo debe ser lo más perfecta
posible. El suelo se prepara mediante labores profundas, que aseguren una buena
permeabilidad y aireación del suelo en profundidad. Posteriormente se efectúan sendos pases
de fresadora para desmenuzar el terreno superficialmente.
7.2. Siembra
El cultivo de alcachofas mediante semilla permite tanto el transplante como la siembra directa,
siendo este último el método más extendido en las zonas productoras americanas. Los
agricultores utilizan sembradoras de precisión que dejan caer de 2 a 3 semillas cada dos
centímetros, con espacios de 60-90 cm en línea. El ancho del marco varía entre 1,5-2 m.
Utilizando marcos de anchura de 1,8 m y dejando 3 semillas cada dos centímetros en una línea
con espacios de 60 cm, se necesitan aproximadamente 27.000 semillas/ha (1 kg). Las
temperaturas elevadas en el suelo pueden ocasionar que el porcentaje de germinación decaiga
notablemente.
7.3. Plantación
Para plantas propagadas vegetativamente la plantación suele hacerse en los meses de julio y
agosto, trazando surcos separados entre sí 0,8-1,2 m y entre plantas 0,8 m. Se colocan dos
hijuelos en cada golpe, con la intención de suprimir más tarde el más débil de ellos dejando
más que uno. Los plantones no deben enterrarse mucho al hacer la plantación, pues con ello
se corre el riesgo de que se pudran. Se pueden alcanzar densidades de 9000 plantas/ha.
Se evitará transplantar si la temperatura de la superficie del terreno es fría, ya que el punto de
crecimiento de la planta esta localizado cerca de la superficie y el frío puede afectar
considerablemente.
La duración normal de una plantación es de 2-3 años, aunque en algunas zonas son habituales
los cultivos anuales.
Recalzados y cavas.
Podas. Al realizarse la recolección del primer año, es común realizar una poda severa a
la planta cuando ésta a empezado a secarse, para favorecer el desarrollo de los
hijuelos que garantizan la producción del año siguiente.
Previo a la siembra: Los mejores terrenos son los que son profundos y sin mucha pendiente.
Es acosenjable usar subsolador o también puede ser disco, la preparación se hace en seco. La
finalidad es retener la mayor cantidad posible de agua, pemitirle a que las raíces del maíz en el
futuro se desarrollen en forma normal y como una amplia cabellera le ayude a absorber agua y
nutrientes del suelo. Se debe de aplicar un riego de machaco o riego pesado.
Preparando el suelo: Cuando el terreno está a punto (capacidad de campo), se usa una rastra
ligera y posteriormente se nivela el terreno. Esto mejora los riegos y las condiciones de
aprovechamiento de la humedad en el perfil suelo.
Labranza mínima: Esta labranza se puede considerar como una práctica intermedia entre la
labranza convencional y labranza cero o sistema de siembra directa (SSD), para esto se realiza
las labores de labranza, estrictamente necesarias y su principal implemento que es el
subsolado el cual se puede utilizar en surcos de un cultivo anterior siempre y cuando se tenga
un distanciamiento entre surcos de 0.70 a 0.80 cm (recomendado para el maíz) y en suelos que
recién se van a preparar, primero se rufea el terreno y posteriormente se debe subsolar, esto
se realiza en la dirección de cada uno de los futuros surcos, lo podemos observar en la figura
N°2. Esta práctica es muy importante en terrenos que utilizan el riego por gravedad. En las
zanjas que quedan por el subsolado, debe de aprovecharse para ser rellenarlos con compost,
humus de lombriz. Este tipo de labranza es el más indicado en verano en los valles que tienen
altas temperaturas ambientales como la costa peruana. De esta manera optimiza el desarrollo
radicular del cultivo, se nota un incremento en el rendimiento del maíz en un 40%, y las
leguminosas en 50%, esta práctica deja sin validez la creencia, que en verano en los valles de la
Costa Norte y Selva del Perú, se obtenían bajos rendimientos, debido a las altas temperaturas,
ambientales. Cuando la justificación técnica era la quemadura de las raíces por medio de las
altas temperaturas en suelo altamente compactados.
La segunda fertilización completar toda la dosis requerida del N (cuando la planta tiene las 08
hojas completamente extendidas.
MARACUYÁ
Preparación del suelo: Una vez seleccionado el terreno, si el suelo es arcilloso, se debe arar y
rastrear un mes antes del trasplante, para favorecer el desarrollo de raíces y el drenaje. Si el
suelo es suelto se hacen los hoyos de 30 cm de lado y 40 cm de fondo. En el caso de terrenos
de selva alta recién "volteados", es muy importante eliminar los troncos, ya que son el hábitat
idóneo para las hormigas cortadoras, las cuales atacan también el maracuyá; además, el
proceso natural de descomposición de los troncos, puede causar problemas de hongos en la
plantación. Normalmente una pasada de arado y una grada son suficientes, dependiendo de
las condiciones del terreno. Se puede aprovechar la grada para incorporar materia orgánica
para mejorar la textura y estructura del suelo en cantidades que varían entre 20 y 40 t/ha, de
acuerdo con el análisis de suelos.
Fertilización: Es uno de los aspectos más importantes del cultivo del maracuyá porque de ella
dependen la productividad, la calidad de los frutos, los costos de producción y rentabilidad. El
nivel de nutrientes en el suelo puede ser el origen de muchos desórdenes fisiológicos, pueden
llegar a alterar la tasa respiratoria de los frutos. La fertilización del maracuyá debe hacerse con
base en los resultados del análisis de suelos, o foliar, y de los requerimientos del cultivo. Es
recomendable la fertilización edáfica cada 30 ó 60 días y en dosis moderadas teniendo en
cuenta las recomendaciones de los análisis. Excesos de fertilización con urea hacen que los
tejidos se vuelvan más susceptibles al ataque de Phytopthora sp. Caso contrario ocurre cuando
se hacen aplicaciones controladas de calcio y óxido de zinc, éstas modifican el pH y fortalecen
las paredes externas de la célula e impiden ataques de Fusarium sp. Datos obtenidos para el
maracuyá amarillo, permiten determinar la exigencia en nutrientes por la planta en el
siguiente orden decreciente: N > K > Ca > S > P > Mg > Fe > B > Mn > Zn > Cu Cada nutriente es
esencial para la integridad de la planta y del fruto; la falta de cualquiera de éstos crea un
desbalance nutricional que afecta la calidad del fruto.
Sistema de conducción (espaldera tipo ramada): Este sistema consiste en construir ramadas
con alambre galvanizado # 12, la altura debe ser de 2.0 metros y los postes se colocan en
cuadro a cada 5- 7.5 metros. Con este sistema el cultivo alcanza una mayor productividad,
pero presenta un alto costo por la cantidad de alambre que se utiliza. Otra desventaja es que
aumenta la incidencia de enfermedades por el microclima húmedo que se forma debajo de la
ramada, además la aplicación de pesticidas se dificulta con el peligro de causar intoxicación en
los trabajadores.
Desbrote: La labor de “deschuponado” consiste en eliminar todos los brotes laterales que
emita el tallo principal para acelerar el crecimiento y guiar un solo tallo hasta la parte superior
del tutor que se encuentra a dos metros del nivel del suelo, con esta labor se busca también
obtener frutos de mejor calidad y mayor área fotosintética dentro de la plantación. Esta labor
se realiza manualmente; en algunos casos, los agricultores suelen dejar dos brotes o tallos por
sitio con el objeto de prevenir la muerte de cualquiera de ellos, o para incrementar los
rendimientos por hectárea. Parece existir evidencia de que no es conveniente una poda
frecuente de los cultivos ya que ello puede disminuir su producción, retrasar el crecimiento y
en casos extremos conducir a la muerte de las plantas, la poda será justificable en los
siguientes casos: -Facilitar la aspersión para controlar plagas y enfermedades -Reducir el peso
total del sistema de soporte utilizado -Remover partes de la planta que al crecer cerca del
suelo dificultan la cosecha. -Eliminar el material vegetal sobre el soporte, lo cual puede impedir
la recolección oportuna de frutas maduras
Cosecha y post cosecha: La cosecha consiste en colectar de la planta los frutos amarillos
cuando se destinan para el mercado fresco y para la industria se destinan los que se recolectan
del suelo. Los frutos alcanzan su madurez entre los 50-60 días después de la antesis (7-8 meses
después de la siembra), en este punto alcanza su máximo peso (130 g), rendimiento de jugo
(36%) y contenido de sólidos solubles (13-18º Brix), este momento se identifica externamente
por tomar una coloración verde amarillenta, 20 días después de alcanzar este punto el fruto
cae y comienza la senescencia disminuyendo su peso, acidez y azucares totales. Los
rendimientos por hectárea son de 20 ton/ha pudiendo alcanzar hasta las 30, y en términos
prácticos una planta puede producir entre 1 y 2 frutos diarios en la temporada de mayor
producción. Los frutos para mercado fresco se cortan con el pecíolo de una longitud de 1-2 cm.
para evitar la deshidratación del fruto y la posible entrada de hongos pos cosecha. Los frutos
se colocan en javas, ya que si se colocan en sacos el pedúnculo se cae, y se llevan a pilas par
lavarlos en una solución clorada (100 ppm) y el pecíolo se recorta dejándolo de 0.5 cm de
longitud.
PALTO
Suelo: El Palto puede cultivarse hasta los 2,500 metros sobre nivel del mar; dentro del clima
hay factores de mayor incidencia en el cultivo como: La temperatura: esta influye en la
producción del palto, y según la raza y calidad del patrón dependerá la resistencia al frío
extremo, las sequías prolongadas afectan el cultivo, el exceso de lluvias en la floración o
cuajado de frutos causa su pérdida y enfermedades. Se recomienda suelos profundos, franco
arenoso, textura liviana con pH 5.6 a 6.5, y los suelos arcillosos con buen drenaje también son
adecuados. Productor agropecuario si tienes suelos con deficiente estructura, cultiva el palto
en camellones con 80 cm, de altura y riego tecnificado, para lograr eficiencia nutricional.
Siembra: En la actualidad las nuevas plantaciones de palto en el valle de Santa Catalina, tienen
distancias más cortas a diferencia de aquellas siembras de años atrás. Su distanciamiento
puede ser un promedio de 4x4 mts con una población de 625 plantas. La producción es
variable, teniendo un promedio de 25 t/ha, las empresas exportadoras tienen mayor
producción ya que utilizan mejores recursos, terrenos planos y con riego tecnificado, con los
estudios de suelos, luz solar suficiente para no afectar el cultivo, logrando altos rendimientos.
En la región alto andina, los paltos cultivados en las laderas tienen mayor productividad que las
zonas bajas, cuenta a su favor suelos permeables y las heladas no afectan las partes altas,
emplear 5x5,6x5 para obtener rendimientos promedio 18 t/ha.
Riegos: Productor Agropecuario del valle de Santa Catalina te hacemos saber o recordar que
los momentos más importantes de necesidad de agua en el palto sin afectar su producción
son: Durante el proceso de floración y cuaja, así mismo a los 100 primeros días post cuajado.
Poda: Durante el desarrollo del palto, es necesario realizar poda de formación, Control
fitosanitario y del crecimiento vegetativo de altura, evitar el emboscamiento con la reducción
de la intensidad de luz. Toda poda se realiza con herramientas adecuadas, serruchos, tijeras,
desinfectadas por cada planta; luego desinfectar las heridas con fungicidas a base de cobre.
Eliminar las ramas que tengan contacto con el suelo, además es importante que cada poda sea
sin dejar “muñones” o porción de rama.
Hasta hace algunos años, toda la palta Hass peruana se cosechaba en jabas plásticas de 20 Kg,
sin embargo en los últimos años muchos productores han implementado el uso de bines para
la cosecha, estos recipientes tienen diferentes modelos, de aproximadamente 400 kg de
capacidad. La fruta es cosechada y transportada a las plantas empacadoras siguiendo
los parámetros de BPA y los exigidos por SENASA.
ESPÁRRAGO
Para el espárrago Blanco: los distanciamientos entre surcos utilizados varían desde 2.50 hasta
1.80m, sin embargo y dependiendo del tipo de suelo, los distanciamientos pueden ser d 2.00m
cuando los suelos son de textura franca y de 2.20m cuando los suelos son arenosos. Para el
espárrago verde: se utilizan distanciamientos de 1.20 a 2 m entre surcos, en las condiciones del
Perú distanciamientos de 1.30m serían los más adecuados. La profundidad de siembra de las
coronas, variará de acuerdo al tipo de espárrago que se desea producir, verde o blanco. Para
esparrago blanco 40cm de profundidad en suelos orgánicos, entre 20 y 30 cm en suelos
francos o arenosos. Para esparrago verde: en el Perú, la profundidad se siembra recomendada
sería de 20 cm en suelos arenosos y 15 cm en suelos francos. Los distanciamientos entre
plántulas o coronas en base a observaciones realizadas en Trujillo, Chimbote e Ica, los
distanciamientos de 30 a 40 cm entre coronas son las más adecuadas, pues permiten una línea
continua y uniforme de cosecha a lo largo del surco sin perderse espacios entre plantas. No es
recomendable la siembra de coronas dañadas o la siembra de 2 coronas por golpe o partir las
coronas porque el ingreso de enfermedades podría ser mayor y el campo no sería uniforme.
Estas prácticas deben desecharse.
Arándano
Compactación de suelo: La compactación y consolidación del suelo ocurre cuando el agua que
infiltra lleva arcillas superficiales u óxidos de hierro hacia los estratos inferiores, donde se
aglomeran formando una capa muy dura (capa de subsuelo) o cuando el suelo se compacta
por el tránsito de la maquinaria agrícola, formando así una capa dura (capa compactada) en los
estratos bajos. Para conocer el nivel de compactación antes de la plantación, es recomendable
efectuar calicatas en diferentes sectores del potrero en que se va a plantar. Una calicata de al
menos 1 x 1 x 1 m, que permita una visualización completa de los perfiles de suelo, desarrollo
de raíces y profundidad de la humedad.
Poda: En el cultivo del arándano se realizan dos tipos de poda: de formación y de producción,
incluyendo esta última labor la eliminación de madera vieja, improductiva o enferma. En los
primeros 2 años de plantación del arándano deben eliminarse las yemas florales de manera de
favorecer el desarrollo y crecimiento de brotes vegetativos vigorosos. El objetivo perseguido
en la poda anual es lograr un desarrollo de brotes vigorosos que mantengan un equilibrio
entre la producción de follaje y fruta. Logrando este objetivo se asegura cosechar fruta en
cantidad y calidad, además de hacer más accesible la fruta al cosechero. El arándano debe ser
podado en invierno entre los meses de Junio y Julio, cuando la planta está sin hojas, las yemas
están en dormancia y son fácilmente visibles.