Tema: “Padre, alguien que te ama y hace cualquier

cosa por ti”

Texto: Proverbios 23: 24

Introducción:
Un dicho popular dice: “Padre no es el que engendra,
sino el que cría”, pero un verdadero padre es aquel
que engendra con amor y cría con mucho mas amor,
pero todos debemos saber que ningún padre nace
aprendido, que no hay una escuela de padres antes de
realizar la funciones de uno, es por ello que hay tres
cosas esenciales que debemos saber sobre un padre:
I. Los padres, no somos perfectos.

a) Ningún padre es perfecto, solo NUESTRO PADRE

CELESTIAL.

b) A veces cometemos errores. Ejemplos:

1. Elí. (1 Samuel 3:13)

2. David. (1 Reyes 1: 6)
3. El padre del hijo prodigo. (Lucas 15: 12, 13)

c) El amor de un padre hacia su hijo muchas veces le

permite ser demasiado permisivo y esto lo lleva a
cometer errores que a la postre influyen
negativamente en su hijo.
Por esa razón también debemos reconocer algo y es lo
siguiente:

II. Tenemos deberes y responsabilidades.

Las responsabilidades de un padre ideal sobre sus

hijos son:

1. Enseñar: Deuteronomio 6: 7
2. Guiar: Proverbios 22: 6
3. Proveer: 2 Corintios 12: 14
4. Criar: Efesios 6: 4
5. Controlar: 1 Timoteo 3: 4
6. Amar: Proverbios 3: 12

III. Haremos lo que sea por un hijo.

a) Aun cuando nadie nos entienda. (2 Samuel 18: 33)

b) Aun cuando los demás piensen que no se merecen

nuestro amor. (Lucas 15: 23, 24)

c) Jesús puso el mejor ejemplo: Mateo 7: 11

EL AMOR DE PADRE MÁS PERFECTO

Aun cuando sabemos que nosotros como padres
amamos tanto a nuestros hijos, no podemos negar que
hay un amor de Padre mayor que el nuestro, y este es
el de nuestro Padre Celestial, que decisión entregar a
su único hijo por amor a nosotros. (San Juan 3:16)

Conclusión:
Cada padre hace lo que sea por su hijo, es por eso
que no es necesario que se acerque esta época para
poder reconocer el amor, cariño, dedicación y
cuidado que ha tenido sobre sus hijos, sino que cada
día deberíamos reconocerlo como aquel instrumento
que Dios uso para engendrarnos y criarnos, que pese a
sus errores y defectos siempre tuvo un momento para
demostrarnos cuanto nos ama y cuando dichoso se
siente de que seamos hijos suyos.
“Mucho se alegrará el padre del justo,
Y el que engendra sabio se gozará con él”.

Proverbios 23: 24