Cómo preparar pinturas caseras de

manera ecológica con los restos de frutas

y verduras. El color naranja.

Un estupendo recurso para que nuestros pequeños disfruten pintando es utilizar los
restos de las frutas y verduras que utilizamos diariamente en la cocina para
preparar pinturas naturales caseras, y lo mejor es que además no pasa nada si la
comen los más pequeños. Además podéis realizar un trabajo previo sobre los
sentidos del olfato y del gusto con este tipo de material, abriendo así a los más
peques la posibilidad de probar nuevos alimentos y además educándolos en una
alimentación sana y equilibrada.
Hoy os explicaremos como preparar pintura de color naranja. Es muy sencillo, para
hacerla necesitaremos zanahorias (las ralladuras), harina, agua, y aceite.
Lo primero que debemos hacer es reunir las peladuras ralladas de las zanahorias y
ponerlas en un bol. Las cubrimos con agua caliente durante unos diez minutos y
entonces las pasamos a un colador y las escurrimos bien sobre otro bol vacío
obteniendo así el colorante natural naranja. Una vez tenemos el líquido naranja,
echamos la harina y aclaramos con más agua, hasta que el tono y la consistencia
es el adecuado (si queréis preparar pintura de dedos debe ser un poco más espesa,
si es para pintar con pincel debéis aclararla un poco más). Finalmente añadimos
un poquito de aceite para darle un toque brillante a la pintura. Para guardarla es
aconsejable ponerla en un recipiente bien cerrado y en el refrigerador, nos
aguantará más días.

Una sencilla receta de masa sensorial

suave para modelar
Nuestra amiga Natalia, nos deja esta estupenda receta para preparar una masa
sensorial de manera rápida y sencilla en casa. Y sin necesidad de calentar al fuego,
con lo que es perfecta para que los propios pequeños la preparen (con nuestra
supervisión).
Para prepararla solo necesitamos los siguientes ingredientes:
2 tazas de maicena o fécula de maíz.
1 taza de acondicionador de cabello.
Colorante vegetal de alimentos (opcional).
El proceso a seguir es el siguiente: en primer lugar colocaremos la maicena en un
recipiente limpio, y a continuación iremos agregando poco a poco el
acondicionador de cabello. Mezclaremos con las manos (aquí los peques disfrutan
un montón!! ) hasta que quede una masa homogénea. Si queda pegajosa agregamos
un poco más de maicena hasta que no se peguen en los lados del recipiente.
Una vez bien mezclado todo, se coloca sobre una superficie plana (una mesa) y
volvemos a amasar bien hasta que quede la masa suave, moldeable y sedosa. El
aroma será el que tenga el acondicionador.
La masa será de color blanco, y es aquí donde podemos jugar con los colores
agregando unas gotas de colorante vegetal. En ese caso, prepararemos unas bolas
con la masa y con el dedo haremos un agujero en el centro sobre el que verteremos
unas gotitas de colorante (tened en cuenta la intensidad de color que queráis,
mientras más fuerte más colorante añadiremos). Cerramos el agujerito con masa,
y volvemos a amasar bien hasta que el color se vuelva uniforme. Y ya estará lista
para que nuestros peques jueguen con ella.
Para guardarla lo ideal es un recipiente de plástico bien cerrado o una bolsa tipo
ziplock, aunque debemos tener en cuenta que esta masa no dura tanto tiempo
como otras recetas, ya que no tiene materiales conservantes adicionales, como la
sal.
Una nueva receta de masa sensorial casera con base de gelatina

Una nueva receta para preparar de manera rápida y en casa una estupenda masa
sensorial con la que los peques pueden pasar muy buenos ratos moldeándola y
manipulándola. Los ingredientes que necesitáis seguro que los tenéis a mano en
vuestra cocina, y seguro que vuestros peques estarán encantados de ayudaros a
prepararla para poder así jugar con la masa que han realizado ellos mismos.

Los ingredientes que vamos a utilizar son los siguientes:

– Harina de trigo (una taza)
– Una taza de agua (si es un poco tibia mejor ya que ayudará a que los ingredientes
se mezclen con más facilidad)
– Azúcar glas (es el azúcar blanca en polvo que suele usarse para decoración de
pasteles), media taza.
– Sal (otra taza igual que la de la harina)
un poquito de cremor tártaro (el polvo que se le echa a los bizcochos en la
repostería para que suban cuando los -ponemos en el horno. Muy similar a la
levadura, podéis encontrarlo en cualquier tienda especializada en repostería
– un par de cucharaditas de aceite
– un par de cucharaditas de gelatina
– y, por último, los colorantes alimentarios
Prepararla también es sencillo. Mezclamos todos los ingredientes en un recipiente
grande (si lo hacemos en una olla directamente después no habremos de cambiarlos
para ponerlos al fuego) y una vez bien mezclados, se pone a fuego lento hasta que
rompa a hervir, siempre removiendo para que no se pegue la masa o se nos estropee
(quedando o muy líquida o muy seca, o con grumos). Si ocurre esto último, podemos
utilizar una batidora a potencia fuerte para batirlos y así no quedarán grumos.
Mientras hierve, la masa irá adquirirendo la consistencia adecuada y en cuanto
veamos que tiene una textura similar a la de la plastilina, apartamos del fuego y
dejamos enfriar un poco. En cuanto podamos manipularla, la dividiremos en tantos
trozos como colores dispongamos (recordad que podéis mezclar los colores y así
obtener nuevos). Para darle color cuando ya tienen la textura que nos permite
moldearlas, debemos preparar una bola de masa en cuyo centro haremos con el
dedo un agujero en el que verteremos el colorante, lo cerramos con masa y
amasaremos la bola hasta que toda ella haya cogido un color uniforme. Entonces
sí que estará lista para moldear y jugar con ella!!
Para conservarla mejor, guardadla en un recipiente cerrado mientras no la uséis y
os durará en buen estado unos cuantos días, suficientes para que los peques se lo
pasen genial dejando volar su imaginación y moldeando muchas cosas!!

CÓMO ELABORAR MASA DE SAL PARA

HACER MANUALIDADES

La masa de sal es muy adecuada para trabajar con niños. Es muy sencilla de
preparar, e inclusive la podemos hacer con ellos. No es tóxica y se puede modelar
con las manos o utilizando utensilios para modelar o diferentes tipos de moldes.
Es una alternativa a otras específicas para moldear, como las masas de plastilina o
barro, que se pueden elaborar en el entorno doméstico. Lo mejor de estas pastas
es que se manipulan sin ningún esfuerzo y son perfectas para elaborar todo tipo de
objetos.
Ingredientes:
Para la masa de sal: tres partes de harina, una de sal y otra de agua
Bolsa de plástico
Tabla de madera
Recipiente para hacer la mezcla
Recipiente para medir los ingredientes
Cuchara
Creatividad
Si queremos hacer masa de sal de colores, se le puede agregar al agua unas gotas
de colorante alimentario o témperas (en este último caso no permitir que los niños
se la pongan en la boca).
Unas divertidas variantes que se pueden hacer consisten en poner a la masa de sal
diferentes elementos para modificar su textura, por ejemplo, arroz, pequeñas
piedritas, etc. Es ideal para niños un poco mas grandes que ya no se metan la masa
en la boca.
Elaboración:
Lo primero que hacemos es mezclar (en el recipiente que hemos elegido) los
ingredientes mencionados más arriba, es decir, tres partes de harina, una de sal y
otra parte de agua. Después mezclamos bien con paciencia y ayudados de una
cuchara grande. Se trata de realizar movimientos circulares (con la cuchara)
mientras vamos añadiendo poco a poco el agua fría a la mezcla de harina y sal.
El truco para saber cuándo debemos parar de mezclar los ingredientes es
sencillo. La masa está lista cuando ya no se pega a las paredes del recipiente.
A continuación, espolvoreamos una pizca de harina sobre la tabla de madera.
Cogemos la masa (de sal) y la colocamos sobre dicha tabla. ¡Llegó la hora de
amasarla! El procedimiento es el mismo que cuando amasamos pan artesanal en
casa. Para que la masa esté perfecta tenemos que amasarla, durante diez minutos,
hasta que se vuelva elástica y suave al tacto. que nos hemos propuesto. Una vez
en su punto, colocamos la masa dentro de la bolsa de plástico, al menos durante
una hora para que repose.
Pasado dicho tiempo, la retiramos de la bolsa de plástico y… ¡Lista para moldearla,
trocearla y recortarla! Llegó la hora de hacer realidad la manualidad que tenéis en
mente desde hace tanto tiempo.
¡Importante! Cuando tengamos listo el adorno hay que introducirlo en el horno (dos
horas a 100-120º) para, posteriormente, pintarla.

pisapapeles de pasta de sal

Ahora que se acerca Navidad, os dejamos un precioso detalle para regalar a mamá
o papá, o a cualquier miembro de la familia con las manos y pies de nuestros
peques.
Para realizarlo solo necesitaremos preparar una base de masa de sal (aquí podéis
ver la receta) y una vez que la tenemos lista, haremos una bola y la aplanaremos.
Entonces pediremos a los peques que hagan fuerza con su manita o su pie hasta
que dejen su huella en ella. Esperaremos a que se seque bien.
Una vez seca, solo tenemos que pintarla con colores vistosos y nos quedará un
bonito recuerdo de nuestros peques.
¿Cómo encerrar una nebulosa en una
botella?

Os dejamos este espectacular trabajo sensorial, con el que los peques podrán tener
un trocito de espacio exterior encerrado en una botella.
Para realizarlo solo necesitamos un frasco vacío transparente (aunque en la foto
veis de cristal, os recomendamos que para trabajar con los peques utilicéis botellas
de plástico), además necesitaremos colorantes vegetales, algodón y purpurina.
Una vez lo tenemos todo listo, llenaremos un tercio de las botellas con agua y
verteremos el colorante elegido. Se aconseja utilizar colores como el verde, azul,
lila, y rosa. Mezclamos bien e introducimos un trozo de algodón. Apretamos hasta
que quede cubierto por completo y empapado con el agua, entonces añadimos la
purpurina, cerramos el bote y agitamos para que se esparza bien por el frasco. A
continuación introducimos otro trozo de algodón (el tamaño de los trozos
dependerá del tamaño del frasco o botella), y una vez dentro añadimos más agua
previamente mezclada con colorante de otro color. Volvemos a apretar con para
que quede bien empapado y echamos purpurina encima. Cerramos y volvemos a
agitar. Hemos de repetir este proceso tantas veces como sea necesario hasta
completar el frasco o botella. Si queremos mezclar pocos colores solo hay que
poner más cantidad de algodón y con un par o incluso una tonalidad tendremos
nuestro trocito de nebulosa particular.
Esta actividad es ideal para trabajar con los peques el espacio exterior o el
universo.
La magia de los colores con lombarda: experimento para
niños
Experimento casero para hacer con niños
Con este experimento casero podrás descubrir la magia de los colores y comprobar que la lombarda
es maravillosa. Puede hacer trucos de magia ya que su especialidad es cambiar de color. Haz la
prueba en casa con este experimento sencillo. Podrás cambiar el color violeta de la lombarda en
función de los ácidos y de las bases. La lombarda tiene una colorante especial que podemos
conseguir al cortarla y cocer sus hojas. Cambiará de color dependiendo del líquido en la que la
disolvamos. El cambio de color indica si se trata de un ácido o de una base.

¿Qué necesitas?

 ¼ de lombarda
 Vinagre
 Bicarbonato de sodio o levadura química
 Jabón en polvo
 Un cuchillo
 Un mortero
 Un colador
 4 vasos
¿Qué hay que hacer?

1. Corta la lombarda en trocitos con el cuchillo. Pide la ayuda de un adulto para hacer esto.
2. Echa los trozos en un mortero o en una fuente estable con un poco de agua. Aplasta la lombarda
con la mano del mortero o con una escurridera.

3. Añade un poco más de agua y mezcla bien.

4. Vierte el agua con la lombarda en cuatro vasos. Utiliza un colador para que no caiga ningún trozo
de lombarda en los vasos.

5. El agua de los cuatro vasos tiene un color oscuro azul violeta. Pero esto no va a durar mucho.

6. Echa un poco de vinagre en el segundo vaso. Como por arte de magia, ¡de repente el líquido se
vuelve rojo! Mezcla poco a poco un poco de bicarbonato de sodio (o levadura química) en el tercer
vaso y verás ¡es agua se vuele azul! Y si echas un poco de jabón en polvo en el cuarto vaso, ¡verás
que el líquido se vuele verde!

¿Qué ocurre?

Ácidos y bases: la lombarda tiene un colorante especial que se puede extraer cortándola y cociendo
sus hojas. En un líquido neutro, este colorante es azul violeta. Pero cambia de color según lo que
añadamos a ese líquido. En una solución ácida, se vuelve rojo, en una solución básica, se vuelve azul.
Si la solución es todavía más básica, entonces se vuelve verde. Así que el cambio de color nos indica
si un líquido es ácido o básico.
¿Por qué ocurre?

El vinagre es un ácido y evidentemente tiene un sabor ácido. La limonada y la Coca Cola también
son ligeramente ácidos ya que contienen ácido carbónico. Nuestro jugo gástrico contiene ácido
clorhídrico bastante agresivo para poder digerir los alimentos. Cuando hay jugo gástrico que pasa
por nuestro esófago, esto provoca dolorosos ardores de estómago.

Cuidado, ¡los ácidos son corrosivos!

Para la limpieza del hogar, a menudo se utiliza el vinagre (o el zumo de limón) para eliminar el
sarro alguna cosa. Los contrarios de los ácidos son las bases. Si vertemos en un ácido una base con
la misma intensidad, sus efectos se equilibran. Obtenemos una solución neutra. Al igual que los
ácidos, las bases también son corrosivas. Corroen por ejemplo el cabello, la piel, la grasa pero no el
metal. Por eso un desatascador limpia las tuberías sin estropearlas.

Y ¿qué tiene que ver la base en una masa para galletitas pretsel con salmuera? Absolutamente nada.
La masa para pretsel con salmuera no existe. Los pretsels o palitos con hechos con masa de pretsel
están hechos con masa que contiene levadura. Antes de hornearlos, se introducen en un baño de
salmuera y eso es lo que les da el color marrón y su sabor típico.
Experimentos de ciencia divertida para niños. Huevos
irrompibles
Experimentos caseros de ciencia divertida para los niños
Los huevos parecen muy frágiles, pero lo cierto es que son capaces de soportar una gran cantidad
de peso gracias a su diseño en forma de cúpula, que reparte el peso por igual sobre toda la
superficie de la cáscara, siendo capaz de resistir el peso cuando la gallina se sienta sobre ellos pero
dejar a los pollitos salir.
Con este experimento casero puedes enseñar a los niños a reproducir este curioso efecto. Disfruta
ya de este sorprendente experimento de ciencia divertida para niños.

Materiales

 3 vasos pequeños
 3 huevos
 Un plato
 Libros
Consejo: Puedes utilizar otros objetos para comprobar cuánto peso aguanta el huevo. Hazlo sobre
una superficie que se limpie fácilmente, ¡por si se rompen!.
Cómo saber cuánto peso soporta un huevo, paso a paso

1. Coloca los tres vasos sobre una superficie plana, formando un triángulo. Coloca un huevo sobre
cada vaso.
2. Coloca un plato de cerámica llano con cuidado encima de los huevos, de forma que quede entre
los tres más o menos a la misma distancia.

3. Coloca los libros sobre el plato con cuidado, y observa cuánto peso pueden resistir.
¡Impresionante!
2. Mantequilla casera,
¡experimento infantil sabroso!

Vïa: We made that

Sí, como leéis, ¡podéis hacer mantequilla en casa y divertiros mientras tanto! Para ello,
colocáis medio vaso de nata espesa en un frasco con tapa hermética y ¡llegó el momento
de agitar! Saltad con el frasco, bailad, corred, volveos locos y luego de 5 minutos, la nata
debería haberse espesado y convertido en mantequilla como se ve en la imagen.

En el enlace, encontraréis el mismo experimento realizado también con leche desnatada…

3. Leche coloreada, un
experimento fácil ¡y divertido!

Vía: Kids activities blog

¿Qué pasaría si colocamos colorante alimentario en un bol y luego añadimos leche? ¿Y si
después agregamos un poco de jabón para la vajilla? ¡Mirad el resultado en la imagen! ¡A
los peques les encantará la idea!

En el enlace bajo la imagen podéis ver un vídeo del experimento (en inglés)…
 Globo que se infla solo

© hetaqrqire
Necesitarás:
 Unos globos.
 Un envase vacío (de 1 o 1,5 lt).
 Una cucharita.
 Un embudo.
 Vinagre.
 Bicarbonato de sodio.
Experimento: Vierte el vinagre en el envase (aproximadamente llena 1/3 del
recipiente). A través del embudo, ponle 2-3 cucharaditas de bicarbonato. Ubica
un globo sobre la boca del envase y verás cómo el globo empieza a inflarse. El
globo lleno de dióxido de carbono no podrá elevarse. Para que se mantenga
junto al techo, frota sobre el globo cualquier tela sintética y luego "pégalo" al
techo.
Revelación: Como resultado de la interacción de bicarbonato de sodio con
vinagre, se libera el dióxido de carbono que llena los globos. Y gracias a la
electricidad estática, los globos inflados de esta manera se mantendrán
pegados al techo hasta 5 horas.
 4. Col de colores

Materiales
 4 vasos con agua.
 4 hojas de col.
 Colorante alimenticio.

Procedimiento
1. Poner colorante en el agua de los vasos. Cada vaso recibirá un color
diferente.
2. Introducir una hoja de col en cada vaso.
3. Dejar reposar. Después de un tiempo, las hojas se habrán teñido del color del
colorante del vaso.
 3. El mar está en la botella
Este es un experimento sencillo y con efectos de gran atractivo para
los pequeños de la casa.

Materiales
 Acuarela o colorante alimentario azul.
 Aceite y agua.

 Botella.

Procedimiento
1. Llenar con agua las tres cuartas partes de la botella.
2. Agregar unas gotas de colorante y mezclar.
3. Completar la botella con aceite.
4. Taparla y moverla.

El mar encerrado en la botella hará burbujas, olas y efectos

para juegos muy divertidos. ¿Por qué sucede? El aceite flota y se
desliza sobre el agua, pues ambos no se mezclan. La diferencia de
sus densidades unida a la coloración, produce los atractivos efectos.