La catedral

de César Mallorquí

La Catedral es una novela sobre la Edad Media con rasgos fantásticos escrita
por César Mallorquí.

Prólogo:

Un anciano que era perseguido se escondió en una cripta porque estaba

condenado a muerte. Al salir de ella, un hombre atravesó su vientre con una
espada y el anciano se cayó por las escaleras de la cripta. Dejo allí escrito un
símbolo con su propia sangre (una Y encima de una O).

Todo comenzó cuando León Yáñez, cantero y maestro constructor, llevó a su

hijo Telmo a la logia el día de su decimocuarto cumpleaños.

A partir de ahí todo cambio, ya que Telmo fue aceptado en la logia como
aprendiz de masón y se convirtió en un hombre. Vivian en Estella, una villa
del reino de Navarra, donde su padre dirigía las obras de la iglesia de Santo
Domingo y Telmo trabajaba como ayudante.

Esa noche se reúnen todos los francmasones para celebrar la entrada de

Telmo en la logia y su padre le regala un juego de herramientas, ya que se la
daba muy bien la escultura, y le explica lo que conlleva ser un "lathomus"
(maestro de obras).

En invierno, cuando las obras estaban paradas, llegó a Estella un cantero de

Burdeos. A la semana siguiente León Yáñez debía partir hacia Compostela,
regresó a las seis semanas y a los dos días la logia mando un emisario a
Burdeos.

Pasados varios meses y con las obras de Santo Domingo ya reanudadas, llegó
el Obispo de Pamplona escoltado por ocho soldados del Rey. Al día siguiente,
Martín, el hijo pequeño de Nicefas advirtió en la obra que había tres vikingos
en la taberna de Yago. Esa misma noche se convocó una asamblea de todas
las logias del feudo a la que asistió el obispo, pero Telmo no se entero de nada
hasta el días siguiente porque su padre regreso muy tarde.

León dijo a su hijo que debía comenzar el "Tour" y dirigirse a Bretaña a la

construcción de una catedral donde el maestro de obras había desaparecido, un
hombre llamada Thibaud. Iba con tres compañeros, que concretamente eran
los tres hombres que estaban en la taberna la noche anterior llamados Gunnar,
Erik y Loki; debían dirigirse concretamente a Kerloc'h.

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 Al día siguiente Telmo y los tres hombres partieron de la iglesia de San Juan
Bautista. León dijo a su hijo que en Kerloc'h debía encontrarse con una
persona que representaba al Papa en secreto, ya que estaba interesado en la
construcción de la catedral. Llegaron al atardecer a Pamplona, donde pasarían
la noche. Telmo intentó dos veces averiguar a qué se dedicaban aquellos
hombres pero estos evitaban contestar a sus preguntas.

Después de viajar todo el día, la noche siguiente se quedaron en una posada

que se encontraba en las faldas del monte Cize. Cenaron en una taberna que
habías allí, donde Loki se enfrentó a un hombre llamado Falco y a sus
compañeros porque decía que hacían trampas en el juego de los dados. Al día
siguiente se encontraron a los diez hombres por el camino, donde les
volvieron a ganar y los mataron. Telmo se dio cuenta que eran caballeros
templarios, paro debía mantenerlo en secreto. La construcción de la catedral
estaba siendo financiada por la Orden del Águila de San Juan, con la que el
maestro Thibaud tenía relación, paro no se lo dijeron.

Finalmente llegan a Bretaña después de un largo viaje. Allí van a ver el mar,
ya que Telmo nunca lo había visto y se bañan en él. Al llegar a Keloc'h Telmo
contempla asombrado la catedral, era la construcción más extraordinaria que
jamás había visto.

Encontraron a Hugo de Gascuña y Telmo le dice que él era el imaginero que

le pidió a su padre, pero este no le cree y entonces le dice que participe en un
concurso con tres imagineros más. Después hubo una reunión en la logia, y
tras esta Telmo se hospeda en la casa de Hugo, junto a su mujer, María y su
hija Valentina de trece años. Al día siguiente él y los tres templarios se
encontraron a un hebreo muy amable, un prestamista llamado Abraham Ben
Mosset. Le ordenaron que hiciera un capitel siguiendo un boceto y lo hizo
como él quiso, pero Hugo dijo que así quedaría mejor. Después llegó el último
participante del concurso, que se celebraría al día siguiente.

El concurso decidiría quien tallaría la imagen del altar de la catedral.

Finalmente ganó Telmo. Abrahán Ben Mosset se identificó como el enviado
secreto del Papa, entonces Telmo, Hugo y Eric se reunieron con él. Quedan en
el lugar en el que Abraham hace experimentos, uno de ellos era la pólvora,
que serviría para destruir la catedral si fuese necesario. Abraham era un
alquimista. El no se identifico antes porque esperaba que Telmo ganara el
concurso, ya que un hebreo en el pasado había tenido una visión de la catedral
donde había visto a Telmo.

El fundador de la Orden del Águila de San Juan, Corberán de Carcassonne, le

dio a Telmo dos meses para realizar una escultura de San Miguel. Hugo les
reunió a todos porque Helmut había encontrado una cripta secreta en la
catedral, donde había un altar pagano. Allí vieron un símbolo (una T encima

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de una O) escrito con sangre, y se dan cuenta que es el símbolo de cantero del
maestro Thibaud de Orly y de que la torre de la catedral amplificaba los
sonidos en su cúspide. Korrigan le cuenta a Telmo que él pudo ver como
mataban a Thibaud de Orly y que los que lo mataron lo hicieron porque sabía
más de la cuenta y sabía que había una cámara secrete en la catedral además
de la cripta.

Helmut había desaparecido y no lo encantaban, El 13 de Septiembre

colocaron la campana y Telmo término la escultura, paro Corberán le dijo que
esculpiera unos símbolos. Este le dio un saquito de monedas. Cuando la
catedral estuvo terminada desalojo el pueblo y prohibió la entrada en ella. Erik
quería dirigirse a Normandia en busca de tropas de refuerzo. Telmo creía que
en la escultura ponía San Miguel en hebreo, pero no ponía San Miguel, sino
"Lucifer". Sin saberlo había esculpido una estatua del diablo. Abraham dijo
que debían destruir la catedral.

El verdadero nombre de la orden era Caballeros del Águila de San Juan de los
Siete Sellos, el autor del Apocalipsis, la cruz de la planta estaba invertida; y la
figura de Cermunos en la cripta, el Señor del infierno.

Telmo tuvo un sueño con Korrigan y lo entendió todo, entendió porque le

había dicho hace unos días: "Entre do y sol está la puerta del infierno". Fue en
la mitad de la noche a la catedral y en el órgano, entre do y sol, vio una puerta
disimulada entre dos tubos. Entro en esa habitación oculta y vio allí los
cadáveres de Thibaud de orly y sus compañeros francmasones y el de
Helmut.. Fue a casa de Erik a contárselo todo, y los encerraron a ellos también
y a todos los que quedaban en el pueblo.

Erik y Telmo estaban en una celda de la fortaleza, y Corberán dijo había

dejado de creer en Dios porque los había abandonado. Prendieron fuego a
todo el poblado. Corberán sabía que Abraham era el enviado del Papa; y que
Erik, Gunnar y Loki eran templarios. Loki y dos templarios más fueron a
rescatarlos. Valentina también estaba en la catedral. Comenzó a sonar la
campana y a cada campanada la tierra temblaba. En ese momento apareció
Abraham con la pólvora y les dijo a Erik y a Telmo que la catedral era una
caja de resonancia para la campana y que su objetivo era invocar al diablo.
Querían intentar tomar la catedral, debían hacer que la campana dejara de
sonar. Mientras algunos distraían a los turcos que vigilaban Erik y Telmo
subían por los andamios para tirarle la pólvora a la campana. En los andamios
se encontraron a Simón de Velaquia con cuatro hombres y espadas; Simón y
Erik se enfrentaron y finalmente Erik lo mató. Al subir hacia la campana
Telmo vio al mismísimo diablo, colocó el barril de pólvora en la campana y la
incendió. Finalmente la pólvora explotó haciendo que la campana se rompiera
y salvaron a Valentina. Habían ganado la batalla entre el bien y el mal.

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Todos los bretones vitorearon a Telmo después de esto. De repente oyeron
gritos de auxilio en las ruinas, era Corberán Carcassonne, que los maldijo a
todos y finalmente murió. Erik, Abraham y Hugo invitaron a Telmo a ir a
París, Roma y Quimper; pero él debía terminar su "tour" yendo a Normandía.

Valentina le dijo que se volverían a ver y se casarían, Telmo se despidió de

todos.

Epílogo:

Se cumplieron las maldiciones de Corberán, Telmo vagó por la tierra, los

judíos fueron perseguidos y la Orden se disolvió. Telmo viajó construyendo
obras y, finalmente, grabó su marca en la roca de un pueblo olvidado (una T
sobre una Y).