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El Sistema Cutzamala provee al Valle de México de aproximadamente la cuarta

parte del caudal que se consume en esta región, el resto del abastecimiento de
agua potable proviene de 14 acuíferos localizados en el propio Valle, los cuales
se ven expuestos a una fuerte presión, y la mayoría de ellos se encuentran
sobreexplotados.

Desde su construcción, en 1973 el Sistema Cutzamala bombea cada año a la


Ciudad de México 256.7 millones de metros cúbicos, en promedio 8 mil 142 litros
por segundo; actualmente el Cutzamala aporta un volumen de 16 metros cúbicos
por segundo o bien 16 mil litros por segundo proveniente de agua de lluvia que es
captada a través de 7 presas ubicadas en el Estado de México y Michoacán, lo que
lo convierte en la única fuente de agua sustentable para el abastecimiento para
la Ciudad de México y municipios conurbados mexiquenses.

Mensualmente el Sistema Cutzamala gasta 92 millones de pesos en energía


eléctrica para bombear el líquido a la Ciudad de México utilizando una red de
bombeo que demanda 250 megawatts de electricidad, capaz de atender a una
población de un millón 500 mil habitantes.

Los recursos hidráulicos en el Estado de México son escasos en todas las cuencas,
Alto Río Pánuco, Río Lerma y Valle de México. Actualmente el agua subterránea
del Río Lerma está al límite de su disponibilidad, en la del Valle de México el
acuífero está sobreexplotado; y en lo que respecta a la del Río Balsas, hay
disponibilidad de escurrimientos superficiales, pero faltan sitios para su
almacenamiento, en esta última cuenca se localiza el sistema Cutzamala.

Este complejo sistema tiene que vencer una altura de mil 100 metros a través de
6 grandes sistemas de bombeo y posteriormente recorrer una distancia de 150
kilómetros, hasta el punto de entrega del agua en bloque, tanto para el Distrito
Federal como para el Estado de México, desde donde se distribuye a través del
Acuaférico y el Macrocircuito, respectivamente. Según la Comisión Nacional del
Agua (CONAGUA), los esfuerzos técnicos y económicos destinados al Sistema
buscan garantizar que este opere en las mejores condiciones de eficiencia y que
sus beneficios continúen llegando a más de cinco millones de personas de la
capital del país y de los municipios del Estado de México como Atizapán,
Coacalco,Cuatititlán Izcalli, Ecatepec, Huixquilucan, Lerma, Naucalpan,
Nezahualcoyotl, Nicolás Romero, Ocoyoacac, Tlalnepantla, Tultitlán y Toluca;
uno de los retos más urgentes que se requieren atender para garantizar la
permanencia del Sistema Cutzamala y con ello garantizar el abasto a la
población, es realizar una serie de obras de sustitución de tramos de tubería y
modernización de equipos que por el paso de los años han sufrido desgaste.

POR: PAOLA CABALLERO

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