Professional Documents
Culture Documents
existentes alrededor del clima organizacional, citados por Álvarez (1992) en (Gómez Rada, 2004).
Gómez Rada, C. A. (2004). diseño, construcción y validación de un instrumento que evalúa clima
organizacional en empresas Colombianas, desde la teoría de respuesta al ítem. Acta Colombiana de
Psicología(11), 97-113.
Francis Cornelle 1955 Son las percepciones de los miembros del grupo
las que definen el clima y solo a partir de esas
percepciones se podrá conocer y determinar las
características de ese clima organizacional.
Argyris 1957 Hace énfasis en el desarrollo de una atmosfera
interpersonal de confianza, franqueza y
tranquilidad en la organización para que se
pueda aceptar la existencia de un conflicto
cuando este se presenta, identificarlo y emplear
los recursos necesarios para resolverlos.
Sells 1960 Afirma que el ambiente interno influye en el
comportamiento de los individuos y que estas
influencias dependen de la percepción 33
del individuo y de su aceptación de las restricciones sociales y
culturales.
Atkinson 1964 Creo un modelo con el cual explicaba la
“motivación promovida”, un efecto de los
motivos íntimos del individuo, de los incentivos
que la organización le provee y de las
experiencias despertadas en la relación, como
un elemento moldeador del clima
organizacional.
Pace 1968 Entiende el clima organizacional como un
patrón de características organizativas con
relación a la calidad del ambiente interno de la
institución, el cual es percibido por sus
miembros e influye directamente en sus
actitudes.
Campbell, Dunnette, 1971 Describen el clima organizacional como un
Lawler y Weick conjunto de atributos específicos de una
organización particular que puede ser deducida
de la manera como la organización interactúa
con sus miembros y con el medio ambiente.
Consideran igualmente, a las percepciones
individuales como elementos críticos del clima.
El clima como tal, es considerado una variable
situacional o un efecto principal.
Dubrán 1974 Postula que cada organización tiene propiedades
o características que poseen muchas
organizaciones; pero cada una tiene su
constelación exclusiva de características o
propiedades. Estas son percibidas por sus
miembros y crean una estructura psicológica
que influye en el comportamiento de los
participantes. Clima organizacional es el
término utilizado para describir esta estructura
psicológica de las organizaciones. Para este
autor el clima es la “sensación”, la
“personalidad” y “el carácter”, del ambiente
interno de la organización.
Gibson y colaboradores 1984 Sintetizan el concepto refiriéndolo a las
propiedades que perciben los participantes como
características del ambiente de trabajo. Según
estos autores, el clima es un concepto
compendiado por el hecho de que está formado
por percepciones combinadas de las variables
conductuales, estructurales y de procesos, que
se dan en
Elaboración propia
5. Las características de los procesos de toma de decisiones: Mide la pertinencia de las informaciones
en que se basan las decisiones así como el reparto de funciones.
6. Las características de los procesos de planificación: Define la forma en que se establece el sistema
de fijación de objetivos o directrices.
7. Las características de los procesos de control: Mide el ejercicio y la distribución del control entre
las instancias organizacionales.
8. Los objetivos de rendimiento y de perfeccionamiento: Permite analizar la planificación así como la
formación deseada.
4. Riesgos y toma de decisiones. Percepción del nivel de reto y de riesgo tal y como se presentan en
una situación de trabajo.
5. Apoyo. Los sentimientos de apoyo y de amistad que experimentan los empleados en el trabajo.
2. Conflicto y cooperación. Esta dimensión se refiere al nivel de colaboración que se observa entre
los empleados en el ejercicio de su trabajo y en los apoyos materiales y humanos que éstos reciben de
su organización.
3. Relaciones sociales. Se trata aquí del tipo de atmósfera social y de amistad que se observa dentro
de la organización.
4. Estructura. Esta dimensión cubre las directrices, las consignas y las políticas que puede emitir una
organización y que afectan directamente la forma de llevar a cabo una tarea.
6. Rendimiento. Es la relación que existe entre la remuneración y el trabajo bien hecho y conforme a
las habilidades del ejecutante.
10. Centralización de la toma de decisiones. Analiza de qué manera delega la empresa el proceso de
toma de decisiones entre los niveles jerárquicos.
11. Apoyo. Este aspecto se basa en el tipo de apoyo que da la alta dirección a los empleados frente a
los problemas relacionados o no con el trabajo.
Bowers y Taylor en la Universidad de Michigan estudiaron cinco grandes dimensiones para analizar
el clima organizacional.
1. Apertura a los cambios tecnológicos. Se basa en la apertura manifestada por la dirección frente a
los nuevos recursos o a los nuevos equipos que pueden facilitar o mejorar el trabajo a sus empleados.
2. Recursos Humanos. Se refiere a la atención prestada por parte de la dirección al bienestar de los
empleados en el trabajo.
3. Comunicación. Esta dimensión se basa en las redes de comunicación que existen dentro de la
organización así como la facilidad que tienen los empleados de hacer que se escuchen sus quejas en
la dirección.
4. Motivación. Se refiere a las condiciones que llevan a los empleados a trabajar más o menos
intensamente dentro de la organización.
5. Toma de decisiones. Evalúa la información disponible y utilizada en las decisiones que se toman
en el interior de la organización así como el papel de los empleados en este proceso.
Brunet afirma que para evaluar el clima de una organización es indispensable asegurar que el
instrumento de medición comprenda por lo menos cuatro dimensiones:
1. Autonomía Individual. Esta dimensión incluye la responsabilidad, la independencia de los
individuos y la rigidez de las leyes de la organización. El aspecto primordial de esta dimensión es la
posibilidad del individuo de ser su propio patrón y de conservar para él mismo un cierto grado de
decisión.
2. Grado de estructura que impone el puesto. Esta dimensión mide el grado al que los individuos y
los métodos de trabajo se establecen y se comunican a los empleados por parte de los superiores.
Litwing y Stringer citado en (Soberanes Rivas & De la Fuente Islas, 2009, pág. 123), definen el
climacomo el conjunto de propiedades medibles del entorno de trabajo, basado en las
percepciones colectivas de la gente que vive y trabaja en dicho entorno y que influyen en su
comportamiento. Dessler en 1993, plantea que no hay un consenso en las definiciones sobre el
clima organizacional, relaciona los términos propuestos por Halpins, Crofts y Litwing y Stringer.
Gómez Rada, C. A. (2004). diseño, construcción y validación de un instrumento que evalúa clima
organizacional en empresas Colombianas, desde la teoría de respuesta al ítem. Acta
Colombiana de Psicología(11), 97-113.
Pérez de Maldonado, I., Maldonado Pérez, M., & Bustamante Uzcátegui, S. (2006). Clima
organizacional y gerencia: inductores del cambio organizacional. Investigacion y Posgrado
SciElo, 231-248.
Rodríguez Latinez, A. (2005). Tesis para optar en grado de Mg. en Administración. Universidad
Católica de Chile. El comportamiento organizacional como instrumento para el
mejoramiento continuo de los recursos humanos, 88. Santiago de Chile.
Rodriguez Salva, A., Alvarez Perez, A., Sosa Lorenzo, I., De Vos, P., & Bonet Corvea, M. V. (2010).
Inventario del clima organizacional como una herramienta necesaria para evaluar la calidad
del trabajo. (E. y. Instituto Nacional de Higiene, Ed.) Revista Cubana de Higiene y
Epidemiología, 4(2), 177-196.
Soberanes Rivas, L. T., & De la Fuente Islas, A. H. (Julio - Diciembre de 2009). El Clima y el
Compromiso Organizacional en las organizaciones. Revista Internacional. La nueva gestión
organizacional, ISSN:1870205-8(9), 123.
Werther, W., & Davis, K. (1997). Administración de personal y Recursos Humanos. Mexico: Mc
Graw-Hill.
MOTIVACIÓN LABORAL
Con la incursión de los procesos de industrialización y tecnificación al interior de las empresas, empiezan
a aflorar los sentimientos de subutilización y de ausencia de motivación ante la ejecución de la labor
realizada. En 1920, cuando se instaura la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se da nicio al
planteamiento de lineamientos sobre la importancia y necesidad de tener en cuenta aspectos tales
como el bienestar de los trabajadores y es así como se da inicio a lo que hoy conocemos como
legislación sobre condiciones laborales.
Por otra parte, ya a mediados del siglo XX nacen las primeras teorías sobre la motivación y, es a
partir de este momento, cuando se empiezan a establecer relaciones entre el rendimiento laboral
y la satisfacción personal a la hora de desarrollar el trabajo. Los primeros estudios de la época
concluyen que un trabajador que se sentía motivado en su trabajo, era más eficaz y más
responsable, y además, podría generar un buen clima laboral.
Es a partir de estas conclusiones, que las empresas deciden otorgar importancia a determinar e
identificar las necesidades de sus trabajadores mientras desarrollan su trabajo. El objetivo de
estos análisis era conseguir que los trabajadores se sintieran realizados como personas y como
trabajadores mediante el desempeño de su trabajo dentro de la empresa.
Es claramente aceptado determinar que la motivación hace referencia a las fuerzas que actúan
sobre un organismo o en su interior para que inicida y rija la conducta. Dos aspectos
fundamentales de la conducta motivada son: la intensidad y la persistencia. Las conductas más
intensas se consideran la consecuencia de una motivación mayor. Y, en efecto, una conducta
muy motivada permanecerá, aunque tenga poca intensidad. El concepto de motivación permite y
facilita exponer por qué la conducta se ejecuta en una situación y no en otra (Petri et al., 2006).
Jiménez (2009) en el artículo que está disponible en la revista electrónica CEMCI la cual que se
ubica en internet, precisa la motivación como uno de los conceptos más ampliamente estudiados
a la hora de intentar comprender el comportamiento de los individuos, la motivación es un
concepto que se utiliza a diario pues es un factor fundamental en las organizaciones, es una
variable determinante en el desempeño laboral.
Jiménez, C. (2009). Motivación y Habilidades de Dirección. CEMCI.
La conducta humana se puede definir como una serie de actividades, de índole física o mental,
que le proporcionan significado a la existencia. Por ello, toda actividad realizada por el ser
humano en un momento determinado tiene un fin, lo lleva hacia el cumplimiento de un objetivo
o al logro de una meta.
Por su parte, Robbins y Judge (2009) precisan el concepto de motivación como la consecuencia
de la interacción de los individuos con un contexto o escenario especifico., y que son elementos
como la intensidad, dirección y persistencia del esfuerzo que realiza un individuo para la
consecución de un objetivo son los que inciden directamente en la consecución del mismo.
Robbins, S., Judge, T. (2009). Comportamiento Organizacional. México: Pearson Educación.
Peiró et al. (2007) se refiriere a la motivación como un proceso psicológico afín con el impulso
(amplitud), dirección y persistencia de la conducta.
Peiró, J.M., Prieto, F. (2007). Tratado de psicología del trabajo. Volumen I: La actividad laboral
en su contexto. Madrid: Síntesis Psicología.
Reeve (2010), define la motivación es el proceso que da energía y dirección al comportamiento.
Energía implica que la conducta tiene fortaleza; dirección, que tiene propósito, que se dirige o
guía hacia el logro de algún objetivo o resultado específico.
Reeve, J. (2010). Motivación y emoción. México: McGraw Hill.
La motivación del trabajo es defina por Newstrom, (2011), como “el conjunto de fuerzas internas
y externas que hacen que un empleado elija un curso de acción y se conduzca de ciertas maneras.
Desde un punto de vista ideal, estas conductas se dirigirán al logro de una meta organizacional”.
Furnham (2011) indica que existen diferentes razones por las que las personas trabajan: el trabajo
genera recursos, además de ser un espacio generador de actividades, estímulos, de contactos
sociales, y una fuente de realización y crecimiento personal. En genera la mayoría de las
personas toman la decisión de trabajar debido a las recompensas que esto suministra. De igual
forma, las personas advierten diferentes tipos y niveles de motivación al momento de trabajar.
Furnham, A. (2011). Psicología Organizacional. El comportamiento de los individuos en las organizaciones.
México: Oxford University Press México.
Martínez, (2000), plantea que la motivación es la fuerza movilizadora que facilita la orientación
y la regulación conductual del individuo, con el propósito de compensar sus necesidades, las
cuales se originan con el fin de estimular la actuación del mismo y lograr las metas.
Martínez, A. (2000): Calidad de Vida Laboral en Función del Estrés, Tareas y Antigüedad en Trabajadores de
Empresa Hotelera. Tesis Inédita de Licenciatura en Psicología. Universidad de las Americas- Puebla. México.
Espada (2006), determina la motivación como un factor de base emocional para el individuo en
cualquier campo laboral o profesional, en donde estar motivado significa efectuar las tareas
diarias sin pereza y sin necesidad de sentir y ejecutar sobreesfuerzos.
Espada, H. (2006): Como Motivar al Trabajo.nuevaeconomia.com.bo/revista.
La motivación para Álvarez (2007), moviliza y orienta la actividad hacia el alcance de los objetivos,
persiguiendo la eficiencia de las mismas.
Álvarez, C. (2007): El tutor en el adiestramiento laboral del egresado de la Educación Técnica y Profesional.
www.monografias.com consultado 10 julio 2010
Ponce (1988), manifiesta que en general lo que mueve en un mayor o menor grado a los individuos a
anhelar el logro de sus objetivos obedece a las creencias, formación y/o vivencias que estas traigan
consigo, y en últimas esto es lo que verdaderamente le permite seguir adelante.
Según Flores, (2008) manifiesta que la motivación tiene sus asientos en la teoría de Darwin sobre
la evolución de las especies. Pues Darwin cimentó sus conjeturas en “un cambio ambiental a
gran escala el cuál incidió marcadamente en la necesidad de cambio de una determinada especie animal
para garantizar su subsistencia en el nuevo medio ambiente y que tanto animales como hombre se
mantienen en continua evolución motivados por los cambios de su entorno”.
Flores, R. (2008): Motivación de los Trabajadores de la Dirección Comercial y su Incidencia en el
Desempeño Laboral en la Empresa Renault Venezuela, C.A. Trabajo de Grado de Maestría Publicado.
Universidad de Carabobo: Valencia.
Teorías de la motivación
Las teorías de motivación son relativamente nuevas ya que no es hasta la segunda mitad del siglo
XX que se ahonda en este tema, tema que aún despierta interés y necesidad de estudio e
investigación.
o Teorías de contenido. Centradas en estudiar los elementos que motivan a las personas,
buscan analizar las necesidades y los refuerzos relacionados con la realización de los
trabajadores en su entorno laboral. Entre las teorías de contenido se pueden señalar las
siguientes:
Teorías de Contenido
Maslow identificó cinco tipos de necesidades, estableciendo que las necesidades del nivel
inferior son las necesidades fisiológicas (necesarias para la conservación) y de seguridad (de
asumir una existencia ausente de amenazas físicas, emocionales y/o económicas), le siguen las
necesidades de orden superior, iniciando con las necesidades de pertenencia y sociales (que se
refieren a las necesidades de amistad, cariño, pertenencia a grupos, aceptación), de estima u
autoestima (relacionadas con las auto-percepciones de la propia persona, competencia) y de
autorrealización y satisfacción que hacer referencia al continuo deseo de llegar a ser todo
aquello de lo que el individuo es capaz de lograr, emplear en lo posible las habilidades propias,
tener una combinación rica de valores y propósitos, y ejercitar el talento hasta el máximo
(Newstrom, 2011; Peiró et al., 2007; Robbins et al., 2009).
De acuerdo a los postulados de Maslow, es preciso saber el nivel jerárquico en el que se encuentra un
individuo para así poder motivarla adecuadamente, y lograr asignar estímulos relacionados con dicho
nivel de la escala.
Esta teoría fue elaborada por el psicólogo Frederick Herzberg, y se considera una evolución de la
teoría de la pirámide de necesidades de Maslow. Basa sus postulados en la clasificación de las
necesidades básicas en un grupo al que denominó factores de mantenimiento, dicha categoría
abarca las necesidades básicas, de seguridad y sociales de la teoría de Maslow.
La otra categoría fue denominada factores de motivación, en la cual se incluyen las necesidades
de estima y de autorealización.
La teoría bifactorial sustenta que la motivación de un individuo deriva de factores de motivación
(intrínsecos), y no de mantenimiento (extrínsecos).
Herzberg citado por Batista, Gálvez e Hinojosa, (2010), indicaba que el trabajo es la
actividad más significativa que realiza un individuo y determina que “la satisfacción laboral y
la insatisfacción laboral son producto de dos tipos de experiencias distintas (modelo de dos
factores). Es decir, Herzberg estableció que los factores que generan insatisfacción en los
trabajadores son de naturaleza totalmente diferente a la de los factores que producen
satisfacción”.
Batista, A.; Gálvez, M. e Hinojosa, I. “Bosquejo histórico sobre las principales teorías de la motivación y su influencia en el proceso de
enseñanza-aprendizaje”. Revista Cubana de Medicina General Integral 26 (2). 2010: 376-386.
Los factores que suscitan satisfacción son conocidos como intrínsecos, motivadores o
satisfactores, y, los factores que provocan insatisfacción son considerados como extrínsecos,
de higiene, insatisfactores o de apoyo (Bonillo y Nieto, 2002). Los factores intrínsecos se
relacionan con el contenido del trabajo (el trabajo en sí mismo, la responsabilidad y el
reconocimiento,) y los factores extrínsecos tienen que ver con el contexto laboral (relaciones
con el supervisor, el salario y las relaciones con los compa- ñeros, entre otros).
Bonillo, D. y Nieto, F. “La satisfacción laboral como elemento motivador del empleado”. Trabajo 11. 2002: 189-200.