Emma F. Carballo Villalba | DG Historia del Arte y Ciencias y Lenguas de la
Antigüedad Kouros de Kleobis y Biton. Estos kouroi descubiertos en 1893 en las excavaciones arqueológicas al noreste del Tesoro de los atenienses. Ambas esculturas están realizadas en mármol tallado y datan del 580 a.C., perteneciendo por tanto al periodo Arcaico Inicial del arte griego, también conocido como periodo orientalizante. La función de los kuroi es la investigación sobre el cuerpo humano, en el momento en el que se llega a conocer en detalle el cuerpo, la forma del kouros desaparece ya que empezará a interesar más el movimiento. Suelen interpretarse también como una identificación con el dios apolo o con hombres fallecidos en un momento de plenitud, para mantener su permanencia. La autoría de estos dos Kuroi se atribuye al escultor Polimedes de Argos por una inscripción en ambas bases. Son esculturas figurativas, exentas, de dos jóvenes desnudos, en pie y con pelo trenzado sobre los hombros. Representan a los gemelos Kleobis y Biton hijos de Cípide, sacerdotisa de Hera. Son, como es característico de este periodo, de tamaño monumental (2.13m con plinto incluido). La escultura griega en el periodo arcaico inicial (s.VI) hereda algunos aspectos del arte egipcio como la concepción de la escultura bloque, que vemos en la forma cerrada que presentan, con los brazos pegados al cuerpo, y en la rigidez que domina las figuras. Aunque tengan una pierna adelantada con respecto a la posición del cuerpo no da ninguna sensación de movimiento. Observamos un predominio de la esquematización geométrica que queda patente en el ancho de los hombros, la cintura y en la cabeza, la cual es desproporcionada. Vemos también que los globos oculares sobresalen de los arcos supra ciliares. En la escultura de este periodo sigue muy presente la idea de diartrosis en las figuras ya que cada parte del cuerpo se concibe como una unidad que será ensamblada formando la figura final, por esto son muy desproporcionados. Además, ambas esculturas se elaboran de forma totalmente simétrica. Los pies son planos, y se asientan sólidamente sobre el pedestal a pesar de su actitud de marcha. Los volúmenes de la musculatura se van definiendo mediante incisiones. Ánfora del Dipylon. Es un ánfora de cerámica a torno, esta pasta hubo de ser prepara con un alto contenido en hierro debido a las dimensiones que tiene (1.55m). Fue hallada en el cementerio ático del que toma nombre, pertenece al periodo Geométrico Final de la cerámica griega (770-700 a.C.). Si queremos hablar de la autoría hay que aclarar que en estos periodos se habla de maestros, los cuales trabajan de una manera determinada. Ésta en concreto se atribuye al maestro del Dipylon. En éste periodo encontramos las realizaciones más espléndidas de la cerámica geométrica y se caracteriza por la insersion de figuras humanas en escenas de prothesis o? y con fondos geométricos. Se conocen las relaciones con el mundo oriental y se ve una expansión comercial de los griegos y el Ática que es el primero que sale de la crisis a la que estaban sometidos, cerámicas se expanden por el mediterráneo. Además, va a ser a mediados del siglo VIII cuando recupera la escritura. Debido a esto se notan inmediatamente muchas influencias del mundo oriental en la cerámica. Al adquirir la cerámica un mayor dominio de la técnica, las vasijas adoptan un gran tamaño sin perder la simetría y la proporcionalidad, y sirviendo incluso como elemento de monumentalización de las tumbas, a modo de estela. Aparece una escena figurada en la zona central en barniz negro, la cual está sometida a una gran abstracción geométrica. Vemos que el torso queda reducido a un triángulo y las piernas y la cabeza son representadas de perfil. La escena corresponde a la prótesis (exposición del cadáver); en ella aparece el fallecido sobre el lecho fúnebre flanqueado por hileras de plañideras que alzan los brazos en la actitud doliente de mesarse los cabellos. Éstas escenas son genéricas ya que no tienen situación en el tiempo ni en el espacio, aún se encuentran alejadas del afán narrativo que se tendrá después, pero es un comienzo. Vemos que la decoración del vaso cubre absolutamente toda la superficie de éste mediante múltiples bandas de motivos repetidos (meandros, rombos, puntos, etc.) además vemos en el cuello del ánfora una banda decorativa figurada que corresponde a un zoomorfo, también esquematizado. Palacio de Knossos. La imagen corresponde a la fase de Segundos Palacios. Fue descubierto por Sir Arthur Evans y asociado por él mismo al rey Minos, acuñando así el nombre de civilización minoica. A finales del Minoico Medio (1700 a.C.) los edificios palaciales sufrieron un colapso generalizado. Sobre las causas de éste hay diversas teorías, entre las cuales sobresale la defiende que esta destrucción pudo ser un fenómeno sísmico lo cual explica mejor la simultaneidad del colapso y el hecho de que no haya cambios en la sociedad posterior. Los segundos palacios presentan unas dimensiones mayores que los anteriores, siendo Knossos el más significante (13.000 m²), ésta construcción se cimentó sobre la anterior y es el periodo del que más datos se tienen. El palacio consta de diferentes partes que se repiten en los demás (patio central, patio occidental, conjuntos residenciales, sala de banquetes, zona de recepción y estancias culturales en uno de los lados del patio central). Desde un punto de vista estructural, es una arquitectura basada en un sistema de arquitrabado. Uno de los rasgos característicos de ésta es su ordenación a base de una serie de masas rectangulares escalonadas de diferentes tamaños. Éste contorno irregular del exterior del palacio se aprecia tanto en planta como en altura, ya que el alzado del edificio presenta diversos niveles interrumpidos de modo irregular por espacios descubiertos sobre patios y pozos de luz, como el que vemos en la imagen. Los palacios tenían muchas entradas, varias de las cuales conducían al patio central mediante una serie de corredores. En cuanto al empleo de soportes se utilizan las columnas y los pilares de una manera particular. El fuste de los soportes presenta un engrosamiento en su zona superior, a medida que se aproxima al capitel. Se realizarían mediante piedras de diferentes colores o bien eran pintados sobre una capa de enlucido. Respecto a la decoración, por esclarecedora que pueda parecer, en su gran mayoría es un añadido histórico perteneciente a la restauración llevada a cabo por Sir Arthur Evans. Puerta de los leones. La imagen objeto de este comentario es la puerta más monumental de la ciudad de Micenas (s.XII a.C), excavada en un primer momento por Heinrich Schliemann. Esta puerta recibe el nombre de ‘Puerta de los leones’ debido a su decoración, es un unicum en la Historia. Es una construcción arquitrabada de piedra. Las piedras que la conforman están escuadradas para que encajen perfectamente, cogidas a hueso. Se hace un arco por aproximación de hiladas. En la parte superior se representa una columna con dos leones a los que le falta la cabeza. El hecho de que la columna esté flanqueada por ellos indica que existe un contenido religioso en la escena. Se ha interpretado como símbolo de la ciudad o también siendo la columna una representación del principio de la Diosa Madre. Vaso François (museo de Florencia). La autoría de este vaso se le otorga al pintor Clitias (570 a.C) y a Ergotimos el alfarero. Es una crátera con asas en forma de voluta (copia modelos de bronce, porque los cambios de los perfiles son bruscos, lo cual no es habitual en cerámica). Tiene varias escenas figuradas y bastante complejas. La cratera fue dibujada por un dibujante, esto fue clave para poder reconstruirla debido a que a los pocos años se rompió el vaso. La primera reconstrucción siguió las pautas del momento, se intentaba disimular los fragmentos que faltaban, pero más recientemente se ha hecho una nueva restauración que ha dejado patente la parte de la cerámica que no existe. En cuanto a la decoración se aprecia la técnica de incisión y policromía. Las figuras están hechas en pequeño tamaño, y en cada una hay mucho detalle. Hay una escena principal que recorre el contorno del vaso por completo y representa las bodas de Tetis con diferentes dioses, una serie de carros, etc. En la cara posterior continúa el cortejo de los dioses. Las tres bandas inferiores tienen una escena por cada cara. También hay filas de esfinges enfrentadas; representación de la lucha de los pigmeos contra las grullas, etc. En las asas se representa El momento en el que llevan el cuerpo de Aquiles junto a la diosa. El grado de miniaturismo, a base de incisión, es muy alto al igual que las escenas representados que además de las ya descritas encontramos los funerales de Patroclo, el desembarco de los jóvenes atenienses, la lucha de lapitas y centauros, entre otras. Se ha tratado de saber qué se quería representar con este vaso. Se ha interpretado como que representa el pensamiento griego, la idea de que el hombre griego está sometido al designo de los dioses: es una representación cíclica donde unos acontecimientos llevan a otros sin que ellos puedan hacer nada por remediarlo. Esta idea de impotencia es típica del pensamiento arcaico; pero tras la victoria sobre los persas tiene un sentimiento de ser capaces de crear su propio destino. Cerámica protogeométrica. La cerámica del protogeométrico (s.X a.C.) está más relacionada con los estilos que le siguen, vemos características que se verán en el geométrico y surgen elementos propios de la estética griega que pervivirán por lo menos en la época arcaica. Los griegos se sienten inmersos en un mundo gobernado por los dioses, por esto intentan a través de la decoración en la cerámica buscar ese orden frente al caos. Esto hace que hagan cerámicas con unos determinados criterios y siempre busquen la perfección. Toda la cerámica está inmersa en la perfección, se ve una antropomorfización, se empieza a entender la cerámica como si fuese una figura humana. Intentan analizar cada parte por separado por lo que no lo conciben como un todo (la diartrosis). La vinculación entre los periodos anteriores y el periodo protogeométrico se ha considerado que se puede enlazar con las imágenes de pulpos de periodo minoico que se van haciendo más geométricos y abstractos en un periodo micénico hasta dar los círculos concéntricos en el periodo protogeometrico, como vemos en la imagen. Hay características técnicas que son una innovación: la arcilla procede del ática donde hay arcillas puras. Además, conocen el torno rápido y consiguen un mejor barniz. Están cocidas en hornos a temperaturas altas. Además, existe ya el pincel múltiple y el compás por lo que técnicamente es una cerámica de buena calidad. La cerámica se somete a un eje vertical (simetría bilateral) y otro horizontal que es el que dispone los motivos decorativos de manera horizontal. Los motivos curvos estarán establecidos en los hombros de la cerámica. Las vasijas están hechas en color de arcilla sobre el que se dibujan los motivos en color negro.