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ANTISEROTONÍNICOS
La histamina y la serotonina o 5-hidroxitriptamina, son aminas biológiamente activas que se
liberan casi siempre juntas, y que tienen efectos tisulares, patológicos o no, complejos,
aunque haya varios tipos de receptores. Junto con las prostaglandinas, leucotrienos y
citocinas, en ocasiones se les llama autacoides u hormonas locales, debido a que se les
reconoce su liberación local.
Por sus amplios efectos indeseables, ni la histamina ni la serotonina tienen plicación clínica
en el tratamiento de las enfermedades. Sin embargo, algunos compuestos que antagonizan
selectivamente a algunos de sus receptores son de utilidad clínica considerable.
HISTAMINA
La histamina se sintetizó en 1907, y después se aisló de los tejidos animales. Sus acciones se
fueron deduciendo ya que se presentaban conexiones con sus efectos y con las
características del shock anafiláctico y la lesión tisular. En los humanos es un importante
mediador en las respuestas alérgicas inmediatas y de lesión, además de ser importante
mediador para la secreción gástrica, neurotransmisor y neuromodulador. También actúa
como factor quimiotáctico para los leucocitos.
QUÍMICA Y FARMACOCINÉTICA
Los depósitos de histamina en los gránulos de las células cebadas pueden liberarse a través
de estos mecanismos:
FARMACODINAMIA
1. Mecanismo de acción. La histamina ejerce sus efectos al unirse a los receptores que
tienen las células para ella, los H1, 2, 3 y 4. Todos ellos tienen expansiones intracelulares
que comunican con las proteínas G intracitoplasmáticas. En el cerebro, los receptores
H1 y H2 están en las membranas posinápticas, en tanto que los H3 son
predominantemente presinápticos. La activación de los receptores H1 en células
endoteliales suele aumentar las concentraciones de fosfoinositol y con ello la
concentración intracelular del calcio. De modo parecido, cuando se estimulan a los
H2, se estimula la producción de AMPc.
2. Efectos sistémicos y tisulares de la histamina. La histamina produce efectos potentes
en células endoteliales, nerviosas y secretoras del estómago.
a. Sistema nervioso. La histamina es un mediador potente en las terminaciones
nerviosas que median la sensibilidad al dolor y el prurito. Este efecto, mediado
por receptores H1 tiene importante efecto en el escozor que se presenta en los
pinchazos irritantes.
b. Sistema cardiovascular: La infusión de histamina en humanos aumenta la
frecuencia cardiaca y disminuye la presión arterial. Estos efectos hipotensores
y taquiárdicos se deben a la vasodilatación que ocasiona la histamina, además
de quela taquicardia es refleja. Además, se puede presentar rubor o cefalea
pulsátil que es consistente con la vasodiltación (similar a la que causan los
nitratos y nitritos, y el verapamil). Al igual que ellos, la vasodilatación esta
mediada por el aumento intracelular del AMPc por medio del óxido nítrico. El
edema que resulta de la acción de la histamina se debe a la acción que ella
ejerce en os capilares de la microcirculación, sobre todo en los poscapilares,
donde activa a los receptores H1 y con ello se permite la separación de las
células endoteliales, con la consecuente trasudación de plasma al espacio
intersticial. Estos efectos se deben casi seguramente a la contracción de la
actina y miosina presentes en esas células: a nivel cardiaco, la histamina
también umenta la contractilidad.
c. Músculo liso bronquial: En los humanos y en los cobayos, los receptores H1
median la broncoconstricción que es peligrosa en los pacientes asmáticos. La
histamina inhalada es de utilidad diagnóstica para la hiperreactividad
bronquial en pacientes con probable asma o fibrosis quística.
d. Músculo liso digestivo: insignificantes efectos. Sin embargo, las muejres
embarazadas pueden abortar como respuesta a las contracciones inducidas
por la histamina.
e. Tejidos secretores. Siempre se ha reconocido que la histamina es un potente
agonista de la secreción de ácido clorhídrico gástrico, producción mediada por
H2.
f. Triple respuesta de Lewis. La clásica prueba de inyección intradérmica de
histamina produce enrojecimiento, prurito y edema. Si se toma en cuanta las
células que participan, son tres: las endoteliales, las neuronas y las del
músculo liso microvascular. Al momento en que se extravasa el plasma, se
produce una estasis de líquido, lo que ocasiona el edema, además de la
mancha roja. El prurito es un reflejo axónico (la histamina media en las
terminaciones donde se produce prurito).
USOS CLÍNICOS
Los únicos usos que se hacen en laboratorio con la histamina son los relacionados con la
determinación de la hiperreactividad bronquial, y ya. Se usa histamina en aerosol, además
de otros agentes.
TOXICIDAD Y CONTRAINDICACIONES
Son relacionados con la dosis y/o con la cantidad liberada de los mastocitos. Se observa
rubor, hipotensión (vasodilatación), taquicardia refleja, dolor de cabeza, ronchas,
bronoconstricción y malestar gastrointestinal. Estos mismos efectos se observan después de
la intoxicación con pescado descompuesto. Se sabe que las bacterias presentes en el pesacod
descompuesto producen histamina. La histamina no debe de administrarse a pacientes
asmáticos, con enfermedad ulcerosa activa o hemorragia GI.
ANTAGONISTAS DE LA HISTAMINA
Los antagonistas de los receptores de histamina constituyen otro método para minimizar las
acciones histamínicas. Recientemente se han desarrollado antagonistas H2, para la úlcera
péptica.
SEROTONINA Ó 5-HIDROXITRIPTAMINA
Antes del descubrimiento de la serotonina, se sabía que cuando la sangre se dja coagular, se
libera una sustancia vasoconstrictora o tónica en el suero, a la que se le llamó serotonina. Se
cree que la serotonina tiene un papel importante en la cefalea migrañosa.
EICOSANOIDES
Los eicosaniodes son productos de la degradación de los ácidos grasos poliinsaturados de
cadena larga. Son ubicuos en el reino animal, además de ser moléculas muy potentes y con
un amplio espectro de actividad biológica. Tienen vidas medias cortas, de segundos a
minutos, y son de producción obligada en la clínica.
Para que la síntesis del eicosanoide tenga lugar, el ácido araquidónico debe de ser primero
liberado de la doble membrana de fosfolípidos, acción que está mediada por diversas
fosfolipasas del tipo de la PLA2 (phospholipase A). Al menos tres fosfolipasas actúan en la
liberación del ácido araquidónico: en el músculo cardíaco, la cPLA 2, la del citosol y la de las
células secretoras.
Después de que fue movilizado, el ácido araquidónico (C20:4-6) debe de ser oxigenado por
cuatro vías separadas: la ciclooxigenasa (COX), la lipooxigenasa, epooxigenasa P450 y la vía
del isoprostano. Los factores que determinarán el tipo de eiosaniode que se formará son
diversos:
1. Las especies
2. El tipo de célula
3. El fenotipo particular de la célula
4. La manera en que la célula es estimulada
5. La naturaleza del ácido graso poliinsaturado en los fosfolípidos de las membranas
específicas.
SÍNTESIS DE EICOSANIODES
ANTIINFLAMATORIOS NO ESTEROIDEOS
Los salicilatos y otros compuestos utilizados para las enfermedades reumáticas tienen en
común que disminuyen los signos y síntomas de la inflamación, además de ejercer un efecto
analgésico y antipirético. No todos los AINE tienen autorización de la FDA, pero la gran
mayoría se han desarrollado como una alternativa al ácido acetilsalicílico –el AINE original-
, puesto que éste tiene una gran variedad de efectos adversos.
QUÍMICA Y FARMACOCINÉTICA
Los AINe se agrupan en diversas familias químicas, lo cual les provee de diversos efectos
farmacocinéticos y farmacodinámicos. Esta variedad de efectos siempre tienen cosas en
común, las cuales se enlistan a continuación.
Todos los AINE son ácidos débiles orgánicos al momento de su administración, excepto la
namubeton, la cual es una prodroga de tipo acetona, que al metabolizarse producirá el
medicamento ácido activo. Todos los AINE se absorben bien en el tracto GI, y los alimentos
no alteran su biodisponibilidad de manera significativa. Casi todos los AINE se metabolizan
altamente, algunos por reacciones de fase I seguidos por reacciones de fase II, y otros sólo
por añadidura de ácido glucurónico directamente, lo cual es una reacción de fase II. El
metabolismo de los AINE es en gran medida de los citocromos P450, en específico CYP3A, o
bien el CYP2C. Aunque la vía renal es la principal vía de excreción de los AINE, casi todos
sufren cierto grado de eliminación biliar y por tanto de reabsorción por medio del circuito
enterohepático. La gran mayoría de ellos se unen fuertemente a las proteínas plasmáticas,
en más del 98%, y es en su mayoría albúmina.
Todos los AINE se pueden encontrar en el líquido sinovial después de dosis repetidas.
FARMACODINAMIA
La selectividad de la COX-1 en contra de la COX-2 es poca sobre los miembros más antiguos
de la familia. Sin embargo, en la actualidad se cuenta con inhibidores selectivos de la COX-
2, como el celecoxib, rofecoxib y valdecoxib (coxibs). Estos coxibs inhibidores de la COX-2
selectivos, no afectan a la agregación plaquetaria.
Los AINE afectan la sensibilidad vascular a la bradicinina e histamina, al mismo tiempo que
afectan la producción de linfocina en los LT y revierten la vasodilatación.
1. SALICILATOS.
a. ÁCIDO ACETILSALICÍLICO. El uso prolongado del AAS disminuye todo el
glamour que tiene a su alrededor. Actualmente ya se usa poco como
antiinflamatorio, dejando su tarea más a la analgesia: ha sido reemplazado por
el ibuprofeno y naproxeno, los cuales tienen excelentes perfiles de seguridad.
iv. Dosis:
v. Efectos adversos:
i. Diclofenaco
ii. Aceclofenaco
iii. Fentiazaco
i. Ketorolaco
ii. Sulindac
iii. Tolmetina
6. OXICAMS
a. Piroxicam
7. DERIVADOS DEL ÁCIDO ANTRANÍLICO
a. Ácido mefanámicos
b. Ácido fluefánico
8. INHIBIDORES DE LA COX-2
a. Celecoxib (“Celebrex”)
b. Rofecoxib
c. Parecoxib
d. Valdecoxib
9. DERIVADOS DEL ÁCIDO NICOTÍNICO
a. Clonixinato de lisina
b. Ácido niflúmico
c. Isonixina
d. Morniflunato
10. OTROS AAINEs
a. Nimesulida
b. Nabumetona
COLCHICINA
Efectos adversos: La colchicina a menudo causa diarrea y a veces náuseas, vómito y dolor
abdominal. Además se ha reportado pérdida del cabello y supresión de la médula ósea. En
dosis no terapéuticas, el cuadro consiste en diarrea sanguinolienta, pirosis, choque,
hematuria, oliguria y depresión ascendente del sistema nervioso central; el tratamiento es
de apoyo.
Dosis: La dosis profiláctica es de 0.3 mg 3 veces al día. Para acabar con un ataque se puede
empezar con 0.6-1.2 mg seguido de 0.6 mg cada 2 horas hasta que ceda el cuadro o aparezca
vómito y/o diarrea. Debe recordarse que dosis tan pequeñas como 8 mg al día pueden ser
mortales.
Además de inhibir la síntesis de prostaglandinas, los AAINEs también parecen reducir las
concentraciones de ácido úrico. La indometacina (derivado del ácido indolacético) parece
ser una buena opción, ya que inhibe la fagocitosis de los cristales de urato, y se usa una dosis
inicial de 50 mg cada 6 h; si hay buena respuesta se utilizan 25 mg 3 ó 4 veces al día por
cerca de 5 días. Recuérdese que la indometacina es la más potente inhibidora de la COX-2.
MEDICAMENTOS URICOSÚRICOS
Los medicamentos uricosúricos se utilizan con pacientes que sufren de gota tufosa y en los
que se desea reducir los depósitos corporales de uratos. Estos medicamentos son el
probenecid y la sulfinpirazona. En pacientes que excretan grandes cantidades de ácido úrico
se deben evitar los uricosúricos, ya que pueden precipitar las formaciones de cálculos de
ácido úrico.
Química: Los uricosúricos son ácidos orgánicos, por lo tanto actúan en los sitios de
transporte aniónico de los túbulos renales. La sulfinpirazona es un metabolito análogo de la
fenilbutazona.
Dosis:
ALOPURINOL
Indicaciones: El tratamiento de la gota con alopurinol, al igual que sucede con los
uricosúricos (probenecid y sulfinpirazona) se debe de tener en cuenta de que va a ser de por
vida. Sus indicaciones más racionales son: Gota crónica tofosa, en la cual la reabsorción de
los uricosúricos es más rápida que los tofos. Pacientes cuya excreción de ácido úrico con
dieta libre de purinas sea de 600 a 700 mg. Cuando no se puedan administrar probenecid o
sulfinpirazona por sus efectos adversos. Cálculos renales recurrentes. Insuficiencia renal.
Cuando las concentraciones séricas de urato se hallen muy elevadas. Además, el alopurinol
puede llegarse a usar como antiprotozoario, y además puede proporcionar apoyo en el
tratamiento de las discrasias sanguíneas, que de otra forma podrían inducir la formación de
cálculos.
Efectos adversos: Los ataques agudos de gota se suelen presentar al inicio de la terapia con
alopurinol, por la remoción de los cristales de urato de las articulaciones, y los niveles
séricos de urato son inferiores. Para prevenir los ataques se debe de administrar
indometacina (derivada del ácido indolacético), a menos que se esté administrando junto
con el alopurinol probenecid o sulfinpirazona (uricosúricos que actúan en los sitios de
transporte activo del ácido úrico para que no se vuelva a reabsorber).
Puede haber intolerancia GI, como vómitos, náuseas, diarrea, neuritis periférica, vasculitis
necrosante y depresión de los componentes de la médula ósea.
Dosis: La dosis inicial es de 100 mg/día. Se puede ajustar a 300 mg/día dependiendo de la
respuesta al ácido úrico. Se debe de administrar algún AAINE o colchicina para evitar los
ataques agudos de gota.
FARMACOLOGÍA BÁSICA
DIGITÁLICOS
Las fuentes principales de estos fármacos son la digital blanca y la púrpura (Digitales lanata
y Digitales purpurea), además de otras muchas plantas de zonas templadas y tropicales. Es
de notarse que algunos sapos poseen glándulas que son capaces de fabricar bufadienólidos,
los cuales difieren muy ligeramente de los digitálicos, con la digoxina como prototipo.
Farmacocinética:
1. Efectos cardiacos
a. Efectos mecánicos: Los glucósidos cardiacos, con la digoxina como prototipo,
aumentan la interacción contráctil entre las moléculas de actina y miosina del
sarcómero cardiaco. Esta interacción y contractibilidad aumentada (efecto
terapéutico neto) es el resultado de dos procesos: un aumento relativo en la
concentración de Na intracelular, por la inhibición de la Na-K ATPasa, la
encargada de sacar el calcio del miocardiocito. Además de este proceso, se
produce una liberación reducida de Ca, el cual está originalmente mediado por
el intercambiador de sodio-calcio. De esto resulta que la célula cardiaca no se
hiperpolarice tanto, manteniendo su potencial de membrana en reposo cerca
del umbral para que ocurra la contracción, como consecuencia directa de la
despolarización que ha sido facilitada por la alta concentración de sodio
intracelular. El sodio, en su papel de catión, mantiene cargas positivas dentro
de la célula normalmente negativa, y así el potencial de membrana en reposo
se eleva a valores más fácilmente despolarizables. De esto resulta que cuando
se produce el estímulo, la despolarización –y por tanto la contracción- resultan
más fáciles de llevar a cabo. Los resultados de las concentraciones terapéuticas
de digitálicos es el aumento de la contractilidad cardiaca, aunque en
preparados aislados de miocardio se observó que se despolariza más
fácilmente, pero no tienen ninguna influencia en la fuerza máxima de
contracción.
b. Efectos eléctricos: Los efectos eléctricos de los digitálicos son una mezcla de
acciones directas y autónomas sobre las membranas de los miocardiocitos. Las
acciones directas resultan en un período inicial breve de alargamiento del
potencial de acción, seguido de un acortamiento significativo de éste, período
largo que se caracteriza por la reducción específica de la fase de meseta. Esta
reducción de la meseta, que a su vez provocará una menor duración del
potencial de acción, sea resultado del aumento de la conducción del potasio,
ocasionada por la alta concentración de calcio intracelular. El acortamiento del
potencial de acción también contribuye a que se reduzcan los tiempos de
períodos refractarios auriculares y ventriculares; todos estos efectos se pueden
observar en dosis terapéuticas sin toxicidad evidente. En concentraciones más
altas, el potencial de reposo se hace más positivo por la concentración alta de
sodio intracelular, lo cual a su vez es provocado por la inhibición de la Na-K
ATPasa. Conforme se aumenta la toxicidad, aparecen pospotenciales
oscilatorios de despolarización después de los potenciales normales evocados
(los cuales ya están muy disminuidos). Los pospotenciales, también conocidos
como podespolarizaciones demoradas o tardías, se relacionan con
desequilibrio en los balances de las cantidades de calcio intracelulares. Cuando
están por debajo del umbral, estos valores anormalmente altos de calcio
pueden interferir con la conducción porque reducen adicionalmente el
potencial de reposo. A medida de que se va aumentando la toxicidad, un
pospotencial puede alcanzar el umbral, lo que originará a su vez lo que se
llama como despolarización temprana o latido ectópico. Si se mantienen estos
latidos ectópicos en el sistema de Purkinje, se registrará bigeminismo en el
EKG; con la intoxicación adicional, cada latido ectópico originará un nuevo
potencial por encima del umbral, lo cual hará otro latido más. Esto nos lleva a
que ya haya tres contracciones: la normal, el latido ectópico y el latido ectópico
que éste provoca. Si se mantienen estas condiciones, se presenta una
taquicardia autosostenida. Si continúa, se podría tornar en fibrilación
ventricular, lo cual podría ser mortal a menos que sea corregida. Los efectos
autonómicos, en el intervalo más bajo de dosificación, son en su mayoría
parasimpaticomiméticos, y estos –bloqueables con atropina- son responsables
de los efectos eléctricos iniciales de los digitálicos. Ello implica una
sensibilización de los barorreceptores, estimulación vagal central y facilitación
de la transmisión muscarínica en las células cardiacas. Como la inervación
colinérgica es más rica en las aurículas, se afecta más la actividad nodal
auricular que incluso la ventricular y del sistema de Purkinje.
2. Efectos en otros órganos: Los glucósidos afectan a prácticamente todos los tejidos
excitables, pero en especial al GI y al del SNC. A nivel del tracto GI, se incluyen
efectos como anorexia, náusea, vómito y diarrea, probablemente por la inhibición de
la Na-K ATPasa, pero además por la acción del SNC, que incluye la estimulación en la
zona de activación de los quimiorreceptores. Los efectos en el SNC incluyen
estimulación vagal central y de las zonas quimiorreceptores. Además, pueden
presentarse desorientación, alucinaciones (especialmente en ancianos) y trastornos
visuales, incluyendo defectos en la visión de los colores.
Desde hace mucho tiempo, se han utilizado medicamentos que inhiben a la fosfodiesterasa,
la enzima que desactivan al AMPc y al GMPc. Si se toma en cuenta de que si se desactivan
mantendrán el tono en los vasos, y causarán vasoconstricción, la inhibición de su
desactivación causará vasodilatación. Se han estado estudiando nuevos fármacos, pero las
bipiridinas, tales como la inamrinona y la milrinona han sido exitosas en este aspecto,
aunque su utilidad es limitada.
BIPIRIDINAS
AGONISTAS ADRENÉRGICOS
Los fármacos más usados en la insuficiencia cardiaca crónica son los diuréticos, inhibidores
de la ECA, antagonistas del receptor de angiotensina y bloqueadores beta. En la
insuficiencia aguda, los diuréticos y los vasodilatadores tienen una función trascendental.
DIURÉTICOS
Los bloqueadores del receptor de angiotensina AT1, como el losartán, parecen tener efectos
similares, aunque más limitados.
VASODILATADORES
Los vasodilatadores son útiles en la insuficiencia cardiaca puesto que reducen la precarga
(por venodilatación) y/o la poscarga, por dilatación arteriolar. El uso de hidralacina y de
dinitrato de isosorbide pueden evitar la remodelación dañina del corazón.
ANTAGONISTAS ADRENÉRGICOS.
Los efectos benéficos del bloqueo de los receptores beta sugieren ser la reducción de los
niveles de catecolaminas, regulación a la alta de receptores beta, disminución de la
frecuencia cardiaca y menor remodelación a través de la inhibición de la capacidad
mitógena de las catecolaminas. Los antagonistas beta que más se han utilizado en las
insuficiencias cardiacas han sido el metoprolol, carvedilol y bisoprolol.
FARMACOLOGÍA CLÍNICA
Anteriormente, para el manejo de la insuficiencia cardiaca crónica se elegía a un diurético
como la espironolactona y un digitálico, como la digoxina o la ouabaína, como
medicamentos o medidas terapéuticas “de cajón”. Sin embargo, actualmente se toma en
cuenta antes a los inhibidores de la ECA como el captopril, unto con los bloqueadores beta
adrenérgicos como el metoprolol, además de un diurético. Los digitálicos se reservan a
aquellos pacientes que no responden bien a estos medicamentos.
REMOCIÓN DE SODIO
VASODILATADORES
De esta forma, los pacientes que cursan con disnea a causa de una presión de llenado
ventricular alta, son mejores receptores de vasodilatadores venosos como los nitratos; ellos
ayudarán a reducir la presión venosa central y la congestión pulmonar.
Los pacientes que cursen con fatiga como principal síntoma, a causa de un flujo de
expulsión ventricular bajo, puede ser de utilidad un vasodilatador arterial como la
hidralazina para aumentar el flujo sanguíneo anterógrado.
Para pacientes que cursan con una presión alta de llenado y un flujo bajo de expulsión
ventricular, que suelen ser las causas de la IC severa, se deben de reducir la presión de
llenado ventricular y aumentar el flujo de expulsión ventricular. En estos pacientes, se
requiere de dilatación de venas y arterias. En estudios, la hidralazina (vasodilatador arterial)
combinada con el dinitrato de isosorbide (vasodilatador venoso) aumentó más la
supervivencia de los pacientes que el placebo en pacientes que ya eran tratados previamente
con digitálicos o diuréticos.
Los bloqueadores de los canales de calcio parecen no tener ninguna actividad sobre los
pacientes que tienen ICC. Sus efectos depresores del músculo cardiaco pueden empeorar el
cuadro clínico.
DIGITÁLICOS.
Los digitálicos están indicados en pacientes que tienen fibrilación auricular, IC, corazón
dilatado y presencia del tercer ruido cardíaco a la auscultación (por flujo retrógrado de la
arteria pulmonar). Habitualmente, se prescriben después de iniciar un tratamiento con un
inhibidor de la ECA como captopril, lisinopril y enalapril. Cuando se toma la decisión de
tartar al paciente con un glucósido cardiaco, la digoxina es el fármaco de elección, y es el
único disponible en preparaciones farmacéuticas. Se debe de empezar el tratamiento por
medio de la impregnación lenta o digitalización, el cual es más seguro y tan eficaz como el
tratamiento de inicio rápido.
Los pacientes con infarto agudo al miocardio se suelen tratar con revascularización
coronaria o con tratamiento trombolítico, aunque a pesar de estas medidas terapéuticas se
puede desarrollar insuficiencia cardiaca aguda. Muchos de los síntomas de insuficiencia
cardiaca aguda y crónica son idénticos, pero su tratamiento difiere en la necesidad de
respuestas rápidas, además de una mayor gravedad en la congestión pulmonar del cuadro
agudo.
Las determinaciones de presión arterial, gasto cardiaco, volumen sistólico y presión capilar
en cuña pulmonar son útiles en pacientes con insuficiencia cardiaca aguda. Estos pacientes
deben de caracterizarse sobre las tres bases de la hemodinamia: presión arterial, presión de
llenado del ventrículo izquierdo, e índice cardíaco.
ANTIARRÍTMICOS
MECANISMOS DE LAS ARRITMIAS
Muchos factores son los que pueden precipitar o exacerbar arritmias, entre los que se
encuentran la hipoxia, la isquemia, alcalosis o acidosis, anormalidades electrolíticas,
exposición excesiva a catecolaminas, toxicidad de fármacos (p. ej. Digitálicos),
sobreestiramiento de la fibra muscular cardiaca y presencia de tejido cicatrizal o afectado de
algún otro modo. Sin embargo, todas las arritmias resultan de tres mecanismos básicos:
transtornos en la formación de impulsos, transtornos en su conducción, o ambos.
La conducción gravemente deprimida puede dar como resultado un bloqueo simple por
ejemplo, del nodo auriculoventricular, o de la rama del haz. Debido a que el control
parasimpático en la conducción es importante, el bloqueo simple se puede solucionar con
atropina.
En otros casos, como la fibrilación auricular o ventricular, los impulsos pueden seguir
caminos circulares al azar, dependiendo de las propiedades del músculo. Dependiendo de
cuántos viajes circulares haga el impulso en su trayectoria antes de extinguirse, la arritmia
puede manifestarse como una o varias pulsaciones extras o como una taquicardia
autosostenida.
Los antiarrítmicos reducen el automatismo de los marcapasos ectópicos más que el del nodo
SA. También reducen la conducción y excitabilidad, aumentan el periodo refractario en
mayor grado en el tejido despolarizado que en el no despolarizado. Esto se logra mediante el
bloqueo selectivo de los canales de calcio y de sodio en las células despolarizadas.
Muchos de los fármacos selectivos para los canales tienen afinidad por ellos cuando se
encuentran activados (en fase 0) o desactivados (en fase 2), pero nunca en los que están en
reposo. Por lo tanto, estos fármacos bloquean la actividad eléctrica cuando existe
taquicardia intensa, que consiste en mkuchas activaciones y desactivaciones por unidad de
tiempo, o cuando existe una pérdida significativa del potencial de reposo, durante la cual se
desactivan muchos canales en el reposo. La acción de esots medicamentos se describe a
menudo como dependiente del uso o dependiente del estado. Esto nos dice que los canales
que son más susceptibles de bloquearse son aquellos que más se emplean, o los que más se
hallan en estado de activación o desactivación.
Los canales en células normales que se unen al fármaco durante los ciclos de activación-
desactivación, perderán rápidamente al fármaco durante la fase de reposo. Por otra parte,
los canales de las células del miocardio crónicamente despolarizado (que tiene un potencial
de reposo más positivo que -75 mV) se recuperarán más tardíamente del bloqueo, si es que
lo hacen.
En las células con automatismo anormal, estos fármacos reducen la pendiente de la fase 4,
lo cual terminará por reducir la relación de la entrada de sodio-calcio/potasio. Esto tenderá
a llevar a la célula a un punto más próximo al del equilibrio con el potasio; a su vez, esto
conlleva el efecto de una menor excitabilidad y abole el efecto cronotrópico positivo de la
adrenalina.
Por medio de estos mecanismos, los antiarrítmicos pueden suprimir el automatismo de los
marcapasos ectópicos y la conducción anormal que se presenta en células despolarizadas
(haciéndolas eléctricamente silenciosas), en tanto que afectan mínimamente los estados
automáticos normales del corazón.
Sin embargo, en tanto aumenta la dosis, los fármacos también afectan a los tejidos
automáticos normales, lo que con el tiempo da como resultado las conocidas arritmias
inducidas por fármacos. Incluso, una concentración que es terapéutica, al inicio del
tratamiento puede llegar a ser arritmogénica durante las frecuencias cardiacas rápidas, por
mayor desarrollo del bloqueo, en la acidosis, por la recuperación más lenta del bloqueo en el
caso de la mayor parte de los fármacos, en la hiperopitasemia y en la isquemia.
ANTIARRÍTMICOS ESPECÍFICOS
El esquema más utilizado para la clasificación de los antiarrítmicos es el siguiente:
A. Clase 1: su acción consiste en el bloqueo del canal de sodio. Sus efectos se verán
reflejados en la duración el potencial de acción y la cinética del bloqueo del canal de
sodio.
a. Clase 1A: los antiarrítmicos del grupo 1A prolongan la duración del potencial
de acción (DPA) y se disocian con una cinética intermedia.
b. Clase 1B: los medicamentos del grupo 1B no tienen un efecto significativo en la
DPA y se disocian rápidamente.
c. Clase 1C: los medicamentos de la clase 1C tienen efectos mínimos sobre la
duración del potencial de acción (DPA) y se disocian lentamente del canal.
B. Clase 2: La acción es simpaticolítica. Ellos reducen la actividad beta adrenérgica en el
corazón.
C. Clase 3: su acción se manifiesta por una prolongación de la DPA. La mayor parte de
estos medicamentos bloquean al compoinente rápido de la corriente rectificadora de
potasio, una proteína transmembrana que se llama IKr.
D. Clase 4: su acción impide la entrada de las corrientes de calcio. Su acción es evidente
en lugares que dependen de la entrada de calcio para despolarizarse, como los nodos
SA y AV.
Uso terapéutico: La quinidina, bloqueadora de los canales de sodio que pertenece a la clase 1
de los antiarrítmicos, se utiliza principalmente para mantener la frecuencia cardíaca normal
en pacientes con fibrilación o flúter auricular (aleteo auricular). Esta frecuencia cardíaca se
logra por la regularización del ritmo sinusal. Recordar que el nodo SA y AV se despolarizan
dependiendo de las concentraciones del sodio. Sus efectos colaterales cardiacos y
extracardiacos han reducido mucho su utilización, hasta que ahora se utiliza sólo con
pacientes con corazones normales pero sin arritmia. Estudios amplios han demostrado que
la quinidina puede incrementar la mortalidad de dos a tres veces.
Toxicidad cardiaca: Sus efectos cardiotóxicos son similres a los de la quinidina, y pueden ser
debidos a la acción antimuscarínica que posee. Además, puede desencadenar nuevas
arritmias.
Efectos cardiacos: son muy similares a los de la quinidina, pero sus efectos antimuscarínicos
son aún más notables que los de la procainamida. Por lo tanto, para el tratamiento de la
fibrilación o el aleteo auricular, debe de utilizarse un fármaco que retarde la conducción
auriculoventricular.
Uso terapéutico: la disopiramida (un bloqueador de los canales de sodio del grupo 1, como la
quinidina y la procainamida) ha demostrado ser eficaz para el tratamiento de las arritmias
supraventriculares, aunque en EEUU sólo se aprueba para las arritmias ventriculares.
La lidocaína tiene una baja incidencia de toxicidad y una elevada tasa de efectividad en
arritmias relacionadas con el infarto agudo al miocardio; se usa sólo por vía intravenosa.
Efectos cardiacos: La lidocaína bloquea los canales de sodio activados e inactivados con una
cinética rápida, y este bloqueo del estado inactivado asegura grandes efectos en células con
potenciales de acción grandes, como las de Purkinje y las células ventriculares, en
comparación con las auriculares. La cinética rápida del potencial de acción asegura una
rápida reversión o desbloqueo por parte de la lidocaína, ocasiona una superación del
bloqueo entre los potenciales de acción y no produce ningún efecto sobre la conducción.
Toxicidad cardiaca: La lidocaína carece casi por completo de efectos adversos en dosis
terapéuticas, como los son la aparición de paro del nodo SA, agravamiento de la conducción
alterada y aparició0n de arritmias ventriculares. En altas dosis, especialmente en pacientes
insuficientes cardiacos, el efecto inotrópico negativo de la lidocaína puede deprimir la
contractilidad del miocardio.
Toxicidad extracardiaca: como todos los anestésicos locales, sus efectos son neurológicos,
como pueden ser temblores, mareos, náuseas de origen central, vértigo, transtornos
auditivos y habla farullante. Además se pueden presentar convulsiones, pero aparecen más
en pacientes ancianos y responden bien al diazepam intravenoso. En general, si se evitan
concentraciones inferiores a 9 g/mL, la lidocaína es bien tolerada.
La felcainida es un inhibidor potente de los canales de sodio y de potasio, con una dinámica
lenta y de no bloqueo. Nótese que aunque no bloquea, no prolonga el potencial de acción ni
el intervalo QT. Actualmente se administran en pacientes con corazón normal con
taquiarritmias supraventriculares y no tiene efectos antimuscarínicos. Es muy eficaz para
suprimir contraciones ventriculars prematuras. Sin embargo, la felcainida puede causar
exacerbaciones de las arritmias cuando se administran dosis normales de felcaidina a
pacientes con infarto agudo al miocardio y ectopia ventricular.
La felcaidina se absorbe bien y tiene una vida media aproximada de 20 horas, se elimina por
riñón e hígado, y su dosis normal es de 100 a 200 mg 1-0-1
Como ya se sabe, estos fármacos pueden ayudar a detener las arritmias mediante el bloqueo
de los receptores beta y las acciones sobre la membrana celular. Algunos tienen actividad
sobre los beta 1, algunos son simpaticomiméticos, y también hay otros que prolongan el
potencial de acción. Existen pruebas de que pueden prevenir el infarto recurrente y la
muerte súbita en pacientes que se recuperan de un infarto agudo al miocardio. El esmolol es
un beta bloqueador utilizado principalmente para arritmias intraoperatorias y otras de tipo
agudo. El sotalol es un beta bloqueador que prolonga el potencial de acción (efecto de clase
3).
Generalmente estos fármacos prolongan los potenciales de acción porque bloquean a los
canales de potasio en el músculo cardiaco o porque intensifican la corriente interna a través
de los canales de sodio. La prolongación del potencial de acción de estos fármacos tiene la
indeseable propiedad de dependencia inversa al uso, la cual condiciona que el bloqueo de los
canales de potasio –y por tanto el control de la arritmia- sea más acentuado a frecuencias
bajas y no en las altas, como sería deseable. Esto contribuye al riesgo de que se desarrolle
torsade de pointes.
AMIODARONA
Toxicidad cardiaca: la amiodarona (que prolonga el período refractario efectivo por medio
de la prolongación del potencial de acción) puede ocasionar bradiacardia sintomática o
bloqueo cardiaco en pacientes que tengan antecedentes de enfermedad del nodo SA o AV.
Uso terapéutico: Las dosis bajas, como de 100 a 200 mg/día, son útiles para mantener un
ritmo sinusal normal en pacientes con fibrilación auricular.
BRETILIO
El bretilio (agente que aumenta el periodo refractario por medio de la prolongación del
potencial de acción, o de clase 3, como la amiodarona) fue el primer agente que se utilizó
como antihipertensivo, aunque tiene además propiedades antiarrítmicas directas.
Efectos cardiacos: El bretilio prolonga la duración del potencial de acción ventricular, pero
no auricular, y el periodo refractario efectivo. Este efecto es más notorio en las células
isquémicas, ya que en ellas puede revertir el acortamiento del potencial de acción y del
periodo refractario causado por la isquemia. Como el bretilio induce la liberación de
catecolaminas cuando se administra por primera vez, puede tener efectos inotrópicos
positivos, aunque ellos pueden desencadenar también arritmias.
Efectos extracardiacos: ellos son predecibles a partir de las acciones simpaticolíticas que
induce el medicamento, aunque la más frecuente y notoria es la hipotensión postural, lo cual
puede ser evitado por completo con la administración de un antidepresivo tricíclico como lo
es la protriptilina. Además, se pueden presentar náuseas y vómitos después de la
administración de un bolo de bretilio.
Uso terapéutico: El bretilio se suele utilizar en casos de emergencia donde han fallado la
lidocaína y la cardioversión.
SOTALOL
El sotalol posee la actividad de prolongar el periodo refractario efectivo por medio de la
prolongación del potencial de acción, tal como la amiodarona y el bretilio. El sotalol tiene
afinidad por los receptores beta 2 adrenérgicos, pero no es cardioselectivo. Su efecto de
aumento en la duración del potencial de acción es máximo a dosis bajas. Se absorbe muy
bien y llega a tener una biodisponibilidad del 100%, no metabolizándose en el hígado y
siendo excretado el 100% por riñón en forma de fármaco inalterado. Debido a su
farmacocinética relativamente simple, no tiene casi interacciones medicamentosas. Sus
efectos más significativos incluyen la incidencia de torsade de pointes hasta en un 6% más
de los pacientes, y los pacientes con insuficiencia cardíaca izquierda pueden agravarse aún
más si son tratados con el sotalol.
El sotalol se ha aprobado para tratar arritmias ventriculares que amenacen a la vida, además
del mantenimiento del ritmo sinusal en pacientes con fibrilación auricular. También se
puede utilizar en edades pediátricas para arritmias supraventriculares y ventriculares.
DOFETILIDE
Estos fármacos fueron introducidos primero como antianginosos, pero también tienen
efectos antiarrítmicos directos. Ellos son el verapamil, diltiazem y beperidil.
VERAPAMIL
Toxicidad cardiaca: Los efectos cardiotóxicos son dependientes de la dosis y casi siempre
han podido evitarse. Entre ellos se incluyen la administración de un bolo de verapamil a un
paciente con taquicardia diagnosticada como supraventricular, pero que en realidad era
ventricular. Ello puede llevar a hipotensión y a fibrilación ventricular. Además, puede
ocasionar bloqueo auriculoventricular al utilizarse en grandes dosis. Este bloqueo se puede
tratar con atropina y estimulantes de los canales beta.
DILTIAZEM Y BEPERIDIL
Estos dos compuestos tienen efectos similares al verapamil en cuanto a sus efectos de
prolongar el periodo refractario por medio de la prolongación del potencial de acción
mediante el bloqueo de los canales del calcio.
ANTIARRÍTMICOS DIVERSOS
ADENOSINA
Toxicidad: la adenosina ocasiona rubor en el 20% de los pacientes y ardor torácico que
quizás se deba a broncoespasmo en el 10% de los pacientes.
MAGNESIO
POTASIO
BENEFICIOS Y RIESGOS
FÁRMACOS ANTIANGINOSOS
La angina de pecho es el padecimiento que se acompaña de isquemia en el tejido cardiaco,
más común. La angina o dolor se produce por una acumulación de metabolitos, en tanto que
la angina de pecho es el dolor torácico y opresor que se presenta de manera súbita ante la
insuficiencia para aportar el óxigeno que se requiere en el tejido cardiaco.
Los fármacos más utilizados para el tratamiento rápido de la angina de pecho son la
nitroglicerina, que es un nitrato orgánico, además de los bloqueadores de los canales de
calcio (vasodilatadores) y los bloqueadores beta, que aunque no son vasodilatadores, sirven
para la profilaxis.
Por otra parte, en la angina atípica, el vasospasmo se puede revertir con nitritos o
bloqueadores de los canales del calcio.
El pronóstico y el curso de la angina de pecho son variables, pero se asocian altamente con
infarto agudo al miocardio y muerte.
FISIOPATOLOGÍA DE LA ANGINA
El músculo cardiaco humano no puede parecerse al músculo esquelético, dado que no puede
generar un déficit apreciable de oxígeno durante el estrés y después recuperarlo. En este
contexto, se entiende que la alta tasa metabólica del miocardio lo obligue a extraer hasta el
75% del oxígeno disponible, aún cuando no haya estrés. Éste se puede presentar en casos
como el ejercicio físico, aumento en la frecuencia cardíaca o descarga simpática, que es en
muchos de los casos el factro desencadenante para el ataque de angina. El corazón favorece
a los ácidos grasos como sustrato para producir energía, pero ellos demandan más oxígeno
por molécula de ATP para ser oxidados, en comparación con los hidratos de carbono como
la glucosa. Por ello, se están desarrollando medicamentos que sea inhibidores de la
oxidación de los ácidos grasos, aunque aún se encuentran en experimentación. Tales son la
ranolazina y trimetazidina.
El aumento en las necesidades de oxígeno está satisfecho por un aumento del flujo de las
arterias coronarias en el corazón normal. El flujo sanguíneo coronario está directamente
relacionado con la presión de perfusión tisular (presión diastólica aórtica), y la duración de
la diástole. El flujo sanguíneo vascular es inversamente proporcional a la resistencia del
lecho vascular coronario. La resistencia, a su vez, está determinada por factores intrínsecos
como metabolitos y productos farmacológicos. Se ha observado que las lesiones del
endotelio de las arterias coronarias provocan una menor capacidad para dilatarse y por
consiguiente un aumento de la resistencia del lecho vascular.
Tanto el tono arterial como el venoso (tensión del músculo liso) son determinantes para el
esfuerzo de la pared miocárdica. El tono arteriolar controla directamente la resistencia
periférica y así, la tensión arterial, además del gasro cardiaco. En este contexto, es fácil
deducir que la presión ventricular debe exceder a la presión aórtica, lo cual por tanto
significa que la presión arterial determina el esfuerzo sistólico de la pared ventricular. El
tono venoso determina la capacidad de circulación de la sangre venosa en relación con la
sangre que regresa al corazón (recordar que más del 60% de la sangre está en las venas), y
con ello, determina el esfuerzo sistólico de la pared.
Los tres grupos de fármacos que se emplean en la actualidad contra la angina (nitratos
orgánicos, bloqueadores de los canales del calcio y beta bloqueadores) disminuyen el
requerimiento miocárdico de oxígeno por medio de la reducción en los deteminantes,
como la frecuencia, el columen ventricula, presión arterias y contractilidad miocárdica. En
la angina variante, los bloqueadores de los canales del calcio y los nitratos pueden aumentar
la entrega de oxígeno al miocardio mediante la reversión del espasmo coronario.
NITRATOS Y NITRITOS
Química: Estos agentes son ésteres simples de ácido nítrico y nitroso de polialcoholes. La
nitroglicerina puede ser considerada como el prototipo del grupo. Aún cuando estos
compuestos se utilizan para la fabricación de la dinamita, los empleados en medicina no son
explosivos, ya que la nitroglicerina, presentada en forma habitual en tabletas sublinguales,
pierde potencia al adsorberse y volatilizarse en el plástico. Por ello, debe de permanecer en
recipientes de vidrio bien cerrados. Como todos los medicamentos derivados de los nitratos
y nitritos tienen un mecanismo de acción idéntico y toxicidad similar, se eligen factores
farmacocinéticos para la elección de su uso.
Farmacocinética: El hígado posee una amplia actividad reductasa de los nitratos, a los
cuales les va quitando grupos nitrato de manera escalonada, y por último los destruye. Por
tanto, la biodisponibilidad de la nitroglicerina y el dinitrato de isosorbide son del 10 al 20%.
Con base en esto, se prefiere la vía de administración sublingual, con la cual se evita el
metabolismo del primer paso y se alcanzan las concentraciones terapéuticas en pocos
minutos. Se deben de administrar con precaución ya que se deben evitar efectos adversos.
Por tanto, cuando se necesita de un tiempo de acción más prolongado, se pueden elegir
otras vías de administración, como tabletas orales que contengan altas dosis del fármaco
para obtener concentraciones sanguíneas favorables o la vía intradérmica, mediante la cual
se está absorbiendo continuamente el medicamento.
El nitrito de amilo y los nitritos relacionados son líquidos muy volátiles. Se venden en
cápsulas de cristal muy f´ragil envueltos con una cubierta protectora de tela. Al romperse el
frasco, los líquidos se volatilizan y se pueden rápidamente inhalar los vapores que emanan.
La vía de inhalación, al igual que la sublingual utilizada para la nitroglicerina y el dinitrato
de isosorbide, es muy rápida, lo que provoca un efecto terapéutico rápido. A causa de la
aparición de nuevos fármacos y del olor desagradable del nitrito de amilo, es ahora obsoleto
para la angina.
Una vez absorbidos los compuestos de nirato se transforman muy rápidamente con una vida
media de 2 a 8 minutos. Los metabolitos parcialmente desnitratados tienen vidas medias
más largas, hasta de 3 horas. De los derivados de la nitroglicerina (dos dinitroglicerinas y
dos formas mononitro), las formas dinitro poseen efecto vasodilatador importante, y
pueden ser las responsables de la mayor parte de los efectos terapéuticos. El metabolito 5-
mononitrato del dinitrato de isosorbide es activo y se encuentra para su venta en forma de
dinitrato de isosorbide. Es eficaz y tiene una biodisponibilidad del 100%. Su excreción,
principalmente en vía de derivados glucurónicos desnitritados, es en gran parte por vía
renal.
Farmacodinamia:
Toxicidad y tolerancia:
A. Efectos del nitrato en la angina por esfuerzo: La disminución del retorno venoso y la
disminución global del volumen intracardiaco son los efectos más importantes.
También desciende la presión arterial. El decremento de la presión intraventricular y
del volumen ventricular izquierdo se asocian con una menor tensión de la pared
(relación Laplace, o sea que los nitratos son los fármacos que afectan el
resultado de la ley de Laplace). Además, se reduce el requerimiento de oxígeno
del miocardio. Sin embargo, los nitratos reducen de manera global el flujo coronario,
por lo que el principal mecanismo de alivio de la angina de los nitratos es la
disminución de la demanda de oxígeno.
B. Efectos de los nitratos en la angina variante: Ellos corrigen el espasmo arterial
coronario.
C. Efectos de los nitratos en la angina inestable: Debido a que en la angina inestable, la
mayor contracción de los vasos coronarios y la aumentada demanda de oxígeno
pueden ser los desencadenantes de un ataque de angina en reposo, la nitroglicerina y
los nitratos pueden aliviarla en el sentido de que actúan sus dos mecanimos:
relajación del as paredes arteriales y disminución de la demanda de oxígeno.
Uso clínico de los nitratos: Debido a que la nitroglicerina tiene un rápido inicio de efectos,
de 1 a 3 minutos, es el preferido para los ataques agudos de angina. Es inadecuada para
tratamientos sostenidos, además de que si se administra por vía IV, cederán sus efectos
hemodinámicos al suspenderse. Aunque se puede utilizar por vía transdérmica, estas
preparaciones ocasionan tolerancia.
Farmacodinamia:
1. Mecanismo de acción: Los canales de calcio de tipo L son los que predominan en el
músculo cardiaco y en el liso. Se sabe que los canales L tienen un sitio donde se unen
la nifedipina y otros miembros de la familia de las dihidropiridinas. El verapamil y el
diltiazem se unen a otros receptores, que aunque parecidos, no son idénticos a los
que se unen la nifedipina y otras dihidropiridinas. Además, la unión del diltiazem o
verapamil afectan a la unión del nifedipino o las dihidropirimidinas. El bloqueo por
parte de estos agentes se asemeja al que producen los anestésicos locales, y actúan
desde el lado interno de la membrana, funcionando mejor en membranas
despolarizadas. La unión de estos fármacos disminuye la frecuencia con que se abren
los canales del calcio, lo que se refleja en una importante disminución de la corriente
de calcio que entra a la membrana en respuesta a la despolarización; esto, en el
músculo liso, correspondería a una importante relajación. En el corazón se asocia con
una caída en la contractilidad, la frecuencia del ritmo del nodo SA y también en la
velocidad de conducción del nodo AV.
2. Efectos sistémicos
a. Músculo liso: La mayor parte de los músculos lisos dependen de la entrada de
calcio y del mantenimiento de sus concentraciones para mantener su tono.
Estas células se relajan por los bloqueadores de la entrada del calcio. En el
sistema vascular, las arteriolas parecen ser las más sensibles que las venas, por
lo que la hipotensión ortostática no aparece. También se reduce la presión
arterial con todos los bloqueadores de los canales del calcio.
b. Músculo cardiaco: El músculo cardiaco depende en gran medida de la entrada
de calcio para contraerse. Además, el nodo SA genera potenciales de acción
llamados dependiente del calcio o de respuesta lenta, los cuales pueden ser
bloqueados o disminuidos por los bloqueadores de los canales del calcio en
dependencia de la dosis.
c. Músculo esquelético: este no se ve afectado por los bloqueadores de los canales
del calcio, ya que utiliza los grandes depósitos de este ion intracitoplasmáticos,
y no requiere tanto de su entrada para la contracción.
d. Vasospasmo cerebral e infarto posterior a hemorragia subaracnoidea. La
nimodipina, un miembro de la familia de las dihidropiridinas, como la
nifedipina, tiene una gran afinidad por los vasos sanguíneos cerebrales, y al
parecer reduce la morbilidad en pacientes que sufrieron hemorragia
subaracnoidea. Por lo tanto, la nimodipina está indicada en los
pacientes que sufrieron evento vascular cerebral hemorrágico.
e. Otros efectos: Los canales de calcio que se hallan en las glándulas y de las que
depende la respuesta estímulo.secreción, son insignificantemente sensibles a
la acción de los bloqueadores del calcio.
Toxicidad: los efectos tóxicos provienen directamente del bloqueo de los canales del calcio,
como por ejemplo una grave depresión cardiaca, bradicardia, paro cardiaco, bloqueo
auriculoventricular e insuficiencia cardiaca, aunque estos efectos son raros en el campo
clínico.
Usos clínicos de los bloqueadores de los canales del calcio: hipertensión, taquiarritmias
supraventriculares, miocardiopatía hipertrófica, migraña y fenómeno de Raynaud. La
amlodipina se puede usar con seguridad en pacientes con insuficiencia cardiaca izquierda.
Se deben de usar con ciudado en pacientes que están siendo tratados con digitálicos, ya que
el verapamil puede ocasionar un aumento en los niveles de biodisponibilidad de la digoxina
por un mecanismo farmacocinético.
Aún cuando no son vasodilatadores, los beta bloqueadores son muy útiles para el
tratamiento de la angina de pecho, ya de modifican parámetros hemodinámicos, como la
frecuencia disminuida, presión arterial y contractilidad también disminuidas. Todo ello
disminuye la demanda de oxígeno del corazón durante el ejercicio y en reposo. Se
contraindican en asma, bradiacardia severa, bloqueo AV, síndrome de bradicardia-
taquicardia e insuficiencia cardiaca izquierda severa e inestable. Las consecuencias
potenciales incluyen fatiga, alteración de la tolerancia al ejercicio, insomnio, sueños
desagradables, empeoramiento de la claudicación y disfunción eréctil.
Los nitratos y los bloqueadores de los canales del calcio son el alivio y para la prevención de
los ataques de angina vasospástica, variante o de Prinzmetal. El 70% de los pacientes
tratados con ellos mostró una desaparición de los ataques, en tanto que otro 20% demostró
una importante reducción en la frecuencia de estos. La prevención del espasmo arterial
coronario (en presencia o ausencia de lesiones ateromatosas) es el principal mecanismo
para esta respuesta. Los métodos quirúrgicos no están indicados en angina
variante.
HIPOLIPEMIANTES
Los lípidos en el plasma humano se transportan en complejos macromoleculares
denominados lipoproteínas. Varios transtornos que implican la elevación de las
concentraciones de estos complejos se llaman hiperliporoteinemias o hiperlipidemias. El
término hiperlipemia sólo denota el aumento en la concentración de los triglicéridos en la
sangre. Las dos secuelas clínicas de estas enfermedades son la pancreatitis aguda y la
aterosclerosis. La pancreatitis aguda se presenta sobre todo en pacientes con hiperlipemia,
esto es, con altos niveles de triacilglicéridos.
Los componenetes característicos de las placas ateromatosas son las células espumosas, que
son macrófagos modificados, además de células de músculo liso llenas de ésteres de
colesterol. Estas células se producen como resultado de un proceso de fagocitosis que se da
gracias a unos receptores en las membranas que se llaman receptores limpiadores. Las
lipoproteínas, al reaccionar con radicales libres, son modificadas y de este modo constituyen
un ligando para los receptores limpiadores. Entonces la lipoproteína es fagocitada y se crean
así células espumosas, lo que con el tiempo puede ocasionar que se formen las pacas
ateromatosas rellenas de células espumosas, además de colágeno, fibrina y freceuentemente
calcio. En tanto que las lesiones pueden obstruir lentamente a los vasos coronarios, los
síntomas clínicos se precipitan antes de que esto suceda, pues se desprenden pedazos de las
placas, los cuales pueden llegar a formar trombos oclusivos; se cree que estos eventos
agudos son el resultado de la actividad inflamatoria de los macrófagos.
A pesar de todo esto, los hipolipemiantes pueden causar una lenta regresión de las placas, lo
cual se ha documentado bastante bien al observarse que se ha disminuido la mortalidad
atribuible a este grupo de enfermedades cuando se instituye un tratamiento vigoroso. De
este modo, las HDL o lipoproteínas de alta densidad, o tambié alfalipoproteínas, pueden
constituir ina clave. En el caso de la hipoalfalipoproteinemia, se crea un factor de riesgo para
que se formen placas ateromatosas, y los medicamentos que incrementan las
concentraciones de HDL o alfalipoproteína están indicados en pacientes con
hipoalfalipoproteinemia. Las HDL participan en vías que atraen el colesterol nuevo de las
paredes de los vasos e inhiben la oxidación de las lipoproteínas aterogénicas.
Las arterias coronarias normales pueden dilaterse como repsuesta a la isquemia para
resurtir el aporte de oxígeno que demanda el tejido con isquemia. Esto se media por el óxido
nítrico, quien aumenta los niveles de GMPc en las células del músculo liso de la pared
arterial media. Esta función se desacopla en presencia de altas concentraciones de
lipoproteínas aterogénicas, y la reducción de ellas y de su oxidación puede conllevar a la
restauración del epitelio.
FISIOPATOLOGÍA DE LA HIPERLIPIDEMIA
METABOLISMO NORMAL DE LAS LIPOPROTEÍNAS
Estructura: Las lipoproteínas son partículas con un centro hidrófobo que contienen
alrededor ésteres de colesterol y triacilglicéridos. El colesterol no esterificado, fosfolípidos y
lipoproteínas rodean el centro. Ciertas lipoproteínas contienen proteína B de muy alto peso
molecular, la cual puede existir de dos formas: la B48, que se forma en el intestino y se
encuentra en los quilomicrones y sus remanentes, y la B100, que se sintetiza en el hígado y
se halla en las VLDL, remanentes de las VLDL, IDL, LDL (que se forman a partir de las
VLDL) y las lipoproteínas Lp (a).
Síntesis y catabolismo:
HIPERTRIGLICERIDEMIAS PRIMARIAS
HIPERCOLESTEROLEMIAS PRIMARIAS
HIPERLIPOPROTEINEMIA SECUNDARIA
Química y farmacocinética: La lovastatina y simvastatina son prodrogas del tipo lactona que
son hidrolizadas en el intestino hasta sus derivados hidroxilo que son activos. La
pravastatina tiene un anillo lactona abierto, y la atorvastatina, fluvastatina y rosuvastatina
son activos al momento de la administración. La absorción de los inhibidores de la HMG-
CoA reductasa varía desde el 40 hasta el 70%, exceptuando a la fluvastatina que se absorbe
casi completamente. La mayoría de ellos se eliminan por bilis, teniendo vidas medias de 1 a
3 horas, la atorvastatina de 14 horas y la rosuvastatina de 19 horas.
Usos terapéuticos y dosis: En combinación con una resina, la niacina normaliza los niveles
de LDL en la mayoría de los pacientes con hipercolesterolemia familiar heterocigotos. En
casos de lipemias mixtas que no responden a la dieta, la niacina a menudo desciende los
niveles de triglicéridos, lo cual puede ser adyuvado también por los ácidos grasos 3 de
origen marino. La niacina es el agente más eficaz para incrementar los niveles de
HDL.
Mecanismo de acción: Estos agentes ejercen su acción como ligandos del receptor de
transcripción nuclear llamado Receptor activado peroxisoma activador, o PPAR-. Ello
incrementa la lipólisis de los triglicéridos a través de la LPL. Esto crea que los VLDL
disminuyan en sangre como consecuencia de su menor secreción hepática.
ToxicidaD: entre sus raros efectos adversos se encuentran el rash cutáneo, el exantema,
prurito, miopatías, arritmia, hipopotasemia, y elevaciones de las aminotransferasas.
Potencian la acción de anticoagulantes como la warfarina, cumarina e indanediona. Se
incrementa el riesgo de miopatía cuando se administran junto con inhibidores de la
reductasa. Pueden condicionar la aparición de cálculos biliares, por el mayor contenido de
colesterol en la bilis.
Mecanismo de acción: Dado que los ácidos biliares son excretados 10 veces más cuando se
administra colestiramina, colestipol o colesevalam, se produce una mayor síntesis de sales
biliares por medio de la 7 hidroxilación, proceso que normalmente está regulado por
retroalimentación negativa de los ácidos biliares que se reabsorben en el intestino. Al estar
ausentes por haberse ido con las resinas como colestiramina, colestipol y colesevelam, no
pueden regular la síntesis de más sales biliares.
Usos terapéuticos: Las resinas se usan en el tratamiento de pacientes con
hipercolesterolemia primaria, lo que produce una reducción de alrededor del 20% en
el colesterol LDL. Se presentan en gránulos que deben hidratarse en agua o jugo antes de
administrarse.
Toxicidad: El exetimibe no parece ser sustrato de las enzimas CYP450, además de que se
puede presentar una pequeña incidencia en el transtorno de la función hepática, lo cual es
reversible.
ANTIHIPERTENSIVOS
HIPERTENSIÓN Y REGULACIÓN DE LA PRESIÓN ARTERIAL
DIAGNÓSTICO
ETIOLOGÍA DE LA HIPERTENSIÓN
Quizá sólo en un 10 ó 15% de los casos de hipertensión se puedan determinar sus causas,
tales como la vasoconstricción arterial renal, coartación de la aorta, feocromocitoma,
enfermedad de Cushing y aldosteronismo primario. En estos casos, donde se puede
hablarde la causa específica, se habla de una hipertensión esencial.
La presión arterial es una enfermedad multifactorial. Entre los factores que la condicionan
están el estrés, factores hereditarios, ambientales, aumento en el consumo de sal y
decremento en los niveles de potasio y calcio. La posibilidad de heredar la hipertensión
esencial se calcula en un 30%. Se han asociado mutaciones en los genes del
angiotensinógeno, de la enzima convertidota de angiotensina (ECA) y del receptor 2
adrenérgico, al desarrollo de la hipertensión arterial.
PA = (GC)(RVP)
Los barorreflejos son mediados por los nervios autónomos, y actúan en conjunto con
mecanismos humorales como el sistema renina-angiotensina-aldosterona para mantener el
control de los cuatro sitios regentes y así mantener una presión arterial normal. Además, la
liberación local de hormonas en los vasos puede tener qué ver cn la presión arterial, como
por ejemplo el óxido nítrico, que, al aumentar los niveles de GMPc, aumenta la
vasodilatación, en tanto que la endotelina-1 los contrae.
Barorreflejo postural: Los barorreflejos son los responsables del acomodo de la presión
arterial cuando se cambia de postura, como por ejemplo estando reclinado y cuando la
persona se pone de pie. Neuronas simpáticas centrales que provienen de área vasomotora
espinal son tónicamente activas. Los barorreceptores carotídeos se estimulan ante los
cambios de presión interna o arterial, la cual ejerce en ellos un efecto de estiramiento. La
activación de los barorreceptores inhibe la estimulación simpática central, lo cual se traduce
en que si hay mucha presión, los barorreceptores comunican al área vasomotora espinal que
detenga la descarga simpática. A la inversa, cuando se pasa a una postura erguida, los
barorreceptores captan el decremento de la presión arterial que resulta de la estasis
sanguínea en las venas, y envían estímulos aferentes al área vasomotora para que se
desinhiba la estimulación simpática. El aumento reflejo del flujo de salida simpático que se
desencadena en esta circunstancia actúa a través de neuronas efectoras que incrementan la
resistencia vascular (vasoconstricción arteriolar), además de que se estimula el gasto
cardiaco por estimulación del corazón, y se reduce la capacitancia de los vasos de
capacitancia, que son las vénulas, mediante fleboconstricción; esto último incrementa el
retorno venoso al corazón, y con estos mecanismos en juego, se restablece la presión arterial
normal. Este mismo barorreflejo actúa en respuesta a cualquier fenómeno que disminuya la
presión arterial, como el causado por algún vasodilatador, o por una disminución en el
volument intravascular, como el que se produce en una hemorragia o por la pérdida de sal y
agua por parte de los riñones.
Respuesta renal a la presión arterial baja. A través del control del volumen en el espacio
intravascular, los riñones son los que terminan por controlar la presión arterial a largo
plazo. La disminución de la perfusión renal causa una redistribución del líquido sanguíneo,
además de que aumenta la retención de sal y agua. Además, una presión baja en las
arteriolas renales, así como la actividad simpática, por medio de los receptores beta
adrenérgicos, causa un aumento en la síntesis de renina, la cual dará lugar a la angiotensina
II. La angiotensina II causa constricción directa de los vasos de resistencia y estimulación de
la síntesis de aldosterona en la corteza suprarrenal, lo cual aumenta la retención de sodio y
de volumen intravascular. La vasopresina que se secreta en la hipófisis también juega un
papel en el mantenimiento de la presión arterial, puesto que regula la capacidad renal para
reabsorber agua.
Todos los antihipertensivos ejercen su acción al actuar en uno o más de los cuatro sitios
principales de control de la presión arterial. Ellos son jerarquizados según su sitio principal
de acción o mecanismo que regula. Debido a sus espectros de acción comunes, los
antihipertensivos ocasionan toxicidades similares. Los principales grupos son:
1. Diuréticos, que reducen la presión arterial por medio de la disminución del sodio
corporal, y con ello el volumen sanguíneo.
2. Simpaticolíticos: disminuyen la presión arterial al disminuir las resistencias
periféricas, inhibir al funcionamiento cardiaco y favorecer el estancamiento o estasis
en los vasos de capacitancia.
3. Vasodilatadores directos, los cuales reducen la presión arterial al disminuir las
resistencias periféricas y, en grados variables, al aumentar la capacitancia.
4. Agentes que bloquean la producción o acción de la angiotensina, los cuales reducen la
resistencia vascular periférica y (potencialmente) el volumen sanguíneo.
Por muchos años se ha sabido que la restricción de sodio en la dieta tiene efectos
hipotensores sobre personas hipertensas. Con la introducción de los diuréticos, se pensó que
ya no era tan necesaria la reducción de sodio. Sin embargo, ahora se toma como una medida
relativamente no tóxica la reducción de sodio. Estudios clínicos muestran que incluso una
restricción moderada puede disminuir la presión arterial, aunque en diversos grados, en
pacientes hipertensos.
Toxicidad de los diuréticos: el efecto adverso más importante de los diuréticos (excepto con
los ahorradores de potasio) es la alta eliminación de potasio. Aún cuando los niveles bajos
de hipopotasemia son bien tolerados por la mayoría de los pacientes, pueden ser peligrosos
en pacientes que toman digitálicos, arrítmicos o con infarto agudo al miocardio, así como
insuficiencia cardiaca izquierda.
Debe de hacerse notar que el efecto antihipertensivo trae consigo un incremento del
coilumen sanguíneo, mecanismo que no depende del sistema nervioso adrenérgico, sino que
es un mecanismo compensatorio y puede inutilizar al medicamento. Por ello, los
simpaticolíticos siempre deben de administrarse con un diurético para evitar la
minimización de su acción por parte de los reflejos compensatorios.
Mecanismos y sitios de acción: Estos agentes reducen el flujo simpático desde el centro
vasomotor espinal, pero permiten a estos centros retener o aumentar su sensibilidad hacia
los estímulos aferentes de los barorreceptores.
BLOQUEADORES GANGLIONARES
Son obsoletos para la hipertensión, ya que bloquean la transmisión del impulso nervioso por
medio de la inhibición en la estimulación de las neuronas posganglionares por medio de la
Ach, así como lo hacen los bloqueadores neuromusculares. Por tanto, sus toxicidades
intolerables los han retirado de la práctica clínica.
BLOQUEADORES NEURONALES ADRENÉRGICOS
VASODILATADORES
Mecanismo y sitios de acción: Dentro de esta clase se hallan la hidralazina y el minoxidil, los
cuales son útiles para los tratamientos a largo plazo de los pacientes externos. El
nitroprusiato, diazóxido y fenoldopam son parenterales y se utilizan en urgencias
hipertensivas. Los bloqueadores de los canales del calcio se usan en ambas circunstancias.
Los vasodilatadores utilizados en la hipertensión relajan el músculo liso de las arteriolas,
por lo que disminuyen la presión, además de que el nitroprusiato de sodio, en su calidad de
nitrato orgánico, como la nitroglicerina, también relaja las vénulas.
1. Hidralazina. Dilata las arteriolas, pero no las vénulas, y se utiliza para hipertensión
severa.
a. Farmacocinética: Se absorbe bien en el ytracto gastrointestinal y sufre extenso
metabolismo de fase I, lo que condiciona que su biodisponibilidad sea baja, en
promedio del 25%. Los acetiladores rápidos pueden no obtener tanto beneficio
antihipertensivo como los acetiladores lentos. Para ello, se puede ajustar la
dosis desde 40 hasta 200 mg/día.
b. Toxicidad: cefalea, náuseas, anorexia, palpitaciones, sudor y rubor. Puede
ocasionar un síndrome parecido al lupus eritematoso.
2. Minoxidil. El sulfato de minoxidil, el metabolito activo, abre los canales de potasio
celulares y ello ocasiona la relajación de las células musculares lisas. Dilata las
arteriolas, al igual que la hidralazina.
a. Farmacocinética: el uso de minoxidil se asocia a la retención de sodio y agua,
lo que puede volver a elevar la tensión arterial, por lo que se recomienda
utilizar al minoxidil junto con algún diurético o beta bloqueador.
b. Toxicidad: taquicardia, palpitaciones, edema t angina cuando son inadecuadas
las dosis de beta bloqueadores. Hirsutismo. El minoxidil tópico (Regaine) se
utiliza ahora como un estimulante para el crecimiento del cabello.
3. Nitroprusiato de sodio. Es un vasodilatador potente que se utiliza en las
urgencias hipertensivas o en la insuficiencia cardiaca grave. El mecanismo de acción
es la activación de la guanililciclasa, ya sea por medio del óxido nítrico o por
estimulación directa de la enzima. Se trasnforma en los eritrocitos a cianuro y
después a tiocianato menos tóxico. Disminuye la presión arterial rápidamente y sus
efectos desaparecen de 1 a 10 mins después de haber sido administrado por vía IV.
a. Toxicidad: La toxicidad más grave se relaciona con la acumulación de cianuro.
4. Diazóxido. Previene la contracción del músculo liso vascular al abrir los canales de
potasio y estabilizar el potencial de membrana. Es similar a los diuréticos tiazídicos,
pero no tiene actividad diurética. Se excreta sin cambios con una vida media de 24
horas. Su efecto reductor de la presión se establece a los 5 minutos y dura de 4 hasta
12 horas.
a. Toxicidad: hipotensión excesiva, que resulta de administrar grandes dosis.
Inhibe la liberación de insulina por el páncreas, por lo que también se utiliza
para el tratamiento de hipoglucemia secundaria a insulinoma.
5. Fenoldopam. Agonista de receptores D1 de dopamina, lo que produce dilatación
arteriolar periférica. Vida media de 10 mins. Taquicardia refleja, cefalea pulsátil.
Los bloqueadores de los canales del calcio inhiben la contracción muscular por medio de la
inhibición de la entrada de calcio a la célula y por tanto al retículo sarcoplásmico.
Nifedipina, verapamil, diltiazem, amlo, felo, isra, nicar, nife y nisoldipina.
INHIBIDORES DE LA ANGIOTENSINA
Para la restricción de sodio, si se toma en cuenta que la típica dieta de EEUU contiene
aproximandamente 200 mEq de sodio por día, se desearía lograr niveles de 70 a 100
mEq/día, lo que corresponde a no agregar sal a los alimentos después o durante su
preparación, además de evitar los alimentos procesados ricos en sodio. Se ha demostrado
que la reducción de peso, incluso sin restricción de sodio, disminuye la presión arterial hasta
en el 75% de los pacientes obesos.