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INTRODUCCIÓN
A través del Nuevo Testamento podemos conocer acerca de la figura de Jesús: quién era,
que dijo, que hacía, por qué lo hacía, etc... Es a través de los evangelios, donde más
visualizamos acerca de su vida, muerte y resurrección, ya como testigos oculares, o como
oyentes acerca de lo que habló y lo que dijo cuando estaba en la tierra.
Pablo asegura que fue enviado de Dios, y su deber se centra en realizar una tarea: “ Al
comienzo de la primera carta a los corintios les dice: Cristo no me envió a bautizar, sino a
evangelizar y no con sabiduría de palabra para que no se vacíe la palabra de Cristo”.1
1
SILVA GATICA, FERNANDO “Hay razones para creer en Jesús”. Buscado en los escritos paulinos
del Nuevo Testamento. pp. 34.
La tarea de Pablo era clara, evangelizar como dar la buena noticia, que fue dada por Jesús
quien decía que era hijo Dios.
Esta misión de Pablo fue enviada por Dios, por esa razón él creía en las palabras de Jesús
y le creía a Jesús, sobretodo porque fue testigo de la resurrección, el ver a Jesús resucitado
logró cimentar la fe en lo que él les había enseñado. Lo que se suma a la experiencia de
sentir la presencia del Espíritu Santo en la figura de Jesús. Pablo es enfático en señalar que
la palabra de Dios nos fue enseñado y legado a través de Jesús, hijo de Dios.
Otra razón para creer en Jesús, está dado en la actividad de la predicación como concepto
de trasmitir al resto lo que Jesús les había enseñado a sus discípulos y a todos aquellos
que fueron testigos de su presencia.
Quizás un argumento potente para creer en Jesús y en su palabra está manifestado en las
tribulaciones que ha pasado Pablo al transmitir su palabra. Pablo fue perseguido,
apedreado y hasta encarcelado por predicar su palabra, lo que nos lleva a pensar en la
ferviente fe de pablo para aguantar todo el dolor y sufrimiento que ha padecido a causa de
su fe.
Pablo además demuestra su fe en Jesús a través del amor hacia la comunidad, por medio
de las oraciones y de su constante preocupación: “No se trata de un amor sentimental, sino
de obras”2, obras que fueron inspiradas por el amor de Jesús a través de sus acciones y sus
enseñanzas. Quizás por eso Pablo intentaba imitar a Jesús para que también el resto de la
comunidad lo haga, como razón de seguir los pasos de Jesús, inclusive llegando a
amonestar a la comunidad si es que no siguen los caminos que Jesús predicó.
Los relatos mencionados por Pablo y por los demás evangelios, nos demuestra la fe misma
que ellos poseen al describir lo que observaron o lo que escucharon acerca de Jesús,
inclusive llegando a razonar para afirmar la fe.
Quizás estos argumentos acerca de la creencia de Jesús por medio del apóstol Pablo, nos
convence en cierto aspecto. Podríamos afirmar que Pablo está realmente motivado por la fe
y que es de tal envergadura su fe en lo que Jesús enseñó, que lo llevó a soportar todo tipo
de tribulaciones para lograr evangelizar a las comunidades.
Sin embargo, si buscamos hoy razones para creer en Jesús, podemos encontrar en la Biblia
aquellos acontecimientos que llevaron a personas como Pablo a estar convencidos de que
Jesús era quien decía ser y que Dios nos amó de tal manera que dió a su hijo para la
salvación de todos.
2
SILVA GATICA, FERNANDO “Hay razones para creer en Jesús”. Buscado en los escritos paulinos
del Nuevo Testamento. pp.73.
os acerca a aquellos
En el texto de Silvio Cajiao, S.J, “La cristología en América Latina”, n
acontecimientos en torno a la figura de Jesús, y que nos ayuda a entender la manera en
que él actuaba y se representaba a sí mísmo.
La figura de Jesús revolucionó toda la creencia que hasta entonces se conocía como
palabra de Dios y como Ley de Dios, que lo condujo hacia la crucificción. Es más, Jesús
incluso a sus propios discípulos les explicaba lo que sucedería con él: “Puestas las cosas
en esta perspectiva, se comprende el por qué la conflictividad de Jesús lo llevó
consecuentemente a su muerte, que más que haberla buscado Jesús, se le impone por
haber pretendido la liberación del hombre”3. Esto nos lleva a pensar en lo potente de sus
aseveraciones y actos que realizó.
Sin embargo, a mi parecer, la resurrección significó la razón fundamental para afirmar que
lo que dijo Jesús era verdad, y más aún este acontecimiento logró modificar el pensamiento
de manera radical en forma universal. Aseverar que se vió a Jesús resucitado, no sólo hace
que nos cuestiones que es lo que creemos y que no, sino que además lleva a modificar la
forma en que concebimos la vida y la muerte, nos lleva a cuestionar que hay más allá.
Fue de tal envergadura que muchos soportaron encarcelamientos, persecuciones e
inclusive los daños más grotescos, por afirmar la convicción de que aquello que Jesús
predicó es verdad y que es gracias a su amor que hoy podamos ser salvos y tener una
posibilidad de arrepentimiento.
CONCLUSIÓN
3
CAJIAO, SILVIO S.J “La Cristología en América Latina”, pp. 371.
que el amor de Dios es tan real e inmenso que se materializó en la figura de su hijo
primogénito.
Personalmente creo que esta constituye a mi entender, la razón principal para creer en
Jesús. El amor manifestado en Jesús, en sus obras, en su muerte y en su resurrección,
como promesa de Dios.
BIBLIOGRAFÍA:
- SILVA GATICA, FERNANDO “Hay razones para creer en Jesús”. Buscado en los escritos
paulinos del Nuevo Testamento.