LA SEGURIDAD PRIVADA ANTONIO JOSE NUNEZ GATA SARGENTO DE LA GUAROIA CL «seguridad privada en Espafia viene regu- Jada en la actualidad por la 1992, de 30 de julio ~en adelante LSP-; y su lamento regulado en el Real Decreto 2364/1994, de 9 de diciembre recientemen: te modificado por el Real Decreto 1628/2008, de 30 de octubre ~en adelante RSP-, Pese a ser una competencia propia del Cuerpo Nacional de Poliefa, en la actualidad es compartida, con los Cuerpos de Policia Autondmicos ‘con competencias para la proteccién de personas y bie nes y para el mantenimiento del orden piblico,fijéndose con respecto a estos iiltimos las competencias en la disposicién adicional primera de la RSP. La Guardia (Civil sigue manteniendo con la Seguridad Privada ciertas ccompetencias sobre todo en lo referente alos Guerdas de Campo. No obstante seria complejo y extenso un trabajo pormenorizado de la legislacién de Seguridad Privada, Por lo que nos limitaremos a esbozar unos conceptos. ‘muy bisicos con respecto a la figura del vigilante de seguridad privada, CONCEPTO SEGURIDAD PRIVADA. NNO CONSIDERACION DE AGENTES DE LA AUTORIDAD El predmbulo de la LSP coneibe a los servicios de seguridad privada como “servicios complementarios y subordinados respecto a los de seguridad publica”. Posteriormente habla de que “es un medio de prevencién, suo 2070 gumROM eM, 109del delito y contribuye, por tanto, al mante Seguridad Pablica”. La Seguridad Privada — SP- tiene en Espafia una arraigada historia. Fue en el ano 1849 cuando aparece la figura del guarda jurado ccuya misién era la de vigilar cotos, villas, parques. esas funciones eran controladas por la Guardia Civil ‘manteniéndose asf durante 1a historia de la figura del ‘guarda jurado hasta que la competencia fue traspasada al Cuerpo Nacional de Policia, manteniéndose en la ‘actualidad con respecto a Ia Guardia Civil el tema de ‘armas, explosivos y todo lo que tiene que ver con los ‘guardas de campo. ‘Sin embargo, y dada la importante labor que desempeiia, el colectivo de Seguridad Privada asf To han venido ha. ciendo desde su creacién-con la actual legislacidn carecen de Ia condicidn de agentes de la autoridad, Este hecho ha sido muy eriticado por los profesionales de este sector que ‘en més de una ocasién se han manifiestado a favor de que se les vuelva a reintegrar esta consideracidn tal y como la ‘stentaban antiguamente; precisamente fue con la LSP uando después de casi siglo y medio no se reconace el citado cardcter de agente de la autoridad, Recordemos a este respecto que la Ley Orgénica 286 de 13 de marzo de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (LOFCS) deja claramente establecido en su artculo 7. 1, que el carécter de agentes de la autoridad lo ostentan los miembros de las Fuerzas ¥y Cuerpos de Seguridad en el ejercicio de sus funciones pudiendo tener Ia consideracién de autoridad a efectos de su proteccisn penal cuando se cometa delito de atentado empleando en su ej formas que pucieran poner en peligro su vida o integri dad fisica. En este sentido Ia jurisprudencia posterior del Tribunal Supremo, representada por las sentencias de la Sala 2 de 25 de octubre de 1991, 6 de mayo de 1992, 18 de noviembre de 1992 y 7 de abril de 1993, niegan que Jos vigilantes jurados (hoy vigilantes de seguridad) sean agentes de la autoridad, sosteniendo que no ostentan Ia cconsideracisn de funcionarios piiblicos y considerando a Jos mismos como auxiliares de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. No obstante, a efectos de su proteccién penal leses aplicable la proteccién que se establece en el articulo 555 del céaligo penal “las penas previstas en los articulos tentado~y 552—ag 1presion, armas u objetos peligrosos © prevaligndose de condicién de Autoridad, agente o fun- cionario pablico~ se impondrin en un grado inferior, en suis respectivos casos, a los que acometan o intimen a las imiento de la n adelante sucién armas, explosivos 0 medios 0 raat las penas de atent- personas que acudan en auxilio de la autoridad, sus agentes ‘ funcionarios piblicos”. Debemos tener en cuenta que la LOFCS en su articulo 4 2 establet entidades que ejerzan funciones de vigilan o custodia referidas a personal y bienes 0 servicios de ti tularidad publica o privada tienen una especial obligacién de auxiliar 0 colaborar en todo momento con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad” En igual sentido el articulo 4 de la LSP en el que es- lablece la obligacién especial de auxiliar a las FFCCSS, jue “las personas y seguridad 110, euano enn su.0 2010 jo de sus funciones, de prestarles su colabo- racién y de seguir sus instrucciones personas, los bienes, los estable de euya proteccién, vigilancia 0 custodia estuvieren cencargados, De igual manera la LOPSC en su articulo 17. 3 seftala que las empresas privadas de vigilancia y seguridad, si los hubiere, deberdn colaborar con las FFCCSS en el mantenimiento y el restablecimiento ridad ciudadana respecto del interior de los locales 0 establecimientos en que prestaren servicio. Es prec fia estas funciones de auxilio y colaboracién cuando pur’ at a ostentar la proteccién del aniculo 555, del cédigo penal, pero se debe reiterar que no tienen la cconsideracién de agentes de la Autoridad. en el ejerc 1 elacién con las nente cuando el personal de SP desempeLOS VIGILANTES DE SEGURIDAD Y EL INSTRUSISMO PROFESIONAL En la actualidad, y como veremos més adelante, el sector de SP se ha visto invadido por otras personas © incluso empresas que, careciendo de las autorizaciones, titulaciones y requisitos exigibles para ser personal de .guridad privada desempenian las citadas labores. A teste respecto el articulo 52 del RSP establece en su punto 1° que “el personal de seguridad privada estar Jntegrado por: los vigilantes de seguridad, os vigilantes de explosivos, los jefes de seguridad, los directores de seguridad, los escoltas privados, los guardas particu- Tares de campo, los guardas de caza, los guardapescas Jos vigilantes de explosivos y sustancias peligrosas y jtimos y los detectives privados”, considerando a ‘escoltas privados como especialidades de los vigilantes de seguridad y a los guardas de caza y guardapescas maritimos como especialidades de los guardas de campo, Todos quedan supeditados a la obtencién de Ja correspondiente habilitacién 0 reconocimiento del Ministerio del Interior, con el cardcter de autorizacion, administrativa, la cual se documentaré mediante la correspondiente tarjeta de identidad; que laDi- recciGn General de la Policfa y la Guardia Civil (Ambito CNP), salvo la de los guardas particulares deleampo ct sus distintas modalidades, que sersn expedidas por la Direccién General de la Policia y de la Guerdia Civil Cmbito Guardia Civil) EI RSP define muy pormenorizadamente todos los requisitos que deben reunir los vigilantes de seguridad incluyendo la formacién, estin autorizados a portar armas ~a este respecto les corresponde Ia Licencia de Armas tipo C e1 Ia forma establecida en el Reglamento de Armas. Toda esta regulaciGn del sector tan exhaustiva y, por otra parte hecesaria y de la cual solo vamos a centrernos en Ia figura del vigilante de seguridad no ha sido dbice para que el sector se haya visto en los tltimos altos sum do en una invasi6n de personas ajenas y carentes de formacién que han usurpado e incluso desplazadlo a la figura del vigilante de seguridad, llegando a producirse tuna auténtica lucha por parte de los profesionales de la seguridad privada en Espaia para intentar frenar esta ‘usurpacién” castigada en el RSP como una falta muy grave en el articulo 151. 1. “Lé de seguridad a terceros por parte de personal no inte grado en empresas de seguridad privada, careciendo de la habilita servicios de seguridad privada sin haber obtenido la tarjeta de identidad profesional corresponiliente o sin estar inscrito, cuando proceda, en el pertinent registro. (2) En el atticulo 154 se castiga como inf'accién leve prevista en el punto 3 apartado c) “Ia contratacién o itilizacién de personal de seguridad que carezca de la habilitacign especifica necesaria, a sabiendas de que no retine los requisitos legales”. El articulo 34 de la LSP cestablece que “tora persona que tuviere conocimiento de irregularidades cometidas por empresas o personal de seguridad privada en el desarrollo de sus actividades, podra denunciar aquellas ante el Ministerio del Interior 10 delegados 0 subdelegados del Gobierno, a el as competencias sancionadoras que les atribuye la presente ley ‘La mayorfa del sector de SP demanda contundencia contra este tipo de empresas ¢ individuos e incluso ani- ‘maa trabajadores del sector privado a su denuncia. CCabe hacer mencién aqué al “solventado” problema de los porteros de discoteca, personal que hasta hace ‘poco tiempo careefa de una regulacion especifica y que a raiz de ciertos hechos en los que se consat6 la irregu- Jatidad de esta funcién ha hecho que muchas Comuni- dades AutGnomas —tal es el caso de Madrid, Aragén 0 ‘como los easosen los que prestacién de servicios n necesaria, 1o que incluye: a) prestar ecto de wuu0 2010 inci, 111