ENLACES INTERATÓMICOS Y SECUNDARIOS

1. Introducción

Una de las bases de la clasificación de los materiales se halla en la naturaleza del enlace
atómico, cada uno de los cuatro tipos generales de materiales, está asociado con un
determinado tipo (o tipos) de enlace atómico. En el cual se distinguen dos niveles
diferentes:

 Enlace primario, que supone transferencia o compartición de electrones y produce

unión entre átomos adyacentes relativamente fuerte.
 Enlace secundario, implica una atracción relativamente débil entre átomos, en la
que no existe transferencia ni compartición de electrones.

2. Enlace atómico

El enlace atómico o enlace químico es la fuerza existente entre los átomos una vez que
se ha formado un sistema estable dentro de una molécula.

Las fuerzas atractivas que mantienen juntos los elementos que conforman un compuesto,
se explican por la interacción de los electrones que ocupan los orbitales más exteriores de
ellos (electrones de valencia).

Cuando dos átomos se acercan se ejercen varias fuerzas entre ellos. Algunas de estas
fuerzas tratan de mantenerlos unidos, otras tienden a separarlos.

2.1. Enlace iónico

El enlace iónico implica una transferencia de electrones y es no direccional1.

1
Cada ion se rodea de la cantidad de iones del signo opuesto como le sea permitido.
Las especies con una carga eléctrica se denominan iones, razón por la que este enlace se
conoce como enlace iónico. El ion positivo se llama catión, y el ion negativo se denomina
anión.

Como consecuencia de la transferencia electrónica se crea un par de iones de carga

opuesta. La fuerza de atracción entre los iones es de naturaleza electrostática2. La
naturaleza no direccional del enlace iónico permite tener números de coordinación3 que
vienen determinados estrictamente por la eficiencia del empaquetamiento geométrico
(que está dada por la relación entre radios).

2
Parte de la física que estudia las interacciones entre las cargas eléctricas en reposo.
3
El número de coordinación (NC) es el número de iones (o átomos) adyacentes que rodean a un
determinado ion (o átomo) de referencia.
2.2. Enlace covalente

El nombre covalente procede de la compartición de los electrones de valencia entre dos

átomos adyacentes. El enlace covalente implica la existencia de una distribución
compartida de electrones y presenta una alta direccionalidad. Esto da lugar a números de
coordinación relativamente bajos y a estructuras atómicas más abiertas.

El significado de los enlaces covalentes en ser direccional es que los átomos unidos
covalentemente prefieren específicas orientaciones en el espacio en relación el uno al
otro. Como resultado, las moléculas en el que los átomos están unidos covalentemente
tienen formas definidas.

2.3. Enlace metálico

El metálico implica la compartición de toda una serie de electrones deslocalizados, que

producen un enlace no direccional. La nube o gas de electrones resultante es la causante
de la alta conductividad eléctrica.

La naturaleza no direccional determina los elevados números de coordinación, como

sucede en el enlace iónico.
2.4. Enlace secundario o de Van Der Walls

La causa principal de la cohesión en un material dado es uno o varios de los tres enlaces
primarios descritos hasta ahora. Las energías de enlace típicas varían entre 200 y 700
kj/mol («50 a 170 kcal/mol). Es posible tener una forma de enlace más débil, en ausencia
de transferencia o compartición de electrones (menor energía).

La atracción depende de las distribuciones asimétricas de carga positiva y negativa dentro

de cada átomo o molécula que interviene en el enlace. Tal asimetría de carga se conoce
como dipolo. Este enlace secundario es el resultado de la atracción entre dipolos
eléctricos transitorios o permanentes.

Las energías asociadas al enlace secundario son mayores cuando se trata de moléculas
que contienen dipolos permanentes. Un ejemplo de este caso es el puente de hidrógeno,
que une moléculas adyacentes de agua, H20. Debido a la naturaleza direccional de la
distribución de electrones compartidos en los enlaces covalentes O—H, los átomos de H
se convierten en centros de carga positiva y los átomos de O en centros de carga negativa
dentro de cada molécula de H20.

3. Clasificación de materiales por tipo de enlace

El punto de fusión de un sólido indica la temperatura a la que debe ser sometido el

material para proporcionarle la energía térmica suficiente para que se produzca la rotura
de sus enlaces cohesivos.

La clasificación de elementos acorde a los enlaces que presenta se realiza a continuación:

(Shackelford, 2005)

4. BIBLIOGRAFÍA

 Shackelford, J. F. (2005). Introducción a la ciencia de materiales para ingenieros

(Sexta ed.). Madrid: Pearson Educación.