La salud sexual forma parte de la salud integral de las personas y tiene relación con

su bienestar y nuestra propia calidad de vida. Parte del cuidado íntimo es la prevención de
los problemas de salud derivados de las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) o
Infecciones de Transmisión Sexual (ITS). Como Vivimos día a día, tenemos rutinas diarias,
nos divertimos, estudiamos y trabajamos, no nos hacernos la pregunta de si portamos
alguna enfermedad. O más bien no le damos la importancia a que son las Enfermedades de
transmisión sexual. Estas preguntas son importantes, pues muchas de estas infecciones no
poseen síntomas y al no utilizar algún método de prevención se puede contagiar la pareja de
la persona o puede ser contagiado el individuo por escasa información que se posee o más
bien la poca difusión de información acerca de estos problemas de salud. Debido a que la
problemática es tan común hoy en día, se definirá e informará que son las Enfermedades de
Transmisión Sexual y todo lo que este tema implica.

La clamidia es causada por la bacteria Chlamydia trachomatis y puede afectar los

órganos genitales de la mujer. Generalmente la infección por esta enfermedad no presenta
síntomas o se manifiesta con síntomas leves. Esta infección también puede causar
secreción del pene en un hombre infectado. La infección por clamidia puede ser transmitida
durante relaciones sexuales vaginales, orales o anales. También se puede transmitir de
madre a hijo durante el parto vaginal. Las adolescentes y las mujeres jóvenes que son
sexualmente activas están expuestas a un mayor riesgo de infección ya que el cuello uterino
(la entrada al útero) no se ha formado completamente y es más susceptible a infecciones.
En las mujeres embarazadas las infecciones que no reciben tratamiento pueden propiciar
partos prematuros y además es una de las causas principales de neumonía precoz y
conjuntivitis en los recién nacidos. Si no es tratada, la infección puede avanzar y causar
graves problemas reproductivos y de salud con consecuencias a corto y largo plazo.

Por otro lado la gonorrea, es una enfermedad de transmisión sexual (ETS), causada
por la Neisseria gonorrhoeae, una bacteria que puede crecer y multiplicarse fácilmente en
áreas húmedas y tibias del aparato reproductivo, incluidos el cuello uterino, el útero y los
oviductos en la mujer, y en la uretra (conducto urinario) en ambos sexos. Se transmite por
contacto con el pene, la vagina, y la boca. Sus síntomas son secreción, picazón, ardor,
sangrado en el ano y dolor muscular. Por otra parte, sus complicaciones incluyen meningitis,
ceguera, pulmonía, esterilidad, artritis, enfermedad de corazón, hígado, riñones y próstata.
Es más común en los adultos jóvenes y puede ser transmitida al feto durante el parto.