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Resumen:
en este órgano (Rodríguez, 2010). Actualmente ocupa el cuarto lugar en cuanto a la incidencia
mundial de cáncer y representa la segunda causa de muerte por cáncer en el mundo (Merino,
Senent, & Gamarra, 2009). Colombia está entre los países con más alta incidencia donde se
constituye como la primera causa de muerte por cáncer en hombres y la tercera en las mujeres
(Karimi et. al, 2014). En este artículo se presenta el caso de una mujer que a los 70 años se le
Borrmann III; sin embargo a los 15 meses luego de haber sido sometida a tratamiento con
libre de lesión tumoral evidente, lo cual fue confirmado a través de estudios histopatológicos. Si
bien la historia natural de este tipo de cáncer tiene un pronóstico catastrófico; la mayoría de los
pacientes termina con la muerte por metástasis o por un progresivo deterioro del estado general
que puede llegar a la caquexia (Ojeda & LOPEZ, 2014); en este caso la paciente logró una
Palabras clave:
Introducción:
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muerte por cáncer hasta la década de los ochenta, cuando fue superada por el cáncer de pulmón.
Hoy ocupa el cuarto lugar en cuanto a la incidencia mundial de cáncer y es la segunda causa de
muerte por cáncer en el mundo (Merino et al., 2009). Se presenta con una frecuencia 2 a 3 veces
mayor en los hombres que en las mujeres (Karimi et. al, 2014). La incidencia y la mortalidad
control de ciertos factores de riesgo dietéticos y la mejor conservación de los alimentos (Merino
et al., 2009).
mujeres (Torre et al., 2015); además, está entre los países con más alta tasa de incidencia (17,4 a
48,2 por 100.000 habitantes), similar a la de Costa Rica, Chile, Japón, Corea y China (Gómez,
Puede originarse en cualquier zona del mismo; sin embargo, es más frecuente en el tercio antral
Ama de casa, de condición socioeconómica baja, tipo de sangre “O” Rh “positivo”, con
consultó por primera vez en octubre del año 2005 al servicio de medicina general, por un cuadro
Esta última reportó la presencia a nivel del antro gástrico de engrosamiento parietal (masa) de 21
nivel, y que correspondía con la masa palpable al examen físico médico. Además se observaron
La endoscopia realizada en octubre del mismo año, reportó en antro distal; lesión ulcero-
infiltrante, que ocupaba toda la circunferencia con dureza al tacto endoscópico y friabilidad. El
difuso; donde los cortes histológicos mostraron minúsculos fragmentos con proliferación de
como, TAC de abdomen superior. Este último reportó lesión hiperdensa de márgenes irregulares
en pared del antro gástrico y disminución del lumen densidad de 61 y 76 UH; con realce de la
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lesión con el contraste. El resto de estudios se encontraron dentro de los parámetros normales.
Además se ordenó valoración prequirúrgica por anestesia, neumología y medicina interna para
acuerdo al estadio clínico y la posibilidad de resección quirúrgica del tumor. Los tres servicios
Durante laparotomía exploratoria que fue realizada el 1 de febrero del 2006 se visualizó y
se palpó masa que ocupaba antro-pilórico y se extendía, e infiltraba serosa gástrica y la primera
porción duodenal, epiplón menor, vías biliares, cabeza de páncreas, arteria hepática común,
artería esplénica y arteria mesentérica superior. Por lo anterior se definió que el tumor era de
Se ordenó estudio anatomo-patológico del epiplón mayor que reportó omentectomía con
calcio; y otro más el 8 de mayo. A los 10 días después del segundo ciclo de quimioterapia fue
ingresada al servicio de urgencias por presentar fiebre, deshidratación y adinamia. Por lo anterior
glóbulos rojos (UGR). La paciente obtuvo mejoría, se envió a casa 3 días después del ingreso
Tabla 1:
Resultado de laboratorio
rechazado por la paciente debido a que en los ciclos llevados a cabo presentó efectos colaterales
tales como emesis G III. No se tiene registro de actividades médicas de la paciente en el periodo
comprendido entre julio y noviembre de 2006 por abandono de tratamiento. En diciembre del
mismo año la paciente regresó y se le ordenó una endoscopia alta y estudios de extensión. Los
tumoral evidente; pero sí, una gastropatía hiperémica y se sugirió realizar una ecografía
el 30 de marzo del 2009 en el servicio de cirugía oncológica por medio de exámenes físicos,
ecografías de abdomen; los cuales siempre arrojaron una regresión del adenocarcinoma, aunque
morfológicamente de tipo intestino delgado no asociada a displasia. Para el año 2011 en una
endoscopia alta de control, además de continuar con la gastropatía antral eritematosa, se halló
También a través del examen físico realizado por el cirujano oncólogo tratante; se encontró
diagnosticar cáncer de células basales en comisura labial derecha con bordes quirúrgicos libres
de lesión.
Es importante resaltar que en próximos controles por biopsia realizados post tratamiento
este microorganismo.
enfermedad de 10 años; asiste a sus controles por cirugía oncológica y de manera rutinaria se le
Discusión:
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(CG) es aún una enfermedad de mal pronóstico, pues su historia natural termina con la muerte
del paciente por metástasis o por un progresivo deterioro del estado general que puede llegar a la
Tal y como ocurrió en este caso, la mayoría de los pacientes tiene más de 60 años en el
momento del diagnóstico y se presenta con estados avanzados de la enfermedad, pues los
estadios tempranos son generalmente indolentes; estas dos características contribuyen a su mal
depurada, se puede perder la mínima posibilidad de curación o control del proceso neoplásico.
En general la supervivencia a cinco años varía entre 10% y 25% en los países occidentales
proliferación, apoptosis, diferenciación y ciclo celular, con el medio ambiente (Zuleta, Otero, &
Existen ciertos factores de riesgo reconocidos para el cáncer del estómago, pero se
desconoce una etiología específica. Entre ellos se incluyen: Infección gástrica por Helicobacter
pylori, edad avanzada, género masculino, ingesta de una dieta pobre en frutas y vegetales, dieta
con alto contenido de alimentos salados, ahumados o en conservas, gastritis atrófica crónica,
terapéutico (García C., 2013). La biopsia por su parte, es necesaria para la confirmación
histológica.
considera como estudio mínimo para este paso la tomografía axial computada de abdomen y
hepáticas y peritoneales, esta última con mayor rango de error (Fukuya et al., 1997), (Fukuya et
al., 1995). Con una adecuada preparación del estómago es posible precisar la morfología,
extensión, y localización del tumor primario, y lograr un acercamiento bastante preciso del factor
empleo de la laparoscopia de estadificación (Lowy, Mansfield, Leach, & Ajani, 1996; Mansfield,
2001; Stell, Carter, Stewart, & Anderson, 1996) que en muchos casos evita una laparotomía
innecesaria.
lesión con mayor precisión que los exámenes anteriores y tiene un gran valor en la diferenciación
de lesiones mucosas y submucosas; por ende influye en la terapia a realizar (Grimm et al., 1993).
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No existen marcadores serológicos para el diagnóstico del CG. Los marcadores tumorales
para utilizarlos como herramientas diagnósticas (Merino et al., 2009). Su papel fundamental es la
Si bien, la historia clínica y examen físico son importantes, en muchos casos no ofrecen
grandes aportes porque en el cáncer gástrico precoz (CGP) que por lo general está limitado a la
mucosa-submucosa, hasta el 80% de los pacientes pueden estar asintomáticos; en el resto, los
síntomas son inespecíficos (Park, Thomas, Yoon, & Yoon, 2015; Subirat Esquivel & Guillén
Isern, 2011).
Los signos más frecuentes en la exploración física son la palidez junto con la caquexia.
En ocasiones se puede detectar, como en este caso, una masa epigástrica que generalmente
ulcerosa con dolor postprandial recurrente que no responde a las medidas terapéuticas simples
(Subirat Esquivel & Guillén Isern, 2011; Torres, Francis, Solares, Vázquez, & Guzmán, 2010).
El 50 % de los pacientes puede presentar pérdida de peso, dispepsia, astenia, vómitos, saciedad
presente hasta en un 20% de los casos. También pueden observarse síndromes paraneoplásicos
endoscopia como método de prevención de cáncer gástrico temprano en pacientes con dispepsia
no investigada a cualquier edad, si tienen signos y síntomas de alarma (Gómez, Rivero, Ruiz et
al, 2015).
Los tumores de antro y cardias pueden aparecer como plenitud posprandial y vómitos o
con disfagia, respectivamente. Un síndrome de seudoacalasia puede ocurrir por infiltración local
del plexo de Auerbach; por ello el cáncer gástrico debe considerarse en el diagnóstico diferencial
alteración de las proteínas por la desnutrición crónica (Torres et al., 2010). Por ello, la anemia de
causa no aparente en un adulto, debe obligar a realizar endoscopía digestiva alta y baja para
japonesa para el estudio del cáncer gástrico, persiste hasta nuestros días y se utiliza en la práctica
existen dos formas microscópicas distinguibles: la intestinal y la difusa, con una frecuencia del
La forma intestinal o clásica, suele localizarse en el antro y tiende a ser ulcerada. En esta,
las células adoptan formas de las glándulas gástricas, se presenta mayor asociación con factores
pylori (Merino et al., 2009) que es el desencadenante inicial de una inflamación crónica que
propicia el desarrollo escalonado desde un epitelio normal a adenoma y carcinoma, cuyo pasos
serían: mucosa normal, inflamación crónica y gastritis atrófica, metaplasia intestinal, displasia y
gástrico, es más indiferenciada, con debut a edades más tempranas y no se conoce hasta ahora
que tenga una progresión histopatológica similar a la forma intestinal pero se sabe que está
asociada a peor pronóstico (García C., 2013). Se caracteriza por la ausencia de formación de
Entre los factores de mal pronóstico por patología, se destacan los siguientes: células en
Clásicamente la cirugía era la alternativa disponible para intentar curar la enfermedad. En los
últimos años han emergido la endoscopía y la laparoscopía como alternativas válidas de manejo
No obstante, en ocasiones hay un rechazo del tratamiento adyuvante por parte del
paciente, sobre todo cuando se trata de quimioterapia, dados sus efectos secundarios que tienden
a generar disconfort y preocupación. Así por ejemplo, las náuseas y los vómitos que se producen
LOPEZ, 2014).
La cirugía conserva el papel primario en toda enfermedad neoplásica del estómago, para
controlar la enfermedad, cuya curación solo es posible cuando esta es diagnosticada precozmente
y la resección es radical (Aiello, Colombatti, Figueroa, Mateus, & Guerra, 2003). Para algunos
autores es la única opción terapéutica eficaz y por tanto debe aplicarse a la mayoría de los
El tratamiento del cáncer gástrico siempre será quirúrgico, ya sea con fines curativos o
paliativos, pues este tumor, al igual que los localizados en el resto del tracto digestivo, dejados a
por inanición. El tratamiento quirúrgico puede ser receptivo o derivativo, este último, paliativo, y
significativamente mayores que en los pacientes que no se les efectúa tratamiento quirúrgico
gástrica, bien sea parcial o total, con linfadenectomía que se puede extender hasta D1 o D2 (Es
decir, hasta la extracción de todos los ganglios linfáticos perigástricos o inclusive las ramas del
tronco celíaco: arteria hepática, esplénica y arteria gástrica izquierda) (Ojeda & LOPEZ, 2014).
Se recomienda vigilancia endoscópica anual en pacientes con displasia de bajo grado sin
lesión definida, pero si se encuentra una lesión definida se sugiere resección para estudio
histológico. En pacientes con displasia de alto grado se sugiere manejo como si tuvieran cáncer
extensa (cuando se ubica en más de 1 sitio) y si se confirma, deben controlarse cada 3 años. Se
recomienda que una vez el paciente con cáncer gástrico temprano sea manejado
endoscópicamente, debe realizarse un mapeo cada 3-6 meses por 1 a 2 años, luego cada 6 a 12
meses por 3 a 5 años, y luego anualmente (Gómez, Rivero, Ruiz et al, 2015).
Conclusión:
Irónicamente, en una época en que más personas se curan de cáncer, menos médicos
estado de remisión.
punto de referencia que se utiliza ampliamente (estar vivo cinco años después del diagnóstico) no
contarlo. Otros al contrario creen que se han incorporado a un club al que no quieren pertenecer:
Cura es una palabra con un significado emocional y médico sobre el que existen pocas
coincidencias.
Para muchas personas significa que el cáncer se ha ido y no regresará. Algunos tipos de
cáncer (ciertos linfomas o leucemias) nunca se retiran por completo, sino que son controlados
para que no vuelvan a amenazar la vida de los pacientes. Algunos sostienen que se trata de una
Otros tipos de cáncer dan la impresión de haberse retirado (no se encuentran más señales
a través de exámenes sofisticados y delicados) pero pueden reaparecer muchos años después lo
que indica que los pacientes no se habían curado. El cáncer de seno es uno de los que se
"¿Qué es lo que realmente significa 'curar'?" ¿Significa que no hay más células
cancerígenas de ese cáncer en el cuerpo, o significa que en este momento en particular sólo
Frente a este término hay mucha controversia. Lo cierto del caso es que: según un artículo
-El pronóstico para los pacientes con cáncer generalmente mejora con cada año
población general deja de ocurrir dentro de 10 años después del diagnóstico para los
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Ya pasó la etapa de peligro y su pronóstico según los reportes de los últimos exámenes
complementarios es bastante favorable: pasó de una gastritis crónica levemente activa registrada
en septiembre de 2016, a una gastritis crónica no activa en mayo de 2017 sin signos de atrofia,
metaplasia ni displasia. El manejo expectante que recibe se ocupa de mantener controlados los
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