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Es la nación más extensa del continente. Los recursos naturales del interior y los 8.000 kilómetros de costas son
sus grandes bazas en el campo turístico. El 93% de los 8´5 millones de kilómetros cuadrados de Brasil se ubican
en el hemisferio sur, lo que supone que las estaciones son las opuestas a Europa y Norteamérica, condicionando
en parte el uso del espacio turístico brasileño por parte de estos mercados.
La amplitud territorial dificulta los desplazamientos por carretera, por eso el avión se posiciona como el medio
más eficaz para desplazarse entre los destinos más frecuentados por los viajeros internacionales. Por esta razón,
las compañías Varig y VASP ofertan a precios reducidos, mediante el sistema de cupones o pases, los trayectos
internos. Sao Paulo y Río de Janeiro son las puertas de entrada a Brasil para la mayor parte de los turistas no
sudamericanos.
Brasil tiene fronteras con todos los países de América del Sur, excepto Chile. Su capital nacional es Brasilia, que
sustituyó a Río de Janeiro en 1960.
Fortaleza. Dispone de buenas playas en los alrededores, muy calmadas y con mucha tranquilidad,
playas como Jericoacoara.
Recife. La capital del Estado de Pernambuco, se le conoce como la Venecia de Brasil. Atrae a un turismo
de sol y playa.
Salvador de Bahía. Fue hasta 1763 capital de Brasil. Cuenta con inmensas playas como Barra, con el
faro que guiaba a la flota portuguesa hasta sus costas. Es una de las ciudades coloniales más impresionantes
del continente con sus calles plagadas de iglesias y palacios portugueses del siglo XVIII.
o Brasilia. La nueva capital del país, situada en el centro-sur de Brasil, responde a un intento del gobierno
a favorecer el doblamiento del interior. La Catedral de Brasilia está hecha de hormigón, y aparenta con su techo
de vidrio que se alzara y abriera hacia el cielo.
Iguazú. Envuelta por la selva, la mayor caída de aguas del continente forma el Parque Nacional de
Iguazú, que marca frontera con Argentina. En poblaciones próximas de ambas orillas se han establecido
numerosos establecimientos hoteleros y una nutrida oferta de empresas de ocio.
Turismo Etnográfico
El Carnaval es un momento para experimentar toda la alegría y creatividad del brasileño. Es considerada la
mayor manifestación popular del mundo y una de las mayores fiestas populares de Brasil. El Carnaval consigue
unir emoción y creatividad en un raro espectáculo de colores, sonidos y plasticidad. Durante cuatro días, que
varían entre los meses de febrero y marzo, la alegría de esta fiesta contagia a todos y se adueña de las calles,
de los clubes y de los hoteles de norte a sur del país.
Desfile de las escuelas de samba de Río de Janeiro: La Avenida Marqués de Sapucaí es el escenario de la más
famosa fiesta de Carnaval del país. Aquí desfilan las Escuelas de Samba, grupos de personas que se reúnen
alrededor de un tema y crean músicas temáticas y disfraces, en un derroche de creatividad y alegría. Asistir al
desfile o comprar el disfraz para desfilar en una de las escuelas es una emoción sin igual.
Carlinhos Brown es el nombre artístico de uno de los más conocidos artistas de Brasil. Cantante, percusionista,
compositor, productor y agitador cultural brasileño. El punto definitivo para su conquista del universo musical
mundial fue la película de Fernando Trueba "El milagro de Candeal", ese estimable documental sobre la música
y la cultura de Salvador de Bahía y los proyectos sociales que Brown lleva desarrollando años en la favela de
Candeal. Por todo esto, su música es sinónimo de fiesta, de diversión, porque considera que la alegría hace a
todo el mundo igual, al rico y al pobre. Pero por encima de todo, su música es ejemplo de solidaridad, de
compromiso, de ayuda. Pocos artistas pueden presumir del compromiso que ha demostrado Carlinhos Brown
con la comunidad (el barrio) donde nació, creció y forjó su persona, Candeal.
Turismo Gastronómico
Las influencias indígenas, africanas y portuguesas han hecho de la gastronomía de Brasil una de las más ricas y
variadas del mundo. La cocina de Brasil es muy regionalizada, por lo que cada zona posee sus propios platos
típicos que, a veces, son desconocidos de una región a otra debido a su gran extensión territorial: Barbacoa
(Churrasco), Feijoada (Cocido de Frijoles). En cuanto a las bebidas brasileñas, el guaraná es la más famosa sin
alcohol y la caipirinha con alcohol, además del café que muy importante en Brasil.