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Ciclo del capital

Ciclo del capital. La producción y


la circulación no son esferas
autónomas e independientes, sino un todo único interrelacionado, en el que el papel
determinante corresponde a la producción. La economía política burguesa considera la esfera
de la circulación como una esfera completamente autónoma, independiente de la producción,
que se rige por sus propias leyes. Con tal enfoque desaparece toda posibilidad de comprender
las particularidades específicas de la circulación del capital. El camino vital del capital; no se
circunscribe a la esfera de la producción, sino que abarca también la esfera de la circulación.

Reproducción y circulación del capital

Todo proceso de valorización del capital está ineludiblemente vinculado a la esfera de la


circulación y es inconcebible sin ella. Para descubrir las leyes del movimiento y crecimiento del
capital es preciso complementar el análisis del proceso de producción con el análisis del
proceso de circulación.

La circulación que constituye el eslabón de enlace entre la producción y el consumo, tiene un


doble carácter: primero, se realiza el paso de los valores de uso; segundo se realiza el cambio
de las formas de valor. Su rasgo característico consiste en que aquí no se crea valor, como
sucede en el proceso de producción, sino que solamente cambia su forma: de la mercantil pasa
a la monetaria y viceversa.

En la esfera de la circulación existen dos tipos de cambio de las forma del valor distinto por
principios. El primer tipo, que se caracteriza por la fórmula M – D – M, es inherente a la
producción mercantil simple y se denomina circulación mercantil simple. El segundo tipo que
se expresa por la fórmula D – M – D’ es característico del capitalismo y se denomina circulación
del capital.

FASES DEL MOVIMIENTO DEL CAPITAL

En el proceso de valorización, todo capital individual pasa por tres fases consecutivas, que
abarcan la esfera de la producción y la esfera de la circulación y adopta tres formas
funcionales.

Primera fase: El capitalista compra en el mercado las mercancías necesarias para el consumo
productivo: los medios de producción y la fuerza de trabajo. Su capital que se encontraba en
forma monetaria, toma la forma de capital productivo. Después de eso, cesa temporalmente el
proceso de circulación del valor del capital. Comienza la segunda fase, el proceso de
producción.

Capital monetario

Segunda fase: en el proceso de producción sobre la base de la explotación del trabajo


asalariado, el valor del capital crece y sufre simultáneamente una nueva metamorfosis: de
capital productivo se transforma en capital mercantil. Las mercancías creadas en el proceso de
producción contienen plusvalía.

Capital productivo
Tercera fase: el capitalista regresa de nuevo al mercado, en el que vende las mercancías
producidas. Su capital, pasa otra vez de la forma mercantil a la forma monetaria, realizando el
acto M’- D’, donde D’ significa el capital monetario anticipado originaria mente con el
incremento de la plusvalía. El capital vuelve a adquirir la forma con que empezó su
movimiento, pero ahora el capitalista dispone de una suma mayor.

Capital mercantil

Al transitar las tres fases, el capital realiza un movimiento, específico circular. Llega al final a la
misma forma con que empezó el movimiento. Marx llamó a tal movimiento ciclo del capital,
que puede representarse del siguiente modo.

Ciclo del capital

La primera y la tercera fase se refieren a la esfera de la circulación, y la segunda a la esfera de


la producción. El proceso de creación de plusvalía se realiza en la segunda fase, en el proceso
de producción. Por ello, la transformación del capital de forma productiva en mercantil fue
denominada por Marx metamorfosis real del capital a diferencia de las metamorfosis formales,
que se realizan en la esfera de la circulación y en las que sólo tiene lugar el simple cambio de
las formas del capital, pero no su incremento.

En el curso de su movimiento, el capital adopta y abandona sucesivamente las tres formas: de


capital monetario, de productivo y de mercantil. Al hallarse en cada una de las tres formas,
el capital cumple la función correspondiente y por ello esas formas se denominan formas
funcionales del capital.

FORMAS FUNCIONALES DEL CAPITAL

Capital monetario

Todo nuevo capital comienza su movimiento en forma de cierta suma de dinero. Como todo
dinero, el capital monetario es utilizado en el mercado para comprar mercancías, realizando el
acto corriente de la circulación mercantil D – M, y su propietario el capitalista, aparece como
un comprador cualquiera de mercancías. Pese a la semejanza exterior y a ciertos rasgos
comunes, el movimiento del capital monetario se diferencia del movimiento del dinero.
Primero, el comprador invierte el dinero en el acto D – M, pero ya no lo rembolsa. En lugar
del dinero el comprador adquiere la mercancía que consume. En este acto no se invierte el
capital monetario, solamente se anticipa, ya que vuelve nuevamente al capitalista transcurrido
cierto tiempo. Segundo, y lo más importante, el dinero, que es el equivalente universal, puede
ser empleado en el mercado para comprar cualquier clase de mercancías con el valor de
uso que sea, mientras que el capital monetario se emplea para comprar determinados tipos de
mercancías con un valor de uso determinado y, por tanto, tiene una finalidad específicamente
determinada.

Tiene importancia primordial y decisiva el acto D – T. en ese momento compra


una mercancía especial, en el proceso de cuyo consumo se crea un valor mayor que aquel
representa. El acto D – T es un acto específico de la circulación del capital, ya que bajo
el capitalismo la fuerza de trabajo se convierte en mercancía. Precisamente la compra de la
fuerza de trabajo transforma el dinero corriente en capital monetario.
Para lograr un consumo productivo de la fuerza de trabajo, el capitalista debe comprar a la vez
los medios de producción necesarios. Su cantidad debe ser suficiente para que la fuerza de
trabajo funcione durante el tiempo necesario y el tiempo adicional.

El capital monetario no realiza en la esfera de la circulación el cato corriente D – M. su función


consiste en realizar la unificación de las condiciones materiales y personales de la producción y
preparar con ello el proceso de producción de plusvalía.

El capital monetario expresa las relaciones entre dos clases distintas, una de las cuales aparece
como propietaria de los medios de producción y la otra está privada de esos medios y sólo
aparece como poseedora de su fuerza de trabajo. Por la forma, el capitalista y el obrero se
encuentran frente a frente como corrientes compradores y vendedores. En realidad, es un
nuevo tipo de compradores y vendedores que se forma sobre la base de unas nuevas
relaciones de producción, las relaciones de producción capitalistas.

Capital productivo

Después de haber adquiridos los elementos materiales de la producción, su capital abandona


la forma monetaria y adopta la forma de capital productivo.

Se denomina productivo porque primero, está ocupado en la esfera de la producción, a


diferencia del capital monetario y el capital mercantil, que se mueven en la esfera de la
circulación y representan por eso el capital de circulación; segundo, y esto es lo principal, su
función consiste en la creación de plusvalía, en tanto que el capital monetario y el capital
mercantil cumplen la función de cambio de las formas del valor y la plusvalía. Al capitalismo le
es característico la unificación de la fuerza de trabajo con los medios de producción mediante
los actos de compra de la fuerza de trabajo y los medios de producción que aparecen como
mercancías compradas por el capitalista para el consumo productivo. Esas mercancías se
convierten en portadores materiales del capital anticipado. Los medios de producción
aparecen como portadores materiales del capital constante, y la fuerza de trabajo, como
portadora material del capital variable.

En el proceso de producción capitalista se crean nuevas mercancías, cuyo valor es mayor que
el capital anticipado. El capital productivo se convierte en capital mercantil.

Capital mercantil

El capital mercantil aparece en forma de determinada suma de mercancías producidas en las


empresas capitalistas y destinadas a la venta. Su valor no sólo comprende el valor anticipado
originalmente, igual a c + v, sino también la plusvalía p. la mercancía se convierte en capital
mercantil porque es producida al modo capitalista y contiene la plusvalía como resultado de la
explotación del trabajo asalariado.

El capital mercantil aparece, de una parte como una de las formas de existencia del valor
anticipado, y de otra parte, como la forma primera en que surge la plusvalía creada. En el
capital mercantil estas dos partes están fundidas inseparablemente.

La finalidad de la producción capitalista es la apropiación de plusvalía. Se crea está en el


proceso de la producción, pero la forma en que sale de proceso de producción descarta por lo
general su empleo directo por el capitalista dado, tanto para el consumo personal como para
el consumo productivo. Para que la plusvalía pueda ser utilizada por el capitalista debe
separarse del capital anticipado y adquirir una nueva forma, es decir, transformarse de la
forma mercantil en monetaria. Esto se logra mediante la realización del capital mercantil en la
esfera de la circulación.

La función de toda mercancía es la realización del valor. Y el capital originario tiene como
función realizar la plusvalía. Después de la realización en el acto M’- D’, está dos partes que
antes estaban fundidas, se separan, adquieren existencia independiente. M’ que es igual a M +
m, se transforma en D’, que es igual a D +d, donde M y D son la magnitud del capital
anticipado, y m y d son la plusvalía.

El capital inicial D, al separarse de la plusvalía d, comienza un nuevo ciclo en concepto de


capital monetario. Pero la plusvalía d puede ser empleada de dos modos diferentes: o bien en
la ampliación de la producción o bien en la satisfacción de las necesidades personales del
capitalista, y en este caso aparece como dinero corriente, que efectúa su movimiento sobre la
base de las leyes de la circulación mercantil simple. La función de toda mercancía es la
realización del valor y el capital mercantil cumpla la función de realización de la plusvalía.
Aparentemente puede creerse que estas funciones son las mismas, ya que no es posible
realizar la plusvalía sin realizar el valor. Por cuanto el capital mercantil aparece como
mercancía, cumple sus funciones también en la esfera de la circulación. A su vez, la realización
de la plusvalía presupone la superación de nuevas dificultades, que no surgen al realizar el
valor de la mercancía.

En la circulación mercantil simple, cada productor una vez realizado el valor de sus mercancías
podía demandar mercancías cuyo valor fuera igual al valor de las vendidas por él para
satisfacer las necesidades personales y productivas. En tal caso se corresponden más o menos
la oferta y la demanda de las mercancías. En el movimiento del capital se forma de manera
diferente la correlación de la oferta y la demanda.

En la primera fase del movimiento, todo capital presenta en el mercado una demanda
equivalente a la suma c + v. parte de esta demanda (c) es presentada al mercado de
mercancías, y la otra (v), al mercado de trabajo. En la tercera fase todo capital individual lanza
al mercado mercancías por la suma general del valor de c + v + p, con la particularidad de que
toda esta masa mercantil no vaya a dos mercados, sino a uno. La oferta de todo capital
individual en el mercado en diversas etapas supera a su demanda en la magnitud de
la plusvalía.

Para que p pueda ser empleada en la ampliación de la producción, debe tener suficiente
magnitud, y esto se logra en unos cuantos ciclos y no en uno sólo. Mientras p no alcanza la
magnitud debida; se va acumulando, pero todavía no aparece en el mercado. Resulta que
después de cada ciclo el capital individual lanza al mercado mercancías por la suma c + v + p,
pero no puede en ese período presentar la correspondiente demanda. Si se supone que
después de cada ciclo el capitalista destina la plusvalía para satisfacer necesidades personales,
y no en concepto de capital, esto significa que su empresa no tiene la capacidad de competir y
no puede efectuar la reproducción ampliada, lo que contradice las leyes internas y la finalidad
de la producción capitalista.

Las contradicciones de la realización del capital mercantil no pueden tener solución en los
marcos del ciclo del capital individual. Se logra superarlas en el curso de la reproducción de
todo el capital social.

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