todavia resulta desconcertante. Por ejemplo, zquién decidig g
imagen (ola de Livia) oficial? :Qué clase de debates, ycon quien,
impulsaron el nuevo proyecto de servicio y pensiones del ejére,
to? dHasta qué punto haber vivido tanto tiempo fue euestion de
suerte?
Sin embargo, el amplio marco que instaur6 para convertinse
en emperador duré mas de doscientos afios; 0, dicho de otro
modo, durante cl resto del periodo que abarea el pr
Todos y cada uno de los emperadores que irem
fueron 0, por lo menos, personificaron a Augusto. Utilizaron e|
nombre de Augusto entre sus titulos les y heredaron su
an re pas6 de un empera-
dor a otro. Pero ya no era
Alo largo de las décadas, el dibujo cambié: primero se empled un
retrato de Alejandro Magno y después u n otras
Palabras, la cabeza de Augusto y sus rasgos caracteristicos se con-
virtieron en la firma de cada uno de sus sucesores. Cualesquiera
vicios 0 antecedentes,
rera cual fuese el nombre por el que los conoeemos, todos fue
n mejores o peores reencamaciones de Augusto, que act
dentro del modelo de autocracia que él
problemas que dejé sin resolver.
A continuacién dirigitemos nuestra atencién
algunos de los
problemas a los que se enfrenté esta serie de nuevos Augustos,
que se inician
n otra muerte,
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Capitulo 10
Catorce emperadores
Los hombres que ocuparon el trono
E124 de enero del afo 41 d. C., casi treinta aitos después de que
muriera en su lecho el primer Augusto y casi ochenta y cinco des-
pués de la muerte de Julio Gésar, hubo otto asesinato violento en
Roma. Bsta vez la victima fue el emperador Cayo —cuyo nom-
bre completo era Cayo Julio César Germénico— que cuatro afios
antes habfa sucedido en el trono a su tio abuclo, el anciano Tibe-
rio. Fue el segundo de una serie de catorce emperadores, sin
contar a tres aspirantes efimeros en un breve periodo de guerra
civil transcurrido en los afios 68 y 69 d. C., que gobernaron Roma
durante los casi ciento ochenta afios que van desde la muerte de
Augusto hasta la del emperador Gémodo, asesiiado en 192 d. C.
Entre ellos figuran algunos de los nombres més sonoros de la
toria de Roma: Claudio, que sustituyé a Cayo y que desempeti
tun papel protagonista como erudito y astuto observador de las
icas palaciegas en las novelas de Robert Graves, Yo, Clandio
yy Claudio el dios; Ner6n, con su reputaci6n de asesino de la fami
lia, taftedor de tira, perseguidor de eristianos y pitsmano; Marco
Aurelio, el