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Unidad 3: Fase 5 – Toma decisiones y conclusiones

Sexualidad y Genero

Estudiantes:

Erwin Richard Viana Contreras Código


Luis Alberto Tapia Código:
Adriana Patricia Palta Código
Carolina Hurtado Código: 1061700620
Mary Albán Código 25634995

Código: 403014_64

Tutor: Edixon Félix Bermúdez

Universidad Nacional Abierta y a Distancia – UNAD


Psicología
Sexualidad y Género
27 de mayo del 2018
Introducción

La construcción de la fase 5 , se lleva a cabo mediante los planteamientos


teóricos de la unidad 3 y bajo el aprendizaje adquirido a lo largo del curso de
Sexualidad y Género , mediante un análisis e identificación del rol de la mujer
en la sociedad, partiendo de una contextualización desde la familia como el
más importante entorno de socialización y formación de conductas hacia sus
entornos más próximos en su ciclo de vida, en el que la discriminación parte
de factores que obstaculizan se posicionamiento bajo la falta de garantía del
ejercicio de sus derechos e inclusión social desde el mismo estado y sociedad
civil.

Comprendiendo en este sentido que este tipo de desigualdad de género


involucra aspectos psicológicos, transformaciones culturales, en el que su
participación y reconocimiento es una lucha constante a nivel mundial, para
que la mujer cuente con autonomía y participación en escenarios de poder,
derechos sexuales y reproductivos. De esta manera la educación se convierte
en una herramienta importante para mitigar estos hechos de una generación
a otra, para lograr una transformación de igualdad real en la restauración de
sus derechos de acuerdo a las normativas vigentes.

Finalmente, se adquieren conocimientos teóricos sobre la sexualidad y el


género desde la parte biopsicosocial, lo que nos permite realizar reflexiones
sobre la influencia de estas temáticas en el desarrollo de los grupos humanos
y las comunidades, aspecto fundamental para nuestra labor como futuros
psicólogos.

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Conclusiones

Estudiante Erwin Richard Viana Contreras.

1. Desde organizaciones como la ONU, se ha buscado no solo la igualdad


entre hombres y mujeres desde 1945, sino trabajar por la igualdad de
géneros en busca de un mundo tranquilo, próspero y sostenible.

Construir un mundo de igualdad entre hombres y mujeres a nivel laboral


depende de las oportunidades y actividades por parte de los Estados y la
sociedad en general, la igualdad entre hombres y mujeres es buscada en todos
los campos a nivel social, pero especialmente en el laboral. Las mujeres
tienen igual capacidad que los hombres, por lo tanto, se quiere que sus
trabajos contribuyan a formar una sociedad decente y que ellas reciban la
misma asignación salarial.

De esta manera tanto hombres como mujeres deben tener los mismos
derechos y oportunidades, todo un compromiso a nivel Internacional donde
se trabajará por la conciliación entre la vida laboral y los trabajos del hogar
de forma equitativa.

Otro aspecto de gran relevancia por parte de los gobiernos es crear


actividades de prevención y lucha contra la discriminación y violencia hacia
las mujeres y niñas que se vive actualmente en todo el planeta. Se entiende
así que la discriminación de la mujer en el trabajo estaría violando derechos
humanos, desaprovecha el talento de muchas mujeres y limita las
posibilidades de desarrollo personal. Por esto, las actividades de prevención
deben estar encaminadas a buscar personas que desde sus trabajos promueva
la igualdad de género, igualdad de trato, igualdad de contratación, igualdad
de remuneración, igualdad en responsabilidades familiares, eliminar en acoso
laboral basado en el género, el acoso sexual, la discriminación por maternidad.
De esta manera se estaría trabajando no solo por la igualdad sino por el
respeto de la dignidad de las personas, acabando con la pobreza y
contribuyendo al desarrollo de las naciones.

2. La educación impartida a niños, jóvenes y adultos a nivel mundial debe


tener como principio fundamental, el poder servir como instrumento para
lograr la igualdad entre hombres y mujeres, y de igual manera luchar contra
la discriminación y violencia hacia las mujeres y niñas.

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Desde una nueva educación se debe trabajar por eliminar la discriminación
contra la mujer, aspectos que se ven reflejados en muchos lugares al no poder
las mujeres vestirse a su gusto, no poder conducir, no acceder a trabajos
nocturnos, no tener voz ni voto en un tribunal, no poder elegir a su pareja, no
heredar bienes, entre otros.

Corresponde a la educación crear estrategias o tomar nuevas medidas que


generen la igualdad a nivel mundial y que estén encaminadas a buscar una
vida digna tanto a nivel personal como a nivel social:

“La educación, como un derecho fundamental, tiene que promover el


pensamiento, la autonomía, la aceptación y el respeto a las diferencias, la
imaginación y la creatividad para buscar alternativas orientadas a resolver
pacíficamente las dificultades que surgen en la convivencia personal y grupal,
una educación integradora, no excluyente. Morín (2001) la define como la
“fuerza del futuro” para lograr tanto la participación ciudadana en la vida
política, económica y cultural, como el tratamiento educativo de los problemas
generados en ella, como la discriminación y la violencia. Por consiguiente, “la
educación para todos durante toda la vida será el principal reto que deberá
abordar el siglo XXI” (Leyva, Juan - 2015).

En pleno siglo XXI las mujeres en su gran mayoría siguen asumiendo un


rol solamente doméstico, y cuando trabajan lo hacen en roles que no son
valorados al igual que el de los hombres. La gran mayoría delas mujeres se
enfrentan al rechazo tanto de la cultura, la política y la economía. Por más
leyes que haya u organismos que luchen por la igualdad de género, en el
mundo se siguen viendo la discriminación y l falta de corresponsabilidad entre
hombres y mujeres.

3. La educación de hoy en día debe ser reformada de tal manera que los
profesionales, en especial docentes (en nuestro caso psicólogos), por medio
de sus enseñanzas puedan influir en la realidad de la sociedad. Una de las
grandes problemáticas de la sociedad es la discriminación y violencia a
mujeres y niñas.

Es por esto que se deben reformar los planes de estudio, donde su enfoque
principal tenga como principios los temas de:

- Educar para la igualdad


- Violencia de género y familiar.

Es poder alcanzar cambios en la pedagogía de colegios e instituciones


universitarias, donde los jóvenes sean preparados desde un contexto más

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laboral y no desde una simple enseñanza que muchas veces no tiene salida
en el mercado laboral. Es poder enfocar la educación hacia la igualdad de los
seres humanos, en especial la de género y no discriminación.

Así como se trabaja hoy en día la educación en muchas instituciones desde


las competencias a nivel laboral: Saber y saber hacer, también debe ser
incluido el saber para convivir, donde los profesionales tengan como principio
el educar para contribuir a una sociedad más equitativa y justa.

Estudiante Luis Alberto Tapia.

1. DERECHOS HUMANOS Y DE GÉNERO: Desde organizaciones como la ONU,


se ha buscado no solo la igualdad entre hombres y mujeres desde 1945, sino
trabajar por la igualdad de géneros en busca de un mundo tranquilo, próspero
y sostenible.
Construir un mundo de igualdad entre hombres y mujeres a nivel laboral
depende de las oportunidades y actividades por parte de los Estados y la
sociedad en general, la igualdad entre hombres y mujeres es buscada en todos
los campos a nivel social, pero especialmente en el laboral. Las mujeres
tienen igual capacidad que los hombres, por lo tanto, se quiere que sus
trabajos contribuyan a formar una sociedad decente y que ellas reciban la
misma asignación salarial.
De esta manera tanto hombres como mujeres deben tener los mismos
derechos y oportunidades, todo un compromiso a nivel Internacional donde
se trabajará por la conciliación entre la vida laboral y los trabajos del hogar
de forma equitativa.
Otro aspecto de gran relevancia por parte de los gobiernos es crear
actividades de prevención y lucha, la discriminación y violencia hacia las
mujeres y niñas que se vive actualmente en todo el planeta. Se entiende así
que la discriminación de la mujer en el trabajo estaría violando derechos
humanos, desaprovechando el talento de muchas mujeres y limita las
posibilidades de su desarrollo personal. Por esto, las actividades de prevención
deben estar encaminadas a buscar personas que desde sus trabajos promueva
la igualdad de género, igualdad de trato, igualdad de contratación, igualdad
de remuneración, igualdad en responsabilidades familiares, eliminar en acoso
laboral basado en el género, el acoso sexual, la discriminación por
maternidad. De esta manera se estaría trabajando no solo por la igualdad
sino por el respeto de la dignidad de las personas, acabando con la pobreza y
contribuyendo al desarrollo de las naciones.

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2. EDUCACION Y GÉNERO: Debemos plantear qué tipo de educación es
necesaria para promover cambios en la sociedad y en las instituciones
(jurídicas, sanitarias, educativas, etc.) así como el cumplimiento de los
Derechos Humanos y, por consiguiente, la eliminación de todo tipo de
discriminación y de violencia contra las mujeres y las niñas de todo el mundo.
La educación es un derecho fundamental, tiene que promover el
pensamiento, la autonomía, la aceptación y el respeto a las diferencias, la
imaginación y la creatividad para buscar alternativas orientadas a resolver
pacíficamente las dificultades que surgen en la convivencia personal y grupal,
una educación integradora, no excluyente.
Debemos lograr que la educación sea la fuerza del futuro tanto en el ámbito
político, económico y cultural y de esta manera lograr un tratamiento
educativo encaminado a resolver los problemas de discriminación y la
violencia. La educación debe ser el eje principal y un reto para el siglo XXI, y
ser el objetivo principal para que cada persona lleve las riendas de su destino,
la educación del futuro deberá ser encaminada a las clases más vulnerables y
desfavorecidas los cuales no cuentan con los medios ni recursos debido a las
circunstancias en que se encuentran y por ende no pueden acceder a la
educación, a la cual todos tenemos derecho.
Actualmente necesitamos una educación superadora del adoctrinamiento,
que dinamice la capacidad de analizar, de contrastar, de pensar y de tomar
decisiones de acuerdo con los principios recogidos en la Declaración Universal
de los Derechos Humanos.
Para ello, se requieren políticas públicas y sociales que integren los
acuerdos de los organismos internacionales y establezcan estrategias
concretas y específicas en toda la estructura política y jurídica de cada país y
que los discursos de nuestros gobernantes se conviertan en acciones y se
implementen en la vida de las personas y no se las lleve el viento como vemos
en nuestro tiempo.
En encuestas realizadas en diferentes entes educativos de España en su
totalidad un 99% consideran que es necesaria la formación: para la igualdad
entre hombres y mujeres, la prevención y detección de la violencia de género
y la detección precoz de la violencia en el ámbito familiar, especialmente sobre
la mujer y los hijos e hijas. E indican la importancia de la formación transversal
en género en las asignaturas de la carrera (94%). Existe unanimidad en
considerar que esta formación es necesaria para poder desempeñar su labor
profesional.

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La equidad de género en las políticas educativas es una condición necesaria
para garantizar la inclusión de amplios sectores poblacionales que de otra
manera van a ver vulnerado su derecho a una educación de calidad. Podría
afirmarse que aunque son muchos los esfuerzos que han realizado los
sistemas educativos en este sentido todavía son necesarias acciones para
lograr la igualdad de género en educación.
Esta situación nos lleva a reflexionar sobre el papel que las diferentes
agencias socializadoras ejercen en la configuración de los imaginarios
asociados a los roles de género y a recordar que las formas en que son
transmitidos los valores de género son tanto conscientes como inconscientes.
El lenguaje, las acciones de la vida cotidiana, la ropa, el trabajo, las relaciones
familiares, les dan a las niñas y los niños los elementos para comportarse de
acuerdo con el género asignado y para elaborar su autoimagen. Así, la
cotidianidad de la familia y la escuela marcan de una manera sutil estereotipos
que dificultan acciones de política con la consiguiente permanencia de
inequidad.
Hoy en día en nuestro país se está experimentado grandes cambios sociales,
culturales, políticos y económicos en las últimas décadas. Hay una creciente
libertad política, desarrollo de la economía, mayor acceso a bienes de consumo
y a diversas tecnologías, cambios en la estructura de las familias y mayor
participación femenina en el ámbito laboral y educacional. También podemos
mirar muchas mujeres que solo asumen un rol de domesticas Y cuando
desarrollan otras actividades no son valoradas al igual que a los hombres la
mayoría de mujeres se enfrentan a distintos rechazos tanto en lo cultural, lo
político y económico, creo que llego la hora de ponerle fin a esta situación.

3. LA FORMACIÓN EN GÉNERO EN EL GRADO DE EDUCACIÓN SOCIAL: Una


distinción importante a realizar en este terreno educativo, es la diferenciación
entre paridad e igualdad de género, ya que estos términos no significan lo
mismo en educación. El primero, es un concepto puramente numérico, que
implica tener la misma proporción de niños y de niñas en el sistema educativo.
El segundo, más complicado de delimitar, significa tener a alumnos y alumnas
disfrutando de las mismas ventajas en términos de acceso y tratamiento
educacional, favoreciendo la igualdad de oportunidades de manera
permanente.

La tarea educativa debería ser considerada como una de las actividades


humanas con mayor trascendencia e impacto en la sociedad. Además, está

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obligada a ofrecer una formación integral, libre y responsable, apta como
preparación real para la vida diaria y que pueda dar respuesta a las
necesidades de una sociedad en continuo desarrollo.
La educación, como derecho público, debería estar presidida por el principio
de la equidad. Para ello, las estrategias compensadoras tendrían que ser
reforzadas para conseguir una mayor igualdad y el desarrollo pleno e integral
del alumnado, sin renunciar a la calidad educativa. Este principio debería estar
garantizado en todo momento por un sistema educativo que fomente una
escuela inclusiva que cuente con los medios y recursos necesarios para hacer
efectiva las finalidades establecidas.
Una distinción importante a realizar en este terreno educativo, es la
diferenciación entre paridad e igualdad de género, ya que estos términos no
significan lo mismo en educación. El primero, es un concepto puramente
numérico, que implica tener la misma proporción de niños y de niñas en el
sistema educativo. El segundo, más complicado de delimitar, significa tener a
alumnos y alumnas disfrutando de las mismas ventajas en términos de acceso
y tratamiento educacional, favoreciendo la igualdad de oportunidades de
manera permanente.
Las personas asumen la búsqueda de un contexto compatible que les
permita ejercer sus habilidades y destrezas, expresar sus aptitudes y valores
y diseñar su proyecto de vida adulta. Hoy en día, se debería buscar más la
opción de feminizar a la sociedad haciendo pública la cultura femenina (no
masculinizar a las mujeres), tarea común de toda la sociedad en su conjunto.
El mundo exterior y social generalmente ha sido hasta ahora de los
hombres que han atribuido y difundido identidades femeninas parciales, falsas
o desagradables para las mujeres. Además, ellas cuentan con menos modelos
femeninos con los que identificarse, experiencias de socialización distintas,
discrepancias en cuanto a expectativas, diferentes valores y roles sociales,
etc.

Estudiante Adriana Patricia Palta.

1. La Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) afirma que


“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y,
dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente
los unos con los otros” (Artículo 1). La declaración utiliza un lenguaje inclusivo
siendo coherente con lo que promulga, sin embargo en la cotidianidad la
subordinación de las mujeres aún no se ha superado, siendo necesarios volver

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a reiterar los derechos de la mujer a vivir libre de violencia (Resolución
64/289 de 2010) sin embargo las políticas públicas aun no logran posicionar
la totalidad de los derechos de las mujeres, sin embargo han dejado
vislumbrar los distintos tipos de violencia que las afecta, es de destacar que
la OMS en el 2013 señala que cerca del 35% de todas las mujeres del mundo
han experimentado hechos de violencia, siendo la violencia de pareja el que
afecta al 30% de las mujeres en todo el mundo. Algo de destacar es que
viendo la necesidad de tomar conciencia sobre la violencia contra las mujeres
se ha llevado este dilema a la academia generando investigación y estrategias
para erradicarla.

2. Partiendo que el derecho a la educación está contenido en la Declaración


Universal de los Derechos Humanos, se ha visto la necesidad de tomarlo como
un instrumento fundamental para conseguir la igualdad y luchar contra todo
tipo de discriminación y violencia contra las mujeres y las niñas, como se
refleja en los informes internacionales y en las aportaciones de las
investigaciones, se insiste en que los países han de adoptar las medidas
necesarias para eliminar la discriminación a las mujeres y permitirles un
desarrollo integral y no excluyente.
La educación superior a de contribuir la concreción transversal de tres
objetivos generales: la dimensión social de la educación superior, la excelencia
y la internacionalización.
Esta Estrategia asume el carácter social de la universidad. Los contenidos que
en la educación superior a de constituir una idea de humanidad que mejore
los procesos productivos, de investigación e innovación con responsabilidad
social en igualdad de género y no discriminación.

3. Ante la preocupación por descubrir nuevas alternativas para evitar la


violencia de género las universidades españolas han ideado planes de estudio
para sensibilizar a las personas, el análisis de contenido toma en cuenta la
igualdad/desigualdad, Inclusión/exclusión. Violencia. Con ayuda de un
instrumento el cual fue analizado su confiablidad y validez arrojando un 0.85
(alfa de crombach) y una buena validez cualitativa con 18 expertos en materia
de género, la tasa de respuesta es de 11.8, la totalidad de los encuestados
(99%) consideran que es necesaria la formación: para la igualdad entre
hombres y mujeres, la prevención y detección de la violencia de género y la
detección precoz de la violencia en el ámbito familiar, especialmente sobre la
mujer y los hijos e hijas. Por otro lado, indican la importancia de la formación
transversal en género en las asignaturas de la carrera (94%). Existe
unanimidad en considerar que esta formación es necesaria para poder
desempeñar su labor profesional.
La totalidad de los encuestados (99%) consideran que es necesaria la
formación: para la igualdad entre hombres y mujeres, la prevención y
detección de la violencia de género y la detección precoz de la violencia en el

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ámbito familiar, especialmente sobre la mujer y los hijos e hijas. Por otro lado,
indican la importancia de la formación transversal en género en las
asignaturas de la carrera (94%). Existe unanimidad en considerar que esta
formación es necesaria para poder desempeñar su labor profesional, la
responsabilidad en la investigación y formación de profesionales competentes
para que puedan incidir en los diferentes campos del conocimiento, y
contribuir a la consecución de una sociedad más equitativa y justa.

Estudiante Carolina Hurtado.

1. De acuerdo con Leyva,J. (2015). Género, educación y convivencia.


Dykinson. “La situación de desigualdad que afecta a las mujeres y a la niña
es una preocupación de los organismos internacionales, por las consecuencias
que tienen en el desarrollo de las personas y de las sociedades, así como por
la violencia que genera sobre ellas, cuestiones que atentan contra los
Derechos Humanos”. p139.

En base a ello se puede inferir que la violencia contra la mujer y las


afectaciones emocionales, físicas y sociales han trascendido de los publico a
responsabilidad de los estados a nivel regional, nacional e internacional,
dándose en ese sentido la constitución de organizaciones que velan por su
bienestar y movimientos de mujeres que luchan por sus derechos en el que
se deje de lado el lenguaje sexista, igualdad de oportunidades, inclusión en
la educación; y frente a esta lucha generada a través de la historia aún se
encuentra presentes relaciones estructurales de desigualdad entre el hombre
y la mujer en todos los planos desde el hogar, educación y socialmente hasta
en casos tiende a llegar a la mortalidad. Haciéndose necesario la colaboración
del gobierno y la sociedad civil para el cambio de esta perspectiva que se hace
indiferente y se acrecienta en altos índices en la actualidad.

2. La violencia contra la mujeres sigue generando daños o sufrimientos de tipo


físico, sexual y psicológico para la mujeres, que se forjan a nivel privado y
público, no dimensionando en realidad cuando hechos como estos siguen
presentes, en que es importante como que el estado haga cumplir la
normativa contra quien genere este tipo de episodios con mayor rigurosidad,
y en que se empiece educar a la sociedad desde edades muy tempranas desde
la misma familia con núcleo principal , así como al interior de los planteles
educativos y demás entornos, para cambiar concepciones de desigualdad de
género y se generen procesos de inclusión de la mujer sin discriminar edad,
clase social y cultura, en el que el cumplimiento y reconocimiento de sus
derechos sea una realidad y no una simple normativa de estado .En el que De
acuerdo con el Informe sobre los Objetivos del Milenio (2013) y las

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Conclusiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer
(marzo de 2013) se evidencia la necesidad de un compromiso internacional
para poner fin a la permanencia de la discriminación respecto a las niñas y las
mujeres y la violencia contra las mujeres. p140

3. El estudio realizado por el Ministerio de Igualdad, junto a la Universidad


Complutense (2010, p. 39) pues sostiene que “las universidades no
contemplan la perspectiva de género de una forma transversal y, es más, en
su currículo apenas existen asignaturas en donde se refleje el quehacer de las
mujeres a lo largo de la historia, su aportación a la ciencia, etc. p141

Es importante mencionar que la educación es una vía importante para


erradicar la violencia hacia la mujer, siendo fundamental su implementación
en cada una de las fases escolares hasta llegar la universidad en la mujer se
le brinde proceso de inclusión en formación general, técnico y a nivel
profesional.

Por otra parte debe tenerse en cuenta el currículo educativo y la labor del
docente a cargo, en el que sean implementados esta temática para ir
formando a los futuros profesionales la promoción de pensamientos con
autonomía, aceptación, respeto a las diferencias , creatividad, capacidad de
resolución de conflictos y otro tipo de habilidades en que la desigualdad de
género no siga siendo una constante y en este sentido se logre formar un
mejor sociedad en cual al reconocimiento de igualdad del hombre y del mujer,
en que se generen procesos de detención y prevención de la violencia en
diferentes ámbitos de interacción. En el que al interior de estos espacios se
reproduzca y legitimase las relaciones sociales en el que se fomenten y
rescaten los avances sobre el género, para que en este sentido se eliminen
las desigualdades sobre los roles de género en sus estudiantes y estos a su
vez como futuros profesionales sean capaces y bajo autonomía trasladar estas
perspectivas como aporte a la sociedad que tanto lo necesita tanto en un nivel
jurídico, sanitario, educativo entre otros contextos. En el que se propenda
ante todo el cumplimiento de los derechos humanos, y eliminar en una gran
proporción la discriminación y violencia.

Estudiante Mary Albán.

1. En esta lectura partimos de la Declaración Universal de los Derechos


Humanos como marco y fundamento de la igualdad entre hombres y mujeres,
y de la lucha para superar las situaciones de discriminación y violencia sobre

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las mujeres y las niñas en todo el mundo, acto importante para la formación
de profesionales en el área de la salud y el componente social puesto que
desde tiempos atrás se ha venido luchando porque las mujeres tengan una
posición en la parte social, laboral y política. Se da a conocer los últimos
informes, que señalan la grave situación de las mujeres en el mundo, la
importancia de la educación en género y de la universidad, como institución a
la que le corresponde la formación de profesionales de la Educación Social,
también en género, de acuerdo con la legislación española vigente.

2. Da a conocer aspectos de la investigación realizada sobre la formación en


género del alumnado del Grado de Educación Social, de las universidades
españolas, también da a conocer sobre la formación universitaria de los
educadores y educadoras sociales como profesionales que tienen que dar
respuestas a las situaciones de desigualdad y violencia de género.

3. Es un material de lectura que da fe de cómo es necesario fortalecer la


autoestima en las mujeres para que se empoderen y logren valorarse como
tal así como exigir respeto y trato digno, porque de nada serviría implementar
diferentes actividades encaminadas a cambiar la mentalidad de los hombres
cuando en realidad las mujeres mismas no se quieren y no se valoran como
el ser importante que son. De igual forma esta lectura muestra como a través
de los tiempos se ha luchado con este flagelo y que no es algo que ha venido
afectando solo a Colombia sino que es a nivel de muchos países donde ocurre
la desigualdad de género. De este modo es importante Gestionar políticas
públicas, programas y estrategias encaminadas a fortalecer los valores en la
familia con el objetivo de fortalecer los lasos familiares los principios
encaminados a la protección de la mujer, el respeto del uno por el otro.
Articular con entidades locales para generar espacios de aprendizaje donde se
incentive el valor del ser humano, el derecho a la igualdad, el buen trato, y
la concientización de los jóvenes sobre la afectación que causa la violencia de
género y que desde sus inicios de la vida entiendan el valor del respeto para
con las mujeres y que las mujeres hagan valer ese valor de tal modo que se
contribuya a la construcción del tejido social.

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¿Cómo se puede trabajar desde la psicología para la paz en nuestro país,
teniendo en cuenta las situaciones de desigualdad y violencia de género que
existen?
La Organización de Naciones Unidas (ONU) desde 1945, ha trabajado para
que los países miembros se comprometieran en adoptar medidas para lograr
la igualdad entre hombres y mujeres. La situación de desigualdad que afecta
a las mujeres y niñas es una preocupación de los organismos internacionales,
por las consecuencias que tienen en el desarrollo de las personas y de las
sociedades, así como por la violencia que genera sobre ellas, cuestiones que
atentan contra los Derechos Humanos. Como indica Mayor Zaragoza (2001,
p. 149) “incluso en los casos en que la sociedad la reconoce como sujeto, la
mujer sigue siendo, la mayoría de las veces, una “libertad” P140.

En base a lo anterior y contextualizado a Colombia, un país en el que las


mujeres sufren episodios de violencia, no muy diferente las perspectivas con
otros países convirtiéndose en una crisis mundial bajo situaciones de abortos
forzados, violencia física y psicológica, abusos sexuales entre muchas otras
agresiones que pueden llegar a ser mortales, en que las mujeres se
encuentran en situaciones de desigualdad desde lo jurídico y lo social
acrecentándose en el día a día bajo episodios de normalidad. Y frente a esta
realidad se reconocen esfuerzos en cambiar esta perspectiva con algunos
avances que no son del hoy sino una construcción histórica bajo una deseada
igualdad e inclusión de la mujer.

Un campo donde se desempeña a cabalidad hoy en día la psicología es en


el de la educación. Una gran mayoría de instituciones educativas cuentan con
el servicio de orientación psicológica. De esta manera podemos aprovechar
uno de los espacios más importantes, ya que se pueden adelantar actividades
de tipo psicosocial encaminadas a promover la paz a partir de la desigualdad
y violencia de género existente en la comunidad, desde el trabajo con los niños
y jóvenes.

1. Inicialmente se puede hacer un trabajo encaminado al nuevo uso del


lenguaje donde las mujeres tengan una representación simbólica igual a la de
los hombres, un lenguaje que permita representar a hombres y mujeres por
igual para la construcción del género según los comportamientos asignados a
nivel social. De esta manera se busca eliminar aquel lenguaje que excluye a
la mujer, dejándola por debajo o sin reconocimiento frente al hombre (hombre
fuerte – mujer débil).

2. Generar principios de empoderamiento en las mujeres, para que desde la


escuela las niñas vean por igual las carreras o profesiones que culturalmente
están asignadas solo para hombres: aviación, ciencias, mecánica, gerencia de

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industrias, conducción vehículos de carga, entre otros. De esta forma se
asume que tanto hombres como mujeres pueden desempeñar los mismos
roles.

3. Crear actividades grupales con el fin de cambiar la mentalidad sobre la


violencia de género a nivel familiar, el acoso sexual en los lugares de trabajo,
el abuso sexual o violación a mujeres y niñas. Desde el colegio se crean las
bases para que a futuro la sociedad solicite la creación de leyes que asignen
penas más altas para estos delitos.

4. Realizar ejercicios donde se invite a los hombres a concientizar que las


actividades domésticas deben ser compartidas, padres y madres tienen la
misma obligación con respecto al cuidado de los hijos, aseo, alimentación,
bienestar en general.

5. Trabajar desde la psicología y para la paz de nuestro país en la prevención


a través de la educación y la socialización. Es decir, los niños y las niñas a
través de modelos escogen sus referentes y aprenden a comportarse. Por ello
es tan importante que padres y madres eduquen a sus hijos en valores de
igualdad. Estos valores deben transmitirse en los centros educativos, donde
además los niños y las niñas deben reflexionar sobre los estereotipos
presentes en la sociedad. En este sentido, la distribución de roles en los
colegios, la revisión de los libros de texto, la organización de prácticas
escolares como el deporte y la actitud del profesorado hacia el alumnado son
el punto de partida para desmontar buena parte de los estereotipos que nos
afectan.

De esta manera se logra empoderar a niños y niñas para que logren eliminar
los estereotipos de género y la educación esté encaminada no solo a la
igualdad sino a la eliminación de cualquier tipo de violencia hacia mujeres y
niñas. La educación y las actividades psicosociales deben trabajar para
construir la paz de forma mancomunada donde haya una gran responsabilidad
tanto de la escuela como de la familia y la comunidad, es poder trabajar desde
el comportamiento y sentimiento de los educandos para enfocar sus acciones
hacia el bien común.

A nivel social y desde el campo de la psicología se debe guiar y mejorar


las acciones de atención e intervención de una forma más asertiva, en el que
se pueda investigar a través de proyectos a las comunidades desde su
particularidad y concepciones acerca de desigualdad y violencia de género.
Y partir de esta identificación llevar proceso de intervención en que como
profesionales del área se logre comprender las realidades mediante procesos
de socialización e identidad de valores y normas culturales, y bajo un actuar

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objetivo y ético se logre entender la importancia de la reconstrucción a nivel
personal, familiar y social.

En conclusión, la formación para la paz implica cambios en el lenguaje,


en las prácticas cotidianas orientadas a la formación para el desarrollo
socioemocional empático, compasivo, solidario, que haga de la ética del
cuidado por el otro el centro de gravedad de nuestra vida en sociedad. No se
puede construir paz en la desigualdad, la pobreza, la miseria, la injusticia, la
exclusión política o la destrucción ambiental, de forma que los espacios de
violencia se prevengan, disminuyan, contengan y se impida que sean
ocupados por otros actores generadores de violencia. Desde la psicología se
ha de trabajar el rediseño cultural para la paz, el cual requiere sinergias
interinstitucionales e interdisciplinares que son determinantes y el desarrollo
de programas en temas como la seguridad ciudadana, la convivencia sin
violencia, el sistema de justicia (restaurativa) trabajando en y con las
comunidades; los programas asistenciales que disminuyan la brecha de
inequidad y pobreza no pueden recortarse.

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Bibliografía

Leyva,J.(2015). Género, educación y convivencia. Dykinson. Recuperado


de
http://bibliotecavirtual.unad.edu.co:2077/lib/unadsp/detail.action?docI
D=11217123&p00=diversidad+genero

https://www.sismamujer.org/wp-content/uploads/2018/02/Bolet%C3%ADn-
25-de-Noviembre-de-2017_SISMA-MUJER.pdf

https://www.dane.gov.co/index.php/estadisticas-por-tema/mercado-
laboral/segun-sexo

https://www.unidadvictimas.gov.co/sites/default/files/documentosbiblioteca/
mujeres.PDF

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