TAREA EVALUATIVA 8

Para dar respuesta a esta tarea evaluativa, es necesario primeramente resaltar, que los
resultados que arrojó la puesta en práctica de la secuencia didáctica fueron buenos y
muy satisfactorios, al constatar que casi la totalidad de los alumnos del grupo lograron
desarrollar el aprendizaje esperado en cuestión, siendo esto constatable en el proceso
de registro llevado a cabo en los distintos instrumentos de evaluación aplicados. Los
alumnos se mostraron muy interesados en cada una de las actividades abordadas, y
pusieron mucha disposición hacia el trabajo aprendiendo paulatinamente durante cada
sesión y momento de la secuencia. Se mostraron libres en sus participaciones y fue
notoria la alegría con la que trabajaban. Los alumnos monitores fueron muy importantes
en el avance grupal, ya que fueron uno de los medios con los que se atendió a la
diversidad y se resolvieron dudas en los alumnos que las presentaban. El logro del
aprendizaje esperado fue un mero pretexto para fomentar los valores de solidaridad,
respeto y perseverancia en los niños resaltando su aplicación dentro y fuera del contexto
escolar. Los alumnos elevaron su autoestima al distinguir que los errores sirven para
mejorar y no deben verse como un hasta aquí, pues reflexionaron respecto a ellos y
buscaron caminos distintos para corregirlos mediante sus ideas individuales y colectivas.
El contexto escolar impactó en la obtención del aprendizaje esperado, ya que la
utilización de los espacios dio la oportunidad a los alumnos de interactuar íntegramente
con sus compañeros y con lugares distintos de aprendizaje haciendo más significativas
sus experiencias.
Para ir más allá del análisis de los resultados obtenidos en los alumnos, quiero hacer una
reflexión de mi intervención docente sobre mis fortalezas, debilidades, oportunidades y
amenazas (FODA)) que detecté posteriormente a la implementación de la secuencia
didáctica. Para iniciar con la mención, las fortalezas que resalto en mi intervención
docente son: conocer, actuar y buscar en todo momento realizar mi trabajo acorde a las
responsabilidades éticas y legales emanadas del artículo tercero constitucional y las 5
dimensiones del perfil docente, considerando con ello promover las 4 prioridades del
Sistema básico de Mejora, la aplicación correcta de los 8 rasgos de la normalidad mínima
y el apego de mi práctica profesional respecto a los 12 principios pedagógicos para
formar alumnos (en colaboración con mis colegas de otros grados) que cumplan a largo
plazo con los rasgos del perfil de egreso de la educación básica y a corto, mediano y largo
plazo, mediante el análisis de contenidos que favorezcan el logro de los aprendizajes
esperados, las competencias para la vida y los estándares curriculares de cada periodo
de la educación. Durante mi intervención docente, creo que fueron grandes fortalezas
el conocer las características del contexto escolar, familiar y sociocultural así como el
cómo aprenden mis alumnos, para realizar una planeación acorde a dichas
características y promover la inclusión considerando actividades, espacios y materiales
para organizar ambientes de aprendizaje en los que se promueva la participación de
cada uno de mis alumnos y evaluarlos formativamente. Fue de gran importancia conocer
el enfoque de la asignatura, así como las orientaciones para trabajar los contenidos de
la misma. La relación estrecha que tengo con los padres de familia de mi grupo ayudó a
dar un seguimiento a los trabajos de los alumnos fuera del ámbito escolar. El uso y
dominio de las tecnologías fue clave en la innovación de mi práctica docente. Brindar
retroalimentación a los alumnos para fomentar la mejora constante. Conocer, organizar
y aplicar los tres momentos de la evaluación: diagnostica, formativa y sumativa, así
como los tres tipos de evaluación: autoevaluación, coevaluación y heteroevaluación. La
metodología planteada que apliqué promovió en los niños el desarrollo de su
personalidad y consideró los estilos de aprendizaje de cada uno de los alumnos. En
general se trató de no pasar por alto ningún detalle que pudiera afectar los aprendizajes
de los alumnos pues ellos y sus procesos de aprendizaje son el eje central de mi
profesión por lo que debo seguirme esforzando para brindar una mejor calidad
educativa.
La debilidad que percibí en mi práctica docente fue la optimización del tiempo, ya que
las 4 horas correspondientes a la duración de la secuencia didáctica se vieron afectadas
por algunos contratiempos como la constante interrupción por asuntos de dirección y la
extensión de algunas actividades debido a los diversos ritmos de aprendizaje, por lo que
opté por tomar entre 5 y 10 minutos posteriormente a cada sesión para contrarrestarlo
haciendo adecuaciones al tiempo de las demás asignaturas. Aunque en mi grupo de
alumnos no hay niños que presenten Necesidades Educativas Especiales, tampoco es un
grupo homogéneo, y existen ritmos distintos de aprendizaje por lo que siento que pude
haber puesto (en un alumno que se mostró más desorientado durante las sesiones)
actividades diferenciadas para promover su total logro de los aprendizajes esperados.
En estos dos aspectos creo necesario mejorar contemplándolos en mis siguientes
planeaciones e implementaciones.
Las áreas de oportunidad que creo debo prepararme mejor son: estudiar los distintos
tipos de Necesidades Educativas Especiales para atender alumnos con discapacidades
visuales, auditivas, físicas e intelectuales, pues aunque en este momento no tenga
alumnos con esas características pienso que es necesario estar preparado para
atenderlos y favorecer su inclusión en las aulas regulares, y así mismo crecer yo como
profesional de la educación. En cuanto a amenazas, no distinguí ninguna como tal pero
pretendo seguir analizando mi práctica para fomentar en mis alumnos el aprecio por la
escuela, los valores, la sana convivencia, la salud y los deportes que promuevan el
ímpetu por el estudio y eliminen el ausentismo, abandono y rezago escolar.
Durante la práctica docente llevada a cabo consideré (además de lo descrito en párrafos
anteriores) las orientaciones de Philippe Perrenoud descritas en su libro 10 Nuevas
Competencias para Enseñar, mismas que fueron de gran ayuda en cuanto a la
diversificación de mi enseñanza al retomar aspectos esenciales de la docencia como:
organizar y animar situaciones de aprendizaje, gestionar la progresión de los
aprendizajes, implicar a los alumnos en sus aprendizajes y su trabajo, trabajar en equipo
con los colegas, informar a los padres de familia, utilizar las nuevas tecnologías y
organizar la propia formación continua, mismas que sobresalen en la implementación y
descripción de mi práctica docente.
A manera de reflexión final, quiero decir que participar en la evaluación docente me ha
servido para prepararme con más ímpetu cada día, investigando, leyendo, estando más
participativo en los CTE, más activo en la planeación e implementación de las
actividades establecidas en la Ruta de Mejora, acercándome más a los colegas docentes
para intercambiar experiencias, buscando y creando nuevas estrategias didácticas,
innovando, motivando mi práctica y reflexionando durante y después sobre ella para
mejorar como profesional y recordándome el sentido humanista y empático hacia mis
estudiantes para promover su bienestar y mejorar sus aprendizajes.
Una frase que leí en el libro de Philippe Perrenoud que me gustó mucho dice “vale más
enseñarles a pescar, que darles el pescado” haciendo referencia al método de
enseñanza constructivista y quise mencionarla pues me propongo continuar mejorando
mis prácticas en beneficio de la construcción de los aprendizajes de los alumnos,
analizando y diversificando las actividades a implementar para no caer en prácticas
tradicionalistas que deben estar fuera del contexto actual de nuestra profesión.
Cabe destacar que los estudiantes seguirán siendo mis profesores pues creo que la
enseñanza es recíproca entre maestro-alumno, y todos aprendemos de todos
continuamente. Me propongo seguirme esforzando día con día para beneficio de los
educandos y sus aprendizajes, buscando nuevas metodologías y capacitándome de
forma autodidacta y mediante los cursos y diplomados que ofertan mis autoridades
educativas tanto locales como federales.
Me despido con una gran satisfacción de haber participado en este proceso de
evaluación que me ha dejado grandes enseñanzas y me ha hecho reflexionar sobre mi
práctica, resumiendo mi actuar con la puesta en práctica como ideología de la siguiente
frase:
“Constrúyete una carrera, intenta ser mañana mejor que hoy y nunca des por
acabado el aprendizaje del oficio de enseñar”.