You are on page 1of 32

INTELIGENCIA EMOCIONAL

CAPACIDAD DE COMPRENDER,
ACEPTAR, MANEJAR, EXPRESAR Y
GESTIONAR LAS PROPIAS EMOCIONES Y
LAS DE LOS DEMÁS CON EFICIENCIA Y
GENERANDO RESULTADOS POSITIVOS
1.-CONOCER LAS PROPIAS EMOCIONES:
"CONÓCETE A TI MISMO"

CONSCIENCIA DE LAS PROPIAS


EMOCIONES. DARSE CUENTA

RECONOCERLAS Y SENTIRLAS EN
EL MOMENTO EN QUE OCURREN
2.-MANEJAR LAS EMOCIONES:

EXPRESARLAS DE FORMA
APROPIADA

GESTIONARLAS FAVORECIENDO
LAS RELACIONES
INTERPERSONALES.
3.-MOTIVARSE A SÍ MISMO:

ENCAMINAR LAS EMOCIONES, Y LA


MOTIVACIÓN HACIA EL LOGRO DE
OBJETIVOS Y REALIZAR ACTIVIDADES
CREATIVAS.

SER MÁS PRODUCTIVOS Y EFECTIVOS


4.- RECONOCER LAS
EMOCIONES DE LOS DEMÁS:

SINTONIZAR CON LAS EMOCIONES Y SENTIMIENTOS


DE LOS DEMÁS PARA COMPRENDER LO QUE
NECESITAN

LA EMPATÍA: BASE DEL ALTRUISMO


5.- ESTABLECER RELACIONES SALUDABLES:

DESDE LA EMPATÍA, INTERACTUAR

CON LAS EMOCIONES DE LOS DEMÁS

REFORZÁNDOLES COMO SERES HUMANOS


VALIOSOS
CÓMO GESTIONAR NUESTRAS EMOCIONES
 RECONOCERLAS
 ACEPTARLAS
 SENTIRLAS TOTALMENTE
 RESPIRAR CON ELLAS
 INVESTIGAR SU NATURALEZA
 DESIDENTIFICARNOS DE ELLAS
 LLENARNOS DE AMOR Y PAZ
A LO LARGO DEL DÍA ME RECUERDO
COMO ESTOY POR DENTRO:
CONSCIENCIA
EL TÉRMINO “RESILIENCIA”

Resiliencia es un concepto utilizado en física para describir “la


capacidad que tiene un material para recobrar su forma original,
después de someterse a una presión deformadora”. En los años ochenta
y noventa el término fue retomado por la psicología para definir la aptitud
de las personas que, tras haber sufrido graves conflictos (enfermedad,
pérdidas traumáticas, situaciones familiares disfuncionales, etc.), eran
capaces de mantener un equilibrio mental que les proporcionaba paz y
tranquilidad.
Podemos concluir que la capacidad resiliente del ser humano tiene dos
características:
• La resistencia ante la adversidad.

• Capacidad para reconstruir sobre las circunstancias adversas.


 La resiliencia no la podemos confundir ni con la resistencia
absoluta al daño y mucho menos supone una aptitud para evitar
toda situación conflictiva.

 Tampoco es una cualidad inalterable del individuo.

 Es una capacidad de toda persona, que puede desarrollarse o no


y, por lo tanto, susceptible de modificar tanto en el sentido de
fortalecerse como debilitarse.
ELEMENTOS DE LA RESILIENCIA
• Resistencia frente a la destrucción o capacidad para
protegerse a sí mismo de tensiones negativas.

• Flexibilidad o capacidad para forjar comportamiento


vitales positivos frente a circunstancias adversas.
FUENTES DE LA
RESILIENCIA
FAMILIA RESILIENTE
Para la familia resiliente, el conflicto no
pasa inadvertido pero tampoco se
queda enganchado a él de manera
patológica, sino que más bien, desde
el dolor y la angustia es capaz de
seguir viviendo y construyendo su
propia vida.
La resiliencia implica que las personas
tienen una capacidad sana de
elaborar el trauma y desde esa
posición seguir creciendo
psicológicamente.
CARACTERÍSTICAS

Una familia resiliente tendrá las siguientes características:

La familia resiliente es capaz de expresar sus sentimientos (enojo,


culpa, rabia, etc.) a través de la palabra pero sin llegar a la acción.

En la familia resiliente todos colaboran, dependiendo de sus


posibilidades, en el cuidado del enfermo.

La familia resiliente está en continua búsqueda de una solución a la


enfermedad, pero también son capaces de aceptar la dura realidad
cuando, desde el conocimiento médico, se les informa que no existe
un tratamiento curativo para su hijo.
La resiliencia en ejemplos:

1. Nelson Mandela, superó la discriminación y 27 años de


cárcel
Un ejemplo de persona resiliente lo encontramos
en Nelson Mandela, encarcelado durante 27
años por sus ideas y acciones contrarias
al apartheid imperante en Sudáfrica.

Mandela tuvo la suficiente fortaleza interior y


entereza para no rendirse durante su larguísimo
cautiverio, y salir con fuerzas para promover el
cambio que buscaba 27 años atrás.

Mandela consiguió acabar con la discriminación


étnica y se convirtió en presidente de su país a los 76
años.
2. María Belón y su familia, que sobrevivieron a un tsunami y lograron
reencontrarse

Es recordada la historia de la familia


de María Belón y Enrique Álvarez que
sobrevivió junto a sus tres hijos
al tsunami del Indico en 2004 y se tuvo
que enfrentar a la devastación por
separado hasta que lograron
encontrarse.

Esta emotiva historia originó uno de los


mayores éxitos de taquilla del cine
español, Lo Imposible.
3. Los refugiados

Un refugiado es de por sí una persona


resiliente, capaz de dejar atrás todo ante el
peligro que corre su vida en su país por
causas raciales, religiosas, de orientación
sexual o de guerra.

La guerra en Siria y el éxodo posterior de


personas a otros países, ha puesto en primer
plano este drama de personas que se
enfrentan a lo desconocido, huyendo para
salvar sus vidas, en muchos casos con escasos
recursos y sin conocer el idioma de los países
a los que se dirigen.
4. Stephen Curry, decían que no servía para la
NBA y ahora es el mejor jugador

La resiliencia también se puede


observar en el deporte de alta
competición, donde los jugadores son
capaces de sobreponerse a sus
lesiones y a sus molestias físicas para
competir y luchar por la victoria. O no
rendirse ante los obstáculos que se
encuentran en forma de entrenadores
y directivos que no creen en sus
condiciones.
Sobre Stephen Curry, actual MVP (mejor jugador) de la liga de
baloncesto estadounidense, NBA, y uno de los mejores tiradores de
la historia de este deporte, había informes en el draft (sorteo de
talentos, que sirve de cantera para los equipos profesionales) de su
promoción (en 2009) que afirmaban que no tenía mucho futuro en la
liga, por su escasa estatura para este deporte (1,91), menor fortaleza
física que la media y habilidades como base.

Tras mucho trabajo, esfuerzo y sacrificio ha protagonizado una


evolución espectacular. Seis años después, el pasado 2015
consiguió ser declarado mejor jugador de la competición y el anillo
de campeón de la NBA con su equipo. Curry grabó un anuncio
donde lee en voz alta el informe que dudaba de su capacidad.
EJERCICIO:
Escribir tres cosas buenas que te haya sucedido
durante la semana, aunque tengan poca importancia.
Al lado de cada comentario positivo responde a las
siguientes preguntas:
“¿Por qué pasó esta cosa buena?”,
“¿Qué significa para ti?”,
“¿Qué puedes hacer para que esta cosa buena se
repita en el futuro?”
TEST
Responde al siguiente cuestionario marcando las
preguntas planteadas con una V (verdadero) o una F
(falso).

Decídete por la impresión inicial sin necesidad de


sopesar demasiado las preguntas ni pensar en todo tipo
de excepciones.
RESILIENCIA
1. Si tengo una discrepancia menor con un hermano o amigo personal, más del
estilo “No, te toca a ti lavar los platos”, que “¡Me has engañado!”. Entonces
el mal humor por regla general me dura horas o más.
2. Si otro conductor utiliza el arcén (espacio al costado de la pista para
estacionar de manera excepcional) para adelantar a una larga cola de coches
que aguardan su turno para pasar e incorporarse al carril de la autopista, lo
más probable es que sacuda la cabeza y no que esté furioso mucho tiempo.
3. Cuando he sentido un dolor profundo, como la muerte de alguien allegado,
eso ha afectado durante meses mi capacidad de funcionar.
4. Si cometo un error, falta o equivocación en el trabajo y me reprenden por
ello, le quito importancia y lo considero una manera de aprender.
5. Si pruebo un nuevo restaurante y la comida me parece horrible y el servicio
se da demasiado tono (darse importancia o presumir de algo), eso me
estropea la velada.
6. Si me encuentro una cola muy grande al comprar en una tienda un día que
tengo prisa, cuando salgo lo hago apresuradamente intentando desahogar mi
frustración y sigo enfadado por dentro.
7. Si se estropea el calentador del agua en casa, no afecta mucho a mi estado de
ánimo, porque sé que puedo llamar al fontanero (gasfitero) y solucionar el
problema.
8. Si conozco a una chica (o a un chico) que considero maravilloso y le pregunto
si le gustaría que nos volviéramos a ver, cuando me dicen que no, suelo
ponerme de mal humor durante horas o incluso días.
9. Si me están considerando para un premio y acaban concediéndoselo a alguien
que considero menos cualificado, el enojo en general se me pasa pronto.
10. En una fiesta, si estoy conversando con un extraño que me parece
interesante y me quedo mudo cuando esa persona me pregunta cosas sobre
mí, tiendo a repetir la conversación –en esta ocasión incluyendo lo que
debería haber dicho- durante horas o incluso días después.
La puntuación del cuestionario se hace de la siguiente forma:

- Un punto para cada respuesta que en su caso indique que las situaciones
expuestas en los preguntas 1, 3, 5, 6, 8 y 10 son “verdaderas” (V). En caso
contrario, 0 puntos (respuestas “falsas”, F, a esas preguntas).

- Un punto para cada respuesta que en su caso indique que las preguntas 2,
4, 7 y 9 son “falsas” (F). En caso contrario, 0 puntos (respuestas
“verdaderas”, V).
Las puntuaciones mayores que siete sugieren que uno es lento
en recuperarse,
mientras que si la puntuación obtenida es menor que tres, ello
indica que la persona tiene una resiliencia alta, es decir, se
recupera con facilidad.
Cultivando la resiliencia:

Para alcanzar la resiliencia, en particular, y la madurez emocional, en


general, es imprescindible un cambio de mirada que nos permita
reemplazar los pensamientos negativos por positivos.
Pues bien, el padre de la nueva Psicología Positiva, Martin Seligman, ha
dirigido el Programa de Resiliencia de Penn aplicado en institutos, cuyo
principal objetivo es el de aumentar la capacidad de los estudiantes
para enfrentarse a los problemas cotidianos habituales durante la
adolescencia.
Los resultados analizados indican que el programa enseña a los
estudiantes a ser más realistas y flexibles ante los problemas surgidos, a
tomar mejores decisiones, a ser asertivos y, además, reduce y previene la
ansiedad, la depresión y los problemas conductuales en los jóvenes
(Seligman, 2012).
1) Las tres cosas buenas
El propio Seligman nos aporta un ejercicio utilizado en el plan de
estudios de su programa de resiliencia. Se indica a los estudiantes
que escriban todos los días tres cosas buenas que les haya
sucedido durante una semana, aunque tengan poca importancia.
Al lado de cada comentario positivo han de responder a las
siguientes preguntas: “¿por qué pasó esta cosa buena?”, “¿qué
significa para ti?”, “¿qué puedes hacer para que esta cosa buena
se repita en el futuro?” (Seligman, 2012).
2) Superando dificultades
Cada alumno debe elegir un tema que le preocupe y ha de
describirlo en pocas líneas. Cada alumno expone su caso y
entre todo el grupo se escoge una de las situaciones para
trabajar. Se van analizando las dificultades expuestas por el
alumno para, entre todo el grupo, encontrar las reacciones más
adecuadas y efectivas para superar la dificultad (Güell, Muñoz,
2010).
3) El cine y la resiliencia
Se elige una película que haga referencia a situaciones duras de la
vida que se superaron con la actitud adecuada y se analiza . No
necesariamente ha de ser una gran película, pero sí ha de permitir
el análisis de una determinada situación práctica útil y significativa.

Como ejemplo, podemos poner Manos milagrosas: la historia de


Ben Carson (Carter, 2009) que relata sin grandes artilugios la vida de
Ben Carson, un niño afroamericano que se crió en los suburbios de
Detroit sin grandes esperanzas (a priori) y que, con el esfuerzo de
una madre resiliente, acabó siendo uno de los mejores
neurocirujanos del mundo.
“La resiliencia es más que resistir,
es también aprender a vivir”.

You might also like